ENSAYO PARA LA ASIGNATURA DE SALUD PÚBLICA

“Todos tienen cultura, y es la cultura la que determina las particularidades” es esto cierto?, pues
actualmente se dice que una persona es culta cuando tiene formación escolar avanzada, se origina
de una familia de alto nivel socioeconómico o conoce las artes y la filosofía, pero ¿y si hablamos de
la cultura en el campo de la salud el concepto cambiaría?, la mayoría de las veces, se afirma que un
“buen paciente” es aquel que “posee cultura”, cultura suficiente para comprender y seguir las
orientaciones y cuidados transmitidos por el médico o enfermero, pero en realidad, la cultura debe
entenderse como un concepto instrumental para cualquier profesional, debe ser un término
acogido a la unanimidad, que no solamente reconozca los diferentes patrones comportamentales y
de pensamiento único de cada ser humano, sino que vea el ser humano desde las diferentes
nociones particulares de experiencias vividas que no provienen de la diversidad biológica, sino de
las diferencias sociales, estas que van trenzando perspectivas en diversos contextos pertenecientes
a distintas áreas, religiones, regiones, poblaciones y clases sociales.

Básicamente, en términos generales, la cultura tiene que ver con las dinámicas comportamentales,
en realidad todos tienen cultura, pero todos tienen su propio universo, la cultura es un término
extremadamente grande, diverso y complejo, pues el hecho de que cada individuo tenga propuestas
de significados que califican las actividades físicas y mentales, las cuales han sido construidas por
sus modelos de interacción, hace al ser humano un ser con una actividad sociocultural especial e
importante.

En realidad, la cultura también es compartida, pues todos los individuos que son participes de
actividades diferentes y que forman una sociedad simbólicamente intangible y comunicable, forman
un ente cultural. Por otro lado, es ideal ver a la cultura desde tres aspectos base “la cultura es
aprendida, compartida y estandarizada” aprendida porque indica que no se puede explicar las
diferencias del comportamiento humano de la biología de forma aislada, pues la biología ofrece un
paño de fondo para la formación y desarrollo humano, por otro lado, el hecho de que la cultura sea
compartida y estandarizada se hace referencia no solamente a lo que antes mencionábamos, sino
que la creación humana compartida es la integración de grupos sociales específicos y es
estandarizada a partir de las interacciones sociales concretas entre los individuos.

Adentrándonos más al campo de la salud y de la enfermedad, es importante mencionar que estos

dos entes están contenidos en la visión del mundo cultural y praxis social, no se debe evadir el hecho
de que la salud y la enfermedad son el talón de Aquiles del ser humano, pues todo ser humano es
vulnerable a estas condiciones, en general todas las sociedades buscan comprender tales conceptos
para poder crear técnicas en respuesta a las situaciones que afecten su estabilidad y bienestar en
todo el sentido de la palabra.

Por efectos de formalismo es pertinente plantear o más bien plasmar los conceptos generales de lo
que es salud y enfermedad, claro está, que esto lo hago por el hecho de contextualizar la idea
globalizada que hasta los últimos tiempos ha estado presente, pero que actualmente por la
diversidad de cada situación han cobrado ciertas fluctuaciones estas definiciones, entonces, en este
orden de ideas, la palabra salud se define según la OMS (Organización Mundial de la Salud), como
el estado de pleno bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de enfermedad. Por
tanto, no solamente cuenta nuestro buen estado físico o fisiológico, sino también nuestros aspectos
psicológicos y cómo nos influye nuestro entorno (socioeconómico, familiar, laboral, emocional,
medioambiental). Por otro lado, el termino enfermedad, se entiende como un trastorno del normal
funcionamiento de nuestro organismo, tanto a nivel físico como mental.

Por otro lado, sin dejar a un lado la cultura, la cual personalmente considero base para poder
entender a cada individuo y la heterogeneidad de su condición salud- enfermedad, pasamos al
hecho de que un sistema cultural resalta la dimensión simbólica que se tiene sobre la salud, la cual
incluye conocimientos, percepciones, y cogniciones utilizadas para definir, clasificar, percibir y
explicar la enfermedad, y que cada cultura posee conceptos sobre lo que es ser enfermo o saludable,
pero que básicamente todos convergen en la idea de que la salud puede ser vista no sólo como un
fenómeno somático y psicológico, sino también como social.

Es curioso ver que incluso las diferentes sociedades parten de sus propias clasificaciones de las
enfermedades, están organizados según los criterios de síntomas y gravedad; En pocas palabras los
conceptos de salud y enfermedad no deberían tomarse como universales, pues cada sociedad
clasifica, organiza y actúa según los criterios propios de su entorno y según las necesidades que
propiamente alberga cada grupo social.

En respuesta a esto la sociedad en general, busca alternativas que favorezcan la calidad de vida, y
que suplan las necesidades de todo lo que engloba la palabra bienestar, es por eso que aparecen
los sistemas de atención en salud, que parte del fin de mejorar las condiciones de vida de todo
individuo. Estos sistemas de salud no sólo buscan dar solución a categorías científicas sobre los
conceptos antes mencionados, sino también involucrar el ámbito político es decir el poder, pues
tanto el conocimiento científico de lo que es salud y enfermedad, como lo que constituye y se define
como práctica médica, y las que se reconocen como instituciones sanitarias están altamente
influenciados por el contexto social y político que les rodea.

Por ende nace el concepto de la salud pública, la cual recoge lo antes mencionado, y se encamina al
mejoramiento de la salud de la población, la noción de esta es inmensa, pues es una práctica que
surge bajo la realidad social, es una disciplina que tiene objetivos radicados en comprender y
explicar la salud de los grupos humanos; sin embargo la forma de materializar tales objetivos está
ligado a condiciones históricas, ideológicas, científicas y tecnológicas de cada situación o contexto.

La salud pública, es una práctica que acoge no solamente a los salubristas, sino también a la gestión
de los servicios sanitarios dirigidos a la comunidad, también alberga políticas públicas y la respuesta
social frente a la prevención de la enfermedad, la promoción y la recuperación de la salud; como
realidad social es un cúmulo de vivencias colectivas de orden objetivo que alberga características
del ambiente, condiciones de vida, procesos económicos de producción y la valoración de la salud.
Un ejemplo muy claro de la importancia de la misma, son los procesos como IPP (Intervención
preventiva primaria) que son base para la mejora de las condiciones de salud de la población y
también de lo que le aqueja a todo sistema de salud, la economía, además de ofrecer instrumentos
necesarios para mejorar el potencial e intereses que beneficien a todos en general.

Finalmente, considero un pilar esencial en la formación de todo aquel pupilo del área de la salud,
presentar conceptos sobre el contexto cultural, que acobija la salud- enfermedad, y relacionarlos
con el significado de salud pública, los cuales le permiten al estudiante ampliar la mirada articulada
de lo que alberga la sociedad en el campo de su respectivo desarrollo académico.