o

Examen
de
cojeras
caballo
en el
2
cuaderno
Examen dinámico en la evaluación
de la función locomotora del caballo

Dra. Marta Prades, Diplomada ECVS y ACVS,

Profesora Titular de Cirugía, Departamento de Medicina
y Cirugía Animal, Universidad Autónoma de Barcelona.

CONTENIDO

Aires normales

Examen dinámico sistemático

cojeras en el caballo
Pruebas específicas

Grados de cojera

Evaluación en tapiz rodante

Conclusiones
Examende

Lecturas recomendadas
 2
Aires normales
La expresión del patrón locomotor en el movimiento
puede valorarse desde puntos de vista subjetivos
(observación y examen por un clínico) y objetivos
(análisis cinemático y cinético). El resultado de la
valoración está indudablemente influenciado por el
grado de experiencia o entrenamiento del individuo
y por los filtros y parámetros que apliquemos si la
valoración se hace por medio de aparatos informati-
zados (plataforma de fuerzas, acelerómetros).
Como veterinarios, es necesario aprender a valorar
cualidades de movimiento que serán indispensa-
bles para saber identificar, prevenir y tratar los pro-
blemas músculo-esqueléticos en los pacientes.
Ante todo está saber apreciar la calidad de los aires
en los caballos sanos. Elasticidad, fluidez, armonía,
ritmo, cadencia: ¿Sabemos lo que son y sabemos
verlos en el caballo? ¿Qué es lo esperado de cada
individuo o de cada colectivo de individuos o razas
o aptitudes? Un caballo de doma clásica se move-
rá diferente de un caballo de raid o de un purasan-
gre de carreras de galope. Es importante saber un
mínimo sobre las particularidades de cada tipo de
caballo, de cómo se entrena y de qué tipo de traba-
jo se le exige. Cada vez más nos especializamos
dentro de la profesión y hay veterinarios que pasan
la mayor parte del tiempo trabajando con un cierto
Figura 1a y 1b. Caballos con buena técnica de salto, uno en libertad y
tipo de caballo; cada día la clientela quiere saber otro montado.
más y nos exige más. Ser capaces de apreciar
Examen

estas diferencias y conocer bien los movimientos
idóneos de los caballos en todos sus aires nos ayu-
dará en la detección precoz de problemas. Poder
examinar bien los caballos en todos sus aires natu-
de
apreciar un buen aire en un caballo de doma y
saber asimismo en qué consiste una técnica buena
de salto.

rales nos dará una información más completa El deterioro del sistema músculo-esquelético y
cojeras en el caballo

sobre el estado del aparato locomotor. ¿Cuál es el
caballo ideal- y cuál es el movimiento ideal para
cada caballo? En nuestra carrera profesional vere-
mos la presencia en mayor o menor grado de cier-
tos atributos de movimiento buenos, malos, desea-
bles o no. Es importante haber presenciado alguna
vez el movimiento casi perfecto en cada disciplina
hípica para posteriormente poder gradar todo
aquello que se aleje de la perfección. Es útil saber
neuro-muscular por el envejecimiento, el desgaste
diario o por haber sufrido insultos traumáticos va a
alterar los patrones de movimiento de los individuos.
El movimiento o patrón locomotor es el producto
del código genético y los factores ambientales. Por
este motivo son importantes tanto el patrón cine-
mático con el que nace el individuo como los pro-
gramas de entrenamiento al que dicho individuo
es sometido. Además, partiendo de una determi-

Imagen obtenida de una grabación de video de alta velocidad
Figura 2a y 2b. Momentos de sobrecarga como en la recepción
de los obstáculos.
nada calidad inicial, pueden producirse desviacio-
nes debidas a dolor, incoordinación o ambos y
debemos aprender a identificarlas.
墌
El movimiento o patrón locomotor viene
determinado tanto por el patrón cinemáti-
co con el que nace el individuo como por
los programas de entrenamiento.
Primero haremos una descripción de los aires más
habituales del caballo. Posteriormente describire-
mos los patrones de locomoción que se registran
cuando existe una patología y también las pruebas
específicas que se utilizan para acentuar las cojeras
y poder en cierta medida intentar localizarlas. 3
El paso
Es un aire de 4 tiempos regulares en el que pode-
mos valorar en el movimiento ideal la fluidez, la
coordinación entre las extremidades, la elasticidad
y la simetría. En el paso, el tronco sufre una late-
ro-flexión máxima en la zona torácica que debe
ser igual a un lado y a otro y un desplazamiento de
la grupa en consonancia, que asimismo debe ser
parejo. Esto lo apreciamos mejor si la observación
se realiza desde un punto por detrás del caballo.
Hay un movimiento de rotación axial que se
corresponde a cada fase propulsiva del posterior y
que por tanto es mayor en la zona del sacro y se
va atenuando a medida que avanzamos hacia la
zona torácica.
墌
El paso es un aire de 4 tiempos regula-
res en el que podemos valorar la fluidez, la
coordinación, la elasticidad y la simetría.
Si nos colocamos a un lado podemos observar que
el impulso que se genera en la grupa debe transmi-
tirse de manera armónica hasta la cabeza, como si
fuese una onda que trazase una trayectoria sinusoi-
de hasta llegar al cuello y a la cabeza. Al paso pode-
mos identificar asimetrías de movimiento de la
columna y de la grupa, sobre todo también si obser-
vamos al caballo desde una perspectiva cenital.
Hay una serie de parámetros lineales apre-
cojeras en el caballo
Examende
 4 ciables o evaluables al paso y también en los otros
aires. Se trata de la longitud de tranco, la sobre-
huella y las posibles diferencias entre miembros
anteriores y posteriores, derecha o izquierda.
Seguidamente también podemos valorar los
parámetros temporales, desde el ritmo en
primer lugar que es muy definido y en el cual
deben ocurrir 4 apoyos e intervalos iguales: si se
pierde el ritmo aparecen diferentes grados de
lateralización ó ambladura. El tiempo de apoyo de
todas las extremidades debe ser igual. También
debemos considerar los parámetros angula-
res dentro de los cuales cabe destacar como muy
importante el ángulo de hiperextensión de los
menudillos de las cuatro patas, que es detectable
a simple vista y nos ayuda a detectar asimetrías
entre un pie y otro ó una mano y otra.

