El referendo: ¿Una herramienta democrática?

“La democracia significaba que todo hombre tenía derecho a ser oído, y que las decisiones

se tomaban conjuntamente, como pueblo”

Nelson Mandela.

Introducción

A través de la historia colombiana hemos visto diversos puntos de vista frente a la

democracia, y debido a esto si logramos visualizar el marco de definición de la democracia

concordamos con este planteamiento de (Pérez de la Fuente, 2012) “el concepto de

democracia pese a ser una noción tan utilizada actualmente dista de ser realmente preciso”.

Es por tal motivo que luego de aventuramos un poco en el estudio de este término

encontramos de manera más asertiva los tipos de democracia que el pueblo realmente

requiere para su funcionamiento y respeto a las libertades de participación como

ciudadanos y proporcionarle a Colombia un nuevo horizonte:

-democracia participativa:

- democracia deliberativa:

- democracia pluralista:
 Desarrollo del tema

1. ¿Democracia o no?

Ahora al adentrarnos en el cuestionamiento central de si es o no democrático el referendo

nos invita a debatir si nuestra constitución como rama de gestión participativa ¿qué busca

ofrecer al pueblo?; es allí donde surgen frente a tal necesidad los medios para, y a través de

la (Asamblea Nacional Constituyente, 2004), establece en el artículo 103 que “son

mecanismos de participación del pueblo en ejercicio de su soberanía:” dentro de los cuales

si leemos detalladamente encontraremos textualmente: “el voto, el plebiscito, el referendo,

la consulta popular, el cabildo abierto, la iniciativa legislativa y la revocatoria del mandato”

(Asamblea Nacional Constituyente, 2004). Pero a nivel de pueblo, debemos plantearnos

una cuestión mayor y trastocar la visión de estos, aprender a utilizarlos, participar

activamente de estos mecanismos consagrados en nuestra constitución de 1991 y poder así

ejercerlos dentro de un marco de respeto de los derechos humanos; sin alinear sus

opiniones, todo esto dentro de un marco de participación socio-gubernamental (estado)

donde como ciudadanos podamos tener una participación activa en la toma de decisiones de

interés colectivo y de alto impacto tanto social, como cultural y personal, gobernando bajo

el ideal de igualdad y de respeto por los demás; claro está que bajo un supuesto de controles

administrativos establecidos también dentro de la constitución en el Articulo 152, se nos

plantea que el estado podrá regular los mecanismos de participación buscando respetar de

la mejor manera las libertades de los demás.

Lo cual en el estado Colombiano hoy por hoy se convierte en un paradoja es si realmente

estamos utilizando de manera democrática estas herramientas que se nos proporcionan para

lograr el bienestar público, colectivo y no el privado o individual, vemos como roles

revolucionarios a lo largo del camino han perdido el horizonte de su causa para buscar el

progreso de Colombia, afectando a la comunidad con problemáticas tales como

narcotráfico, guerras, grupos paramilitares, masacres, violencias y muertes injustificables,

no optando por una democracia participativa y que a través del dialogo asertivo se logre

una sociedad donde se trabaje de mano del pueblo y con una adecuada comunicación;

también otro mal que carcome nuestro país son los supuestos actos de corrupción y la

creciente desconfianza del pueblo para con los políticos y en si en la política, debido a los

resultados y situación actual que vive Colombia frente a las organizaciones y grupos

políticos de momento. Es así como de manera irracional nosotros mismos como pueblo

desconocemos nuestra propia historia y nos quedamos en el desconocimiento de la realidad,

permitiendo la alienación de los derechos de los demás, a fin de no perturbar los propios.

El asunto más palpable en la actualidad es como apoyamos de manera experimental causas

o ideales que ni siquiera conocemos la causa inicial de pensamiento de cambio que trae

consigo, con acciones tales como el famosos “cambio de votos a cambios de beneficios

materiales, favores o acciones coercitivas y demás” estamos permitiendo que intereses

personales de esferas privadas, influyan, afecten y decidan el rumbo de esferas públicas que

están salpicadas por influencias de ego y poder. Siendo de esta manera una acción no

democrática porque tiende a ser influencia por creencias, fines diferentes al de una

democracia participativa, justa, social y equitativa; olvidando que el pueblo a través de su

participación como ciudadano es un derecho fundamental ante el cumplimiento de los fines

o situaciones que interesan a todo el pueblo para lograr la construcción de un estado ameno

para todos sus habitantes.

En actividades de participación ciudadana según (Velásquez C. & González R., 2003)

desde la segunda mitad del siglo XX: el clientelismo y el autoritarismo (respuesta

autoritaria del estado a la protesta ciudadana). Generan la respuesta del pueblo colombiano

de dos modos diferentes de asumir tales matices en el gobierno; la primera, el

abstencionismo a participar de estos mecanismos que plantea nuestra constitución, lo cual

se viene observando de manera creciente a la hora de acercarse a ejercer estos mecanismos

al no observar los beneficios o la eficacia de este proceso o mecanismo (en este caso del

referendo) para garantía y delimitación de los intereses colectivos; y la segunda, es el

incremento de protestas ciudadanas ante la poca capacidad del estado de satisfacer las

necesidades del pueblo colombiano.

Conclusión

Lo cual nos hace entender de manera formal que los mecanismos propuestos por la

Constitución Política de Colombia son idóneos y democráticos desde el margen normativo

debido que permiten la participación ciudadana frente a las decisiones que el pueblo utiliza

como canal para hacer sentir y ejercer su voz al respecto de asunto que interés colectivo y

de bienestar para l comunidad.

Mas no, continúan siendo democráticos cuando a raíz de los conflicto o problemáticas que

atraviesa nuestro país cuando incumplimos nuestros propios derechos y deberes frente la

ejerció de la democracia, al ser solo espectadores, cuando generamos en los demás

individuos coerción para la toma de sus decisiones o cuando de X o de Y manera apoyamos

la corrupción que se ha plagado en el país; haciendo que estos mecanismos planteados sean

poco efectivos.

Bibliografía

Asamblea Nacional Constituyente. (2004). Constitución Política de Colombia reformas y sus actos
legislativos. Bogotá, Colombia: Plaza & Janes Editores Colombia S.A.

Pérez de la Fuente, O. (2012). Qué democracia(s)*. Co-herencia, 53-79.

Velásquez C., F., & González R., E. (2003). ¿Qué ha pasado con la participación ciudadana en
Colombia? (Vol. I). (M. Flórez, & B. González , Edits.) Bogotá, Colombia: Fundación Corona.