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1. Capilla de Canincunca
1.1 Ubicación
1.2 Canincunca
CANIN: morder
CUNCA: cuello
Se sabe que entonces se rigió una waca (adoratorio) en formal piramidal, con
pisos funerarios interiores, siendo la mas importante de los cultos en tres valles
formados por el río Vilcanota y de la laguna denominada QOYLLUR QOCHA,
hoy conocida como laguna de URCOS.
LAGUNA DE URCOS
Los antecedentes mencionados permiten deducir que no fue casual que en este
lugar se edificara una capilla. Este sitio, que fuera lugar ceremonial importante
en tiempos prehispánicos, estaba destinado a ser lugar de devoción dentro de la
política evangelizadora que implantara España en el Nuevo Mundo. Es conocido
por todos que sobre lugares sagrados de antiguos adoratorios prehispánicos, los
peninsulares construyeron templos, capillas y adoratorios católicos, como
símbolos evidentes de imposición y dominio no sólo de la nueva religión, sino
también del dominio político que ejercerían en este territorio durante casi
trescientos años. La actual existencia del cementerio en la ladera posterior a la
capilla, también nos refiere este vínculo con sitios sagrados prehispánicos. El
cementerio pudo existir desde el momento de la construcción de la capilla.
Actualmente está en uso y sirve a los asentamientos aledaños, especialmente al
poblado de Huaro y a los nuevos asentamientos frente a la capilla formados casi
20 años atrás, denominados Virgen Purificada y Bellavista.
Como muchas de este tipo de edificaciones religiosas que aún quedan en la zona
sur andina, fueron construidas por los titulares de las Encomiendas, quienes
inicialmente como parte de sus funciones, tuvieron el encargo de la Corona
Española de evangelizar a los nativos en la nueva religión. Esta función luego
estaría a cargo de las órdenes religiosas. Si hubiera sido así, su construcción fue
aproximadamente en el siglo XVII.
2. ARQUITECTURA
2.1. Atrio
Por el atrio se accede hacia la parte lateral derecha de la capilla, en cuyo muro
se encuentra una hornacina con restos de pintura mural del siglo XVIII, así como
una pequeña puerta, hoy clausurada, que llevaba a la torre de campanario del
lado de la Epístola, que contiene dos campanas.
2.2. Fachada
LADO DE LA EPÍSTOLA
2.3. Nave
2.4. Sacristía
La nave desde el coro alto. Nótese la estructura del techo de par y nudillo y
tirantes.
Es una construcción en adobe, de una planta con techo a dos aguas y cubierta
de teja. Tiene dos accesos, desde el exterior por el atrio y por el interior desde la
sacristía. La construcción está compuesta por un pequeño patio alrededor del
cual, en tres frentes, se construyeron varios ambientes con puertas
independientes que dan al espacio abierto. Del exterior se accede a este por un
corto zaguán y desde el interior por una puerta lateral de la sacristía que da a
una galería con arcos.
De esta galería también arranca la escalera de piedra de tres tramos que llevan
a una pequeña habitación que se usa como depósito, al coro alto y a la torre
campanario del lado del Evangelio con tres campanas, dos coloniales y una
contemporánea, donada por residentes de Huaro en la ciudad de Lima, como
reza una placa situada en uno de los muros del campanario. Es estrecha y algo
baja, lo que obliga a quien suba tener que hacerlo algo agachada.
3. VALORES PATRIMONIALES
Las pinturas murales del siglo XVIII están representadas debajo del tema “tapiz”,
en el zócalo de la nave. Son decoraciones con motivos que muestran un patrón
de tradición greco-latina, llamado “grutesco”, representando hombres follaje,
roleos vegetales, grullas, la representación de Venus como caritas de mujer que
simbolizan la Virgen María en la tradición cristiana y que están coronadas con
veneras y decoración a modo de plumaje. Igualmente se pueden observar
vizcachas andinas, iconografía de los murales del barroco andino tan extendido
en territorio sur peruano.
Así mismo, los frisos que se ubican en el límite superior de las paredes en el
encuentro con el techo, tienen decoración de “grutescos”. Además de tramo en
tramo, se visualizan escenas posiblemente de la vida de la Virgen, muy poco
identificables por el mal estado de conservación de la pintura.
