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Señores:

JUZGADO MUNICIPAL DE BOGOTÁ (reparto)


Bogotá D.C
E. S. D.

Referencia: ACCIÓN DE TUTELA


Accionante: MAGDALENA PRIETO ROJAS
Accionado: HOSPITAL UNIVERSITARIO CLÍNICA SAN RAFAEL y
COLPENSIONES

MAGDALENA PRIETO ROJAS, en ejercicio del artículo 86 de la Constitución


Política y de conformidad con los Decretos 2591 de 1991, 306 de 1992 y 1983 de
2017, respetuosamente interpongo ante su Despacho la presente Acción de Tutela
contra del HOSPITAL UNIVERSITARIO CLÍNICA SAN RAFAEL y
COLPENSIONES, con el fin de que me sean protegidos los derechos
fundamentales, que me están siendo vulnerados por las corporaciones accionadas,
siendo éstos al mínimo vital y a la vida en condiciones dignas y a la seguridad social.

1. HECHOS

1.1. Solicite tramite de corrección de mi historial laboral ante Colpensiones en el


mes de noviembre de 2017.

1.2. Colpensiones me brindo respuesta el día 14 de noviembre de 2017 referencia


No 2017_8426120 – 2017_8438287, donde me informan que para los ciclos
1996/01 a 1996/12 1997/01 a 1997/12, 1998/01 a 1998/12, 1999/01 a
1999/12 y 2000/01 fueron cancelados por la Clínica San Rafael de forma
extemporánea, fecha para la cual no tiene relación laboral con dicho
empleador, razón por la cual no contabilizan en la Historia Laboral; para
solucionar dicha inconsistencia me sugirieron requerir al empleador copia de
la liquidación de la reserva actuarial con pago expedida por el ISS o
Colpensiones: igualmente me informaron que en caso de no contar con los
soportes mencionados el empleador deberá solicitar la devolución de los
aportes en mención y posteriormente solicitar el cálculo actuarial a
Colpensiones de dichos soportes, para que me sean aplicados en mi historia
laboral.

1.3. De conformidad con la respuesta anterior brindada por Colpensiones, realice


solicitud al empleador el 30 de Mayo del presente año, donde pretendía que
me expidieran copia de la liquidación de la reserva actuarial con pago
expedida por el IIS o Colpensiones, que me certificaran la fecha de inicio y
terminación de mi vinculo laboral, que me entregaran copia de aportes a la
seguridad social en pensiones durante el tiempo laborado con el Hospital (NO
ARCHIVOS PLANOS; teniendo en cuenta que una respuesta brindada por el
Hospital Universitario san Rafael el día 01 de marzo del presente año, me
entregaron un paquete de documentos que son solo archivos planos y no se
observa lo requerido inicialmente

2. FUNDAMENTOS JURÍDICOS Y DERECHOS FUNDAMENTALES


VULNERADOS

DE LA VIABILIDAD DE LA ACCIÓN

Aunque es cierto que el debido proceso se está llevando a cabo momentáneamente,


la carga emocional y psicológica que conlleva este tipo de acciones judiciales me
genera una gran incertidumbre y zozobra, respecto a si cuando saldrá el fallo
definitivo del proceso de nulidad, podré en consecuencia disfrutar del fruto del
trabajo que he realizado todos estos años y se verá reflejado en la pensión de la
cual tengo derecho.

Sin perjuicio de que se demuestre o considere que se ha vulnerado algún otro


derecho, considero que la sentencia de la Sala Laboral de la Corte Suprema de
Justicia vulnera los siguientes derechos fundamentales:

EL DEBIDO PROCESO

Ese debido proceso debe entenderse, para el caso, como el respeto a las formas
preestablecidas y al trato igual por los jueces en la aplicación e interpretación del
derecho.

El Tribunal mencionado, realiza una errada interpretación de mi situación pensional


a la luz de la reiterada jurisprudencia, y no se percata que tengo derecho a que sea
declarada la Nulidad o Ineficacia de la afiliación al fondo privado, ordenando con ello
el regreso a Colpensiones con el consecuente traslado a dicha entidad de todos los
dineros que reposen en su cuenta individual, así como rendimientos y otros.

Con base en todo lo anterior, la providencia emitida por el Tribunal se constituye en


un evidente error de hecho.

PRECEDENTE JUDICIAL

En otras oportunidades, esta Corporación ha concedido el derecho en situaciones


jurídicas y fácticas similares a las mías, sin embargo, en el fallo que se discute me
niega el derecho, adicional a ello la Corte sigue fallando favorablemente casos
idénticos al de la suscrita con base en otras interpretaciones favorables al trabajador.

