0 оценок0% нашли этот документ полезным (0 голосов)
83 просмотров3 страницы
El departamento del Meta en Colombia ha experimentado un crecimiento constante de su economía impulsado por sectores como la agricultura, la ganadería y la minería. Recientemente, el turismo también se ha convertido en un sector importante, especialmente el ecoturismo y el agroturismo, debido al desarrollo de la infraestructura vial y las inversiones privadas. Sin embargo, otros sectores productivos se han estancado, lo que ha llevado a un déficit comercial constante. Además, aunque los indicadores sociales han mejorado, todavía existen
Исходное описание:
Оригинальное название
LA GLOBALIZACIÓN Y EL IMPACTO EN LA ECONOMÍA DEL DEPARTMENTO DEL META.docx
El departamento del Meta en Colombia ha experimentado un crecimiento constante de su economía impulsado por sectores como la agricultura, la ganadería y la minería. Recientemente, el turismo también se ha convertido en un sector importante, especialmente el ecoturismo y el agroturismo, debido al desarrollo de la infraestructura vial y las inversiones privadas. Sin embargo, otros sectores productivos se han estancado, lo que ha llevado a un déficit comercial constante. Además, aunque los indicadores sociales han mejorado, todavía existen
El departamento del Meta en Colombia ha experimentado un crecimiento constante de su economía impulsado por sectores como la agricultura, la ganadería y la minería. Recientemente, el turismo también se ha convertido en un sector importante, especialmente el ecoturismo y el agroturismo, debido al desarrollo de la infraestructura vial y las inversiones privadas. Sin embargo, otros sectores productivos se han estancado, lo que ha llevado a un déficit comercial constante. Además, aunque los indicadores sociales han mejorado, todavía existen
LA GLOBALIZACIÓN Y EL IMPACTO EN LA ECONOMÍA DEL DEPARTMENTO
DEL META
Actualmente el Meta se ha venido constituyendo como uno de los departamentos
con más dinamismo de Colombia. Su desarrollo económico tiene como base económica los sectores agrícola, ganadero, minero, agroindustria, comercio y servicios. Dentro de éste último, han comenzado a desarrollarse nuevos frentes de trabajo y diversificación productiva, como es el turismo, en sus modalidades de agroturismo y ecoturismo, dadas las características propias que posee esta región, basado en la importancia que ha tomado el departamento con la construcción de la nueva vía al llano por su cercanía a la capital del país. En este campo, el desarrollo del sector turismo resulta de trascendental importancia para la economía del departamento, si se tienen en cuenta algunos elementos estructurales de la actividad y los desarrollos coyunturales en materia de desarrollo en infraestructura vial y hotelera fundamentalmente. Sobre la importancia del sector basta resaltar su dinámico papel como agente multiplicador de otras actividades económicas complementarias. Los desarrollos viales, en los que se destaca la construcción y modernización de la carretera Villavicencio – Bogotá, así como el crecimiento de condominios habitacionales y turísticos en las áreas rurales del departamento por parte de inversionistas privados y de algunas Cajas de Compensación Familiar de Bogotá, y la constitución y adaptación de fincas para el desarrollo del agroturismo y ecoturismo, proyectan al departamento del Meta como un destino turístico apetecido por sus factores de novedad, cercanía y clima, entre otros. El departamento del Meta ha mantenido un crecimiento constante de su economía gracias al incremento en la competitividad de la silvicultura y pesca, todos pertenecientes al sector primario. Exceptuando estas actividades económicas, los sectores productivos que impliquen generación de valor se encuentran deprimidos y en términos de balanza comercial, el departamento presenta déficit constante. En cuanto al balance social, la región se ha ubicado en la media del país, pero en los últimos años ha tenido una tendencia a mejorar el nivel de vida de la población. Con esta ponencia se pretende plantear una discusión académica y vivencial, respecto a las diferentes opiniones de los autores que se citan; donde se expresan posiciones como verdaderos expertos en economía frente a la propuesta, desarrollo e interacción de los TLC, con nuestro país/región y departamento, con los empresarios, gremios y actores activos directos como productores, comercializadores, exportadores e importadores que son el foco central de este tema de que cobija en gran parte la competitividad y productividad de las firmas nacionales. Lo anterior, teniendo como marco de referencia las actuales condiciones del mercado, la proyección económica del país, el proceso de paz, los gobiernos locales y nacionales, la competencia, retos y oportunidades. Descubrir, orientar y aclarar los serios cuestionamientos de aprobación y firma del TLC como apoyo a nuevas conquistas de mercado en una nación en vía de desarrollo, con desventajas competitivas y muchas ventajas comparativas que exportar, hacen más real el camino por recorrer.
