Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
Para saber si de verdad existe una nueva economía se mide no la producción sino
la producción por trabajador. Esta variable, también llamada productividad y para
varios países se ha medido desde la década de 1960. Lo que se ha observado es
lo siguiente:
Por qué no meter más variables: si se intentan hacer modelos en los que se incluyan
cada vez más variables y se supongan relaciones de tipo más genérico entre ellas,
tales modelos resultarán cada vez más difíciles de estudiar, o de usar para predecir
o explicar la economía, que en el caso de las versiones más simplificadas. Pero las
versiones más simples, por su misma naturaleza, tienden a fallar y a no prever
sucesos económicos o a predecir correctamente los valores que tomarán las
variables económicas.
Raíces de la macroeconomía
La Macroeconomia nace con la Gran Depresión
Los hechos económicos de los años treinta, la década de la Gran depresión, dieron
pie a muchos estudios sobre asuntos macroeconómicos. En general, la década de
1920 había significado años prósperos para la economía de EUA. Casi todos los
que querían empleo podían conseguirlo, los ingresos aumentaron de manera
sustancial y los precios eran estables. Sin embargo, a partir de finales de 1929 las
cosas empezaron a empeorar. En 1929, había 1.5 millones de desempleados. Para
1933, la cifra había subido a 13 millones, de una población económicamente activa
de 51 millones. Uno de cada cuatro trabajadores carecía de empleo. En 1929,
Estados Unidos produjo bienes y servicios nuevos por $103 mil millones; para 1933
la producción había bajado a $55 mil millones, una disminución del orden de 50 por
ciento. En octubre de 1929, cuando los precios de las acciones se derrumbaron en
Wall Street, se perdieron miles de millones de dólares de riqueza personal. El
desempleo sigui6 siendo superior al 14% de la población económicamente activa
hasta 1940.
La década de los años treinta fue de gran sufrimiento en todo Estados Unidos y el
mundo, pues la depresión pasó a Europa y más allá. En Estados Unidos, la cantidad
de suicidios aumentó casi 30%, y millones de familias cayeron en la pobreza.
Modelos Clásicos
Antes de la Gran depresión, los economistas solían aplicar modelos
microeconómicos, en ocasiones llamados "modelos clásicos" a los problemas que
afectaban a la economía. (De hecho, la palabra "macroeconomía” fue inventada
después de la Segunda guerra mundial.) Por ejemplo, el análisis clásico de la oferta
y la demanda presuponía que el exceso de la oferta de trabajo disminuiría los
salarios hasta un nuevo nivel de equilibrio y, en consecuencia, el desempleo no
duraría.
En la Gran depresión el desempleo, de hecho, permaneció a niveles muy altos
durante casi diez años. En gran medida, el fracaso de los modelos clásicos simples,
que no pudieron explicar la existencia prolongada del desempleo elevado, fueron la
causa de que se desarrollara la macroeconomía. Por tanto, no es raro que lo que
ahora se llama macroeconomía naciera en la década de 1930.
La Revolución Keynesiana
Una de las obras más importantes de la historia de la economía, La historia general
del empleo, el interés y el dinero, de John Maynard Keynes fue publicada en 1936.
Keynes, que partió de lo que se conocía de los mercados y su comportamiento, creó
una teoría para explicar las confusas circunstancias económicas de su época.
Gran parte de la macroeconomía tiene raíces profundas en la obra de Keynes.
Según Keynes, los precios y los salarios no son los que determinan el nivel de
empleo, como habían sugerido los modelos clásicos, sino más bien el nivel
agregado de la demanda de bienes y servicios. Keynes también creía que los
gobiernos podrían intervenir en la economía y afectar el nivel de producto y de
empleo. Según Keynes, el papel del gobierno en los períodos de poca demanda
privada es estimular la demanda agregada y, al hacerlo, sacar a la economía de la
recesión.
Los pasados veinticinco años, la economía de EUA ha pasado por una serie de
fluctuaciones dramáticas en el empleo, el producto y la inflación. En 1974-1975 y de
nueva cuenta en 1980-1982, Estados Unidos sufrió graves recesiones. Estas
recesiones, aunque no fueron tan catastróficas como la Gran Depresión de los años
treinta, dejaron a millones sin empleo e hicieron, que se perdieran miles de millones
de dólares de producto e ingresos. En 1974-1975 y de nueva cuenta en 1979-1981,
Estados Unidos registró elevadamente tasas de inflación. La economía
estadounidense también registró recesión en 1990-1991, aunque no fue tan grave
como las de 1974-1975 y 1980-1982.
