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MODULO
ACTUALIZACION 2010_I
JHON FREDY BUSTOS RUIZ
PSICOLOGO
Presentación
Así mismo, se presenta un esquema de lo que debe ser la secuencia del proceso de
evaluación en sus aspectos más generales. Esto con el ánimo de que el estudiante
reconozca la evaluación psicológica como proceso y que identifique en él algunos
factores cruciales para su éxito.
Tiene que ser claro para el estudiante que al final de la unidad deberá comprender
que de la postura teórica que se asuma dependerá el tipo de intervención que se
puede hacer en evaluación. Recuérdese que si bien se habla de una propuesta de
integración esta debe ser metodológica, de cara a ayudar a los pacientes, pero en
ningún momento conceptual.
Capítulo 1: Conceptos Básicos en Evaluación Psicológica
En dicho laboratorio, cualquier persona podía obtener por poco dinero la medida de
su altura, peso, capacidad respiratoria, fuerza muscular, velocidad de golpeteo,
agudeza auditiva o visual. Fue el primer intento de acercar la evaluación psicológica
desarrollada en el laboratorio a la vida cotidiana de un gran número de personas.
Por otra parte, Galton pensó en aplicar la selección artificial al ser humano para
mejorar la raza, formalizándose así por primera vez la teoría de la eugenesia.
James McKeen Cattell (25 de mayo de 1860 - 20 de enero de 1944), fue uno de
los psicólogos más importantes de finales del siglo XIX y principios del XX,
representante de la llamada escuela americana en psicología. Psicólogo y pedagogo
norteamericano, nacido en Eaton y muerto en Lancaster. Estudió en varias
universidades norteamericanas y europeas. Fue nombrado, en 1887, profesor de
psicología de la Universidad de Pensilvania. Desempeñó la primera cátedra
estadounidense de psicología, creada para él por dicha Universidad al año siguiente.
Desde 1891 enseñó en la Universidad de Columbia, pero en 1917 fue exonerado por
supuestas manifestaciones antipatrióticas. Fue el primero que estableció en los
Estados Unidos el estudio en laboratorio de las diferencias individuales y los Tests
psicológicos. Hizo asimismo interesantes investigaciones sobre la asociación de
ideas, percepción, entendimiento, memoria, fatiga y medida del tiempo psicológico.
Dirigió Science (1894-1944) y otros periódicos.
Muchas de las ideas de Cattell son una evolución de lo planteado por Francis Galton,
suponiendo una continuación en el estudio de la psicología diferencial, centrándose
como él en el estudio de procesos simples y muy específicos.
Hijo de un médico y de una pintora, Alfred Binet, al final de sus estudios secundarios
en el Liceo Louis-le-Grand de París, inicia estudios de derecho, medicina y ciencias
naturales.
En 1884, Alfred Binet se casa con la hija del embriologista Balbiani e inicia sus
estudios de ciencias naturales en la Sorbona bajo la dirección de su suegro.
Théodule Ribot le anima para que prosiga sus estudios en el terreno de la psicología,
trabaja con Jean Martin Charcot en el Hospital de la Salpêtrière en el que la hipnosis
y la sugestión están siendo nuevos temas de experimentación.El nacimiento de sus
dos hijas, Madeleine (1885) y Alice (1888), le proporciona un tema de estudio.
En 1890 conoce a Henri Beaunis que había creado el laboratorio de psicofisiología
de la Sorbona en 1889.
En 1894, Alfred Binet funda junto a Henri Beaunis la revista "L'année psychologique".
Al año siguiente, llega a director del laboratorio de psicofisiología en sustitución de
Henri Beaunis.
En 1905, a solicitud del gobierno francés, Alfred Binet publica una escala métrica de
la inteligencia que había elaborado junto a Théodore Simon. El objetivo de esta
escala era medir el desarrollo de la inteligencia de los niños en función de su edad
(edad mental). En los años siguientes, propondrá mejoras. Este trabajo será el punto
de partida para muchos otros tests, en especial del CI.
Estas contribuciones hacen que sea considerado como uno de los pilares de la
psicología diferencial. Junto con Víctor Henri publicó un artículo en 1895 (La
psycologie individuelle) en el que presentaba esta naciente disciplina y proponían su
objeto de estudio.
Los test mentales debían cumplir ciertos requisitos según Binet: (a) que estuviesen
compuestos por tareas sencillas; (b) que no conllevase un tiempo excesivo su
aplicación; (c) que sean independientes del observador y (d) que los resultados
obtenidos pudiesen ser contrastados por otros evaluadores. Este autor ofrecerá un
concepto claro de lo que será el diagnóstico psicológico con la propuesta del primer
test de medida de la inteligencia y establecerá una importante distinción entre
exploración médica (física o fisiológica que llevan a cabo los médicos), exploración
pedagógica (relacionada con los aprendizajes y llevada a cabo por el profesor) y
exploración psicológica (fundamentalmente inteligencia y ejercida por el psicólogo).
A todas estas aportaciones hay que añadir otras como las de Thorndike y su
construcción de pruebas psicopedagógicas; el enfoque de la personalidad ofrecido
por S. Freud y la contribución de los psicólogos matemáticos tales como Pearson y
Spearman, quienes crearon una serie de técnicas estadísticas que son base para el
desarrollo de pruebas psicológicas. Entre los años 1910 y 1970, lo que podía
denominarse como etapa de consolidación, ha existido un gran interés por el
desarrollo de pruebas psicológicas dirigidas a evaluar distintos aspectos: sociales,
intelectuales, evolutivos, educativos, que están basadas en distintos modelos de
evaluación psicológica que se diferencian entre sí en su forma de proceder y en las
técnicas e instrumentos utilizados para recoger información.
De esta manera se concreta una perspectiva clara de los autores representativos del
desarrollo inicial de la evaluación psicológica. Además se ofrece información
importante de los principales referentes teóricos que acompañaron a dichos autores.
El tema de la evaluación psicológica tiene hoy día una gran importancia en diferentes
ámbitos, como se podrá ver en una lección posterior. Asimismo se puede decir que
son muchos los aspectos que de una u otra manera influyeron en el desarrollo
conceptual y metodológico de la evaluación psicológica, sin embargo, este segmento
se ocupa solo de aquellos que se consideran más ejemplificantes. Concretamente el
papel jugado por las políticas educativas de Europa y Norteamérica tendientes a la
universalización de la educación; las implicaciones de las demandas de personal
para atender las exigencias industriales y de la guerra y el impacto de la creación de
centros de estudio concebidos en función del desarrollo de los procesos mismos de
evaluación psicológica.
El rápido progreso económico y social en la Europa de finales del siglo XIX planteó la
necesidad de evaluar las capacidades y conocimientos de los individuos en
contextos educativos, laborales, clínicos, etc.
La segunda versión del test editada en 1908, incluía un número mayor de ítems junto
con la eliminación de algunos que se habían considerado podían reflejar diferencias
en función de la extracción social de los niños, además aparecían ya agrupados por
niveles de edad.
Binet prefirió el término "nivel mental" al de "edad mental" popularizado por las
sucesivas traducciones de la escala, ya que el primer término estaba exento de las
connotaciones evolutivas del segundo. Al poco tiempo de su presentación, el test de
Binet y Simon fue traducido a diferentes idiomas y aplicado en diversos países, lo
que prueba la favorable acogida social que recibió.
El interés por la obra de Binet se ha mantenido a lo largo del tiempo. Van der Linden
(1986) ha resaltado las contribuciones estrictamente metodológicas de la
aproximación de Binet a la medida de la inteligencia. Primero, frente a los
experimentos antropométricos y psicofísicos que planteaban una única tarea, Binet
decidió alargar la longitud del test por dos motivos: a) el conjunto de ítems debía ser
una representación adecuada de la gran variedad de tareas a las que se debe
enfrentar una persona en su vida diaria; y b) conocedor de las teorías de Spearman
entendió que cada ítem en sí mismo era una media imprecisa, por lo que era
necesario combinar observaciones de un buen número de ítems para obtener una
medida fiable. Segundo, la insistencia de Binet en la estandarización de la aplicación
del test, reflejada en la extrema precisión de las guías sobre el material, la
administración, la puntuación y la interpretación de las mediciones. Por último, la
práctica de "normativizar" el test para iniciar una interpretación relativa de la
ejecución de las personas.
