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NUCLEO DE MONAGAS
ESCUELA DE INGENIERIA Y CIENCIAS APLICADAS
MATURIN
Bachilleres:
Leonett, Sylvia
V.- 25.012.981
Marcano, Beny
Profesora: V.- 24.597.804
Sánchez,Isabella
Córdova, Alfrelia
V.-
Villahermosa, Eleidis
V.-
Tuberías de Revestidor:
Son tuberías especiales que se introducen en el hoyo perforado y que
luego son cementadas para lograr la protección del hoyo y permitir
posteriormente el flujo de fluidos desde el yacimiento hasta superficie. También
son conocidas como: Revestidores, Tubulares, Casing.
Funciones:
La razón primaria de colocar una tubería de revestimiento en un pozo, es
proporcionar protección al hoyo en una forma segura, confiable y
económica. Entre las funciones más importantes de las tuberías de
revestimiento están:
Evitar derrumbes en el pozo durante la perforación
Evitar contaminaciones de aguas superficiales
Suministrar un control de las presiones de formación
Prevenir la contaminación de las zonas productoras con fluidos
extraños
Al cementar un pozo, se puede aislar la comunicación de las
formaciones de interés
Confinar la producción del pozo a determinados intervalos
Facilitar la instalación del equipo de superficie y de producción
Características:
Las tuberías de revestimiento se fabrican de acero de la más alta calidad
y bajo estrictos controles de seguridad en los procesos de fabricación. Son del
tipo sin costura, obtenidas por fusión en horno y soldadas eléctricamente.
El API ha desarrollado especificaciones para la tubería de revestimiento,
aceptadas internacionalmente por la industria petrolera. Entre las
especificaciones incluidas para los revestidores y las conexiones están
características físicas, propiedades de resistencias a los diferentes esfuerzos y
procedimientos de pruebas de control de calidad. En los diseños se deben
tomar en cuenta tales especificaciones para minimizar las posibilidades de
fallas.
Factores técnicos y económicos:
La capacidad de la sarta seleccionada para resistir esfuerzos y cargas
bajo determinadas condiciones es un factor muy importante para la seguridad y
economía en la perforación y posterior producción del pozo.
La sarta de revestimiento representa un alto porcentaje de la inversión
total de un pozo, por lo tanto no se justifica pagar más por resistencia o calidad
de lo que es realmente necesario. Los factores técnicos corresponden al
diámetro, peso, longitud, tipo de unión o rosca, material utilizado, condiciones
de carga, naturaleza de la formación, método de fabricación, etc.
La tubería debe tener una superficie lo más lisa posible, tanto en el
interior, para evitar que las herramientas o equipos “corridos” en el pozo se
atoren, como en el exterior, para reducir la fricción entre la tubería y las
paredes del hoyo; debe ser hermética, para eliminar entrada de fluido al pozo; y
resistir la corrosión.
Tipos de revestidores:
El número de sartas de revestimiento que se colocan en un pozo es
función de la naturaleza de las formaciones por atravesar y de la profundidad
final de hoyo. Las diferentes sartas de revestimiento que se pueden colocar en
un pozo son:
Conductor marino / tubería hincada o pilote de fundación: Es
la primera sarta de revestimiento que se utiliza en la perforación
con el objetivo de proteger el suelo superficial no consolidado y
blando, asegurando la estabilidad de la superficie donde es
colocado el equipo de perforación y guiar la sarta de perforación
y las subsecuentes tuberías de revestimiento dentro del hoyo. La
profundidad de asentamiento varía entre 90’ y 150’, con un
tamaño entre 26” y 45”. Son clavados con martillos hidráulicos o
vibratorios y el nombre que se le da a esta sarta está relacionado
al tipo de operación que se realiza:
o Conductor marino: perforación costa afuera con
impiderreventones superficiales
o Pilote de fundación: perforación costa afuera con
impiderreventones submarinos
o Tubería hincada: perforación en tierra
Revestidor conductor: Es un tubo guía de diámetro grande (16”
a 30”) que se coloca a profundidades someras, cementada hasta
superficie o lecho marino, y es la primera tubería de
revestimiento sobre la cual se montan las VIR’s. Se utiliza para
reforzar la sección superior del hoyo y evitar que la circulación de
fluidos de perforación lo lave demasiado. La profundidad de
asentamiento varía entre 150’ y 250’. Sus principales funciones
son:
o Evitar que las formaciones someras no consolidadas se
derrumben dentro del hoyo
o Proporcionar una línea de flujo elevada para que el fluido
de perforación circule hasta los equipos de control de
sólidos y a los tanques de superficie
o Proteger formaciones de agua dulce superficiales de la
contaminación por el fluido de perforación
o Permite la instalación de un sistema desviador de flujo y
de un impide reventón anular
Revestidor de superficie: Tiene como objetivo fundamental
proteger las formaciones superficiales de las condiciones de
perforación más profundas. La profundidad de asentamiento varía
entre 300’ y 3500’ dependiendo del área operacional y
generalmente se cementa hasta superficie. Entre sus funciones
más importantes están:
o Evitar la contaminación de yacimientos de agua dulce
o Proporcionar un gradiente de fractura suficiente para
permitir la perforación del próximo hoyo
o Servir de soporte para la instalación del equipo de
seguridad (VIR’s)
o Soportar el peso del resto de las tuberías que serán
colocadas en el pozo. Por esta razón se cementan hasta
superficie.
