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EL DEPÓSITO.

Se encuentra regulado en el título XXXII, del libro IV entre los artículos 2211 al 2257 del
C.C.
Concepto art.2211 “llámese en general depósito el contrato en que se confía una cosa corporal a
una persona que se encarga de guardarla y restituirla en especie”.
La expresión depósito designa tanto el acto o contrato como la cosa misma depositada.

Las partes del contrato:

Depositante persona que hace el depósito.
Depositario persona que lo recibe.
Existen como veremos distintas clases de depósitos, es por ello que el art. 2211 expresa llámese en
general… y asimismo lo confirma el art. 2214.
Clasificación.
I Depósito propiamente dicho, el cual puede ser:
- Voluntario se presenta cuando la elección del depositario depende de la libre voluntad
del depositante.
- Necesario es aquel en que la elección del depositante es expuesta por las circunstancias
del caso.
II Secuestro, puede ser o consiste en el depósito de una cosa disputada, en manos de una 3º
persona, mientras se define a quien le competen los dº sobre ella. El secuestro a su turno puede
ser:
- Convencional se constituye por el acuerdo de las partes.
- Judicial se constituye por resolución del juez.
Características del depósito, en general.
1. Contrato unilateral el único que resulta obligado al momento de generarse el contrato es
el depositario, quien se obliga a guardar la cosa y a restituir la especie depositada. En
principio, el depositante no contrae obligación alguna, sin embargo, en la etapa de
ejecución del contrato el depositante podría eventualmente resultar obligado conforme lo
dispone el art. 2235. Dichas obligaciones eventuales pueden consistir en el pago de las
expensas que se hubieren efectuado para conservar la cosa como también para
indemnizar los perjuicios que le hubieren ocasionado la cosa depositada.
2. Por regla general, el depósito es un contrato gratuito, sin embargo, puede variar
dependiendo del tipo o clase de depósito:
a. depósito propiamente dicho es gratuito y dicha gratuidad es de la esencia de
acuerdo al art. 2219, que incluso señala que si se estipula una remuneración el
contrato degenera en un arrendamiento de servicios y aquel que presta el servicio es
responsable hasta culpa leve, pero bajo todo otro respecto está sujeto a las
obligaciones del depositario y goza de los derechos de tal.
b. El depósito también puede ser irregular y en este depósito el depositario se hace
dueño de la cosa, es decir, es un título translaticio de dominio, dado que el mismo
recae sobre dinero. Se encuentra tratado en el art. 2221. Es un depósito efectuado en
Bancos e Instituciones Financieras y constituye, por tanto, una forma de operaciones
de dinero regido por la ley 18 010 y se hace aplicable el art. 12 de la ley, en las cuales
en dichas operaciones la gratuidad no se presume. En consecuencia, el contrato es
naturalmente oneroso devengando lo mismo un interés corriente que es aquel que
cobran las instituciones financieras y bancos por operaciones de crédito de dinero que
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se realicen dentro del país, pudiendo devengar un interés mayor o menor por
disposición legal o por acuerdo de las partes, teniendo como límite el interés máximo
convencional que corresponde al interés corriente más el 50% y si se sobrepasa hay
lesión enorme, por lo que debe rebajarse.
c. En cuanto al secuestro judicial este es remunerado, y el convencional se discute si
lo es.
3. Es un contrato principal.
4. Es un contrato real según el art. 2212 la entrega puede ser real o ficta, si la cosa que se
entrega en depósito vale más de 2 UTM el contrato debe constar por escrito con el objeto
que el mismo sea probado por testigos arts. 1708 y 1709. Por lo tanto, la escrituración es
para el sólo efecto de cumplir con la exigencia de la limitación a la prueba testimonial,
pero el contrato sigue siendo real, y si no consta por escrito el art. 2217 establece reglas
especiales, en relación a la prueba del contrato, señalando que será oído el depositario
sobre su palabra en relación a los siguientes hechos: hecho mismo del depósito, cosa
depositada, en cuanto al hecho de la restitución.
5. Es un título de mera tenencia el depositante conserva su dominio y además su posesión.

El depósito propiamente dicho.

El mismo art. 2214 se encarga de señalar que el depósito es de 2 maneras:
- Depósito propiamente dicho, que a su turno puede ser voluntario y necesario, y
- Secuestro.

