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INSTITUTOTECNICOSUPERIOR INDUSTRIAL BJA

GUIA DE FILOSOFIA CONTEMPORANEA

Nombre_____________________________________________________________________9°___periodo 4 ESP. LUZMILA CUMPLIDO M

IDEALISMO ALEMÁN: Movimiento filosófico alemán de la primera década del siglo XIX que, desarrollando algunas sugerencias de la
filosofía kantiana, considera a la realidad como un producto de la Razón. El idealismo alemán tiene su origen en Kant: recordemos
que, según este filósofo, en la experiencia de conocimiento el sujeto cognoscente es activo, aporta en dicha experiencia las
estructuras aprióricas que en él se encuentran y ordena, reúne o sintetiza el material bruto de la sensación mediante mecanismos que
descansan en él mismo. El fenómeno –lo único que realmente nos cabe conocer– es una consecuencia de la actividad del Sujeto
Trascendental. Sin embargo Kant creyó que podíamos postular la existencia de una realidad trascendente, no fenoménica, una
realidad independiente del sujeto (la cosa en sí o noúmeno), aunque para nosotros absolutamente desconocida. Esta tesis limita la
actividad de la razón humana, y es consecuencia de la concepción de dicha razón como facultad de conocimiento finita, del
reconocimiento de la propia finitud. Sin embargo, los filósofos alemanes posteriores a Kant hacen una valoración más optimista de
la Razón y acaban considerando a ésta como una facultad que carece de límites. Las características de este movimiento son las
siguientes:
1. Rechazan la noción de noúmeno o cosa en sí: no existe nada que esté más allá de la realidad conocida, no hay distinción entre la
realidad pensada y la realidad en sí misma.
2. Potencian el papel activo del sujeto: para Kant el sujeto es activo en el sentido de que influye en lo conocido a partir de sus
estructuras aprióricas y de los procesos que en ellas descansan, pero creyó también que en el sujeto había una dimensión de pasividad,
pasividad que se muestra en el hecho de que el sujeto elabora el fenómeno a partir de un material caótico que le viene ya dado (el
material bruto de la sensación);Los idealistas consideran que es preciso rechazar esa dimensión de pasividad y concluyen que
absolutamente todos los aspectos de la realidad conocida son una consecuencia de la actividad del sujeto cognoscente.
3. La Razón no se identifica con ninguna razón finita particular: el sujeto cuya actividad intelectual da lugar a la realidad no es ningún
hombre concreto; estos filósofos no son claros sobre este tema, pero parece –al menos en el caso de Hegel– que la identifican con lo
Infinito, cuya expresión más clara en el mundo humano es Dios.
4. El proceso por el cual la Razón o Infinito da lugar a la realidad tiene lugar en el tiempo y sigue un orden, al que dieron el nombre de
dialéctica. Entenderán este movimiento de auto-desenvolvimiento de la Razón o dialéctica como un proceso formado por tres etapas:
la tesis o afirmación, la antítesis o negación, y la síntesis o superación de los contrarios en una realidad más perfecta que integra,
superándolos, los momentos precedentes. Este proceso se puede ejemplificar con la teoría hegeliana de la dialéctica: para Hegel los
tres momentos básicos son el de la Idea considerada en sí misma y anterior a su revelación en el mundo finito (tesis), la Idea
expresándose en el mundo finito, en el ámbito de la Naturaleza (antítesis), y, finalmente, el momento de su perfección mediante la
integración de ambas dimensiones en el mundo del Espíritu (síntesis). Simplificando mucho podríamos identificar la Idea con Dios (lo
realmente Infinito), la antítesis con su manifestación como realidad finita (el mundo natural), y la superación de ambas realidades
con el mundo humano (mezcla de infinito y finito). La idea de la dialéctica como proceso o movimiento basado en la contradicción va
a influir poderosamente en la filosofía marxista, aunque desprovista de su dimensión teológica.
5. Una consecuencia de las tesis anteriores es la clara tendencia panteísta La teología anterior (por ejemplo, Santo Tomás) defendía
posiciones que se podrían incluir en el teísmo (la consideración de Dios como un ser personal, providente, creador del mundo natural
e independiente de él); el idealismo alemán, sin embargo, tiene una visión más compleja de lo divino, parece considerar al teísmo
como una forma de antropomorfización de lo divino, y, eliminando la radical separación entre el ámbito de las criaturas y la realidad
de Dios, acaba considerando que todo participa de la infinitud: la Naturaleza es una forma particular de expresarse Dios, como otra
es la que vivimos en la religión, y otra la que se ofrece en el arte y la filosofía.
MARXISMO Los factores que determinaron la aparición del marxismo fueron: la economía
política inglesa, particularmente Ricardo y Adam Smith, estudiada y criticada por Marx en “El Capital”; el marxismo aspira a explicar
la explotación del hombre a partir de la comprensión de los mecanismos y leyes de la vida económica; la práctica revolucionaria:
desde sus mismos orígenes el marxismo se presenta como un movimiento revolucionario, por lo que la historia del propio marxismo
está trabada con la historia del movimiento obrero; la filosofía alemana: Marx se inicia en filosofía con el estudio y crítica de la filosofía
hegeliana, participando en el movimiento filosófico denominado “izquierda hegeliana”. Podemos resumir las tesis básicas del
marxismo en los siguientes puntos:
La filosofía tiene un papel emancipador: es el instrumento intelectual con el que podemos entender las causas de la explotación y la
injusticia social y que nos permite actuar racionalmente para la superación de la alienación. Crítica a la alienación: consideración de
que el sufrimiento humano es, básicamente, consecuencia de la explotación económica.
Materialismo histórico: la defensa del papel de la base económica en la gestación y transformación de las sociedades, de la existencia
de clases sociales y de su inevitable antagonismo
Materialismo dialéctico: interpretación de la realidad en términos de materia en movimiento y del mundo natural en términos no
mecanicistas sino dialécticos (sin embargo, cabe anotar que todos los marxistas aceptan el materialismo pero no todos la
interpretación del mundo natural en términos dialécticos). Consideración del mundo en términos materialistas: crítica a la religión,
ateísmo y concepción no trascendente de la realidad humana. Propuestas políticas radicales: en general, el marxismo defiende
actitudes políticas muy contrarias al orden político tradicional, defienden la transformación de la sociedad a partir de la lucha obrera
y revolucionaria (aunque también encontramos marxistas más moderados que proponen cambios democráticos hacia el
socialismo). Abolición de la propiedad privada: la “receta” para la superación de la alienación y explotación del hombre por el hombre
es la abolición de la propiedad privada de los medios de producción, la instauración del comunismo. Valoración del Estado: frente a
las posiciones de derechas, la izquierda, particularmente la marxista, entiende al hombre como un ser social y reivindica el papel del
