La violencia de género es aquella que se lleva a cabo contra la mujer por el mero hecho de serlo. Además, puede producirse dentro del hogar, pero también fuera (en el trabajo, en las relaciones sociales y familiares o en cualquier ámbito de la vida pública). Se fundamenta, principalmente, en la supuesta superioridad del sexo masculino sobre el femenino.
¿Qué es la violencia intrafamiliar o doméstica?
La violencia doméstica es aquella que se produce, única y exclusivamente, dentro del hogar. De hecho, de ahí viene su nombre ya que el prefijo 'domo-' significa 'casa'. En este caso, este tipo de violencia psicológica, física, verbal o de cualquier otro tipo no tiene por qué ser llevada a cabo por el hombre. Dentro del concepto de violencia doméstica o intrafamaliar se engloban muchos casos. De hecho, sería etiquetable de este modo la violencia que ejerza una madre sobre sus hijos o viceversa, un abuelo sobre sus nietos, etc. En definitiva, toda la que se produzca en el seno de la familia.
Diferencias entre violencia doméstica y de género
Tras haber lanzado ambas definiciones, es posible llegar a algunas conclusiones. En primer lugar, la violencia de género puede darse dentro de la violencia doméstica pero, en cuanto se produce fuera del hogar, dejar de ser clasificable dentro de ese término. Asimismo, la violencia intrafamiliar abarca, además de ese, otros muchos supuestos de violencia física o psicológica que se dan dentro del seno de la familia y entre parientes de cualquier tipo.
¿Cómo actuar en caso de violencia doméstica contra la mujer?
La violencia doméstica contra la mujer, en la mayoría de los casos, puede ser encuadrable dentro del concepto de violencia de género. En este sentido, hay una serie de medidas que se deben adoptar lo antes posible para evitar que los daños lleguen a ser de mayor gravedad.
1. Solicitar asistencia por teléfono
2. Acudir inmediatamente a un hospital o centro de salud