La pena de muerte consiste en condenar a muerte a una persona o grupo de personas por

parte del estado como castigo por cometer un delito establecido en la legislación y por
haber alterado el orden social. (Amnistía Internacional). De acuerdo a la teoría
retribucionista, la pena de muerte está justificada porque es justo que quien haya
asesinado a otra persona sea castigada con la propia muerte. La pena capital se aplica en
56 países alrededor del mundo, los países con más ejecuciones realizadas son: China,
Irán, Arabia Saudí, Vietnam e Irak; siendo China el mayor ejecutor mundial. Sin embargo,
este no es el único país de primer mundo en donde se realiza la pena de muerte, Estados
Unidos también la realiza. La cifra de personas ejecutadas en ambos países está
aumentando y a su vez la tasa de criminalidad disminuye.

La pena de muerte es una realidad en el mundo de nuestros días, ya que es un acto

favorable para las personas que quieran buscar justicia y que han sufrido algún daño
contra su vida e integridad. Otros ase “Otros aseguraron que con este mandamiento el
matar a un hombre quedaba prohibido de manera absoluta. Y afirman que son homicidas
los jueces que, de conformidad con las leyes, pronuncian sentencia de muerte. (…)
pueden lícitamente matar quienes lo hacen por mandato de Dios, porque entonces es Dios
el que lo hace”. Tomás de Aquino (). Estas teorías se basan en la libertad e igualdad
naturales de todos los hombres. Por lo tanto, cuando un hombre comete un delito, se ha
de retribuir al autor del delito con una pena equivalente al mal que ha ocasionado.” Un
individuo que mata a navajazos a cinco personas y luego hace picadillo a su mujer ¿qué
puedes hacer con él? ¿Reinsertarle? Sólo existen dos soluciones: o que se suicide, o bien
aplicarle la pena capital, que es una manera educada y elegante de invitarle a suicidarse.
Es, diríamos, una atención que tiene la sociedad con el criminal”. (Gustavo Bueno).

Aunque en la actualidad muchas personas quieran abolir la pena de muerte, esta ha

existido para favorecer a la población desde el inicio. Uno de los sistemas penales más
conocidos y antiguos es la Ley del Talión, la cual permitía la venganza en respuesta a una
ofensa o perjuicio recibido. «Todo malhechor al atacar al derecho social, se convierte por
sus fechorías en rebelde y traidor a la patria (...) Esto significa que la conservación del
estado es incompatible con la suya; es preciso que uno de los dos perezca», según
Rousseau (1762). Esto significa que cuando se ejecuta al culpable es más como enemigo
que como ciudadano, debido a que su pensamiento y sentencia son la prueba de que ha
roto el contrato social que tiene con el estado y por ende ya no es juzgado como miembro
de este.