Estado como el instrumento adecuado para la redistribución de la riqueza y como el órgano racional necesario para la producción de
bienes
MATERIALISMO HISTÓRICO: Pretendía ser una teoría científica sobre la formación y desarrollo de la sociedad. Mediante una
teoría económica, histórica y filosófica intenta descubrir las leyes que rigen el cambio social y presenta un método para la
interpretación de los conflictos sociales y su transformación. La característica definitoria del materialismo histórico consiste en la
afirmación de que son las bases económicas y los modos de posesión de los bienes materiales los que se encuentran a la base de
toda transformación social. La estructura social y el motor del cambio no son las voluntades de las personas tomadas
individualmente, ni las ideas, ni mucho menos la voluntad divina, sino lo material, la vida económica y social reales del hombre, las
necesidades económicas y los intereses económicos de los distintos grupos sociales. Se suele incluir al materialismo histórico en lo
que se ha llamado “teorías o filosofías de la sospecha”: las “filosofías de la sospecha” mantienen que para comprender la conducta
de un individuo o de un grupo social no es adecuado atender a la explicación que dicho individuo o grupo da, pues dicha explicación
no es objetiva, está mediatizada, es consecuencia de los intereses del individuo o grupo. Para entender a un individuo o grupo es
necesario “sospechar” de la comprensión que él tiene de sí mismo y remitirse a otro nivel de realidad distinto al de la propia
conciencia. Los filósofos de la sospecha han sido Freud que destaca la motivación inconsciente en la conducta humana, Nietzsche,
para el que la cultura occidental esconde su carácter anti vital, y el marxismo, según el cual el fundamento verdadero de la conducta
social no está en el nivel de la comprensión que los hombres tienen de sí mismos, comprensión que se sitúa en el nivel de las
ideologías, sino en el nivel de los intereses económicos y políticos del grupo dominante.
Marx nunca utilizó los términos "materialismo histórico" o "materialismo dialéctico"; Marx y Engels utilizaron más bien las
expresiones "método dialéctico" o “teoría materialista de la historia”. Clásico texto marxista que presenta la lucha de clases como el
motor de la historia. "En toda época histórica, el modo económico predominante de producción e intercambio, y la estructura social
que deriva necesariamente de él, constituye el fundamento sobre el cual se basa la historia política e intelectual de una época, y
únicamente a partir de él puede explicársela; (...), en consecuencia, toda la historia de la humanidad (desde la abolición del orden
gentilicio, con su propiedad común de la tierra) ha sido una historia de luchas de clases, de luchas entre clases explotadoras y
explotadas, dominantes y dominadas; (...) la historia de esas luchas de clases constituye una serie evolutiva que ha alcanzado en la
actualidad una etapa en la cual la clase explotada y oprimida el proletariado ya no puede lograr su liberación del yugo de la clase
explotadora y dominante la burguesía sin liberar al mismo tiempo a toda la sociedad, de una vez por todas, de toda explotación y
opresión, de todas las diferencias y luchas de clases." Marx, Engels, Manifiesto del partido comunista, Prólogo de 1888 EL VITALISMO
La filosofía vitalista tiene como primera distinción de las filosofías tradicionales entender la realidad como proceso. Sin hacer
metafísica tratan del ser en devenir, es decir, son herederos de Heráclito. En lo antropológico la libertad es no sólo característica de
la voluntad, sino esencia del ser hombre. Además se abandona el concepto tradicional de razón (abstracta, especulativa o científica)
para considerar la razón como vital o histórica. El vitalismo marchará paralelo a otra corriente filosófica que coincide con él en estas
características y en la crítica a las filosofías predominantes del siglo. XIX (idealismo y positivismo). Ésta es el historicismo, cuyo
principal representante es Dilthey. El vitalismo tiene dos principales manifestaciones. La primera de carácter científico cuyo principal
portavoz es Hans Driesch, según la cual es reacción contra el mecanicismo materialista que propugna la reductibilidad de lo vivo a los
procesos físico-químicos de la materia inerte. Postula la existencia necesaria de un principio vital ajeno a la materia que explica los
complicados fenómenos de lo viviente.
La segunda manifestación es de carácter filosófico, y es la que propiamente se llama vitalismo o filosofía de la vida. A ésta se debe
que la filosofía consiguiera alejarse de las “intromisiones científicas” sobre todo de las físicas; precisamente por remarcar el carácter
diferenciado de las realidades vitales no susceptibles de un tratamiento sólo matemático. También se debe al vitalismo la reacción
contra el racionalismo exagerado que supuso el idealismo alemán posterior a Kant. Por estas razones exaltan los vitalistas lo
siguiente: La vida como realidad radical. Ontológicamente, la vida es lo sustancial del hombre. Gnoseológicamente, conocer la
realidad prescindiendo del razonamiento y utilizando la vivencia, la intuición que simpatiza con lo que quiere conocer (más que
razonar sobre las cosas hay que tener experiencias vitales de ellas o con ellas). Axiológicamente (filosofía de los valores) no hay otro
criterio para jerarquizar los valores, que determinan qué es lo bueno y lo malo, más que la vida.
No debemos entender el concepto vida únicamente como el proceso biológico que se desarrolla durante un período de tiempo
afectando a lo animal en el hombre, sino más bien del modo más amplio posible. Los principales filósofos serán Henry Bergson
(desarrolla su labor en el siglo XX), y el precursor Schopenhauer, que sin ser propiamente vitalista fue el contemporáneo de Hegel
que más radicalmente se opuso a su filosofía, hasta su muerte en 1861. Lo más espectacular de su filosofía es su radical pesimismo:
“La filosofía es un saber en cierto modo despiadado, no edificante; ha de servir no para hacer más fácil nuestra angustiada vida sino
para agravar esta característica, porque exagerar que la vida es angustiosa, es lo único continuador de Kant”. Afirma que la esencia
más íntima del mundo, el auténtico noúmeno es la voluntad de existir, que definimos como impulso de continuar en el ser sin
finalidad, desde lo inanimado hasta la inteligencia humana. Más importante fue su aportación a la que luego será el vitalismo: tras la
razón debemos concebir algo irracional, más importante, más edificante, que constituirá una voluntad única, que se esfuerza en dar
explicación al mundo.
ACTIVIDAD #1
1. Realizar lectura del documento y buscar el significado de los términos desconocidos
2. ¿Qué relación puede haber entre ciencia, técnica y humanismo?
3. ¿Qué sentido puede tener para ti la expresión “El ser humano no tiene esencia, tan solo existencia”?
4. Resume los principales planteamientos filosóficos de las siguientes corrientes filosóficas: Idealismo Alemán, Marxismo y Vitalismo
5. ¿A qué se denomina materialismo histórico?
6. ¿Qué caracteriza al hombre según Marx?
7. ¿Qué papel debe ejercer la filosofía en la nueva sociedad de la globalización y el consumismo?