¿Cómo es posible que a pesar de conceder en multiplicidad de oportunidades la


NULIDAD o INEFICACIA del traslado, en situaciones idénticas a las mías, se revoque
posteriormente la providencia que me concede dicho derecho? ¿Dónde queda el
principio de confianza legítima para mi caso? Y ¿el derecho a la igualdad?

ACCESO A LA ADMINISTRACIÓN DE JUSTICIA Y TUTELA JUDICIAL


EFECTIVA

Se vulneran estos derechos cuando el Honorable TRIBUNAL SUPERIOR DE BOGOTÁ


SALA LABORAL, Sala de decisión presidida por el Dr. Diego Roberto Montoya Millán,
deja de valorar o valora equivocadamente los presupuestos fácticos sobre lo
solicitado.

IGUALDAD

En el presente caso, la Sala de decisión del Tribunal Superior de Bogotá D.C., resolvió
de manera diferente asuntos idénticos sobre los cuales ya se había pronunciado y
sobre los que existe una línea jurisprudencial abundante y reiterada por la Corte
Suprema, lo que genera una injustificada discriminación que no puede ser tolerada
en un ordenamiento como el nuestro. Así mismo, existen pronunciamientos de la
Corte Suprema de Justicia en los que se concede el derecho en casos idénticos al
mío.

En la sentencia T-766 de 2008 la Corte Constitucional fue enfática al afirmar que “el
respeto por las decisiones proferidas por los jueces de superior jerarquía, en especial
de los órganos de cierre en cada una de las jurisdicciones, no es discrecional, sino
que constituye un deber de obligatorio cumplimiento”.

En la sentencia que se cuestiona, se desconoció silenciosamente los reiterados


pronunciamientos tanto de la misma corporación como del superior jerárquico, esto
es la Corte Suprema de Justicia, EN ASUNTOS IDÉNTICOS lo que genera la violación
de los derechos ya mencionados.

DERECHO AL MÍNIMO VITAL

El fallo de la Corte afecta el derecho al mínimo vital en la medida en que sus efectos
además de dejar en suspenso la posible nulidad o ineficacia de la afiliación, a su vez
menguan el derecho pensional, contraviniendo lo estipulado jurisprudencialmente.

“Es pertinente indicar que la Corte ha definido que la afectación al derecho


fundamental al mínimo vital abarca desde la satisfacción de aspiraciones,
necesidades y obligaciones propias del demandante y su grupo familiar, hasta el
punto de evitar por medio de la acción de tutela que se sufra una situación crítica
económica”. (T-004 de 2010).

El derecho fundamental al mínimo vital ha sido reconocido por la Constitución Política


de Colombia desde el año de 1991, en forma extendida y reiterada por la
jurisprudencia constitucional, concebido como un derecho que se deriva de los
principios del Estado Social de derecho, dignidad humana y solidaridad, en
concordancia con los derechos fundamentales a la vida, a la integridad personal y a
la igualdad en la modalidad de decisiones de protección especial a personas en
situación de necesidad manifiesta.

El objeto del derecho fundamental al mínimo vital abarca todas las medidas positivas
o negativas con vocación de evitar que la persona se vea reducida en su valor
intrínseco como ser humano, debido a que no cuente con las condiciones materiales
que le permitan llevar una existencia digna.

Este derecho fundamental en su dimensión positiva busca garantizar que la


persona, centro del ordenamiento jurídico, no se convierta en instrumento de otros
fines, objetivos, propósitos, bienes o intereses, por importantes o valiosos que ellos
sean. Es por eso que protege a la persona, contra de toda forma de degradación
que comprometa no sólo su subsistencia física sino por sobre todo su valor
intrínseco.

Por su parte, respecto de la dimensión negativa, el derecho fundamental al mínimo


vital se constituye en un límite o cota inferior que no puede ser traspasado por el
Estado, en materia de disposición de los recursos materiales que la persona necesita
para llevar una existencia digna, razón a esto es que se crean ello que institucionales
como la inembargabilidad de parte del salario, la prohibición de la confiscación, la
indisponibilidad de los derechos laborales o el amparo de pobreza, entre otros,
constituyen ejemplos concretos del mencionado límite inferior que excluye ciertos
recursos materiales de la competencia dispositiva del Estado o de otros particulares.