Revestidor intermedio: Este tipo de revestidor proporciona
integridad de presión durante las operaciones de perforación
subsecuentes. También se le llama Protectora porque protege las
formaciones de altos pesos de lodo, con profundidades de
asentamiento entre 11000’ y 12000’. Sus funciones más
importantes son:
o Facilita el control del pozo si se encuentran zonas de
presiones anormales
o Aísla formaciones problemáticas, lutitas deleznables, flujos
de agua salada o formaciones que contaminan el fluido de
perforación
o Permite bajar la densidad del lodo para perforar zonas de
presiones normales que se encuentran debajo de zonas
presurizadas.
Revestidor de producción: Es la sarta de revestimiento a través
de la cual se completa, produce y controla el pozo durante toda su
vida productiva y en la cual se pueden llevar a cabo muchas
reparaciones y completaciones. Este revestidor se coloca hasta
cubrir la zona productiva y proporciona un refuerzo para la tubería
de producción (“tubing”) durante las operaciones de producción
del pozo. Por lo general, no se extiende hasta la superficie y es
colgada en la sarta de revestimiento anterior a ella. La
profundidad de asentamiento es la profundidad total del pozo.Las
principales funciones son:
o Aislar las formaciones o yacimientos para producir
selectivamente
o Evitar la migración de fluido entre zonas
o Servir de aislamiento al equipo de control (cabezal) que se
instalará para manejar la producción del pozo
Camisa o “liner” intermedia o protectora: Las camisas
protectoras o intermedias son sartas que no se extienden hasta la
superficie y se cuelgan de la anterior sarta de revestimiento. El
propósito de esta sarta es prevenir problemas de pérdida de
circulación cuando se requieren altos pesos de lodo. Proporciona
la misma protección que el revestidor intermedio.
Camisa o “liner” de producción: Este tipo de tubería se coloca
en la sección interior del revestidor de producción. Su uso
principal se realiza en pozos exploratorios debido a que se
pueden probar las zonas de interés sin el gasto de una sarta
completa. Luego si existe una producción comercial de
hidrocarburo, se puede conectar la sarta hasta superficie. En la
mayoría de los casos se corre con una herramienta especial en el
tope del mismo que permite conectar la tubería y extenderla hasta
la superficie si se requiere. Normalmente, va colgado a unos 500’
por encima del último revestidor cementado hasta la profundidad
final del pozo
Tie back: Los liners de producción generalmente se conectan
hasta superficie (en el cabezal del pozo) usando una sarta de
revestimiento “tie back” cuando el pozo es completado. Esta sarta
se conecta al tope del liner con un conector especial. El tie back
aisla revestidor usado que no puede resistir las posibles cargas
de presión si continua la perforación, proporcionando integridad
de presión desde el tope del liner al cabezal del pozo. También
permite aislar un revestimiento gastado que no puede resistir
incrementos de presión o aislar revestimientos intermedios en
casos de incrementos de producción.
Tubería de producción: Es una tubería especial utilizada para
producir el pozo y que puede reemplazarse o repararse durante la
vida del pozo.
Cementación
La cementación es un proceso que consiste en mezclar cemento seco y
ciertos aditivos con agua, para formar una lechada que es bombeada al pozo a
través de la sarta de revestimiento y colocarlo en el espacio anular entre el
hoyo y el diámetro externo del revestidor.
El volumen a bombear es predeterminado para alcanzar las zonas
críticas (alrededor del fondo de la zapata, espacio anular, formación permeable,
hoyo desnudo, etc.). Luego se deja fraguar y endurecer, formando una barrera
permanente e impermeable al movimiento de fluidos detrás del revestidor.
Entre los propósitos principales de la cementación se pueden mencionar
los siguientes:
Proteger y asegurar la tubería de revestimiento en el hoyo.
Aislar zonas de diferentes fluidos.
Aislar zonas de agua superficial y evitar la contaminación de las
mismas por el fluido de perforación o por los fluidos del pozo.
Evitar o resolver problemas de pérdida de circulación y pega de
tuberías.
Reparar pozos por problemas de canalización de fluidos.
