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A C U E R D O

En la ciudad de La Plata, a 11 de agosto de 2010,

habiéndose establecido, de conformidad con lo dispuesto en

el Acuerdo 2078, que deberá observarse el siguiente orden

de votación: doctores Soria, Hitters, Kogan, Negri,

Pettigiani, Domínguez, Sal Llargués, se reúnen los señores

jueces de la Suprema Corte de Justicia en acuerdo ordinario

para pronunciar sentencia definitiva en la causa B. 60.715,

"Nocetti, Julio César y otros contra Caja de Retiros,

Jubilaciones y Pensiones de la Policía de la Provincia de

Buenos Aires. Demanda contencioso administrativa".

A N T E C E D E N T E S

1. Los actores promueven demanda contencioso

administrativa contra la Caja de Retiros, Jubilaciones y

Pensiones de la Policía de la Provincia de Buenos Aires,

tendiente a que se reajusten sus haberes de retiro con la

consideración de las sumas establecidas en el decreto 1014/

1997 para el personal en actividad de las fuerzas de

seguridad.

Solicitan que se declare como remunerativa y

computable en sus prestaciones el adicional que fija el

citado decreto y se condene a la demandada, por aplicación

del principio de movilidad jubilatoria, a abonarles las


diferencias devengadas en el referido concepto con arreglo

a los cargos en base a los cuales se determinaron sus

haberes desde que entró en vigor el mismo, con más

intereses y costas.

2. Tras conferirse el traslado de ley, se

presenta el representante de la Fiscalía de Estado y

contesta la demanda, solicitando su rechazo en todos sus

términos.

3. Agregadas las actuaciones administrativas, los

cuadernos de prueba y alegatos de ambas partes, la causa

queda en estado de ser resuelta, correspondiendo plantear y

votar la siguiente

C U E S T I Ó N

¿Es fundada la demanda?

V O T A C I Ó N

A la cuestión planteada, el señor Juez doctor

Soria dijo:

I. Señalan los actores que son beneficiarios de

la Caja de Retiros, Jubilaciones y Pensiones de la Policía

de la Provincia de Buenos Aires.

Manifiestan que se presentaron ante la Caja

demandada, reclamando que se incluyera en sus haberes el

monto correspondiente al suplemento especial establecido en


dicho decreto.

Aducen que dicho suplemento, concedido en el año

1997, quedó definitivamente incorporado al sueldo del

personal en actividad.

Entienden que el beneficio previsto en el decreto

1014/1997 no se encuentra comprendido entre las

bonificaciones no remunerativas no bonificables a las que

alude el art. 34 de la Ley de Presupuesto 12.062.

Destacan que la determinación unilateral que

pretende darle a dicho suplemento el Poder Ejecutivo, no

puede ni debe ser determinante de la naturaleza del mismo,

quitándole el verdadero carácter retributivo, pues el

mismo, dicen, es realizado contrariando disposiciones

superiores, que obligan a su no aplicación, pudiendo

alcanzar incluso la tacha de inconstitucional.

Advierten que debe prescindirse de la

denominación dogmática que se le ha atribuido al suplemento

y en función de los caracteres del mismo (habitualidad,

periodicidad y generalidad), reconocer su verdadera

naturaleza remunerativa.

Estiman que la circunstancia de no realizarse

aportes previsionales no puede significar un obstáculo al

derecho reclamado, toda vez que en el marco del régimen


previsional aplicable al caso -dec. ley 9538/1980- resultan

ser insoslayables dos caracteres: la movilidad de las

prestaciones y la afectación a aportes previsionales de

toda retribución cualquiera sea la designación que se le

asigne.

Sostienen que la circunstancia de que la

bonificación se origine en el trabajo de los agentes

policiales, constituye un argumento contundente para

establecer el carácter remuneratorio de aquélla, pues para

su cobro no se exige la realización de mayores o distintas

tareas.

Indican respecto al art. 34 de la Ley de

Presupuesto 12.062, que al tratarse el suplemento de un

pago claramente remunerativo y como contraprestación al

trabajo profesional de policía, no estamos en presencia de

bonificaciones no remunerativas y no bonificables que

prescribe la norma, razón por la cual entienden que dicho

precepto resulta ajeno al suplemento de marras.

Finalmente afirman que la situación planteada

importa la ruptura de garantías constitucionales alterando

el orden jurídico, en tanto se contrarían disposiciones

legales específicas con normas de menor rango, en el caso

el decreto dictado que limita su aplicación al personal en


actividad violentando la legislación previsional aplicable

(dec. ley 9538/1980, arts. 14 bis y 17 C.N.; 11, 31, 39,

40, 57, C.P.).

Citan jurisprudencia y plantean el caso federal.

II. La Fiscalía de Estado en primer lugar

sostiene que un análisis de las normas que regulan el

adicional pretendido y de las contenidas en el régimen

previsional aplicable, permite concluir que el mismo no

reviste el carácter de remuneración a los fines

previsionales.

Aduce que el decreto 1014/1997 estableció para la

Policía Bonaerense y para el Servicio Penitenciario un

suplemento especial, por tiempo limitado, no remunerativo y

no bonificable.

Refiere que el carácter no remunerativo del

suplemento establecido ha sido consagrado de modo exclusivo

para el personal en actividad, pues tiende a compensar el

mayor esfuerzo del personal responsable en la ejecución de

funciones extraordinarias durante la vigencia del estado de

emergencia policial declarado por la ley 11.880, y tiende a

cubrir el desempeño de tareas que escapan de las

comprendidas en el marco normal de la relación de empleo

público.
Añade que el decreto en cuestión estableció que

dicho suplemento no estaría sujeto a los descuentos

previstos en las leyes previsionales y asistenciales, ni

serviría de base de cálculo para la determinación de

cualquier otro tipo de adicional y/o descuento.

Cita jurisprudencia de la Corte Suprema de

Justicia de la Nación y de este Tribunal que considera

aplicables al caso.

Consigna que el Poder Ejecutivo tiene facultades

para fijar las remuneraciones del personal de la

Administración Pública provincial, entre los que se

encuentran los agentes de la Policía y del Servicio

Penitenciario, facultad que conlleva la atribución de

establecer compensaciones sobre las que no se efectúen

aportes jubilatorios.

Entiende que aún cuando no se aplicara el art. 34

de la ley 12.062, igualmente el régimen previsional que

rige la materia (dec. ley 9538/1980) es lo suficientemente

claro al excluir del cómputo del haber previsional sumas

como las reclamadas, debido a que se encuentran eximidas

del pago de aportes.

Destaca que carece de sustento lo afirmado por el

actor, en el sentido de que el Poder Ejecutivo no tiene


competencia para calificar el suplemento establecido en el

decreto 1014/1997 ni para excluirlo de los aportes

jubilatorios.