En ese contexto hay que situar las contribuciones de A. S. Otis, por la introducción
del formato de elección múltiple y otros formatos de puntuación objetiva.
Por otra parte, luego de la guerra, las ciencias de la salud se vieron agobiadas por un
sinnúmero de patologías y psicopatologías que no eran frecuentes o, más aun, que
no eran conocidas. La sociedad estaba en frente de las consecuencias biológicas y
psicológicas de la guerra. En este escenario era imperioso el desarrollo de
instrumentos, procesos y procedimientos que permitieran la comprensión y
cuantificación de esos cuadros clínicos producto de la guerra.
Desde luego, es la pregunta que aun hoy se siguen haciendo los empresarios, y para
respondérsela invierten grandes sumas de dinero en complejos procesos de
selección de personal. Puede decirse que en el principio se acudía a la selección
para los cargos de mayor nivel dentro de la empresa, pero hoy, en las empresas más
competitivas, se acude a la selección para cualquier tipo de empleo. Se ha instalado
en la consciencia de los empresarios que el éxito de la organización depende en
gran medida del ajuste entre el funcionario y su puesto de trabajo.
Por otra parte el uso de test también se extendió al mundo laboral como prueba su
incorporación a las prácticas de selección de la administración americana. Cattell
fundó la Psychological Corporation para la producción industrial de tests en 1922. En
1947 se funda el Educational Testing Service (ETS) institución sin ánimo de lucro
que no sólo se ha encargado de la producción de tests estandarizados de
rendimiento y tests de aptitud académica, sino que desde su constitución, ha
contribuido a la formación y práctica profesional de influyentes psicómetras.
Un acontecimiento que se ha convertido en referente obligado para todos los
profesionales es la publicación, por las asociaciones profesionales más relevantes,
de las guías técnicas y éticas de la medición psicológica y educativa. Las
recomendaciones elaboradas por la APA son, sin duda, las que han tenido y tienen
una mayor influencia.
El primer término que servía para definir este conjunto de actividades fue el de
psicodiagnóstico (gracias a Rorschach y su test de las manchas de tinta) que, con el
paso de los años evolucionó hasta el de diagnóstico psicológico, empleado con el
objeto de establecer la clasificación de un sujeto estudiado. En fechas más recientes
se ha acuñado el término evaluación psicológica que, durante algún tiempo fue
equiparado con los procedimientos de recogida de información a través de la cual se
realiza dicha evaluación (especialmente el empleo de tests), aunque, en la
actualidad, diversos autores señalan que el término evaluación implica, además, a
los procesos de valoración, integración e interpretación de la información recogida.
Asimismo, durante los últimos 30 años se ha ampliado el objeto de estudio de la
evaluación psicológica que ha pasado de estudiar las características psicológicas de
los individuos o grupos de individuos al estudio de los contextos en los que se
desenvuelven los sujetos y el posible diseño de una intervención específica.
Todo esto conduce a diferenciar dos términos que tienen idéntico significado y que
son los conceptos de evaluación y valoración. El primero (evaluación) se refiere al
examen de personas, mientras que el segundo (valoración) supone la realización de
las mismas actividades referidas a los objetos (puesto de trabajo, programas de
tratamiento). A lo largo de los temas, daremos importancia al primero de los dos
conceptos.
Hasta ahora se han hecho varias reflexiones muy importantes sobre el origen y
evolución de la evaluación psicológica. De esas reflexiones se puede deducir el uso
que se ha dado y se puede dar a la evaluación psicológica. Sin embargo, es
importante entrar a precisar los escenarios concretos donde el profesional de la
psicología puede hacer uso de la evaluación psicológica. Ello desde luego, en la
consideración del proceso de formación que se busca surtir con este documento.
AMBITOS DE APLICACIÓN DE LA
EVALUACIÓN PSICOLOGICA
Área de la psicología Objetivos
Piense en una familia en la que se convive con una persona de la tercera edad, 75
años de edad para mayor exactitud. Esta persona puede desplazarse normalmente,
su lenguaje parece fluido, aunque a veces se dificulta comprenderle. El problema es
que este anciano ha estado a punto de morir en varias ocasiones debido a aparentes
accidentes ocurridos; alguna vez dejó un pequeño recipiente en la estufa con el
fuego encendido lo que desembocó en un conato de incendio; en otra ocasión
confundió los recipientes y utilizó un acido para destapar cañerías en lugar del
detergente para ropa entre otros.
Desafortunadamente el tema de los despidos también está en el día a día del ámbito
organizacional y no se puede dejar de lado en esta discusión. Allí la evaluación
psicológica también ha sido utilizada. Un proceso de evaluación puede servir para
determinar si una persona sigue estando en condiciones o no de cumplir con las
responsabilidades y exigencias de su puesto de trabajo. Esto es necesario muy
especialmente en algunos trabajos de altísima responsabilidad o que representan
algún tipo de riesgo.
Piénsese por ejemplo en el caso de los militares, que a partir de una evaluación
psicológica pueden ser dados de baja del servicio o trasladados a oficios de oficina.
Y es que no se puede dejar a un policía agobiado de ansiedad y de conflictos
atendiendo situaciones críticas que pudieran requerir el uso de la fuerza. Algunas
tragedias que involucraron a policías se hubieran prevenido si se hubiese utilizado
una evaluación psicológica completa y oportuna.
Ámbito educativo
Imagine el caso de una escuela que realiza una labor de orientación con una serie de
escolares en la que se pretende conocer la capacidad intelectual, los intereses y
preferencias profesionales de los alumnos con el objetivo de recomendar una
alternativa educativa concreta. El psicólogo escolar obtiene una serie de medidas
psicológicas mediante el uso de “test” (pruebas) y entrevistas que dan lugar a la
recomendación de la profesión más idónea para cada uno de los alumnos. Este
psicólogo ha realizado una evaluación psicológica.
Ámbito deportivo
Por supuesto, no tiene nada que ver con que los deportistas presenten o no algún
tipo de trastorno a nivel psicológico. Se trata es de que a través del asesoramiento
psicológico se puede construir motivación, autocontrol y resistencia a la fatiga y el
dolor.
Ámbito jurídico
Finalmente hay que decir que hoy en día seguramente es posible encontrar otros
escenarios para aprovechar la evaluación psicológica. Quedan entonces invitados a
identificar esos otros escenarios.
Por lo demás, será objeto de este segmento hacer un recorrido rápido a través de los
dos pilares restantes: La entrevista y la observación de campo.
La entrevista
Entrevista cerrada: las preguntas ya están previstas, tienen un orden y una forma
de ser planteadas que no pueden ser modificadas por el entrevistador. Básicamente
se puede decir que se trata de un cuestionario que el entrevistador aplica y del cual
debe hacer la mayor cantidad de observaciones relativas al propósito de la misma. Si
bien es una modalidad de entrevista válida dentro de la evaluación psicológica no
resulta ser la más productiva.
Entrevista abierta: el entrevistador tiene amplia libertad para las preguntas o para
las intervenciones permitiendo toda la flexibilidad necesaria para cada caso
particular. Hay una flexibilidad que permite que el entrevistado configure el campo de
la entrevista según su estructura psicológica particular, o dicho de otra manera, que
el campo de la entrevista se configure al máximo posible por las variables que
dependen de la personalidad del entrevistado. Considerada de esta manera, la
entrevista abierta posibilita una investigación más amplia y profunda de la
personalidad del entrevistado, mientras que la cerrada puede permitir una mejor
comparación sistemática de datos.
El pensar sobre lo que se está haciendo debe intervenir en todas las acciones
humanas, y cuando esto se realiza sistemáticamente en un campo de trabajo
definido, sometido a verificación lo que se ha pensado, se está realizando una
investigación.
Ansiedad en la entrevista
La ansiedad del entrevistador es uno de los factores más difíciles de manejar, porque
ella es el motor del interés en la investigación y del interés en penetrar lo
desconocido. Toda investigación requiere la presencia de ansiedad frente a lo
desconocido y el investigador tiene que poseer la capacidad para tolerarla y poder
instrumentarla, sin lo cual se cierra la posibilidad de una investigación eficaz; esto
último ocurre también cuando el investigador se ve abrumado por la ansiedad o
recurre a mecanismos defensivos frente a la misma (racionalización, formalismo,
etc.).