Debemos también entrenar el ojo a observar la

dinámica de los cascos en las manos y en los pies.
Hay caballos que apoyan primero el talón y des-
pués la lumbre, en cambio otros que apoyan pla-
nos. Cada caballo tiene una biomecánica caracte-
rística del casco que es individual y propia. Si
aprendemos a observarla y hacemos más de una
observación en el tiempo podremos detectar las
alteraciones que puedan ocurrir. Pongamos un
ejemplo: en un examen inicial observamos que en
una mano el caballo apoya el talón primero y en la
otra mano apoya primero la lumbre; este hecho
nos podría indicar que hay una descompensación.
Examen

Si ya hemos observado este caballo con anteriori-

dad y sabemos que hace 3 semanas este caballo
apoyaba una mano igual que la otra, la descom-
pensación que estamos observando en el presen-
de

te puede indicar el comienzo de una molestia.

cojeras en el caballo

Cuanta más información en el tiempo tengamos y

más nos fijemos en cómo apoya el casco, más fia-
bles serán nuestras observaciones posteriores.

Figura 3a, 3b, 3c, 3d. Diferentes detalles del paso
El trote
Es un aire de 2 tiempos simétrico al cual le hemos
dedicado mucha atención como veterinarios. Las valo-
raciones de cojera se realizan casi en su totalidad con
el caballo al trote y muy pocas veces se realizan con

Figura 4. Caballo en trote extendido.
los caballos al paso y al galope. Esto ocurre porque es
un aire simétrico, al ir a más velocidad que al paso se
apreciará mejor una asimetría, resulta más fácil de
valorar que el galope en distintas superficies y posible-
mente porque estamos más habituados. Sin embargo
se obtiene información valiosísima si observamos al
caballo en todos los aires. Para analizar bien un aire
debemos observar el movimiento desde varios ángu-
los: Posicionándonos detrás del caballo, desde un
lado y, si es posible, desde arriba.
El trote puede clasificarse como trote medio, reuni-
do y en extensión (Fig. 4).
Se trata de un aire de bípedos diagonales separa-
dos por un tiempo de suspensión. Nuestro ojo cap-
ta el contacto de la mano y del pie contralateral con
el suelo al mismo tiempo; si grabamos el movimien-
to a alta velocidad, observamos que en algunos
caballos hay primero un contacto con el pie de dicha
diagonal y fracciones de segundo después de la
mano, o viceversa. En el primer caso, esto se
denominaría colocación avanzada del pos-
terior (Fig. 5); en el segundo, colocación
avanzada de la mano (Fig. 6). La pregunta que
sigue es: ¿Puede ser normal? ¿Se trata de una
característica deseable? Para responder a la pre-
gunta pondremos un ejemplo: Una colocación avan-
zada del posterior en un caballo de aptitud doma no
sólo puede ser normal para este caballo sino que
5
Figura 5. Colocación avanzada del posterior.
Figura 6. Colocación avanzada de la mano.
además es una característica muy deseable porque
indica que el caballo está equilibrado y tendrá más
facilidad para realizar movimientos de reunión.
Describiremos a continuación los parámetros line-
ales apreciables o evaluables al trote: la longi-
tud de tranco, que es la distancia recorrida
desde la huella de un casco hasta su siguiente
apoyo en el suelo, la sobrehuella, es decir si la
huella del posterior cubre o sobrepasa la huella de
la mano, y la posible existencia de diferencias
entre D e I. Cuando analicemos los parámetros
temporales, veremos que el trote tiene un ritmo
muy definido en el cual deben ocurrir 2 apoyos a
intervalos iguales y un tiempo de suspensión entre
ellos. El tiempo de apoyo de todas las extremida-
cojeras en el caballo
des debe ser igual. Cuando el caballo se mueve
sobre una superficie dura, al escuchar el trote el
sonido debe ser rítmico de duración similar. En
cojeras muy leves podemos escuchar, antes que
ver, una desigualdad.
Entre los parámetros angulares destacaremos
como muy importante el ángulo de hiperextensión
de los menudillos de las cuatro patas, sobre todo
para detectar asimetrías entre un pie y otro o una
Examende
mano y otra. Es un parámetro muy útil para valo-
rar cojeras. El menudillo de la extremidad coja se
extiende menos en el instante de carga máxima
durante el apoyo. Este instante se produce nor-
malmente cuando la posición de la caña es per-
 6 墌
pendicular al suelo.
Al trote, el movimiento del dorso es más
de flexión y extensión y la latero-flexión es
menor que en el paso.

La musculatura paravertebral estabiliza el dorso

para que la propulsión se transmita hacia delante y
la musculatura abdominal evita que el abdomen se
descuelgue demasiado y que el dorso se hiperex-
tienda. La rotación de la pelvis y el sacro es similar
a lo que ocurre al paso. Nuestro ojo debe ser capaz
de ver este movimiento de flexión y extensión sobre
todo en la zona torácica y tóraco-lumbar. Falta de
movimiento en el dorso indica dolor o bloqueo. El
movimiento del cuello es armónico y hay un doble
cabeceo por tranco que debe ser simétrico- si no lo
es puede ser un buen indicador de cojera.
Figura 7a, 7b. Detalles del galope.

Galope tiempos de apoyo y uno de suspensión.

Es un aire asimétrico con 3 tiempos de apoyo y uno de
suspensión. Tradicionalmente, debido a su asimetría,
se ha considerado un aire poco popular para análisis
Examen
de cojera pero realmente se puede obtener informa-
ción adicional complementaria muy relevante para
dinámico
detectar problemas en dorso, zona
sacra, sacroilíaca y en problemas de posteriores.
lumbo- sistemático
Normalmente lo examinaremos moviendo al animal a
la cuerda, suelto en libertad o montado. De hecho, si
para detectar
podemos hacer las tres cosas mejor, pero en numero-
sas ocasiones requiere un consumo de tiempo adicio-
cambios en los
nal que a veces nos cuesta justificar. Parámetros a aires normales
Examen

evaluar al galope: grado de flexión –extensión lumbo-

sacra (la zona con diferencia más móvil), fuerza de Observar el caballo al salir del box en frío es útil
propulsión de los posteriores, colocación y coordina- para detectar problemas, ya que la inactividad de
ción con el resto de las extremidades, fluidez en tran- unas horas potencia la manifestación de dolor
de

siciones trote-galope o galope-trote, entre otros. El cír- músculo-esquelético. Es algo que sugeriría hacer
cojeras en el caballo

