ORDENANZA SOBRE PROMOCION DE LA CONVIVENCIA ESCOLAR EN EL

MUNICIPIO CARRIZAL
EXPOSICIÓN DE MOTIVOS
“La escuela no puede ser reflejo de la sociedad que tenemos, la escuela debe ser
reflejo de la sociedad que queremos”.
Este pronunciamiento tomado del ideario pedagógico del Maestro Luis Beltrán Prieto
Figueroa (1902 – 1993), sirve de fundamento doctrinario, social y político para que el
Municipio Carrizal contribuya con su participación activa, en la promoción y
estímulo de la práctica de convivencia y no violencia entre los niños y jóvenes
estudiantes en el seno de las comunidades escolares, como parte de la educación
integral de la personalidad de cada ser humano como sujetos de derecho, en una
sociedad democrática, participativa, solidaria y amante de la paz.
Es sabido por el registro de casos que llevan instituciones de defensa y protección de
derechos de niños, niñas y adolescentes, e investigaciones pedagógicas y sociales así
lo demuestran, que diversas formas de violencia, intimidación y acoso escolar se
acrecientan en el seno de los recintos escolares y en las comunidades circundantes, en
los que se ven involucrados estudiantes en sus relaciones interpersonales, generando
un clima limitativo para la convivencia, la paz, la dignidad y el ejercicio de los valores
de respeto, solidaridad, ciudadanía, tolerancia, corresponsabilidad, compromiso
solidario, reconocimiento del otro y aceptación de la diversidad.
El fenómeno de la inseguridad y la violencia en todas sus manifestaciones, ha
arraigado en la ciudadanía una especie de sufrimiento social, como parte de un
proceso de fragmentación y desinstitucionalización de la sociedad en su conjunto,
afectando también a las comunidades educativas, y en su seno, a los más vulnerables:
los estudiantes niños, niñas y adolescentes.
Esta situación indeseable de acoso escolar existente en muchas escuelas, liceos y
colegios del país, que altera y tergiversa la personalidad de nuestros estudiantes,
puede ser reflejo de la fractura de los núcleos familiares, de la influencia negativa de
la conflictividad del entorno social y de la sociedad en general, lo cual requiere y
demanda de todos los actores sociales e institucionales, una acción integral y
concertada de reivindicación de la convivencia y la paz escolar, como medios para
alcanzar los fines del Estado, establecido en el Artículo 3 de la Constitución
Bolivariana, cual es: “la defensa y el desarrollo de la persona y el respeto a su
dignidad, el ejercicio democrático de la voluntad popular, la construcción de una
sociedad justa y amante de la paz, la promoción de la prosperidad y bienestar del
pueblo y la garantía del cumplimiento de los principios, derechos y deberes
reconocidos y consagrados en esta Constitución”
Por otra parte, los fundamentos éticos en la sociedad posmoderna mundial están en
crisis; esta crisis es producida y a la vez productora, según Morin, E. (2006), por
varias situaciones, entre ellas se pueden mencionar: deterioro del tejido social;
degradación de las solidaridades humanas tradicionales; debilitamiento a lo interno
de las mentes del imperativo comunitario y colectivo; el egocentrismo como culto
exagerado de la personalidad, además de creer que son objeto de atención constante
sin importar el resto de la sociedad, negativamente acrecentado por encima del
espíritu altruista; el divorcio entre la realidad social y el individuo; la sobrevaloración
del dinero y el poder en todas sus manifestaciones.
Muchos de los problemas de convivencia social, señala Marrero, J. (2019), no son
causados por la inexistencia de leyes y normas que lo regulen, ni por omisión o
ineficiencia de las instituciones garantes del ejercicio de derechos humanos, sino
porque existe una cierta debilidad ética que hacen que el comportamiento social no
responda convenientemente a los valores referenciales ni al imperativo moral de no
causar daño a los demás.
La convivencia, la ética y la cultura de paz es el propósito neurálgico que se
promueve y propicia con esta ordenanza. La escuela es un espacio colectivo idóneo y
central para que emerjan y se arraiguen los valores que hagan posible esa convivencia
y paz ciudadana, y desde la escuela se expanda a los núcleos familiares y a la
sociedad, invirtiendo la direccionalidad de los impactos hacia la “sociedad que
queremos”, como lo pregonaba el Maestro Prieto.