La interpretación
La observación
• Es planificada sistemáticamente.
• Es controlada previamente.
Fases de la Observación
Ventajas
Limitaciones
Sistematización de la Información
3. Definición de la demanda
4. Definición técnica
6. Recolección de información
7. Análisis de información
8. Elaboración de informes
9. Comunicación de resultados
Este conjunto de pasos pueden agruparse en tres grandes momentos, como se
muestra en el mapa conceptual que pueden ver a continuación.
PROCESO DE
EVALUACIÓN
Definición de Recolección de
la demanda información
Análisis de
información
Lo primero que el profesional debe hacer es documentar el caso. Eso significa que
debe abrir un expediente o historia clínica a la persona que solicita el servicio o que
es remitida para tal efecto. Recuerde que algunas personas acuden a la evaluación
por iniciativa propia y otras por algún tipo de exigencia; bien sea por requisito de una
organización o por efecto del sistema judicial.
Esa documentación del caso incluye los datos personales y familiares del sujeto,
datos de contacto y la referencia de cómo acude el sujeto al proceso: si lo hace por
iniciativa o por obligación.
Hay que decir que los dos primeros pasos, y el que sigue, pueden realizarse en un
mismo momento. Por decir algo, en el primer encuentro o primera sesión.
3. Definición de la demanda.
Lo anterior tiene que ver con que no siempre la persona que es sujeto de la
evaluación es quien la solicita. En el caso de escolares, por lo regular, quienes
suelen solicitar evaluación son los padres de familia o la institución directamente. En
el ámbito organizacional quienes solicitan los procesos de evaluación son los
gerentes, jefes de personal o la dirección de talento humano. En otros casos las
instancias judiciales son quienes solicitan los servicios de evaluación.
Identificar la demanda tiene que ver con precisar quién solicitó la evaluación
psicológica y concretar qué es lo que se espera. Esto es necesario porque no todos
los pedidos de evaluación son iguales y no en todos esos pedidos se está dispuesto
a hacer la inversión que se requiere para adelantar una evaluación que abarque
todos los campos posibles.
Piénsese por ejemplo en una empresa que requiere operarios para largas jornadas;
la empresa solicitante no está interesada en cuantificar las funciones cognoscitivas
de los elegibles; es posible que le interese exclusivamente la condición física y la
presencia de un rasgo psicológico que garantice el ajuste a esas largas jornadas.
Otro ejemplo es el de un juez que envía a evaluación psicológica a una mujer porque
el esposo de ella está reclamando la patria potestad de los hijos en virtud de la
presunta incapacidad mental de la señora; caso en el cual al juez no le interesa
saber las aptitudes vocacionales de la mujer sino la capacidad o incapacidad para
hacerse cargo de unos menores.
4. Definición técnica
Cualquiera que sea la definición técnica que haga el profesional, el paso a seguir es
seleccionar o diseñar unos instrumentos. Los instrumentos son los que permiten
registrar información y mantener fidelidad sobre sus resultados.
Hoy día existen en el mercado formatos y modelos para casi cualquier propósito, y
los profesionales pueden recurrir a esas opciones. No obstante, también puede
decidir diseñar y desarrollar sus propios instrumentos. Esta es una opción interesante
como quiera que los instrumentos diseñados por el mismo profesional ofrecen una
mayor garantía de adecuación al proceso planteado.
6. Recolección de información
7. Análisis de información
8. Elaboración de informes
9. Comunicación de resultados.
En ese sentido la historia de la psicología muestra que han existido distintos modos
de enfrentar la tarea de la evaluación o el diagnóstico psicológico. En ocasiones han
surgido de concepciones teóricas y/o aplicadas de otras ramas del saber. Otras
veces, nuevas investigaciones, han generado cambios. Además, desde los
instrumentos de evaluación se han modificado los presupuestos teóricos o rechazado
la aplicabilidad de los mismos.
Cuando se hace referencia a un marco teórico se utiliza la palabra modelo (N. Bohr,
1913) o el término paradigma (Achenbach, 1988), como el modo de abordar el objeto
de estudio, los problemas planteados y la metodología utilizada.
4.- La evaluación psicológica persigue un conjunto de objetivos aplicados que son los
de descripción, diagnóstico, orientación y tratamiento. En primer lugar se trata de
describir con el mayor detalle las características del comportamiento y desempeño
del sujeto, a partir de la situación actual de sus procesos cognoscitivos. En segundo
lugar se trata de confrontar los hallazgos encontrados en la descripción con los
presupuestos teóricos que buscan clasificar los niveles y características del
comportamiento dentro de un diagnóstico determinado. En tercer lugar se trata de
identificar aquellas opciones de actuación de las que dispone un individuo para
atender a su situación diagnostica. Y desde luego, ofrecer los recursos de
intervención que sean pertinentes y que estén disponibles para enfrentar las
características de diagnóstico.
5.- Existen distintos modelos dentro de la evaluación que difieren en distintos
aspectos, lo que da lugar a que surjan distintas alternativas conceptuales y
metodológicas (formas de entender y realizar la evaluación).
Así pues, 6 han sido los modelos que han servido de base para la evaluación
psicológica. A juicio de Fernández – Ballesteros (1992): el modelo del atributo o
modelo psicométrico; el modelo dinámico; el modelo médico; el modelo
fenomenológico; el modelo conductual y el modelo cognitivo. Cada uno de ellos
difiere respecto a qué estudiar (las variables que tienen en cuenta), cómo estudiarlas
(métodos empleados), con qué instrumentos (técnicas desarrolladas) y dónde
evaluar (contextos de estudio). Con objeto de ofrecer una visión clarificadora de los
modelos más relevantes se sintetizarán algunas de las ideas básicas tales como: (1)
orígenes del modelo; (2) presupuestos teórico – conceptuales; (3) objetivos de
evaluación y unidades de análisis; (4) aspectos metodológicos y técnicas empleadas;
(5) ámbitos de aplicación.
Cuando se habla de los orígenes del modelo se alude a sus antecedentes teóricos y
filosóficos intentando ubicar en forma pertinente cada modelo.
Con estas precisiones se espera que pueda abordar y comprender cada uno de los
modelos de evaluación psicológica que se incluyen en este curso.
Ámbitos de Aplicación.
Los ámbitos de aplicación de este modelo han sido el escolar y el industrial con
funciones de selección de personal, consejo educacional, evaluación del rendimiento
o clima de trabajo. También es frecuente trabajar en el ámbito clínico con la finalidad
de establecer diagnósticos diferenciales y para controlar el proceso de tratamiento.
Por lo general, las empresas de selección de personal, las escuelas y los ámbitos
clínicos utilizan este modelo, tanto desde el punto de vista conceptual, como técnico
– metodológico, para funciones clasificatorias, de asesoramiento predictivo y de
investigación.
Las críticas que este modelo ha recibido se centran tanto en aspectos metodológicos
(estructura de la tarea, importancia para el sujeto, tendencia a dar respuestas
deseables,...) como teóricos (relación escasa entre predicción – tratamiento, escaso
valor explicativo del comportamiento). Se puso en entredicho la estabilidad de la
conducta humana a través del tiempo y de las situaciones, punto básico en el que se
sustenta la teoría de los rasgos. Dado que la existencia o no existencia de
constructos internos es de difícil comprobación empírica, ésta deberá efectuarse a
través de las manifestaciones de estos constructos. La manifestación más clara de la
existencia de estructuras internas es justamente la estabilidad de la conducta a
través del tiempo y situaciones a que da lugar.
Las técnicas utilizadas son la entrevista libre, la asociación libre, el análisis de los
sueños, de los “lapsus linguae”, de los olvidos; en resumen, todo aquello que facilite
la introducción en la vida mental inconsciente del sujeto. Freud inicialmente utilizó la
hipnosis, para sustituirla por el análisis de la transferencia, un proceso a través del
cual se actualizan en la relación analítica los deseos inconscientes que en el sujeto
suscita el evaluador o terapeuta, y que son una repetición de sus primeras relaciones
de objeto.
Las técnicas proyectivas son un desarrollo posterior a Freud. Existen varios tipos de
técnicas que han sido clasificadas en función de la actividad que conllevan:
Estructurales o Perceptivas (Rorschach); Temáticas en las que se elaboran historias
(T.A.T. o T.R.O.); Expresivas ya que se solicita al sujeto dibujar una o varias figuras
(DFH, http, Test de la Familia), y Asociativas debido a que el sujeto presenta sus
asociaciones frente a palabras, frases o cuentos (Frases incompletas).