III. Con motivo de la sanción de la ley 13.437

-Plan de Saneamiento de Deudas- que habilitó un mecanismo de

solución equitativa respecto de los reclamos generados por la

aplicación -entre otros- del decreto 1014/1997, por auto de

fecha 28 de abril de 2006, se confirió a las partes un término

de cinco días para que formularan las alegaciones que

conforme a derecho estimen pertinentes.

Tanto los actores como la demandada hicieron uso

de la prerrogativa procesal conferida. Ambas partes

coinciden sobre el alcance que cabe otorgarle a la referida

norma respecto de las postulaciones que se ventilan en el

sub examine. Si bien con diversa terminología, y respecto

del texto analizado, los litigantes son contestes sobre su

falta de incidencia en la decisión judicial que quepa

emitirse sea para el reconocimiento, sea para la negativa

del derecho de los actores a obtener un reajuste en sus

haberes previsionales por el principio de movilidad

previsional aplicado sobre las sumas reconocidas a los

agentes activos por los decretos 1014/1997 (incluido en la

norma citada) y 86/1997 (no incluido en el Plan de


Saneamiento).

No encuentro razón para apartarme de lo alegado

coincidentemente por las partes. Así la ley 13.437 no

resulta pauta normativa útil para zanjar la controversia

que aquí se ventila.

IV. Sin perjuicio de ello, algunos coactores

optaron por celebrar individualmente acuerdos

transaccionales de pago en el marco de las disposiciones de

la mentada ley 13.437 y su decreto reglamentario 2124/2006,

en virtud de lo cual esta Corte, por sentencias de fechas

9-IV-2008 (fs. 444/450) y 26-XI-2008 (fs. 466/470),

procedió a homologar judicialmente los mismos.

Consecuentemente, conforme los términos de las

sentencias homologatorias referenciadas, lo que surge de

los informes de la Caja demandada de fs. 496/497 y 506/507

y lo solicitado por la Fiscalía de Estado a fs. 508/509,

corresponde dejar establecido que esta sentencia sólo ha de

tener efectos en relación a los siguientes coactores: Pedro

Avelino Fernández Gamallo, Jorge Horacio Fernández, Daniel

Horacio Genoni, Susana Mabel Spezzi, Carlos Alberto Rosales

Canicoba, Antonia Renne, Julio Nicolás Pizzi, Fanny

Cozzarin, Anselmo Torres, Pablo Francisco Anglade, María

Ángeles Hernández, Tomás Luzzo, José María Leiva, Antonio


Fernández, Haydee Justa Piatis y Rosa Gladys Barbosa.

V. La cuestión a resolver, entonces, consiste en

determinar si el suplemento creado por el decreto 1014/

1997, debe ser computado en los haberes de los actores, por

aplicación del principio de movilidad previsional.

A efectos de decidir el caso en examen, debe

acudirse, en primer término, a la ley aplicable, pues, a

los fines previsionales, ella constituye la fuente directa

de solución (doct. causas B. 54.661, "Casco", sent. de 7-

XII-1999; B. 54.998, "Altube", sent. de 13-IX-2000).

En tal sentido, el dec. ley 9538/1980, marco

regulatorio de la Caja de Retiros, Jubilaciones y Pensiones

de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, luego de

establecer como pauta general que el importe de los

beneficios se fija en función de la última retribución o

asignación correspondiente al grado del que era titular el

afiliado al momento de cesar en el servicio, determina

cuáles rubros integran el concepto de retribución o

asignación. Así, la segunda parte del art. 27 dice que "[a]

los fines de esta ley ... la retribución consiste en la

remuneración mensual fijada por la ley salarial vigente,

considerando los suplementos, bonificaciones, adicionales,

retribuciones y servicios de extensión profesional que


tengan carácter de regulares, habituales y permanentes y

sobre los cuales se hagan obligatoriamente aportes

previsionales...".

Al incluir este precepto, el régimen del dec. ley

9538/1980 se aparta del concepto general de remuneración y

acuña uno especial. Ello, a su vez, torna inaplicable la

doctrina de esta Corte en materia de remuneración,

estructurada a partir de la interpretación de los preceptos

del dec. ley 9650/1980 (conf. causas B. 54.661 y B. 54.998

citadas), porque, en presencia de una regulación especial,

que aborda los rubros sujetos a aportes -y que

consecuentemente deben ser tenidos en cuenta para

determinar el haber- no corresponde, en principio, acudir a

las disposiciones contrarias insertas en el régimen general

(conf. I. 1501, "Claro", sent. de 8-VI-1993; B. 54.301,

"Grigioni", sent. de 5-III-2003; B. 54.996, "Ledesma de

Guadalupe", sent. de 1-III-2004).

VI. El decreto 1014/1997 y las prórrogas

ordenadas por los decretos 23/1998; 237/1999; 1192/2002;

80/2003 y 196/2004, atento el estado de emergencia de la

Policía Bonaerense, establecieron el pago de un suplemento

especial no remunerativo no bonificable por un lapso

limitado, para el plantel de oficiales superiores (de


Subcomisario a Comisario General) y con el declarado

objetivo de compensar el mayor esfuerzo que demandaría al

personal responsable en la ejecución de las acciones

durante la vigencia del referido estado de emergencia.

Dicho suplemento, tal como se estableció en el art. 2 del

mencionado decreto, no estaba sujeto a descuentos

previsionales ni asistenciales, ni podría utilizarse para

el cálculo de cualquier otro tipo de determinación o de

adicional.

a. Anticipo mi opinión contraria a la procedencia

de la pretensión incoada.

Ello por cuanto, al estar limitado temporalmente

el pago del adicional -aunque luego prorrogado- impide

otorgar carácter de asignación regular, habitual y

permanente que habilite a incluirlo en los haberes de

pasividad, sobre todo cuando se especificó su vigencia por

el lapso que dure la emergencia policial.

Desde otra perspectiva, la ley 12.062 (de

presupuesto para el año 1998) especificó que las

bonificaciones otorgadas al personal de la Policía

Bonaerense "no remunerativas, no bonificables", no serían

computadas a los fines de la determinación de los haberes

de retiro, jubilaciones y pensiones que otorgue la Caja de


Retiros, Jubilaciones y Pensiones de la Policía de la

Provincia de Buenos Aires. Asimismo, por el art. 36 de la

ley 12.232 (Ley de Presupuesto correspondiente al año 1999)

se dispuso incorporar a la Ley Complementaria Permanente de

Presupuesto (ley 10.189) una prescripción con idéntico

alcance (art. 28 de la ley 10.189, t.o. por dec. 4502/1998).

Así, todas las normas aplicables al sub examine

excluyen expresamente del haber del pasivo las sumas que en

concepto de adicionales no remunerativos se otorguen a los

activos. Aunque planteada la inconstitucionalidad de dichos

preceptos, no encuentro razón para declarar la pretensa

invalidez.