culo debe ser de unos 20 metros de diámetro y la
superficie no deslizante. Evaluaremos las salidas a
galope y si se mantiene el galope sin trocarse o sin
convertirse en galope rotatorio. Notaremos la posición
de la cola, si el animal se defiende retorciendo la cola
o si se bota al salir hacia alguna mano en particular y
también observaremos su actitud.
墌
El galope es un aire asimétrico con 3
siempre que sea posible, sobre todo para exáme-
nes previos a la compra.
En el examen estático habremos hecho nuestros
deberes de inspección, palpación y manipulación
rigurosamente buscando indicios de anormalidades
de conformación, morfológicas, signos de inflama-
ción, dolor, zonas con menor flexibilidad y habremos
anotado todas nuestras observaciones, la respuesta
a pinzas de casco incluida.
Si tuviéramos los medios idóneos en cuanto a insta-
laciones y personal, realizaríamos un posible mode-
lo de examen que expondremos a continuación.
Repito que esto sería en una situación ideal, aunque
reconozco que estas condiciones óptimas se
encuentran contadas veces.
El mismo operario, experimentado y tranquilo, lle-
varía al caballo de la mano idealmente cambiando
de lado a cada pase y a cada aire. La velocidad del
caballo sería similar en cada pase y el terreno,
plano y no deslizante. Si la velocidad varía en cada
pase no se puede realizar una valoración objetiva.
Es interesante poder filmar estos exámenes con 2
cámaras, una capturando el movimiento en el eje
longitudinal y la otra en el eje transversal. Se reali-
zarían planos generales y planos del casco en
detalle para documentar la colocación de los cas-
cos y ver los ángulos de hiperextensión de los
menudillos.
La misma persona realizará todas las manipulacio-
nes y movilizaciones así como los tests de flexión
para obtener resultados más objetivos.
Observación del paso
Sobre terreno duro nos permite apreciar el ritmo
de manera acústica y evaluar mejor la biodinámi-
ca de cada casco. Ejemplo: si hay o no rotación
externa de un casco posterior, si apoya primero el
talón externo o totalmente plano. Sobre terreno
blando, por ejemplo, podremos apreciar si esta
rotación se hace más o menos evidente (este a
veces nos puede dar información sobre la presen-
cia de inestabilidad pélvica).
Si nos colocamos por detrás debemos apreciar el
movimiento armónico y pendular de la grupa de un
lado a otro-como si se tratase del trasero de un pato
oscilando de lado a lado, así como el movimiento
lateral del tronco con mayor claridad hacia T10.
Observaremos también la oscilación de cuello y
cabeza. En cojeras de posteriores veremos que el
arco hacia un lado es menor ó que el caballo cami-
na incurvado de cuello, de tronco ó de grupa consis-
墌
tentemente hacia un lado. 7
Muchas cojeras de los posteriores van
asociadas a una sobre huella más peque-
ña ó negativa; esto significa que la huella
del posterior sobrepasa muy poco ó no
llega a la altura de la huella de la mano y
que además hay diferencia con el poste-
rior contra lateral.
Si el caballo no entra ninguno de los dos posteriores
significa que le duelen los dos posteriores ó le duele
el dorso y camina invertido ó en extensión.
Listaremos algunas anomalías de la locomo-
ción que se aprecian más al paso ó que sólo se
aprecian al paso:
a) La miopatía fibrosa ú osificante de los
músculos semimembranoso y semitendinoso. El
caballo tiene un caminar que se ha comparado al
de un soldadito de plomo en el lado afectado ó en
los dos si ambos lo están. El acortamiento de los
músculos de la parte posterior del muslo debido a
la fibrosis frenan la fase craneal de la protracción
de la extremidad afectada y cortarán el movimien-
to de forma brusca: observaremos una restricción
del movimiento que hará que el arco de vuelo del
casco tenga una caida al suelo en vertical.
b) La ataxia por pérdida de propriocepción debido a
problemas de compresión cervical. Esta alteración
cojeras en el caballo
es más evidente al paso que al trote. En estos
casos si realmente se trata de un problema a nivel
cervical veremos signos en las extremidades ante-
riores y en mayor medida en las posteriores debido
a que los tractos espino corticales de los posterio-
res se sitúan en una zona más superficial de la
médula espinal y son los primeros en afectarse en
caso de inestabilidad ó compresión cervical.
Observaremos incoordinación, diferentes grados
de
de espasticidad, y diferentes grados de debilidad.
Examen
Los signos se pueden agravar cuando forzamos la
posición del cuello.
c) Rotura parcial del peroneo tercio: la parte
 8 proximal de la extremidad avanza primero y la
parte más distal queda retrasada, a veces balan-
ceándose hacia atrás y adelante denotando ines-
tabilidad al avanzar. Estos caballos en el examen
estático pueden extender el tarso y flexionar la
babilla a la vez si se les manipula.
d) Enfermedades musculares metabólicas:
que pueden cursar con una rigidez locomotora
evidente al trote y al paso.
e) Arpeo: se observa una hiperflexión de uno ó dos
posteriores que ocurre sobre todo al arrancar al
paso ó después de hacer recular el caballo. En
casos moderados o avanzados tambien se puede
detectar al trote y galope. Se trata de una dege-
neración de los nervios periféricos, peroneos de
origen tóxico, traumático ó idiopático.
f) Shivers: se puede observar la presencia del
reflejo extensor cruzado, se cree que es una
lesión a nivel de placa neuro muscular. El caballo
al andar puede flexionar un posterior, comenzar a
temblar y dejar rígido el contra lateral.
Observación del trote
Describiremos simplemente los modelos de cojera
por dolor músculoesquelético.
Cojera unilateral de apoyo de una EA
Cuando la EA afectada entra en contacto con el suelo
Examen
el animal intenta no cargar todo su peso y por tanto ori-
gina una menor fuerza de reacción del suelo. El caba-
llo para evitar el impacto frena su aceleración corpo-
ral antes del contacto doloroso con el suelo y la mus-
de
culatura del tronco y el antebrazo se prepara para
cojeras en el caballo
amortiguar el golpe y todo en conjunto actúa como un
muelle. El cuello y la cabeza actúan de balancín así
mismo para transferir peso hacia la otra extremidad.
En un modelo experimental para el estudio de cojeras
que induce dolor mediante la colocación de una herra-
dura con un tornillo que ejerce presión sobre la suela
( Buchner 95) se vio que en este modelo los caballos
tenían un tiempo de apoyo mayor de la extremidad
coja, un poco en contradicción de lo que nos suele
墌
parecer clínicamente al principio.
Al contactar la EA afectada con el
suelo el animal intenta no cargar todo su
peso y originar una menor fuerza de reac-
ción del suelo. El cuello y la cabeza actú-
an de balancín transfiriendo el peso hacia
la otra extremidad.
El trote en círculos agravará las cojeras de apoyo
generalmente cuando la extremidad afectada está
dentro del círculo. Hay excepciones por ejemplo cuan-
do es el talón interno ó medial el que duele. En este
caso el apoyo será más doloroso cuando el caballo
lleve esa extremidad por fuera del círculo. Muchas
veces cojeras de la parte más distal de la extremidad
suelen agudizarse cuando la extremidad afectada
está dentro del círculo: por ejemplo en casos de artro-
sis de las articulaciones interfalángicas. Excepciones:
un hematoma ó una escarza en el talón medial.
墌
Como norma general la cojera se agra-
va cuando la extremidad afectada está