Depósito propiamente dicho voluntario.

Art. 2215.
Concepto es un contrato en que una de las partes entrega a la otra una cosa corporal y mueble
para que la guarde y restituya en especie a voluntad del depositante.

Requisitos.
Debe cumplir con los requisitos de existencia y validez de todo contrato art. 1445. Se aplican las
reglas generales, salvo en tres materias:
Objeto conforme a las reglas generales puede ser objeto de unacto o declaración de voluntad
toda clase de bienes corporales o incorporales, bien sean mueves o inmuebles, pero en este caso,
según el art. 2215 el objeto debe ser una cosa corporal mueble.
Vicios del consentimiento art. 2216 señala que el error acerca de la identidad del uno o del otro
contratante o acerca de la sustancia, calidad o cantidad de la cosa depositada no invalida el
contrato. Sin embargo, el inciso segundo plantea hipótesis donde existirían vicios del
consentimiento:
a. Si el depositario ha padecido error acerca de la persona del depositante, aquí se
produce un vicio del consentimiento que acarrea la nulidad del contrato y se debe
proceder de inmediato a la restitución de la cosa depositada. Lo anterior se debe a que
el depósito propiamente dicho voluntario es un contrato gratuito y como consecuencia
de ello es in tuito personae.
b. El depositario descubre que la guarda de la cosa depositada le acarrea peligro y en
dicho caso puede restituir de inmediato.
Capacidadse remite a las reglas generales. Este contrato no puede tener pleno efecto, sino entre
personas capaces de contratar art. 2218 inc. 1. El inc. 2 establece reglas especiales en relación a la
incapacidad del depositante y depositario.
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¿Qué ocurre si es incapaz el depositante? Si aplicáramos la regla general el contrato debiera ser
nulo relativamente, pero según el art. 2218 inc 2 la nulidad aprovecha sólo al incapaz, en este caso
el depositante. En cambio, el depositario contraerá, sin embargo, válidamente todas las
obligaciones emanadas del depósito.
¿Qué ocurre si es incapaz el depositario? En este caso el depositante puede actuar de distintas
formas según las circunstancias art. 2218 inc .3. el depositante puede:
a. Mientras la cosa esté en poder del depositario tiene acción para reclamar la cosa
depositada.
b. En caso que el depositario haya enajenado la cosa sólo tendrá acción en su contra
hasta la concurrencia de aquello en lo que por el depósito se hubiere hecho más rico.
Art. 1688 para determinar cuando se hizo más rico.
c. Queda a salvo el dº del depositante de dirigirse en contra de los 3º poseedores, dado
que si el dueño de la cosa podrá reivindicarla en manos de quien se encuentre.
Todo lo anterior es, sin perjuicio, del caso de dolo y la pena que la ley imponga al depositario, dado
que siendo este último un mero tenedor si la usurpa y la enajena comete el delito de apropiación
indebida.

Efectos del contrato de depósito propiamente dicho voluntario.

En un principio el único obligado es el depositario quien contrae 2 obligaciones:
- De guardar la cosa con la debida fidelidad y diligencia, y
- Debe restituir el depósito a petición o requerimiento del depositante.

Obligación de guardar la cosa.

Ya se encontraba señalado en la definición de depósito en el art. 2211 y también en el art.
2215, en consideración que se trata de un contrato que en un principio sólo es en beneficio del
depositante, quien es el acreedor de la obligación de restituir. El deudor en dicho caso responde de
culpa grave o lata art. 2222.
Las excepciones emanan del art. 2222:
- Las partes pueden pactar que el depositario responde de culpa levísima, y
- El legislador ha establecido, en ciertos casos que el depositario responderá de culpa leve:
a. Si se ha ofrecido espontáneamente a prestar servicios art. 2222 Nº 1, ha
pretendido que se le prefiera a otra persona para ser depositario.
b. Cuando tiene algún interés personal en el depósito sea que se le permite usar
de él en ciertos casos sea porque se le concede remuneración.
La obligación de guardar la cosa conforme a la ley comprende la de respetar sus sellos o cerraduras
art. 2223 y 2224. Además si se trata de un depósito de confianza comprende la obligación de no
revelar ni violar el secreto art. 2225.

