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ACTIVIDAD 1- REVOLUCION INDISTRIAL.

EL DERECHO LABORAL encuentra su génesis en los “abusos” que durante la


Revolución Industrial padecieron los trabajadores en las fábricas inglesas. Desde
entonces, los derechos de los trabajadores han sido el principal caballo de batalla de
los socialistas para procurar defender al proletariado de las opresoras garras del gran
capital. Así, se denominan “conquistas sociales” a la jornada de 8 horas, las
vacaciones, los sistemas de pensiones, el sueldo mínimo, las leyes de seguridad en el
trabajo, entre otras.
El fundamento de estas mal llamadas “conquistas sociales” es, en mi opinión, una
interpretación errónea de la historia. La revolución industrial no fue una época de
opresión sobre las clases menos pudientes, durante ella no se destruyó al campesinado
esclavizándolo en las industrias, forzándolo a trabajar en éstas. Sin embargo, ha sido
esta antojadiza, sesgada y falaz lectura de la historia la que ha servido de cimiento para
la construcción del endeble castillo de naipes en que consiste la regulación laboral.
La revolución industrial no fue, como se cree, una época de opresión y de explotación
inmisericorde de los pobres, fue su salvación de la hambruna, la miseria y el atraso. De
qué otra forma puede explicarse la masiva migración que hubo del campo a las zonas
industriales, las colas para la obtención de empleos en las fábricas. Esas conductas,
esas preferencias reveladas, nos indican que quienes supuestamente fueron las
víctimas de la revolución industrial, fueron en realidad sus beneficiarios. Nadie forzó a
los campesinos a migrar a las zonas industriales, nadie los forzó a trabajar en las
fábricas, lo hicieron porque consideraron que sus condiciones de vida en los campos
eran peores que en las fábricas. Esa y no otra fue la causa de este fenómeno.
Sin embargo, esta historia tergiversada es la que ha servido de fundamento para el
establecimiento del derecho laboral que, si bien pretende mejorar la calidad de vida de
las personas, en realidad impide que la gente más pobre y menos capacitada accedan
a un empleo formal. En otras palabras, es el propio derecho laboral la principal barrera
para que aquéllos a los que está llamado a proteger accedan a un empleo en donde se
respeten las “conquistas sociales” que sus defensores se ufanan de haber logrado.
La economía nos enseña que todo en la vida tiene un costo, que no hay almuerzo
gratis, y lo que no sopesan los defensores de las regulaciones laborales son los
inmensos costos que éstas irrogan. En mi concepto, estos costos superan largamente a
sus beneficios.
El mercado laboral es como cualquier otro mercado y está sujeto a la ley de la oferta y
la demanda. La regulación no es otra cosa que aumentar artificialmente el precio de
contratar a alguien y, como se sabe, a mayor precio, menor demanda. Es decir,
mientras más regulación laboral, menos demanda por trabajadores habrá en el
mercado y por ende más desempleo. La solución a este problema, sin embargo, la da el
propio proceso de mercado en el que se generan mercados informales en donde no se
respetan estas costosas “conquistas sociales”, pero sí el derecho de las personas a
trabajar libremente en lo que consideren la mejor alternativa para ellas. Es el mercado
el que salva a los pobres de sus supuestos salvadores.

ASOCIACIONES DE TRABAJADORES

 La clase obrera se encontraba indefensa ante los abusos de los patronos


 La necesidad de defender sus intereses originó el movimiento obrero
o Su fuerza cambió en función del grado de industrialización de los países
 En todos los países los obreros se fueron agrupando en organizaciones
o Su objetivo era mejorar sus condiciones laborales, salariales y sociales

