Marco Teórico

A través del tiempo el gran término “ergonomía” ha tomado mucha importancia,

pues no solo se trata de tener una plácida comodidad en la silla, sino, el conjunto de
características que conforman el entorno laboral, así lo menciona el diario El Tiempo
(2003). Por tal motivo, el interés por tener dentro de la estructura o complejo laboral una
buena ergonomía a los colaboradores se hace de gran valor. En 1998, Oborne (Bedoya, M.
2011), propone diversas estrategias para evitar o reducir cualquier tipo de trastorno
musculo esquelético, esto inicia desde la evaluación de las condiciones de trabajo hasta el
entrenamiento continuo a los trabajadores en la adquisición de habilidades de cualquier tipo
de afección.

Civera & Herrera (2007) mencionan que, desde la década de los 80´s, la ergonomía
toma bastante fuerza, donde se hace referencia a la estrecha relación que existe entre la
salud y el nivel de producción (hombre-puesto) y, desde la década de los 90´s se empieza a
emplear un lenguaje más analítico y con mayor interés frente a la temática abordada. En el
2009, García, et al. En su investigación en ergonomía participativa, concluyen que, a nivel
de entidad laboral se hace más fácil implementar programas de promoción de la salud,
involucrando directamente a los trabajadores, ofreciendo, estímulos, información y medios
necesarios. Encontrando que, este tipo de ergonomía demuestra la efectividad en lo
anteriormente mencionado.

Para el año 2000, González & Nicole, refieren que, trabajadores de una lavandería al
finalizar su turno de trabajo, pueden presentar dolor en las regiones de los omoplatos,
hombros y manos; sin embargo, la intensidad de dolor o presencia o no de este, está
directamente relacionada con la cantidad de tiempo (años) que el colaborador lleva
ejerciendo dicha actividad. Según las recomendaciones ofrecidas por el grupo de
investigadores pueden o no funcionar, “dependiendo del nivel de involucramiento y
representación mental que tengan los empleados, empleadores, consultor y/o ergónomo”

Ansesio, et al. S.f. realizan la presentación de una plataforma virtual, la cual hace
funciones como la asistencia al evaluador que realiza actividades para la aplicación de
métodos de evaluación ergonómica, dichos métodos estuvieron avalados por comunidades
científicas, arrojando resultados y ofreciendo recomendaciones a dicho hallazgo
(características ergonómicas). Lo anterior se realizó con el objetivo de brindar mejoras en
las condiciones laborales.

En 2011, el grupo de investigadores encabezado por De Souza, C. et al.

Determinaron que, los factores que están relacionados con el medio ambiente y la
sobrecarga en diferentes segmentos del cuerpo, ocasionan falencias en la ergonomía, lo cual
lleva a que el absentismo, las pensiones de invalidez y los subsidios se presenten con
frecuencia, lo cual trae consecuencias para el trabajador y el empleador. Por otro lado,
Barrero, L. (2013), apuesta positivamente al modelo de colaboración industria-academia
evaluado en específicas actividades de labor, evidencia resultados con grandes expectativas,
donde se logra mejorar con las condiciones laborales hasta un punto académico, sin
embargo, se ve la necesidad de que este tipo de modelo se aplique en la industria.

Astudillo e Ibarra (2014), proponen que las afectaciones ergonómicas en el cuerpo

humano, están relacionadas con el sexo, pues este indicador permite determinar las
diferentes exposiciones a los riesgos profesional, dependiendo de si es una mujer o un
hombre. Lo anterior se ha definido así, pues dentro de este contexto, se considera que las
labores realizadas por las mujeres no tienen mayor riesgo. Por ejemplo, en el caso de una
lavandería y tintorería chilena se presenta que, el riesgo asumido por las mujeres
desarrollando su labor es de 0.85% (DS N° 110/68 del MINTRAB; Astudillo e Ibarra,
2014). Así mismo, Yassi & Warshaw, s.f. afirma que, las labores en una lavandería, el
estrés repetitivo ocasiona grandes afectaciones, por ejemplo, en los brazos, además, las
posturas que se deben de adquirir normalmente de características forzadas afectan
directamente al colaborador, donde en la mayor parte puede causar lesiones lumbares y, por
otro lado, el excesivo calor y ruido puede afectar en gran manera los colaboradores. Pero,
en el 2006, Pequini, et al. En su artículo desarrolla y muestra los pasos necesarios para dar
intervención en las soluciones presentadas en una lavandería industrial, con el objetico de
poder dar una contribución a la me mejora de la relación entre la productividad y vida
laboral.

Dado a lo anterior, se puede afirmar que la ergonomía hace parte de diversos

ámbitos, los cuales están identificados con el trabajador y el empleador, como pueden estar
desde lo económico hasta lo social, pues dicho término “ergonomía” busca un
complemento positvo entre la producción y la calidad.

Referencias

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ergonomistas y a profesionales de la prevención en la evaluación ergonómica de puestos de
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