1 Jesús, es condenado a muerte

"Pilatos sabía que se lo habían entregado por envidia y preguntó: ¿Qué hago con Jesús, llamado el Mesías"?
Contestaron. "Crucifícale". Pilato pidió agua y se lavó las manos en presencia de todo el pueblo. Todos
dijeron: "Su sangre caiga sobre nosotros y sobre nuestros hijos" (Mat. 27,22).

2 Jesús carga con la cruz

"Pilato entregó a Jesús para que lo crucificaran y lo sacaron, para crucificarlo. El, cargando con la cruz salió
al sitio llamado de la Calavera" (Jn. 19,16).

3 Jesús cae bajo el peso de la cruz.

'Dice el Profeta Isaías: "No hay en él aspecto ni belleza que atraiga a nuestras miradas, ni hermosura para
que podamos complacernos en él; despreciado, abandonado de los hombres, varón de dolores, familiar del
sufrimiento, despreciado, no hemos hecho caso de él" (Is. 53,2).

4 Jesús se encuentra con su Santísima Madre:

"Simeón dijo a María; sabe que éste está destinado a ser ocasión de caída y de restauración para muchos en
Israel, y como bandera de combate. Tanto que a' tí misma te traspasará el alma" (Luc. 2,34)

5 Jesús es ayudado por el Cireneo.

"Después de que se hubieron mofado de él, le quitaron el manto y le pusieron sus vestidos, y le condujeron,
desde allí, a ser crucificado. Al salir encontraron a un hombre de Cirene, llamado Simón, y le obligaron a que
llevara la cruz" (Mat. 27,31).

6 La Verónica enjuga el rostro de Jesús.

Dice el Profeta: "He presentado mi espalda a los que me golpeaban y mis mejillas a los que arrancaban mi
barba. No he ocultado mi faz a los ultrajes y salivazos" (Is. 50,6).

7 Jesús cae por segunda vez.

"El ha llevado nuestras enfermedades, el ha cargado con nuestros dolores y nosotros le consideramos como
castigado, herido por Dios y humillado. El era tratado como un impío por nuestros crímenes, aplastado por
nuestras iniquidades" (Is. 53,4).

8 Jesús consuela a las hijas de Jerusalén.

"Seguía a Jesús una gran turba de pueblo y de mujeres. Estas se compadecían y se lamentaban por El. Se
volvió a ellas, Jesús y les dijo: "Hijas de Jerusalán, no lloréis por mi. Antes bien, llorad por vosotras y por
vuestros hijos"... Porque, si en el tronco verde esto hacen, en el seco qué se hará?" (Le. 23,27).
9 Jesús cae por tercera vez.
"El castigo de nuestra salvación recayó sobre él y, por sus llagas, hemos sido curados. Maltratado, se humilla;
no abre su boca, como cordero llevado al matadero, como oveja muda ante los trasquiladores, no abre la
boca. Ha sido arrancado de la tierra de los vivos, ha sido herido de muerte por la iniquidad de su pueblo" (Is.
53,5).

10 Jesús es despojado de sus vestiduras.

"Entonces los soldados, luego que hubieron crucificado a Jesús, tomaron sus vestidos e hicieron cuatro
partes, una para cada soldado; y la túnica. Era la túnica sin costura, tejida de arriba a abajo, en una pieza, se
dijeron pues, entre sí; "No la rasguemos, sino hechemos suerte sobre ella a ver de quien será". Con lo que
se cumplió la Escritura que dice "Repartieron mis vestidos entre sí, y mi túnica se jugaron a los dados" (Jn.
19,23).

11 Jesús es clavado en la cruz.

"Y cuando llegaron al lugar, llamado Calvario, allí le crucificaron a él y a los malhechores, uno a su derecha y
otro a su izquierda. Y Jesús iba diciendo: Padre, perdónales, porque no saben lo que hacen" (Le. 23,22).

12 Jesús muere en la cruz

"Y Jesús, dando un fuerte gritó, expiró. En aquel momento, el velo del santuario se rasgó, de arriba abajo. El
Centurión que allí estaba de pie, frente a él, cuando vio la manera como había expirado dijo:
"Verdaderamente este hombre era Hijo de Dios" (Me. 15,37).

13 Jesús es bajado de la cruz

"Al atardecer de aquel día, José de Arimatea, audazmente fue a presentarse a Pilato y a pedirle el cuerpo de
Jesús. Pilato se maravilló de que hubiera ya muerto y, llamando a su presencia al Centurión, le preguntó si
había ya muerto. Y cerciorado por el Centurión, concedió el cadáver a José. Compró éste una sábana y bajó
de la cruz el cadáver" (Me. -15,42).

14 Jesús es puesto en el sepulcro

"Había en el sitio donde fue crucificado Jesús, un huerto, y en el huerto, un sepulcro nuevo, en el cual nadie
aun había sido colocado. Allí, pues, a causa de la Vigilia de los Judíos por estar cercano al sepulcro, colocaron
a Jesús" (Jn. 19,41).

15 La Resurrección de Jesús.
"Ahora bien, si se predica que Cristo ha resucitado de entre los muertos, cómo andan diciendo algunos entre
vosotros que no hay resurrección de muertos? Si no hay resurrección de muertos, tampoco Cristo resucitó.
Y si no resucitó Cristo, vana es nuestra predicación, vana es nuestra fe". (1 Cor. 15,12-14).