Es que como se ha encargado de reafirmar la Corte

nacional en la causa B. 4199.XXXVIII, "Brochetta, Rafael

Anselmo c/A.N.Se.S. s/reajustes varios", sent. de 8-XI-

2005, resulta de incumbencia del legislador reglamentar el

art. 14 bis de la Constitución nacional y establecer el

modo de hacer efectivo el derecho a la movilidad, teniendo

en cuenta la protección especial que ha otorgado la ley

fundamental al conjunto de los derechos sociales

(confrontar C.S.J.N., causa S.2758.XXXVIII., "Sánchez,

María del Carmen c/A.N.Se.S. s/Reajustes varios", sent. de

17-V-2005), sin que pueda invocarse un derecho adquirido a


que el haber siga siendo determinado para el futuro por las

mismas reglas vigentes al tiempo del cese en la actividad

(Fallos 308:885; 311:1213; 320:2825 y sus citas; más

recientemente: in re C.415.XXXVII., "Casella, Carolina

c/A.N.Se.S. s/reajustes por movilidad", sent. de 24-IV-2003).

Para más, la Corte Suprema de Justicia de la

Nación ha trazado un criterio rector para los

pronunciamientos judiciales que se adopten en la presente

materia, señalando que la movilidad resulta postulable sólo

de mediar la existencia de ciertos presupuestos básicos

-aportes efectivos, entre otros- que sustentan la

procedencia de todo beneficio jubilatorio dentro de los

regímenes vigentes y se vinculan, además, con el necesario

resguardo del equilibrio económico financiero del sistema

previsional (Fallos 310:2694), extremo, este último, de

especial trascendencia a la hora de examinar la

razonabilidad de las normas que regulan lo que debe

entenderse por "remuneración" a los efectos del cálculo de la

jubilación o pensión (doctr. C.S.J.N., Fallos 305:2083;

306:1165, entre otros).

En dicho marco, la pretensión incoada debe ser

rechazada a tenor de la ausencia de aportes previsionales

sobre los adicionales cuyo reflejo en el haber jubilatorio


del reclamante se postula.

b. Por último, los mismos fundamentos de derecho

y conclusiones expuestas en la causa B. 54.301 ya citada

resultan aplicables en la especie. Al existir norma

especial que regula cuáles componentes del salario del

activo se considerarán o no para la determinación del haber

previsional, será tal régimen especial el que prevalecerá

sobre el general reglado por el dec. ley 9650/1980.

VII. En nada conmueve la conclusión anterior la

prueba rendida en autos.

Los informes de la Caja demandada y del

Ministerio de Seguridad, no aportan ningún dato de interés

para la solución de la causa. El primero de ellos sólo

adjunta copia de los decretos 1014/1997, 1015/1997 y

86/1997 expresando que las bonificaciones en ellos

establecidos no son percibidas por el personal en pasividad

(fs. 257); el segundo además de adjuntar copias de los

decretos 1014/1997 y 1015/1997 acompaña la escala salarial

del personal policial en actividad (fs. 272), completa tal

informe explicando de qué manera se liquidan los sueldos al

personal que revista en disponibilidad preventiva (fs.

297), la forma en que se calculan las indemnizaciones por

accidentes de trabajo, por fallecimiento, y al personal


incluido en la ley 11.880 (fs. 299).

VIII. Finalmente, no puedo dejar de referirme al

decreto 1650/2004 (B.O., 24-IX-2004), mediante el cual el

Poder Ejecutivo ha resuelto otorgar, a partir del 1 de

julio de 2004, al personal en actividad de la Policía de la

Provincia y del Servicio Penitenciario Bonaerense, un

suplemento especial remunerativo y no bonificable, cuyos

importes son idénticos a los previstos en el decreto 1014/

1997, derogando el decreto 196/2004 que prorrogaba la

vigencia de este último durante el año 2004.

Así, al adecuar las remuneraciones del personal

en actividad mediante el aludido suplemento que

obligatoriamente se encuentra sujeto al pago de aportes, se

deriva, hacia el futuro, una mejora en los haberes de los

beneficiarios del sector seguridad comprendidos en el dec.

ley 9538/1980.

IX. Por los fundamentos expuestos, considero que

debe rechazarse la pretensión.

Voto por la negativa.

Costas por su orden (arts. 17, ley 2961; 78 inc.

3º, ley 12.008 -texto según ley 13.101-).

A la cuestión planteada, el señor Juez doctor

Hitters dijo:
I. Anticipo mi coincidencia con la solución

propuesta por el distinguido colega que votara en primer

término, doctor Soria, para propiciar el rechazo de la

pretensión, compartiendo a tal fin los argumentos por él

desarrollados, aunque con las precisiones que en lo que

sigue he de formular.

II. Como bien lo señala el magistrado que abriera

el acuerdo, a efectos de dilucidar la cuestión planteada,

es menester determinar, en primer término, la ley aplicable

al caso, porque a los fines previsionales ésta debe

constituir la fuente directa de solución (Goñi Moreno,

"Derecho de la Previsión Social", t. II, pp. 393 y 398;

doct. causas B. 54.661, "Casco", sent. del 7-XII-1999; B.

54.998, "Altuve", sent. del 13-IX-2001).

El régimen previsional aplicable al caso resulta

ser el dec. ley 9538/1980 cuyo art. 27 establece que: "...

a los fines de este decreto-ley se entenderá por

retribución o asignación la remuneración mensual fijada en

la ley salarial vigente, por todo concepto, considerando

los suplementos, bonificaciones, adicionales, retribuciones

y servicios de extensión profesional, que tengan carácter

regulares, habituales y permanentes y sobre los cuales se

hagan obligatoriamente aportes previsionales, excepto las


asignaciones familiares", y en sentido concordante el art.

30 preceptúa que: "El retiro o jubilación móviles

ordinarios serán iguales al ciento (100) por ciento de la

remuneración o asignación mensual, más las bonificaciones y

otros suplementos sujetos a descuentos previsionales y se

concederán al personal de los agrupamientos comando y

servicios, cuando reúnan treinta (30) años de servicios

computables en los términos de esta ley" (en ambos

supuestos, el resaltado me pertenece).

Como fácil resulta advertir, dos son las

condiciones que exige la normativa para delinear el

concepto de retribución:

a) el carácter regular, habitual y permanente de

la asignación, y

b) que sobre ésta se hagan obligatoriamente los

aportes previsionales.

Prescindiendo del análisis sobre el carácter

regular, habitual y permanente que pudiera predicarse

acerca del suplemento especial no remunerativo, no

bonificable, establecido con carácter transitorio por el

decreto del Poder Ejecutivo provincial 1014/1997 y normas

que prorrogaran su vigencia, que ha continuado liquidándose

en favor del personal activo hasta el presente -condiciones


que tuve por no acreditadas al fundar el rechazo de una

pretensión sustancialmente similar, al votar la causa B.

