BIOGRAFÍA DE TIMOTEO

–Epístolas Pastorales–

Estudiante: Claudio Montano M.

Docente: Pr. Juan Carlos Gajardo V..

Concepción, agosto de 2019

BIOGRAFÍA DE TIMOTEO

Muy diferente a lo que algunos podrían pensar, existen referencias a Timoteo en

numerosos pasajes de las Escrituras aparte de la carta remitida al mismo por el

Apóstol Pablo. A través de ellas podemos evidenciara algunos aspectos de su

personalidad y reputación. En ninguno de los casos se tiene registro de el mismo

Timoteo expresándose, sino más bien, testimonio de Lucas (al escribir Hechos) y del

mismo Pablo quien lo menciona, sobre todo como un co-autor en algunas de las

epístolas adjudicadas al Apóstol.

El discípulo aparece en escena durante el primer viaje misionero de Pablo, cuando éste

último llegó a Listra. Allí, dice la Escritura, que encontró a cierto discípulo que tenía

muy buen testimonio entre los cristianos de la zona (Hch. 16:1-2). Al parecer, tener

madre judía y padre griego generaba alguna ssupicacias entre los cristianos judíos, por

lo que su ahora líder lo circuncidó, aplacando las posibles criticas a fin de no

entorpecer la predicación del evangelio.

Su madre judía había enseñado las escritruas desde pequeño a Timoteo, es decir, lo

crió como judío (2Tim. 3:15) y este sería el origen de las problemáticas con los judíos, a

diferencia de Tito, quien era griego puro (Gal 2:3).

Al parecer el discípulo se convierte al cristianismo por medio de Pablo en es emismo

viaje misionero (el primero) y fue testigo del rechazo y persecuciones de entonces

(1Tim. 3:10-11).

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Timoteo se convierte en un colaborador y, según algunas apreciaciones, el sucesor de

Pablo en muchsos entidos. Al momento de escrbirse la primera epístola a Timoteo,

este llevaba alrededor de 15 años ocn el Apóstol acompañándolo en fielmente en

variadas circunstancias (Hch. 18:5, 18:22, 19:22, 20:4). Más aun, estuvo con él al escribi

las epístolas a los Romanos, 2da a los Corintios, Filipenses y Colosenses (Ro. 16:21, 2Co.

1:1, Fil. 1:1, Col. 1:1). De tal confianza era para Pablo que en numerosas ocaciones fue

enviado en su lugar a cumplir labores que osn propias del apóstol como fortalecedor

de la fe en las iglesias (1Co. 4:17; 1Ts. 3:2; Fil. 2:19).

La importancia de Timoteo en el crecimiento y fortalecimiento de la iglesia naciente es

innegable. Es mencionado por Lucas 6 veces en el libro de los Hechos, 17 veces lo

menciona su pastor en las epístolas e incluso el autor de Hebreos lo menciona una vez,

dando cuenta de que se encuentra en libertad nuevamente y que iría de visita con el

autor (Heb. 13:23). Esto evidencia que, al parecer, también sufrió penalidades como su

maestro. Es interesante saber que la epístola a los hebreos se escribió entre los años 60

y 65 de nuestra era, rango en que, si el Apostol no estaba muerto ya, estaba pronto a

suceder.

Luego de conocer a Pablo, fue encomendado a Tesalónica y es mencionado en las

salutaciones a los hermanos en la carta a edsta misma iglesia junto a Silvano

(aparentemente Silas). También está con Pablo durante la predicación en Corinto

(2Co. 1.19). Aparece nuevamente en la misión de Pablo en Éfeso (1 Co. 4.17),

encomendado con Erasto a a una misión a Macedonia.

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En cuanto a su carácter, todos parecen concordar en que era más bien tímido, de allí

que Pablo pide a los Corintios que procuren hacerlo sentir cómodo (1 Co. 16.10–11;

4.17). Al parecer, la misión encomendada a Timoteo entre los Corintios no prosperó, de

allí la situación que se suscita en el capítulo 2 de la segunda carta a éstos. Resulta

interesante observar que, aun cuando en los saludos, Timoteo está presente, es Tito

quien finalmente es encomendado a esta iglesia como delegado de Pablo. Aun así,

acompañó a Pablo en el otro viaje a Corinto porque estaba con él al escribir la carta a

los Romanos (Ro. 16.21).

Como se mencionó brevemente, estaba con Pablo, ya preso, al escribir las epístolas a

los Colosenses, Filemón y Colosenses posterior subir a Jerusalén con la ofrenda

acompañando a su líder (Hch. 20.4–5).

Sin duda Timoteo ha sido uno de los colaboradores fieles de Pablo, un Hijo en la fe

como el mismo apóstol lo denomina. Prueba de ello es la segunda carta que le escribe y

en circunstancias tan especiales. Desa verle, estar con él. Aquel encuentro no ocurrió,

no en esta vida.