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La importancia del cuidado y atención de la salud mental dentro de los servicios básicos en
los centros de salud de la república mexicana.
Con relación a lo anterior, según menciona K. Marx sobre el ser material: en la producción
social de su vida los hombres establecen determinadas relaciones necesarias e independientes
de su voluntad, relaciones de producción (un tipo de relación social, específicamente; entre
los hombres respecto de las cosas, y no de los hombres con las cosas) que corresponden a
una fase determinada de desarrollo de sus fuerzas productivas materiales. El conjunto de
estas relaciones de producción forma la estructura económica de la sociedad, la base real
sobre la que se levanta la superestructura jurídica y política a la que corresponden
determinadas formas de consciencia social. El modo de producción de la vida material
condiciona el proceso de la vida social, política y espiritual en general. No es la conciencia
de hombre la que determina su signo, por el contrario, el ser social es lo que determina su
conciencia. (Karl Marx, contribución a la crítica de la economía política).
Anteriormente la tierra no era considerada como propiedad privada de las personas hasta la
edad media, periodo histórico de la civilización occidental, europeos que agrupaban
monarquías que se encontraban bajo el mando político y religioso de la iglesia católica, dando
paso a la llamada occidentalización, la globalización actual, que sabemos es un proceso
socioeconómico de industrialización y tecnificación. La occidentalización entendida como
una asimilación cultural, como una integración de un grupo etno-cultural-inmigrantes, etnias
minoritarias y otros, a una comunidad dominante, el grupo absorbido pierde su originalidad
de manera parcial o total en su identidad cultural, dando paso a la modernidad en el siglo
XV, donde se expandió esta visión de occidentalización a través de cambios a nivel mundial,
como el descubrimiento de América, el desarrollo de la imprenta, la reforma protestante, el
renacimiento y la revolución científica.
Entonces, este acontecimiento o delito (emergencia) que implica aspectos sociales y éticos
provenientes de un constructo social especifico en donde la trasgresión es forma válida para
obtener algo, es visto como común y muchas veces como una habilidad para adquirir algo a
través de los recursos aprehendidos socialmente. La fuente principal donde se adquiere
conocimiento es dentro del medio en donde se desenvuelve, en estos espacios existen muchos
individuos que forman parte de su entorno secundario y que buscan influir muchas veces de
manera positiva como lo son maestros, vecinos, sacerdotes, doctores, etc., que buscan
generalmente dejar en ellos un aprendizaje, aunque muchas veces por falta de atención o por
oposición, lo lleva a entenderlo como una orden o mandato que desvirtúa el mensaje,
desafortunadamente no se enseña a escuchar y atender correctamente algo, de igual forma
cuando alguien opina sobre alguna manera de hacer o manejar algo. Esta escucha activa se
aprehende en casa y se desarrolla mayormente en las instituciones escolares, que con la
actualidad y el fácil acceso a conocimientos merecen un cambio y nuevos objetivos, construir
el respeto en una educación para la paz, una enseñanza cooperativa como herramienta para
generar una mejor dinámica con los compañeros y así desarrollar habilidades sociales con
mayor empatía, el respeto como objetivo prioritario de la educación, aprehender para obtener
conocimientos, no para la obtención de una calificación.
Pero el fortalecer una sociedad y mejorar sus condiciones de vida, depende también del
aprendizaje y el incremento de las capacidades y singularidades mentales de cada sujeto, el
poder lograr establecer una importancia de pensar apropiadamente un contexto, poder
generar cambios en la percepción de un individuo ante la emoción originada primeramente
por alguna situación, modificando su perspectiva, generando también físicamente una
relajación como si fuese un analgésico, causando también modificaciones en su entorno por
el cambio emocional y anímico que se produce. Es posible lograr esto a través de la
intervención psicológica y la adquisición de competencias para la comprensión de un
malestar emocional (psicoeducación), es posible resolver las dificultades de salud psíquica
que padece una persona, que también llega a generar efectos en la fisiología del individuo si
no es atendida a tiempo, el sufrimiento de alguna enfermedad física genera padecimientos
psíquicos como sucede en la diabetes, al ser diagnosticado produce estrés que afecta en cómo
transcurre las etapas generando negación, temor, culpa y depresión. Existe una comorbilidad
entre depresión y diabetes debido al duelo que conlleva el conocimiento del diagnóstico de
la enfermedad, así como los cambios en el estilo de vida que realiza el paciente para mantener
el control de su enfermedad, además indica que hay una relación mutua entre ambos estados,
debido a que la depresión aumenta el riesgo de padecer diabetes y esta el riesgo de sufrir
depresión (Antuñez, 2016).