EL POSITIVISMO : Corriente filosófica iniciada por Auguste Comte en la primera mitad del siglo XIX que identifica el verdadero
conocimiento con el conocimiento científico o conocimiento positivo. Según Comte, la humanidad pasa por tres fases o etapas de
conocimiento, cada una de ellas superior a la anterior, que son: el conocimiento religioso, el filosófico y el científico.
Las formas de conocimiento religioso y filosófico (a las que se refiere como teológico y metafísico, respectivamente) se ven superadas
por el conocimiento positivo o científico, por lo que, una vez alcanzado éste, no tiene sentido ni justificación mantener las anteriores
formas de conocimiento. Dado que el conocimiento científico es llamado por Comte conocimiento positivo, (utilizando una expresión
procedente del socialista francés Saint-Simon, del que había sido discípulo), esta corriente se conoce como positivismo (que vendría
a ser sinónimo, pues, de cientificismo).

El nombre positivismo se debe a Augusto Comte, aunque algunos historiadores estiman que su fundador fue David Hume, filósofo
empirista. El positivismo encierra un objetivo muy marcado que es el de ejercer una acción eficaz sobre la naturaleza, no solo para
comprender las leyes de su comportamiento, sino también para aspirar a un mayor desarrollo de la economía, de la tecnología y de
la ciencia, por esto se dice que con el positivismo surge un nuevo poder ejercido por la ciencia y la tecnología.
Ha sido enorme la influencia del positivismo en la filosofía del siglo XIX, XX y aun en la de nuestros días, con el positivismo se enaltece
la ciencia hasta el punto de considerar que los grandes problemas de la humanidad se solucionaran solo con el progreso de la ciencia,
todo lo que se considere fuera del dominio científico es rechazado, ya que puede considerarse un obstáculo para el desenvolvimiento
racional del hombre, es por esto que el positivismo rechaza la metafísica.
El positivismo ha asumido en su desarrollo histórico dos formas con características específicas pero con influencias recíprocas a
saber: El Positivismo Social y sus mayores exponentes son: Saint Simón, Augusto Comte y Stuart Mill y el Positivismo
Evolucionista de Herbert Spencer. El positivismo social propone una reforma a la sociedad valiéndose de la ciencia en su sentido
positivo y práctico, pues la evolución del conocimiento científico es lo que ha determinado el progreso social a través de la historia.
El positivismo evolucionista defiende la teoría de la evolución, según la cual, la sociedad, el hombre, el universo están sometidos a
cambios que conducen a su desarrollo. La filosofía positivista de Saint Simón, Augusto Comte y Stuart Mill.
Saint Simón plantea que existen en la historia las llamadas épocas críticas y épocas orgánica; la época orgánica es aquella que se
encuentra determinada por un sistema sólido de creencias a partir de lo cual ella se desarrolla y progresa. En la época orgánica El
progreso, propicia en la historia épocas criticas que permiten luego el paso al desarrollo. Según Saint Simón, en un futuro la organización
social estará basada n la filosofía positivista, y que dicha filosofa orientara e orden social, moral, religioso y político. En el ámbito
social, Simón plantea un “retorno al cristianismo primitivo” en el que todos los hombres deberán considerarse como hermanos y
contribuir con su trabajo al mejoramiento económico, moral y físico de la gente humilde.
Augusto Comte expone su filosofía en un sistema de principios, resumidos en lo siguiente:
1. plantea que hay que promover una reforma total de la sociedad teniendo como herramienta la ciencia ya que es el “testimonio
evidente del reinado del hombre en el universo”.
2. la humanidad ha pasado por tres estados sucesivos: el estado Teológico, el estado Metafísico y el estadoPositivo o Real y con este
último estado, se trata de descubrir las leyes mediante la observación de los hechos, de lo positivo. Este segundo principio es el punto
de partida de la filosofía de Comte.
3. se crea el nombre de Sociología como ciencia de los fenómenos sociales considerados en su totalidad, esta ciencia tiene diversas
tareas: investiga la leyes de la vida del individuo, de su vida en familia y colectiva.
4. la moral positivista es esencialmente social y altruista, le exige al hombre “vivir para el prójimo”.
John Stuart Mill propone una “religión de la humanidad” en la que se establezcan límites obligatorios a las acciones egoístas de los
individuos y plantea un sistema social que garantice la distribución más equitativa de la riqueza y mejore las condiciones de vida de
las clases pobres. Otros pensadores como Robert Malthus, David Ricardo, Jeremías Bentham plantean la filosofía del “Positivismo
Utilitarista” que consiste más que todo en una “filosofía moral” que consiste en buscar el bienestar de los individuos y la felicidad de
la sociedad. El Positivismo Utilitarista se relaciona con la actividad política encaminada a las reformas de carácter social, económico,
religioso y político.
Desarrollo Histórico del positivismo
El término positivismo fue acuñado por primera vez por el filósofo y matemático francés del siglo XIX, Augusto Comte. Pero algunos