En relación con esto la Corte Constitucional en sentencia T-182 de 2011 manifestó:

“Cuando quiera que no se paguen las incapacidades laborales de manera


oportuna y completa, se afecta el mínimo vital del trabajador y el de su
familia, razón por lo cual la acción de tutela es procedente. La Corte ha
sostenido que al determinar la procedencia excepcional de la acción de tutela
en aquellos eventos en donde se comprueba la existencia de personas en
circunstancias de debilidad manifiesta, por su avanzada edad, por su mal
estado de salud, por la carencia de ingreso económico alguno, por su
condición de madre cabeza de familia con hijos menores de edad y/o por su
situación de desplazamiento forzado, entre otras; que dependen
económicamente de la prestación reclamada y que carecen de capacidad
económica para garantizarse su propia subsistencia, se exige del juez un
análisis de la situación particular del actor, con el fin de determinar si el medio
de defensa judicial ordinario es lo suficientemente expedito para proteger sus
derechos fundamentales y si se está frente a la ocurrencia de un perjuicio
irremediable, caso en el cual el conflicto planteado trasciende el nivel
puramente legal para convertirse en un problema de carácter constitucional.
Así mismo, es importante resaltar que los requisitos para la procedencia de la
acción de tutela en tratándose del pago de acreencias laborales –como son
las incapacidades laborales-, deben ser analizados con mayor flexibilidad, en
atención a que los peticionarios son sujetos de especial protección
constitucional”.

SEGURIDAD SOCIAL

La seguridad social como derecho fundamental implícito en la Constitución Política


de Colombia, desarrollado legislativamente en el ordenamiento jurídico colombiano
y consagrado en el sistema interamericano de derechos humanos, propende con
este último un conjunto de medidas que la sociedad le brinde a sus asociados una
protección integra y suficiente con el fin de evitar desequilibrios económicos y
sociales a causa de contingencias que trasgredan el desarrollo casual de la vida
cotidiana.

Esta implicación es de carácter inclusiva y solidaria buscando netamente el bienestar


social. Esto se reafirma con la consideración de derecho inalienable por parte de la
OIT, la ONU y la Conferencia Interamericana de Seguridad Social.

No por nada ésta última institución ha reafirmado en diferentes escenarios que los
Estados deben garantizar la protección de todos los derechos de carácter natural,
especialmente a los miembros más vulnerables de la sociedad, bien sea en caso de
desempleo, maternidad, enfermedad, invalidez, vejez u otras circunstancias de la
vida que le trunque o los deje en situación de desprotección.

Los Estados deben realizar progresivamente acciones que en derecho y hecho


cobijen y garanticen la seguridad social, a través de dinero en efectivo o en
operaciones, que permita a los individuos y las familias adquirir la atención necesaria
para cubrir y sobrellevar estas contingencias como lo es el caso de la salud, vida,
debido proceso.

CONDICIONES DE PROCEDENCIA DE LA ACCIÓN DE TUTELA


De acuerdo con la reiterada jurisprudencia de la Corte Constitucional, siendo la más
reciente las más recientes la SU 354 de 2017, la SU 811 de 2009, las que. Estiman
para que proceda la acción de tutela contra sentencias se deben dar unos requisitos,
los que en el caso concreto se cumplen así:

“7.1.1 Que la cuestión que se discuta resulte de evidente relevancia constitucional.


Para la Corte, el juez constitucional no puede estudiar cuestiones que no tienen una
clara y marcada importancia constitucional so pena de involucrarse en asuntos que
corresponde definir a otras jurisdicciones”. La violación al debido proceso, al
precedente judicial y al principio de confianza legítima en que incurrió el Tribunal
con la sentencia mencionada exige la intervención del juez constitucional para
conjurar la vulneración de mis derechos fundamentales.

“7.1.2 Que se hayan agotado todos los medios -ordinarios y extraordinarios-, de


defensa judicial al alcance de la persona afectada, salvo que se trate de evitar la
consumación de un perjuicio iusfundamental irremediable”. Tal como se señala en
los hechos, en mi caso en particular, por mi delicado estafo de salud se trata con
esta acción que se evite un perjuicio IRREMEDIABLE, por lo que es imprescindible
ante la vía del recurso de amparo.

“7.1.3 Que se cumpla el requisito de la inmediatez, es decir, que la tutela se hubiere


interpuesto en un término razonable y proporcionado a partir del hecho que originó
la vulneración”. El tiempo transcurrido entre la fecha en la cual se notificó la
sentencia que configura la vía de hecho y la fecha de presentación de la tutela es
razonable y proporcionado si se tiene en cuenta la necesaria recolección de la
información requerida y las gestiones de elaboración del escrito. Así lo ha entendido
la Corte Constitucional, entre otras, en la sentencia T-249 de 2009 cuando, en
asunto similar en cuanto a los términos, afirmó: “Frente a la inmediatez en la
interposición de la acción de tutela respecto del hecho que origina la vulneración,
encuentra la Sala que la Sentencia que presuntamente vulnera los derechos
fundamentales de la actora se profirió el 26 de abril de 2007 y se surtió su
notificación por medio de edicto el 3 de agosto de 2007, tal y como consta en el
reverso del folio 115 del cuaderno de primera instancia de la presente tutela. Ahora
bien, la acción de tutela que pone de presente la vulneración de los derechos
fundamentales de la actora se presentó el 20 de mayo de 2008, de conformidad con
el acta individual de reparto que figura a folio 196 del cuaderno de primera instancia.
Para la Sala el tiempo transcurrido entre el hecho y la interposición de la
acción de tutela, de 9 meses y 17 días, resulta prudencial y por lo tanto se
entiende cumplido este requisito.”