59.092, "Acosta, Elpidio Egidio y otros", sent. del 12-IX-

2001- lo cierto es que desde su origen se estableció que

dicho suplemento especial "... no estará sujeto a los

descuentos previstos en las leyes previsionales y

asistenciales, ni servirá de base de cálculo para la

determinación de otro tipo de adicional y/o descuento"

(art. 2 del aludido decreto), criterio asumido por el

propio legislador al establecer que las bonificaciones no

remunerativas, no bonificables, otorgadas o a otorgarse al

personal en actividad de la Policía Bonaerense y del

Servicio Penitenciario Bonaerense, no serán computadas a

los fines de la determinación de los haberes de retiros

jubilatorios o pensionarios correspondientes a los

beneficiarios de la Caja de Retiros, Jubilaciones y

Pensiones de la Policía y del Instituto de Previsión Social

(arts. 34, ley 12.062 [Presupuesto 1998; B.O.P., 30 y 31-

XII-1997]; 36 de la ley 12.232 [Presupuesto 1999; B.O.P., 4

al 8-I-1999] que incorpora tal precepto como art. 28 de la

Ley Complementaria Permanente de Presupuesto 10.189).

En tales condiciones, tal como lo sostuviera el

Tribunal al expedirse respecto del modelo previsto para los


legisladores por la ley 8320, habiendo las leyes especiales

establecido expresamente los rubros sujetos a aportes y

que, en consecuencia, deben ser tenidos en cuenta para

determinar el haber, no corresponde acudir a las

disposiciones del régimen general de previsión (doct.

causas I. 1501, "Claro", sent. del 8-VI-1993, "Acuerdos y

Sentencias", 1993-II-339; B. 54.976, "Poli", sent. del 29-

XI-1994, "Acuerdos y Sentencias", 1994-IV-365).

Por tal razón, atendiendo al concepto más

restringido de remuneración prevista en la normativa que

regula los beneficios previsionales para el personal

policial y del servicio penitenciario, resulta inaplicable

la doctrina de este Tribunal elaborada respecto del

concepto amplio que permite el régimen previsional del dec.

ley 9650/1980. Es que, como lo ha puesto de manifiesto la

Corte Suprema de Justicia de la Nación "... si bien los

jueces deben desentrañar la significación jurídica de las

leyes y ello los obliga a superar las 'rígidas pautas

gramaticales' que pudieran existir (Fallos 265:242;

291:181), siempre ha de recordarse que, asimismo, tienen la

obligación de abstenerse de toda inteligencia que equivalga

a prescindir de la norma aplicable, especialmente cuando,

en asuntos de previsión o de asistencia social, surge con


certidumbre la voluntad de excluir de los beneficios que no

están comprendidos en los términos de la ley" (Fallos

240:174; 319:3:2476).

III. Las consideraciones hasta aquí expuestas

dejan en falsete la aplicación a estos autos de la doctrina

sentada por el alto Tribunal federal en el precedente

"Machado" (sent. del 5-IX-2002), ni bien se repare en que

el régimen previsional de los agentes en pasividad del

Servicio Penitenciario federal o de la Policía federal no

preceptúa la exigencia de aportes sobre la asignación

percibida por los activos, a efectos de definir el concepto

de remuneración.

En efecto, el art. 96 de la ley 21.965 establece

que "Cualquiera sea la situación en que revistare el

personal en el momento de su pase a situación de retiro el

haber de retiro se calculará sobre el cien por ciento

(100%) de la suma de los conceptos de sueldo y suplementos

generales, o por otros conceptos que se establezcan

expresamente en el futuro para el personal en servicio

efectivo del mismo grado y antigüedad y según la escala de

porcentajes proporcionales al tiempo de servicio. En todos

los casos y para todos los efectos, el haber de retiro

tendrá el mismo tratamiento que el sueldo y suplementos


generales que perciba el personal en servicios

efectivo...".

Por su parte, la ley 20.416 (Servicio

Penitenciario federal) en su art. 95, respecto de las

retribuciones establece "Las leyes de presupuesto fijarán

con arreglo a los grados previstos en el artículo 40, las

retribuciones de los agentes penitenciarios. Para

establecer dicha retribución se tendrá en cuenta la

importancia del Servicio Penitenciario, su carácter de

fuerza de seguridad, las modalidades riesgosas de su

prestación y sus peculiares exigencias intelectuales y

físicas. La retribución estará integrada por el sueldo,

bonificaciones y todo suplemento o compensación que las

leyes y decretos determine, las que serán iguales a las

fijadas para las jerarquías equivalentes de la Policía

Federal, de acuerdo a lo establecido en el artículo 2º de

la ley 18.291...".

En definitiva, entiendo que la diferente

regulación en punto a las condiciones para delinear el

concepto de retribución de los agentes federales en

pasividad, torna inaplicable a estos autos la doctrina

sentada por el Tribunal en el aludido precedente "Machado".

IV. Finalmente, las razones hasta aquí expuestas


desplazan la consideración de la denunciada

confiscatoriedad resultante de no computar el adicional

reclamado (que quedaría demostrada cuando la diferencia

porcentual entre el haber efectivamente percibido y al que

se llegaría si se adicionara la aludida bonificación fuese

mayor al treinta y tres por ciento [33%]), por cuanto, a

esos efectos, debería desconocerse la validez supralegal

del concepto de retribución establecido por la ley, que -tal

como quedara expuesto líneas arriba- no sólo exige el carácter

regular, habitual y permanente de la asignación, sino también

que sobre ésta se hagan obligatoriamente los aportes

previsionales.

Me permito señalar, en tal sentido, que la

reciente ley 13.236 (B.O.P., 15-X-2004) que regula el

régimen de la Caja de Retiros, Jubilaciones y Pensiones de

las Policías de la Provincia de Buenos Aires, en sus arts.

26 y 28, así como la ley 13.237 (B.O.P., 15-X-2004), que

establece un nuevo sistema de jubilaciones, retiros y

pensiones para el personal del Servicio Penitenciario, en

sus arts. 5 y 8, en esencia reproducen -en lo que aquí

interesa- los arts. 27 y 30 del dec. ley 9538/1980, lo que

corrobora la indubitable postura del legislador de

instituir un sistema especial, cuyo acierto o conveniencia


-como ya señalara- constituye materia específica de

política legislativa que excede -por regla- los límites de

la jurisdicción del tribunal.

En tal sentido, destaco que la Corte Suprema de

Justicia de la Nación, recientemente al dictar sentencia en

la causa "Badaro", sent. del 8-VIII-2006, sostuvo que la

movilidad "... es una previsión con profundo contenido

social referente a la índole sustitutiva de la prestación

jubilatoria, para la cual es menester que su cuantía, que

puede ser establecida de modo diferente según las épocas,

mantenga una proporción razonable con los ingresos de los

trabajadores...", precisando que "... el precepto

constitucional de la movilidad se dirige primordialmente al

legislador, que es el que tiene la facultad de establecer

los criterios que estime adecuados a la realidad, mediante

una reglamentación que presenta indudable limitación, ya

que no puede alterarla (art. 28) sino conferirle la

extensión y comprensión previstas en el texto que la

enunció y que manda a asegurarla...".