dentro del círculo, aunque existen excep-
ciones como el dolor localizado en el talón
medial, en el ligamento suspensor o en los
ligamentos colaterales internos.
Las cojeras del ligamento suspensor del menudillo
suelen apreciarse más cuando la extremidad está
fuera del círculo. Esto puede ser consecuencia de
dolor durante la extensión de toda la extremidad;
cuando el caballo trota en círculos la extremidad de
fuera tiene que extender un poco más en la fase de
vuelo. Así mismo, un proceso doloroso en la zona
axial ( ligamentos colaterales internos) de la extremi-
dad podría generar una cojera más apreciable cuan-
do ésta va por fuera.
墌
Las cojeras de apoyo son aquellas que
resultan de los esfuerzos del caballo en
minimizar el dolor durante la fase de con-
tacto del casco de la extremidad afectada
con el suelo.
Las compensaciones resultantes pueden englobarse
en cambios en el patrón temporal del tranco, en
modificaciones del apoyo del casco ó de la biodi-
námica de éste, cambios en los ángulos articula-
res y adaptaciones del movimiento del cuello y de
la cabeza. En general la fase de apoyo del tranco de
la extremidad coja aumenta, la propulsión por parte
de la extremidad afectada disminuye debido a la
molestia y consecuentemente la fase de suspensión
que sigue se ve reducida. El arco de vuelo que descri-
be el casco de la extremidad afectada puede no variar
demasiado pero tiene tendencia a ser más bajo que el
arco de vuelo del casco de la extremidad sana y esto
se aprecia a veces con mayor frecuencia en las coje-
ras de los miembros posteriores. En este tipo de coje-
ras de apoyo esto supone también un mecanismo de
reducir el dolor ya que si el desplazamiento vertical del
casco es menor, el impacto será también más bajo. En
cojeras de apoyo de las manos se puede apreciar una
disminución en la fase de retracción del tiempo de
apoyo ( sobre todo en cojeras causadas por dolor en
la zona podotroclear-que como hemos mencionado
antes puede apreciarse bien al paso). En cojeras de
apoyo de los miembros posteriores se aprecia una dis-
minución en la fase de protracción del tiempo de
apoyo. Esto ocurre porque el instante de máxima
carga durante el apoyo es diferente para los miembros
anteriores y posteriores: la carga máxima ocurre en la
fase posterior del tiempo de apoyo en las manos y en
la fase anterior para los pies (esto es debido a su colo-
cación según el centro de gravedad).
Cuando consideramos los cambios angulares, lo pri-
mero que podemos reconocer es una disminución
en el grado de hiperextensión del menudillo en la
mano afectada (más apreciable) y un aumento de
hiperextensión del menudillo de la mano sana (apre-
ciable en cojeras marcadas)
墌 extremidad está en el aire, son extremadamente
Los cambios angulares más notorios
son la disminución de la hiperextensión
de la mano afectada y su aumento en la
mano sana.
En general todas las articulaciones de la parte supe-
rior de la extremidad cambiarán para crear un efec-
to muelle de amortiguación y las de la parte distal
reflejarán el resultado de la aplicación de menor 9
carga sobre el casco de la mano afectada. Como
ejemplo veremos que la flexión de hombro y de cor-
vejón aumentan durante la fase de apoyo de la
extremidad afectada. Esto es consecuencia de una
mayor acción por parte de la musculatura extensora
que frena el impacto para que la carga se aplique de
manera más gradual y así disminuir la fuerza de
impacto del casco sobre el suelo.
墌
La velocidad y la aceleración del cuello
y la cabeza son indicadores muy útiles
para medir las cojeras con cálculos cinéti-
cos y por acelerometría.
En los caballos sanos al trote se ve un patrón sinusoi-
dal perfecto para todos los puntos del cuerpo que
estén situados en el eje central, desde la cabeza,
hasta la cruz y la mitad de la grupa o el sacro. Para el
observador que empieza, la valoración de los movi-
mientos de la cabeza es una manera útil y fácil de ver
las cojeras, ya que la asimetría de movimientos de
cuello y cabeza aumenta a medida que la cojera se
acentúa. El desplazamiento vertical de la cabeza tien-
de a disminuir hacia el lado afectado y a aumentar
hacia el lado sano. Cuando la cojera de una mano es
muy grave, la cabeza y el cuello incluso llegan a ele-
varse antes de que la mano dolorida apoye. Estudios
con acelerómetros han descrito que la aceleración
vertical de la cabeza está disminuida durante la fase
de apoyo de la mano afectada, lo cual está correlacio-
cojeras en el caballo
nado con la disminución de la fuerza de reacción ver-
tical del suelo de la extremidad afectada.
Las cojeras de elevación o durante la fase
de vuelo, aquellas que originan cambios cuando la
raras. Las causas principales de este tipo de proble-
ma serían una anquilosis de una articulación, una
paresis de un nervio (por ejemplo el radial) o una
de
cuestión mecánica como la miopatía fibrótica que
Examen
hemos mencionado en un apartado previo.
Más frecuentes son las cojeras mixtas donde se
pueden ver cambios del patrón locomotor tanto en la
 10 fase de apoyo como de vuelo. Ejemplos de éstas serí-
an problemas articulares de corvejón, babilla, carpo y
hombro. Los patrones temporales difieren entre ellos.
La fase anterior de vuelo está acortada generalmente
en problemas de hombro y de corvejón.
墌 de la extremidad suele dar una cojera de
Las cojeras de elevación son muy
raras. Más frecuentes son las cojeras mix-
tas donde se pueden ver cambios del
patrón locomotor tanto en la fase de
apoyo como de vuelo.
En cuanto a los patrones angulares, también pue-
den ser variables, ya que en algunos casos se
observa disminución de la flexión (corvejón, carpo,
menudillo). La extremidad afectada da la sensación
de moverse con rigidez y el arco de vuelo del casco
es más bajo. Esto es claramente diferente de lo que
ocurre en una cojera solamente de apoyo, donde el
ángulo del corvejón indica una mayor flexión duran-
te la fase de apoyo para amortiguar el impacto.
Generalmente, hay una tendencia que apreciamos
al examinar caballos cojos: la afectación de las
zonas más distales de la extremidad suele dar una
cojera de apoyo y la afectación de articulaciones o
zonas más proximales, una cojera de elevación o
una cojera mixta. También hay cojeras que se evi-
dencian más en círculos cuando la extremidad afec-
tada va por fuera del círculo y con una disminución
de la protracción: como ejemplos podemos poner
una cojera por desmitis del ligamento suspensor del
Examen
menudillo o tendinitis de un flexor digital. Cojeras de
codo y de hombro también se acentúan cuando la
extremidad va por fuera y en estos casos la falta de
protracción de la mano es aún más evidente. De
de
todas maneras, no hay estudios hasta el momento
cojeras en el caballo
que hayan podido identificar un patrón de movimien-
to típico para cada cojera. Esto es debido a la vincu-
lación directa de varias articulaciones y a la falta de
libertad de las extremidades que se mueven más en
2 dimensiones. Con el análisis cinemático sólo o el
análisis cinético sólo tampoco se ha podido estable-
cer un criterio sobre la localización de las cojeras.
Es posible que en el futuro, con los estudios biome-
cánicos que combinan la cinemática y la cinética y
que pueden llegar a medir momentos de fuerza
sobre cada segmento y la potencia de ciertos grupos
musculares, podamos obtener más información.
墌
La afectación de las zonas más distales
apoyo y la afectación de articulaciones o