Obligación de restituir.
Oportunidad en la cual se restituye.
La restitución tiene la característica que ello es a voluntad del depositante art. 2226 y art. 2215. En
consecuencia, si se ha pactado un plazo para la restitución, éste obliga sólo al depositario y no al
depositante, dadp que él puede solicitar la restitución antes del plazo fijado, salvo las excepciones
legales.
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Puede ocurrir que llegado el plazo el depositante no quiera recibir la cosa y como el depósito
envuelve la obligación del depositario de guardar la cosa con la debida diligencia se puede recurrir
al pago por consignación arts. 1598 y sgts C.C.
Lo propio puede hacer cuando sin cumplirse el plazo peligra el depósito en poder del depositario o
le cause perjuicio art. 2227.
En este caso de igual forma se recurre al pago por consignación y son de costas del depositante
todos los gastos que ello implique.

Forma en que se restituye.

El C.C. ha dado ciertas reglas:
1. El depositario debe restituir la misma cosa depositada, salvo que sea el depósito irregular.
Art. 2221.
2. El depositario debe devolver la cosa con todos sus accesorios y frutos art. 2229.
3. Los costos de transporte que sean necesarios para la restitución del depósito son de cargo
del depositante. Art. 2232.
4. Norma de remisión art. 2233 hace aplicable al depósito las reglas del art. 2181 al 2185 que
se encuentran a propósito del comodato y tratan:
- Art. 2181 a quien debe hacerse la restitución al depositante o a la persona que tenga
derecho para recibirla.
- Art. 2182 señala los casos en que debe suspender la restitución. Dº legal de retención.
- Art. 2183 cuando la cosa ha sido perdida, hurtada a su dueño.
- Art. 2185 el deudor de la obligación de restituir descubre que él es el verdadero dueño,
cesa la obligación de restituir.

¿Qué ocurre si la especie depositada perece por caso fortuito?

El caso fortuito total extingue la obligación de restituir art. 2230. Dicho artículo señala que si el aso
fortuito se lleva a cabo antes de constituirse en mora al depositario, se extingue la obligación de
restituir, salvo que como consecuencia del caso fortuito o de dicho accidente reciba el precio de la
cosa depositada u otra en lugar de ella, puede ser que en este caso haya mediado un contrato de
seguro, lo cual por cierto no exime al depositario de su obligación de restitución, sino lo que
sucede es que hay un cambio de objeto es un caso de subrogación real.

¿Qué ocurre con la muerte del depositario?

En principio la muerte no influye en el contrato, por tanto, los herederos estarán sujetos a la
misma obligación restitutoria. Sin embargo, los herederos pueden ignorar que la cosa sea
depositada y la enajenen art. 2231. En esa situación el depositante como dueño que es podrá
intentar la acción reivindicatoria en contra de los 3º poseedores, si no quiere o puede hacer uso de
la acción, podrá exigir a los herederos que le restituyan el producto de la enajenación o bien le
cedan las acciones que en virtud de la enajenación les corresponden, y esto será cuando no haya
habido un pago del precio o bien exista un saldo pendiente.

Derechos del depositario.

Podríamos afirmar que el depositario no tiene derecho alguno, puesto que en 1º lugar no
puede usar la cosa y tampoco tiene derecho a remuneración, es d ela esencia su gratuidad, salvo
algunos casos.
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La remuneración.
Si bien es un contrato esencialmente gratuito, podría estipularse por este servicio una
remuneración, pero en dicho caso el contrato degenera en un arrendamiento de servicios art. 2219
y en este caso el deudor responde de culpa leve, dado que el contrato beneficia a ambos.

Facultad de usar la cosa.

Es factible que el depositante autorice expresamente al depositario para usar la cosa art.
2220 inciso primero. El mismo art. Se coloca en la hipótesis, en la cual, el permiso o autorización
para usarlo, otorgando al juez la facultad de calificar las circunstancias que justifiquen dicha
presunción, como las relaciones de amistad, confianza entre las partes. Concluye dicho artículo
señalando que se presume más fácilmente este permiso en las cosas que no se deterioran. Además
de los dº excepcionales pueden existir otros eventuales, los cuales nacen en la etapa del
cumplimiento del contrato, y en dicho caso el contrato se transforma en uno sinalagmático
imperfecto.

Obligación eventual del depositante.