ASOCIACIONES DE TRABAJADORES

 Surgen como respuesta a los problemas planteados por la mecanización


 Representaban a los obreros desprotegidos frente a los abusos del capitalismo
o Prolongadas jornadas de trabajo
o Trabajo infantil
o Hacinamiento
o Despidos sin indemnización
 Inglaterra
o Nacen las primeras asociaciones de trabajadores
 Sociedades de ayuda mutua
 Artesanos de las industrias domésticas rurales.
 Objetivo: Unión de obreros para conseguir mejoras laborales y salariales
o A finales del siglo XVIII: Combination Laws
 Se prohíbe todo tipo de asociacionismo obrero
o 1824 abolición Combination Laws
 Se crean los sindicatos de oficio: Trade Unions
 Obreros de una misma localidad con un mismo oficio.
 Se prestaba ayuda en caso de necesidad a sus miembros
 Década de los treinta: se crea un sindicalismo de ámbito estatal
 Uso de la huelga como instrumento de presión
REPERCUSIÓN EN LA VIDA DE LOS INDIVIDUOS
Desde la Revolución Industrial, el volumen de producción aumentó dramáticamente: el
oficio de la producción de bienes ya no es artesanal; las personas ahora tienen acceso
a los bienes industriales; la población se traslada del ámbito rural a los centros urbanos
en busca de trabajo. Así, las fábricas comienzan a concentrar centenas de trabajadores
que venden su fuerza de trabajo a cambio de un salario. Otra consecuencia de la
Revolución Industrial fue el rápido crecimiento económico. Antes de eso, el progreso
económico siempre fue lento (tomó siglos para que el ingreso per cápita aumentase de
manera significativa), y después, el ingreso per cápita y la población comenzó a crecer
a un ritmo acelerado como nunca antes fue visto en la historia. Por ejemplo, entre 1500
y 1780 la población de Inglaterra aumentó de 3,5 millones a 8,5 millones; ya entre 1780
y 1880 saltó a 36 millones, debido a la drástica reducción de la mortalidad infantil. La
Revolución Industrial cambió completamente la forma de vida de las personas en los
países industrializados. Las ciudades atraían cada vez más a los campesinos y
artesanos, y se convirtieron en grandes centros urbanos. En Inglaterra, alrededor de
1850, por primera vez en un gran país, hubo más personas que vivían en las ciudades
que en el campo. En las ciudades, la gente llenaba los suburbios ocupando casas
viejas e incómodas, con condiciones horribles de higiene y salud, comparado con los
estilos de vida de los países industrializados de la actualidad. Sin embargo,
representaban un gran progreso en comparación con las formas de vida de los
campesinos, que vivían en chozas de paja. Convivían con falta de agua corriente,
infestación de ratas y aguas residuales en las calles. El trabajo del obrero era muy
diferente del trabajo del campesino: las tareas resultaban monótonas y repetitivas
debido a la producción en serie. Este modelo de producción consistía en la subdivisión
del proceso en una única tarea en lugar de la producción de principio a fin del bien
comercial. La vida de la ciudad moderna supuso cambios incesantes. Cada momento,
hubo nuevas máquinas, nuevos productos, nuevos sabores, nuevas modas que
estimulaban el consumo constante. Los estudios sobre las variaciones en la altura
media de los hombres en el norte de Europa, sugieren que el progreso económico
generado por la industrialización tardó varias décadas en beneficiar a la población en su
conjunto. Indican que, en promedio, los hombres del norte de Europa durante la
Revolución Industrial eran 7,6 cm más bajos que aquellos que vivieron 700 años antes,
en la Alta Edad Media. Es extraño que la altura media de los ingleses se hubiera
reducido de forma constante durante los años 1100 hasta el comienzo de la Revolución
Industrial en 1780, cuando la altura media comenzó a subir. Era sólo en el comienzo del
siglo XX que estas poblaciones han regresado a la altura similares a las registradas
entre los siglos IX y XI. La variación de la altura media de una población a través del
tiempo se considera un indicador de salud y bienestar económico.
IMPLICACIONES QUE ESTE IMPORTANTE HECHO
GENERÓ EN EL MUNDO.

La Revolución Industrial supuso un cambio que no sólo afectaría a la sociedad de la


época, sino que marcaría el desarrollo humano posterior. La aparición de las máquinas
cambiaría los aspectos sociales, económicos y políticos, así como el estilo de vida de la
población mundial. Al mismo tiempo que abarató ciertos bienes, también aumentó la
calidad de vida de algunos estratos de la población, mientras a otros los condenó a la
miseria.
En el plano económico, se incrementó de forma sustancial el rendimiento del trabajo, a
la vez que disminuyó el coste de producción. Producir cualquier bien era mucho más
económico que antes, lo que hizo que las naciones industrializadas generaran una
riqueza enorme. A su vez, se acumularon grandes capitales que formaron grandes
compañías y sociedades anónimas que tenían como base la industria. Rápidamente
florecieron las cámaras de comercio, los bancos y las compañías de seguros. Las nuevas
empresas necesitaban créditos, cosa que les garantizaba la banca.

Revolución Industrial

Las demandas productivas surgidas tras la Revolución Industrial propiciaron que se


diseñaran, desarrollaran y perfeccionaran las vías de comunicación y los medios de
transporte entre los distintos países. El capitalismo se extendió como la pólvora y supuso
el fin de otras fórmulas económicas que habían existido desde la época feudal, así como
de la artesanía y la manufactura, que fueron desapareciendo progresivamente.
En el plano social, la mayor repercusión cayó sobre Gran Bretaña. Allí se culminó
el proceso de desaparición del campesinado, que encontró un rival muy poderoso: las
grandes ciudades. Estas eran los centros de referencia de la industrialización, por lo que
la población abandonaba el campo para trasladarse a grandes núcleos urbanos, lo que
impulsó un cambio en la estructura profesional de la población, que ahora estaba
empleada de forma masiva en las diferentes ramas de la industria.
La sociedad se fracturó en dos: el proletariado y la burguesía, lo que fomentó la aparición
de movimientos obreros y sindicales como el socialismo, el comunismo o, incluso, el
anarquismo. Teóricos como Karl Marx fueron poco a poco fundamentando las bases
del movimiento obrero y de las necesidades que tenían. Conforme esta nueva
organización social fue avanzando en el tiempo, las diferencias entre ambos grupos
fueron cada vez más visibles. Por un lado, la burguesía aumentó su bienestar
exponencialmente, mientras que el proletariado se vio rodeado de pobreza e indigencia.
En el plano político, la burguesía, dotada de mayor riqueza, pudo por fin afianzar su
control político. Las revoluciones de 1820, de 1830 y de 1848 fueron los prolegómenos
de la caída de la aristocracia y el ascenso de la burguesía a los mandos de la sociedad. El
capitalismo imperante en la economía también afectó a la política, ya que el
estado concedía libertad plena a las empresas y no intervenía directamente en los
negocios, sino que potenciaba la industrialización y regulaba los derechos de los
trabajadores.
Por último, también hubo cambios drásticos en los modos de vida. El abandono del
campo fue la causa de que ahora las ciudades fueran consideradas el centro de la vida
de la población. La industrialización mejoró en parte las condiciones de vida de la gente,
ya que muchos artículos eran más fáciles de producir, lo que rebajaba su precio y su
accesibilidad. Muchas mujeres se incorporaron al mercado laboral, lo que tuvo una
repercusión directa sobre las costumbres familiares y sobre los derechos de la mujer.

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