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SEMANA 7 – INTRODUCCIÓN A LA PSICOPEDAGOGÍA

INTRODUCCIÓN A LA PSICOPEDAGOGÍA

SEMANA 7

Rol del psicopedagogo en diferentes


contextos. Parte I
SEMANA 1

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APRENDIZAJES ESPERADOS
 Distinguir el rol del psicopedagogo, en
diferentes contextos de desarrollo
profesional, considerando sus aspectos
diferenciadores

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APRENDIZAJES ESPERADOS ................................................................................................................. 2


INTRODUCCIÓN ................................................................................................................................... 4
1. ROL DEL PSICOPEDAGOGO EN DIFERENTES CONTEXTOS DE DESARROLLO PROFESIONAL ........ 5
1.1 ASPECTOS DIFERENCIADORES RESPECTO DE OTRAS DISCIPLINAS .................................... 5
1.2 EL PSICOPEDAGOGO COMO PARTE DE EQUIPOS DE TRABAJO........................................... 6
1.2.1 EQUIPOS DE TRABAJO MULTIDISCIPLINARIOS ............................................................ 7
1.2.2 EQUIPOS DE TRABAJO INTERDISCIPLINARIOS ............................................................. 9
1.2.3 EQUIPOS DE TRABAJO TRANSDISCIPLINARIOS.......................................................... 10
1.3 CAMPO LABORAL Y CAMPO TEÓRICO DE DESARROLLO PROFESIONAL ........................... 11
1.3.1 PSICOPEDAGOGÍA EN LA EDUCACIÓN INICIAL .......................................................... 11
1.3.2 PSICOPEDAGOGÍA EN EL CONTEXTO ESCOLAR ......................................................... 13
1.3.3 PSICOPEDAGOGÍA EN LA EDUCACIÓN SUPERIOR ..................................................... 16
1.3.4 PSICOPEDAGOGÍA EN LA EDUCACIÓN DE ADULTOS ................................................. 20
COMENTARIO FINAL.......................................................................................................................... 23

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INTRODUCCIÓN
La psicopedagogía es una disciplina que se laboral del psicopedagogo relacionados con
desarrolla a partir de una doble dimensión: el sistema educativo nacional. Se dará cuenta
por una parte, la dimensión psicológica y, por de las posibilidades que el propio desarrollo
otra, la dimensión pedagógica. La de la disciplina y la evolución en la
articulación en la práctica de ambas comprensión de las necesidades que
dimensiones prepara al psicopedagogo o presentan las personas ha traído aparejado
psicopedagoga para abordar las necesidades durante los últimos tiempos.
de la persona, no solo desde un plano
educativo, sino también desde su Se presenta, entonces, el ejercicio
integralidad humana. psicopedagógico en diferentes modalidades
del sistema educativo, desde la educación
De esta manera, el rol que el psicopedagogo parvularia hasta la educación superior. Con
cumple en su desempeño profesional no se ello, se pretende una mejor comprensión del
limita a lo exclusivamente educativo. rol que le compete a la psicopedagogía para
la atención de los niños, niñas, jóvenes y
En el siguiente documento, se presentan adultos.
algunos de los ámbitos de desempeño

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1. ROL DEL PSICOPEDAGOGO EN DIFERENTES CONTEXTOS


DE DESARROLLO PROFESIONAL
1.1 ASPECTOS DIFERENCIADORES RESPECTO DE OTRAS DISCIPLINAS
A partir de las definiciones que se han revisado durante el desarrollo de esta asignatura, es posible
identificar algunos aspectos diferenciadores de la psicopedagogía en cuanto a su carácter
disciplinario y que se evidencian con respecto a otras áreas vinculadas con el desarrollo y el
aprendizaje humano, las que generalmente se enfocan solo en aspectos específicos del área que
les corresponde. Un par de ejemplos de aquello lo ofrece la fonoaudiología, que se encarga
particularmente de la prevención, evaluación, diagnóstico y tratamiento de las alteraciones del
lenguaje, habla, voz y audición; y la psicología, que se ocupa de estudiar y analizar la conducta y
los procesos mentales de los individuos y de grupos humanos.

Para Bravo (2009, p. 220), “el término psicopedagogía se refiere a una especialización psicológica y
pedagógica, cuya acción concreta consiste, principalmente, en la aplicación de los conocimientos
derivados de ambas ciencias a problemas concretos que surgen en el campo de la educación”, lo
que le otorga una cualidad particular a la disciplina, pues integra en su conformación una doble
dimensión: la dimensión psicológica y la dimensión pedagógica.

 La dimensión psicológica de la psicopedagogía ofrece una amplia perspectiva de todos los


aspectos de la vida del ser humano y también de la forma en que cada uno de estos
aspectos interactúa en el desarrollo de las personas y su aprendizaje. Esto permite al
psicopedagogo entender al ser humano como un ser bio-psico-social. Esto quiere decir
que la dimensión psicológica comprende al ser humano como un ser vivo con un
organismo y mentalidad complejas, y que además ha desarrollado la capacidad de
organizarse y vivir en sociedad. Estos componentes biológicos o fisiológicos, psicológicos y
sociales están en interacción permanente y no pueden separarse, pues es a partir de su
interacción que se definen las personas.
 La dimensión pedagógica enfoca a la psicopedagogía en el aprendizaje particularmente. Le
ofrece al psicopedagogo las competencias pedagógicas necesarias para comprender el
proceso de enseñanza-aprendizaje, evaluar, diagnosticar y abordar las necesidades
educativas que puedan presentar las personas, con las estrategias, metodologías,
instrumentos y recursos pertinentes.

De esta manera, la psicopedagogía se diferencia de otras disciplinas porque está conformada a


partir de una integración bi-disciplinaria: la psicología y la pedagogía. Por lo tanto, considera en el
proceso de evaluación, diagnóstico e intervención de las necesidades educativas no solo los

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aspectos instrumentales necesarios para el aprendizaje (como los procesos de lectura, escritura y
cálculo), sino que sobre todo “las formas diferentes en que las personas se comportan, aprenden,
enseñan y piensan […] para entender la génesis del proceso educativo” (Ventura, 2015, p. 9).
Desde ahí busca las mejores opciones para la intervención. Esto refiere a la consideración del
sujeto como un ser integral y entiende las necesidades educativas como los requerimientos
específicos que puede presentar una persona, por diferentes causas, en diferentes momentos de
la vida o de su trayectoria educativa. Es así como el psicopedagogo atiende las necesidades
educativas relacionadas con problemas de aprendizaje, pero también con amplios talentos, incluso
pudiendo abordar situaciones relacionadas con el envejecimiento de las personas como, por
ejemplo, la pérdida de memoria.