zonas más proximales, una cojera de eleva-
ción o una cojera mixta.
Cojera bilateral de las dos EEAA
Como los mecanismos de compensación son más
visibles en cojeras unilaterales, cuando el caballo
trota en línea recta a veces sólo apreciamos rigidez
y acortamiento del tranco. Esto, si no conocemos al
caballo, puede enmascarar el problema, ya que a
priori en la observación de las cojeras lo que llama
la atención es la asimetría. Por ello reiteramos lo
que decíamos al principio sobre la importancia de
conocer el movimiento esperado de un cierto tipo de
caballo. El caballo, ¿Tiene el tranco corto porque es
así siempre o porque su raza se mueve así, o real-
mente puede tener un problema bilateral? El cuello
y la cabeza pueden ser simétricos, pero si miramos
mejor posiblemente nos demos cuenta que se man-
tienen rígidos y en una postura forzada. Cuando el
caballo trota en círculos se descompensa el sistema
y podremos apreciar una agudización de la cojera
primero a una mano y luego a la otra. En procesos
bilaterales crónicos es posible que el grado varíe
según el momento o incluso según el día en que se
observe el caballo en movimiento. Si realizamos
anestesias perineurales e intraarticulares para loca-
lizar la zona de dolor, también podremos desenca-
denar que la cojera de la EA contra-lateral a la anes-
tesiada sea más evidente.
Cojera unilateral de una EP
Los conceptos que hemos mencionado sobre coje-
ras de apoyo, de elevación y mixtas son aplicables
al miembro posterior. La localización de la cojera
puramente a través de la observación se complica
por el hecho de que algunas articulaciones están
emparejadas, como es el caso de babilla y corvejón
por medio del aparato recíproco. En estos casos, la
disminución del rango de movimiento de una articu-
lación dolorida no se puede diferenciar de la otra
articulación vecina porque el movimiento o la falta
de movimiento de una implica el movimiento o la
falta de movimiento de la otra.
En algunos casos, la hemipelvis de la EP afectada
tendrá un desplazamiento vertical mayor, siendo el
punto más alto justo en el instante de contacto inicial
del casco. Esto puede ocurrir en casos de afectación
de zonas más proximales. En algunos caballos, toda
la hemipelvis del lado afectado baja más de manera
consistente y esto quizás se observe más en cojeras
de apoyo o mixtas. La sobrehuella del lado afectado
es menor, la fase anterior de vuelo es más corta y el
tiempo de suspensión que sigue al apoyo de la dia-
gonal afectada es más pequeño.
墌 Para poder valorar este movimiento, es generalmen-
En las cojeras de una EP, la hemipelvis
del lado afectado suele tener un desplaza-
miento vertical mayor.
Otro punto a notar es que el desplazamiento verti-
cal del tronco es menor, ya que al haber menor
fuerza de reacción del suelo la propulsión hacia
adelante y hacia arriba será lógicamente menor. En
cojeras graves, la cabeza y el cuello descienden
cuando la diagonal afectada apoya, con lo cual
puede mimetizar una cojera de la mano ipsilateral.
Para salir de dudas, es necesario a veces hacer
anestesias tronculares.
Cojera bilateral EEPP
Como en la cojera bilateral de los miembros ante-
riores, el diagnóstico es difícil sobre todo en casos
leves y en aquellos caballos en los que no conoce-
mos su movimiento habitual. A veces solamente
apreciamos que el caballo arrastra los cascos tra-
seros, que las extremidades posteriores están
más rígidas y que la fase anterior de la fase de
vuelo está acortada ya que la huella de los cascos
posteriores no cubre la de los anteriores. Si vemos
el caballo trotar en círculos seguramente se agra-
varán los signos de cojera. Las flexiones de 1
minuto de cada zona y la evaluación posterior del
trote nos serán de ayuda para intentar descifrar
qué zonas están más afectadas. 11
Cojeras de 3 y 4 extremidades
Ocurren con mayor frecuencia de lo que el propie-
tario y entrenador creen y aquí el diagnóstico ya es
un auténtico reto sobre todo si las molestias son
crónicas. A veces lo único que ellos han detectado
es que el rendimiento del caballo ha bajado y resul-
ta para ellos difícil creer que el caballo tenga múlti-
ples problemas. También resulta difícil priorizar la
magnitud de cada problema y saber si es causa o
compensación, aunque realmente a veces eso ya
no importa tanto en el camino de la curación.
Hablando de manera trivial, hay que curar tanto a la
gallina como al huevo.
Observación del galope
te necesario hacerlo en círculos a la cuerda o en
libertad en un picadero. Si el caballo es de silla es
importante poderlo ver cuando está montado.
Cuando hay falta de impulsión a galope, este aire se
puede convertir en 4 tiempos en vez de tres. En una
reprise de doma, este fenómeno se penaliza salvo
que se trate de una pirueta a galope, en cuyo caso
es normal. Si apreciamos un movimiento de cuatro
tiempos en un círculo grande o en una recta a pesar
de impulsar un poco más al caballo, esto puede indi-
car problemas sobre todo relacionados con la zona
lumbosacra o toracolumbar. Con problemas en la
zona lumbosacra se puede ver falta de flexión y
extensión de todo el dorso, propensión al galope en
cojeras en el caballo
4 tiempos antes mencionado, falta de impulsión y
pérdida de la reunión. Generalmente, cuando exis-
ten bloqueos o dolor en la zona sacroilíaca, los
caballos tienden a colocar los posteriores más jun-
tos, a perder la coordinación entre las extremidades
y a perder la transmisión del impulso al tronco.
墌
La observación de un galope a 4 tiem-
pos puede indicar problemas a nivel de la
de
zona lumbosacra o toracolumbar.
Examen
Si el veterinario es jinete, montar los caballos al
galope puede ser una herramienta más para notar
alteraciones que posiblemente pie a tierra no se
 12 aprecien con tanta claridad. Ver un recorrido de salto
de caballos con posibles problemas de dorso o
sacroilíacos también aporta información adicional:
Problemas en los fondos, entrar o salir siempre a
una mano, rehúses, galope rotatorio o entrar y salir
de los obstáculos con un posterior cambiado, movi-
mientos de la cola, etc. pueden ser manifestaciones
de molestia en estas zonas.
Pruebas
específicas
Test de propiocepción
Hay varias maneras de comprobar la propiocepción
del caballo, desde una simple observación al paso
hasta un test neurológico completo.
Hacer un recorrido sobre superficies de terreno
variado, colocar barras de tranqueo en el suelo y ver
cómo las negocia, hacer subir y bajar cuestas al
caballo, incluso variando la posición del cuello si
sospechamos de una inestabilidad cervical nos dará
indicadores de si la propiocepción es correcta.
Otra prueba sería realizar un recorrido en zig-zag
subiendo y bajando un bordillo y describir círculos
muy cerrados en un plano inclinado. Si detectamos
anomalías como ataxia, espasticidad o debilidad o
cuestionamos alguna de las pruebas, realizar un test
neurológico completo estaría indicado.
Examen
Test de flexión
Un test de flexión, que quizás debería llamarse
más bien un test manipulativo, es una forma de
exacerbar un problema que a veces puede ser
de
subclínico. La mayoría de las veces se mantiene
cojeras en el caballo
una postura de la extremidad durante 1 minuto y
acto seguido se hace trotar el caballo. Como vere-
mos, no son específicos y solamente son una
ayuda a la hora de localizar el origen de la cojera.
Son utilizados con mucha frecuencia por la mayo-
