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© [BACHELARD, Gaston, 2007. Le farmacisn de espirty cietiica, Contibucion 2 un psicoanliais del conocimiento objetivo. Siglo Veintune Edtores, México, LA FORMACION DEL ESPIRITU CIENTIFICO GASTON BACHELARD CAPITULO I LA NOCION DE OBSTACULO EPISTEMOLOGICO PLAN DE LA OBRA 1 Cuando se iavestigan lat condiciones pricolégicas det peogreso de la cenci, se llega muy pronto a la conviccién ‘de que bay que plintear el problema del conocimiento tientiFico en téeminos de obstculos, "No te trata de consi= derar los obstéculos externos, como la complejidad o Ia fa- facidad de lor fenémenot, ni de ineriminar a la debilidad ‘de los sentidos o del espirita bumano: es en el acto mismo de conocer, intimamente, donde aparecen, por una expec de necesidad funcional, jos entorpecimientes las eonfu- iones, Es abi donde mostraremos causas de extancamiento Yy hasta de retroczo, es abi donde discerniremos causas de Inereia que Hlamaremes obsticules epstemol6gicos, El co- ‘ocimiento de lo real es una luz que siempre proyecta {guna sombra. Jamis es iamediata y plena. Las reveliciones de fo real son siempre reeurentes. "Lo real no ee jams “10 ‘que podria ereese", sino siempre fo que debicra haberse peasido, El pensimiento empirico et claro, inmediato, ‘uando ha sido bien montado el aparejo de las razon, A volver sobre un pasado de ecrores, se encuentra 1a verdad fen un verdadero estado de arrepentimiento intelectual. Ea ffecto, se conoce en contra de un eonodimiento anterior, estruyendo conocimientos mal adquiridos 0 superando aquelo que, en el epic mismo, obstauliza a la espieh tualizacign, u = La iden de patie det cero para fundar y serecentar sus Vents no puede surgi sino en cultura de imple yuxtae posi, ef ls que todo hecho conocido ot iamediatamente Una sguers, Mas frente al-msterio de lo reall aa. 0 puede, por deceto, coenate ingen, Es entoaces imposible Incr, de golpe, taba sata de lor conocinienos ‘wale. Frente alo el lo que cre sabre aramenteofusca To que debe sbege. Cando we penta ante la caltars Ge fea, el exprta jams ex joven. Hoxta ex muy vio, pes tine la eda de sur pecan “Tener acrso Ta cnc et fejavenecer eprtualmente, ey aapeat uaa mutadion beses Ge a de conjeadce 2 ub prado, La cen, tanto en su principio como en sa nectidad de coronamiento, t opone en abroluto a la opiaiga. Sie alguna custign partial dbeleitimae Is opinion, To ace por tazones dstntas de lat que fundamentan In opi fe manera que la opinién, de derecho, jands tene azn. 1a opinion pients mal; no pieneestraduce ncestdaes couocimientos, Al designer & lw objeton or su wad, tls or prbie el conosrlos” Nada puede fundane sobee is opiaton: ante todo es neceatio detunia, Els eel primer obstécalo superar. ‘No er suficente, por employ Fecificarla en cases particulars, mantenendo, como toa ‘pede de moral provisos, un conocimiento vulgar prov sorio. El espiritu cientifico nos impide tener a fwetiones que no comprendemes, sobre cmstiones que no Sabemos formolar caramente. Ante todo es necstie aber Planta Joe problemas." Y diate lo que eat ‘ide cientfca los probes fio. Para un espicitu centifico todo conccimiento es una respuesta a una pregunta, Si n0 Ihubo pregunta, no puede haber concciento cientifico, [Nada es espontineo. ‘Nada eatf dado, Todo se construye, ‘Un conotimiento adquicido por un eafuezo cientifico puede decinae. La pregunta abstracta y franea se deagat 4a respuesta conereta queda. ‘Con eso, 1a actividad repiritual st invierte y se endurece. Un obstdculo epistemolopico se jncrustaen el conceimiento no formulado, “Costambres ine 16 ( telectuales que fueron stiles y samas pueden, a fa larga, trabar Ia investigacdn. "Nuestro