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TESIS
Budapest
1988
DEDICATORIA
CON CARIÑO:
A mi madre.
A mi esposa.
A mis hijos.
2
AGRADECIMIENTOS.
Le doy las gracias además, a todos los colegas del Instituto de Suelos y
Agroquímica de Hungría que de una forma u otra me prestaron su
colaboración durante mi trabajo, pero especial reconocimiento debo hacerle a
las Dras. I. Voros, K. Koves y M. Antal; a los Dres: F. Gulyas y T. Soos; a la
Ing. G. Kungl; a los Ing. A. Attila y T. Szili-Kovacs y a las Tec. M. Gyurjacs y
R. Wolmuth, del Departamento de Microbiología; al Lic. S. Kabos, del
Departamento de Computación y a las Sras. J. Szabados, M. Frevert y E.
Orban, de la Biblioteca por el esfuerzo y dedicación con que me auxiliaron,
así como por la sincera y honesta amistad que me ofrecieron durante mi
permanencia en Hungría.
3
Fertilizantes en esa provincia, que contribuyeron de una manera u otra de
forma desinteresada con sus esfuerzos a este trabajo les expreso mis mas
profundas gracias, pero sobre todo les deseo agradecer al Ing. R. Caballero y
a los Tec. Emelina Peña y M. Sánchez, el cuidado y la devoción que pusieron
en la conducción de los experimentos.
Por último les doy las gracias a todos los colegas cubanos que
estuvieron conmigo durante las etapas de estancia en Hungría y que me
auxiliaron con sus consejos y experiencias, pero de manera especial le
agradezco a la Profesora Zenaida M. Porto su ayuda en la corrección de los
manuscritos y su paciencia con mi idioma ingles y al Dr. J. Martí,
representante del MES en Hungría, su interés y preocupación personal así
como las facilidades brindadas.
4
CONTENIDO
Pág.
INTRODUCCIÓN GENERAL 7
CAPITULO 1.- ESTUDIO BIBLIOGRÁFICO 9
1.-El uso de los abonos orgánicos 9
1.1.- Los abonos orgánicos como fuente de nitrógeno para los suelos 11
1.1.1.-Efecto sobre el contenido de nitrógeno de los suelos 11
1.2.- Los abonos orgánicos como fuente de fósforo para los suelos... 15
1.2.1.-Efectividad de los abonos orgánicos como fuente de fósforo. 16
1.2.2.-Efecto sobre el contenido de fósforo de los suelos 18
1.2.3.-Efecto sobre el movimiento de fósforo en los suelos 21
1.3.-Los abonos orgánicos como fuente de potasio para los suelos 23
1.3.1.-Efecto sobre el contenido de potasio de los suelos. 24
1.4.-Los abonos orgánicos como fuente de microelementos para los
25
suelos
1.5.-Los abonos orgánicos como enmiendas en los suelos 26
1.5.1.-Efecto sobre el contenido de materia orgánica de los suelos 26
1.5.2.-Efecto sobre el pH de los suelos. 27
1.5.3.-Efecto sobre otras propiedades físicas- químicas de los suelos. 28
1.6.-Los abonos orgánicos y la actividad biológica de los suelos 30
1.6.1.-Efecto sobre los microorganismos de los suelos. 30
1.6.2.-Efecto sobre la evolución de CO2 de los suelos. 33
1.6.3.-Efecto sobre la actividad enzimática de los suelos. 35
1.7.-Los abonos orgánicos y los rendimientos de los cultivos 36
1.7.1.-Efecto sobre los rendimientos de los pastos y forrajes. 38
CAPITULO 2.- MATERIALES Y MÉTODOS 41
5
2.1.-Ubicación y características de la zona 41
2.2.-Características agroquímicas principales de los suelos estudiados 42
2.3.-Composición química del estiércol utilizado para los experimentos 43
2.4.-Diseños y tratamientos empleados 45
2.5.-Procedimientos y fertilización. 46
2.5.1.-Experimento de macetas. 46
2.5.2.-Experimento de campo. 48
2.6.-Precipitaciones y temperaturas 48
2.7.-Cosechas y análisis químicos de las plantas. 49
2.8.-Composición botánica. 52
2.9.-Análisis de la actividad biológica del suelo 52
2.9.1.-Microorganismos totales 52
2.9.2.-Actividad celulolítica 53
2.9.3.-Evolución de CO2 53
2.10.-Formas de muestreo y análisis de los suelos. 54
2.11.-Análisis estadístico de los resultados 54
CAPITULO 3.-RESULTADOS. 55
3.1.-Experimento de macetas 55
3.1.1.-Rendimiento y composición química de la planta. 55
3.1.2.-Actividad biológica. 62
3.1.3.-Características químicas del suelo. 67
3.2.-Experimento de campo 71
3.2.1.-Rendimientos, composición química y área cubierta por las
71
especies en el corte de establecimiento.
3.2.2.-Rendimientos, composición química y área cubierta por las
74
especies en los años de corte
3.2.3.-Actividad biológica en los años de corte. 85
3.2.4.-Efecto sobre algunas características químicas del suelo 96
CAPITULO 4.- DISCUSIÓN. 103
4.1.-Rendimientos, área cubierta por las especies y composición
103
química.
4.2.-Actividad biológica del suelo. 109
4.3.-Suelos 115
6
CONCLUSIONES. 121
RECOMENDACIONES 125
BIBLIOGRAFIA. 126
7
INTRODUCCIÓN GENERAL
Los abonos orgánicos han sido utilizados desde tiempos inmemoriales para
elevar la fertilidad de los suelos y la provincia de Camagüey presenta un gran
potencial de estos materiales si se tiene en cuenta que solo la producción
estimada de estiércol vacuno supera el millón y medio de toneladas anuales,
según datos de la Dirección de la Agricultura, por lo que el empleo de este tipo
de abono para mejorar las características desfavorables de este suelo tiene
una gran perspectiva y por ello uno de los objetivos de este trabajo fue
establecer como es la influencia del estiércol vacuno solo o combinado con
dosis bajas de fertilizante mineral en algunas propiedades químicas
fundamentales de este suelo, que puedan servir de base para caracterizar su
efecto a corto y largo plazo.
9
CAPITULO 1.
ESTUDIO BIBLIOGRÁFICO.
11
biológicas de los suelos donde se utilicen y por tanto los rendimientos de los
cultivos.
Entre las distintas y variadas formas utilizadas para corregir esta dificultad,
los abonos orgánicos presentan actualmente una gran perspectiva, no solo por
el contenido de nitrógeno que poseen, sino también, porque van a afectar las
transformaciones que sufre este elemento antes de ser disponible para las
plantas, como plantean, Welte y Timmermann, (1985), lo que conllevaría a su
mejor aprovechamiento por los cultivos.
12
desde 0.11 hasta el 0.43% en el contenido de nitrógeno al aplicar durante 8
años residuos municipales en un suelo ácido.
13
pudo apreciar, muestran una gran variación. Esto parece debido a que la
disponibilidad de este elemento desde los residuos es compleja y esta
influenciada por diversas transformaciones químicas-físicas y biológicas.
14
de 15.9 y un contenido de nitrógeno del 2% mientras Bartholomew 1965) y
Allison (1973) advierten que cuando se utiliza el concepto de la relación C:N
solamente a estos abonos sin conocer algo de su composición, el resultado
podría ser engañoso dado que esta relación en algunos materiales inertes,
aunque es reducida, no provoca efectos sobre el nitrógeno del suelo.
15
aplica el abono en la superficie mucho del N-NH4 es volatilizado, con lo cual
coincide Tunney (1980), mientras Cochran et al.,(1980) encuentran un mayor
potencial para la mineralización con las pajas mezcladas con el suelo que con
las depositadas en la superficie.
1.2.- Los abonos orgánicos como fuente de fósforo para los suelos.
16
En la actualidad, se le concede al fósforo un gran interés por ser un
elemento esencial para el crecimiento de los cultivos y si bien en la mayoría
de los países de clima templado, no existen graves problemas en relación
con su concentración en el suelo, (King y Morris,1972; Kelling et al.,1977;
Sikora et al., 1982; Gestring y Jarrell,1982), si hay grandes dificultades en su
aprovechamiento.
Por otra parte, las fuentes para el suministro de fósforo son caras y
tienen un carácter finito como señala White,(1981), lo que hace necesario la
búsqueda de materiales que sean capaces de brindar, no solo una
determinada cantidad de este elemento, sino también, que mejoren la
efectividad del contenido en el suelo y el añadido con el fertilizante. Entre
los materiales estudiados, los abonos orgánicos parecen entonces ofrecer,
desde este punto de vista, una alternativa promisoria como se puede
observar en los numerosos trabajos que con este objetivo se han realizado.
17
un grupo de experimentos, estima que en suelos con una fertilidad fosfórica
donde solo son requeridas dosis de mantenimiento, el fósforo del abono
puede ser considerado 100% tan efectivo como el mineral, aunque sobre
suelos deficientes, esto puede ser discutido, ya que solo el fósforo inorgánico
y la porción de fósforo orgánico que será mineralizada estará disponible en
el primer año.
18
mientras que en los otros tipos casi siempre es menor. Esto al parecer puede
deberse a lo que Cline et al.,(1985) sugieren con referencia a que las
reacciones químicas, primero que las biológicas, son las que dirigen el
incremento del fósforo extractable en los suelos abonados con lodos.
