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CÁLCULO DE LÍMITES DE INTEGRACIÓN EN EL ORDEN 𝒅𝒛 𝒅𝒚 𝒅𝒙.

Para evaluar una integral triple aplicamos una versión tridimensional del teorema de Fubini
para obtenerla por medio de tres iteraciones simples. Como en las integrales dobles, existe
un procedimiento geométrico para calcular los límites de integración para estas integrales
simples.
Para evaluar;

∭ 𝐹(𝑥, 𝑦, 𝑧)𝑑𝑉
𝐷

Sobre una región 𝐷, se procede básicamente de la siguiente manera según Tabla (--):
Tabla (--) Procedimiento Geométrico para límites de integración.

Elaborar un bosquejo. Trazando la


región 𝐷 con su “sombra” 𝑅 (proyección
vertical) sobre el plano 𝑥𝑦. Se Marcan
las superficies de las fronteras superior e
inferior de la región D y las
curvas de las fronteras superior e inferior
de R.

Determinar los límites de integración en


𝑧. Se traza una recta 𝑀, paralela al eje 𝑧,
que pasa por un punto típico (𝑥, 𝑦) en 𝑅.
Cuando 𝑧 crece, 𝑀 entra a 𝐷 en 𝑧 5
𝑓1(𝑥, 𝑦) y sale en 𝑧 5 𝑓2(𝑥, 𝑦). Éstos son
los límites de integración en 𝑧.

Determinar los límites de integración en


y. Se dibuja una recta 𝐿 paralela al eje 𝑦
que pasa por (𝑥, 𝑦. Cuando 𝑦 crece, 𝐿
entra a 𝑅 en 𝑦 5 𝑔1(𝑥) y sale en 𝑦 5
𝑔2(𝑥). Éstos son los límites de
integración en 𝑦.

Determinar los límites de integración en La integral es:


x. Se seleccionan los límites en x que
incluyan todas las rectas paralelas al eje 𝑥=𝑏 𝑦=𝑔2 (𝑥) 𝑧=𝑓2 (𝑥,𝑦)
y que pasen por R (x 5 a y x 5 b en la ∫ ∫ ∫ 𝐹(𝑥, 𝑦, 𝑧)𝑑𝑧 𝑑𝑦 𝑑𝑥
𝑥=𝑎 𝑦=𝑔1 (𝑥) 𝑧=𝑓1 (𝑥,𝑦)
figura anterior). Éstos son los límites de
integración en x.
El procedimiento anterior aplica siempre que una región sólida 𝐷 está acotada por arriba y
por abajo por una superficie, y cuando la “sombra” de la región 𝑅 está acotada por una curva
superior y una inferior. No se aplica para regiones con agujeros que las atraviesan, si bien
algunas veces estas regiones se subdividen en regiones más simples para las cuales sí se
aplica el procedimiento.
La integración puede aplicarse en orden diferente, pero el procedimiento es similar, como se
ilustra a continuación.
Ejemplo: establecer los límites de integración para la evaluación de la integral triple de la
función 𝐹(𝑥, 𝑦, 𝑧) sobre el tetraedro 𝐷 con vértices en (0, 0, 0), (1, 1, 0), (0, 1, 0) y (0, 1, 1).

Aplicando el orden de integración 𝑑𝑧 𝑑𝑦 𝑑𝑥.


Solución: se traza 𝐷 junto con su “sombra” 𝑅 en el plano 𝑥𝑧 como la siguiente figura.

Figura (--) Determinación de los límites de integración para la evaluación


de la integral triple de una función definida sobre el tetraedro 𝐷.

La frontera superior (a la derecha) de 𝐷 se encuentra en el plano 𝑦 = 1. La frontera inferior


(a la izquierda) se encuentra en el plano 𝑦 = 𝑥 + 𝑧. La frontera superior de 𝑅 es la recta 𝑧 =
1 − 𝑥 y la frontera inferior es la recta 𝑧 = 0.
Primero obtenemos los límites de integración en 𝑦. La recta paralela al eje 𝑦 que pasa por un
punto típico (𝑥, 𝑧) en 𝑅 entra a 𝐷 en 𝑦 = 𝑥 + 𝑧 y sale en 𝑦 = 1.