de los conceptos positivistas se remontan al filósofo británico David Hume, al filósofo francés Saint Simon y filósofo alemán
Emmanuel Kant. Muchas de las doctrinas de Comte fueron más tarde adaptadas y desarrolladas por los filósofos sociales británicos
John Stuart Mill y Herbert Spencer, así como por el filósofo austríaco Ernst Mach.
Augusto Comte. Nació en Montpellier en 1798 y murió en París en 1857. Estudió en París y luego de diversos avatares académicos
logró el puesto de profesor auxiliar de matemáticas en la Escuela Politécnica de París. Su vida económica fue bastante desgraciada,
debiendo subsistir los últimos años de su vida de las ayudas de discípulos y amigos. La hostilidad que sus escritos
"La base del planteamiento de Comte consiste en afirmar que todo enunciado o proposición que no se corresponda al simple
testimonio de un hecho, no encierra ningún sentido real e inteligible".
Algunas ideas centrales de su pensamiento son: la concepción historicista del desarrollo de la ciencia y de la razón, las cuales él
desarrolla en tres estados fundamentales, es decir, la historia del pensamiento transitó por tres senderos y en el último radica la
verdad clara y demostrada, estos estadios son:
 Estadio mitológico – teológico: en este estadio el ser humano hace depender los fenómenos naturales de la voluntad de poderes
personales superiores, es lo conocido como fetichismo donde se atribuyen poderes mágicos a fenómenos naturales. Es en este
estadio donde se vive el proceso del paso del politeísmo al monoteísmo.
 Estadio metafísico: es el estadio en el cual todo es explicado a partir de entidades abstractas, es un período crítico, en el cual
irrumpen las fuerzas disolventes de la inteligencia; simplemente es transitorio.
 Estadio Positivo: Es el estadio definitivo y superior porque en él se explica la realidad mediante la observación y la experimentación.
Así el positivismo busca explicar los hechos por medio de la formulación de sus leyes y es por ello que prescinde de la metafísica. En
este estadio se renuncia al conocimiento de lo absoluto, y se pasa a buscar las leyes de los fenómenos.
 La concordancia, la cual consiste en la observación de un fenómeno y sus circunstancias antecedentes, si las cambiamos todos
menos una y el fenómeno sigue dándose, la conclusión es que esta última circunstancia es la causa del fenómeno observado.
 La diferencia, si suprimimos una circunstancia antecedente y, como consecuencia, desaparece el fenómeno, podemos afirmar que
tal antecedente es la causa del fenómeno.
 Los Residuos, llegado el caso que conozcamos la causa de una parte del fenómeno, debemos considerar que el resto del fenómeno
se debe a causas desconocidas aún.
 La variaciones Concomitantes, consiste en partir de los hechos y, mediante el uso de la inducción, llegar al establecimiento de las
leyes físicas; es decir, cuando un fenómeno varía en función de otro, podremos afirmar que de tal fenómeno es efecto del segundo.
Mill es considerado como un empirista lógico, puesto que funda su ciencia social en la voluntad y la creencia, toma el egoísmo como
el principal motor de las relaciones humanas, considera los valores religiosos como simple colaboración, en los que la marcha del
hombre va en la búsqueda moral.
También es un utilitarista práctico, el cual tiene como lema favorito el aumento del placer y la disminución del dolor. Afirma que el
hombre ante las necesidades materiales descubre que no existen soluciones espirituales, sino que esas soluciones se encuentran en
la sociología. La lógica la declara como una ciencia de prueba, lo mismo que a la sicología como ciencia moral. "La observación y la
experimentación, por profunda que sea, no puede conducirnos al conocimiento absoluto de los fenómenos. Hay que partir, por tanto,
de un cierto relativismo cognoscitivo".
ACTIVIDAD #2
1. Realizar la lectura del documento y buscar el significado los términos desconocidos
2. ¿Cuál es el eje central de la filosofía positivista?
3. Cuáles son los planteamientos de Saint Simón.
4. ¿Cuál consideras que fue el aporte más importante de la filosofía positivista de Augusto Comte? ¿Por qué?
5. ¿Qué relación encuentras entre la “religión de la humanidad de Stuart Mill y la “filosofía moral” del positivismo utilitarista?
EL EXISTENCIALISMO FILOSÓFICO (Documento Nº: 1)
El existencialismo es una de las corrientes filosóficas más influyentes e importantes del siglo XX. El existencialismo en el siglo XX
surgió después de la primera guerra mundial y tuvo un nuevo renacer después de la segunda guerra mundial, época en la que se hizo
popular en cuanto a su proyección literaria y artística. Las guerras mundiales, dejaron un fuerte impacto psicológico en los hombres
de ese tiempo, como consecuencia de la guerra se dio un cambio en el estilo de vida, en la forma de ver el mundo y al hombre, muchos
pensadores vivieron son sensaciones de soledad, abandono, temor a la muerte, incertidumbre. Emana de lo anterior, un nuevo
cuestionamiento cuyo centro es el “Ser”, tema que desarrollará la filosofía existencialista. Los existencialistas se preguntan por el ser