Ámbitos de Aplicación.
Pese a este enfoque clínico, algunas de las técnicas proyectivas se han utilizado y se
utilizan en contextos de selección y orientación como complemento de los tests
psicométricos tradicionales. Este hecho ha sido criticado por algunos autores que
ven en ello una postura de eclecticismo.
Así, cada ser humano tiene una visión distinta y única de la realidad. La conducta de
un sujeto está en función de su campo fenoménico que se configura a partir de
experiencias, tanto internas (percepción de lo que ocurre dentro del cuerpo) como
externas (percepción de lo que ocurre en el mundo exterior) vivenciadas por el
organismo.
Ámbitos de Aplicación.
Estos diferentes enfoques comparten características comunes como son: (1) el uso
de técnicas objetivas; (2) la defensa de las variables estímulo – respuesta; (3)
aceptación de los principios del condicionamiento, como base de las leyes del
aprendizaje; y (4) el énfasis en los determinantes externos de la conducta.
Ámbitos de Aplicación.
Los orígenes del enfoque se vinculan a Hull, Tolman y Guthrie. Pese a que las
variables situacionales siguen siendo consideradas de gran importancia en la
determinación de la conducta, estos autores opinan que su influencia está
mediatizada por una serie de factores intermedios. Tolman (1951), planteó que la
variable “propósito” o “intención” era una variable interviniente de gran importancia.
Ámbitos de Aplicación.
Este enfoque supera el reduccionismo del conductismo – radical. Sin embargo, por
ello recibe las críticas de los conductistas radicales los cuales llaman la atención
sobre el sesgo que se introduce al aceptar la medida de variables no directamente
observables.
En último término, como señalan Forn y cols. (1990), las unidades de análisis
específicas se centran en las producciones verbales del sujeto. En efecto: (a) todas
sus terapias se basas en que los procesos cognitivos operacionalizados como
autolenguaje juegan un papel crítico en el mantenimiento de la conducta anormal; (b)
tales verbalizaciones incluyen interpretaciones distorsionadas o inadecuadas sobre
los acontecimientos externos actuales; (c) se puede concienciar al sujeto de la
asociación entre sus problemas y sus verbalizaciones no adecuadas y; (d) si se
aprende a examinar tales expresiones y a dudar de ellas, los pensamientos más
adecuados sustituirán a los primeros, lográndose una conducta más
adaptativa y racional.
Ámbitos de Aplicación.
Las críticas que se han formulado son tanto conceptuales como metodológicas. Una
crítica de tipo conceptual se basa en el concepto de cognición, donde no se llega a
especificar qué se entiende por eventos cognitivos, ni el proceso por el cual se
adquieren. Por otra parte, no puede concederse al pensamiento la autonomía que le
confieren los modelos conductuales – cognitivos. Según el autor es un error creer
que el cambio de la conducta humana ocurre mediante la intervención del
pensamiento. Cuando una persona está decidiendo su futura conducta está
condicionada por su biología, por su historia de condicionamientos previos, y por
múltiples estímulos internos y externos que actúan en un determinado momento.
Desde esta perspectiva se plantea como unidad de análisis las estrategias usadas
para resolver tareas cognitivas; analiza las correlaciones entre variables fisiológicas y
operaciones cognitivas dando soporte a las diferencias individuales; se estudia la
relación entre los diferentes estilos cognitivos (formas preferentes de organizar e
interpretar la realidad) y diferencias individuales^ Para evaluar estos nuevos
objetivos, se están desarrollando y depurando algunas técnicas, aunque no son
numerosas.
Las técnicas que se utilizan son variadas, se emplean autoinformes (por ejemplo,
pensamientos en voz alta), tests situacionales e instrumentos de evaluación
fisiológica, que permiten apreciar la reacción de los sujetos ante determinadas
tareas, baterías neuropsicológicas^ Además, se han elaborado técnicas de
evaluación de la inteligencia como:
Ámbitos de Aplicación.
Como se ha señalado, el modelo cognitivo engloba diversas teorías que han dado
lugar a métodos y técnicas de evaluación diversas. Con la finalidad de clarificar los
que mayor impacto han tenido, se expondrán dos grandes modelos. El enfoque del
procesamiento de la información y el de la evaluación neuropsicológica.
Ámbitos de aplicación.
Este enfoque está teniendo fuertes repercusiones en el área del aprendizaje escolar,
en la clínica y en la investigación.
1.- En evaluación clínica este enfoque intenta averiguar los procesos cognitivos que
subyacen a determinadas alteraciones de conducta. Así, se analizan las diferencias
en el procesamiento de la información tanto en sujetos diagnosticados de
disfunciones o alteraciones patológicas como en sujetos normales.
2.- En el contexto escolar se intenta conocer “qué estrategias y métodos utiliza el
alumno experto en relación al novato, indagar cada uno de los pasos que sigue el
sujeto desde que recibe el estímulo hasta que emite su respuesta así como,
averiguar qué facilita y dificulta la propagación de la información”.
4.- Las técnicas se utilizan con la finalidad de evaluar procesos, sin embargo, varios
investigadores señalan la dificultad de evaluar muchos de los procesos subyacentes
a una tara debido a que pueden ser inaccesibles al propio sujeto y por ello no puede
dar información de los mismos mediante los auto informes.
Hacia un modelo integrador.
Para tratar de superar este inconveniente se presenta un modelo que pretende ser
una síntesis de todos los anteriores. En él se indican los tres niveles de complejidad
que deben estar presentes en toda tarea evaluativa: el sistema biológico, el sistema
conductual y el sistema socio ambiental.
2.) Las condiciones personales del individuo: los seres humanos presentan un
conjunto de habilidades, destrezas o atributos psicológicos que son relativamente
estables, que se han establecido a lo largo de su vida (una persona es más o menos
inteligente, tiene más o menos autocontrol,....).
5.) Las condiciones biológicas pasadas o presentes que han podido o pueden
determinar la conducta anormal de un individuo. Mientras que las condiciones
pasadas son conocidas por medio de informes, técnicas o registros, las actuales lo
son mediante los exámenes realizados por un especialista.
A la luz de todo lo considerado, podemos definir a la Evaluación Psicológica como
aquella disciplina psicológica que se ocupa del estudio científico del comportamiento
de un individuo o grupo de individuos con el objetivo de describir, clasificar, predecir,
explicar y controlar dicho comportamiento.
UNIDAD 2
Presentación
Se espera que con este acercamiento los estudiantes incorporen una idea mediana
sobre las posibilidades de aprovechamiento que en el ámbito profesional tiene la
evaluación psicológica. Es el espacio para que los estudiantes comprendan la
aplicabilidad de la teoría en el terreno del psicodiagnóstico.
Capitulo 4: La evaluación Psicopedagógica
“El proceso de recogida y análisis de información sobre los distintos elementos que
intervienen en el proceso de enseñanza y aprendizaje, para identificar las
necesidades educativas de determinados alumnos que presentan dificultades en su
desarrollo personal o desajustes respecto al currículo escolar y, para establecer las
decisiones respecto al tipo de ayudas que precisan para progresar en el desarrollo
de las distintas capacidades”.
En primer lugar, es un proceso que se lleva a cabo con determinados alumnos que,
por diferentes causas, presentan dificultades para acceder a las experiencias de
aprendizaje que con carácter general se ofrecen a toda la población escolar. Por
tanto, ha de proporcionar información para conocer las necesidades de los alumnos
así como su contexto escolar y familiar.