19
Prasad y Sinha, (1981); Somani,(1983); Crespo y Arteaga,(1984), entre
otros, aunque en ocasiones se encuentren valores extremos. Asi, Wrigley,
(1981) encuentra en rastrojos de arroz, concentraciones inferiores a 0.1%
de P y Kirkham,(1982) refiere que algunos lodos residuales pueden contener
mas del 7% de P en dependencia del proceso por el cual fueron obtenidos.
20
el mayor contenido de fósforo observado por Rodríguez et al.,(1983) y
Portíeles et al., (1985) como ejemplos, parecen confirmar estos efectos.
21
a fósforo inorgánico y orgánico inmovilizado a la vez que ocurre una
mineralización de estas formas que provocan de nuevo su transformación como
disponible.
22
1.2.3.- Efecto sobre el movimiento de fósforo en los suelos.
23
añadido con el abono permanece en los primeros 0.3 m del suelo, otra parte
del mismo presenta algún movimiento hacia abajo y sugieren que el
incremento observado en el subsuelo podría haber sido debido en parte a la
lixiviación del fósforo orgánico del abono, con lo cual están de acuerdo
Schoenan y Bettany,(1987) ya que plantean que la asociación que
normalmente se produce en el suelo entre el fósforo orgánico y el ácido
fúlvico, lo hace particularmente susceptible a pérdidas de esta manera dada
la gran movilidad de esta fracción de humus.
1.3.- Los abonos orgánicos como fuente de potasio para los suelos.
24
valores para estos materiales entre 0.3 y 0.5% de K2O considerando que las
variaciones van a estar dadas por el tipo de animal, el forraje que reciba y el
mantenimiento que se le brinde; a similares conclusiones llegan Simons y
Traphagen,(1970) aunque ellos dicen que el purín tiene un mayor contenido
de K2O.
25
Por los contenidos de potasio que presentan los materiales orgánicos
podría suponerse que en todos los casos su aplicación provocaría una mayor
concentración de este elemento en el suelo, pero esto siempre no es así, ya
que Mc. Allister,(1971) afirma que el abonado orgánico intensivo causaría
movimientos hacia abajo del potasio en el suelo bajo determinadas
condiciones, lo que provocaría una disminución de su concentración en los
horizontes superficiales. Adams,(1973) al aplicar residuales líquidos de aves y
cerdos en distintos suelos dedicados a pastos, encuentra que hay un
decrecimiento en el contenido de potasio y lo explica por las grandes
extracciones que realiza este cultivo y la demora del elemento en hacerse
disponible; en un trabajo posterior Adams (1974) informa que este efecto se
mantiene en años sucesivos pero que las razones para ello no las considera
claras.
26
utilizado, sino también de su solubilidad, el tipo de suelo, las condiciones
climáticas y la forma y cantidad aplicada.
27
disponibilidad del Boro y Manganeso aumentan, la del Cobre disminuye y la de
Zinc solo es afectada por condiciones extremas de acidez o alcalinidad.
28
indicado anteriormente que los restos de distintos vegetales (maíz, trigo, etc.)
tenían coeficientes de humificación de 20 a 30.
29
ese efecto era evidente, pues donde no se había abonado la acidez
hidrolítica era en esa fecha de 2.38 meq/100 g de suelo, pero donde se había
estercolado con 25 y 50 t/ha era de 1.74 y 1.62 meq/100 g de suelo
respectivamente, resultados muy parecidos informan Portieles et al.,(1985) y
Crespo y Oduardo (1985) en otros suelos no obstante en un suelo Ferralítico
rojo, Ruiz y Medina (1982), observan que con 200 t/ha de cachaza solo se
incrementa el pH en 0.55.
30
o volumétrica encontrada en varios suelos de China al aplicar compostes de
diferentes materiales, resultados similares alcanzan Alfonso et al.,(1982) en
Cuba y Díaz-Fierros et al.,(1983) en España pero utilizando estiércol sólido
y líquido respectivamente. Metzger et al., (1987) por su parte consideran
que cuando se usan materiales ricos en componentes rápidamente
descomponibles los agregados formados desaparecerán rápidamente pero
en los de más baja descomposición como las pajas, etc., el mejoramiento de
la estabilidad estructural es significativa a veces después de varios meses.
31
1.6.-Los Abonos Orgánicos y la actividad biológica del suelo.
Al ser aplicados al suelo, los abonos orgánicos van a aportar una variada
flora microbiana, como señalan Martínez y Martínez, (1968) y Acea et
al.,(1983), pero además van a suministrar una abundante cantidad de sustrato
y energía para los microorganismos presentes en ese medio,(Abbott y Tucker,
1973; Alexander, 1977; Goss y Stewart, 1979 ) y cambios en sus propiedades
físicas y químicas, que provocarán que los procesos biológicos del suelo
sufran profundas transformaciones y por tanto su actividad biológica se
intensifique, como plantean Shuglya y Koryagina,(1982); Singha et al.,(1982)
y Szegi (1988).
32
fenómenos, en los cuales los antagonismos y las inhibiciones desempeñan
un importante papel.
33
hongos a las aplicaciones de este material fueron mejoradas por la
competición ventajosa sobre las bacterias y actinomicetos al bajar el pH del
suelo. Arcia et al.,(1983) presentan resultados similares en el caso de las
bacterias y los hongos pero plantean que los actinomicetos muestran un alto
grado de inhibición y estiman que ello se deba a la influencia de los bajos pH
del residual utilizado porque con el tiempo, existe una tendencia al aumento
de las poblaciones de ese grupo.
34
procesos de descomposición y humificación avanzan, aunque en un
momento cualquiera pueda predominar uno o varios grupos de
microorganismos en detrimento de los otros, lo cual dependerá tanto de las
condiciones edafo-climáticas, como del material añadido y de la población
autónoma del suelo.
La evolución de CO2 puede ser tomada también como un buen índice del
efecto que provoca la incorporación de los abonos orgánicos sobre la
actividad biológica ya que el volumen de este compuesto es el resultado,
principalmente de la actividad microbiana e indica la intensidad de los
procesos de descomposición como señalan, Agbim et al.,(1977); Olah y
Szegi, (1980); Reinke et al.,(1981); Calvo y Díaz-Fierros,(1982); Pedziwilk et
al.,(1983); Raich et al.,(1985); Van Clempat y El-Saabay, (1985) y Fernández y
Kosian,(1987).
35
al añadir materiales orgánicos frescos, se presenta un gran desprendimiento
en la etapa inicial en orden creciente para el estiércol, paja de soya y paja de
maíz y consideran que estas diferencias sean un reflejo de la distinta
incidencia sobre la actividad biológica de estos materiales como
consecuencia de su diferente composición química y añaden que la velocidad
de desprendimiento de CO2 disminuye para todos los materiales y en ambos
suelos, conforme transcurre el proceso de mineralización y humificación, lo
que parece indicar que los microorganismos actúan selectivamente,
descomponiendo inicialmente los materiales mas lábiles para continuar con los
de mediana y mayor estabilidad.
36
1.6.3.-Efecto sobre la actividad enzimática de los suelos.
37
Osmanezyk,(1980) al investigar 6 enzimas, (deshidrogenasa, catalasa,
sacarasa, B-glucosidasa, ureasa y asparginasa) observa que aunque en todos
los casos hay un incremento sustancial de su actividad en el suelo tratado, en
el caso de la sacarasa y la B-glucosidasa, el aumento fue de 10 veces mas
que en el suelo no tratado, por lo cual considera que existe una favorable
situación para el metabolismo de los carbohidratos. Resultados parecidos
informan Duxbury y Tate III,(1981) y añaden que el principal papel de las
carbohidratasas aisladas estuvo relacionado con la descomposición de los
residuos frescos y que la polyfenoxidasa aparentemente esta involucrada en la
descomposición de la materia orgánica nativa del suelo.
38
11 y un 36% cuando emplea dosis de 148 y 259 t/ha/año en las cuatro
cosechas efectuadas, resultados similares informan Arzola,(1973) en un
suelo Ferralítico rojo y Paneque,(1979) en uno Pardo sin carbonato, lo que
corrobora a Subba Rao,(1978) que en una revisión bibliográfica sobre el
empleo de este material en este cultivo, pero en distintos países, afirma
que la respuesta positiva parece estar muy por encima de las 15 t/ha/año.
39
en dosis variables desde 0 hasta 10 t/ha encuentran que los mayores
rendimientos se obtienen con altas densidades de plantas y aplicaciones de la
mezcla de estiércol y rastrojos a razón de 5 t\ha.
40
aplicadas en los pastos son suficientes para alcanzar buenos resultados, sin
embargo, Tveines,(1979) utilizando dosis crecientes de este abono hasta las
300 t/ha en varios cultivos forrajeros de distintos lugares de Noruega,
encuentra que durante el primer año hay un aumento lineal en los
rendimientos manteniéndose un efecto considerable a las dosis superiores al
tercer y cuarto año.
Así, Corona et al.,(1981) plantean que con 20 t/ha base húmeda, hay
un aumento del 45 % sobre el control; Cordoví y López,(1982) informan que
con 25 t/ha base seca se obtiene un 36 % mas de rendimiento mientras
Crespo y Oduardo,(1985) alcanzan porcentajes similares pero con 40 t/ha
base seca.