Reparar fugas en el revestidor.
La cementación tiene una gran importancia en la vida del pozo, ya que
los trabajos de una buena completación dependen directamente de una buena
cementación.
Cementación primaria
Consiste en mezclar y colocar lechadas de cemento en el espacio anular
entre el revestidor y las paredes del hoyo, con el objetivo principal de fijar el
revestidor para garantizar la perforación de la próxima fase, así como el
aislamiento de las formaciones perforadas para evitar la migración de fluidos.
Esta cementación es realizada inmediatamente después que se corre un
revestidor en el hoyo. Se realiza a presiones suficientes para que la mezcla de
cemento sea desplazada a través de la zapata y ascienda por el espacio anular
hasta cubrir la distancia calculada que debe estar rellena de cemento.
Entre los objetivos principales de esta cementación se pueden
mencionar los siguientes:
Adherir y fijar la sarta de revestimiento.
Restringir el movimiento de fluidos entre las formaciones
productoras y el confinamiento de los estratos acuíferos.
Proteger la sarta contra la corrosión.
Reforzar la sarta contra el aplastamiento debido a fuerzas
externas y reforzar la resistencia de la sarta a presiones de
estallido.
Proteger la sarta durante los trabajos de cañoneo (completación).
Sellar la pérdida de circulación en zonas “ladronas”.
Cementación secundaria
Las cementaciones secundarias pueden definirse como procesos de
bombear una lechada de cemento en el pozo, bajo presión, forzándola contra
una formación porosa, tanto en las perforaciones del revestidor o directamente
el hoyo abierto. Por lo que las cementaciones secundarias pueden ser:
forzadas y/o tapones de cemento.
Cementación Forzada: es el tipo más común de cementación
secundaria. El proceso comprende la aplicación de presión
hidráulica para forzar cemento en un orificio abierto a través de
perforaciones en el revestidor, para corregir ciertas anomalías. La
cementación forzada puede hacerse: con empacadura y/o con
retenedor. Cuando se diseña una cementación forzada se debe
considerar:
o Tipo de cemento.
o Tiempo total de bombeo requerido.
o Tiempo para alcanzar las condiciones del pozo.
o Control de filtrado.
o Resistencia del cemento.
o Desplazamientos y cálculos básicos en condiciones del
pozo.
Tapones de Cemento: operación que consiste en colocar una
columna de cemento en un hoyo abierto o revestido, con
cualquiera de los siguientes objetivos:
o Aislar una zona productora agotada.
o Pérdida de control de circulación.
o Perforación direccional.
o Abandono de pozo seco o agotado.
o El método más común para probar la calidad de la
resistencia de un tapón de cemento es bajar una mecha,
tubería de perforación o con presión. El tiempo de fraguado
después de la colocación de un tapón varía de 8 a 72
horas, dependiendo del uso de aceleradores o el tipo de
pozo.
Clasificación de los cementos:
El primer tipo de cemento usado en un pozo petrolero fue el llamado
cemento Portland, el cual fue desarrollado por Joseph Aspdin en 1824,
esencialmente era un material producto de una mezcla quemada de calizas y
arcillas. El cemento Portland es un material cementante disponible
universalmente. Las condiciones a las cuales es expuesto en un pozo difieren
significativamente de aquellas encontradas en operaciones convencionales de
construcciones civiles.
Este tipo de cemento es el ejemplo más común de un cemento
hidráulico, los cuales fraguan y desarrollan resistencia a la compresión como
un resultado de la hidratación. Este fenómeno involucra una serie de
reacciones químicas entre el agua y los componentes del cemento.
Por definición, el cemento Portland es el que proviene de la
pulverización del clínker obtenido por fusión incipiente de materiales arcillosos
y calizos, que contengan óxidos de calcio, silicio, aluminio y hierro en
cantidades convenientemente dosificadas y sin más adición posterior que yeso
sin calcinar, así como otros materiales que no excedan del 1% del peso total y
que no sean nocivos para el comportamiento posterior del cemento.
Los cementos tienen ciertas características físicas y químicas y en base
al uso que se les puede dar en cuanto a rango de profundidad, presiones y
temperaturas a soportar, etc. Según el API, los cementos pueden ser
clasificados en:
Clase A: usado generalmente para pozos desde superficie hasta
6000’, cuando no se requieren propiedades especiales. La
relación agua/cemento recomendada es 5.2 gal/sacos.
Clase B: usado generalmente para pozos desde superficie hasta
6000’, cuando hay condiciones moderadas a altas resistencia al
sulfato. La relación agua/cemento recomendada es 5.2 gal/sacos.
Clase C: usado generalmente para pozos desde superficie hasta
6000’, cuando se requieren condiciones de alto esfuerzo. La
relación agua/cemento recomendada es 6.3 gal/sacos.