“7.1.4 Cuando se trate de una irregularidad procesal, debe quedar claro que la
misma tiene un efecto decisivo o determinante en la sentencia que se impugna y
que afecta los derechos fundamentales de la parte actora”.
“7.1.5 Que la parte actora identifique de manera razonable tanto los hechos que
generaron la vulneración como los derechos vulnerados y que hubiere alegado tal
vulneración en el proceso judicial siempre que esto hubiere sido posible”.

“7.1.6 Que no se trate de sentencias de tutela. Esto por cuanto los debates sobre
la protección de los derechos fundamentales no pueden prolongarse de manera
indefinida”. Evidentemente, la sentencia que se ataca no es de tutela.

Además de los anteriores, la jurisprudencia de la Corte Constitucional ha definido


otros requisitos, ya de carácter específico, para la procedencia del recurso de
amparo, así:

“7.2.1 Defecto orgánico: se origina cuando el juez que adoptó la decisión carecía
absolutamente de competencia para hacerlo”. No se discute la competencia del
Tribunal Administrativo para dictar la sentencia cuestionada.

“7.2.2 Defecto procedimental absoluto: falencia que se origina cuando el juez actuó
completamente al margen del procedimiento establecido”. No es el caso.

“7.2.3. Defecto fáctico: surge cuando el juez carece del apoyo probatorio
que permita la aplicación del supuesto legal en el que se sustenta la
decisión”. La trascendencia y relevancia, es decir, el peso que tiene la omisión del
Tribunal superior de Bogotá- sala laboral sobre la decisión final es de tal magnitud,
que la sentencia se convierte en “arbitraria y caprichosa” en términos de la misma
Corte Constitucional.

En efecto, sobre el defecto fáctico, la Corte Constitucional precisó en la sentencia


SU-811 de 2009, lo siguiente:

“En múltiples decisiones esta Corporación ha señalado que la labor del juez de tutela
en relación con el defecto fáctico está estrictamente limitada a aquellos eventos en
que la actividad probatoria desarrollada por el funcionario judicial incurre en errores
de tal magnitud que, por su evidencia, ocasionan que la decisión judicial se torne
arbitraria e irrazonable. Esto supone que la acción de tutela carece de alcance para
realizar un juicio de corrección sobre la valoración probatoria efectuada por el juez
del conocimiento, su juicio se limita a determinar si el juez ordinario incurrió en un
error indiscutible en el decreto o apreciación de la prueba. Se trata de un vicio que
debe ser trascendente en cuanto debe tener una relación intrínseca con el sentido
de la decisión judicial, de modo que, de no concurrir ese error manifiesto, la
sentencia hubiera adoptado un sentido distinto. El yerro además debe ser relevante,
no solo en términos de afectación del derecho al debido proceso, sino en cuanto a
la incidencia en la controversia jurídica materia de la decisión judicial.
“Estas consideraciones han sido corroboradas por distintas decisiones de la Corte.
De acuerdo con la jurisprudencia de la Corporación, este defecto se produce cuando
el juez toma una decisión, sin que se halle plenamente comprobado el supuesto de
hecho que legalmente la determina, como consecuencia de una omisión en el
decreto o valoración de las pruebas; de una valoración irrazonable de las mismas;
de la suposición de una prueba, o del otorgamiento de un alcance contraevidente a
los medios probatorios.

“A juicio de la Corte, el defecto fáctico puede darse tanto en una dimensión positiva,
que comprende los supuestos de una valoración por completo equivocada, o la
fundamentación de una decisión en una prueba no apta para ello, así como en una
dimensión negativa, materializada en la omisión en la valoración de una prueba
determinante, o en el decreto de pruebas de carácter esencial.”

“7.2.4 Defecto material o sustantivo: se presenta cuando se decide con base en


normas inexistentes, inconstitucionales o claramente inaplicables al caso concreto.”
No es el caso.

“7.2.5 Error inducido: tradicionalmente denominado como ‘vía de hecho por


consecuencia’ se presenta cuando el Juez o Tribunal fue víctima de un engaño por
parte de terceros y ese engaño lo condujo a la toma de una decisión que afecta
derechos fundamentales.” No es el caso.

“7.2.6 Sentencia sin motivación.”. No es el caso.