41
al aplicar 30 y 50 t/ha cada año de este abono respectivamente, mientras
Portieles et al.,(1985) en el mismo suelo plantean que la sola aplicación de
21 t/ha/año produjo mas del doble del rendimiento de la Pangola.
42
CAPITULO 2
MATERIALES Y MÉTODOS
2.1.-Ubicación y características de la zona.
44
características descritas para el Fersialítico rojo pardusco ferromagnesial,
principalmente en lo relacionado con la desfavorable proporción entre el Calcio
y el Magnesio, los contenidos muy bajos de P2O5 y K2O asimilables y los
valores de medios a altos de la materia orgánica ya que el pH es un poco
menor que el informado para este tipo de suelo.
45
Tabla 2.: Principales características químicas y físicas de los suelos estudiados
EXPERIMENTO DE MACETAS.
0.03 0.1
0-20 4.84 35 4.95 6.40 3.96 1.65 14.42 0.22 16.39 26.66 3.01 1.33
4 0
EXPERIMENTO DE CAMPO.
Prof. Hy*1 Plast.*1 pH*2 Y1 Y2 Ca+2 Mg+2 K+ Na+ S T M.O.*3 P2O5 *4
(cm) (%) (ml) CLK H2O mEq/100 g de suelos *2 (%) mg/100 g
0.1
0-10 3.95 37.6 4.60 5.95 5.04 0.08 1.66 18.43 0.21 20.42 34.22 4.23 1.33
2
0.0
10-26 - - 4.95 6.70 2.34 - 1.18 25.23 0.29 26.73 33.48 1.61 0.66
3
0.0
26-45 - - 5.00 6.90 2.00 - 0.78 36.32 0.39 37.52 44.27 - -
3
*1
De acuerdo a Arany
*2
Según métodos unificados de la Dirección de Suelos.
*3
Por Walkey y Black
*4
Por Oniani.
46
2.4.-Diseños y tratamientos empleados.
NIVELES DE P2O5
FUENTES
(kg/ha)
0 -------
2.5.-Procedimiento y fertilización.
2.5.1.-Experimento de macetas
48
49
Durante todo el tiempo que duró el experimento, las macetas
sembradas se mantuvieron a un 70 % de la humedad de campo por medio del
riego con agua destilada dos veces al día y en los demás recipientes la
cantidad de agua aplicada se ajustó de forma gravimétrica. Diariamente se
realizaron observaciones del estado de las plantas y no se detectaron plagas
ni enfermedades.
*
Fertilizante Mineral. EST.
ESPECIES DE PASTOS (kg/ha/año) VACUNO
200 45 120 0
Cynodon nlemfuensis var Pasto
200 45 120 12.5
Estrella
200 45 120 25
200 45 120 0
200 45 120 25
200 45 120 0
Digitaria decumbens var Pangola
200 45 120 12.5
PA-32
200 45 120 25
Control Absoluto** 0 0 0 0
50
2.5.2.- Experimento de campo.
51
gráficos 1 y 2. En el análisis de estos gráficos se puede observar que la lluvia
acumulada mensual se comportó de forma muy irregular con relación al
promedio de 10 años ya que para un mismo mes los valores oscilan
ampliamente lo mismo por mas que por menos a excepción del mes de
Diciembre en que las precipitaciones caídas fueron en todos los casos
inferiores al promedio histórico, las temperaturas tuvieron un
comportamiento similar aunque su variación en la mayoría de los casos es
menor que la de las precipitaciones.
52
macetas fueron llevadas al Laboratorio para obtener los por cientos de MS; N;
P y K.
53
54
TABLA 5.- Precipitaciones y temperaturas por épocas y anual
O
PRECIPITACIONES (mm) TEMPERATURAS ( C)
SECA LLUVIA ANUAL SECA LLUVIA ANUAL
VALOR DIF. VALOR DIF. VALOR DIF. VALOR DIF. VALOR DIF. VALOR DIF.
MEDIA DE 10 AÑOS (72-82) 300.63 - 1055.66 - 1356.27 - 23.0 - 26.0 - 24.5 -
AÑO EXPERIMENTAL (82-83) 524.80 +224.16 873.70 -181.93 1398.50 +42.23 23.2 +0.2 26.7 +0.7 24.9 +0.4
AÑO EXPERIMENTAL (83-84) 346.40 +45.76 1025.90 -29.73 1372.30 +16.03 23.8 +0.8 26.2 +0.2 25.0 +0.5
AÑO EXPERIMENTAL (84-85) 238.40 -62.24 870.30 -185.33 1108.70 -247.57 22.6 -0.4 26.0 0.0 24.3 -0.2
AÑO EXPERIMENTAL (85-86) 227.80 -72.84 1165.70 +110.07 1393.50 +37.23 23.0 0.0 26.0 0.0 24.5 0.0
AÑO EXPERIMENTAL (86-87) 235.20 -66.44 562.60 -493.03 796.80 -559.47 23.7 +0.7 26.7 +0.7 25.2 +0.7
55
La materia seca (MS) se determinó mediante secado a 65 oC en estufa de
circulación forzada de aire, el nitrógeno (N) por Kjeldahl, el fósforo (P) por el
método azul fosfomolibdico y el potasio (K) por fotometría de llama de acuerdo
a los métodos descritos por Ríos et al., (1982) y la Norma Ramal 564 del
Ministerio de la Agricultura (1982).
2.9.1.-Microorganismos totales.
56
efectuó un primer muestreo al acabar el año experimental 83-84 y el segundo
cuando terminó el experimento. En el experimento de macetas, se llevó a
cabo a los 5 días de haber aplicado los tratamientos inmediatamente antes de
la siembra y al finalizar el mismo.
2.9.2.-Actividad celulolítica.
2.9.3.-Evolución de CO2.
57
recipiente metálico de 4 litros de capacidad enterrado invertido
aproximadamente 3 cm en el suelo, una placa Petri llena con 20 ml de una
solución alcalina 0.1 N de NaOH durante dos horas, transcurrido ese tiempo
se prosiguió con lo descrito por Krutova (1984). Este procedimiento se volvió
a hacer en el año experimental 86-87 siempre empleando tres repeticiones por
parcela.
58
El análisis estadístico se efectuó según el diseño empleado en cada
experimento y en los casos de significación se le realizó la prueba de Duncan
o la de las Mínimas Diferencias Significativas (MDS) para una probabilidad de
error de un 5 por ciento.
59
CAPITULO 3
RESULTADOS
3.1.-Experimento de macetas.
60
como se observa en la tabla 6, por el uso como fuente de fósforo del estiércol
vacuno, pues cuando se utiliza este material orgánico sea solo o combinado,
se alcanzan, de forma general, las menores concentraciones de nitrógeno,
mientras se obtienen valores relativamente altos de este elemento al emplear
el fertilizante mineral.
14 g/ m a c 2,50
N (%)
12 2,00
10
1,50
8
6 1,00
4
0,50
2
0 0,00
0 150 300 450 600 0 150 300 450 600
kg/ha
kg/ha
Gráfico 3c. Contenido prom edio de Gráfico 3d. Contenido prom edio
fósforo por corte de potasio por corte
0,14
% 2,50
0,12 K (%)
0,10
2,00
0,08 1,50
0,06
1,00
0,04
0,02
0,50
0,00 0,00
0 150 300 450 600 0 150 300 450 600
kg/ha kg/ha
61
En la tabla 7, sin embargo, se nota que si bien el menor contenido de
nitrógeno aparece cuando se emplea para suministrar la máxima cantidad de
fósforo el estiércol vacuno solo o combinado con fósforo mineral, también al
aumentar las dosis de este elemento por el fertilizante los valores de nitrógeno
de la planta tienen la tendencia a disminuir, sobre todo, con las mayores
dosis, aunque esta disminución no es muy grande ni significativa
estadísticamente.
TABLA 6.- Efecto de las fuentes de fósforo empleadas sobre los rendimientos
y composición química de la planta. (Promedio por corte)
COMPOSICIÓN QUÍMICA
FORMA DE RENDIMIENTOS (%)
APLICACIÓN
g/macetas P K
N
62
En la tabla 6 se observa que las mayores concentraciones de fósforo y
potasio en planta se producen cuando se emplea el estiércol vacuno como
fuente de fósforo y en la tabla 7 se revela que a medida que se aumentan las
dosis de fósforo mediante el empleo de cantidades crecientes del estiércol se
incrementan de la misma manera las concentraciones de estos elementos en
la planta, sobre todo en los máximos niveles, pero no sucede así con el
fertilizante mineral solo o su mezcla, pues los porcentajes de fósforo
permanecen mas o menos estables a partir de los 150 kg\ha y los de
potasio, aunque aumentan, el crecimiento es mas paulatino que con el
estiércol y cesa a partir de los 300 kg\ha.
TABLA 7.- Efecto de los niveles de fósforo y las fuentes sobre los rendimientos
acumulados y la composición química de la planta. (Promedio por corte)
63
MEZCLA 50 % 12.06 1.34 0.090 1.99
MDS 5 % = 2.64 *** 0.32 *** 0.015 *** 0.19 ***
*** Significativo a P<= 0.001
64
V IV III II I
65
V IV III II I
66
V IV III II I
-1
I 0 kg ha de P2O5
II 75 kg ha-1 de P2O5 como E. Vacuno + 75 kg ha-1 de P2O5 como F. Mineral
III 150 kg ha-1 de P2O5 como E. Vacuno + 150 kg ha-1 de P2O5 como F. Mineral
IV 225 kg ha-1 de P2O5 como E. Vacuno + 225 kg ha-1 de P2O5 como F. Mineral
V 300 kg ha-1 de P2O5 como E. Vacuno + 300 kg ha-1 de P2O5 como F. Mineral
67
3.1.2.- Actividad biológica.