y su punto de encuentro es nuestra propia individualidad, el “Yo”, como individuo único y espiritual.
El existencialista plantea que para poder encontrar lo verdaderamente esencial de la existencia, hay que buscar en el hecho puro de
existir, en la existencia misma y esto excluye la existencia económico-social como los bienes materiales, el dinero, las joyas, los carros
etc., así como tan bien deja por fuera todas los aspectos de la vida externa como la belleza, la patria, la cultura. “lo esencial de la
existencia no lo encontraremos en las cosas materiales sino en el hecho de existir”. El hombre tiene la posibilidad de elegir
libremente entre dos modos de existencia: una existencia falsa, sin existencia lo cual es llamada la “existencia de la inautenticidad” y
el otro modo de existencia es la existencia verdadera de la “autenticidad”.
La existencia inauténtica es estar caído y perdido en el mundo de la cotidianidad, en la vida exterior, el materialismo, la belleza, pero
los existencialistas plantean que podemos despojarnos aunque sea por instantes de ese estado de inautenticidad y evolucionar hacia
la existencia autentica.
Para el existencialismo, el sentido de la existencia se encuentra en vivir el instante, vivir comprometidos incondicionalmente para el
momento, debemos independizarnos del destino y del futuro por ellos debemos decidirnos a comprometerlo todo, a cada
instante. “la existencia es la reiteración de la sucesiva posibilidad de existir”. El existencialista se interesa especialmente por el
sujeto concreto y existente, por el yo, por la dignidad de la persona, por el misterio de la interioridad, por el mundo de la conciencia
y la reflexión subjetiva, no le interesa el mundo de las cosas externas ni las relaciones del hombre con los objetos materiales, le
interesa el hombre y la relación con su yo interior.
Soren Kierkegaard: se caracterizó a través de su filosofía existencialista por la subjetividad de sus pensamientos. Le interesó
descubrir y ver realizada la individualidad en el sujeto concreto. La verdad se da en la subjetividad, y esta verdad se entraña en una
vinculación intima con el ser individual.
Para que exista esa verdad no basta un saber objetivo; necesitamos comprender ese saber, luego de tener el saber y de haberlo
comprendido esto nos conduce a un obrar esencial que se convierte en estilos de vida y en el encuentro consigo mismo. La
subjetividad de la que habla Kierkegaard no la sitúa en la racionalidad perfecta del hombre, sino en su interioridad, es decir, en sus
sentimientos, en el amor, en sus palabras, en la pasión. Según estos criterios distingue tres esferas distintas del existir humano: la
estética, la ética y la religiosa. La esfera estética es esencialmente “goce” contemplativo de las cosas que no transforma al hombre
existente en su interioridad, se vive del instante y el instante del goce huye veloz y solo queda el dolor, el pecado y la desesperación.
Esta desesperación se purifica cuando el esteta se resuelve a entrar en la esfera ética en la que en vez del goce, reina el deber. Esta se
caracteriza por la acción y la victoria y es por tanto existencial. Pero aquí el sujeto pierde su individualidad y se incluye dentro de un
grupo por que el ético reclama la generalización. Por ello su felicidad y su armonía están amenazadas al caer en la masa y en la opinión
pública.
A través de la esfera religiosa podemos escapar a la desesperación en la que domina la fe y una pasión interesada solamente en Dios
y en el más allá.
Jean Paúl Sartre: El análisis existencial en Sartre es entendido por él como análisis de la conciencia. Un estudio de la realidad humana
debe empezar por el cogito. El cogito es la actitud de la reflexión sobre sí mismo, sobre la propia interioridad espiritual. El YO, la
imaginación y las emociones, constituyen los temas centrales de la investigación inicial Sartriana. Para Sartre la libertad tiene su
fuente en la propia existencia, la libertad es la misma existencia. Este filósofo consideró que el estudio del hombre exige y presupone
actividades éticas. “Nuestra ética – decía – debe consistir en querer ser libres, en serlo nosotros y en querer que los demás lo sean, en
obrar en todo momento para que esta libertad se realice de modo efectivo”. “la vida es una lucha, pues el hombre se halla inmerso
en el reino de la necesidad. Solamente se liberará cuando consiga sustituirlo, por el reino de la libertad”.
EL EXISTENCIALISMO PLANTEAMIENTOS Y DEFINICIONES (Documento Nº: 2)
No es posible dar una definición precisa del existencialismo, pues no existe un existencialismo único, pero este siempre reconoce la
incertidumbre y el peligro, el cual es propio del hombre y este es su punto de partida, sí pueden presentarse una serie de rasgos que
ayuden a describir el talante y el espíritu de ese movimiento filosófico. El existencialismo introduce la vivencia personal en la reflexión
filosófica. Frente a la tradición de que el filósofo debe establecer cierta distancia entre él mismo como sujeto pensante y el objeto
que considera, el existencialista se sumerge apasionadamente en lo que contempla, hasta el punto de que su filosofía puede llegar a