En cada escuela, liceo y colegio se encuentra la más amplia expresión de la
diversidad: personas con diversas historias individuales, de diversos orígenes
culturales, credos religiosos, hábitos y costumbres familiares, valores, condición
social y económica, orígenes raciales, rasgos físicos, personalidades,
comportamientos, normas morales, relaciones de orden y autoridad, entre otros, que
forman una amalgama muy compleja de intercambio y relaciones personales, que es
muy difícil de sobrellevar en pro de lograr causas comunes y los objetivos de la
educación de calidad, liberadora y formadora de ciudadanos integrales para la vida
en democracia, justicia, igualdad y libertad.
De allí la importancia superior de promover y aprender a convivir en y desde la
escuela, como estrategia para frenar tempranamente las conductas pre delictuales, la
exclusión y tantas otras actitudes que atentan contra los derechos humanos, la
dignidad, la libertad personal y la paz ciudadana.
La clave del proceso es aprender y valorar la convivencia que genera como efecto la
armonía y la no violencia en las relaciones humanas. Se inicia con el reconocimiento y
la aceptación del otro, del “legítimo otro”, como lo afirma Maturana, H. (2002). Esta
actitud comporta un estado de conciencia ética sobre la libertad individual y el
derecho recíproco de cada quien a respetar y ser respetado, independientemente de la
diferencia existente en la conformación de los grupos de personas y en la comunidad.
La convivencia como práctica cotidiana, tolera y acepta la diversidad cultural y
procura como dinámica colectiva una suerte de “ética intercultural” en el seno de la
comunidad que, según Bilbeny, N. (2002), más allá de otros lazos y otras experiencias,
“la ética y los hábitos morales es lo que une más, y por más tiempo, a la gente”,
entendiendo como ética para la convivencia, aquella reflexión y estado de conciencia
individual, que impulsa el buen vivir, las causas comunes y el logro de propósitos
colectivos.
Marrero, J. (2019) señala, que convivir no es el simple acatamiento de normas de
funcionamiento o comportamiento, es sobre todo, un estado de conciencia que toma
cuerpo como un sistema humano complejo que “comunica y expande las reflexiones
y contenidos éticos, a través de la educación y los lazos de convivencia, hasta
convertirse en valores de interrelación de dominio general, compartido en cada época
y lugar”.
Al respecto agrega Esté, A. (2001): ética es el corpus de esas relaciones, es lo que hace y
permite que ese sistema, esa comunidad, se conserve cohesionado como tal. De
manera que cuando hablamos de violencia o acoso escolar, lo que se evidencia es una
ruptura ética del conjunto social que implica la “inexistencia, pérdida o extravío de
los valores o referentes” que permiten reconocer y aceptar al otro y sus acciones como
integrante del mismo conjunto y que, por tanto, le exigen unos a otros consecuencia
con esos valores, en una suerte de auto regulación y preservación del buen vivir en
ese conjunto o comunidad, en este caso, la comunidad educativa.
De allí que en el fondo, el desarrollo de una nueva cultura ciudadana entre los
estudiantes a través de la adopción de los valores de convivencia, es de orden ético
individual y colectivo.
A los fines de esta ordenanza promocional, merecen particular atención las
estrategias de refuerzo pedagógico, mediación docente, inducción familiar y control
por parte de la misma comunidad estudiantil, para contrarrestar las formas de acoso
físico, verbal, mediático o psicológico, denominado genéricamente bullying, en las que
unos estudiantes molestan, hostigan o maltratan a otros estudiantes, imponiendo una
relación de dominación – sumisión – expectación, a veces asumido como un juego o
“chalequeo”, pero que pudieran extralimitarse y convertirse en alguna forma de
irrespeto o agresión en contra de los compañeros.
Interesa también en esta ordenanza, desarrollar una cultura de convivencia y paz
ciudadana desde la escuela, el liceo y el colegio, que irradie al resto de la sociedad
según la modalidad de “punto y círculo”, a través de programas promocionales,
incentivos en el medio escolar y la valoración ética de la integración escuela –
comunidad, para que puedan asumir como sujetos colectivos, el funcionamiento
social basado en los valores antes enunciados.
Por otra parte, esta ordenanza y el ejercicio de la política educativa que desarrollen
los órganos y entes municipales, constituye una aportación para contribuir con el
abordaje multifactorial de la gestión en educación. No colide ni interfiere con las
leyes, normas y procesos llevados a cabo por los organismos del poder público de
educación y de protección de derechos de niños, niñas y adolescentes, sino por el
contrario, contribuye a ampliar la base y los recursos institucionales y sociales para el
cumplimiento de los fines superiores del Estado, todo ello basado en el principio de
colaboración entre ramas del poder público para la realización de los fines del Estado,
establecido en el Artículo 136 de la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela.