100
Ce lulosa de sc omp.
90 (% )
80
70
60
50
40
30
20 Control
10 absoluto
0
0 150 300 450 600
P 2 O 5 (kg/ha )
68
De esta forma, se puede apreciar que cuando se emplea el fertilizante
mineral el mejor porcentaje de celulosa descompuesta aparece con 450 kg\ha
de P2O5 y a partir de este nivel hay una pequeña disminución de su valor. De
la misma manera ocurre al utilizar la combinación con estiércol pero los
resultados obtenidos son superiores a los alcanzados con el fertilizante
mineral; sin embargo, cuando se emplea solo el estiércol vacuno como fuente
de fósforo, va a presentarse un incremento sostenido de los por cientos de
celulosa descompuesta hasta los 600 kg\ha de P2O5 donde se observa la
mayor actividad celulolítica del suelo ya que su valor esta por encima del
90 % de celulosa descompuesta en 3 meses. Se refleja además en este
gráfico que la actividad celulolítica del suelo sin fertilizar es muy baja pues solo
se alcanza un once por ciento de celulosa descompuesta en 3 meses.
69
pues aunque se observa una cierta tendencia a seguir aumentando con las
70
71
dosis de 450 y 600 kg\ha no hay diferencias significativas entre ellas, pero
cuando se utiliza la mezcla o combinación para alcanzar valores semejantes a
estos es necesario utilizar el máximo nivel de fósforo estudiado.
Después de 30 días (gráfico 5b) se observa que hay una mejor influencia
sobre la evolución de CO2 del suelo cuando se emplea el estiércol vacuno en
casi todos los niveles de fósforo estudiados y se alcanza el mayor valor de
CO2 desprendido cuando se utiliza este material orgánico como portador de
P2O5 en el máximo nivel de este elemento aplicado. A los 60 días (gráfico 5c)
y a los 90 días o final del experimento, (gráfico 5d) se mantiene que con el
estiércol vacuno en la dosis equivalente a 600 kg\ha de P2O5 se obtienen los
mayores valores de desprendimiento de CO2; sin embargo, en los niveles
inferiores de fósforo ya no se notan diferencias significativas con la
combinación del estiércol vacuno y el fertilizante mineral. En todas estas
etapas el empleo del fertilizante mineral como portador de P2O5 presentó la
menor influencia sobre la evolución de CO2 del suelo principalmente a partir del
nivel de 150 kg\ha.
72
60 105 M.O./ g
60 suelo
5
10 M.O./ 100 g
50
50
40
40
30
30
Control Control
20 20 absoluto
absoluto
10 10
0 0
0 150 300 450 600 P2O5 (kg/ha) 0 150 300 450 600 P2O5 (kg/ha)
Gráfico 6a. Inicio del experimento Gráfico 6b. Final del experimento
Gráfico 6: Efecto de los niveles de fósforo y las fuentes empleadas sobre el número de microorganismos totales
del suelo al inicio y final del experimento
73
los crecimientos mas pronunciados al utilizar el estiércol vacuno o su
combinación que con el fertilizante mineral solamente, encontrando inclusive
con este último en las dosis mas bajas, valores inferiores o iguales al
alcanzado donde únicamente se empleo nitrógeno y potasio. Tanto al inicio
como al final del experimento se nota que el número de microorganismos
totales del suelo control no fertilizado es muy bajo.
74
75
por separado y entre estas, las cantidades mas bajas se corresponden con el
empleo del fertilizante mineral
76
Foto 3a. Experimento de campo. Influencia de los niveles de estiércol
vacuno en el crecimineto de la especie Cynodon nlenfuensis.
Foto 3b. Experimento de campo. Influencia de los niveles de estiércol
vacuno en el crecimineto de la especie Digitaria decumbens.
Se aprecia además en esta tabla 8, que solo el uso del estiércol vacuno
provoca una disminución notable en el por ciento de nitrógeno de las plantas,
pues el mayor valor obtenido se alcanza cuando se utiliza el fertilizante
mineral y ya con 12.5 t\ha de estiércol se presentan contenidos inferiores;
sin embargo, los porcentajes de fósforo y potasio en planta, a pesar de ser,
en sentido general, muy bajos, para estos cultivos, son máximos con el uso
de 25 t\ha de estiércol mas el NPK.
78
TABLA 8.- Efecto de las dosis de estiércol y fertilizante mineral sobre los
establecimiento.
FERTILIZANTE EST.
RENDIMIENTOS COMPOSICIÓN QUIMICA (%)
kg/ha/año VACUNO
N P K t/ha/5 años t/ha N P K
c a b
37.5 45 120 0 0.94 1.42 0.065 0.89 b
37.5 45 120 12.5 10.53 b 0.90 b 0.077 b 0.96 b
37.5 45 120 25.0 11.81 a 0.88 a 0.095 a 1.30 a
ES (x) =< 0.2444 *** 0.0339 ** 0.0339 ** 0.0490 **
79
el tiempo pues ya a los 8 meses, se observa que en los tratamientos donde
solo se empleo el fertilizante mineral se produce una disminución del por
ciento de área cubierta por las especies, mientras que al emplear el abono
orgánico este porcentaje aumenta en todos los casos. Cada especie, como
es natural, desarrolla su propio potencial de adaptación, así la Brachiaria
decumbens nunca llega a cubrir toda el área, ni siquiera con 25 t\ha de
estiércol después de 8 meses de sembrada; sin embargo, las dos especies
restantes para esa fecha, ya han sellado completamente con solo 12.5 t\ha
del abono.
0,12
0,10
2,0 K ( %)
0,08
1,5
0,06
1,0
0,04
0,02 0,5
82
estiércol son los que superan a aquel en el que se utilizó el fertilizante mineral
solamente. Se nota además que los porcentajes de N del pasto, de forma
general, van a ir disminuyendo durante los años estudiados en todos los
tratamientos, aunque en aquellos en donde se usó el estiércol este
decrecimiento no fue tan grande y en el año 85-86 se produjo un aumento
considerable.
120
Area cubierta (%)
100 4 meses
80 8 meses
60
1 Cynodon
2 Brachiaria
40 3 Digitaria
20
0
1 2 3 1 2 3 1 2 3
Gráfico 10. Efecto de los niveles de estiércol y fertilizante mineral sobre el área
cubierta por cada especie (%) a los 4 y 8 meses de sembradas
83
empleo el fertilizante mineral y se mantengan así hasta el final del
experimento.
25
Gráfico 11a. Rendimientos 83-84
20
84-85
15 85-86
86-87
10
0
0 12,5 25 Est . ( t / ha)
-1
200-45-120 200-45-120 200-45-120 Kg ha FM
120 A re a 83-84
100 c ubie rt a ( %)
84-85
80
60 85-86
40 86-87
20
0
0 12,5 25 E st . ( t / ha )
84
Gráfico 11: Efecto de los niveles de estiércol vacuno y fertilizante mineral sobre los
rendimientos y el porcentaje de área cubierta por las especies durante los años de
corte continuado
Tabla 9:- Comportamiento de las especies en los años de corte.
AÑO 83 -84 (t/ha) AÑO 84 -85 (t/ha) AÑO 85 -86 (t/ha) AÑO 86 -87 (t/ha)
ESPECIES
LLUVIA SECA ANUAL LLUVIA SECA ANUAL LLUVIA SECA ANUAL LLUVIA SECA ANUAL
Cynodon
14.65 a 2.14 a 16.79 a 9.87 c 0.80 a 10.67 b 9.89 b 1.02 a 10.91 b 6.24 b 0.41 b 6.65 b
nlenfuensis
Brachiaria
11.52 c 0.98 c 12.50 c 10.06 b 0.40 b 10.46 b 10.54 ab 0.55 b 11.09 b 6.72 ab 0.37 b 7.09 a
decumbens
Digitaria
13.63 b 1.46 b 15.09 b 10.54 a 0.72 a 11.26 a 11.85 a 1.22 a
a
13.07 7.03 a 0.51 a 7.54 a
decumbens
ES (x)=± 0.2477 * 0.0483 * 0.2791 * 0.0548 * 0.0345 * 0.0759 * 0.4273 * 0.1058 * 0.4591 * 0.1550 * 0.0161 * 0.1494 *
a, b,…Cifras con letras distintas en cada columna difieren a P<= 0.05 según dócima de Duncan.
85
En la tabla 9a se muestra el comportamiento por épocas y anual de las
tres especies estudiadas en los años de corte. En la misma se observa que
en el año 83-84 la especie que presentó los mejores rendimientos fue la
Cynodon nlenfuensis, seguida por la Digitaria decumbens y por último por la
Brachiaria decumbens. En los años posteriores, la Digitaria decumbens
supera ampliamente a las demás excepto en las épocas de seca de los
años 84-85 y 85-86 en que sus rendimientos son similares a los obtenidos con
la Cynodon nlenfuensis y en el año 86-87 en que las t\ha de masa seca
alcanzadas en la época de lluvia y el acumulado anual no presentan
diferencias significativas con las de la Brachiaria decumbens.