“7.2.7 Desconocimiento del precedente.” De acuerdo con la Corte


Constitucional, la razón de la decisión que tomen los jueces en un caso determinado
DEBE SER UTILIZADA por otros jueces en casos similares.

En la sentencia SU-1219 de 2001, la Corte Constitucional señaló que “la ratio


decidendi de las sentencias, es la parte de ellas que tiene la capacidad de
proyectarse más allá del caso concreto’, y que ‘integra la norma
constitucional y adquiere fuerza vinculante al ser parte del derecho a cuyo
imperio están sometidas todas las autoridades en un Estado Social de
Derecho’, en virtud de los principios de igualdad, de seguridad jurídica, de
confianza legítima, y de la supremacía de la Constitución.”

Sobre el precedente vertical, la Corte Constitucional señaló en la sentencia T-014 de


enero 22 de 2009:

“En sus pronunciamientos sobre el tema esta corporación ha resaltado que en


desarrollo de lo previsto en los artículos 228 a 230 de la Constitución Política, la
regla general es el respeto a la independencia y autonomía de los jueces, cuyas
providencias sólo están sometidas al imperio de la ley. Sin embargo, como también
lo ha explicado esta Corte, esa regla no es absoluta y su aplicación debe armonizarse
con otros valores y principios igualmente importantes dentro de nuestro sistema
constitucional.

“Uno de tales principios es, naturalmente, el relacionado con la estructura


jerarquizada de la Rama Judicial, conforme al cual los jueces que integran los niveles
inferiores de dicho sistema están sujetos a la eventual revocación de sus decisiones
por parte de los que ocupan una escala superior, a quienes se encuentran
funcionalmente subordinados. Otros aspectos más complejos incluyen valores como
la seguridad jurídica, la confianza legítima de los asociados y particularmente la
igualdad, todos los cuales podrían verse afectados en caso de que, so pretexto de
la autonomía judicial y sin razón suficiente, asuntos fácticamente idénticos o de alta
similitud fueran fallados en forma abiertamente divergente, ya sea por el mismo
juez, o por distintos jueces, ubicados dentro de la misma escala jerárquica o en
diferentes niveles de ella.

“A partir de estos elementos, el juez constitucional ha relievado la importancia de


los precedentes judiciales, desde cuyo conocimiento el ciudadano puede albergar
una expectativa razonable acerca de cómo resolverán los jueces un caso concreto
que tiene identidad o similitud fáctica con otros anteriores. La jurisprudencia ha
distinguido entre precedente horizontal, que es aquel que debe observarse por el
mismo juez o corporación que lo generó o por otro(a) de igual jerarquía funcional,
y precedente vertical, que es el que proviene de un funcionario o corporación de
superior jerarquía, particularmente de aquellas que en cada uno de los distintos
ámbitos de la jurisdicción se desempeñan como órganos límite.

“De lo anterior resulta que, al emitir sus providencias, los jueces deben tomar en
cuenta los precedentes existentes en relación con el tema, que pudieren resultar
aplicables, especialmente aquellos que han sido trazados por las altas corporaciones
judiciales que, en relación con los distintos temas, tienen la misión de procurar la
unificación de la jurisprudencia. Hacer caso omiso de esta consideración puede
implicar entonces la afectación de derechos fundamentales de las personas que de
buena fe confiaban en la aplicación de los precedentes conocidos, entre ellos el
derecho de acceder a la administración de justicia y el derecho a la igualdad, los
cuales serían protegibles mediante la acción de tutela.

“De todas maneras, lo anterior no significa que el juez esté forzosamente atado a
los precedentes existentes, ni aun tratándose de precedentes verticales. Por el
contrario, es claro que en ejercicio de la autonomía que la Constitución Política le
reconoce y garantiza, el juez bien puede apartarse de tales antecedentes y proferir
una decisión diferente a la esperada, siempre que sustente de manera suficiente su
disenso frente al precedente aplicable.
“Según lo ha planteado la jurisprudencia, la justificación suficiente incluye la expresa
mención del precedente en cuestión, seguida de una explicación razonable sobre su
postura contraria. Por esta razón, resulta válido contemplar que la simple inclusión
de una o más consideraciones que de manera genérica se aducen como explicación
para separarse del precedente aplicable podría no ser suficiente para tener por
cumplida esta exigencia.

“Recapitulando, en caso de existir precedentes judiciales aplicables al caso que se


decide, el juzgador debe, en principio, aplicarlos. Sin embargo, en ejercicio de la
autonomía judicial reconocida por la Constitución Política, puede también separarse
de ellos, siempre que al hacerlo plantee en forma suficiente y sólidamente
sustentada, las razones que le asisten para optar por una solución diferente. Por
ello, sólo en los casos en que el juez, de manera arbitraria y deliberada, rehúse o
simplemente omita la aplicación del precedente, sin ofrecer al mismo tiempo una
explicación satisfactoria, podría considerarse que viola derechos fundamentales de
las partes, entre ellos el debido proceso, la igualdad y el derecho de acceder a la
administración de justicia.”