Se deja constancia que el Concejo Municipal sancionó la Ordenanza sobre
Convivencias Ciudadana del Municipio Carrizal, publicada en Gaceta Municipal
Número Extraordinario 45/2015, de fecha 01-07-2015, con el objeto de regular y
consolidar las bases y normas de la convivencia ciudadana, el respeto a la vida
colectiva pacífica, los deberes y derechos de las ciudadanas y ciudadanos en su
relación recíproca y en su interrelación con los espacios públicos y privados del
Municipio Carrizal, no obstante no se desarrollan en dicha ordenanza, los aspectos
concernientes a la convivencia y la paz escolar en las relaciones entre estudiantes y el
resto de la comunidad educativa, que constituye el objeto de la ordenanza que ahora
se presenta para su sanción, sin menoscabo de las disposiciones de aquella.
La fundamentación legal para desarrollar la política educativa de promoción de la
convivencia y paz escolar, está establecida en los artículos 102, 103 y 136 de la
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en concordancia con el
artículo 56, numeral 2, literales e, i, de la Ley Orgánica del Poder Público Municipal
relativos a las competencias relativas a la vida local.
El Municipio Carrizal mediante el Plan Municipal de Desarrollo 2018 – 2021, ha
previsto una gama de acciones y metas en la cual se inscribe el objeto de esta
ordenanza, según el lineamiento estratégico de Bienestar y Vida, a saber:
Meta 4.2.1. Consolidar la organización del sistema educativo del Municipio Carrizal
según la premisa de la escuela como centro radial de la comunidad, a través del cual
se impulsen actividades de cohesión escuela-comunidad, refuerzo pedagógico,
intercambio de saberes, convivencia social, salud escolar, cultura, deportes y
recreación.
Meta 4.2.3. Promover el proceso de educación ciudadana fundada en valores de
respeto, tolerancia, solidaridad y corresponsabilidad social, como medio de
formación integral de la personalidad y desarrollo de las potencialidades humanas.
Meta 4.2.5. Crear y sostener la Escuela para Padres, como una contribución para
consolidar los valores de la convivencia e integración familiar, vinculado con las
necesidades y derechos sociales y de la familia.
Meta 4.2.6. Apoyar a las instituciones educativas y comunidades en el desarrollo de
actividades promocionales de regulación del acoso escolar, disminución de la
desnutrición, deserción y exclusión escolar, maltratos a estudiantes, planificación
familiar y educación sexual y reproductiva.
Finalmente, esta Ordenanza sobre Promoción de la Convivencia Escolar en el
Municipio Carrizal, se estructura en tres (3) Capítulos y diecinueve (19) Artículos, de
la siguiente manera:
CAPÍTULO I
DISPOSICIONES GENERALES
Artículos 1 al 3
CAPÍTULO II
LOS VALORES DE CONVIVENCIA Y BUEN TRATO
Artículos 4 al 18
CAPÍTULO III
DISPOSICIONES FINALES
Artículo 19
 EL CONCEJO MUNICIPAL DEL MUNICIPIO CARRIZAL DEL ESTADO
BOLIVARIANO DE MIRANDA
En ejercicio de la función legislativa establecida en el artículo 175 de la Constitución
de la República Bolivariana de Venezuela, de conformidad con las atribuciones que le
confieren los Artículos 54 numeral 1, 92 y 95 numeral 1, de la Ley Orgánica del Poder
Público Municipal, sanciona la siguiente:

ORDENANZA SOBRE PROMOCION DE LA CONVIVENCIA ESCOLAR EN EL

MUNICIPIO CARRIZAL

CAPÍTULO I
DISPOSICIONES GENERALES
Artículo 1. Objeto.
El objeto de la presente ordenanza es promover y estimular la convivencia y no
violencia entre los estudiantes en el seno de la comunidad educativa y el entorno
social, como parte de la educación integral de calidad, fundada en valores y orientada
al pleno ejercicio de su personalidad, en una sociedad democrática, participativa,
protagónica, solidaria y amante de la paz.
Artículo 2. Sujetos de aplicación.