Por lo tanto, la psicopedagogía se desarrolla en un campo de acción más amplio que solo los
problemas de aprendizaje, es decir, no se centra exclusivamente en aquellos que presentan
dificultades en diversas áreas del aprendizaje, sino que pretende ofrecer alternativas de apoyo
especializado para ser aplicados durante el proceso de enseñanza-aprendizaje, tanto en contextos
escolares como familiares, en ambientes formales e informales.

1.2 EL PSICOPEDAGOGO COMO PARTE DE EQUIPOS DE TRABAJO


Cuando se habla de trabajo en equipo, no solo se refiere a un grupo de personas que se divide una
tarea para su cumplimiento, sino que implica un esfuerzo compartido entre sus miembros. En el
contexto de la atención a situaciones relacionadas con los aprendizajes, los equipos se conforman
por profesionales de diferentes áreas vinculadas con el desarrollo de las personas, por lo que el
trabajo se potencia a partir de las experiencias, de los conocimientos, de los aportes de cada uno.
Además, las fortalezas se ven ampliadas, por lo que es especialmente relevante para el
crecimiento profesional y personal del equipo en su conjunto.

Es así como la importancia del trabajo en equipo radica en que, mientras más personas están
enfocadas y comprometidas en el desarrollo de una tarea, más fácil resultará concretarla y más
eficientes serán sus resultados.

Generalmente, se habla de tres tipos de equipos de trabajo: los equipos multidisciplinarios,


interdisciplinarios y transdisciplinarios, los que se conforman de acuerdo a las características de las
situaciones que deben ser resueltas. A continuación, se explica cada uno de ellos y cómo se
vinculan con la disciplina psicopedagógica.

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1.2.1 EQUIPOS DE TRABAJO MULTIDISCIPLINARIOS


Los equipos de trabajo multidisciplinarios están conformados por un grupo de profesionales de
diferentes disciplinas y áreas de desempeño, es decir, con diferente formación académica y
experiencias profesionales. Se conforman a partir de una necesidad particular, para resolver un
problema que requiere de miradas diversas para ser resuelto, durante un tiempo determinado.
Esto implica establecer un objetivo común y un plan de trabajo para lograr su cumplimiento. Estos
equipos son liderados por uno de los profesionales que lo conforman, quien es responsable del
trabajo que se desarrolla; no obstante, cada uno de los miembros aporta para el cumplimiento de
los objetivos propuestos.

Desde esta perspectiva, según Patel, Yoskowitz y Arocha (2009, citado en Tamayo, Besoaín-
Saldaña, Aguirre y Leiva, 2017, p. 2), por equipo multidisciplinario se entiende “al trabajo común
realizado por profesionales de las diferentes categorías, en las que su contribución individual
conduce a un producto final que satisface los requerimientos únicos de cada parte en la solución
de los problemas identificados”, lo que trae consigo amplios desafíos en cuanto a la construcción
colectiva del trabajo que se debe realizar, pues implica un desarrollo comunicativo importante, así
como la superación de acuerdos y articulaciones para una efectiva práctica colaborativa (Tamayo
et al., 2017, p. 2).

En resumen, la multidisciplinariedad se entiende como varias disciplinas que abordan un mismo


objeto de estudio, pero que no tienen conexión o relación aparente entre ellas (Carmona, 2004),
pero que se enfocan por un tiempo en un objeto común.

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EJEMPLO

Es frecuente el abordaje multidisciplinar de las dificultades de aprendizaje o de las


dificultades conductuales, u otras problemáticas de la persona que afecten su
integralidad. Es conocido que las dificultades de aprendizaje impactan diferentes
aspectos de la vida de quien las presenta, por lo que para su tratamiento es
necesario establecer un plan de intervención que implique estos variados aspectos,
aun cuando el objetivo principal sea terminar con los problemas para aprender y
mejorar el desempeño académico. De esta manera, mientras el psicopedagogo
orienta sus esfuerzos en entregar herramientas y técnicas para satisfacer las
necesidades de aprendizaje del propio estudiante, trabaja colaborativamente con el
docente de aula en definir las adecuaciones curriculares pertinentes que ayudarán
en este proceso. Por su parte, el psicólogo abordará las situaciones afectivo-
emocionales con el estudiante (tolerancia a la frustración, motivación, autoestima,
autoconcepto académico, etc.) y su familia. Y así, según el diagnóstico y/o
problemáticas que presente el estudiante, pueden participar más o menos actores
en equipos de trabajo multidisciplinarios (incluidos trabajadores sociales, terapeutas
ocupacionales, fonoaudiólogos, psiquiatras, etc.) lo que facilita el desarrollo de
intervenciones, desde una perspectiva holística.

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1.2.2 EQUIPOS DE TRABAJO INTERDISCIPLINARIOS


Los equipos de trabajo interdisciplinarios, a diferencia de los multidisciplinarios, se conforman por
un grupo de profesionales que pueden ser de la misma disciplina o de diferentes áreas. Este
equipo se conforma para conseguir un objetivo común, para lo cual todos y cada uno comparten
la responsabilidad, aunque igualmente se encuentran bajo una autoridad que es el responsable
mayor. Estos equipos se establecen de manera estable y duradera, "para contribuir al estudio y
tratamiento de una situación específica determinada con anterioridad" (Pizarro, 1984, p. 11). Lo
anterior aporta de manera importante al desarrollo de la o las disciplinas que conforman los
mismos equipos interdisciplinarios, pues a través de estos equipos se logra contribuir “a un
conocimiento científico al servicio de la sociedad” (Pizarro, 1984, p. 12), principalmente porque
estos equipos están dedicados al estudio de problemas específicos en las áreas de la educación, la
salud, la economía y otros, que permitan generar cambios en la sociedad.

Se entiende, entonces, la interdisciplinariedad como la integración entre disciplinas, en donde los


métodos para abordar un problema o un objeto de estudio son comunes (Carmona, 2004).

A diferencia de la multidisciplinariedad, situación en la que diferentes profesionales (de distintas


áreas y/o disciplinas) abordan una problemática concreta desde diferentes puntos de vistas que
son complementarios y necesarios para resolver un problema puntual, los equipos
interdisciplinarios se conforman por profesionales de una misma disciplina o área (por ejemplo,
todos son del área médica, todos son del área educativa o todos son psicólogos o bien, todos son
profesores de matemática) para investigar respecto de un tema en particular, o bien buscar
soluciones a un problema en particular.