V. Por último, no puede dejar de señalarse, como

hecho sobreviniente, que en fecha reciente, el Poder

Ejecutivo ha resuelto otorgar, a partir del 1 de julio de

2004, al personal en actividad de las Policías de la


Provincia y del Servicio Penitenciario Bonaerense, un

suplemento especial remunerativo y no bonificable, cuyos

importes son idénticos a los previstos en el decreto

1014/1997, derogando al propio tiempo el decreto 196/2004

que prorrogaba la vigencia de este último durante el año

2004 (decreto 1650, B.O.P., 24-IX-2004).

De este modo, de la decisión política de adecuar

las remuneraciones del personal en actividad mediante el

aludido suplemento -obligatoriamente sujeto al pago de

aportes- se deriva, hacia el futuro, una mejora en los

haberes de los beneficiarios del sistema previsional

vigente para el sector Seguridad.

Por las razones expuestas, voto por la negativa.

Costas por su orden (art. 17, C.P.C.A., ley 2961;

en función del art. 78.3, C.P.C.A., ley 12.008 -texto según

ley 13.101-).

A la cuestión planteada, la señora Jueza doctora

Kogan dijo:

I. He de disentir con la solución propuesta por

mis colegas preopinantes, sobre la base de las

consideraciones que he de efectuar a continuación.

1. Los accionantes reclaman la inclusión del

suplemento creado por el decreto 1014/1997 en sus haberes


de retiro. La demandada se opone argumentando que se trata

de un suplemento otorgado al personal en actividad, con

carácter especial, no remunerativo, no bonificable y no

permanente, respecto del cual no se efectúan aportes

jubilatorios.

El art. 1 del decreto en cuestión, otorgó, a

partir del 1 de abril de 1997 y hasta el 31 de diciembre de

1997, al personal en actividad de la Policía Bonaerense y

del Servicio Penitenciario, un suplemento no remunerativo y

no bonificable, con fundamento en el estado de emergencia

de la institución declarado por ley 11.880 y a fin de

compensar el mayor esfuerzo que demandaría al personal

responsable la ejecución de las acciones durante ese

período.

El suplemento instituido por el decreto 1014/1997

fue concedido con cierta limitación temporal -hasta

diciembre de 1997-. No obstante, el mismo fue prorrogado

sin interrupción por los decretos 23/1998, 237/1999 y

sucesivos.

El dec. ley 9538/1980 (régimen previsional del

Personal de la Policía de la Provincia) de aplicación

también al personal del Servicio Penitenciario Bonaerense

(conf. ley 8401) establece en su art. 27 que el importe de


los beneficios previsionales se fijará sobre la base de la

última retribución correspondiente al grado de que era

titular el afiliado a la fecha del cese en el servicio

activo. Y a continuación establece que se entiende por

retribución "... la remuneración mensual fijada en la ley

salarial vigente, por todo concepto, considerando los

suplementos, bonificaciones, adicionales, retribuciones y

servicios de extensión profesional, que tengan carácter

regulares, habituales y permanentes y sobre los cuales se

hagan obligatoriamente aportes previsionales, excepto las

asignaciones familiares".

Asimismo, el art. 29 del citado cuerpo legal

establece que los beneficios previsionales deben ser

actualizados de oficio de acuerdo a las modificaciones de

los sueldos del personal en actividad.

Las normas del dec. ley 9538/1980 citadas

establecen: i) por un lado, el cálculo de los haberes

previsionales, estableciendo su fijación sobre la base de

la remuneración detentada al cese, calificando asimismo el

concepto de retribución -en el que se encuentran incluidos

los suplementos, bonificaciones, adicionales, retribuciones

y servicios de extensión profesional, que tengan carácter

regulares habituales y permanentes y sobre los cuales se


hagan obligatoriamente aportes previsionales-. ii) Por otro

lado, la movilidad, al disponer la actualización de los

haberes pasivos de acuerdo a la suerte del salario activo

del personal del Servicio Penitenciario.

2. Si bien, el suplemento creado por el decreto

1014/1997 buscó sustento en el estado de emergencia y su

temporalidad, lo cierto es que el mismo se abonó en forma

regular, habitual y continua importando en definitiva un

aumento general para el personal policial y del Servicio

Penitenciario, pues se trató de una suma líquida que se

otorgó a todos los agentes en actividad y que se mantuvo

más allá de la vigencia del estado de emergencia.

Teniendo en cuenta el carácter general que posee

el suplemento, su permanencia hasta el 1 de agosto de 2004

(conf. dec. 196/2004), y su proporcionalidad según las

distintas jerarquías (conf. anexo II, dec. 1014/1997) no

cabe sino inferir que dichas sumas adquieren carácter

remuneratorio, debiéndose computar el suplemento creado por

el decreto 1014/1997 y prorrogado por los decretos 23/1998

y 237/1999 y sucesivos en la liquidación del haber de

retiro del actor.

El más alto Tribunal, en un fallo de aristas

similares al presente, determinó la "esencia remuneratoria"


de un adicional, dado "el carácter general con que fue

otorgado a todo el Personal del Servicio Penitenciario

Nacional, su permanencia, y proporcionalidad calculada en

función de las distintas jerarquías..." (C.S.J.N. in re

"Machado, Pedro José Manuel c/Ministerio de Justicia",

sent. del 5-IX-2002). Reprodujo allí el criterio sustentado

en Fallos 312:802, "Susperreguy", sent. del 6-VI-1989 y

318:403, "Cavallo", sent. del 28-III-1996, entre otros.

Tal carácter remunerativo se encuentra

corroborado por el dictado del decreto 1650/2004. Obsérvese

que el referido decreto deroga el 196/2004 -el que

precisamente prorrogara el decreto 1014/1997 (ver art. 2 y

considerandos, 2º parr.)- y al mismo tiempo resuelve

otorgar a partir del 1 de julio de 2004 al personal en

actividad de la Policía de la Provincia y del Servicio

Penitenciario Bonaerense un suplemento especial

remunerativo y no bonificable (art. 1). Surge claramente a

mi criterio que el decreto 1650/2004 ha venido a reconocer

el carácter remunerativo del suplemento en cuestión.

3. La decisión adoptada es la que respeta

acabadamente lo dispuesto por el art. 29 del dec. ley

9538/1980 -en tanto establece la actualización de los

beneficios previsionales de acuerdo a las modificaciones de


los sueldos del personal en actividad- y la que se condice

con la garantía de movilidad del art. 14 bis de la

Constitución nacional.

En un fallo reciente, la Corte Suprema de

Justicia de la Nación ratificó los principios básicos de

interpretación sentados acerca de la naturaleza sustitutiva

que tienen las prestaciones previsionales y rechazó toda

inteligencia restrictiva de la obligación que impone

otorgar "jubilaciones y pensiones móviles", según el art.

