El Control Telemático se refiere a la implementación de un sistema de rastreo del imputado
o condenado en el proceso penal guatemalteco como medio alternativo eficaz a la prisión, cuando este goza de alguna medida sustitutiva, tiene impuesto el arresto domiciliario o residencial, al igual que es aplicable a quienes tienen interpuesto en su contra alguna medida de seguridad, según sea el caso y decisión del Juez competente, con el fin de asegurar la presencia del sindicado en el proceso penal y evitar la obstaculización a la averiguación de la verdad. Este sistema es considerado como un medio de vigilancia del sindicado o sentenciado con arresto domiciliar que permite visualizar y localizar al mismo por medio de sistemas electrónicos que asocian la ubicación e información referente con el fin de mantenerlo bajo vigilancia y de esta manera asegurar bienestar y seguridad de la víctima. El sistema penitenciario guatemalteco tiene como objetivo fundamental el velar por la seguridad de los propios reos, porque cada uno de sus derechos sean garantizados a pesar de encontrarse cumpliendo una condena, ya que todo ser humano tienen los mimos derechos y bajo ninguna circunstancia los mismos deben ser violentados, por lo cual el sistema penitenciario guatemalteco tiene el deber de brindar a cada recluso, condiciones favorables para su educación y readaptación a la sociedad al finalizar el tiempo de su condena de prisión. Por el alto índice de procesos penales que en la actualidad se llevan a cabo en los diversos órganos de administración de justicia, existe un amplio número sindicados a los que se les otorga medidas sustitutivas favoreciendo su libertad, a otros se les impone medidas de seguridad y a otros procesados se les interpone arresto domiciliar, dependiendo del delito que se trate, debido a que existe un alto número de reclusos en los diversos centros carcelarios en el país, resulta la necesidad de encontrar una salida alterna que permita que los sindicados de alguna forma cumplan con la justicia, evitando que los mismos sean sometidos a prisión preventiva en lo que dura su proceso de investigación y sobrepasar sus límites de capacidad se tuvo la necesidad de buscar un medio de solución alterna que garantice las resultas del proceso penal y obligar al sindicado el cumplimiento de la pena, pero que durante el transcurso de investigación se le pueda dar libertad al sindicado bajo un control de rastreo para seguir su rastro y evitar la obstaculización a la averiguación de la verdad o el peligro de fuga, por ello se estableció el Sistema de Control Telemático con el fin de que el Estado tenga la accesibilidad de controlar procesado o condenado sin necesidad de privarlo de su libertad. Este sistema le ha dado legalidad en el sistema penal guatemalteco por medio de la Ley de Implementación del Control Telemático en el Proceso Penal, Decreto número 49-2019, y del Acuerdo para la Implementación del Control Telemático en el Proceso Penal de fecha veinte de febrero de dos mil diecisiete, pero que a la presente fecha no se ha implementado el uso del mismo en el sistema debido al alto costo que genera, ya que no se cuenta con el financiamiento adecuado y no se ha establecido el numero límite de cuantas personas pueden utilizar este tipo de medida. La Ley de Implementación de Control Telemático da la aptitud al sistema penal guatemalteco para vigilar al sindicado o condenado, sin necesidad de encontrarse privado de libertad, por medio de la implementación de restricciones de movimiento que se estimen convenientes en cada caso y a la vez la prohibición de desplazarse a lugares no autorizados, en el cual, el sindicado o condenado está obligado a cumplir dichas restricciones. Este tipo de sistema es posible a través de un monitoreo que puede darse por medio de dispositivo de localización en pulseras, tobilleras, brazaletes electrónicos, o cualquier dispositivo electrónico que se encuentre conectado a una red telefónica o vía red conmutada fija siendo controlada a través de GPS, ya que lo que se pretende es que el sindicado este bajo vigilancia y a la vez proteger a las víctimas del delito, especialmente a las mujeres, garantizando una vida libre de violencia, de acuerdo a la normativa nacional e internacional. El dispositivo que tiene planificado hacer posible este medio de control debe ser financiado por el sindicado o condenado a disposición del Juez, pero cuando por razones socioeconómicas el este no cuente con la capacidad de pagarlo el Juez establecerá el medio correcto, por lo cual este sistema será aplicado con el propio consentimiento de la persona, salvo en casos de medidas de seguridad que ameriten a criterio de juez competente, teniendo la tarea al juez de dar una explicación al sujeto del uso del mismo así como las consecuencias de su violación. Cuando por algún motivo, el sindicado o condenado que esté utilizando este control incumpla con las obligaciones impuestas para su uso y se comprobara la destrucción del dispositivo de forma dolosa, se revocarán los beneficios otorgados y de inmediato se deberá ordenar su aprehensión dictándose prisión preventiva. Es importante resaltar que cuando este tipo de dispositivo de vigilancia sea destruido u alterado por el sindicado o condenado que lo utilizare, comete el delito de destrucción de dispositivos de control telemático y a consecuencia de tal hecho será sancionado con prisión de cinco a diez años y una multa de veinticinco mil a cincuenta mil Quetzales o cuando un tercero ayudare a su destrucción o manipulación será sancionado con prisión de tres a seis años y multa de diez mil a veinte mil quetzales. Otro de los puntos importantes es conocer que este dispositivo será controlado por medio de un centro especializado denominado Centro de Control Telemático que deberá crearse cuando se empiece a utilizar esta nueva medida, teniendo a su cargo el registro de los archivos y los reportes de los incidentes en la utilización de los dispositivos, así como el almacenamiento y ordenamiento de todos los datos recibidos, estando a cargo del Ministerio de Gobernación, a través de la Unidad de Control Telemático. Este sistema, por lo tanto, no será otra forma de privación de libertad, sino una opción más del mas de medidas para asegurar la presencia del encausado en el proceso penal, evitando su fuga u obstaculización a la averiguación de la verdad y pretende darse por medio de criterio del juez en lugar de la prisión; que reivindicará los derechos de las personas ligadas a proceso penal y atenuará los efectos negativos del encierro, pero que se sigue a la espera de su aplicación.