ría de los veterinarios de caballos a la hora de
hacer un examen de cojera. Veremos que existe
cierta variabilidad cuando consideramos la fuer-
za de aplicación y el intervalo de tiempo
durante el que se aplica esta fuerza. Cada
veterinario utiliza su fórmula particular y aunque
casi todo el mundo es consciente de que la fuerza
y el tiempo influyen en los resultados, la verdad es
que no se han hecho muchos esfuerzos para uni-
ficar criterios. En un estudio realizado por Keg et
al en 1997 utilizando un dinamómetro, se vio que
existían diferencias notables entre distintos opera-
dores; se detectaron oscilaciones de valores entre
150 y 110 Newtons. Si el mismo operador hacía
varios tests a distintos caballos, el coeficiente de
variabilidad era relativamente pequeño (alrededor
del 12%). Concluyeron en este estudio que en las
evaluaciones de cojeras realizadas por este
mismo individuo los resultados eran totalmente
válidos; en cambio, no lo eran los tests hechos por
diferentes operadores sobre un mismo caballo. El
problema surge a veces en exámenes de compra
donde el resultado de un test de flexión puede ser
decisivo para la transacción. También hay diferen-
cias en los resultados entre un test de 1 minuto o
de 2. Hasta hace pocos años, no había nada publi-
cado sobre la necesidad de estandarizar
los tests clínicos. En cada ámbito ecuestre
deportivo, hipódromo, concurso de obstáculos,
doma clásica, y en cada ámbito profesional, sea el
mundo de la clínica privada o el mundo académi-
co, según la escuela o el país, los hábitos difieren.
Por este motivo, la interpretación de los resultados
es difícil o puede generar controversia a la hora de
interpretar resultados de pruebas de compraventa
tanto para el comprador como para el vendedor u
otros veterinarios que éstos puedan consultar
como segunda opinión. Esto se agrava especial-
mente en el comercio de caballos de deporte de
valor económico elevado. En algunos casos, los
propietarios resienten el hecho de que se realice
una prueba demasiado ardua a un caballo atlético
de alta competición y en general el público pide
una manera más objetiva de examinar los caba-
llos. Saber qué estructuras anatómicas están invo-
lucradas en cada test de flexión tampoco es tarea
que haya sido investigada a fondo de una manera
científica aparte de algún artículo suelto (Meijer
2001) que examina la flexión más distal de la
extremidad. En conclusión, es necesario que dis-
tintas asociaciones de veterinarios de caballos
sugieran un protocolo mucho más estandarizado
que se pueda utilizar de manera universal por lo
menos para exámenes clínicos hechos para com-
pañías aseguradoras y exámenes de compra para
facilitar la comunicación y la eficiencia profesional.
Qué estructuras pueden estar involucradas
en cada flexión o manipulación: articulaciones,
ligamentos, tendones, tejido subcutáneo, piel, etc.
Qué papel juega cada estructura: conside-
remos la flexión distal de una extremidad anterior.
La denominamos generalmente flexión del menu-
dillo. Si vamos un poco más allá, nos damos cuen-
ta que, aparte de la articulación en sí, que proba-
blemente juega un papel importante según un
estudio hecho en el 2001 por Meijer, hay otras
estructuras que se ven comprometidas, como liga-
mentos, tendones, vainas sinoviales, subcutáneo
y piel. Ejemplos de ello pueden ser una flexión dis-
tal positiva debido a una infección de la dermis en
la zona de la cuartilla o al desgarro de un ligamen-
to sesamoideo distal.
La edad juega un papel importante así como la
carga de trabajo que el caballo ha realizado durante
su vida deportiva.
Cómo podemos estandarizar los tests de flexión
1) Conociendo la fuerza que ejerce cada uno. Hay
la posibilidad de realizar pruebas con dinamóme-
tros. Por tanto, obteniendo información de cuán-
ta fuerza se puede realmente aplicar.
2) Aplicar los mismos intervalos de tiempo
bilateralmente.
3) Aplicar la misma fuerza (150 Newtons; 28 N de
momento de fuerza sobre la articulación MCF).
4) Medir el rango de movimiento angular.
5) Analizando pases del caballo realizados a la
misma velocidad y con el animal manejado por la
misma persona.
6) Utilizando clasificaciones de cojeras que estén
bien descritas y que sean de dominio público
como la de Adamʼs, que va del 0 al 4, o la de la
13
Figura 8. Flexión disminuida del menudillo.
AAEP, que oscila del 0 al 5.
Cuáles son los mecanismos mediante los cuales la fle-
xión de una articulación, y pongamos como ejemplo
de nuevo la del menudillo, puede generar molestia
(Fig. 8).
1) Se produce una carga no fisiológica: el menudillo
se carga en condiciones normales en extensión y
nosotros estamos creando una flexión forzada en
descarga.
2) Tensión sobre los mecanorreceptores de la cáp-
sula articular dorsal.
3) Molestia porque inducimos un aumento de la pre-
sión intraarticular y también intraósea.
Si al flexionar detectamos una disminución del
cojeras en el caballo
ángulo normal y notamos que el tejido es menos
elástico y además esto va acompañado de una
molestia inmediata, nos sugiere un cambio prima-
rio de la articulación en cuestión. Se ha comproba-
do también en un estudio hecho por Strand en
1995 que hay una buena correlación entre la pér-
dida de elasticidad y la disminución del rango de
movimiento.
de
Flexión de la región carpiana
Examen
No es selectiva para cada articulación carpiana y
compromete todas las estructuras del canal carpiano.
Flexión distal de la EP
Aunque se realice en una posición que intenta no
 14 involucrar otras articulaciones, es difícil en el poste- todo en las articulaciones sacroilíacas.
rior aislar estructuras, ya que están todas en cone- Flexión de la babilla
xión mediante el aparato recíproco. No es una flexión Se trata de una modificación de la anterior en la
selectiva porque puede afectar a las articulaciones que desplazamos el calcáneo ligeramente más
superiores y también agravar problemas de suspen- hacia atrás y hacia el isquion ipsilateral y de esta
sor desde su origen hasta sus ramas de inserción, manera flexionamos más la babilla en sí. (Fig. 10)
los ligamentos sesamoideos, los flexores y cualquier Aunque no debemos olvidar que con esta maniobra
lesión en la parte posterior de la caña trasera. seguimos estresando todas las articulaciones de la
extremidad posterior y estamos induciendo una
Flexión del tarso rotación hacia adelante del ileon o una cotranuta-
En la manipulación debemos colocar la caña para-
lela con el suelo y mantener la posición. Si forzamos
más hacia arriba estaremos poniendo fuerza excesi-
va (Fig. 9). En general, un corvejón normal puede
flexionar unos 10 grados más- si esto duele o el
tacto del tejido resulta poco elástico, puede indicar la
existencia de problemas en la zona. Estructuras
comprometidas: todas las articulaciones del poste-
rior y tejidos blandos. Hay que tener en cuenta tam-
bién el efecto de carga sobre la extremidad contra-
lateral. Esto es aplicable a todas las pruebas de fle-
xión. Si después de un test de flexión de 1 minuto el
caballo va más cojo de la extremidad contralateral,
significa que existe un problema de apoyo de la
extremidad en contacto con el suelo o bien que se
Figura 10.
ha acentuado el dolor por inestabilidad pélvica sobre
ción de la pelvis.
Manipulaciones más específicas
Las manipulaciones que mencionaremos ahora
ya fueron descritas en la ficha anterior y las utiliza-
mos en el examen músculoesquelético con el caba-
Examen