EJEMPLO

En el ámbito de la educación, generalmente se conforman equipos interdisciplinarios


para el asesoramiento y orientación psicopedagógica en las establecimientos
educacionales, en establecimientos de educación superior, e incluso en el Ministerio de
Educación, para la elaboración de manuales y/o protocolos de diagnóstico e
intervención y la elaboración de políticas y normativas para la atención de estudiantes
con necesidades educativas especiales. Por otra parte, suelen conformarse equipos de
trabajo interdisciplinarios para el diseño, desarrollo, implementación y evaluación de
proyectos en un área particular (por ejemplo, atención a la diversidad, tecnología
educativa, u otras temáticas más específicas como, abordaje de estudiantes con
espectro autista, con problemas de audición y lenguaje, o bien, en el ámbito de la
identidad de género en la escuela, etc.)

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Lo principal es que los miembros de los equipos interdisciplinarios comparten formación


disciplinaria y conocimientos en un área en particular, complementándose en experiencias y
desarrollo profesional, lo que enriquece las líneas investigativas y de intervención en las que se
ocupan.

1.2.3 EQUIPOS DE TRABAJO TRANSDISCIPLINARIOS


La transdisciplinariedad es un concepto complejo y de reciente creación. Su definición aún no es
precisa, sin embargo, apunta a un conjunto de disciplinas que abordan juntas un objeto de
estudio, pero en la que una de ellas es la que orienta el proceso investigativo (Carmona, 2004). Es
decir, en el marco de la interdisciplinariedad, un equipo de trabajo de una misma disciplina se
plantea estrategias de largo alcance que buscan cambios profundos, buscando las variables del
sistema que ayuden a conseguirlos (Carmona, 2004). En este contexto, desde una disciplina
particular, se aborda un problema o una situación de estudio considerando los aportes de otras
disciplinas, sin integrarlas en la práctica del trabajo que se realiza, pero recogiendo sus
fundamentos, sus conceptos y sus aportaciones, para enriquecer la mirada de lo que se pretende
estudiar o resolver.

En educación, este enfoque se considera especialmente importante, pues implica el desarrollo del
estudio y práctica de la pedagogía, considerando los aportes de variadas disciplinas que
contribuyen comprender el fenómeno educativo desde todos sus ámbitos y alcanzar la calidad de
los procesos de enseñanza-aprendizaje.

Los diferentes enfoques de trabajo en equipo, ofrecen también distintas posibilidades de


desarrollo profesional para el psicopedagogo y de desarrollo disciplinar para la psicopedagogía en
sí misma. El psicopedagogo, a partir de su formación psicológica y pedagógica, y de la experticia
que alcanza en los procesos de evaluación, diagnóstico e intervención de situaciones
problemáticas vinculadas con los aprendizajes (altas capacidades o dificultades para aprender), es
capaz de distinguir todos los ámbitos de la persona que se ven afectados en el contexto de las
necesidades educativas. Desde esta perspectiva, está altamente capacitado para conformar
diferentes equipos de trabajo.

En los equipos multidisciplinarios, que son aquellos que con más frecuencia se conforman en los
contextos educativos, formales o informales, el psicopedagogo es parte importante, pues para
abordar de manera integral las necesidades educativas de los estudiantes es necesario contar con
profesionales que tengan la formación idónea que les permita ser un aporte para la intervención y
respuesta educativa pertinente a las necesidades educativas especiales de aquellos estudiantes
que lo requieran. Dependiendo de la evaluación inicial y del diagnóstico que se establezca, el
equipo multidisciplinario planificará la intervención de tal manera que se satisfagan, de manera
sistémica, las necesidades de aprendizaje de los estudiantes.

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También en el contexto de equipos multidisciplinarios, a través del último tiempo, se han abierto
otros campos de desarrollo profesional, en los cuales el psicopedagogo puede realizar amplios
aportes. El ámbito comunitario, por ejemplo, en programas especializados de intervención
socioeducativa con jóvenes en conflicto con la justicia; con niños, niñas o jóvenes de programas de
reinserción escolar, u otros.

El ámbito de la psicopedagogía laboral, aunque es un campo de reciente desarrollo profesional


para el psicopedagogo, se presenta como una oportunidad para formar parte de equipos
multidisciplinarios en empresas públicas y privadas en contextos de formación, capacitación
laboral y gestión de talentos.

Asimismo, el psicopedagogo puede conformarse como miembro de equipos interdisciplinarios en


diferentes contextos laborales, en los que se requiera abordar un objeto de estudio particular; por
ejemplo, en equipos profesionales que se dediquen a la intervención con sujetos que presentan
déficit atencional, con o sin hiperactividad.

Finalmente, la formación del psicopedagogo le habilita para ser parte de equipos


transdisciplinarios que se orienten a resolver problemáticas de orden más complejo que impliquen
mejoras o ampliación de conocimientos a nivel de sistema educativo, del proceso de enseñanza-
aprendizaje, de estudio de las dificultades de aprendizaje u otros temas relevantes.

1.3 CAMPO LABORAL Y CAMPO TEÓRICO DE DESARROLLO PROFESIONAL


1.3.1 PSICOPEDAGOGÍA EN LA EDUCACIÓN INICIAL
La etapa de la educación inicial o parvularia -como se denomina en el sistema educativo chileno-,
se estructura a partir de niveles enseñanza: nivel sala cuna, nivel medio y 1° y 2° nivel de transición
(pre-Kinder y Kinder). El primer nivel de enseñanza parvularia, se considera un período crítico y el
más significativo en la formación de una persona. Un periodo en el que el desarrollo de sus
capacidades físicas, sociales, emocionales, cognitivas y de lenguaje resultan fundamentales como
base para la formación integral de la persona, y que se irán consolidando en la etapa escolar y
siguientes.

En este contexto, el desarrollo y consolidación de la educación parvularia en Chile, ha permitido


relevarla como un nivel de enseñanza fundamental en el ámbito educativo. En esta consolidación
ha influido, especialmente, la definición de kínder como nivel obligatorio, en 2015, para todos los
niños y niñas de país, aumentando de 12 a 13 los años de enseñanza obligatoria en Chile. Esto
implica que, para ingresar a primero básico, es requisito haber cursado kínder.