Son sujetos a la aplicación de esta Ordenanza promocional, los órganos y entes de la
administración pública municipal; los órganos municipales de defensa y protección
de derechos de niños, niñas y adolescentes; los integrantes de las comunidades
educativas; las comunidades organizadas de base popular, sin perjuicio de lo
dispuesto en las leyes que regulan materias análogas y las que sean establecidas por
los órganos rectores en cuanto fueren aplicables.
Artículo 3. Definiciones básicas.
A los fines de observar, comprender y aplicar esta ordenanza, se establecen las
siguientes definiciones básicas:
1. Ambiente escolar: Hace mención, en primer lugar, a la escuela, el liceo o
colegio, y a cualquier lugar o espacio donde se congregan e interactúan
estudiantes, docentes y personal de la comunidad educativa, para fines
educativos, deportivos, recreativos, esparcimiento, servicios y cualquier otra
actividad escolar o extra escolar, tales como: aula, pasillo, cancha, cantina,
baños, áreas de servicios y alrededores de la institución educativa.
2. Comunidad Educativa: Es el conjunto social cohesionado en torno a la
institución escolar, que persiguen el fin común de la educación de los niños,
 niñas y adolescentes en los distintos niveles y modalidades del sistema
educativo, de conformidad con la ley.
Lo integrantes reconocidos de la comunidad educativa son: los estudiantes,
docentes, directivos, personal administrativo y obrero, los padres y
representantes, los egresados y los prestatarios de servicios permanentes con
asiento en la instalación educativa.
3. Convivencia: En términos generales, convivencia es la potencialidad o
condición que tienen las personas para vivir y compartir con otros en un marco
de respeto mutuo, empatía, reconocimiento y solidaridad recíproca.
En el ámbito escolar se materializa en la interrelación entre los diferentes
miembros de la Comunidad Educativa de una escuela, liceo o colegio, que
tiene incidencia significativa en el desarrollo ético, socio-psico-afectivo e
intelectual de los estudiantes e incluye las formas de interacción entre los
diferentes actores que conforman la Comunidad Educativa.
4. Ética: Desde la perspectiva de esta ordenanza, la ética es el arte de vivir y de
saber vivir, adoptando una postura deliberada y unas relaciones con los demás
y con el entorno, que convengan a este propósito y sus consecuencias.
5. Valores: Son convicciones y cualidades propias o referenciales que orientan la
conducta y la manera de actuar de los seres humanos, generados por
sentimientos y emociones. Los valores se generan en la conciencia, de ahí que
cada individuo se ubica y decide qué valores prefiere y acepta, dándole
prioridad a las acciones y actitudes que se persiguen por considerar que son
valiosas para el desarrollo de la persona y la colectividad.
6. Violencia escolar: Se concibe como cualquier acto excesivo de poder o de
dominación dentro de las relaciones escolares, mediante el uso de la fuerza, la
intimidación, el acoso y la coerción, que causan o pueden causar daños físicos,
psíquicos o morales; se rompen vínculos sociales y emocionales, se polariza los
grupos y la comunidad educativa y, en consecuencia, se menoscaban las
finalidades pedagógicas de la institución (Adaptado de: Cecodap (2014).
Significados de la Violencia Escolar. En el marco del Proyecto CECODAP-
CISOR. Baruta, Venezuela.

CAPÍTULO II
LOS VALORES DE CONVIVENCIA Y BUEN TRATO
Artículo 4. Valores de convivencia.
Los valores que contribuyen con una sana convivencia en el ambiente escolar, son: la
justicia, la libertad, el respeto mutuo, la tolerancia, la solidaridad compartida, la
empatía, la corresponsabilidad, el diálogo, el compañerismo, el reconocimiento del
otro, la interculturalidad y la aceptación de la diversidad personal.
Artículo 5. Actitudes que dificultan la convivencia.
Los estudiantes de todos los niveles, grados y secciones de estudio, deben evitar
actuar con manifestaciones de individualismo; egoísmo; intransigencia; intolerancia;
violencia física, verbal, psicológica o mediática; competitividad sin propósito;
autoritarismo; racismo; sexismo y toda forma de exclusión o mal trato en contra de las
personas, pues son contrarias a los valores de convivencia y coexistencia pacífica en la
comunidad educativa.
Artículo 6. Refuerzo pedagógico positivo.
Se adoptarán estrategias de modelaje de conducta y refuerzo pedagógico positivo
entre los estudiantes, que actúan conforme a los valores de convivencia escolar
indicados en esta ordenanza, debidamente registrados por los docentes y servicios de
asistencia psico-educativa.