ser fundamentalmente una filosofía autobiográfica. Soren Kierkegaard mantenía que es crucial para el espíritu reconocer que uno
tiene miedo no sólo de objetos específicos sino también un sentimiento de aprehensión general, que llamó “temor”. Lo interpretó
como la forma que tenía Dios de pedir a cada individuo un compromiso para adoptar un tipo de vida personal válido
Tal vez el tema más destacado en la filosofía existencialista es el de la elección. La primera característica del ser humano, según la
mayoría de los existencialistas, es la libertad para elegir. Mantienen que los seres humanos no tienen una naturaleza inmutable, o
esencia, como tienen otros animales o plantas; cada ser humano hace elecciones que conforman su propia naturaleza. Según los
existencialistas han expuesto que, como los individuos son libres de escoger su propio camino, tienen que aceptar el riesgo y la
responsabilidad de seguir su compromiso dondequiera que éste les lleve.
Martín Heidegger, al igual que Kierkegaard, reaccionó contra el intento de fundamentar la filosofía sobre una base conclusiva
racionalista, en este caso la fenomenología del filósofo alemán Edmund Husserl. Heidegger, autor de una de las obras más
representativas del existencialismo, El ser y el tiempo (1927), afirmó que la humanidad se encuentra en un mundo incomprensible e
indiferente. Los seres humanos no pueden esperar comprender por qué están aquí; en su lugar, cada individuo ha de elegir una meta
y seguirla con apasionada convicción, consciente de la certidumbre de la muerte y del sinsentido último de la vida propia.
Heidegger contribuyó al pensamiento existencialista al poner el énfasis en el ser y la ontología tanto como en el lenguaje. Heidegger
es el filósofo que parece más alejado de esta perspectiva, que para él el problema fundamental de la filosofía es el ontológico, es
decir, el problema del ser, y, por tanto, el problema del hombre queda subordinado a aquel problema. Sin embargo, el ser-ahí, el ente
que es el hombre, se sitúa en un lugar preferente en toda pregunta sobre el ser.
Para Heidegger, la muerte es la última posibilidad del hombre, la angustia posee un papel decisivo y similar en las obras del filósofo
alemán Martin Heidegger; la angustia lleva a la confrontación del individuo con la nada y con la imposibilidad de encontrar una
justificación última para la elección que la persona tiene que hacer. Jean Paul Sartre, que utilizó el término existencialismo para definir
y calificar su propia filosofía, se convirtió en el gran difusor del movimiento a escala internacional una vez finalizada la II Guerra
Mundial.
El pensamiento de Sartre, impregnado de ateísmo y pesimismo de una forma explícita, argumentaba que los seres humanos
necesitan una base racional para sus vidas pero son incapaces de conseguirla y, por ello, su existencia es “pasión inútil”. No obstante,
insistió en que el existencialismo es una forma de humanismo y resaltó la libertad, la elección y la responsabilidad humana. Con gran
refinamiento literario, intentó reconciliar esos conceptos existencialistas con un análisis marxista de la sociedad y de la historia.
Los temas fundamentales del existencialismo
1. Definición de la existencia como modo de ser propio del hombre.
En clara deuda con el pensamiento de Kierkegaard, para los existencialistas lo que propiamente existe es el hombre, no las cosas, que
toman su ser en él o a través de él. El hombre no tiene una esencia que le determine a ser o a comportarse de una manera concreta,
sino que él mismo es su propio hacerse, su propio existir. Existir es sinónimo de hombre (el Dasein de Heidegger o el "para-sí" de
Sartre). Esto significa que el hombre es libertad y conciencia. Libertad porque el hombre es un modo de ser que nunca es dado de
antemano (el Dasein o ser-ahí es un poder-ser que tiene constantemente que ejercitarse) ni tampoco es puesto por algo o alguien.
Conciencia porque la existencia es lo que nunca es objeto, sino aquello a partir de lo cual me refiero a lo otro que no soy yo y con lo
que me relaciono, además de conmigo mismo (autoconciencia).
2. Individualismo y particularismo. Lo primario es lo singular y concreto, la existencia humana, pero no en su generalidad, sino en la
particularidad de "esta" existencia humana o "aquella otra". El yo no es el momento de una Razón absoluta o universal, como afirmaba
Hegel.
3. Las cosas no existen, "son". Es desde la existencia humana desde donde se establece el valor y sentido de todo lo real. El objeto
al que se dirige la conciencia no existe. Es un "ser-en-sí" (Sartre), caracterizado por la plenitud de coincidencia, la impenetrabilidad y
opacidad. Su ausencia de relación rehúye la temporalidad y entra en tensión con la conciencia, "ser-para-sí". Ésta desea ser, a la vez,
en-sí y para-sí, lo cual equivaldría a ser Dios, algo imposible de realizar (ateísmo).
4. Utilización de la fenomenología como método. Los existencialistas parten del análisis Edmund Husserl de la conciencia, a la que
conciben como pura intencionalidad. Toda conciencia es siempre un dirigirse hacia algo; es conciencia de, y por eso se proyecta hacia