llo en la estación, pero cualquiera de ellas se puede

utilizar como test para intentar aumentar visualmen-
te una cojera.
de

Miembro anterior
cojeras en el caballo

Adducción y abducción del antebrazo

Flexión del hombro para evaluar el bíceps braquial y

la bursa bicipital, la articulación en sí y estructuras
musculares asociadas.

Adducción y abducción de las articulaciones del carpo

Extensión total de la extremidad anterior que pone
Figura 9. Test de flexión del tarso. tensión en las estructuras de soporte caudales de
la extremidad.
Evaluación de la protracción y retracción activas que
se consigue llevando la extremidad en el aire y sin
poner tensión en las estructuras a una posición de
protracción y después de retracción e inducir o
esperar hasta que el caballo reaccione y mueva la
extremidad y en ese momento valorar si el caballo
siente alguna molestia al generar esta acción.
Y en resumen cualquier manipulación que pueda
haber creado una molestia en el examen estático
podría utilizarse en algunos casos como un test
específico.
Miembro posterior
Test de Churchill, que con la extremidad en el aire
consiste en presionar la cabeza del segundo metatar-
Figura 11.
siano y las articulaciones distales del tarso (Fig. 11).
Otra posibilidad es poner presión sobre el origen del
ligamento suspensor.
Adducción del muslo: tensa toda la musculatura
lateral, la bursa trocantérica del fémur, la cadera y
parte de la babilla.
Adducción, abducción de las demás articulaciones
lo cual nos sirve para detectar molestias en los liga-
mentos colaterales.
Inducción del movimiento rotuliano sobre la tróclea
del femur. Esto se consigue con el caballo en la esta-
ción y bien aplomado colocando la porción tenar de la 15
mano sobre la rótula y empujando hacia arriba para
hacer que la rótula se desplace proximalmente hasta
engancharse en el labio medial de la tróclea del
femur. Posteriormente podemos evaluar cómo se
desengancha esperando a que el caballo lo haga solo
o haciendo que de un paso hacia adelante o despla-
Figura 12. Test de fijación de la rótula.
zando su peso mediante tensión de la cola (Fig 12).
Test de fijación de la rótula.
Test del cajón: induciendo un movimiento caudal
de la cresta de la tibia con respecto a los cóndilos
del fémur.
Test de oscilación: se puede hacer en la estación ó
al paso y en ese test se induce oscilación del tren
cojeras en el caballo
posterior mediante tensión sobre la cola hacia un
lado y otro, generalmente se realiza en el momento
del paso en que el caballo está apoyando un poste-
rior. Esta prueba nos sirve para detectar debilidad en
el tren posterior o dolor en articulaciones o estructu-
ras muy proximales.
Inducción de nutación y contranutación de la pelvis:
En la primera levantaremos el posterior y tiraremos
de
hacia adelante en extensión hasta que la caña esté
Examen
paralela con el suelo y el casco esté a la altura del
codo-esto hace que el íleon rote hacia atrás, la por-
ción más cercana al isquion baja y las tuberosidades
sacras suben, lo mismo que ocurre cuando un caba-
 16 llo entra mucho los posteriores debajo de la masa
corporal (Fig. 13). En la otra extenderemos toda la
extremidad en extensión hacia atrás y arriba e indu-
ciremos una rotación de la pelvis hacia abajo y hacia
adelante (se recomienda precaución al realizar esta
Figura 13. Inducción de nutación pélvica
Examen
de
Figura 14. Caballo partiendo para saltar y movimiento pélvico hacia atrás.
cojeras en el caballo
prueba)(Fig. 14).
Grados
de cojera
La que se utiliza con frecuencia es la descrita por la
Asociación Americana de veterinarios de caballos o
AAEP, que incluye una graduación de 0 a 5 grados de
cojera. En Inglaterra se utiliza una escala que va de 0
a 10 grados de cojera. En ambas, 0 es equivalente al
movimiento de un caballo sano, en cambio 5 en el
AAEP y 10 en la inglesa describen la cojera máxima:
el caballo no apoya la extremidad. Si hay una cojera
de varias extremidades se puede dar un grado en con-
creto para cada extremidad, anotando y diferenciando
cada tipo de terreno y si el movimiento es en línea
recta o en círculos. Estos detalles pueden ayudarnos
a deducir mejor la localización de la molestia. Por
ejemplo, un caballo que tenga un síndrome podotro-
clear bilateral podría presentar una cojera de 1 sobre
5 según la escala del AAEP en línea recta sobre terre-
no duro, y de 0,5 sobre blando; esto quiere decir que
el terreno duro exacerba la cojera. Al moverlo en cír-
culos en duro puede presentar una claudicación de 2
sobre 5 de una mano y de 1 sobre 5 de la mano con-
tralateral. Al evaluar los círculos a la otra mano el
patrón puede cambiar.
Las dos escalas descritas se centran en el movi-
miento al trote y mencionan de pasada las claudica-
ciones al paso. Desde nuestro punto de vista hay
todavía la necesidad de describir mejor los grados
de cojera al paso y al galope.
Evaluación
de los caballos
sobre un tapiz
rodante
Se utiliza en algunos centros para evaluar cojeras a
alta velocidad en trotones y ambladores si no hay la
posibilidad de realizar el examen de cojera en buenas
condiciones en el hipódromo. El movimiento del caba-
llo en el tapiz no es el mismo que sobre el suelo y hay
que tenerlo en cuenta a la hora de hacer la valoración
sobre todo si el caballo no está bien habituado a
moverse sobre el tapiz. Sobre éste los caballos tienen
un desplazamiento vertical del tronco menor durante
la fase de suspensión y por tanto ésta se verá reduci-
da, y la retracción de las extremidades será mayor
debido al desplazamiento del tapiz hacia atrás. Una
ventaja que puede tener es que la velocidad se puede
mantener constante (recordemos que cambios en la
velocidad pueden hacer variar la manifestación de la
cojera) y que podemos evaluar al caballo desde muy
Imagen obtenida de una grabación de video de alta velocidad
Figura 15 y 16. Caballos moviéndose sobre un tapiz rodante.
cerca.(Fig. 15 y 16).
Test con caballo montado o
enganchado
Algunas cojeras con el peso del jinete se acentúan y
en general suele ser una buena idea valorar los caba-
llos deportivos montados ó enganchados (en algunos
trotones y ambladores algunas cojeras ó alteraciones
en la marcha, como podría ser que se desvíen hacia
un lado del carro ó que se apoyen más en una rienda,
solo se aprecian a alta velocidad). En algunos casos
también se pueden realizar los tests de flexión con el
jinete arriba.
17
Las cojeras de rienda son aquellas que se
generan por una mala monta como puede ser un
contacto excesivo con el filete ó una excesiva
restricción de cuello o cabeza al paso. Hace falta
descartar problemas físicos que puedan locali-
zarse en las barras, en la boca, los dientes, en la
articulación témporo-mandibular o en el aparato
hioideo. Estas anormalidades en la marcha a
veces ocurren cuando el jinete pide algún movi-
miento para el cual el caballo no está todavía físi-
camente preparado. El caso más frecuente en
doma clásica se ve en la realización del paso
corto ó reunido para el cual la musculatura intrín-
seca de la columna y cuello debe estar muy acti-
vada. Si no lo está comienza a verse una latera-
lización del paso o pérdida del ritmo de cuatro
tiempos –esto se denomina también ambladura
(Fig. 17a y 17b) .
En pruebas de doma clásica pocos son los caba-
llos que mantengan un ritmo de 4 tiempos y en
algunos se observa una tendencia a moverse en
bípedos laterales. En algunos caballos puede
incluso acortarse artificialmente la protracción o
retracción de una extremidad. Para diferenciar una
cojera de rienda de una molestia física es necesa-
rio comparar el movimiento del caballo montado
con el movimiento en libertad. En caballos que
lateralicen el paso cuando son llevados de la
cojeras en el caballo
Examende
Figura 17a. Ejemplo de lateralización del paso.
 18 las cojeras para con ello ser más exactos en el
diagnóstico, tratamiento y pronóstico.
c) Reconocer que hay diferencias entre patrones de
cojera de apoyo, elevación y mixtas, pero saber
que no existe todavía un patrón de cojera para
poder localizar eficientemente el origen de una
cojera, debido principalmente a que hay poca
libertad de movimiento desde el punto de vista
anatómico de las extremidades.