Indagar sobre las capacidades e interés de la comunidad empresarial colombiana/
regional y departamental afrontando la realidad del balance de importaciones y exportaciones por sectores en Colombia, que muestran cifras dicientes para analizar y comprender nuestro papel de observadores y entrar a actuar como verdaderos gestores de cambios culturales, políticos y económicos donde la unidad y bienestar general prime sobre el bien particular identificando oportunidades y retos cada día.
De otra parte, es importante destacar que en la producción agrícola de la Orinoquia,
particularmente en el Meta y Casanare, considerados como los departamentos ricos de la región, ganaron participación los cultivos permanentes, especialmente la palma africana, en detrimento de cultivos semestrales como la soya, el sorgo y el algodón, lo cual ha llevado a que este cultivo sea considerado como una de las principales apuestas productivas para el futuro desarrollo económico de estos departamentos. Los Llanos Orientales son una región con un gran potencial de desarrollo hasta el momento escasamente aprovechado. La zona del piedemonte llanero disfruta desde hace cerca de 20 años la ventaja de tener petróleo, y por ende, un flujo de regalías que eleva el Producto Interno Bruto (PIB) regional, y abre amplias oportunidades de inversión tanto pública como privada. Adicionalmente, para toda la zona la actividad productiva más importante por su potencial de desarrollo es el sector agropecuario, pues específicamente, la agricultura es una fuente de empleo muy importante, y a medida que se consiga una expansión de las áreas en cultivo, proporcionará también un motor para el crecimiento de otros sectores como el de servicios y el de la agroindustria. Sin embargo, ha sido evidente la dependencia de la región de un cultivo específico, el arroz, lo cual se convierte en una debilidad grave, pues cualquier dificultad en este cultivo comprometería seriamente el conjunto de la economía rural de la región. La economía de la región comprende la ganadería extensiva en las zonas de sabana y agricultura tecnificada de cultivos transitorios y permanentes en el piedemonte. Las explotaciones petroleras de Arauca, Casanare y Meta representan la fuente principal de exportaciones e ingresos de la economía nacional y han propiciado el desarrollo de la Infraestructura vial y de servicios de estos departamentos. El piedemonte llanero está articulado en su economía y en la infraestructura vial y de servicios al resto del país. El conflicto armado es intenso en la región y la actividad petrolera es sometida permanentemente al boicot de los grupos insurgentes. De otra parte, el sector agropecuario presenta algunas ventajas comparativas como: calidad de los suelos, condiciones geográficas y cercanía a los mercados nacional y regional. Igualmente, es pieza fundamental dentro de la política de desarrollo, ya que su contribución a este es múltiple, puesto que provee alimentos para las zonas urbanas, materias primas para la industria y proporciona empleo e ingreso para la mayoría de la población metense. Sin embargo, uno de los grandes problemas es la comercialización de la producción, la cual enfrenta limitaciones estructurales por deficiente infraestructura de acopio, transporte, almacenamiento y transformación. En este sentido, es preocupante su estancamiento y situación recesiva que se dio durante los años tomados para el presente estudio, mostrándose bajo el mismo comportamiento del nivel nacional, pero con mayor impacto negativo por ser este sector la base de la economía del Meta, haciendo que se sienta con mayor peso su problemática y depresión estructural.