1. Indemnizar al depositario los gastos en que haya incurrido en la conservación de la cosa y
que probablemente hubiere hecho él mismo en caso de tener la cosa en sus manos.
2. Indemnizar los perjuicios al depositario que éste haya sufrido con ocasión del depósito.
Art. 2235.

Para garantizar la obligación, al depositario el art. 2231 le otorga el dº legal de retención (garantía).

Depósito propiamente dicho voluntario e irregular.

Se encuentra regulado en el art. 2221 C.C. y consiste simplemente en dinero. Actualmente
se efectúa en Bancos e Instituciones financieras y que, en consecuencia, constituye una de las
formas que puede optar la operación de crédito de dinero de la ley 18010.
El depósito irregular presenta diferencias con el depósito propiamente dicho voluntario:
1. El depósito irregular constituye un título translaticio de dominio, esto porque el
depositario se hace dueño del dinero art. 2221 y art. 2228. Sine embargo, en este sentido
el depósito irregular se asemeja al mutuo de dinero, pero existe una diferencia
fundamental, que consiste en que en el mutuo se fija un plazo para la restitución de otro
tanto de la misma moneda. En cambio, en el depósito irregular la restitución es a voluntad
del depositante, pero si nos regimos a propósito del depósito irregular en relación a que
constituye una operación de crédito de dinero se aplica el artículo 13 de la ley 18010, el
cual señala que a falta de plazo no podrá exigirse la restitución, sino pasados 10 días desde
la entrega.
2. El depósito irregular a diferencia del propiamente dicho voluntario, es que es oneroso
(elemento de la naturaleza), dado que al constituir una operación de crédito de dinero
aplicamos el art. 12 de la ley 18010, el que señala que en estas operaciones la gratuidad no
se presume, ya que salvo disposición o pacto en contrario dichas operaciones devengan
interés corriente, los que se calculan sobre el capital o el capital reajustado en su caso. Sin
embargo, el art. 2219 señala que el depósito propiamente dicho es gratuito.

Depósito necesario.
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Se encuentra regulado entre los arts. 2236 a 2240.

Se presenta cuando la elección del depositario no depende de la voluntad del depositante.
Ej: incendio, ruina, saqueo u otra calamidad semejante.
Este depósito pertenece a la categoría del propiamente dicho y se rige por las normas del
propiamente dicho voluntario de acuerdo al art. 2240, salvo en 3 órdenes de materia:
1. Materia de prueba,
2. Materia de capacidad, y
3. Materia de responsabilidad.

Materia de prueba.
La prueba sabemos que es el establecimiento por los medios legales de los hechos y sus
circunstancias, que sirven de fundamento inmediato al derecho deducido en juicio.
En el contrato de depósito necesario, dada las circunstancias especialísimas en que se
otorga, la ley dispuso que se admiten todos los medios art. 2237 y no se aplican los art. 1708 y
1709, que contempla la limitación de prueba de testigos respecto de obligaciones que hayan
debido constar por escrito.
El art. 2237 es una excepción al art. 2217, ya que este último, si e contrato se refiere a una
cosa que vale más de 2 UTM y se omite el contrato, será creído el depositario en 3 materias: en
cuanto al contrato mismo, a la cosa depositada y al hecho de la restitución.

Materia de capacidad.
El art. 2238 altera la norma del art. 2218 a propósito del depósito propiamente voluntario,
estableciendo que si el depositario fuera un adulto, que no tiene la libre administración de sus
bienes, pero se encuentra en su sana razón y contrata sin la autorización de su representante legal,
constituye un cuasicontrato que obliga al depositario aún sin la autorización de su representante.
El art. 2218 señala que si el depositario es incapaz, el depositante tendrá acción para
reclamar la cosa depositada siempre que se encuentren en poder del depositario, si ello no ocurre
podrá intentar una acción personal en contra del depositario hasta la concurrencia de lo que se
haya hecho más rico para accionar contra 3 poseedores.

Materia de responsabilidad.
El art. 2239 establece que en el depósito necesario la responsabilidad del depositario se
extiende hasta la culpa leve, en cambio, en el propiamente dicho voluntario art. 2222 y en
conformidad al art. 1547 inciso primero responde de culpa grave o lata.