En segundo lugar, es un proceso que se lleva a cabo en determinadas situaciones y
momentos concretos que, puede tomar formas distintas, según sea la información
obtenida del alumno y de sus contextos de actuación. Las situaciones más
frecuentes son:
a) Cuáles son las necesidades educativas del alumno y qué condiciones del propio
alumno y del contexto pueden facilitar o dificultar su proceso de enseñanza –
aprendizaje.
b) Qué actuaciones hay que poner en marcha para responder a sus necesidades
(situación escolar, propuesta curricular y tipos de ayudas).
c) La interacción del alumno con el profesor y los compañeros. Supone evaluar las
ayudas que el profesor presta a los alumnos y la relación personal y afectiva que se
establece entre el profesor y el grupo, relación para el importante equilibrio
emocional y la formación del autoconcepto de los alumnos.
d) Los contextos de desarrollo: la familia y el centro escolar. Del último, interesa tanto
la dimensión institucional del centro como el aula, como escenario en el que tienen
lugar las interacciones del alumno con los profesores, los compañeros y los
contenidos de aprendizaje.
f) Una última consideración señala que las conclusiones a las que eventualmente
puede llegarse deberían plantearse como una hipótesis de trabajo que, conducirán a
la realización de algunas acciones permitiendo aceptarlas o rechazarlas. La
Evaluación Psicopedagógica tampoco implica establecer conclusiones suponiendo
su validez para un prolongado período de tiempo posterior. La Evaluación
Psicopedagógica es un proceso que ha de caracterizarse por su carácter dinámico.
2) Analizar los ejercicios / trabajos del alumno, anotando aspectos que se entiendan
relevantes.
3) Comentar con el alumno dichos trabajos, anotando las verbalizaciones que vaya
haciendo sobre las distintas actividades.
2) La metodología debe ser variada dado que debe servir para que el profesorado
vaya ajustando su ayuda a las necesidades del alumno que pueden variar según la
naturaleza de los contenidos a aprender y las características personales de los
alumnos. Existe relación entre la metodología y el tipo de contenidos; así los
contenidos referidos a procedimientos se alcanzan mediante su aplicación y por tanto
la metodología debiera ser eminentemente práctica. Las diferentes metodología
deben estar de acuerdo con los principios psicopedagógicos del aprendizaje; partir
de los conocimientos previos del alumnado; preparar la motivación del alumno para
los aprendizajes; funcionalidad; considerar las expectativas del alumnado; etc.
- El carácter de las preguntas que lleva a cabo el profesor para recoger información
sobre qué y cómo está aprendiendo el alumno.
- Si las diferentes actividades que se brindan a los alumnos permiten que cualquier
alumno pueda llevar a cabo, como mínimo, alguna de ellas.
- El tipo de capacidades que el sujeto debe poner en juego para resolver las tareas
que se presentan en la evaluación; no es lo mismo “recordar” algo que aplicar
distintas reglas de solución de problemas.
Las pautas de observación referidas pueden servir para la evaluación del aula en
educación infantil. Sin embargo, una de las diferencias entre esta etapa y las
posteriores reside en el grado de estructuración y formalización de las actividades de
enseñanza y aprendizaje a medida que los alumnos crecen, por lo que deberá
prestarse mayor atención a aspectos no tan relacionados con la planificación. En
consecuencia, parece útil señalar algunos aspectos propios de la evaluación de los
niños pequeños.
Algunos autores están de acuerdo en que la familia de hoy tiende a dejar de ser un
factor protector para convertirse en un factor de riesgo de altísimo impacto. Es que
hoy día en el seno del hogar muchos menores enfrentas las experiencias más
desafortunadas: desde el abuso sexual, pasando por el maltrato o el abandono y
llegando al mismo homicidio. Que decir con el tema de la reproducción de conductas
violentas o la imitación de patrones adictivos.
Desde el otro ángulo, no se puede perder de vista que la familia sigue siendo para
muchos un lugar privilegiado para vivir. De modo que la familia también debe ser
considerada, en la evaluación psicopedagógica, desde la perspectiva de lo que ella
le puede aportar a la comprensión de los problemas y dificultades y, por supuesto a
su resolución.
Muchos padres suelen tener la convicción de que un alumno tendrá una buena
adaptación al contexto escolar, se sentirá seguro en él y otorgará significado a las
actividades que realiza si la familia muestra confianza en la escuela, tiene curiosidad
y muestra interés por los avances que el niño consigue. Pero, en las ocasiones en
las que el niño presenta dificultades, la confianza en la escuela desaparece y, la
familia actúa de diversos modos que favorecen la confusión e inseguridad del alumno
(malas relaciones entre padres y maestros).
Es importante tener en cuenta que la relación que se mantendrá entre familias y
profesores se encuentra influida por las actitudes e imágenes que las primeras tienen
acerca de los maestros. Así, el modo en que un profesor explique a un padre la
intervención que se ha realizado con su hijo puede crear determinadas expectativas
sobre el proceso de evaluación e intervención psicológica. Para evitar unas
imágenes distorsionadas se hace indispensable que el psicólogo o psicopedagogo
explique de forma clara cuál es su papel dentro de la escuela, de qué modo se ha
llegado a la situación actual y establecer el tipo de relación que se mantendrá con los
padres a partir de ese momento.
En ese proceso el profesional debe estar atento a dos peligros importantes: a) que la
familia pueda alejarse del proceso y de los objetivos del mimo al sentirse
amenazada, acusada o responsabilizada de las situaciones problemáticas y, b) Que
la familia pretenda llevar las riendas del proceso de evaluación, por sentirse
conocedora del caso y de sus diversos elementos. Es necesario desarrollar la
habilidad para mantener un punto medio, donde la familia pueda aportar, pero sin
afectar la imparcialidad de la evaluación.
Ahora bien, una cosa es que la evaluación pueda ser una etapa de un proceso más
amplio, que incluya además intervención y seguimiento y otra que la evaluación se
convierta en un proceso largo y extenuante. Lo recomendable es que la evaluación
tenga unos términos tanto espaciales como temporales y que se procure cumplirlos
al máximo. Así mismo, cada vez que se avance a un proceso distinto se deben fija
nuevos términos.
Esto es cierto en la mayoría de los casos, como quiera que es el profesor quien está
en contacto permanente con el desempeño académico del estudiante y con sus
resultados. Pudiera decirse que el tema de la detección por parte del docente es casi
una parte de la labor docente, lo mismo que la remisión a los servicios de evaluación
e intervención psicológica. Aun más cierto hoy en día cuando cada vez los padres y
la familia en general le dedican menos tiempo a acompañar a los menores en sus
quehaceres académicos fuera del aula.
Por supuesto, aunque el déficit por lo general aparenta ser de índole académico, no
puede saberse cuál es el origen de ese déficit. En casos diversos casos cuya señal
principal son las bajas calificaciones, el origen de cada uno puede ser
sustancialmente opuesto a los demás. Algunos casos pueden estar relacionados con
deficiencias en la infraestructura misma de los escenarios escolares, otros casos
pueden estar asociados a una práctica docente que no facilita la adaptación y ajuste
del menor al proceso académico, otros pueden asociarse a procesos de aprendizaje
que están por encima de las posibilidades de desarrollo acordes a la edad del menor
o, incluso, casos asociados a deficiencias alimentarias relacionadas con el nivel
socioeconómico familiar.
El informe debe ser muy ejecutivo. Debe ser claro, concreto y utilizar lenguaje
técnico. Recuérdese que el informe técnico de evaluación es un documento de
comunicación entre profesionales, de modo que al leerlo cualquier par debe obtener
una visión general del caso y de sus aspectos relevantes.
Se ha dicho que el informe debe ser ejecutivo, lo que significa que no debe contener
toda la información recolectada. Por el contrario, las reflexiones, ideas y conclusiones
deben ser lo más puntuales posibles.
Ahora bien, el informe debe tener como mínimo los siguientes elementos:
1. Datos de identificación
El informe debe contener toda la información que permita dar una imagen clara de a
qué persona pertenece dicho informe de evaluación. Eso implica nombre completo,
edad, sexo, apariencia física en cuanto a talla y peso, estrato socioeconómico y
registro de alguna otra seña de identificación que se considere relevante.
2. Situación problemática.
Esta información se debe presentar según los términos referidos en la lección sobre
el proceso de evaluación.
3. Demanda.
Por supuesto, el informe debe dar cuenta del motivo por el cual fue solicitada la
evaluación. Al igual que en el ítem anterior, se debe registrar en los términos de la
lección sobre el proceso de evaluación.
4. Metodología
Tanto en el caso de las técnicas como de los instrumentos se debe informar con qué
propósito particular se utilizó. En el caso de los instrumentos se debe señalar la
fuente de esos instrumentos: si son estandarizados y se encuentran en el mercado o
si fueron diseñados para el caso específico. Si se trata de instrumentos diseñados
para el caso específico se debe señalar cómo tener acceso a ellos, es decir si
pueden ser reproducidos y utilizados en dónde ubicarlos.