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Lo anterior es especialmente importante porque los primeros años en la vida de las personas,
pueden ser determinantes para una adecuada y exitosa trayectoria formativa, dado que “en este
periodo se expanden las capacidades relacionadas con procesos cognitivos básicos y superiores”
(Mineduc, 2018a, p. 15). Atendiendo a esto, es fundamental potenciar la accesibilidad cognitiva de
los niños y niñas para la comprensión de conceptos, rutinas, materiales, normas, etc., que les
permitan acceder y participar del aprendizaje activamente (Mineduc, 2018a), tarea en la que el
nivel de educación inicial cobra especial relevancia al constituirse en el primer espacio formal de
aprendizaje en el que participan las personas.

En esta tarea, la psicopedagogía aporta desde un rol experto que no solo alerta sobre situaciones
que representan un riesgo para la trayectoria formativa de los niños y niñas, sino que además,
juega un importante papel en la estimulación temprana y oportuna de los procesos cognitivos,
además del asesoramiento para el desarrollo de los procesos que forman parte de la educación
inicial.

1.3.1.1 ROL DEL PSICOPEDAGOGO EN LA EDUCACIÓN INICIAL

Es un hecho que la detección precoz de las dificultades de aprendizaje, es el método más eficaz
para identificar y subsanar cualquier problema de aprendizaje que pudiera presentarse, para
garantizar un apropiado desarrollo cognitivo, físico y emocional.

Desde esta perspectiva, el aporte de la psicopedagogía en la educación inicial está orientada a una
labor de potenciación y prevención de posibles problemáticas en el proceso de aprendizaje que
pudieran entorpecer el acceso, permanencia y logros de aprendizaje en las etapas siguientes y, por
otra, a estimular los procesos cognitivos de niños y niñas, a partir de la intervención temprana. De
esta manera, la atención psicopedagógica en etapas iniciales permite velar por un correcto
desarrollo infantil que facilite un proceso de aprendizaje sin dificultades al comenzar su etapa
escolar

Marina Müller (2007), psicóloga y psicopedagoga argentina, habla del desarrollo de la


psicopedagogía en los niveles iniciales desde la idea de la psicopedagogía preventiva, entendida
como aquella que contribuye a evitar o minimizar los fracasos en el contexto educativo. Es decir,
en la etapa preescolar, el psicopedagogo se encarga de detectar situaciones que puedan referir un
posible problema para aprender y potenciar los procesos cognitivos, ya sea para prevenir
dificultades o bien, para estimular las áreas más descendidas asegurando una apropiada inserción
en la etapa escolar. Es un hecho que, mientras antes se inicie la estimulación de las capacidades
relacionadas con procesos cognitivos básicos y superiores, los niños y niñas tendrán una mayor y
mejor accesibilidad cognitiva "para entender y utilizar de mejor forma los conceptos, rutinas,
materiales, normas entre otros aspectos- que les permitan acceder al aprendizaje y participar en
este de forma activa y en igualdad de condiciones" (Mineduc, 2018a, p. 15).

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Esta idea de la psicopedagogía preventiva no solo se dirige a los niños y niñas, mediante
diagnósticos y planes de intervención, sino que también implica tareas de asesoramiento a
educadoras y padres o adultos responsables de los niños, incluso abarca ámbitos temáticos
diversos, como la asesoría en planes de recreación y uso del tiempo libre. En el caso de las
educadora de párvulos, el asesoramiento psicopedagógico le permite una apertura hacia los
procesos de enseñanza y aprendizaje más allá de la formación inicial que se orienta a un estándar
de estudiante preescolar, mostrándole las variedades de estudiantes y las posibilidades de
prevención de dificultades de aprendizajes y estimulación de los procesos cognitivos para una
adecuada formación preescolar y escolar.

Desde un enfoque de educación inclusiva, la psicopedagogía en la educación inicial puede aportar


orientando el trabajo pedagógico de las educadoras y técnicos para la incorporación de estrategias
de diversificación curricular que facilitan la atención a la diversidad, principalmente porque las
políticas educativas nacionales exigen una mirada y gestión inclusiva de parte de los centros
educativos, de tal manera que en salas cunas y jardines infantiles es frecuente encontrar niños y
niñas con necesidades educativas diversas que requieren de una intervención oportuna para
apoyar la incorporación y trayectoria exitosa en la educación escolar.

Para profundizar en estrategias para el desarrollo de prácticas inclusivas


en salas cunas y jardines infantiles, se sugiere la revisión de las
orientaciones para prácticas inclusivas que ofrece Mineduc (página 18 a
23).

https://bit.ly/2Jk2XLh

1.3.2 PSICOPEDAGOGÍA EN EL CONTEXTO ESCOLAR


La etapa escolar en Chile tiene carácter obligatorio. Se desarrolla desde la enseñanza básica, que
inicia en primero básico y concluye en octavo año, y la enseñanza media, que va desde primero a
cuarto medio.

La etapa escolar representa un importante ciclo de aprendizaje en el que se desarrolla un proceso


de construcción de conocimientos conceptuales, procedimentales y actitudinales que involucran
información y habilidades fundamentales para el desenvolvimiento en la sociedad, conocimientos
y habilidades que se irán formalizando y consolidando en las etapas siguientes de educación
superior e inserción al mundo laboral.

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Los niveles de educación básica y media, desarrollan su quehacer formativo a partir de las bases
curriculares, que es un instrumento curricular que estructura lo que los estudiantes deben saber,
lo que deben saber hacer y orientan, además, el deber ser de los estudiantes en su entorno
inmediato y en la sociedad, a partir de la construcción de valores compartidos.

Las bases curriculares para la educación básica y la educación media señalan que el proceso de
enseñanza y aprendizaje debe implementarse tridimensionalmente, a partir de objetivos de
aprendizaje que se componen de conocimientos, habilidades y actitudes (Mineduc, 2015, p. 9):

 Conocimientos: “corresponden a conceptos, redes de conceptos e información sobre

hechos, procesos, procedimientos y operaciones. Esta definición considera el

conocimiento tanto como información teórica (sobre objetos, eventos, fenómenos,

procesos y símbolos, entre otros), como comprensión (es decir, información integrada en

marcos explicativos e interpretativos mayores, que dan base para desarrollar la capacidad

de discernimiento y de argumentación)”.