Existe una relación entre la depresión y la salud física, la OMS (2016a), señala que entre
1990 y 2013, el número de personas con depresión o ansiedad ha aumentado en cerca de un
50%, de 416 millones a 615 millones. La depresión aumenta el riesgo de padecer diabetes y
esta el riesgo de sufrir depresión, lo cual contribuye a que la depresión sea la principal causa
mundial de discapacidad (OMS, 2017a). Según la OMS (2017c, párr.1), “la depresión es un
trastorno mental frecuente, que se caracteriza por la presencia de tristeza, pérdida de interés
o placer, sentimientos de culpa o falta de autoestima, trastornos del sueño o del apetito,
sensación de cansancio y falta de concentración”, además calcula que afecta a más de 300
millones de personas en el mundo, siendo una de las primeras causas de discapacidad a nivel
mundial generando mortalidad, afecta más a las mujeres a diferencia de los hombres,
llegando a provocar problemas en su área familiar, escolar y laboral (OMS, 2017a).
Las enfermedades por lo general o un hospital es asociado con algo negativo, produciendo
miedo del cual podemos determinar dos tipos, el miedo en donde existe un peligro real y
verdadero ante el cual es un miedo racional de alerta, que pone al sujeto en actitud de huida.
Y el miedo neurótico en donde no hay peligro real que pueda suponer una amenaza para la
vida, es más del orden de la sensación e imaginación. La persona comienza a experimentar
inseguridad, su fantasía es que puede pasarle algo pero no sabe ni qué le puede pasar ni qué
es lo que le produce el miedo. Freud habló de tres tipos de ansiedades, la primera es la
ansiedad de realidad, a la cual puede llamársele en términos coloquiales como miedo,
podríamos entonces decir que si uno está en un pozo lleno de serpientes venenosas, uno
experimentará una ansiedad de realidad. La segunda es la ansiedad moral y se refiere a lo que
sentimos cuando el peligro no proviene del mundo externo, sino del mundo social
interiorizado del Superyo, es otra terminología para hablar de la culpa, vergüenza y el miedo
al castigo. La última es la ansiedad neurótica. Si en alguna ocasión usted ha sentido como si
fuésemos a perder el control, su raciocinio o incluso su mente, está experimentando este tipo
de ansiedad, “Neurótico” es la traducción literal del latín que significa nervioso, por tanto
podríamos llamar a este tipo de ansiedad, ansiedad nerviosa. Se estima que durante las
emergencias 1 de cada 5 personas se ve afectada por depresión y ansiedad, esto trae consigo
la necesidad de inversiones en servicios de salud mental, según una encuesta en el 2014 es
muy inferior, ya que los gobiernos gastan un 3% de sus presupuestos sanitarios en la salud
mental.
En la actualidad, se ama a la humanidad en general para no tener que amar a los seres en
particular. Es como el drama de Ivan Karamazov de Dostoievsky que se origina en que hay
demasiado amor sin objeto, como este amor queda sin empleo, y dios es negado, se decide
entonces transportarlo al ser humano en nombre de una generosa complicidad. Es por lo cual
Morin crítica fuerte a la sociedad contemporánea, pues para él la sociedad actual a pesar de
sus grandes progresos, de sus grandes conocimientos, de su innegable desarrollo científico-
tecnológico, sigue siendo una sociedad bárbara que se encuentra en su edad de hierro
planetaria (Morin, 2009a), como en la prehistoria de la evolución de su espíritu (mind). La
sociedad, para Morin, ha perdido su horizonte como humanidad y por tanto hay que hacer
una apuesta antropolítica que posibilite la construcción de una sociedad- otra, más civilizada
y que posibilite al mismo tiempo la apropiación del planeta como una “tierra-patria”
(Morin & Kern, 1993). El término planetarización es un término radicalmente antropológico
que expresa la inmersión simbiótica, pero al mismo tiempo extraña, de la humanidad en el
planeta tierra.
Porque la Tierra no es sólo un terreno donde se despliega la globalización, sino una totalidad
compleja físico/biológica/antropológica, es decir, hay que comprender a la vida como
emergente de la historia de la Tierra y a la humanidad como emergente de la historia de la
vida terrestre. La relación del ser humano con la naturaleza y el planeta no puede concebirse
de un modo reductor ni separadamente, como se desprende de la noción de globalización,
porque la tierra no es la suma de elementos disyuntos: el planeta físico, más la biosfera, más
la humanidad, sino que es la relación entre la tierra y la humanidad que debe concebirse como
una entidad planetaria y biosférica.
Agradezco la atención a este documento, quedo a sus órdenes, con un profundo respeto y
admiración me despido enviándole un cordial saludo.
Atentamente
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Lic. Psic. Victor Alfonso Grimaldo Guevara.