Вы находитесь на странице: 1из 4

CAPACIDADES DIFERENTES, UNA EXCLUSIÓN SOCIAL

Introducción.

Para comprender el tema a tratar, debemos saber: ¿A qué nos referimos al hablar de
“capacidades diferentes”?
Se considera persona con capacidades diferentes a todo ser humano que presente
permanentemente una limitación, pérdida o disminución de sus facultades físicas,
intelectuales o sensoriales, para realizar sus actividades naturales y propias. Se reconoce
que las personas con capacidades diferentes, sufren marginación y discriminación por
parte de la sociedad, lo que gatilla que desarrollen además de un problema físico, una
baja autoestima.

En la mayoría de los casos, a estos ciudadanos se les condiciona y restringe la participación


social, imponiéndoles “barreras” sociales y culturales para la realización de muchas
actividades. A ello se le suma las estigmatizaciones que los han marcado de por vida por el
solo hecho de ser diferentes y colocados en una posición de inferioridad, lo que conduce a
tratarlos como personas incapaces de valerse por sí mismas, potenciarse y desarrollarse.
Esto a su vez genera conflictos educacionales, laborales, culturales, entre otros, que
limitan directamente la integración social de personas con discapacidad, impidiendo su
inclusión en la sociedad como personas sujetas de derechos, en donde las instituciones y
las legislaciones por su parte no se han mostrado del todo aptas para apoyar la inclusión
de este grupo.

Así que para estimular la inclusión de este importante grupo en la sociedad, se debe
garantizar la accesibilidad a un empleo formal, a la educación, al medio físico, lo que
implica suprimir barreras históricas, urbanas, arquitectónicas y de transporte,
reconociendo las claras necesidades que tiene este colectivo de participar dentro de la
ciudadanía social.

La accesibilidad al trabajo aparece como uno de los mecanismos integradores más


eficaces por ser considerado como de los más necesarios para la independencia de las
personas con discapacidad. Un trabajo formal brinda acceso a la seguridad social, al
crédito necesario para obtener vivienda; brinda un mayor estatus ante familiares y la
sociedad. La accesibilidad a la vida social pone de manifiesto facetas menos visibles pero
trascendentes para el desarrollo y la dignificación de la persona, la convivencia en el
barrio, las actividades culturales y recreativas, así como la formación de variados tipos de
vínculos.
Sociólogos han manifestado que la discapacidad es producida debido a que en el medio
social no existen las facilidades que les permitan a estas personas estar en igualdad de
condiciones para acceder a las mismas oportunidades que tienen los demás miembros de
la sociedad, imponiéndoles barreras que no les posibilitan desarrollarse y potenciarse
como ciudadanos “normales”. Por eso, la discapacidad tiene un fuerte vínculo con lo
social, ya que es el entorno el que agudiza la discapacidad y las actitudes sociales hostiles
hacia las personas con deficiencias, pues se les excluye innecesariamente de la
participación en la sociedad.

EXCLUSIÓN A NIVEL MUNDIAL

La Encuesta Mundial de Salud, encuesta de hogares que se realizó en forma presencial en


2002-2004, es la mayor encuesta multinacional sobre salud y discapacidad que se haya
realizado utilizando un único conjunto de preguntas y métodos coherentes para recopilar
datos de salud comparables entre países. Se calcula que más de 1000 millones de
personas viven con algún tipo de discapacidad, es decir, alrededor del 15% de la
población. De acuerdo con la Encuesta Mundial de Salud, unos 785 millones (15,6%) de
personas mayores de 15 años viven con alguna discapacidad. En la Encuesta Mundial de
Salud se estima que, de esas personas, 110 millones (2,2%) enfrentan considerables
dificultades de funcionamiento, equivalente a la provocada por condiciones tales como
tetraplejía, depresión grave o ceguera.

Más de 1.000 millones de personas en el mundo entero viven con alguna forma de
discapacidad. Estas personas suelen verse marginadas a causa de los prejuicios sociales
acerca de las diversas modalidades de discapacidad y la limitada flexibilidad de los agentes
sociales para atender a sus necesidades especiales. En la vida cotidiana, los discapacitados
padecen múltiples desigualdades y disponen de menos oportunidades para acceder a la
educación de calidad que se imparte en contextos integradores.

 Más de mil millones de personas, o sea, un 15% de la población mundial, padece


alguna forma de discapacidad.

 Entre 110 millones y 190 millones de adultos tienen dificultades considerables para
funcionar.

 Las tasas de discapacidad están aumentando a causa del envejecimiento de la


población y el aumento de las enfermedades crónicas, entre otras causas.

 Las personas con discapacidad tienen menos acceso a los servicios de asistencia
sanitaria y, por lo tanto, necesidades insatisfechas a este respecto.

Las principales causas que lo originan en la población son atribuibles a enfermedades,


edad avanzada, nacimiento y accidentes, sin soslayar que también la discapacidad se
asocia con la pobreza extrema, la desnutrición, las enfermedades genéticas y
transmisibles.

En materia educativa, el 24 por ciento de la población con discapacidad de 15 años y más


no tiene instrucción básica y el promedio de escolaridad de estas personas es de cuatro
años, en comparación con el del resto del estado que es de ocho. La participación laboral
de las personas con capacidades diferentes mantiene aún grandes rezagos, toda vez que
el 76 por ciento de este grupo no tiene ingreso ni participación económica. Por otra parte,
la planeación urbana ha considerado sólo hasta años recientes algunos elementos
arquitectónicos que favorecen el desenvolvimiento de las personas con capacidades
diferentes, por lo que prevalecen grandes barreras que imposibilitan su desplazamiento
adecuado, seguro y digno
CONCLUSIÓN.

Las políticas públicas para el empleo y equiparación de oportunidades, han demostrado


que la legislación y las instituciones por sí solas no resuelven el problema de la inserción
laboral y social de las personas con discapacidad. Estas deben acompañarse de una
propuesta estratégica de acción para llevarlas a cabo, requiere a su vez de instituciones
fuertes y compromiso consciente de la comunidad en su conjunto. Para alcanzar una
adecuada inserción laboral y social de las personas con discapacidad, la sociedad debe
jugar un papel fundamental en la inclusión de las personas con discapacidad y de las que
se encuentran en riesgo de ellas para producir un verdadero desarrollo humano
sostenible.

OBJETIVOS FUTUROS:

o Invertir en programas y servicios específicos para personas con discapacidad


o Adoptar una estrategia y un plan de acción nacionales en materia de discapacidad
o Mejorar la capacidad de los recursos humanos
o Suministrar financiamiento suficiente y mejorar la asequibilidad económica
o Mejorar la recopilación de datos sobre discapacidad
o Reforzar y respaldar la investigación sobre discapacidad

Вам также может понравиться