Como puede observarse, resulta grave para el Estado Social de Derecho y la


seguridad jurídica, el que los jueces de inferior jerarquía no apliquen el criterio de
sus superiores cuando conozcan de asuntos idénticos a aquellos en los cuales se fijó
ese criterio, sin aducir los fundamentos en que se sustenta. Más grave aun cuando
el superior jerárquico es el órgano de cierre de la jurisdicción respectiva, así mismo,
que se desconozca el precedente horizontal, esto es, que se aparte de los múltiples
fallos que en casos iguales se han proferido por la misma corporación sin un sustento
jurídico sólido que pueda soportar y justificar el trato desigual por parte de la
autoridad judicial.

3. EN CUANTO A LOS A FUNDAMENTOS EN RELACIÓN CON LO


DEMANDADO

ANÁLISIS JURÍDICO

Para estos efectos se ha tomado como base la línea jurisprudencial sentada por la
Corte Suprema de Justicia en su Sala Laboral, la que ha sido replicada por varios
Tribunales superiores, como se desarrollará a continuación.

NATURALEZA DE LAS ADMINISTRADORAS DEL RÉGIMEN DE AHORRO


INDIVIDUAL CON SOLIDARIDAD Y SU RELACIÓN CON EL SERVICIO
PÚBLICO.

El Sistema de Seguridad Social en Colombia es definido en el artículo 48 de la Carta


Política como un derecho irrenunciable, además de reiterarse en el artículo 335 de
la Constitución su naturaleza de ser un servicio público de carácter obligatorio,
concepto que adquieren una trascendencia enorme en este proceso. Si bien, al ser
la Seguridad Social un servicio público puede ser prestado por particulares, ello no
los exonera de la responsabilidad que debe tener todo prestador de este tipo de
servicios, quienes deben estar comprometidos con su ampliación progresiva como
lo señala el artículo 48 de la Carta. En otras palabras, el actuar de las
administradoras de FONDOS de pensiones debe estar inspirado por el interés
colectivo y desde esta óptica debe analizarse su actuar. (Corte Suprema de Justicia
Sala laboral, PONENTE EDUARDO LÓPEZ VILLEGAS, Expediente No. 31989 9 de
septiembre de 2008).

Esas particularidades ubican a las Administradoras de Pensiones Privadas en el


campo de la responsabilidad profesional, pues conforme al Artículo 4º del Decreto
656 de 1.994, estas se encuentran obligadas a prestar de forma eficiente, eficaz y
oportuna todos los servicios inherentes a la calidad de instituciones de carácter
previsional.

RESPONSABILIDAD PROFESIONAL DE LAS ADMINISTRADORAS DE


PENSIONES

En sentencia con radicado 31314 de 2008 la Corte Suprema de Justicia en sala de


Casación Laboral estableció que la responsabilidad de las administradoras de
pensiones es de carácter profesional, lo que le impone el deber de cumplir
puntualmente las obligaciones que taxativamente le señalan las normas, en especial
las de los artículos 14 y 15 del Decreto 656 de 1994, cumplirlas todas con suma
diligencia, con prudencia y pericia, y además todas aquellas que se le integran por
fuerza de la naturaleza de las mismas, como lo manda el artículo 1603 del C.C., regla
válida para las obligaciones cualquiera que fuere su fuente, legal, reglamentaria o
contractual. (Corte Suprema de Justicia Sala laboral, PONENTE EDUARDO LÓPEZ
VILLEGAS, Expediente No. 31989 9 de septiembre de 2008).

De esta forma, la responsabilidad profesional de las Administradoras de Pensiones


le impone unas obligaciones y una exigencia mayor ante los afilados del sistema, al
ser un servicio de orden público y prestacional el que ofrecen.

OBLIGACIONES DE LAS ADMINISTRADORAS DE FONDOS DE PENSIONES

La Corte Suprema de Justicia, a través de su Sala de Casación Laboral ha


manifestado que: “La doctrina ha bien elaborado un conjunto de obligaciones
especiales, con específica vigencia para todas aquellas entidades cuya esencia es la
gestión fiduciaria, como la de las administradoras de pensiones, que emanan de la
buena fe, como el de la transparencia, vigilancia, y el deber de información. (Corte
Suprema de Justicia Sala laboral, PONENTE EDUARDO LÓPEZ VILLEGAS, Expediente
No. 31989 9 de septiembre de 2008).
OBLIGACIÓN DE INFORMACION

La información es considerada como un derecho fundamental de todo ciudadano y


correlativamente una obligación del Estado en hacerlo respetar y garantizar su
cumplimiento (Asamblea Nacional Constituyente, 1991). Este tipo de derecho es de
vital importancia en casos pensionales, pues de la calidad de información que se le
brinde a un afiliado o potencial afiliado dependerá que este mantenga o no sus
derechos pensionales más beneficiosos.

