Tu hijo se porta mal, esto es lo que debes hacer

Comúnmente, los niños pueden tener comportamientos que socialmente o en casa no son ni
deben ser aceptados, es allí cuando pueden decirte “tu hijo se porta mal” y desde luego, es normal
que te avergüence que esto ocurra. Para evitarlo, es imprescindible que tu como madre o padre
pongas limites y le enseñes hábitos que canalicen su conducta, de esta forma podrás ayudarle a
tener un buen comportamiento según su edad o etapa de crecimiento.

¿Cómo identificar que tu hijo se porta mal?

Por lo general el mal comportamiento se caracteriza por ser toda aquella conducta inadaptada,
con acciones o comentarios que no forman parte de la normalidad de un niño o que no van acorde
a su edad. Es importante que una vez que lo detectes, evalúes como madre o padre a qué puede
deberse, ya que siempre existe un motivo, los niños no actúan de determinada forma solo
porque sí.

Ya que antes de cualquier regaño o castigo, debes saber la razón a su conducta incorrecta, aquí te
contamos los motivos que la podrían desencadenar:

 Demanda de atención
 Dificultades de adaptación ante un cambio
 Niños poco afines a seguir las reglas
 Baja tolerancia a la frustración
 Trastornos como el Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad
 Falta de habilidades sociales
 Rendimiento en clase
 Capacidad intelectual limitada
 Ansiedad y trastorno del ánimo

Aunque también puede deberse al modo en que los padres asumen la crianza, es decir, si son muy
permisivos, muy represivos o si tienden a ser depresivos, algo que también puede influir en el
comportamiento del niño. Sea cual sea el caso, la recomendación por excelencia es acudir con un
experto, en este caso un psicólogo que enseñe las técnicas necesarias para reforzar las conductas
positivas y disminuir los comportamientos negativos.

Lo que debes hacer cuando tu hijo se porta mal

 Analiza el comportamiento de tu hijo o hija para que sepas en que aspectos deben
trabajar.
 Pon reglas en casa que todos cumplan en caso de que tengas varios hijos.
 Evita aquellas situaciones que puedan alterar al niño y sepamos que no las puede
controlar.
 No compares a tus hijos para que no sientan que compiten entre sí.
 Ignora toda conducta inadaptada y premia sus comportamientos positivos.
  Puedes crear un registro de estrellas o caritas felices y tristes, en donde el niño pueda ver
reflejado sus malos comportamientos y en cuales ha mejorado, esto le animará,
especialmente cuando es pequeño.
 Con los niños mayores conversa mucho, diles que esperas, lo que debe evitar, que está
permitido, que pueden negociar y qué no.
 Emplea todas las estrategias que puedas, las probabilidades de éxito son mayores.

En caso que existan dificultades en el proceso o no se obtengan los cambios esperados, consulta
con un psicólogo.