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FICHA TÉCNICA

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I N S T I T U TO D E I N V E S T I G A C I O N E S A G R O P E C U A R I A S – I N I A

sanidad vegetal
Entomología – Plagas en frutales:

Mosquita blanca del fresno

Fernando Rodríguez A. / INIA La Cruz
frodrigu@inia.cl

Nombre científico, orden y familia

Siphoninus phillyreae (Haliday) (Hemiptera: Aleyrodidae).

Hospedantes
Principalmente ornamentales, como fresnos y granados
de flor y frutales, ciruelo, manzano, olivo y peral.

Distribución e importancia económica

En Chile se encuentra desde la región de Arica y Parinacota
hasta la región del Biobío. A partir de 2007, altas pobla-
ciones del insecto se transformaron en plaga primaria
del olivo; compleja de controlar con agroquímicos y
que afectaba el vigor de las plantas, la calidad de la
fruta y la productividad de los huertos y la agroindustria
asociada.
Foto 1.  Adulto de mosquita blanca del fresno.

Descripción y ciclo
El adulto mide de 1,5 a 2 mm de largo, amarillo pálido y
alas blancas (Foto 1). La hembra ovipone en el envés de la
hoja alrededor de 100 huevos. Éstos son alargados, elíp-
ticos, con un corto pedicelo y color blanquecino. La ninfa
se localiza cerca del lugar donde eclosó, donde pasa por 4
estadios ninfales sucesivos. Sobre su eje dorsal, las ninfas
tienen una banda negra y espinas tubiformes repartidas
por las áreas dorsal y submarginales, que usualmente
están cubiertas por cera blanquecina pulverulenta o en
penachos y gotas de mielecilla (Foto 2). De la pupa, que
es el estado usado para identificar las mosquitas blancas,
emerge el adulto a través de una abertura en forma de T.
Dependiendo de las condiciones climáticas, puede tener
más de 4 generaciones anuales.
Daño
Los adultos y las ninfas tienen un aparato
bucal chupador y se alimentan de savia
durante todo el año, con mayor intensidad
entre primavera y otoño. Este insecto puede
causar graves daños directos por la extracción
de savia y pérdida de vigor de la planta e
indirectos por la excreción de mielecilla que
genera el desarrollo de fumagina que cubre
el follaje y reduce la fotosíntesis (Foto 3).
Altas infestaciones pueden causar menor
producción, defoliación, muerte de ramas
y frutos más pequeños y/o manchados, de
menor valor comercial.
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sanidad vegetal

Foto 2.  Ninfas.

Foto 3.  Olivo con mosquita blanca del fresno.

Manejo de la plaga
Monitoreo:
La observación directa del envés de hojas (con lupa) ayuda a la
detección de huevos, ninfas y adultos de la plaga en el follaje,
así como también la presencia de enemigos naturales. El uso
de trampas amarillas pegajosas también contribuye a detectar
a los adultos en fase de dispersión.

Control biológico:
Existen varios enemigos naturales que se alimentan de huevos,
ninfas y adultos de mosquita blanca. El más efectivo y específico
para mantener controlada la plaga es la chinita Clitostethus
arcuatus (Fotos 4 y 5).

Control químico: Foto 4.  Larva de chinita C. arcuatus.

Se sugiere no aplicar si la población de mosquitas blancas es
baja y se observa la presencia de depredadores. Si es alta y
se decide utilizar agroquímicos, debe optarse por aquellos
registrados, selectivos y que cumplan con las recomenda-
ciones de la etiqueta. Usar con equipos calibrados para evitar
contaminación y aplicaciones de dosis y volúmenes excesivos.

Control cultural:
En replantes o nuevas plantaciones utilizar sólo plantas libres
de plaga.

La poda de hojas y aclareo de follaje disminuye la infestación

y facilita el cubrimiento con agroquímicos. Foto 5.  Adultos de chinita C. arcuatus.

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Más información: Fernando Rodríguez A., INIA La Cruz, frodrigu@inia.cl
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