 Habilidades: “son capacidades para realizar tareas y para solucionar problemas con
precisión y adaptabilidad. Pueden desarrollarse en los ámbitos intelectual, psicomotriz y/o
psicosocial”.
 Actitudes: “son disposiciones aprendidas para responder, en términos de posturas
personales, frente a objetos, ideas o personas, y que propician determinados tipos de
comportamientos o acciones”.

Esta cualidad de los objetivos de aprendizaje implica para el ejercicio pedagógico estar en
constante atención respecto de cómo abordar los contenidos sin descuidar el desarrollo y
fortalecimiento de habilidades procedimentales para su puesta en práctica, así como las actitudes
del estudiante frente al aprendizaje, a las relaciones que establece con sus pares, a la comprensión
de su rol en la sociedad (los aportes que significa para su entorno inmediato y los aportes que
hace a la sociedad en su conjunto).

Al igual que en la educación parvularia, las políticas educativas exigen para la educación escolar un
enfoque inclusivo que implica responder de manera pertinente a todas las necesidades educativas
que presenten los estudiantes, de tal manera de asegurar una trayectoria educativa en igualdad
de condiciones para todos.

El propio Ministerio de Educación señala que para abordar el curriculum de manera inclusiva, es
fundamental asumir desafíos como (2015):

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 Abordar los diferentes componentes curriculares de forma flexible, contextualizada y


pertinente a las características de cada curso, las potencialidades de los estudiantes y
considerando su contexto.
 Reconocer las cosmovisiones y aproximaciones a los saberes y conocimientos que tiene
cada uno de los estudiantes.
 Considerar para facilitar la expresión y desarrollo de las diversas formas, ritmos,
capacidades y habilidades para aprender.
 Incorporar en el proceso de enseñanza y aprendizaje, estrategias pedagógicas
diferenciadas que aseguren los aprendizajes de todos.
 Valorar y avanzar en prácticas de trabajo colaborativo con otros profesionales para dar
respuesta a la complejidad que implica la atención a la diversidad.

Desde esta perspectiva, el aporte que la disciplina psicopedagógica realiza en el ámbito de la


educación básica y media para el cumplimiento de los propósitos educativos que se orientan hacia
una formación más integral del ser humano, considerando aspectos cognitivos como base
conceptual, pero con especial énfasis en los aspectos personales que le permitan un desarrollo
más armonioso, es de gran relevancia. Esto pues en un contexto inclusivo de educación importa
que todos los estudiantes, con independencia de las características, de las dificultades, de las
experiencias familiares, sociales, de aprendizaje, desarrollen su máximo potencial educativo para
avanzar en los niveles de formación o, en su defecto, desenvolverse autónomamente en la vida.

1.3.2.1 ROL DEL PSICOPEDAGOGO EN EL CONTEXTO ESCOLAR

Una vez más, la formación bidimensional del psicopedagogo le prepara para el desafío de atender
a la diversidad en el contexto escolar. Esto es, aportar desde la participación en equipos
multidisciplinarios e interdisciplinarios para prevenir, detectar, evaluar y elaborar planes de
intervención que sean pertinentes a las necesidades que presentan los estudiantes.

Actualmente, en Chile se ha relevado la significancia de los programas de integración escolar como


una estrategia inclusiva del sistema educativo que favorece el acceso, la participación y los
aprendizajes de los estudiantes que presentan necesidades educativas especiales, ya sea por
problemas de aprendizajes, por situación de discapacidad o por presentar altos talentos; desde la
lógica de que cualquier situación que exija apoyos adicionales a los que ofrece la educación
regular representa una necesidad especial.

Pero para que las ayudas adicionales que se brinden sean pertinentes y respondan
apropiadamente a las características de los estudiantes que las requieren, se señala como un
aspecto fundamental un diagnóstico certero de la situación de aprendizaje. En este marco, el rol
del psicopedagogo se considera fundamental desde la normativa vigente que regula la integración

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escolar de estudiantes con necesidades educativas especiales; se le tiene como un profesional


asistente de la educación idóneo para evaluar e intervenir algunas de las problemáticas que
pueden afectar el normal desempeño escolar, como por ejemplo los trastornos específicos del
aprendizaje y el déficit atencional con o sin hiperactividad.

Por otra parte, el contexto escolar brinda otras posibilidades de desarrollo profesional al
psicopedagogo, a partir de la incorporación en equipos de trabajo multidisciplinarios o el trabajo
individual en establecimientos que no cuentan con Programas de Integración Escolar. En estos
ámbitos de desempeño, el psicopedagogo aporta desde la conformación de grupos diferenciales o
grupos de apoyo psicopedagógico, en los que se realizan una serie de acciones en la línea de la
prevención, evaluación e intervención psicopedagógica a estudiantes con o sin dificultades de
aprendizaje y/o se asesora psicopedagógicamente a las diferentes unidades que conforman el
establecimiento educativo (desde los niveles iniciales hasta enseñanza media), aportando en la
creación de las condiciones para un aprendizaje óptimo.

1.3.3 PSICOPEDAGOGÍA EN LA EDUCACIÓN SUPERIOR


El sistema educativo de educación superior en Chile se ha establecido como un mecanismo
garante del derecho a la educación y la libertad de enseñanza. La oferta educativa se desarrolla a
partir de instituciones que pertenecen al Estado e instituciones privadas, reconociéndose, entre
ellas, las siguientes (Ayuda Mineduc, s. f.):

 Instituciones de educación superior: cuyas funciones principales refieren a la


formación de profesionales y técnicos de nivel superior, junto con la contribución al
desarrollo científico y tecnológico de Chile.
 Universidades: las que pueden impartir carreras profesionales y técnicas de nivel
superior. Sin embargo, se reserva a éstas el otorgamiento de los grados académicos de
licenciado, magíster y doctor, así como de los títulos profesionales que requieren
licenciatura previa.
 Institutos profesionales: instituciones que pueden impartir carreras técnicas de nivel
superior y profesionales, siempre que no requieran licenciatura previa. Están
habilitadas para otorgar toda clase de títulos profesionales, con excepción de aquellos
exclusivamente universitarios, y toda clase de títulos técnicos.
 Centros de formación técnica: que pueden impartir carreras técnicas de nivel superior
y otorgar títulos técnicos.
 Establecimientos de educación superior de las fuerzas armadas y de orden: los que
están autorizados para otorgar títulos técnicos, títulos profesionales y grados
académicos, en los ámbitos inherentes a sus respectivos quehaceres profesionales, los
cuales serán equivalentes, para todos los efectos legales, a los de similares

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SEMANA 7 – INTRODUCCIÓN A LA PSICOPEDAGOGÍA

características, otorgados por otras instituciones de educación superior reconocidas


por el Estado.
El Ministerio de Educación es el único ente autorizado para otorgar reconocimiento oficial a las
instituciones de educación superior y es el encargado de establecer las normas que regulan su
funcionamiento, así como de velar por su cumplimiento, además de proponer y evaluar las
políticas relacionadas con esta modalidad educativa.