86
9 b:- Contenido químico de NPK (%) en planta. (Promedio por corte en cada año experimental)
Cynodon
b a ab b b b a
1.46 1.36 1.32 1.53 0.14 0.11 0.11 0.11 1.66 1.36 1.52 1.43
nlenfuensis
Brachiaria
1.65 a 1.40 1.30 a 1.60 a 0.15 a 0.12 0.12 0.12 2.00 a 1.59 a 1.45 1.40 ab
decumbens
Digitaria
1.46 b 1.31 1.07 b 1.47 b 0.14 b 0.11 0.11 0.11 1.62 b 1.44 b 1.40 1.26 b
decumbens
ES (x)=± 0.023* 0.021 n 0.048 * 0.023 * 0.002 * 0.001 s 0.004 s 0.003 s 0.049* 0.025 * 0.070 s 0.038 *
a, b,…Cifras con letras distintas en cada columna difieren a P<= 0.05 según dócima de Duncan.
87
2.1 N (%) 0.18
1.9 0.16
1.7 0.14
1.5 0.12
P (%)
0.1
1.3
0.08
1.1
0.06
0.9 0.04
0.7 0.02
0
0.5
83-84 84-85 85-86 86-87
Años
83-84 84-85 85-86 86-87 Años
Gráfico 12a. Contenido de nitrógeno Gráfico 12b. Contenido de fósforo promedio
promedio por corte (%) por corte (%)
2,5
K ( %)
2 0
1,5 12,5
1 25
0,5
0
83-84 84-85 85-86 86-87 A ño s
Gráfico 12: Efecto de los niveles de estiércol vacuno y fertilizante mineral sobre el contenido químico (%
NPK) en los años de corte
88
El contenido de potasio en planta (tabla 9b) durante los años 83-84 y 84-85
es mayor en la Brachiaria decumbens que en las otras dos especies
estudiadas mientras que no hay diferencias significativas en los porcentajes de
este elemento en cada una de ellas. En el año 85-86 y durante el año 86-87;
sin embargo, la Cynodon nlenfuensis presenta la mayor concentración de este
elemento, pues aunque no tiene diferencias significativas con la Brachiaria
esta última tampoco las tiene con la Digitaria decumbens que es la de menor
contenido. Se observa además que los porcentajes de este elemento en planta
son muy altos en el año 83-84 pero que después van a ir disminuyendo
paulatinamente de forma general a medida que transcurre el tiempo.
89
Tabla 10.- Efecto de las especies estudiadas y los niveles de estiércol vacuno con fertilizante mineral sobre los rendimientos en
SUB-TRATAMIENTOS AÑO 83-84 (t/ha) AÑO 84-85 (t/ha) AÑO 85-86 (t/ha) AÑO 86-87 (t/ha)
TRAT
LLUVIA SECA ANUAL
N P2O5 K2O E. V. LLUVIA SECA ANUAL LLUVIA SECA ANUAL LLUVIA SECA ANUAL
• A, b, ....Cifras con letras distintas en cada columna difieren a P≤ 0.05 según dócima de Duncán.
90
En la tabla 11 se observa que la Brachiaria decumbens cuando no se
emplea el estiércol vacuno es la que presentó el mayor contenido de nitrógeno
por cortes en el año 83-84, de forma similar sucede en el año 84-85 aunque
aquí se puede notar que también la Cynodon nlenfuensis para ese mismo
nivel de estiércol tiene una respuesta semejante pues no hay diferencias
significativas entre sus valores. En este año se aprecia además que todas
las especies con la máxima cantidad de estiércol utilizada tienen los por
cientos mas bajos de este elemento por corte. En el año 85-86 no hay efecto
de interacción entre las especies y los niveles de fertilización aunque se
encuentra cierta tendencia a tener las mas altas concentraciones de este
elemento por corte cuando no se emplea el estiércol y las mas bajas al
emplearlo en la Cynodon y la Brachiaria no reflejando ninguna tendencia la
Digitaria; sin embargo, en el último año experimental los mejores valores de
nitrógeno en planta se alcanzan con la Brachiaria y el empleo de 12.5 y 25
t\ha de estiércol sin diferencias significativas entre ellos y los peores en esta
misma especie y la Digitaria al utilizar fertilizante mineral solamente.
91
Tabla 11.- Efecto de las especies estudiadas y los niveles de estiércol vacuno con el fertilizante mineral sobre el contenido
químico de las plantas (% de NPK) por corte en cada año experimental.
SUBTRATAMIENTOS CONTENIDO PROMEDIO DE N (%) CONTENIDO PROMEDIO DE P (%) CONTENIDO PROMEDIO DE K (%)
TRATAMIENTOS
N P2O5 K2O E. V. 83-84 84-85 85-86 86-87 83-84 84-85 85-86 86-87 83-84 84-85 85-86 86-87
b a c f e a
200 45 150 0 1.76 1.53 1.45 1.32 0.11 0.12 0.12 0.11 1.42 1.30 1.71 1.56 a
Cynodon
200 45 150 12.5 1.36 e 1.30 c 1.34 1.66 b 0.15 0.11 0.10 0.11 1.74 cde 1.38 de 1.44 ab 1.40 ab
Nlenfuensis
200 45 150 25 1.27 e 1.23 c 1.18 1.62 b 0.16 0.12 0.11 0.11 1.81 cd 1.41 cd 1.40 b 1.34 bc
Brachiaria 200 45 150 0 1.99 a 1.49 a 1.41 1.19 d 0.12 0.11 0.11 0.11 1.58 e 1.38 de 1.49 ab 1.56 a
decumbens 200 45 150 12.5 1.46 d 1.40 b 1.32 1.82 a 0.16 0.12 0.12 0.12 1.99 b 1.50 c 1.41 ab 1.20 cd
200 45 150 25 1.50 d 1.31 c 1.17 1.80 a 0.19 0.14 0.12 0.12 2.44 a 1.90 a 1.44 ab 1.43 ab
Digitaria 200 45 150 0 1.60 c 1.41 b 1.08 1.21 d 0.11 0.12 0.10 0.12 1.30 f 1.18 f 1.24 b 1.38 abc
decumbens 200 45 150 12.5 1.32 e 1.28 c 1.12 1.64 b 0.14 0.10 0.13 0.10 1.65 de 1.44 cd 1.28 b 1.10 d
200 45 150 25 1.44 d 1.24 c 1.00 1.56 b 0.16 0.12 0.11 0.11 1.90 bc 1.70 b 1.67 ab 1.30 bc
ES. (x) = ± 0.028* 0.023* 0.057NS 0.029* 0.004 NS 0.005 NS 0.010 NS 0.003 NS 0.053 * 0.033 * 0.086 * 0.056 *
a, b, .... Cifras con letras distintas en cada columna difieren a P ≤ 0.05 según dócima de Duncán.
92
En la misma tabla 11 se puede apreciar que durante los años 83-84 y
84-85 la mayor concentración de potasio en planta se alcanza con la
Brachiaria decumbens y la máxima cantidad de estiércol empleada, en los
años siguientes este efecto varia y así en el año 85-86 es la Cynodon
nlenfuensis sin el uso de este material la que tiene el mayor por ciento de este
elemento y en el 86-87 es esta última especie y la Brachiaria con el
fertilizante mineral solamente las que presentan los mas altos porcentajes de
este elemento en cada corte.
93
Foto 4 Experimento de campo. Bolsas de nylon usadas en la prueba de
descomposición de celulosa (Época de lluvia del año 1984)
En las épocas de lluvia de todos los años (gráfico 13a) se produce una
estimulación notable de la actividad celulolítica por el aumento creciente de las
cantidades de estiércol vacuno, pues por cada 12.5 t\ha de este material
aplicado hay un incremento de aproximadamente un 15 % de celulosa
descompuesta lo cual provoca que el mayor valor se alcance con el nivel de
25 t\ha de estiércol. En las épocas de seca (gráfico 13b) se puede apreciar un
comportamiento muy similar, solo que los incrementos no son tan notables
pues se encuentran dentro de un rango de un 3 a un 5 % de celulosa
descompuesta por cada 12.5 t\ha de estiércol aplicado aunque se mantiene
que con 25 t\ha se presenta la mayor estimulación de esta actividad en los
períodos secos de todos los años.
94
Gráfico 13a. epoca de lluvia
60
50 Lluvia 84
AC (%)
40 Lluvia 85
30 Lluvia 86
20
10
0
Control 0 12.5 25
t ha-1 est.
absoluto
Gráfico 13: Efecto de los niveles de estiércol vacuno y fertilizante mineral sobre la
actividad celulolítica (% de celulosa descompuesta en 3 meses) durante las épocas
de lluvia y seca en los 3 últimos años experimentales
95
En el gráfico 14a se presenta el efecto de los niveles de estiércol
vacuno y el fertilizante mineral sobre la evolución de CO2 en condiciones de
laboratorio, o sea manteniendo a las muestras de suelo tomadas en el campo
al finalizar el año de corte 84-85 a temperatura y humedad óptimas durante 4
semanas.