El falso cielo raso está realizado en tela, conocida como Yanasca, que fue un
material muy usado durante la colonia y presenta pintura mural en toda su
extensión. Presenta rombos con apliques circulares centrales en cada uno de
ellos, trabajados en relieve, en yeso con acabado en pan de oro. El harneruelo,
parte central y plana del techo, presenta secciones rectangulares con decoración
a modo de escudos con círculos centrales. Tiene rica policromía en rojo, azul y
blanco, además de detalles decorativos en relieve realizados a base de cola tela
y yeso con acabado en pan de oro. Los tirantes que cruzan la nave también están
pintados.
Detalle del
harneruelo en el
cielo raso de la
Capilla. Pintura
del siglo XVII.
Son también murales del siglo XVIII:
Detalle del cielo raso del coro bajo. Casetones en madera policromada. S.
XVII.
En relación a la técnica de estos murales, es la misma que se utilizó en los
murales de los templos vecinos de Andahuaylillas y Huaro, es decir, pintura al
temple sobre soporte de adobe, con pigmentos de tierras naturales de la zona y
de plantas nativas andinas. Fueron manos indígenas y mestizas que pintaron los
muros, siguiendo patrones de tradición europea y andina.
El retablo original de la capilla fue una pintura mural del cual sólo queda como
evidencia la hornacina central con la iconografía de la Virgen de la Candelaria o
Purificada en la advocación local. Fue reemplazado por el actual retablo que
constituye el bien patrimonial más importante del recinto. De estilo barroco
ricamente decorado, es de fines del siglo XVII. La estructura de madera tallada
y sobredorada con pan de oro, es de dos cuerpos, (parte horizontal), tres calles
(parte vertical) y sotabanco (parte más baja del retablo que está a nivel del altar).
Las calles están definidas por columnas salomónicas y los cuerpos diferenciados
por cornisas de las cuales penden piñas a manera de pinjantes. Rematan a cada
lado, tallas de veneras, piñas y roleos con profuso sobredorado. Completan el
conjunto seis lienzos de la Vida de la Virgen y el Niño Jesús con sus respectivos
marcos tallados y acabados con pan de oro y siete óleos en los dos cuerpos del
retablo. Son de la Escuela Cusqueña de Pintura del siglo XVII, de autor anónimo.
Los óleos de la serie de la Vida de la Virgen se ubican: Lado del Evangelio de
arriba hacia abajo:
La Sagrada Familia
San Agustín
San Antonio de Padua con el Niño en el brazo izquierdo y en el otro lleva
en la mano la azucena, su símbolo iconográfico, enmarcado en medallón.
Estos lienzos son de la Escuela Cusqueña de Pintura, del siglo XVII y de autoría
anónima. En la calle central, en el primer cuerpo, se observa una falsa hornacina
con la imagen de la Virgen de la Candelaria pintada sobre el muro testero, única
muestra del retablo original, que como señalamos estuvo pintado en el muro. A
manera de marco, destaca la talla que simula una aureola. Remata este cuerpo
el frontón partido conteniendo la cartela con el monograma de María. En la parte
superior de la calle central, se encuentran dos ángeles esculpidos en yeso
policromado con pan de plata, imágenes del siglo XVII, de autor anónimo y de
gran calidad escultórica. El segundo cuerpo contiene un lienzo del Arcángel San
Gabriel, San Juan Bautista.
3.2.1. Altares
3.3. Lienzos
Debemos añadir los óleos que pertenecen a esta capilla, que en la actualidad y
por razones de seguridad, se encuentran exponiéndose en el Museo del Templo
de San Juan Bautista de Huaro, ambiente que fue la antigua Sacristía, situado
en el presbiterio de aquel templo. Estos son: Dos importantes series de pintura
de la Escuela Cusqueña, la serie de los Doce Apóstoles, del siglo XVII, de autoría
anónima y la serie del Credo, once lienzos del
siglo XVIII que muestran escenas alusivas a la oración católica llamada “El
Credo”, que es una confesión de fe y cuyas frases están escritas debajo de las
escenas. Es una serie poco frecuente en la producción de la Escuela Cusqueña.
Ambas fueron restauradas en el último tercio del siglo XX.
3.4. Muebles
3.5. Muebles
Talla en madera
policromada. Siglo XVIII.
Divide la nave del pequeño
presbiterio.
Los registros son accionados desde tiradores laterales que son extensiones
directas de las correderas en la secreta, no estando al alcance del organista
durante la ejecución.
Órgano Realejo
4. PLANOS DE LA IGLESIA DE CANINCUNCA