5. Hipótesis o Conclusión
6. Recomendaciones
De otro lado, debe anotarse una recomendación para casos que se consideren de
alta complejidad. En virtud de que un informe puede dejar dudas, es recomendable
aunque no obligatorio relacionar algún tipo de anexo que sea útil a una mejor
comprensión del informe.
Comunicación de resultados
Debe tenerse claro que la comunicación de resultados es una cosa distinta al informe
técnico de evaluación. La comunicación de resultados es sencillamente la respuesta
a la demanda del caso. Si en el informe técnico dice que la demanda es que se
recomiende un candidato idóneo para ocupar un cargo administrativo, en la
comunicación de resultados simplemente se informa quien ha sido el elegido y por
qué razones. Si la demanda es cómo garantizar la seguridad de una persona de la
tercera edad con signos de demencia, en la información de resultados se deben
precisar los cuidados y atenciones que se le tendrían que brindar.
“Es muy común para los miembros de la tribu truquese, que habita en el pacífico sur,
navegar cientos de kilómetros en mar abierto. A pesar de que su destino pueda no
ser más que un pequeño trozo de tierra de menos de kilómetro y medio de extensión,
los truqueses son capaces de navegar sin yerros hacia él sin la ayuda de brújula,
cronómetro, sextante o cualquiera de las demás herramientas de navegación
indispensables en la actualidad. Pueden surcar el océano con precisión, incluso
cuando los vientos prevalecientes no les permiten realizar una aproximación directa a
la isla y se vean obligados a seguir un curso zigzagueante.
¿Por qué pueden navegar con tal efectividad los truqueses? Si se les pregunta no lo
podrán explicar. Pueden decirle que se valen de un proceso que toma en cuenta la
salida y la puesta de las estrellas, y la apariencia, el sonido y el golpeteo de las olas
sobre los costados del bote. Pero en cualquier momento específico de su ruta no son
capaces de identificar su posición o decir por qué hacen precisamente lo que están
haciendo. Tampoco pueden expresar la teoría de la navegación subyacente.
Algunos pueden decir que la incapacidad de los truqueses para explicar en términos
occidentales cómo funciona su técnica de navegación es un indicio de
comportamiento primitivo o incluso no inteligente. De hecho, si aplicamos a los
marinos truqueses un examen occidental estandarizado de teoría y conocimiento de
navegación o, en tal caso, una prueba tradicional de inteligencia, es probable que
tuviesen un desempeño muy deficiente. Sin embargo, en la práctica es muy difícil
afirmar que los truqueses no son inteligentes: a pesar de su incapacidad para
explicar cómo lo hacen, pueden navegar con éxito en mar abierto.
El modo de navegar de los truqueses señala la dificultad que implica apreciar lo que
se entiende por inteligencia. Para un occidental, viajar en línea recta sobre el camino
más directo y más rápido, utilizando un sextante y otras herramientas de navegación,
quizás representará el tipo de comportamiento más “inteligente”; un curso
zigzagueante, basado en la sensación de las olas, no le parecerá tan razonable. No
obstante, para un truquese, quien está habituado a su sistema de navegación, el
empleo de herramientas complicadas para navegar podría parecerle tan
excesivamente complejo e innecesario que podría pensar que los navegantes
occidentales no son muy inteligentes.
Es claro que el término inteligencia puede implicar muy diversos significados. Por
ejemplo si usted viviera en una remota aldea africana, su criterio para percibir la
inteligencia de las personas podría ser muy distinto del que utilizara una persona que
viviese en el centro de la ciudad de Miami para distinguir las diferencias individuales.
Para el africano, una inteligencia superior estaría representada por habilidades
excepcionales para cazar o para sobrevivir; para el habitante de Miami, quedaría
ejemplificada por saber lidiar con un sistema masivo de tránsito, por saber “andar en
la calle” o por evitar ser estafado.
Sin duda, se trata de una referencia muy interesante y que pone de manifiesto un
reto “intelectual” para los estudiantes: definir aquellos recursos clave para apropiar
un concepto particular.
Wechsler (1944) define la inteligencia como “la suma o capacidad global del individuo
para actuar de un modo provisto de finalidad, para pensar racionalmente y para tratar
de enfrentarse de un modo eficaz con su medio ambiente”
Sedway dice: “la inteligencia es ante todo la facultad que posee el hombre de
responder a las urgencias de su entorno no sometiéndose a ellas, sino dominándolas
con su capacidad de invención. La ciencia que –como decía Descartes- nos
convierte en amos y poseedores de la naturaleza, es una respuesta de la
inteligencia. Ejemplo de esto fue la respuesta del hombre Neanderthal, cuando
creaba instrumentos y armas de piedra” (Enciclopedia de Psicología y Pedagogía. P.
309)
De otro lado Quintero (1998) manifiesta: “la inteligencia es la facultad intelectual que
nos permite comprender ideas, procesos, sucesos, relaciones, y que además nos
induce a proceder de una manera productiva, obteniendo con todo ello la
comprensión y la producción de obras y acciones que satisfagan las necesidades del
hombre. Es la capacidad de construir o reconstruir creativamente el conocimiento y
aplicarlo para lograr el dominio y transformación del medio en que se desenvuelve”
(p. 48)
Ahora bien, ¿qué entiende usted por inteligencia? Esa es la pregunta que cada
estudiante debe responderse, a título personal.
Para la identificación del C.I se ha diseñado una formula muy sencilla, como se
muestra en la siguiente gráfica, donde EM es edad mental y EC es edad cronológica.
Como se deduce de la gráfica, para llegar a determinar el C.I de una persona, se
debe conocer previamente la edad mental y la edad cronológica. Así por ejemplo,
una persona de 18 años de edad cronológica y con una edad mental de 18 años
tendrá un C.I de 100, como se muestra en la gráfica.
Pues bien, la edad mental es “una medida introducida por Binet y que define el grado
de desarrollo de la inteligencia de una edad dada” (Merani, p. 53). Se trata de un
concepto que descansa sobre la premisa de que con la edad los sujetos van
mejorando su capacidad para desarrollar determinadas tareas y que el desempeño
en esas tareas ha de servir para determinar cuánta inteligencia tienen un sujeto.
Binet estableció un conjunto de tareas que los sujetos debían estar en condición de
desarrollar en forma exitosa de acuerdo a su edad cronológica. Por decir algo, las
tareas que debe poder desarrollar un niño de 8 años de edad o las que debía poder
desarrollar uno de 12 años.
El caso es que la edad mental puede ser o no igual a la edad cronológica. Es igual
en los casos en que el sujeto es capaz de desarrollar las tareas que se espera que
desarrolle. Si no lo hace su edad mental estará por debajo de su edad cronológica.
Pero la edad mental también puede ser superior a la edad cronológica, sí el sujeto es
capaz de desarrollar tareas más complejas a las que se espera que desarrolle, o que
se espera que desarrollen personas de mayor edad.
Para ello, se recurre, como siempre para este propósito, al modelo de distribución
normal conocido como “Campana de Ghaus”, el cual se ilustra en la siguiente gráfica.
Por otra parte, hay que decir que el cociente intelectual (C.I.) mide la inteligencia
general, que es la correlación común a estas aptitudes específicas ("factor g").
Consiste pues en la capacidad general de cada uno de pensar y resolver problemas
en un lapso limitado. A su vez, la medición de la inteligencia general implica explorar
tres áreas principales, como se muestra a continuación.
Las explicaciones que se han intentado para este fenómeno han incluido la mejor
nutrición, una tendencia hacia familias más pequeñas, la mejor educación, una
mayor complejidad en el ambiente y la heterosis (Mingroni, 2004). De todos modos,
los tests se renormalizan ocasionalmente para obtener valores medios de 100 en la
puntuación, como, por ejemplo, en WISC-R (1974), WISC-III (1991) y WISC-IV
(2003). Por lo tanto, es difícil comparar puntuaciones de CI cuya medición dista
varios años en el tiempo.
Lo primero que deben hacer los estudiantes, antes de iniciar esta lección es dirigirse
a su equipo de computación más cercano y auto aplicarse el test de Raven. Esto les
permitirá una doble ganancia: Por un lado conocer su C.I y por el otro tener una idea
muy clara de lo que es el test. En internet hay muchos sitios web que ofrecen
gratuitamente la aplicación de este test.