Para un adecuado funcionamiento del sistema de educación superior, existe un Consejo de


Rectores, conformado por 25 universidades (estatales y privadas con aporte estatal) que tienen
como principal propósito velar por la excelencia académica y el desarrollo de la investigación y
extensión universitaria, además de la administración de la Prueba de Selección Universitaria (PSU).
Además, está el Consejo Nacional de Educación, que es un organismo autónomo, con personalidad
jurídica y patrimonio propio, cuyas funciones se orientan a velar porque existan niveles básicos de
calidad en las instituciones que imparten enseñanza superior. Este consejo es responsable de la
aprobación de los proyectos institucionales que presentan las instituciones para obtener el
Reconocimiento Oficial por parte del Ministerio de Educación y del proceso de licenciamiento por
el que deben pasar las nuevas instituciones de Educación Superior para obtener su plena
autonomía (universidades, IP y CFT) y una Comisión Nacional de Acreditación (CNA-Chile), que es
un organismo público y autónomo, que tiene la función de verificar y promover la calidad de las
universidades, institutos profesionales y centros de formación técnica autónomos, y también de
las carreras y programas que imparten.1

En el marco de la Reforma Educacional, y particularmente en el ámbito de la educación superior,


también se han desarrollado políticas para promover un sistema educativo inclusivo que responda
de manera pertinente y con la calidad necesaria a todas las necesidades educativas que presenten
los estudiantes que a ella acceden. En este contexto se ha implementado, desde 2014, el
Programa de Acompañamiento y Acceso efectivo a la Educación Superior (PACE), que “busca
restituir el derecho a la educación superior a estudiantes de sectores vulnerables, garantizando
cupos en la educación superior a los estudiantes que cumplan los requisitos de habilitación para
postular al Proceso de Admisión PACE a la educación superior” (Mineduc, s. f.a). El programa PACE
ofrece preparación académica, orientación vocacional y un acompañamiento socioemocional de
preparación para la vida en la educación superior a estudiantes de 3° y 4° medio y durante su
primer año de enseñanza superior, para apoyar su integración, mantenimiento y titulación. Es
implementado por 29 instituciones de educación superior que mantienen convenio con el
Ministerio de Educación, en el marco del fortalecimiento de la educación pública.

Los objetivos para el PACE que ha definido el Ministerio de Educación son los siguientes (Mineduc,
2018b):

1
La CNA opera dentro de la Ley de Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior N° 20129,
promulgada en octubre de 2006.

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SEMANA 7 – INTRODUCCIÓN A LA PSICOPEDAGOGÍA

 Permitir el acceso a la educación superior de estudiantes destacados en enseñanza media,


provenientes de contextos vulnerados, mediante la realización de acciones de preparación
y apoyo permanentes y el aseguramiento de cupos adicionales a la oferta académica
regular, por parte de las instituciones de educación superior participantes del programa.
 Facilitar el progreso de los estudiantes que accedan a la educación superior gracias al
programa, a través de actividades de acompañamiento tendientes a la retención de
aquellos durante el primer año de estudios superiores.

El programa se orienta a brindar apoyo para el desarrollo de habilidades transversales con énfasis
en habilidades cognitivas, intrapersonales e interpersonales, a la vez que deja instaladas
determinadas capacidades en los funcionarios de los centros educativos para asegurar una
trayectoria formativa de calidad para todos los estudiantes a través de asesorías grupales y
personalizadas, implementadas por profesionales de diferentes disciplinas que se responsabilizan,
a la vez, por los diferentes ámbitos de desarrollo del programa. Así es como en el caso de las
asesorías a establecimientos educacionales, equipos multidisciplinarios conformados por
profesionales de la educación, psicólogos y psicopedagogos, orientan en el diseño y desarrollo de
proyectos institucionales para potenciar las capacidades de los estudiantes con buen desempeño
académico y altos talentos. Y para los estudiantes que ya forman parte del programa, se
establecen diferentes ámbitos de asesoría individual (estimulación cognitiva, socioemocional,
orientación vocacional, etc.) que buscan, en su conjunto, desarrollar el máximo potencial de
aprendizaje de los estudiantes, su ingreso a la educación superior y una trayectoria formativa que
les asegure el egreso, titulación e incorporación exitosa al mundo laboral .

En este video del Ministerio de Educación puede conocer, a partir de


los testimonios de algunos estudiantes, cómo se implementa el PACE
para la educación superior.

https://www.youtube.com/watch?v=ydVCFeI76z8

1.3.3.1 ROL DEL PSICOPEDAGOGO EN LA EDUCACIÓN SUPERIOR

Se ha demostrado durante el último tiempo la importancia del apoyo y preparación que requiere
el estudiante para enfrentar los desafíos de un sistema educativo altamente exigente y que en
ocasiones no se relaciona con sus experiencias educativas previas. Es indiscutible la brecha que

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SEMANA 7 – INTRODUCCIÓN A LA PSICOPEDAGOGÍA

existe entre estudiantes de diferentes dependencias educativas (establecimientos educacionales


municipales, particulares subvencionados y particulares pagados) y la preparación académica con
la que egresan de enseñanza media. En este contexto, los desafíos en torno a la calidad de la
educación superior en Chile señalan que se hace imprescindible, entre otras cosas, organizar el
aprendizaje a partir de los propios estudiantes y sus necesidades educativas, características e
intereses, dejando de lado el foco en la enseñanza tradicional para mejorar las metodologías,
haciéndolas más participativas y reflexivas. Además de repensar los procesos evaluativos, de tal
manera que sea posible, para el estudiante, demostrar los aprendizajes a partir del desarrollo de
sus capacidades (Álvarez, 2008). Mientras esto no ocurra del todo, para enfrentar este reto, la
mayoría de las instituciones de educación superior han establecido acciones para favorecer la
inserción y progresión académica de sus estudiantes.

