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RASTRA – ARADA
La rastra-arada es la labor que se realiza después del subsuelo o cincel con el fin
de disgregar el suelo, continuar con la incorporación de residuos y obtener una
distribución de terrones con un tamaño relativamente uniforme.
A un tamaño uniforme (15-20 cm) Se utiliza un implemento llamado rastra arada la
cual tiene 52 discos * 26” se realizan dos pases, uno en sentido del surco y otro
diagonal al primero.
El suelo debe estar en condición friable, es decir, que permita fácilmente su
desterronamiento.
La tasa variada es una tecnología que permite racionalizar el uso de insumos sin
afectar la productividad; por el contrario, equilibrando las cantidades de ingrediente
activo o nutriente, bajando costos y creando condiciones ambientalmente más
equilibradas, después de algunos ciclos de cultivo es posible ajustar mejor el
sistema e incrementar la productividad.
La tasa variada esta depende del estudio de suelo que hace, lo cual nos dice como
está conformado el suelo y la cantidad de elementos mayores o menores que el
necesita. Al contrario de la tasa constante que el producto se aplica a todo el terreno
por igual.
Para ejecutar una fertilización mecánica solida de calidad, es necesario tener en
cuenta la existencia del estado de la humedad del suelo para que así haya una
mayor eficiencia del fertilizante en el suelo. Además al mismo tiempo permita el
tránsito de la maquinaria en el campo. Una profundidad adecuada, de acuerdo con
el nivel de humedad presente, puede estar entre 5 y 10 centímetros, dependiendo
del tipo de suelo en la suerte.
En un abono fraccionado, la primera aplicación se debe hacer los 25 y 35 días
después del corte, en una soca. Y la segunda como mínimo 30 días después, de la
primera aplicación.
En la fertilización tradicional se utiliza una sola dosis para toda la suerte a diferencia
de la fertilización de AP donde utilizamos diferentes dosis en base a requerimiento
nutricional del suelo
SUBSUELO
La labor de subsuelo se debe realizar en forma oportuna con respecto a las labores
previas de encalle y fertilización liquida mecánica, (PROVIN-n), asegurando la
roturación y des compactación del suelo, todo siguiendo las orientaciones del
mayordomo. Para proceder con el subsolado se tienen en cuenta los siguientes
criterios:
.
en época seca, con cosecha en verde, el lote debe estar perfectamente
encallado, es decir, con cepas y calles libres de residuos, teniendo en cuenta
que, para cosecha mecánica quemada, se puede tomar la decisión de no
encallar, dependiendo de la cantidad de residuos presentes en la suerte.
Se debe comprobar el estado de humedad del suelo para asegurar la calidad
de la labor
Al tacto, las muestras de suelo se desmoronan: suelo friable
La roturación del suelo debe hacerse a la profundidad exigida, la cual varía entre
30-40cm para los suelos medianos (francos). Para suelos de textura fina (arcillosa)
la profundidad exigida va de 45-50cm. Para suelos balastrosos y pedregosos la
profundidad exigida es de 25-30cm.
LA SURCADA