96
Gráfico 14a. Laboratorio
Semana 4
CO2 (mg/100 g
80 Semana 3
suelo)
60 Semana 2
40 Semana 1
20
0
Control 0 12.5 25 t ha-1 E. Vac.
absoluto
200
Seca 86
150
Lluvia 86
100
Seca 87
50
0
Control 0 12.5 25 t ha-1 E.Vac.
absoluto
Gráfico 14: Efecto de los niveles de estiércol vacuno y fertilizante mineral sobre la
evolución de CO2 del suelo en el campo y el laboratorio
97
En el gráfico 14b se muestran los resultados de esta medición
realizados en el campo por épocas en los dos últimos años experimentales y se
puede apreciar que los mismos reflejan una situación parecida a la encontrada
en el laboratorio en cuanto al incremento del desprendimiento de CO2 del
suelo en las parcelas donde se aumentó las dosis de estiércol vacuno en
todas las épocas, aunque en los periodos secos, debido a las bajas
condiciones de humedad existentes se observa, en sentido general, un
decrecimiento notable con relación a las lluvias y esto hace que las
diferencias encontradas también sean menos marcadas.
SEMANAS
ESPECIES TOTAL
1 2 3 4
98
contrario presentan los resultados mas altos pues supera a los de la
Cynodon nlenfuensis en la primera y cuarta semana y en el acumulado total.
Tabla 12 b.- Efecto de las especies y los niveles de estiércol vacuno con
fertilizante mineral sobre la dinámica de la evolución de CO2 en condiciones de
laboratorio.
SUBTRATAMIENTOS SEMANAS
TRATAMIENTOS TOTAL
N P2O5 K2O E.VAC 1 2 3 4
200 45 120 0 21.76 12.55 9.73 4.61 48.65
Cynodon
200 45 120 12.5 31.49 9.73 10.49 3.84 55.55
nlenfuensis
200 45 120 25 33.69 15.36 14.59 4.10 66.74
200 45 120 0 22.02 10.49 9.73 4.35 46.59
Brachiaria
200 45 120 12.5 32.26 13.82 12.03 7.94 66.05
decumbens
200 45 120 25 38.66 13.31 15.62 7.68 75.27
200 45 120 0 21.25 12.55 9.99 2.81 46.59
Digitaria
200 45 120 12.5 21.25 11.01 9,21 4.09 45.56
decumbens
200 45 120 25 25.60 10.49 10.24 4.61 50.94
MDS 5% 6.88 1.14 2.35 1.66 9.20
99
influencia que va a ejercer sobre los mg\m2\hora de CO2 desprendido,
100
Tabla 13.- Influencia de las especies en la actividad biológica del suelo por épocas en condiciones de campo.
84 85 86 85 86 87 85 86 86 87
Cynodon
35.34 26.59 23.17 13.50 10.57 8.13 135.00 81.26 57.29 56.14
nlenfuensis
Brachiaria
37.42 33.04 26.98 11.50 14.00 8.69 126.61 129.13 60.78 55.67
decumbens
Digitaria
42.79 48.22 26.81 19.50 13.89 10.82 145.14 151.78 57.06 56.98
decumbens
MDS 5 % 2.24 2.42 20.04 1.75 3.55 4.83 8.18 15.25 20.92 16.10
101
la Digitaria decumbens mientras que la Brachiaria decumbens tiene el menor
efecto en la lluvia del 85 y la Cynodon nlenfuensis en la del 86.
102
Tabla 14.- Influencia de la interacción de las especies con los niveles de estiércol vacuno y fertilizante mineral en la
actividad biológica del suelo en condiciones de campo.
200 45 120 0 23.13 20.83 7.83 10.83 3.70 4.53 95.44 52.37 44.83 42.34
Cynodon
200 45 120 12.5 34.68 27.38 20.00 13.34 10.00 8.33 144.15 84.00 60.77 55.28
nlenfuensis
200 45 120 25 48.23 31.55 41.67 16.33 18.00 11.53 163.31 107.34 74.68 70.79
200 45 120 0 24.23 20.10 5.60 9.17 10.00 4.73 101.84 51.40 49.46 43.96
Brachiaria
200 45 120 12.5 34.23 28.42 17.33 12.68 14.30 7.67 128.41 147.36 63.04 57.44
decumbens
200 45 120 25 53.80 50.61 58.00 12.66 17.67 13.67 149.56 188.64 69.83 65.60
200 45 120 0 23.80 28.23 7.10 10.33 7.33 3.57 101.36 63.29 46.09 45.53
Digitaria
200 45 120 12.5 41.77 51.02 19.33 18.50 14.00 13.33 151.54 174.58 61.10 59.48
decumbens
200 45 120 25 62.80 65.40 54.00 29.66 20.33 15.57 182.53 217.73 64.00 65.94
MDS 5 % 5.37 3.59 24.25 2.83 5.97 6.07 14.40 23.54 27.98 22.72
103
En la época de seca del año 85 el efecto descrito para los periodos
lluviosos es parecido solo que presenta ligeras variaciones por cuanto si bien
la Digitaria decumbens con 25 t\ha de estiércol presenta los mayores valores
de celulosa descompuesta, es la Cynodon nlenfuensis y no la Brachiaria
decumbens la que le continua pues esta última especie disminuye tanto su
influencia con 25 t\ha del abono que ese nivel no presenta diferencias
significativas con el de 12.5 t\ha. En los periodos secos de los años 86 y 87
no obstante, se encontró que todas las especies con 25 t\ha van a tener
efectos semejantes en este índice aunque hay cierta tendencia a que los
mejores resultados se observen en la Digitaria.
104
microorganismos del suelo en ambas ocasiones, aunque la respuesta
encontrada va a variar en cada año pues al final del año 84-85 este aumento
es en sentido general creciente, presentando cada especie su propia
influencia pero al terminar el experimento, a pesar de que se mantiene esta
característica, la dosis de 12.5 t\ha de estiércol provoca una mayor población
que la de 25 t\ha de este material. Se refleja además en este gráfico la
disminución del número de microorganismos totales del suelo con los años
ya que a mediados del experimento hubo necesidad de utilizar una dilución de
106 para realizar el conteo pero al finalizar el trabajo ya se tuvo que usar una
dilución menor.
105
12.5 t\ha del abono se alcanzan valores de pH similares a los obtenidos con
25 t\ha en la Cynodon nlenfuensis y la Brachiaria decumbens. En el muestreo
posterior este efecto desaparece y en el realizado al terminar el
experimento se observa de nuevo solo que en este caso los mayores
valores del pH se obtienen con la Digitaria y la Cynodon y la máxima dosis
de estiércol empleada.
30
25
106 MO g/suelo
20
15
10
Control
5
0
0 12.5 25 t ha-1 est.
200-45-120 200-45-120 200-45-120 Kg ha-1 FM
35 Estrella
30 Brachiaria
105 M.O. g/suelo
25 Pangola
20
15 Control
10
5
0
0 12.5 t ha-1 est.
25
200-45-120 200-45-120 200-45-120 Kg ha-1 FM
Gráfico 15: Influencia de los nivel de estiércol vacuno y fertilizante mineral sobre la
cantidad de microorganismos totales en el suelo con cada especie de pastos a
mediados y final del experimento de campo
106
El uso del estiércol vacuno va a provocar un aumento en el contenido de
materia orgánica del suelo como se refleja en el gráfico 16b que se va a
mantener durante todo el tiempo que duró el experimento, aunque este
efecto va a variar en intensidad e ir disminuyendo paulatinamente, así a los 8 y
32 meses de aplicado el abono no hay diferencias significativas entre los por
cientos de materia orgánica obtenida entre los niveles de 12.5 y 25 t\ha de
estiércol pero si entre estos y el suelo donde solo se empleó el fertilizante
mineral. A los 56 meses ya se observa que los por cientos de materia orgánica
alcanzados con 12.5 t\ha de estiércol son similares a aquellos donde no se
emplea este abono pero se mantienen superiores con el nivel de 25 t\ha de
estiércol. Se observa además que los porcentajes de materia orgánica del
suelo van a ir disminuyendo progresivamente y de forma notable a medida que
transcurre el tiempo llegando desde valores de entre 4.5 y 5.3% a los 8 meses
hasta 2.3 y 2.9% a los 56 meses.
107
Gráfico 16b. Efecto sobre la materia
Gráfico 16a. efecto sobre el pH orgánica
6
5.5 pH 0
M.O. (%)
5 12.5
5
4 25
4.5
3
4
2
3.5 1
3 0
8 32 56 8 32 56 Meses
M e se s
Gráfico 16c. Efecto sobre el P2O 5 Gráfico 16d. Efecto sobre el K2O
P 2O 5 40
(mg/100g 35
2
)
1.8 30
K2O (mg/100 g)
1.6
1.4 25
1.2 20
1
0.8 15
0.6
10
0.4
0.2 5
0
0
8 32 56 M eses
8 32 56 Meses
Gráfico 16: Influencia de los niveles de estiércol vacuno y fertilizante mineral sobre
la composición química del suelo
108
superior de P2O5 en el suelo donde se utilizo el abono no hay diferencias
significativas entre las cantidades de 12.5 y 25 t\ha de estiércol y ya al
finalizar el experimento para todos los niveles se presentan valores
semejantes de este elemento en el suelo aunque persiste todavía una ligera
tendencia a ser mayores en los suelos de las parcelas abonadas. En todos los
casos los mg de P2O5\100 g de suelo encontrados resultan bajas de acuerdo
a las cantidades de este elemento aplicadas tanto con el fertilizante mineral
como con el estiércol, pero a medida que transcurre el tiempo esta situación
se va agudizando y en el muestreo final los valores obtenidos resultan
ínfimos pues oscilan entre 0.59 y 0.64 mg de P2O5\100 g de suelo. según
Oniani.