14 bis de la Constitución nacional, así como los fines

tuitivos que persiguen las leyes reglamentarias en esta

materia (C.S.J.N., "Sánchez María del Carmen c/A.N.Se.S.

s/reajustes varios", sent. del 17-V-2005).

Por su parte, esta Corte ha establecido que los

haberes previsionales deben guardar una adecuada

proporcionalidad con la remuneración del agente en

actividad. Se ha asentado que la movilidad de los haberes

previsionales recibe sustento en el principio de

proporcionalidad que debe existir entre la situación

patrimonial del jubilado y la que le correspondería de

continuar en el desempeño del mismo cargo, tenido en cuenta

para la determinación del haber (causas B. 53.568,

"Suárez", sent. del 17-II-1998; B. 57.719, "Cicchini",


sent. del 5-IV-2000, B. 61.210, "Cardillo", sent. del 1-

III-2004).

El derecho a una jubilación móvil adquirida

conforme a la categoría jerárquica alcanzada en actividad y

sobre cuya base se otorgó el beneficio, queda ligado a las

variaciones que experimente la remuneración del propio

cargo otrora desempeñado, pues de esta forma se mantiene

una situación equilibrada al conservar el beneficio

previsional la naturaleza sustitutiva (causas B. 48.886,

"Balbi", sent. del 11-XII-1986; B. 50.349, "Bracuto", sent.

del 7-VI-1988; B. 53.507, "Bianchi", sent. del 6-X-1998; B.

56.660, "Ratto", sent. del 22-III-2000, entre otras).

La necesidad de mantener la proporcionalidad

entre el haber pasivo y el salario activo, es un principio

básico de la seguridad social que radica en garantizar al

beneficiario el mantenimiento del nivel de vida alcanzado

durante la etapa laboral y no llevar los haberes a una

desproporción de naturaleza arbitraria y confiscatoria,

resguardando derechos de carácter alimentario,

especialmente amparados por los arts. 14 bis de la

Constitución nacional y 39.3 y 40 de la Constitución

provincial.

4. No obsta a lo anteriormente expuesto lo


dispuesto por el art. 27 del dec. ley 9538/1980 en cuanto

establece la exigencia de los aportes previsionales para

los suplementos que tengan carácter regulares, habituales y

permanentes, pues la falta de aportes sobre el suplemento

en cuestión no puede ser imputable al agente retirado, sino

que trasunta más bien una defectuosa técnica legislativa

del decreto de su creación al exceptuar de aportes a un

suplemento que detentaba referidas calidades.

Adviértase al respecto que la ley 13.237 (B.O.,

15-X-2004) crea un nuevo sistema de jubilaciones, retiros y

pensiones para el personal del Servicio Penitenciario

Bonaerense que establece la obligatoriedad de aportes

previsionales para los suplementos que reúnan las

condiciones de habitualidad y regularidad como lo es el del

decreto 1014/ 1997. Al definir el concepto de retribución

-art. 5to.- la califica como "la remuneración mensual

fijada en la ley salarial vigente, por todo concepto

considerando los suplementos, bonificaciones, adicionales,

retribuciones y servicios de extensión profesional que

tengan carácter regulares, habituales y permanentes y sobre

los cuales se harán obligatoriamente aportes

previsionales...". Se desprende claramente de ello, la

voluntad del legislador de considerar a los suplementos que


reúnan tales características -como lo es el creado por el

decreto 1014/1997- con carácter remunerativo.

5. Tampoco encuentro obstáculo alguno para

arribar a la decisión adoptada, en lo dispuesto en el art.

1 del decreto 1014/1997 -que calificó al suplemento como no

remunerativo- ni en los arts. 34 de la ley 12.062

(presupuesto para el año 1998), 36 de la ley 12.232

(presupuesto correspondiente al año 1999) y 28 de la ley

10.189, t.o. por dec. 4502/1998 (Ley Complementaria

Permanente de Presupuesto) en cuanto especificaron que las

bonificaciones otorgadas al personal de la Policía y del

Servicio Penitenciario Bonaerense "no remunerativas, no

bonificables" no pueden ser computadas para la

determinación de los haberes de retiro, jubilaciones y

pensiones que otorgue la Caja de Retiros, Jubilaciones y

Pensiones de la Policía de la Provincia de Buenos Aires.

El más alto Tribunal en la causa "Machado" citada

ut supra, se expidió precisamente sobre el carácter no

remunerativo de un suplemento o adicional, asignado por el

decreto que lo creó y ratificado por la Ley de Presupuesto.

Así se pronunció sobre el alcance del decreto 756/1992 y

del art. 44 de la ley 24.624 -Ley de Presupuesto de la

Administración nacional para el año 1996-. Dijo allí la


Corte que el adicional otorgado al personal del Servicio

Penitenciario en actividad poseía carácter remunerativo

pese a "... la calificación de no remunerativo que a tal

adicional le otorgó el decreto de su creación, y pese a la

ratificación que de ella efectuó el art. 44 de la ley

24.624, pues se trata de normas poco afortunadas, carentes

de contenido, y que evidencian un contrasentido en cuanto

pretenden negar lo que la realidad de las cosas marca, o

sea, que frente al carácter general del adicional su

condición remuneratoria no puede ser negada..." agregando

que tales normas niegan la doctrina de ese Tribunal que

"... siempre asignó naturaleza remuneratoria a las

asignaciones generales..." como la allí considerada (Fallos

316:1551).

II. Por último, con relación a la sanción de la

ley 13.437 (B.O., 19-I-2006) -Plan de Saneamiento de

Deudas- cabe resaltar que dicha norma no resulta pauta

normativa útil para zanjar la controversia judicial.

III. Finalmente corresponde señalar que algunos

coactores celebraron acuerdos transaccionales de pago en el

marco de la ley 13.437 y su decreto reglamentario 2124/

2006, lo que motivó que esta Suprema Corte por sentencias

del 9-IV-2008 (fs. 444/450) y 26-XI-2008 (fs. 466/470),


procediera a homologarlos judicialmente.

En virtud de ello, lo que surge de los informes

de la Caja demandada de fs. 496/497 y 506/507 y lo expuesto

por la Fiscalía de Estado a fs. 508/509, corresponde hacer

lugar a la pretensión sólo de los siguientes coactores

Pedro Avelino Fernández Gamallo, Jorge Horacio Fernández,

Daniel Horacio Genoni, Susana Mabel Spezzi, Carlos Alberto

Rosales Canicoba, Antonia Renne, Julio Nicolás Pizzi, Fanny

Cozzarin, Anselmo Torres, Pablo Francisco Anglade, María

Ángeles Hernández, Tomás Luzzo, José María Leiva, Antonio

Fernández, Haydee Justa Piatis y Rosa Gladys Barbosa,

incorporando el suplemento creado por el decreto 1014/1997

y prorrogado por los decretos 23/1998, 237/1999 y

sucesivos, en sus haberes de retiro y condenando a la

demandada al pago de las sumas devengadas desde la fecha de

vigencia del citado decreto hasta la de su derogación por

decreto 1650/2004.