Para materializar estos programas, un número importante de instituciones de educación superior


cuenta con centros para el aprendizaje orientados a brindar apoyo académico para acortar la
brecha de contenidos y habilidades para el aprendizaje que traen de la educación escolar. Los
programas de nivelación de competencias fundamentales para una adecuada trayectoria
educativa pueden incluir apoyo psicopedagógico personalizado (la mayoría de las veces en grupos
pequeños de estudiantes) para apoyar el fortalecimiento de habilidades para el aprendizaje;
asignaturas transversales relacionadas con procesos metacognitivos, estrategias de aprendizaje y
técnicas de estudio; nivelación en el área de las matemáticas; comprensión lectora, etc., los que
en general son diseñados e impartidos por profesionales especialistas en el área de los
aprendizajes.

El Programa PACE, que se expuso en líneas anteriores, está conformado por un equipo
multidisciplinario de profesionales que abordan las necesidades educativas, emocionales y sociales
de los estudiantes que pertenecen a este, siendo el psicopedagogo el encargado de apoyar los
ámbitos relativos a los procesos de aprendizaje del estudiante.

Por otra parte, durante los últimos años se ha dado especial relevancia a la orientación en la
educación superior, abriéndose centros especializados para la atención de estudiantes que lo
requieran. Ha esto se ha llamado orientación psicopedagógica, que refiere a “un proceso de ayuda
y acompañamiento continuo a las personas, en todos sus aspectos, con objeto de potenciar la
prevención y el desarrollo humano a lo largo de toda la vida” (Bisquerra, 2005, p. 2). En este
proceso de acompañamiento, la atención a la diversidad que se expresan en necesidades
educativas especiales, problemas de aprendizaje, problemas emocionales, u otros, cobran especial
importancia (Bisquerra, 2005). Desde esta perspectiva, en la educación superior, la orientación se
desarrolla a partir de diferentes líneas temáticas, pero que confluyen en el objetivo de apoyar el
desarrollo integral del estudiante para un desempeño académico y personal exitoso. Entre estas
líneas de intervención, se encuentran: orientación profesional, orientación a los procesos de
enseñanza-aprendizaje, atención a la diversidad y orientación para la prevención y el desarrollo de
la persona (Bisquerra, 2005).

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SEMANA 7 – INTRODUCCIÓN A LA PSICOPEDAGOGÍA

A partir de estas iniciativas, se abre un escenario propicio para el desarrollo de la psicopedagogía


en el ámbito de la educación superior, pues es necesario detectar de manera oportuna las
necesidades educativas que presentan los estudiantes para responder a ellas durante la
implementación de la enseñanza y apoyar su éxito académico y posterior titulación.

El rol del psicopedagogo en la educación superior se ha relevado, entonces, desde ámbitos


diversos: uno relacionado directamente con el proceso de enseñanza-aprendizaje, en el que la
intervención no solo se refiere al propio estudiante y su proceso de aprendizaje, pues este
profesional está capacitado para realizar asesoramiento pedagógico en el diseño de la formación
(planes de estudio) y también a los docentes, para ejercer con mejor preparación su rol docente-
tutorial; y otro ámbito vinculado con la orientación psicopedagógica hacia la persona estudiante,
para una trayectoria educativa y personal armónica en la educación superior.

1.3.4 PSICOPEDAGOGÍA EN LA EDUCACIÓN DE ADULTOS


El Ministerio de Educación señala la educación de adultos como la modalidad de enseñanza que
apoya a la educación de jóvenes y adultos. Este programa se desarrolla en modalidad regular en
centros de educación integrada de adultos (CEIA), en terceras jornadas, en modalidad flexible y en
programas para personas privadas de libertad (Ministerio de Educación-EPJA, s. f.):

La modalidad regular está orientada a brindar la oportunidad de iniciar o terminar la educación


básica o media, a través de las modalidades científico-humanista o técnico-profesional, y su
principal propósito es garantizar el cumplimiento de la obligatoriedad escolar. La matrícula para
los jóvenes se puede efectuar a partir de los 15 años en educación básica y desde los 17 años para
la educación media (cumplidos el 30 de junio del año en curso). Para el caso de las personas
adultas, no hay condiciones de edad límite establecido para matricularse en algún nivel educativo.

 Centros de Educación Integrada de Adultos (CEIA): los CEIA imparten educación en


jornada diurna y vespertina, y su oferta educativa se dirige especialmente a personas
jóvenes y adultas. Las clases se realizan en establecimientos educacionales que cuentan
con reconocimiento oficial por parte del Ministerio de Educación, de tal manera que sea
posible asegurar la calidad y validez de los estudios impartidos. Actualmente se
encuentran en habilitación alrededor de 40 CEIA como centros de educación permanente.
 Terceras jornadas: las terceras jornadas se desarrollan en horarios vespertinos, en
establecimientos educacionales de enseñanza básica y media. Una vez terminadas las
clases regulares se reciben a jóvenes y adultos que tienen dificultades para estudiar
durante el día, debido a situaciones laborales y familiares.
 Modalidad flexible de educación de personas jóvenes y adultas: es una modalidad
dirigida a personas sin escolaridad o con escolaridad incompleta, con un programa

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SEMANA 7 – INTRODUCCIÓN A LA PSICOPEDAGOGÍA

educativo de carácter flexible, pues ofrece horarios y frecuencias diversas. Las clases se
realizan en lugares cercanos al domicilio o trabajo de los participantes y con duración
menor a la que del sistema de educación regular diurno de enseñanza básica y/o media. La
edad mínima de ingreso son 18 años, indistintamente para enseñanza básica o media. Las
actividades formativas se ejecutan durante el año escolar, entre marzo y julio, y son
impartidas por diferentes entidades, públicas o privadas (municipios, fundaciones,
instituciones de educación superior, etc.), las que deben participar en licitaciones públicas
para adjudicarse la oferta educativa. La aprobación de los niveles cursados se lleva a
efecto mediante una prueba cuya fecha de rendición se ha establecido en un calendario
nacional de examinación que define el Ministerio de Educación anualmente.
 Educación en contextos de encierro: es una oportunidad educativa para jóvenes
infractores de ley, que están en centros del Sename, y adultos que se encuentran privados
de libertad que deseen iniciar o concluir la enseñanza básica o media. Los
establecimientos educacionales que se encuentran dentro de las cárceles cuentan con
reconocimiento oficial y profesores especializados en educación en condiciones de
encierro. Lo mismo para los establecimientos que se encuentran dentro de los centros del
Sename. Los docentes que trabajan en esta modalidad educativa, se agrupan en
microcentros, es decir, son instancias de trabajo colaborativo que tienen como objetivo
reflexionar acerca de las prácticas pedagógicas que se desarrollan durante el ejercicio
docente, y poder mejorarlas permanentemente en beneficio de los estudiantes jóvenes y
adultos.