Cynodon 5.0
4.82 4.22 5.01 4.14 2.66 1.20 0.68 0.59 21.05 16.65 13.49
nlenfuensis 1
Brachiaria 4.9
4.76 4.15 5.14 4.15 2.74 1.53 0.71 0.63 24.33 16.46 12.88
decumbens 9
Digitaria 5.0
4.78 4.21 4.81 3.72 2.56 1.56 0.66 0.64 24.47 17.66 12.44
decumbens 7
MDS 5 % 0.1
0.25 0.15 0.46 0.22 0.36 0.22 0.08 0.11 7.47 2.97 1.75
1
109
En la tabla 15 se muestra que a los 8 meses el menor contenido de
P2O5 asimilable se encuentra en el suelo de las parcelas sembradas con
Cynodon nlenfuensis pero en los dos muestreos posteriores esto cambia y no
hay diferencias significativas entre los mg de P2O5 del suelo para ninguna de
las especies estudiadas. En la tabla 16 se observa que a los 8 meses la
mayor cantidad de P2O5 se obtiene con la Digitaria decumbens y 25 t\ha de
estiércol sin embargo a los 32 meses este efecto se alcanza con la Brachiaria
decumbens y 12.5 t\ha del abono y ya en el muestreo final no se presenta
ninguna interacción entre las especies estudiadas y los niveles.
110
Tabla 16.- Efecto de las especies y los niveles de estiércol vacuno con fertilizante mineral sobre la composición
química del suelo en las diferentes fechas de muestreo.
200 45 120 0 4.57 3.59 2.45 0.90 0.59 0.54 9.63 7.02 7.62 4.87 4.75 4.15
Cynodon
200 45 120 12.5 5.14 4.35 2.72 1.16 0.73 0.59 19.27 16.38 14.76 5.07 4.82 4.16
nlenfuensis
200 45 120 25 5.34 4.48 2.81 1.54 0.73 0.63 36.35 26.54 18.33 5.10 4.90 4.34
200 45 120 0 4.55 3.58 2.45 1.20 0.59 0.59 11.92 7.29 6.61 4.97 4.72 4.07
Brachiaria
200 45 120 12.5 5.22 4.39 2.84 1.50 0.80 0.63 27.58 16.27 11.28 4.87 4.75 4.15
decumbens
200 45 120 25 5.66 4.49 2.92 1.90 0.73 0.67 33.50 25.81 20.74 5.12 4.80 4.21
200 45 120 0 4.59 3.83 2.18 1.24 0.59 0.63 9.04 8.89 7.68 4.92 4.68 4.02
Digitaria
200 45 120 12.5 4.92 3.48 2.45 1.43 0.66 0.63 25.72 16.40 11.78 5.10 4.80 4.16
decumbens
200 45 120 25 4.93 3.84 3.05 2.01 0.73 0.67 32.55 27.68 17.85 5.20 4.85 4.45
MDS 5 % 0.54 0.41 0.34 0.37 0.20 0.15 11.41 5.06 3.02 0.12 0.30 0.21
111
CAPITULO 4
DISCUSIÓN.
112
se aprecian, parecen indicar una alta capacidad de fijación de este elemento
por este suelo, de acuerdo a lo que plantean León y Fenster (1979) y Mc
Laughlin y Champion (1987).
Los efectos que se aprecian sobre los rendimientos en el experimento de
macetas, cuando se utiliza el estiércol vacuno como fuente de fósforo pueden
deberse principalmente a una disminución en el nivel de nitrógeno asimilable
para las plantas como consecuencia de la mayor necesidad de este
elemento que tuvieron los microorganismos del suelo al aumentar la cantidad
de carbono en forma brusca, pues la concentración de nitrógeno en la planta
sigue una tendencia similar y se debe de tener en cuenta que la cantidad de
este elemento empleada como fertilizante mineral para igualar al incorporado
con la mayor dosis de estiércol fue también disminuyendo consecuentemente,
desde los tratamientos con niveles mas bajos hasta el mas alto en que no se
utilizó.
Hay autores como Chaminade (1963); Yoshida (1976); Castellanos y
Pratts (1981); Fortun y Hernando (1981c); Pratts y Laag (1981); Cegarra et
al.,(1983a); Rodríguez (1983) y Nogales et al.,(1984) que informan haber
observado una disminución en los rendimientos de los cultivos cuando
aplican diversos materiales orgánicos al suelo y estiman también que se deba
a una competencia por el nitrógeno que se produce en el suelo entre las
plantas y los microorganismos a consecuencia del incremento de la actividad
biológica provocada por la adición de una fuente de carbono en abundancia.
Los resultados observados en el experimento de campo con relación a los
rendimientos cuando se duplicaron las cantidades de estiércol vacuno y las
bajas concentraciones de nitrógeno en las especies al aplicar este material
orgánico con respecto a donde se utilizó el fertilizante mineral solamente
confirman lo planteado sobre la fijación y mineralización del nitrógeno en el
experimento de macetas y los autores mencionados por cuanto los niveles de
12.5 y 25 t de estiércol vacuno\ha del experimento de campo, son muy
similares en cantidad a aquellos obtenidos para aplicar con este material las
113
dosis de 150 y 300 kg de P2O5\ha en el experimento de macetas (12.2 y 25.4
t\ha de estiércol vacuno respectivamente).
Por otra parte las diferencias en el porcentaje de nitrógeno del estiércol
usado en uno u otro experimento, se puede asociar con la mayor o menor
mineralización y el tiempo necesario para que los microorganismos efectúen
esta labor ya que aunque el por ciento de N del estiércol empleado en el
experimento de macetas es mayor que el del usado en el de campo, el
primero solo tuvo una duración de 3 meses, mientras que el segundo
prácticamente se mantuvo durante cinco años y solo al final, aparentemente,
es que se produce un balance positivo en este elemento. No obstante, la
ausencia de datos referentes a los contenidos de carbono del estiércol vacuno
y nitrógeno asimilable del suelo no permiten arribar a explicaciones mas
definidas.
En el experimento de macetas, se observa que la aplicación combinada de
cada fuente superó los resultados alcanzados con el estiércol vacuno solo e
igualó lo obtenido con el fertilizante mineral para un mismo nivel de fósforo, lo
cual indica la posibilidad de disminuir, al menos en un 50% la cantidad de
cada portador lo que seria de indudable beneficio, pero además corrobora en
gran medida el aumento en la efectividad de cada uno de estos materiales por
su adición combinada como plantean, Asmus y Gorlitz (1981); Cardoza et
al.,(1981); Cavallaro (1982); Cavallaro et al.,(1982); Arteaga et al.,(1982);
Cordoví y Gómez (1982); Martínez et al., (1982b) y (1982c); Maurya y Dhar
(1983) y (1984) y Diez (1986) entre otros, para distintos suelos, condiciones
climáticas y cultivos.
Esta respuesta podría explicarse por el efecto de complementación que
se produce entre el fertilizante mineral y el orgánico en cuanto al suministro
de nutrientes para la planta como plantean Follet et al.,(1974) y Hadas
et al.,(1983) cuando encuentran una situación similar y se puede deber
además, como consideran Aina y Egolum (1980); Wrigley (1981) y Alfonso et
al.,(1982) a que una mejora en las propiedades físicas del suelo por el abono
114
provoquen un mayor aprovechamiento de los nutrientes contenidos en el
fertilizante mineral por las plantas ya que los resultados obtenidos en el
experimento de campo con relación a los rendimientos así como al por
ciento de área cubierta por la variedad, señalan que cuando se emplea el
fertilizante mineral solamente, los niveles de NPK empleados no parecen ser
suficientes por si solos para satisfacer los requerimientos nutricionales de los
pastos allí establecidos pero al adicionarle a estos niveles las dosis
crecientes de estiércol vacuno la situación es superior en todos los sentidos.
115
Tveitnes (1979); Arteaga et al.,(1982b) y Portieles et al.,(1985) para otros
suelos, también aparece aquí lo cual puede ser una característica de
particular mérito en estos suelos que tienen una alta capacidad de fijación
de fósforo.
116
precisas también, no puede desarrollar todo su potencial productivo.
117
elemento en exceso o "consumo de lujo" cuando tienen este elemento
disponible en relativa abundancia como plantean, Hernández y Acosta (1979);
Mesa y Figueroa (1979a) y (1979b).
118
acuerdo a lo que manifiestan Babich et al.,(1986) y Gulyas et al.,(1987).
En el caso de este suelo, este efecto podría ser debido a los ínfimos
contenidos de elementos nutritivos asimilables, principalmente fósforo,
nitrógeno y potasio que presenta y las desfavorables propiedades químicas y
físicas que se aprecian en el mismo dadas fundamentalmente por un
desequilibrio en las relaciones inter-catiónicas por exceso de magnesio en el
complejo adsorbente, ya que al aplicar fertilizante mineral se nota
inmediatamente un aumento tanto en el por ciento de celulosa descompuesta
y los valores de CO2 desprendidos como en la cantidad de microorganismos
totales.