d) Las compensaciones que ocurren como conse-

cuencia de una cojera original pueden dar
pie a confusión tanto en el diagnóstico como
Figura 17b. Otro ejemplo de lateralización del paso. en el tratamiento.

mano también hay que descartar un problema de

e) Reconocer la poca especificidad de los
dorso.
Conclusiones tests de flexión y de manipulación pero tam-
bién su importancia y por tanto mantener la pro-

Para terminar queremos resaltar varios puntos que ficiencia clínica.

son relevantes para el avance en la detección de los

problemas de locomoción: f) Necesidad de unificar criterios en lo que
concierne a los tests de flexión y grados de

a) Creer en la importancia de conocer a fondo el cojera.

movimiento de los caballos sanos dentro

de cada modalidad y teniendo en cuenta las par- g) Reconocer la necesidad de realizar mejores

ticularidades de cada raza. analisis cinéticos y de esa manera objetivizar

parámetros.

b) Creer en la importancia de la localización de

h) Necesidad de la realización de anestesias peri-
Examen
de
cojeras en el caballo

Lecturas
neurales e intaarticulares para la localización de
la cojera.
recomendadas
1. Keg PR, van Weeren PR, Schamhart HC et al.
1997. Variations in the force applied to flexion tests of
the distal limb of horses. Vet Rec 141 435-438.
2. Meijer MC, Busschers E, van Weeren PR. 2001.
Which joint is most important for the positive outcome
of a flexion test of the distal forelimb of a sound horse?
Eq Vet Edu, Dec 414-418.
3. Keg PR, van Weeren PR, Back W et al. 1997.
Influence of the force applied and its period of appli-
cation on the outcome of the flexion test of the distal
forelimb of the horse. Vet Rec 141, 463-466.
4. Strand E, Martin GS, Crawford MP et al. 1995.
Intraarticular pressure, elastance, and range of
motion in flexion of the equine metacarpophalange-
al joint. Am J Vet Res 56, 10 1362-1371.
19
5. Strand E, Martin GS, Crawford MP et al. 1995.
Intraarticular pressure, elastance and range of motion
in healthy and injured racehorse metacarpophalangeal
joints. Eq Vet J 30, 6, 520-527.
6. AAEP. Definition and classification of lameness. In:
Guide for veterinay service and judging of equestrian
events. Lexington,Ky 1991; 19.
7. Stashak TS (1987)Adamʼs lameness in horses, 4th
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8. Licka T, Peham C. An objective method for evalua-
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1998 Eq Vet J Sep 30(5): 412-5.
9. Buchner FH.1991. Gait adaptation in lameness.
In” Equine Locomotion”. Back W and Clayton H. 251-
279
cojeras en el caballo
Examende
 5442007
cojeras en el caballo

20
Examen de