Se trata de un test no verbal, donde el sujeto describe piezas faltantes de una serie
de láminas pre-impresas. Se pretende que el sujeto utilice habilidades perceptuales,
de observación y razonamiento analógico para deducir el faltante en la matriz. Se le
pide al paciente que analice la serie que se le presenta y que siguiendo la secuencia
horizontal y vertical, escoja uno de los ocho trazos: el que encaje perfectamente en
ambos sentidos, tanto en el horizontal como en el vertical. Casi nunca se utiliza límite
de tiempo, pero dura aproximadamente 60 minutos. La imagen a continuación
permite comprender mejor el procedimiento.
Se evalúan los matrices, y se basa en que los individuos tendrán determinada
capacidad de organizar un “caos” al encontrarle una lógica a situaciones confusas y
complejas. El Raven se transforma en un instrumento para medir la capacidad
intelectual para comparar formas y razonar por analogías, independientemente de los
conocimientos adquiridos. De esta manera brinda información sobre la capacidad y
claridad de pensamiento presente del examinado para la actividad intelectual, en un
tiempo ilimitado.
Las Matrices Progresivas de Raven, fueron creadas por Raven (1938), y fue un test
pensado para evaluar a un grupo selectivo de personas (los oficiales de la armada
estadounidense). Basada en el antecedente de Raven y Penrose (1936). Esta
prueba obliga a poner en marcha su razonamiento analógico, la percepción y la
capacidad de abstracción.
Existen tres versiones diferentes de la prueba, la más usual es la Escala General (12
elementos en 5 series A, B, C, D, E), para sujetos de 12 a 65 años, donde la
complejidad aumenta cada vez más. También están las Matrices Progresivas en
Color (A, Ab, B) La 1ª serie (A) y la 3ª (B) son iguales que la escala general pero con
color, mientras que la otra es pensada para niños, para ser empleada en sujetos
entre 3 y 8 años o en deficiente mentales, se usa un tablero de formas, que es una
actividad muchos más manipulativa porque va probando si la pieza queda bien o no.
Agrega esta autora que la función gestáltica visomotora es una función fundamental
asociada con la capacidad del lenguaje y estrechamente ligada a varias funciones de
la inteligencia, como la percepción visual, la habilidad motora manual, la memoria,
los conceptos temporales y espaciales y la capacidad de organización y
representación.
Sara Paín nos da su visión y su experiencia en relación con el uso y evaluación del
Test de Bender. Para ella el aporte más significativo de L. Bender fue poner el acento
en el carácter evolutivo de las representaciones gráficas.
Según esta autora y desde una perspectiva psicogenética, la imagen espacial tiene
un origen fundamentalmente motor, ya que es resultado de la internalización de los
esquemas motores. Copiar un modelo será, entonces, asimilarlo al esquema que se
tiene y sería posible gracias a un esfuerzo de acomodación.
Coherente con este desarrollo, esta autora elabora una serie de pautas de ejecución
esperables para cada etapa evolutiva.
Por lo tanto, si un niño realiza una reproducción de las figuras del test muy por
debajo del desempeño esperable para su edad, lo consideraremos una dificultad
específica, un elemento de información que nos lleve a preguntarnos qué aspectos
de su subjetividad se hallan comprometidos, qué factores de su constitución se
hallan perturbados, qué obstáculos impiden el desempeño esperado.
Descripción
El test consta de 9 tarjetas, cada una de las cuales reproduce uno de los 9 patrones
originales que Wertheimer desarrolla al sentar las bases de la Escuela de la Gestalt.
La figura A fue elegida como introductoria teniendo en cuenta que es percibida como
figuras cerradas sobre un fondo.
Existe una tendencia a experimentar las gestalten como totalidades mayores que sus
partes, pero a la vez susceptibles de transformación. Esto nos lleva a suponer que
hay no sólo una dimensión espacial, sino también una dimensión temporal en juego
en la configuración de cada gestalt.
Uno de los supuestos sobre los que se apoya el Test de Bender es la existencia de
una tendencia no sólo a percibir las gestalten sino a completarlas y reorganizarlas de
acuerdo con principios determinados por el patrón sensoriomotor de acción. Se
considera que este patrón varía en los diferentes niveles de crecimiento y en los
estados patológicos (tanto orgánicos como funcionales).
Forma de administración
Se necesitan las 9 tarjetas del Test, un lápiz negro de punta suficientemente blanda
para que pueda marcar un punto por contacto, un borrador y una hoja de papel
blanco tamaño carta u oficio.
Las tarjetas se dan vuelta de una en una, cada vez que el niño dé señales de haber
concluido la reproducción de la anterior.
“Vas a copiar esta figura lo más parecido que puedas en esta hoja”.
Una vez realizada la figura (A) se le dice:
Si el niño preguntara en algún momento acerca de si debe emplazar todas las figuras
en la misma hoja, se le responderá que sí, pero si necesitara más espacio y
demandará más hojas, se le proveerán.
El propósito aquí es proveer elementos de análisis que nos ayuden a detectar ciertas
características significativas, que al ir repitiéndose o apareciendo de formas diversas
a lo largo de todo el proceso diagnóstico, nos irán conduciendo hacia la síntesis
diagnóstica esperada.
- Líneas:
- suaves
- mucha presión
- repasadas
- quebradas
- borradas
- cambiantes
- constantes
- Elementos:
- sustitución (líneas por puntos; puntos por círculos;
puntos por algún otro elemento)
- omisión de elementos (hileras, columnas, partes de
figuras)
- adición de elementos (puntos, ángulos, líneas)
- Rotación
- de toda la figura
- de parte de la figura
Luego de realizado el análisis del protocolo se podrá relacionar los datos observados
con aspectos aparecidos a lo largo del proceso diagnóstico y verificar si hay o no
elementos que se repiten o que contribuyen a una misma significación. De este modo
se podrá constatar si la evaluación del Bender ayuda a aumentar la sustentación de
las hipótesis que se venían elaborando a lo largo del proceso diagnóstico o, por otro
lado, las refuta
Diagnóstico diferencial
¿Qué es la demencia?
La demencia afecta sobre todo a las personas de edad avanzada. El 20% de todas
las personas con más de 80 años padece demencia. Debido al envejecimiento
creciente de la población, la demencia se está convirtiendo en un problema de gran
magnitud.
• Pérdida de memoria: al inicio, las personas con demencia olvidan sobre todo
acontecimientos que han ocurrido recientemente como, por ejemplo, lo que se
acaba de decir o lo que se disponían a hacer. Más tarde, olvidan también
acontecimientos que ocurrieron con anterioridad.
• Problemas de orientación: las personas con demencia se pierden con
facilidad, olvidan donde se encuentran.
• Dificultad para planificar y hacer previsiones: concertar una cita, por ejemplo,
les resulta muy difícil.
• Dificultad para realizar ciertas tareas: vestirse, por ejemplo, no volverá ya a
ser fácil.
• Trastornos del pensamiento: las personas con demencia tienen dificultades de
lenguaje o problemas para hacer cálculos.
• Cambio de los rasgos del carácter: se producen alteraciones del
comportamiento. Las personas con demencia están agitadas, a menudo no
descansan por la noche, en ocasiones se muestran suspicaces o agresivas.
Llegado cierto momento, las alteraciones son tan serias que se ve afectada la vida
normal. La vida laboral y otras actividades, así como los contactos diarios se hacen
cada vez más difíciles. A medida que la enfermedad avanza, el paciente se vuelve
más dependiente de los demás para los cuidados de la vida diaria. Finalmente,
muchos pacientes necesitan ser ingresados en residencias.
¿Es demencia?
Causas de la demencia
La demencia puede estar producida por diferentes causas. En todos los casos,
implica un daño de las células cerebrales. Este daño puede ser 'interno' o 'externo'.
• demencia frontotemporal
• demencia con cuerpos de Lewy difusos
• demencia asociada con Parkinson
También existen enfermedades de todo tipo en las que la demencia constituye uno
de sus síntomas. Por ejemplo, mal funcionamiento de la glándula tiroides,
deficiencias vitamínicas graves, trastornos genéticos poco frecuentes como la Corea
de Huntington, infecciones cerebrales como ocurre con el SIDA, aumento de líquido
cefalorraquídeo y neoplasias cerebrales como la diseminación del cáncer de pulmón
o de mama.
