5/8/2019 Salmos 106 Comentario de Matthew Henry

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Comentario de Matthew Henry
106:1-5 Ninguno de nuestros pecados o sufrimientos debe evitar que nuestro tributando gloria y alabanza
al Señor. Cuanto más indignos somos, más es su bondad para ser admirado. Y aquellos que dependen de
la justicia del Redentor se esforzará para copiar su ejemplo y con la palabra y con las obras para
manifestar su alabanza. Pueblo de Dios tiene razón de ser gente alegre; y no tiene que envidiar a los hijos
de los hombres su placer o de orgullo.

106:6-12 Aquí comienza una confesión de pecado; porque tenemos que reconocer que el Señor ha hecho
bien, y hemos hecho lo malo. Nos alienta la esperanza de que aunque justamente corregido, pero no
seremos abandonados por completo. Pueblo humilde de Dios poseen culpables ante él. Dios se
desconfiaba porque sus favores no se recuerdan. Si él no nos salvó por amor de su nombre propio, y para
alabanza de su poder y la gracia, todos debemos perecer.

106:13-33 Aquellos que no va a esperar a que el consejo de Dios, con justicia se le dará a los deseos de
sus propios corazones, para andar en sus propios consejos. Un deseo excesivo, incluso para las cosas
legales, se convierte en pecado. Dios mostró su disgusto por ello. Él los llenó de inquietud de la mente, el
terror de conciencia y auto-reproche. Muchos de los que les va deliciosamente todos los días, y cuyos
cuerpos son saludables, tienen flaqueza en sus almas: no hay amor a Dios, ningún agradecimiento, falta de
apetito por el Pan de la vida, y entonces el alma debe ser magra. Aquellos miserablemente olvidarse de sí
mismos, que comiendo impúdicamente sus cuerpos y sus almas se mueren de hambre. Incluso el
verdadero creyente verá abundante causa que decir, Por la misericordia del Señor que yo no soy
consumido. A menudo hemos puesto ídolos en nuestros corazones, escindidos a algún objeto prohibido;
por lo que si una más grande que Moisés no había estado a alejarse de la ira del Señor, que debería haber
sido destruida. Si Dios trató severamente a Moisés por palabras imprudentes, ¿qué merecen los que
hablan muchas palabras orgullosos y malvados? Es sólo en Dios para quitar esas relaciones que son
bendiciones para nosotros, cuando estamos de mal humor y provocando a ellos, y llorar sus espíritus.

106:34-48 La conducta de los israelitas en Canaán, y trato de Dios con ellos, demuestran que el camino
del pecado es cuesta abajo; omisiones dar paso a las comisiones: cuando se olvidaron de destruir las
naciones, aprendieron sus obras. Un pecado llevó a muchos más, y trajo el juicio de Dios sobre ellos. Su
pecado fue, en parte, su propio castigo. Los pecadores a menudo se ven arruinados por los que los
condujo a la maldad. Satanás, que es un tentador, será un torturador. Al fin, Dios mostró misericordia a su
pueblo por amor de su pacto. La inmutabilidad de la naturaleza misericordiosa de Dios y el amor a su
pueblo, le hace cambiar el curso de la justicia por la misericordia; y ningún otro cambio que se entiende
por el arrepentimiento de Dios. Nuestro caso es terrible cuando se considera la iglesia hacia el exterior.
Cuando las naciones que profesan el cristianismo, son tan culpables como nosotros, no es de extrañar si el
Señor les trae bajo por sus pecados. A menos que haya general y profundo arrepentimiento, no puede
haber ninguna perspectiva sino de crecientes calamidades. El salmo concluye con una oración para
completar la liberación del pueblo de Dios, y la alabanza para el comienzo y el progreso de la misma. Que
todos los pueblos de la tierra, antes de mucho tiempo, añada su Amén.

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