fuera, hacia el objeto o "ser-en-sí". La conciencia es "un poder de ser lo que no se es y de no ser lo que se es", una intencionalidad que
introduce la nada dentro de ella: cuando conoce al objeto, se diferencia y separa de él (enajenación). Si se intenta conocer a sí misma
(autoconciencia) debe convertirse en lo que no es (objeto), creando la nada, siendo nada.
5. Existir es estar en el mundo. El ser del hombre es un ser-en-el-mundo. Pero "mundo" no es un lugar, ni designa la naturaleza. No
estamos "pasivamente" en el mundo, sino de manera activa y creadora, trascendiendo siempre hacia "lo otro" (el ser-en-sí) que no es
la conciencia, hacia el "ser-en-sí" (el hombre, la conciencia), sin poder abrazarlo. La existencia humana consiste en un continuo
"quehacer" que tiene que vérselas con las cosas que están a la mano y en el que la conciencia se realiza, el conjunto de relaciones de
las cosas entre sí y con el hombre.
6. Posibilidad y elección. El hombre es posibilidad abierta, libertad de hacerse esto y lo otro. Elección. Ahora bien, en la medida en
que el hombre está arrojado al mundo, ha de contar con aquello que le es "dado", las circunstancias que limitan sus posibilidades y su
libertad. La autenticidad consiste en no renunciar a la libertad bajo ninguna circunstancia: no dejarse caer entre las cosas como una
más de ellas (facticidad). El hombre no debe eludir su responsabilidad de obrar libremente, de lo contrario obrará de mala fe y llevará
una existencia inauténtica.
7. La angustia, la náusea, la vergüenza. Los sentimientos, al igual que la razón desvelan nuestra existencia y nos ponen en contacto
con ella, de manera más íntima y radical que la razón. La angustia nace de un futuro indefinido, de la falta de esencia, de un horizonte
cuajado de posibilidades al que el hombre debe enfrentarse sin ninguna garantía, asumiendo plenamente su libertad de "construirse
a sí mismo a cada instante".
PLANTEAMIENTOS FILOSÓFICOS DE ARTURO SCHOPENHAUER
Con Schopenhauer se inicia la crítica a la identidad entre el ser y el bien que domina la filosofía occidental de Platón a Hegel; su
filosofía ha de ser entendida desde el prisma de su ataque al cristianismo y como reacción contra el hegelianismo. La filosofía de
Schopenhauer parte de un primer pensamiento capital: el ser es voluntad, el ser quiere ser y quiere permanecer como querer; el ser
es esa voluntad que quiere ser siempre voluntad.
El modo de ser de la voluntad es un continuo devenir en el que se afirma el querer vivir. Todos los seres se disuelven en la voluntad
única y en su afirmación en el incontenible devenir; el determinismo absoluto es la expresión de esta disolución de los múltiples en la
serialidad del devenir: todo momento del devenir procede de un momento anterior y va hacia un momento siguiente; en la serie del
proceso todo tiene una razón suficiente de su ser. Si el determinismo domina el proceso del devenir de la voluntad, ésta en cuanto tal
es irracional: no hay razón de ser de la voluntad; el proceso del devenir es un proceso necesario pero la existencia de la voluntad es
contingente; la voluntad es razón de ser pero no hay razón de ser de la voluntad: «la no existencia del mundo es tan posible como su
existencia»
En el devenir la voluntad se mantiene en el ser; la producción de lo devenido en el devenir es, en realidad, reproducción de la voluntad
única: la incesante muerte de aquél la condición de la vida de ésta. La voluntad es ciega, no «ve» lo que hace, no es inteligencia de sí
sino obrar sin inteligencia; no tiene amor ni odio para lo que crea, es indiferente para con su obra, sólo quiere ser lo que ya era,
repetirse.
Esta voluntad se halla fragmentada en individualidades en las que se contrapone y lucha la voluntad única y en las que se va
objetivando, de forma gradualmente creciente, el querer vivir. La forma más alta de objetivación del querer vivir es el hombre; la
conciencia humana es la reflexión del querer vivir sobre sí mismo, la visión que de sí mismo tiene el querer vivir, la representación de
la voluntad.
En la conciencia humana se produce la manifestación de la voluntad en una representación que se escinde en un objeto en
permanente devenir y un sujeto estable y permanente inobjetable. Aun cuando en su origen la conciencia humana sea tan sólo la
visión de la voluntad y aunque el yo individual no sea más que una manifestación de ella es también para el hombre la ocasión de
sustraerse al horror; la conciencia, que de modo inmediato es visión del horror, se protege de ese mismo horror por medio de la
contemplación pura, en la que el sujeto se separa y diferencia de su yo individual y, convertido en conciencia de su propio ser se
abisma en el goce de la visión que tiene por objeto no ya el horror in-mitigado de la voluntad, sino la representación del mismo para
el conocimiento.
ACTIVIDAD #3
1. Realiza la lectura del documento #1 #2 y busca el significado de los términos desconocidos
2. Buscar la biografía de los filósofos que encuentres en la lectura
3. Realiza un crucigrama con mínimo 20 palabras sobre el documento
http://sophiatienelapalabra.blogspot.com.co/2013/01/material-de-trabajo-11.html
14.