Luego, obtenemos los límites de integración en 𝑧. La recta 𝐿 paralela al eje 𝑧 que pasa por
(𝑥, 𝑧) entra a 𝑅 en 𝑧 = 0 y sale en 𝑦 = 1 − 𝑥.

Finalmente, encontramos los límites de integración en 𝑥. Cuando 𝐿 barre 𝑅, el valor de 𝑥


varía desde 𝑥 = 0 hasta 𝑥 = 1. La integral es
1 1−𝑥 1
∫ ∫ ∫ 𝐹(𝑥, 𝑦, 𝑧)𝑑𝑦 𝑑𝑧 𝑑𝑥
0 0 𝑥+𝑧
Bibliografía: Thomas George B. 2010. Cálculo de Varias Variables. Pearson. pp. 860-863.

PROPIEDADES DE LAS INTEGRALES TRIPLES.


Las integrales triples tienen las mismas propiedades algebraicas que las integrales dobles y
simples. Sólo se sustituyen las integrales dobles de las cuatro propiedades dadas a
continuación, por las integrales triples.
1. Múltiplo constante:

∬ 𝑐𝑓(𝑥, 𝑦)𝑑𝐴 = 𝑐 ∬ 𝑓(𝑥, 𝑦)𝑑𝐴 (𝑝𝑎𝑟𝑎 𝑐𝑢𝑎𝑙𝑞𝑢𝑖𝑒𝑟 𝑛ú𝑚𝑒𝑟𝑜 𝑑𝑒 𝑐)


𝑅 𝑅

2. Suma y resta:

∬ (𝑓(𝑥, 𝑦) ± 𝑔(𝑥, 𝑦))𝑑𝐴 = ∬ 𝑓(𝑥, 𝑦)𝑑𝐴 ± ∬ 𝑔(𝑥, 𝑦)𝑑𝐴


𝑅 𝑅 𝑅

3. Dominación:

𝑎) ∬ 𝑓(𝑥, 𝑦)𝑑𝐴 ≥ 0 𝑠𝑖 𝑓(𝑥, 𝑦) ≥ 0 𝑒𝑛 𝑅


𝑅

𝑏) ∬ 𝑓(𝑥, 𝑦)𝑑𝐴 ≥ ∬ 𝑔(𝑥, 𝑦)𝑑𝐴 𝑠𝑖 𝑓(𝑥, 𝑦) ≥ 𝑔(𝑥, 𝑦) 𝑒𝑛 𝑅


𝑅 𝑅

4. Aditividad:

∬ 𝑓(𝑥, 𝑦)𝑑𝐴 = ∬ 𝑓(𝑥, 𝑦)𝑑𝐴 + ∬ 𝑓(𝑥, 𝑦)𝑑𝐴


𝑅 𝑅1 𝑅2

𝑠𝑖 𝑅 𝑒𝑠 𝑙𝑎 𝑢𝑛𝑖ó𝑛 𝑑𝑒 𝑑𝑜𝑠 𝑟𝑒𝑔𝑖𝑜𝑛𝑒𝑠 𝑅1 𝑦 𝑅2 𝑞𝑢𝑒 𝑛𝑜 𝑠𝑒 𝑡𝑟𝑎𝑠𝑙𝑎𝑝𝑎𝑛.

La propiedad 4 supone que la región de integración 𝑅 se descompone en regiones 𝑅1 y 𝑅2


que no se traslapan con fronteras consistentes en un número finito de segmentos de recta o
curvas suaves. La figura siguiente ilustra un ejemplo de esta propiedad.
Figura (--) La propiedad de aditividad para regiones
rectangulares se aplica también a regiones acotadas por
curvas continuas.

Bibliografía: Thomas George B. 2010. Cálculo de Varias Variables. Pearson. pp. 846.

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