Enfermedad de Alzheimer
Demencia vascular
En el 10-15% de los casos, estamos tratando con una demencia vascular. En este
caso, las células nerviosas sufren una falta de oxígeno debido a un endurecimiento
de los vasos sanguíneos del cerebro. No siempre resulta fácil distinguir la demencia
vascular de la demencia tipo Alzheimer y, en ocasiones, se producen
simultáneamente ambos síndromes. La demencia vascular evoluciona de forma
menos gradual; se produce un empeoramiento repentino, en alternancia con alguna
mejoría y nuevamente un empeoramiento.
Los síntomas de la demencia -y más específicamente los del Alzheimer- pueden ser
tratados hoy en día con medicación. Esto garantizará que las sustancias que
intervienen en la comunicación intercelular se mantengan niveladas, ralentizando así
el proceso de deterioro. Neurólogos de todo el mundo están realizando
investigaciones científicas para intentar descubrir la causa de la enfermedad de
Alzheimer y los caminos eficaces para detener o prevenir la enfermedad.
Existen pruebas de valoración general del estado mental del paciente que permiten,
en una evaluación corta, definir si padece o no una demencia. El Miniexamen del
Estado Mental (Mini Mental State Examination o MMSE) es quizás el test más
utilizado en la evaluación inicial de un cuadro demencial. Es un buen test para
discriminar demencias moderadas, pero menos bueno para detectar las de
intensidad leve. Tiene mucha utilidad en estudios epidemiológicos. Este instrumento
evalúa varias áreas cognoscitivas: orientación en tiempo y en espacio, memoria de
fijación, atención y cálculo, memoria de evocación, lenguaje y praxia constructiva.
Evaluación de funciones cognoscitivas específicas
Atención
Memoria
Los pacientes con demencia tipo Alzheimer tienen mucha dificultad para pasar la
información del sistema de memoria a corto plazo al sistema de memoria a largo
plazo. Esta situación da lugar a una amnesia anterógrada (de eventos recientes) sin
amnesia retrógrada (de eventos del pasado), típica de la etapa inicial de la demencia
tipo Alzheimer. Además, los enfermos tienen una rápida tasa de olvido que afecta
tanto a la capacidad verbal como no verbal, así como una alta frecuencia de
intrusiones (palabras inventadas por el paciente cuando trata de evocar una lista de
términos que previamente se le ha dado en una tarea de aprendizaje verbal o en una
curva de memoria). Es un indicador precoz de demencia tipo Alzheimer y se produce
más frecuentemente en las demencias corticales que en las subcorticales.
Lenguaje
Aunque en menor grado que en las afasias, en las demencias pueden observarse
parafasias tanto literales como verbales. La sintaxis, la comprensión del discurso, la
repetición y la lectura-escritura solamente se ven afectadas en etapas medias y
avanzadas de la demencia. Los signos afásicos son inusuales en las demencias
subcorticales, pero es común el enlentecimiento y la reducción de la iniciativa verbal.
Algunas de las pruebas más utilizadas en la evaluación del lenguaje son el test de
fluidez verbal fonológica y semántica, el test de denominación de Boston, y el Token
Test, que evalúa la comprensión.
Una prueba neuropsicológica muy usada para evaluar capacidades viso espaciales y
constructivas es la figura compleja de Rey-Osterrieth. En esta prueba se le pide al
sujeto que copie una figura compleja y difícilmente verbalizable. En la batería del
CERAD se utilizan modelos más simples como el círculo y el cubo. Este tipo de
pruebas dan pistas para discriminar diferentes tipos de demencias. La conservación
de esta capacidad hasta estadios avanzados de la demencia sugiere demencia
frontotemporal, y el enlentecimiento en la tarea sin pérdida de la capacidad indica la
existencia de demencia subcortical. En las demencias corticales posteriores, las
praxias constructivas se alteran desde las primeras etapas.
Funciones ejecutivas
Conducta emocional
(MMSE) Adaptación
1. Mes ____
Anote un punto por cada respuesta correcta. Por Día semana ____
favor, dígame la fecha de hoy.
Total: _______
2. Árbol ____
Mesa ____
Anote un punto por cada objeto recordado en el
primer intento. Avión ____
3.
Respuesta
9 7 5 3 1 Paciente
Respuesta
Dobla ________
Entréguele el papel y anote un punto por cada
acción realizada correctamente. Le voy a dar un Coloca ________
papel. Tómelo con su mano derecha, dóblelo por la
mitad con ambas manos y colóquelo sobre sus Total: ________
piernas.
5. Árbol ____
Mesa ____
Anote un punto por cada objeto recordado. Hace un
momento le leí una serie de 3 palabras y Ud. repitió Avión ____
las que recordó. Por favor, dígame ahora cuáles
recuerda. Total: _______
Correcto: _______
6.
Son entre 20-30 minutos su realización. Con ello se dispone de una batería amplia
que permite estudiar desde demencia severa a formas leves, siendo sensible para la
detección de estas últimas. Su principal desventaja es el mayor tiempo que lleva
realizarla y que al ser una batería de test no se obtiene una puntuación como
resultado.
Finalmente se desarrollan las formas a y b del Trail Making. Este punto se explica
inmediatamente.
Es uno de los tests neuropsicológicos más utilizados. Existen dos formas: Forma A y
Forma B. Ambas pruebas implican la unión de 25 círculos que el sujeto tiene que
conectar.
Esta forma puede ser un buen indicador de disfunciones frontales generales del
lóbulo. En general, puede indicar la incapacidad del sujeto para ejecutar y modificar
un plan de acción. Así mismo, puede ser útil como indicador de lesiones frontales
focales, no obstante es importante señalar que la prueba, en sí misma, no es
ordinariamente un indicador de la disfunción frontal.
La parte B se asocia con los siguientes procesos: distinguir entre los números y las
letras, la integración de dos series independientes, la capacidad de aprender un
principio de organización y de aplicarlo sistemáticamente, la retención y la
integración serial, solucionar el problema verbal, y planear.
Cada una de las partes debe ser puntuada separadamente mediante la medición del
tiempo requerido para completar cada prueba. La ejecución es evaluada usando
datos normativos, teniendo en cuenta la correlación entre el TMT y factores tales
como la edad, educación y CI. Por lo general, el tiempo necesario para completar
ambas formas oscila entre los 5 y 10 minutos.
La figura que muestra un poco más adelante corresponde a la forma A del Trail
Making Test. En la forma A el paciente debe intentar unir con una línea todos los
números que aparecen en la hoja, empezando desde el más bajo y siguiendo en
orden ascendente (1, 2, 3, 4^). En la forma B sencillamente irían, además de los
números, un número similar de letras. En la forma B la idea es que el paciente una
en forma intercaladas y ascendente los números y las letras, siguiendo el orden: 1, a,
2, b, 3, c, 4, d y así sucesivamente.
Índice de Katz
E. Independiente para todas excepto bañarse, vestirse, uso del retrete y otra función
adicional.
F. Independiente para todas excepto bañarse, vestirse, uso del retrete, movilidad y
otra función adicional.
Independiente significa sin supervisión, dirección o ayuda personal activa, con las
excepciones que se indican más abajo. Se basan en el estado actual y no en la
capacidad de hacerlas. Se considera que un paciente que se niega a realizar una
función no hace esa función, aunque se le considere capaz.
Independiente: necesita ayuda para lavarse una sola parte (como la espalda o una
extremidad incapacitada) o se baña completamente sin ayuda.
Dependiente: necesita ayuda para lavarse más de una parte del cuerpo, para salir o
entrar en la bañera, o no se lava solo.
Vestirse:
Independiente: coge la ropa solo, se la pone, se pone adornos y abrigos y usa
cremalleras (se excluye el atarse los zapatos).
Usar el retrete:
Independiente: accede al retrete, entra y sale de él, se limpia los órganos excretores
y se arregla la ropa (puede usar o no soportes mecánicos).
Dependiente: usa orinal o cuña o precisa ayuda para acceder al retrete y utilizarlo.
Movilidad:
Dependiente: precisa de ayuda para utilizar la cama y/o la silla; no realiza uno o más
desplazamientos.
Continencia:
Alimentación:
Índice de Barthel.
2. Albert, M.L., Feldman, R.G., Willis, A.L. The 'subcortical dementia' of progressive
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