El deber de información se ha de proporcionar con la prudencia de quien sabe que


ella tiene el valor y el alcance de orientar asuntos fundamentales como la elección
del régimen pensional o la transición entre estos. Para este tipo de asuntos, la
información no sólo debe comprender los beneficios que dispense el régimen al que
pretende trasladarse, sino además el monto de la pensión que en cada uno de ellos
se proyecte, la diferencia en el pago de los aportes que allí se realizarían, las
implicaciones y la conveniencia o no de la eventual decisión y obviamente la
declaración de aceptación de esa situación. De esta forma, como emanación del
mismo reglamento de la seguridad social, las administradoras tienen el deber del
buen consejo con una ilustración suficiente, dando a conocer las diferentes
alternativas, con sus beneficios e inconvenientes, y aún a llegar, si ese fuere el caso,
a desanimar al interesado de tomar una opción que claramente le perjudica. (Corte
Suprema de Justicia Sala laboral, PONENTE EDUARDO LÓPEZ VILLEGAS, Expediente
No. 31989 9 de septiembre de 2008).

En efecto, la solicitud voluntaria de vinculación a una administradora, la firma del


interesado en el formulario inicial o, los traslados de administradoras dentro del
mismo régimen: no son pruebas suficientes para determinar que el traslado o
afiliación dentro del régimen de ahorro individual se realizó de forma libre,
espontánea y sin presiones, pues; el juez con base al traslado de la carga de la
prueba del actor a la entidad demandada deberá determinar caso a caso, si la
administradora brindo una información veraz y suficiente, para que la decisión del
traslado se adoptará con el pleno conocimiento de lo que ella entraña. (Corte
Suprema de Justicia Sala laboral, PONENTE EDUARDO LÓPEZ VILLEGAS, Expediente
No. 31989 de septiembre 09 de 2008).

SOBRE LA INEFICACIA Y NULIDAD DE LA AFILIACIÓN O TRASLADO AL


RÉGIMEN DE AHORRO INDIVIDUAL

La Sala Laboral de la Corte Suprema de Justicia, en escenarios similares al presente


caso sub judice, se ha pronunciado reiterando a la “libertad informada” como
categoría principal, para determinar si una afiliación o tránsito entre los Regímenes
de Seguridad Social adolece de ineficacia. Así pues, cuando el Juez advierta una
inoportuna o insuficiente asesoría sobre los puntos del tránsito de régimen, estos
serán suficientes indicativos para determinar que la decisión no estuvo precedida de
la comprensión suficiente, y menos del real consentimiento para adoptarla, por lo
que, deberá decretar la ineficacia del proceso. (Corte Suprema de Justicia Sala
Laboral, PONENTE ELSY DEL PILAR CUELLO CALDERÓN, Expediente No. 46292 de
septiembre de 2014).

Así pues, la declaración de nulidad de vinculación trae como consecuencia no


producir los efectos propios de la vinculación al Régimen de Ahorro Individual, sino
su regreso automático al régimen de prima media, privando hacia futuro de todo
efecto, por tanto, la Administradora queda relevada de toda obligación de pago
futuro por mesadas pensionales y adquiere la obligación de devolver al sistema todos
los valores que hubiere recibido con motivo de la afiliación del actor, como
cotizaciones, bonos pensionales, sumas adicionales de la aseguradora, con todos
sus frutos e intereses como los dispone el artículo 1746 del C.C., esto es, con los
rendimientos que se hubieren causado. (Corte Suprema de Justicia Sala laboral,
PONENTE EDUARDO LÓPEZ VILLEGAS, Expediente No. 31989 9 de septiembre de
2008).

LA LINEA JURIPRUDENCIAL SOBRE ANULACION DE LA AFILIACION AL


FONDO PRIVADO POR FALTA DE INFORMACION ES REITERADA POR LA
CSJ

En sentencia de septiembre de 2017, la Sala Laboral de la Corte Suprema de Justicia


con ponencia del Magistrado CASTILLO CADENA reiteró lo planteado en relación con
la anulación de la afiliación del fondo privado de pensiones por falta de información.
En efecto en nombrada providencia se realizaron las siguientes precisiones:

“…no encuentra la Corte que COLFONDOS haya cumplido con el deber de ofrecer
una información completa sobre las ventajas, desventajas y consecuencias del
traslado al régimen de ahorro individual con solidaridad. (…) Así, en el asunto bajo
escrutinio, brilla por su ausencia, los deberes y obligaciones que la jurisprudencia ha
trazado en aquellos casos de traslado entre regímenes, entre los cuales se destaca:
(i) la información que comprende todas las etapas del proceso, desde la antesala de
la afiliación hasta la determinación de las condiciones para el disfrute pensional; (ii)
el deber de proporcionar a sus interesados una información completa y
comprensible, a la medida de la asimetría que se ha de salvar entre un administrador
experto y un afiliado lego, en materias de alta complejidad. (Corte Suprema de
Justicia Sala Laboral, PONENTE CASTILLO CADENA, Expediente No. 17595 del 9 de
septiembre 2017).