La gran depresión
La Gran Depresión fue un periodo de la historia del siglo XX donde predominó una
crisis económica a escala mundial. Es de gran importancia su estudio debido a que
fue una depresión económica duradera y que afectó profundamente a la sociedad.
Se considera su inicio el día 29 de octubre de 1929, el martes Negro. Día en el que
la bolsa de Nueva York cayó enormemente y el pánico se adueñó de los inversores.
La crisis bursátil se expandió a otros sectores y de ahí a la sociedad. La
recuperación económica fue lenta y dolorosa. En algunos países esta crisis
económica derivó políticamente en el auge de totalitarismos, los cuales fueron un
factor decisivo para el advenimiento de la Segunda Guerra Mundial.
Orígenes de la gran depresión
Tras la Belle Époque llegó la Gran Guerra, es decir, la Primera Guerra Mundial, una
guerra que provocó numerosas muertes y destrucción, ya que
la industrialización había llegado de pleno a la industria armamentística. Tras
acabar esta guerra, las dificultades de restaurar el sistema monetario fueron
considerables. Pero volver al patrón oro existente antes de la Primera Guerra
Mundial tenía el problema de realizar un cambio de paridades adecuadas. La
Conferencia de Génova de 1922 consagró el patrón oro, pero en la práctica se
empleó la paridad con la libra debido a la convertibilidad de ésta con el oro. Esta
resolución, que tenía el objetivo de frenar la inflación y relanzar la economía,
conducía a un peligro de transmisión internacional de una crisis de forma más rápida
y peligrosa. Esto fue lo que pasaría durante la Gran Depresión.
Japón fue de los primeros países donde las medidas de Keynes se aplicaron y
supuso un crecimiento de la economía, aunque gracias también a su política
nacionalista y expansionista a costa de países vecinos. En Alemania, los gastos
militares y las obras públicas tuvieron un papel estratégico para sacar de la
depresión al país. Estos gastos se pudieron realizar gracias al creciente
autoritarismo de Hitler tras llegar al poder, por el cual creo un estado militarizado,
represivo y con un control en todas las áreas del estado. Este aumento del
intervencionismo estatal, aunque sin el cariz totalitario de Alemania, también ocurrió
en los países democráticos.
𝑃𝐼𝐵 = 𝑅𝐿 + 𝑅𝐾 + 𝑅𝑟 + 𝐵 + 𝐴 + (𝐼𝑖 + 𝑆𝑏 )
Donde 𝑅𝐿 representa los salarios procedentes del trabajo, 𝑅𝐾 las rentas
procedentes del capital o la tierra, 𝑅𝑟 los intereses financieros, 𝐵 los beneficios,
𝐴 las amortizaciones, 𝐼𝑖 los impuestos indirectos, 𝑆𝑏 los subsidios.
Tasa de desempleo
Las variaciones del desempleo se calculan por lo general mensualmente. En países
donde existe un seguro de desempleo se tienen datos muy exactos y fiables,
mientras que en países sin seguro de desempleo se tiene que calcular mediante
encuestas. En México una persona desempleada debe pertenecer a la PEA, es
decir, tener edad para trabajar, querer trabajar y buscar trabajo activamente. La tasa
de desempleo se calcula como el número de desempleados dividido por la PEA, y
se expresa en forma de porcentaje.
Inflación
La inflación es el aumento sostenido y generalizado del nivel de precios de bienes y servicios, medido
frente a un poder adquisitivo. Se define también como la caída en el valor de mercado o del poder
adquisitivo de una moneda en una economía en particular, lo que se diferencia de la devaluación,
dado que esta última se refiere a la caída en el valor de la moneda de un país en relación con otra
moneda cotizada en los mercados internacionales. La deflación por su parte es lo contrario y es raro
que ocurra, aunque sucedió en la década de 1990 a Japón y es un descenso continuo del nivel de
precios y en forma matemática sería una inflación negativa.