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ESCUELA DE PSICOLOGIA
ARTICULO CIENTÍFICO
CICLO : I
CHICLAYO 2018
ARTICULO DE OPINION
CHICLAYO-PERÚ 2018
INTRODUCCIÓN
Es conveniente que esta investigación sea conocida de una manera clara por la ciudadanía en
general en un contexto de transparencia y respeto a los Derechos Humanos para que a futuro no
se cometan estas arbitrariedades. Con este trabajo quiero que la comunidad universitaria presente
vea que esta guerra interna vulnero Derechos que están enmarcados no solo en la Declaración de
los Derechos Humanos sino en nuestra ley vigente como es la Constitución Política del Perú.
En el Perú veinte años de lucha subversiva entre los años 1980 y 2000, según el informe de la
Comisión de la Verdad y Reconciliación” indica que 69,280 personas murieron, entre terroristas,
policías, militares y población civil .El conflicto que empezó en el campo se trasladó a la ciudad,
poniendo a la población en zozobra quienes vivían en un estado de incertidumbre y temor; todos
los días morían policías, civiles, habían atentados, asesinatos de autoridades, en ese estado de
necesidad se da el Caso de Barrios Altos que vulneró el Derecho a la Vida.
“Toda persona tiene derecho a que se respete su vida. Este derecho estará protegido por la ley, en
general a partir del momento de la concepción. Nadie puede ser privado de la vida
arbitrariamente”.
Al existir poca normativa en este tipo de acciones se utilizó estrategias de la violencia contra
violencia. El grupo que interviene en dicho inmueble, eran miembros del ejército y quiérase son
representantes del Estado y hubo trabas para la búsqueda de la verdad; el Estado disolvió el
Congreso y sacó una ley de amnistía que exoneraba de responsabilidad a los militares, policías y
civiles que se encontraban denunciados, investigados, procesados o condenados por hechos
derivados u originados como consecuencia de la lucha contra el terrorismo, que hubieran cometido
violaciones a los derechos humanos entre los años 1980 y 1995 quedan libres.
El Estado violentó a las víctimas de este caso (Barrios Altos) salvándoles la responsabilidad al
resto de implicados.
El derecho a la vida está consagrado en todos los instrumentos internacionales de protección a los
derechos humanos, los mismos que prohíben y condenan las ejecuciones extralegales, arbitrarias
y sumarias.
“La corte interamericana de derechos humanos, en esta sentencia ha señalado que las
ejecuciones extrajudiciales constituyen graves violaciones a los derechos humanos, por contravenir
derechos inderogables reconocidos por el derecho internacional de los derechos humanos”
El conflicto armado interno, que atravesó nuestro país, ha sido considerado para la Comisión de la
Verdad y Reconciliación, como uno de los más largos y trágicos de nuestra historia, no solo por las
dos décadas que comprendió el conflicto, sino además, por el significativo número de víctimas y los
daños, secuelas que este ha ocasionado a la nación peruana; estos delitos por su naturaleza son
imprescriptibles y que las normas internacionales sobre crímenes de lesa humanidad son de
incumplimiento imperativo para los Estados, lo que significa, que se contrapone al concepto de
Derecho Internacional, como basado en la mera voluntad de los Estados por su valor
supranacional, como por ejemplo, la ley de amnistía, cuyo fondo fue, desconocer normas
internacionales, justificando el accionar delictivo y dejando sin efecto todo tipo de responsabilidad a
los involucrados; como consecuencia de la incompatibilidad entre las leyes de amnistía y la
convención americana sobre los derechos humanos, la mencionada ley, careció de efectos
jurídicos y no debió seguir representando un obstáculo para la investigación de los hechos que
constituyen éste caso, ni para la identificación y castigo de los responsables, ni pueden tener igual
impacto respecto de otros casos de violación de los derechos consagrados en la convención
americana acontecidos en el Perú.
De todo lo comentado puedo concluir que, primero, debemos contar con reformas institucionales
que le permita al Estado una presencia eficaz como autoridad que defienda los Derechos
Humanos; segundo, la necesidad de una educación de calidad que promueva los valores
democráticos que conlleven al respeto de los Derechos Humanos sin diferencias y tercero la
promoción de un liderazgo político para el mantenimiento del orden interno basado en el respeto
de los Derechos Humanos.
BIBLIOGRAFIA