119
(1976) y Gulyas et al., (1984b) de que la respuesta a la fertilización fosfórica
esta limitada dentro de ciertos rangos por las dosis de nitrógeno y potasio
utilizadas como fondo.
120
proceso biológico y que deben ser tomadas en consideración como plantean
Gulyas (1974); Liska (1982) y Gandarilla et al.,(1987).
121
al.,(1964); y Raich et al.,(1985) entre otros. En el experimento de campo de
este trabajo se observa el efecto de estos factores; no obstante, debido a la
situación de sequía intensa que atravesó la zona en estudio en esos años, se
nota una mayor influencia de la humedad que de las temperaturas, lo cual no
coincide exactamente con lo que informan Kubista y Vokunova (1987);
Norstad y Porter (1984); Reinke et al.,(1981); Linn y Doran (1984) y
Zibilske (1987) pues la mayoría de ellos plantean que es la temperatura y
no la humedad la que tuvo una mayor influencia en la producción de CO2, lo
cual puede ser valido para las condiciones de clima templado en que se
desarrollaron estos trabajos donde las variaciones de este parámetro
durante las estaciones son altas, pero no en las condiciones climáticas de
Cuba en que las diferencias de temperatura entre las épocas de seca y
lluvia son solo de unos pocos grados cuanto mas y sin embargo las
variaciones en el régimen pluviométrico entre una y otra estación y a veces
dentro de la misma son considerables.
122
dinámica de la evolución de CO2 encontrada por Szegi et al.,(1987) para
algunos suelos de Hungría, mientras que la disminución paulatina en los
rangos de la evolución de CO2 del suelo que se observa tanto en el
experimento de macetas como de campo a medida que transcurre el tiempo,
coincide de forma general con lo que encuentran Stroo y Jencks (1982);
Reddy et al.,(1982); Hernández et al.,(1983) y Metzger et al.,(1987) para
otros suelos en condiciones de clima templado y parece indicar que los
microorganismos van a actuar selectivamente al descomponer inicialmente
los compuestos carbonados mas lábiles para continuar después con los de
mediana y mayor estabilidad.
123
de P2O5 parece indicar que el aumento en el contenido de carbono del suelo
no es la única causa para esta estimulación de la microflora sino que también
la aplicación de fósforo puede influir el la misma lo cual coincide con lo
planteado por Ishizawa et al.,(1969) y Zvyagintsev y Gusev (1987) establecen
cuando observan resultados parecidos.
4.3.- Suelos.
124
fertilizantes, principalmente el sulfato de amonio. ( Russell y Russell, 1959;
Dinchev, 1972; Demolon, 1975; Aspiolea y Arteaga, 1978; Arteaga et
al.,1978 entre otros ), aunque en este caso es probable que estos fertilizantes
también hayan afectado las ya bajas reservas de calcio de este suelo y esto
haya contribuido al aumento de la acidez, de acuerdo a lo que manifiestan
Pichot et al.,(1981).
125
se aprecia ninguna variación en los valores de esta determinación con
relación al testigo absoluto.
126
observa un incremento creciente en el contenido de fósforo asimilable del suelo
por el aumento de las cantidades de P2O5 adicionadas, que resulta
independiente del tipo de portador utilizado, se puede apreciar que los
valores encontrados no se corresponden con los elevados niveles de este
elemento añadidos lo cual indica que una gran parte de este fósforo debió ser
fijado al suelo o transformado en formas no asimilables, como Sánchez
(1976) informa que ocurre en un determinado grupo de suelos tropicales.
127
Los resultados que se apreciaron en el muestreo inicial del experimento
de macetas, así como en el realizado a los 8 meses en el de campo,
relacionados con el aumento del P2O5 asimilable del suelo por la aplicación
del estiércol vacuno confirman el importante papel que desempeña la materia
orgánica en la movilidad de este elemento en el suelo informado por Subba
(1978) y Arcia et al.,(1985) y que puede explicarse porque en su proceso de
descomposición por los microorganismos, la materia orgánica va a producir
determinadas cantidades y tipos de ácidos orgánicos, así como otros
compuestos que van a facilitar la conversión gradual de los fosfatos y otros
compuestos fosforados del suelo en formas asimilables y a su vez van a
formar complejos estables con el hierro y el aluminio si están presentes en la
solución o con el calcio y el magnesio, si se encuentran en cantidades
excesivas, lo cual posibilitaría que el suelo disminuya la retención del fósforo
y consecuentemente que la solubilidad de este elemento tanto del propio suelo
como del adicionado aumente, como lo han planteado numerosos
investigadores.
128
este elemento con el transcurso del tiempo, principalmente en aquellos
tratamientos donde mayor nivel de potasio se observa coincide con lo
encontrado por Gandarilla et al.,(1984) en este mismo suelo y otros
investigadores como Arzola (1985); Arzola y Cairo (1985); Crespo y Oduardo
(1985) y Portieles et al.,(1985) para otros suelos de Cuba.
129
Por otra parte, las gramíneas y dentro de ellas los pastos, son
considerados por Arteaga et al.,(1978a); Aspiolea y Arteaga (1978); Paretas et
al.,(1983); Hernández y Acosta (1979); Mesa y Figueroa (1979a) y (1979b)
entre los cultivos que realizan un mayor "consumo de lujo" de potasio y en la
parte relacionada con los rendimientos y composición química de los pastos
se puede apreciar claramente esta característica en las plantas estudiadas,
por lo tanto se puede considerar que las mayores exportaciones que de este
elemento se producen con las cosechas continuadas allí donde las plantas
presentan las mas altas extracciones del mismo provoquen el agotamiento
paulatino en las reservas del potasio asimilable del suelo en la forma descrita
en este trabajo tanto para el experimento de macetas como para el de campo.
CONCLUSIONES
130
conclusiones:
1-. Este suelo tiene una baja fertilidad natural debido a problemas
relacionados principalmente con la movilidad de sus elementos químicos
fundamentales, pero la situación se torna crítica en el caso del fósforo y el
potasio, esto provoca que la actividad biológica sea muy pequeña, así como
que las plantas que crecen en el mismo tengan un pobre desarrollo y calidad lo
que hace imposible su uso agrícola intensivo, sin un mejoramiento adecuado a
sus condiciones nutricionales específicas.
2.- Los rendimientos de los pastos van a aumentar por las aplicaciones de
dosis crecientes de fósforo hasta el nivel equivalente a los 300 kg/ha de este
elemento en que se alcanzan los mayores valores, tanto cuando se utiliza la
fertilización mineral u orgánica sola, como al combinar estas dos fuentes en
cantidades similares en base a sus contenidos de fósforo, pero a partir de ese
nivel los rendimientos se mantienen estables con la fertilización mineral o la
combinación y sin embargo disminuyen con el empleo del estiércol vacuno.
3.- Las dosis bajas de fertilizante mineral empleadas en este suelo no son
suficientes por si solas para satisfacer los requerimientos nutricionales de los
pastos introducidos, lo cual hace que su establecimiento y el posterior deterioro
del pastizal por la invasión de especies indeseables sea muy rápido, pero
cuando se utiliza la combinación de 25 t/ha, base seca de estiércol vacuno,
incorporadas antes de la siembra, con el uso de 37.5; 45 y 120 kg/ha de N;
P2O5 y K2O respectivamente se garantiza que esto suceda de la mejor forma y
las plantas cubran toda el área en un tiempo mínimo.
131
5.- El incremento en las cantidades de estiércol vacuno va a provocar un
menor contenido de nitrógeno en planta pero va a elevar sus por cientos de
fósforo y potasio con relación solo a la fertilización mineral. Con el transcurso
del tiempo; sin embargo, este efecto del estiércol vacuno sobre la composición
química de los pastos va a ir disminuyendo gradualmente hasta que, en el
tercer año cesa para los valores de fósforo y en el último año se invierte con
relación a lo observado al inicio para los porcentajes de nitrógeno y potasio.
132
mas altos de CO2 desprendidos en las épocas de lluvia que en las de seca, así
como variaciones de estos indicadores de acuerdo a las especies sembradas.
10.- Hay una disminución del pH del suelo en el transcurso del tiempo por
el empleo continuado de la fertilización mineral, a pesar de que las cantidades
aplicadas de NPK no fueron muy elevadas; sin embargo, la utilización de
estiércol vacuno aumenta estos valores del pH y permite atenuar en parte esta
situación desfavorable aunque los mecanismos de este proceso y los
componentes de este ultimo material que causan este efecto deben ser aún
aclarados.
133
proceso tienen la composición mineralógica de la arcillas y otras desfavorables
características químicas sobre la adsorción de este elemento en el suelo.
16.- El empleo de este suelo por la ganadería puede ser llevado a cabo sin
grandes problemas si se combinan de forma racional y óptima, la utilización de
la fertilización organo mineral y el uso de especies de pastos con una alta
eficiencia de conversión de nutrientes y adaptabilidad a condiciones
edafoclimáticas desfavorables.
RECOMENDACIONES
134
de fertilizante mineral como formula completa.
4.- Para el control del efecto de la fertilización orgánica en este suelo, además
de los análisis agroquímicos de rutina y la materia orgánica se deben de
emplear las determinaciones del porcentaje de celulosa descompuesta y el
desprendimiento de CO2 como índices de la actividad biológica del suelo.
LISTA BIBLIOGRAFICA.
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