espisitu —dice justamente Berg son (})— tiene na tendenca iresistble a considerar mas dlaras fap ideas que Te son stiles mis frecuentemente.” La dea conquista ati una casidad inteineca abusiva. Con el ‘uso, Int ideas se culoeizan indebidamente. Ua valor en ase ‘opone ala circlacién de los valores. Es un factor de inercia para el espiicu. A veces una idea dominance polariza al es- Dirt en vo totaidad. Hace unas veinte afos, ua ep Imélogo inevsrentedecia que los grandes hombees son Wiles 2a cienda en Ia primera mitad de su vida, nocivos en Ia Segunda mitad, El inetinto Formation ex tan persitente © ‘Gertor hombees de pensamiento que no debemas alarmaraos por esta boutade, Pero al final el instinto formation acaba por ceder frente al instinto coneruation, Llega un mo- ‘mento en el que el espirtu prefiee lo que confirma su saber alo que lo contradice, en el que prcfere Las respucstas a las ‘preguntas. Entonces el eapiritu conservative domina, y el frecimiento espicitual se detiene ‘Como se ve, 20 titubeamos en invocar fos instintos para teialat Ia cabs resistencia de ciertos obsticulos epistemo- Tegicos. Es una concepcin que nuestros desarrolos tatarin de justifieat. Pero, desde ya, hay que darse cuenta que el onoeimiento empirico, que eel que estudlaremos east i- famente en esta obra, compromete al hombre sensible a tra- ‘is de too for caracteres eat senibilidad. Cuando el 6 rnocimiento empirco ee rationaliza, munca se ext seguro de {que los valor sensibles primitivos no afecten a los racio- sinice, De una manera my visible, puede reconocerse que Ii idea cietifca demasiado familiar s carga con un con to peicolégico demasiado pendo, que ella amasa un ni- ‘mero excssivo de analogias,imégencs, metSfora, y que poco 4 poco pierde su vector de abstaccin, su afilada punta abs- twacta, En particular, es caer en un vano optimismo cuando ‘pitmsa que eabersirve antomsticamente pars saber, que [a altars se torma tanto mis facil cuanto esti mis extendida Y que en fin, la inteligenca, sagcionada por éxitos preco- (2) BeKesON: La Paleo Mount, Pat, 1934, p. 231 7 ‘8.0 por simples concursos univestaros, ee cpitaliza como ‘ina riqueza material. Aun admitiendo que wna buena cabe- ‘ze espa al nacisism intelectual tan fecuente en 1a cultura aria, en Ta adhesin apasionada 2 los juiior del gust, ‘puede seguramente decirse que uaa buena cabeza es desgratia- sdamente una cabeza cerada. Fs un producto de excels, En efecto, las crisis del crecimiento del penssmiento in- plicn una refandicin ¢otal del sistema del eaber. Enton” ces Ia cabeza bien bach debe ser rehecha. Cambia de es ppecie. Se opone ala esptcie precedente por una funcion ddecisiva. A través de las revoluciones eepiituales que exige Is invencién cientifica, el hombre ee convierte en una especie ‘matinte o, para expresarlo atin mejor, en wna expecie que ncessita mutar, que sufre si ao eambia, Exptitualmente el hhombre necesita neesdades. Si se considerara adecuadamen- te, por ejemplo, Ia modificacion psiquica que ee realiza a tra vés de Ia comprensién de doctsinas como Ia Relatividad o la Mecinica ondulatoria, quizi no se encontratian estas expre- siones exageradas, sobre todo si se wflexionara en Ia teal solider de la ciencia prerrlativista, Mas ya volveremos 20- die sos judas en auestro tino eptulo,cnsndo habre: ‘mos aportado numerosos ejemplos de revoluciones espti- spi ‘Se mpite también freeuentemente que Ia cencia es vida de unidd, gue ene unifiar fendnenes de appecto ds ‘into, que'busea Ia sencllezo Ta economia en los princpios yen los métodes, Esta unidad Ia encontraria muy pronto, pdiera complacerse con allo. Por el eontraio,

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