La liquidación de las sumas a abonar deberá

realizase conforme lo establecido en los arts. 1 y 2 del

decreto 1014/1997.

Sobre tales importes se calcularán intereses de

acuerdo a la tasa que pague el Banco de la Provincia de

Buenos Aires en los depósitos a treinta días vigente en los


distintos períodos de aplicación hasta el pago efectivo

(arts. 7 y 10 de la ley 23.928, texto según ley 25.561

-coincidente en ambas redacciones en sus contenidos-; y

622, Código Civil y 5, ley 25.561).

La suma resultante de la liquidación que se

practique deberá ser abonada dentro de los sesenta días

(art. 163, Const. prov.).

Costas por su orden (arts. 17, ley 2961; 78 inc.

3, ley 12.008 -texto según ley 13.101-).

Voto por la afirmativa.

A la cuestión planteada, el señor Juez doctor

Negri dijo:

I. Tal como se reseña en los votos precedentes, los

demandantes reclaman la incorporación a la base de cálculo de

su haber previsional los importes abonados a los agentes en

actividad en virtud de las sumas establecidas en el decreto

1014/1997.

II. El citado decreto, dictado el 17 de mayo de

1997, estableció, con fundamento en el estado de emergencia

de la Policía Bonaerense, el pago de un suplemento al que

calificó como no remunerativo no bonificable, por un lapso

limitado (desde el 1-IV-1997 al 31-XII-1997) en favor de

los integrantes del plantel de oficiales superiores (de


Subcomisario a Comisario General de la Policía Bonaerense y

del Servicio Penitenciario), con la finalidad de compensar

el mayor esfuerzo que demandaría al personal responsable la

ejecución de las acciones durante la vigencia del referido

estado de emergencia.

El art. 2 dispuso que dicho suplemento no estaba

sujeto a descuentos previsionales ni asistenciales, ni

podría utilizarse para el cálculo de cualquier otro tipo de

determinación o de adicional.

El art. 34 de la ley 12.062 (de presupuesto para

el año 1998) especificó que las bonificaciones otorgadas al

personal de la Policía Bonaerense "no remunerativas, no

bonificables", no serían computadas a los fines de la

determinación de los haberes de retiro, jubilaciones y

pensiones que otorgue la Caja de Retiros, Jubilaciones y

Pensiones de la Policía de la Provincia de Buenos Aires.

A su vez, por el art. 36 de la ley 12.232 (Ley de

Presupuesto correspondiente al año 1999) se incorporó a la

Ley Complementaria Permanente de Presupuesto (ley 10.189)

una prescripción con idéntico alcance (art. 28 de la ley

10.189, t.o. por dec. 4502/1998).

Con fecha 28-VII-2004, el Poder Ejecutivo

provincial dictó el decreto 1650/2004 (pub. en B.O. del 24-


IX-2004) por cuyo art. 1 se otorgó, a partir del 1 de julio

de 2004, un suplemento especial remunerativo y no

bonificable al Personal de la Policía y Servicio

Penitenciario provincial anteriormente comprendidos en los

beneficios establecidos por el decreto 1014/1997.

III. Más allá de la calificación formal otorgada

por la norma de creación, de la prueba producida a

instancias de la parte actora, surge que a la fecha de

contestación del pedido de informe al Ministerio de

Seguridad -9-X-2000- el adicional reclamado era percibido

de manera ininterrumpida por el personal que revistaba en

las mismas categorías que los accionantes, sin que se

exigiese la realización de trabajos diversos o el

cumplimiento de requisitos especiales respecto de las que

prestaban con anterioridad al dictado de las normas en

cuestión (conf. fs. 297/ 299 de la causa judicial).

La acreditación de tal extremo me conduce a

apartarme del criterio que sostuviera al emitir opinión en

la causa B. 59.092, "Acosta", sentencia dictada con fecha

12-IX-2001.

En efecto, en la causa citada se dijo, en lo que

al caso interesa, que no correspondía la consideración del

suplemento requerido a los fines previsionales, con


fundamento en que al estar limitado su pago entre los meses

de abril y diciembre de 1997 -y aún cuando se hubiere

prorrogado su abono- ello obstaba a que se le asignara el

carácter de regular, habitual y permanente que habilitaría

a incluirlo en los haberes de pasividad, en tanto su

vigencia estuvo condicionada por el lapso en que durara la

emergencia.

Sin embargo, como ya he puntualizado, de lo

informado por la Administración y conforme los términos de

la sucesivas normas que prorrogaron la vigencia del

suplemento pretendido, se infiere que el mismo continuó

abonándose luego de cesado el período por el cual se

declaró la emergencia policial (conf. leyes 11.880 y

12.056) y que por tal rubro se pagó un monto uniforme a

todos los agentes que revistaban en igual categoría como

contraprestación por los servicios desempeñados.

IV. De acuerdo con las disposiciones del dec. ley

9538/1980, el haber de retiro debe determinarse

considerando la remuneración asignada al cargo de que fuera

titular el afiliado a la fecha de su cese (arts. 27, 29 y

30), lo que remite a la ley que rige la situación salarial

de los afiliados en actividad (doct. causa B. 55.550,

"Pacheco", sent. del 23-II-2000, entre otras).


Esta Suprema Corte ha sostenido que el derecho a

la prestación jubilatoria móvil adquirido conforme a la

categoría jerárquica alcanzada en actividad y con base en

la cual se otorgó el beneficio, queda ligado a las

variaciones que experimente la remuneración del cargo

otrora desempeñado ya que la garantía de movilidad debe

traducirse en una razonable proporcionalidad entre la

situación de jubilado y la que resultaría de continuar el

afiliado en actividad, proporción que dejaría de existir de

no trasladarse al haber de pasividad el aumento de sueldo

derivado de la incorporación de un suplemento de indudable

carácter remunerativo (conf. causas B. 54.188, "Nofri",

sent. del 29-IV-1997; B. 56.959, "Núñez", sent. del 14-IV-

1997, entre otras).

V. Lo expuesto evidencia que la bonificación bajo

análisis no resulta extraordinaria, sino que exhibe el

carácter de habitual y regular, motivo por el cual

corresponde hacer lugar a la demanda interpuesta,

reconociendo el derecho de los actores al incremento de sus

haberes previsionales con el adicional establecido en el

decreto 1014/ 1997 y condenando a la accionada al pago de

las sumas devengadas desde la fecha de vigencia del citado

decreto hasta la de su derogación por decreto 1650/2004. La


liquidación de las sumas a abonar deberá realizase conforme

lo establecido en los arts. 1 y 2 del decreto 1014/1997.

Sobre dichos importes se calcularán intereses a

la tasa que pague el Banco de la Provincia de Buenos Aires

en los depósitos a treinta días vigente en los distintos

períodos de aplicación y hasta el pago efectivo (arts. 7 y

10 de la ley 23.928, texto según ley 25.561 -coincidente en

ambas redacciones en sus contenidos-; 622, Código Civil y

5, ley 25.561).