Artículo 7. Asistencia y orientación.
El comportamiento de los estudiantes caracterizado predominantemente por
actitudes que dificultan la convivencia detallados en el artículo 5, serán sujetos de las
medidas de asistencia pedagógica y orientación psico-educativa, para revertir
comportamientos similares en el futuro, sin menoscabo de los procedimientos
disciplinarios regulados por las normas internas de la institución educativa.
Artículo 8. Compromiso de Convivencia y Buen Trato.
En cada centro educativo del Municipio Carrizal, se divulgará una Carta de
Convivencia y Buen Trato a través de los medios de información interna, plegables,
posters, redes sociales u otros, dirigidos a los estudiantes e integrantes de la
comunidad educativa, los núcleos familiares y la comunidad circundante, con el
siguiente contenido:
Carta de Convivencia y Buen Trato
La Comunidad Educativa de (indicar nombre de la escuela, liceo o colegio) del
Municipio Carrizal, acepta y hace suyo el siguiente Compromiso de Convivencia y
Buen Trato:
1. Todos somos personas dignas, sujetos de derechos y deberes, según nuestros
respectivos roles y posiciones en la comunidad educativa.
2. El respeto mutuo es nuestro primer valor de convivencia, pero también lo son:
a. Actuar siempre con sentido de justicia y equidad con mis
compañeros(as).
b. La libertad individual termina donde empieza la libertad del otro.
 c. No hacer a los demás lo que no quiero que me hagan.
d. Tratar bien a los demás es mejor, más gratificante y constituye una
prueba de autoestima y amor propio.
e. Todos hacemos causa común en pro del bienestar de todos.
f. Tolerar la diversidad personal, cultural, religiosa, política o de cualquier
tipo: en definitiva, todos somos iguales ante Dios y la ley.
g. Ser solidarios y practicar el compañerismo responsable.
h. Reconocer y aceptar al otro, como un legítimo otro (u otra) y velar por
sus intereses y derechos.
i. Adoptar siempre una actitud favorable al diálogo y a la resolución
pacífica de conflictos.
j. No ridiculizar, ni amenazar, ni insultar, ni acosar, ni agredir de ninguna
forma ni en ningún momento a los demás, sobre todos a los más
pequeños y vulnerables; no dañar o sustraer los útiles escolares ni
practicar formas de “chalequeo” en contra de la voluntad de los otros.
Artículo 9. Divulgación.
La comunidad educativa de cada escuela, liceo o colegio, velará para que se divulgue
y se realicen suficientes actividades de motivación y mediación docente, en relación
con el Compromiso de Convivencia y Buen Trato indicado en el artículo anterior.
Artículo 10. Proyecto Pedagógico de Convivencia.
La dirección o coordinación pedagógica de las instituciones educativas en los niveles
de educación inicial, primaria y media, programarán y ejecutarán proyectos
pedagógicos de aula y de escuela, que promuevan y resalten los valores de
convivencia y buen trato en el ambiente educativo, mediante metodologías y
actividades pedagógicas y participativas, como una estrategia de formación integral
de ciudadanía en niños, niñas y adolescentes.
Artículo 11. Principio de colaboración
Todos los miembros de la comunidad educativa, en ejercicio de sus respectivos roles
y compromisos en torno a la gestión escolar, colaborarán entre sí para el mejor
cumplimiento de sus fines y en particular, garantizarán el cumplimiento del proceso
de convivencia en los términos de esta ordenanza promocional, en el reglamento
interno, en las leyes y demás normas establecidos por los órganos rectores del
servicio de educación y de protección de derechos de niños, niñas y adolescentes.
Artículo 12. Coordinación de programas.
La Alcaldía a través de la Dirección de Educación y los organismos de desarrollo
social, las comunidades educativas, las familias, las comunidades populares
organizadas, las organizaciones sociales, los organismos de la administración pública
nacional y estadal en materia educativa y el Consejo de Derechos de Niños, Niñas y
Adolescentes del Municipio Carrizal, colaborarán entre sí para la coordinación de
programas y acciones para impulsar el cumplimiento del objeto de la presente
ordenanza promocional, para garantizar a todos los estudiantes, el ejercicio y disfrute
pleno y efectivo de sus derechos y garantías constitucionales y legales, en un
ambiente de convivencia y paz escolar.
Artículo 13. Promoción y divulgación social.