Entre los arts. 2241 a 2248 se regula el efecto en hoteles u otros establecimientos semejantes, el
cual se asemeja al depósito necesario.

Secuestro.
El art. 2214 señala que el depósito puede ser propiamente dicho y secuestro.
Se encuentra regulado en el título XXXII del libro IV arts. 2249 al 2257. El depositario se
llama secuestre. El secuestro a su vez se clasifica en convencional y judicial.
Se rigen por las normas del depósito propiamente dicho con sus excepciones y con las
normas del CPC.

Secuestro convencional.
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Art. 2252 lo define señalando que se constituye por el solo consentimiento de las personas que se
disputan el objeto litigioso.

Características del secuestro convencional y que a su vez lo diferencian del depósito propiamente
dicho.
1. Puede recaer sobre cosas muebles y raíces art. 2251,
2. La restitución de la cosa depositada no se hace a voluntad del depositante, sino que se
requiere sentencia de adjudicación pasada en autoridad de cosa juzgada. Existen dos casos
de excepción que pueden adelantar la restitución:
a. Sobreviene una necesidad imperiosa de lo que debe darse aviso a los depositantes,
b. Por voluntad unánime de las partes art. 2256.
3. Si el depositario llamado secuestre pierde la tenencia material de la cosa, la ley señala que
él mismo puede reclamarlo contra cualquiera que la tenga incluso contra el o los
depositantes que lo hayan tomado sin permiso del otro art. 2254.
4. Si recae sobre bienes raíces el secuestre en materia de administración, facultades y
deberes queda sujeto a las mismas normas del mandatario, la ley obliga a dar cuenta de
sus actos al futuro adjudicatario art. 2255.

Secuestro judicial.
Según el art. 2252 inciso tercero se constituye por decreto del juez y no ha menester otra
prueba.
Se encuentra regulado en el CPC libro II título V relativo a las medidas precautorias
conforme al art. 290, el secuestro es una de las medidas precautorias que puede adoptarse
para asegurar el resultado de la acción. Estas pueden ser: precautoria propiamente tal y
prejudicial precautoria.

Procede en dos casos:

a. Art. 901 cuando reivindicándose una cosa corporal mueble hubiere motivo de temer
que se pierda o deteriore en manos del poseedor.
b. Cuando se entablen otras acciones con relación a cosa mueble determinada y haya
motivo de temer que se pierda o deteriore en manos de la persona que sin ser
poseedor de ella la tenga en su poder art. 291 CPC.

El secuestro no judicial tiene cabida sobre bienes raíces porque prevalece el art. 2251, el que
señala que puede recaer sobre bienes muebles e inmuebles, en cambio el judicial art. 291 CPC
sostiene que sólo tiene cabida sobre bienes muebles.
La única forma de probar el secuestro judicial es mediante el decreto judicial que lo constituye art.
2252 inciso tercero.
En materia de restitución, no es a voluntad del depositante, sino que debe mediar sentencia de
adjudicación pasada con autoridad de cosa juzgada. Sin embargo, la restitución se puede adelantar
en 2 casos art. 2256:
- Sobreviene una necesidad imperiosa, de lo que se dará aviso a los depositantes y
primeramente al juez para que disponga de su relevo.
- También se puede anticipar cuando así lo decrete el juez.

El secuestre puede reclamar la cosa contra cualquiera en los términos del art. 2254
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El secuestro judicial es remunerado, lo que constituye una excepción al contrato de depósito, el

que es esencialmente gratuito. Esto es porque el art. 292 CPC remite y hace aplicable el secuestro
a las normas del párrafo I del título I del libro III que se refiere al depositario de los bienes
embargados. Dicho artículo es el 516 del CPC, el que se encuentra inserto en el juicio ejecutivo de
las obligaciones de dar y se refiere a la remuneración del depositario de una especie embargada y
dispone que el Tribunal al momento de pronunciarse sobre la aprobación de su cuenta deberá
fijarse una remuneración si hubiere lugar a ella, teniendo en consideración la responsabilidad que
el cargo le haya impuesto.
Esta norma, si bien se ubica en el CPC y se aplica al secuestro judicial, también se ha
señalado que puede extenderse al convencional, en consecuencia, este último también podrá ser
remunerado, ya que sin duda es una medida precautoria art. 2250 y no sólo se aplican etas normas
sino también las del CPC.