La suma resultante de la liquidación que de

acuerdo a las pautas indicadas se practique, deberá

abonarse dentro de los 60 días (art. 163, Const. prov.).

Costas por su orden (arts. 17, ley 2961; 78 inc.

3º, ley 12.008, texto según ley 13.101).

Voto por la afirmativa.

A la cuestión planteada, el señor Juez doctor

Pettigiani dijo:

Por los fundamentos concordantes expuestos por

los señores jueces doctores Soria e Hitters, voto por la

negativa.

Costas por su orden (arts. 17 del C.P.C.A. y 78

inc. 3, ley 12.008 -texto según ley 13.101-).

A la cuestión planteada, el señor Juez doctor


Domínguez dijo:

Adhiero al voto de la doctora Kogan en virtud de

los siguientes fundamentos coincidentes.

1. Tal como fuera resuelto por la Corte Suprema

de Justicia de la Nación en el precedente "Sánchez"

debidamente interpolado en el voto al que adhiero, debe

rechazarse toda interpretación restrictiva de la obligación

que impone otorgar "jubilaciones y pensiones móviles" ello

en virtud de lo normado por el art. 14 bis de la

Constitución nacional.

2. Con esta premisa y del análisis del art. 27

del dec. ley 9538/1980 -según t.o. ley 10.750- de

aplicación al caso, surge la solución a brindar en la

presente problemática.

En la referida norma se establece que los haberes

jubilatorios se fijarán "sobre la base de la última

retribución o asignación correspondiente al grado de que

era titular el afiliado, a la fecha de su cese activo".

Luego, se define que deberá entenderse como retribución o

asignación mensual "... la fijada en la ley salarial

vigente, por todo concepto, considerando los suplementos,

bonificaciones, adicionales, retribuciones y servicios de

extensión profesional que tengan carácter regulares,


habituales y permanentes y sobre los cuales se harán

obligatoriamente aportes previsionales, excepto las

asignaciones familiares".

El decreto 1014/1997 establecía un suplemento

para los agentes en actividad en razón al estado de

emergencia, explicitando su carácter no remunerativo, no

bonificable, no permanente y especial.

Soy de la opinión que, más allá de las

características que le brinda el decreto 1014/1997 al

suplemento, en la realidad los funcionarios policiales o

penitenciarios recibieron el suplemento con habitualidad,

regularidad y permanencia. Así ocurrió -en el caso- ante

las sucesivas prórrogas que decretaran su mantenimiento y

que culminaran con el dictado del decreto 1650/2004 que en

definitiva le otorgara el carácter remuneratorio.

La calidad de remuneratorio se vislumbra -a su

vez- por la generalidad con que fue otorgado y la

proporcionalidad de su monto según las distintas jerarquías

de los agentes.

3. Despejada la cuestión sobre las

características del suplemento, resulta decisivo a los

fines de hacer lugar a la demanda impetrada, tal como se

expresa en el voto al que adhiero, la necesidad de guardar


proporcionalidad entre lo que efectivamente perciben los

agentes en actividad con los haberes de los pasivos para

poder así dar cumplimiento con el mandato constitucional de

brindar "jubilaciones o pensiones móviles".

4. Por último, también soy de la opinión que la

decisión de no descontar los porcentajes para efectuar los

aportes al sistema previsional sobre el suplemento creado

por el decreto 1014/1997 no puede operar en contra de los

intereses del beneficiario.

5. Por todo lo expuesto corresponde hacer lugar a

la demanda con los alcances brindados en el voto de la

doctora Kogan.

Voto por la afirmativa.

A la cuestión planteada, el señor Juez doctor Sal

Llargués dijo:

Adhiero al voto de la doctora Kogan.

De todos sus fundamentos reparo en los que

desgrana en el numeral 2. De los mismos resulta una

práctica acendrada de los administradores de acudir a la

noción de emergencia para sortear la necesaria movilidad

que garantiza el art. 14 bis de la Constitución de la

Nación. De tal suerte, la nuda afirmación formal del

carácter no remunerativo de un rubro que se asigna al


personal en actividad, no muta por principio su naturaleza

de retribución de servicios si el mismo es -entre tantas

características como se le han reconocido- sostenido en el

tiempo.

Reparo en el mismo fallo a que ha acudido el

doctor Hitters en el punto V in fine de su voto -"Badaro"

debido al superior Tribunal de la Nación- pues, completando

su glosa, también ha sostenido ese cuerpo "que los cambios

en las circunstancias pueden hacer que la solución legal,

correcta en su comienzo, se torne irrazonable, y que

cuando ello sucede el cumplimiento de la garantía en juego

atañe también a los restantes poderes públicos que

deberán, dentro de la órbita de su competencia, hacer

prevalecer el espíritu protector que anima dicho precepto

(movilidad) dentro del marco que exigen las diversas

formas de justicia".

Voto por la afirmativa.

Con lo que terminó el acuerdo, dictándose la

siguiente

S E N T E N C I A

Por los fundamentos expuestos en el acuerdo que

antecede, por mayoría, se hace lugar a la demanda

interpuesta, reconociendo el derecho de los coactores Pedro


Avelino Fernández Gamallo, Jorge Horacio Fernández, Daniel

Horacio Genoni, Susana Mabel Spezzi, Carlos Alberto Rosales

Canicoba, Antonia Renne, Julio Nicolás Pizzi, Fanny

Cozzarin, Anselmo Torres, Pablo Francisco Anglade, María

Ángeles Hernández, Tomás Luzzo, José María Leiva, Antonio

Fernández, Haydee Justa Piatis y Rosa Gladys Barbosa, al

incremento del haber previsional con el adicional

establecido en el decreto 1014/1997 y condenando a la

accionada a pagar a los mencionados coactores las sumas

devengadas desde la fecha de vigencia del citado decreto

hasta la de su derogación por decreto 1650/2004. La

liquidación deberá realizase conforme lo establecido en los

arts. 1 y 2 del decreto 1014/1997.

Sobre dichos importes se calcularán intereses y

la suma resultante de la liquidación que se practique,

conforme las pautas indicadas, deberá ser abonada dentro de

los sesenta días (art. 163, Const. prov.).

Costas por su orden (arts. 17, ley 2961; 78 inc.

3, ley 12.008 -texto según ley 13.101-).

Difiérese la regulación de honorarios para su

oportunidad (art. 51, dec. ley 8904/1977).

Regístrese y notifíquese.
HILDA KOGAN

EDUARDO JULIO PETTIGIANI HECTOR NEGRI

DANIEL FERNANDO SORIA JUAN CARLOS HITTERS

FEDERICO GUILLERMO DOMINGUEZ BENJAMIN RAMON SAL LLARGUES

JUAN JOSE MARTIARENA

Secretario

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