1.

12.

11.

10

9.

18.

16. 20.

7.

4. 13. 17.

5. 15. 19.

8.

6.
TEMA N° 52

INTRODUCCIÓN A LA FILOSOFIA CONTEMPORANEA

PREGUNTAS

1. Movimiento Europeo en el área de las humanidades que emergió en Francia a mediados de la


década de 1950 y en el que el lenguaje desempeña una función clave.
2. Acontecimiento que rompe el antiguo régimen y a partir de ese momento podemos hablar de
época contemporánea.
3. Doctrina y teoría social económica y política, unida a dos ideologías y movimientos políticos: el
socialismo y el comunismo.
4. Filósofo, matemático y escritor británico, su énfasis en el análisis lógico repercutió de forma
notable en el curso de la filosofía del siglo xx más exactamente en la filosofía analítica.
5. Movimiento filosófico que estudia la relación que hay entre los hechos (fenómenos) y el ámbito
en que se hace presente esta realidad (conciencia).
6. Tendencia intelectual a reducir la realidad humana a su historiada o condición histórica.
7. Uno de los dos países donde principalmente surgió la filosofía analítica.
8. Estilo de filosofía que tiene como fundamento las ciencias naturales, la lógica matemática y el
análisis del lenguaje.
9. Continente en el que se desarrollan las llamadas filosofías de la vida.
10. Principal representante del historicismo.
11. Importante corriente filosófica de la primera mitad del siglo veinte también llamada empirismo
lógico.
12. País donde se desarrolla el historicismo.
13. Posición filosófica caracterizada por postular la existencia de una fuerza o impulso vital sin la
que la vida no podría ser explicada.
14. Movimiento filosófico que resalta el papel crucial de la existencia, de la libertad y la elección
individual.
15. Filósofo alemán, iniciador del movimiento filosófico denominado fenomenología.
16. Filósofo que influyo fuertemente en el existencialismo marxismo y vitalismo ya que estas son
una reacción de su pensamiento.
17. Doctrina filosófica desarrollada en el siglo XIX según la cual la prueba de la verdad de una
preposición en su utilidad práctica.
18. Filosofo francés que fue uno de los principales representantes del existencialismo, y autor de la
obra filosófica critica de la razón dialéctica.
19. Filosofo que algunos tratadistas suelen incluir como representante del vitalismo pero pese a ser
un precursor del irracionalismo, no es propiamente un vitalista
20. Arte de interpretar textos para fijar su verdadero sentido.

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