Clase D: usado generalmente para pozos desde 6000’ hasta
10000’, para condiciones moderadas de presión y temperatura.
Está disponible para esfuerzos moderados a altos. La relación
agua/cemento recomendada es 4.3 gal/sacos.
Clase E: usado generalmente para pozos desde 10000’ hasta
14000’, para condiciones altas de presión y temperatura. La
relación agua/cemento recomendada es 4.3 gal/sacos.
Clase F: usado generalmente para pozos desde 10000’ hasta
16000’, para condiciones extremas de presión y temperatura. Está
disponible para esfuerzos moderados a altos. La relación
agua/cemento recomendada es 4.3 gal/sxs.
Clase G y H: usado generalmente para pozos desde superficie
hasta 8000’ o puedan ser usados con aceleradores o
retardadores para cubrir una amplia variedad de rangos de
presión y temperatura. La relación agua/cemento recomendada
es 5,0 gal/sacos.
Aditivos
Los aditivos tienen como función adaptar los diferentes cementos petroleros a
las condiciones específicas de trabajo. Pueden ser sólidos y/o líquidos
(solución acuosa). Entre ellos tenemos:
Aceleradores: se usan en pozos donde la profundidad y la
temperatura son bajas. Para obtener tiempos de espesamiento
cortos y buena resistencia a la compresión en corto tiempo.
Pueden usarse: cloruro de calcio (CaCl2, más
usado), silicato de sodio (Na2SiO3), cloruro de sodio (NaCl),
ácido oxálico (H2C2O4), etc.
Retardadores: hacen que el tiempo de fraguado y el desarrollo de
resistencia la compresión del cemento sea más lento. Los más
usados son: lignitos, lignosulfonato de calcio, ácidos
hidroxicarboxílicos, azúcares, derivados celulósicos, etc.
Extendedores: se añaden para reducir la densidad del cemento o
para reducirla cantidad de cemento por unidad de volumen del
material fraguado, con el fin de reducir la presión hidrostática y
aumentar el rendimiento (pie3/saco) de las lechadas. Entre los
más usados se tienen: bentonita, silicato de sodio (Na2SiO3),
materiales pozzolánicos, etc.
Densificantes: aditivos que aumentan la densidad del cemento o
que aumentan la cantidad de cemento por unidad de volumen del
material fraguado, con el fin de aumentar la presión hidrostática.
Los más usados: barita, hematita, ilmenita, etc.
Controladores de Filtrado: aditivos que controlan la pérdida de la
fase acuosa del sistema cementante frente a una formación
permeable. Previenen la deshidratación prematura de la lechada.
Los más usados son: polímeros orgánicos, reductores de fricción,
etc.
Antiespumantes: ayudan a reducir el entrampamiento de aire
durante la preparación de la lechada. Los más usados son: éteres
de poliglicoles y siliconas.
Dispersantes: se agregan al cemento para mejorar las
propiedades de flujo, es decir, reducen la viscosidad de la lechada
de cemento. Entre ellos tenemos: polinaftaleno sulfonado,
polimelamina sulfonado, lignosulfonatos, ácidos hidrocarboxilicos,
polimeros celulósicos.
Diseño de una cementación:
El programa de cementación debe diseñarse para obtener una buena
cementación primaria. El trabajo debe aislar y prevenir la comunicación entre
las formaciones cementadas y entre el hoyo abierto y las formaciones someras
detrás del revestidor. Debe considerarse el no fracturar alrededor de la zapata
del conductor o de la sarta de superficie durante las subsiguientes operaciones
de perforación o cuando se corren las otras sartas de revestimientos.
Al planificar una cementación, independientemente del tipo de revestidor
debe considerarse información sobre:
Referencia de pozos vecinos.
Geometría del hoyo (diámetro/forma).
Tipo de fluido de perforación existente en el sistema.
Problemas presentados durante la perforación.
Tipo de cemento, lechada y aditivos a utilizar por la compañía.
Efectuar pruebas API para cada una de las lechadas de cemento.
Equipos y herramientas a utilizar por la compañía de
cementación.
Centralización del revestidor.
Condiciones óptimas de una cementación:
Para que exista una buena cementación se debe cumplir lo siguiente:
Tener la densidad apropiada.
Ser fácilmente mezclable en superficie.
Tener propiedades reológicas óptimas para remover el lodo.
Mantener sus propiedades físicas y químicas mientras se está
colocando.
Ser impermeable al gas en el anular, si estuviese presente.
Desarrollar esfuerzo lo más rápido posible una vez que ha sido
bombeado.
Desarrollar una buena adherencia entre revestidor y formación.
Tener una permeabilidad lo más baja posible.
Mantener todas sus propiedades bajo condiciones severas de
presión y temperatura.