La actividad agropecuaria en Guatemala es la fuente de riqueza más importante
desde tiempos antiguos. Cuenta con magníficos suelos y climas favorables para cultivo de productos tropicales. La agricultura se practica de dos tipos: Destinada a la producción de alimentos para la población. Destaca el maíz, arroz, mandioca, frijol y boniatos. Agricultura de plantación destinada a la exportación con altos rendimientos, ya que son explotados con técnicas modernas y elevadas inversiones de capital. PRINCIPALES PRODUCTOS Cardamomo: primer exportador mundial Azúcar: 5to exportador mundial Café: 7mo. Exportador mundial Limón persa: 1 exportador mundial disecado hacia medio oriente Banano: 3er exportador hacia EEUU y Europa Melón: Mayor exportador hacia Taiwán Frutas Tropicales: 4to exportador hacia EEUU, Europa, Canadá y Japón. Agricultura.
La economía guatemalteca está dominada por la agricultura, que ocupa al 56,9%
de la población activa, contribuye con un 24% al PIB y alcanza aproximadamente un 70% de la exportación. El principal producto guatemalteco es el café, con el que obtiene la tercera parte de los ingresos de exportación. La agricultura del café se localiza principalmente en la costa del Pacífico, al sur del lago Izabal y en la franja del Caribe. El Estado. Después de este producto, le siguen en importancia la banana, cuyo cultivo está controlado en parte por la United Fruit Company. El cultivo de bananas sobre suelos vírgenes del Bajo Motagua se extendió rápidamente debido al coste bajo de las tierras y a las facilidades que otorgaron los gobiernos. Otro producto básico en la economía de Guatemala es el algodón. La producción está concentrada en el sur del territorio nacional. CARACTERÍSTICAS Escaso intercambio urbano-rural. El sector rural boliviano se caracteriza por una baja renta per cápita, lo cual afecta la capacidad de compra de bienes manufacturados e implica, por lo tanto, que las relaciones urbano-rurales no son interactivas. Alta presión demográfica, asociada a una excesiva repartición del factor tierra, generando el minifundio. Este se caracteriza por una baja eficiencia en el uso de los factores productivos, baja renta y una economía nula. Palta una distribución geográfica de producción de manera de presentar ventajas relativas. Se tiene entonces una estructura de oferta de productos, prácticamente idéntica en todo el territorio nacional, trayendo como consecuencia inmediata, la baja integración del espacio. Deficiente sistema de comunicaciones e infraestructura para el transporte, generando costos y tiempos muy elevados para el traslado de productos. Este factor posiblemente sea uno de los impedimentos básicos para la economía boliviana y para iniciar un programa de comercio interregional. Productividad agrícola bastante reducida y comprometida generando niveles de renta muy bajos y, consecuentemente, una economía de subsistencia. El tema de la renta, ya se abordó cuando se hizo referencia al problema de tamaño del mercado; en cuanto a los ingresos, la principal consecuencia que se nota es la reducida capacidad de reinversión en el sector. Problemas relativos a la Formación de capital. En líneas generales se puede trazar un cuadro simplificado en base a síntesis de trabajos ya efectuados. Aun así, ello debe destacarse para que se tenga en cuenta a nivel regional la importancia que ejerce en la caracterización del sector. REGIONALIZACIÓN DE LA PRODUCCIÓN Kirslen Appcndini considera que los efectos de la modernización y la agricultura me .KÍcana -impulsada desde los años cuarenta para satisfacer la demanda del mercado nacional c internacional y de la naciente industria, lo mismo que para ofertar alimentos baratos a las urb es pueden resumirse en dos puntos: primero, la creación de una estructura agraria heterogénea y polarizada, en la que las formas distintas de producción, concentración de los medios de producción, del progreso técnico y del ingreso rural en manos de los agricultores capital listas que se contrapone a la agricultura campesina de escasos medios de producción y bajos niveles de productividad c ingresos; segundo, la desigualdad y la polarización que con el tiempo conformaron y consolidaron amplios espacios agrícolas especializados acordes con la forma y dinámica en que el capitalismo incorporó a los productores agrícolas y de acuerdo con las características físicas y las relaciones de producción de cada región. ESTADO ACTUAL Y TENDENCIAS DE LA AGRICULTURA La agricultura en el ámbito mundial De acuerdo con el Estado Mundial de la Agricultura 2000 desarrollado por la FAO, la agricultura creció a un ritmo del 4 al 5% entre 1993 a 1996, pero a partir de este último año la producción mundial perdió dinamismo y en 1998 creció solamente a una tasa de 1.1%, una de las cifras más bajas de la década. Para 1999 se preveía solo un crecimiento del orden del 0.9%, la tasa más baja desde 1972, mostrando una desaceleración por tres años consecutivos. La desaceleración ha sido más pronunciada en los países en vías de desarrollo. Uno de los principales motivos de la falta de crecimiento, además de la persistente disminución de los precios internacionales de los productos, tiene que ver con las malas condiciones atmosféricas, en especial las lluvias torrenciales y las sequías vinculadas con el “Fenómeno del Niño” o con otras causas. Los productos más afectados han sido el arroz, el trigo, el maíz, el café, el algodón, el azúcar y el banano. La aparente pérdida de peso de la agricultura en el total de la economía en el ámbito mundial y de la mayoría de los países y el decrecimiento en la importancia sectorial de la misma, responde a tres razones Falcon (1995) la caída de los precios reales de los alimentos y materias primas en los mercados internacionales, (ii) la disminución del apoyo para el desarrollo agrícola y (iii) los conflictos reales e imaginarios entre la agricultura y el medio ambiente.
La agricultura en la región de América Latina y el Caribe
Hasta 1996 la producción regional per cápita creció en la mayoría de los países, sin embargo, no es el caso de los países de América Central y algunos del Caribe, en donde la producción ha caído sostenidamente desde hace más tiempo. En la región de Latinoamérica y el Caribe, el 75% del incremento de la producción se debió al aumento de los rendimientos, mientras en los países de altos ingresos el porcentaje se eleva a 98%. Ello orienta a pensar que la diferencia del incremento de la producción se llevó a cabo por la integración de más tierra a la producción agrícola