Otros programas para brindar apoyo a personas jóvenes y adultas es el Plan de Alfabetización
“Contigo Aprendo”. El objetivo del plan es que las personas que participan en estos programas
“aprendan a leer y escribir, desarrollen su pensamiento matemático y logren certificar 4° año
básico” (Mineduc, s. f.b, párr. 2). Está dirigido a todas las personas mayores de 15 años que no
hayan alcanzado 4° básico, y/o que no sepan leer y/o escribir, chilenas o extranjeras (con rut
nacional al momento de la examinación).

Los monitores y monitoras de los programas de alfabetización son voluntarios, seleccionados por
el Ministerio de Educación y capacitados especialmente para realizar esta labor de enseñanza. La
implementación del programa es personalizada, pues se realiza en grupos entre 8 y 12 personas
como máximo y los textos de estudio han sido elaborados específicamente para la alfabetización
de personas adultas que participan en este programa. Las clases se realizan semanalmente, previa
coordinación de horario entre los participantes y el monitor, en lugares cercanos a los domicilios o
lugares de trabajo de los estudiantes, por ejemplo, sedes vecinales, parroquias, bibliotecas
públicas, escuelas o liceos. Los participantes rinden una prueba al finalizar el proceso, y si

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SEMANA 7 – INTRODUCCIÓN A LA PSICOPEDAGOGÍA

aprueban reciben un certificado de 1° Nivel Básico de Adultos, que es equivalente a 4° año de


Educación General Básica2.

El siguiente video presenta, a partir de testimonios reales, el impacto


de tomar la importante decisión de volver a estudiar.

https://www.youtube.com/watch?v=RWlZMnHbAmw

1.3.4.1 ROL DEL PSICOPEDAGOGO EN LA EDUCACIÓN DE ADULTOS

En el contexto de la educación de personas jóvenes y adultas, la ayuda especializada que pueda


brindar un especialista, como lo es el psicopedagogo, es de alta importancia, puesto que no solo
se brinda una respuesta educativa que permita nivelar estudios, sino que al tratarse de personas
adultas, la situación de escolarización precaria que han experimentado ha significado una merma
en muchos aspectos relevantes de la vida personal y social, por lo que el ámbito socioafectivo se
ve ampliamente afectado. Por otra parte, es fundamental entender que, cualquiera sea la
motivación que presenta el adulto para enfrentar el reto de estudiar, la forma en que asume este
desafío es muy diferente a la de un niño o un adolescente.

De esta manera, uno de los primeros detalles que se deben considerar cuando se trata de
educación de adultos, es que son precisamente eso: adultos, y en segundo lugar, su
autovaloración personal, que en muchos casos se ha visto afectada.

En este contexto, la doble dimensión de la formación del psicopedagogo, la psicológica y la


pedagógica le permiten abordar el proceso formativo con una especial mirada que considera las
necesidades pedagógicas y las de orden afectivo para una intervención más integral.

Los programas de educación para personas jóvenes y adultas, en cualquiera de sus dimensiones
(nivelación de estudios, alfabetización, jóvenes en conflicto con la justicia, adultos privados de
libertad) requieren de altos grados de especialización que implican estrategias y metodologías
particulares para abordar el proceso de enseñanza y aprendizaje. Estas distinciones se relacionan,
por ejemplo, con los cambios en los procesos cognitivos, pues se reconoce que a medida que las
personas aumentan en edad, la capacidad de atención, de retención de información, de memoria

2
Este certificado tiene validez legal y permite la continuidad de estudios en la modalidad de educación para
personas jóvenes y adultas.

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SEMANA 7 – INTRODUCCIÓN A LA PSICOPEDAGOGÍA

pueden disminuir, produciéndose un incremento en lo que se denomina inteligencia cristalizada,


que depende, más que de la propia capacidad cognitiva, de los aprendizajes basados en las
experiencias que se ha acumulado durante la vida (Medina, 2000). De forma que el proceso de
enseñanza-aprendizaje debe desarrollarse a partir de situaciones que sean significativas para el
adulto, es decir, que se relacionen con sus propias experiencias de vida y en contextos de
interacción social que les brinden la posibilidad de interactuar y compartir con otros adultos estas
experiencias. Otro factor que la literatura sindica como determinante en la educación de las
personas adultas, se relaciona con la naturaleza de la tarea que se ofrece, es decir, que el proceso
de aprendizaje se ve beneficiado cuando se le otorga sentido a lo que se aprende, cuando se
elimina la presión del tiempo de respuesta, cuando existe entrenamiento previo y cuando se
organiza cuidadosamente el material y los contenidos a enseñar (Medina, 2000). Finalmente, es
fundamental considerar la autoestima académica, la seguridad personal, la práctica con que
cuente y las experiencias previas para el aprendizaje, el origen social (que informa sobre la
estimulación cognitiva previa, por ejemplo), entre otros factores propios de la persona, pues
podrían facilitar o dificultar el proceso de aprendizaje.

Dado lo anterior, la psicopedagogía es una disciplina que aborda de manera pertinente las
necesidades educativas que pueda presentar un adulto, sobre todo en las condiciones que se
presenta el proceso formativo de los programa de apoyo a personas jóvenes y adultas que el
Ministerio de Educación ha dispuesto para este grupo.

COMENTARIO FINAL
La revisión de los campos teóricos y laborales en los que el psicopedagogo puede desempeñarse
durante el ejercicio de su práctica profesional da cuenta del desarrollo de la disciplina y de su
permanente fortalecimiento, pues la formación bidimensional de este profesional le permite
insertarse en diferentes ámbitos de intervención en los que se requiera abordar al ser humano en
su integralidad.

De esta manera, se han presentado los escenarios del sistema educativo nacional, desde la
educación inicial hasta la educación superior y de adultos, dando cuenta de las posibilidades que
ofrece la psicopedagogía para aportar en cada uno de ellos, a partir de un desempeño individual y
como miembro de equipos profesionales de trabajo.

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SEMANA 7 – INTRODUCCIÓN A LA PSICOPEDAGOGÍA

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PARA REFERENCIAR ESTE DOCUMENTO, CONSIDERE:

IACC (2018). Rol del psicopedagogo en diferentes contextos. Parte I. Introducción a

la Psicopedagogía. Semana 7.

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