Los medios de comunicación social en todas sus modalidades y los administradores
de redes sociales, coadyuvarán en la promoción y divulgación de contenidos
favorables a la cultura de la convivencia, el ejercicio de ciudadanía y la paz social en
el Municipio Carrizal, con especial énfasis hacia los estudiantes niños, niñas y
adolescentes en general.
Artículo 14. Apoyo institucional.
La Alcaldía prestará el apoyo institucional y material que sea necesario y posible a
sus capacidades de recursos, para que las comunidades educativas de escuelas, liceos
y colegios dispongan los medios de divulgación del Compromiso de Convivencia y
Buen Trato, que garantice el acceso a todos los estudiantes y demás miembros de la
comunidad educativa.
Asimismo, la Alcaldía a través de la Dirección de Educación, coordinará programas
de formación y refuerzo pedagógico a docentes, para coadyuvar en el desarrollo de
los proyectos pedagógicos de convivencia y cultura ciudadana entre la población
estudiantil de Carrizal.
Artículo 15. Alianzas y convenios.
El Alcalde o Alcaldesa podrá suscribir alianzas o convenios de gestión con el
ministerio de educación y demás organismos públicos o privados prestatarios de
servicios educativos nacionales, estadales y locales, así como con universidades,
centros de investigación educativa, organizaciones no gubernamentales sin fines de
lucro, con el objeto de promover y desarrollar programas y proyectos educativos,
orientados a fortalecer los valores de convivencia y cultura ciudadana entre los
estudiantes y demás integrantes de la comunidad educativa.
Artículo 16. Semana de la Convivencia Escolar de Carrizal.
Se crea la Semana de la Convivencia Escolar de Carrizal, en el lapso que sea acordado
por la Dirección de Educación de la Alcaldía en consulta con las direcciones de los
centros educativos y la Autoridad Educativa del Distrito Escolar del Municipio
Carrizal del Estado Bolivariano de Miranda.
La programación de la celebración de la Semana de la Convivencia Escolar de
Carrizal, incluirá actividades de intercambio de saberes, evaluación de resultados de
proyectos pedagógicos, exposiciones de trabajos escolares, actividades de promoción
de virtudes humanas y ciudadanas, actividades culturales, entre otras que se
acordaren.
Artículo 17. Consejo Estudiantil de Convivencia.
Se exhorta a cada comunidad estudiantil de los centros educativos del Municipio
Carrizal, a constituir el Consejo Estudiantil de Convivencia, como una estrategia de
participación, integración y autogestión estudiantil para el logro de los fines de la
convivencia escolar. Se creará un Consejo Estudiantil de Convivencia correspondiente
a los niveles de educación primaria y media, integrado cada uno por un delegado
estudiantil de cada sección y grado existente en el centro educativo.
Las funciones del Consejo Estudiantil de Convivencia es promover los valores de
convivencia y buen trato indicado en esta ordenanza promocional, como una práctica
de aprendizaje participativo y corresponsable.
El funcionamiento del Consejo Estudiantil de Convivencia estará sujeto a las normas
que se establezcan en el reglamento interno del centro educativo.
Artículo 18. Diploma de Distinción.
Se crea la distinción “Premio a la Convivencia Escolar”, a ser otorgada a las
instituciones educativas de todos los niveles y modalidades educativas, que se
destaquen y resulten seleccionados cada año en el marco de la conmemoración de la
Semana de la Convivencia Escolar de Carrizal y por el desempeño y resultados del
trabajo del Consejo Estudiantil de Convivencia.
El Alcalde o Alcaldesa mediante decreto reglamentario, establecerá las normas,
indicadores y procedimientos aplicables al otorgamiento de la distinción, previa
consulta con las comunidades y autoridades educativas existentes en el Municipio.
De tal distinción se formará una especie de “cuadro de honor” de convivencia y se le
dará la mayor divulgación, como medio para informar a toda la comunidad del
Municipio y estimular su promoción y buena práctica ciudadana.
CAPÍTULO III
DISPOSICIONES FINALES
Artículo 19. Vigencia.
La Presente Ordenanza entrará en vigencia a partir de su publicación en Gaceta
Municipal.
Dado, firmado y sellado en el Salón donde celebra sus Sesiones el Concejo Municipal
de Carrizal, estado Bolivariano de Miranda, a los ( ) días del mes de de dos mil
diecinueve (2019)
Años 209° de la Independencia y 160° de la Federación.