De igual forma, en sentencia de agosto de 2018 con ponencia del doctor JORGE
PRADA SANCHEZ, la Sala laboral de la Corte Suprema de Justicia reitera su postura
en relación con las consecuencias que se tienen cuando el fondo privado de
pensiones no demuestra haberle suministrado al afiliado toda la información
necesaria para que pueda tomar una decisión libre y voluntaria. Se destaca dentro
de las consideraciones que tuvo la Corte, las siguientes:

“En verdad, en el expediente no aparece prueba que permita tener por demostrado
que Colfondos S.A. hubiera entregado a la actora información y asesoría en materia
de semanas de cotización, edad, régimen de transición de que gozaba y las
consecuencias de trasladarse al régimen de ahorro individual con solidaridad,
especialmente las perspectivas pensionales, como resultado de la pérdida de esa
garantía, concretamente la edad a la cual adquiriría el derecho, modalidades, monto
de la prestación y semanas de cotización requeridas en el de ahorro individual.
(Corte Suprema de Justicia Sala Laboral, PONENTE JORGE PRADA SANCHEZ,
Expediente No. 55013 de agosto de 2018).

Asimismo, en sentencia del 3 de abril de 2019 con ponencia de la doctora CLARA


CECILIA DUEÑAS QUEVEDO, la Sala laboral de la Corte Suprema de Justicia decidió
CASAR y con ello anular un traslado al Régimen de Ahorro Individual, reiterando la
jurisprudencia de su Sala, bajo las siguientes razones:

“…las administradoras de fondos de pensiones deben suministrar al afiliado


información clara, cierta, comprensible y oportuna de las características,
condiciones, beneficios, diferencias, riesgos y consecuencias del cambio de régimen
pensional y, además, que en estos procesos opera una inversión de la carga de la
prueba en favor del afiliado. Lo anterior, se repite, sin importar si se tiene o no un
derecho consolidado, se tiene o no un beneficio transicional, o si está próximo o no
a pensionarse, dado que la violación del deber de información se predica frente a la
validez del acto jurídico de traslado, considerado en sí mismo. Esto, desde luego,
teniendo en cuenta las particularidades de cada asunto. (Corte Suprema de Justicia
Sala Laboral, PONENTE CLARA CECILIA DUEÑAS QUEVEDO, Expediente No. 68852
del 3 de abril de 2019).

Finalmente, en sentencia del 10 de abril de 2019 con ponencia del doctor GERARDO
BOTERO ZULUAGA, la Sala laboral de la Corte Suprema de Justicia decidió
DECLARAR la ineficacia del traslado del Régimen de Prima Media con prestación
definida al Régimen de Ahorro Individual con solidaridad, pues:

“… queda claro que existirá ineficacia de la afiliación cuando quiera que i) la


insuficiencia de la información afecte los intereses del afiliado en procura de
reivindicar su derecho o el acceso al mismo; ii) no será suficiente la simple
suscripción del formulario, sino el cotejo con la información brindada, la cual debe
corresponder a la realidad; iii) en los términos del artículo 1604 del Código Civil,
corresponde a las Administradoras de Fondo de Pensiones allegar prueba sobre los
datos proporcionados a los afiliados, los cuales, de no ser ciertos, tendrán además
las sanciones pecuniarias del artículo 271 de Ley 100 de 1993, y en los que debe
constar los aspectos positivos y negativos de la vinculación y la incidencia en el
derecho pensional. (Corte Suprema de Justicia Sala Laboral, PONENTE GERARDO
BOTERO ZULUAGA, Expediente No. 56174 del 10 de abril de 2019).

4. PRETENSIONES

Se protejan de forma inmediata mis derechos fundamentales al mínimo vital y


seguridad social.

5. LAS PRUEBAS

DOCUMENTALES

 Historial de Incapacidades
 Historia Clínica

6. EL JURAMENTO:

Manifiesto señor Juez, bajo la gravedad del juramento, que no he interpuesto


otra acción e Tutela por los mismos hechos y derechos aquí relacionados, ni
contra la misma autoridad.

7. LAS NOTIFICACIONES

EL ACCIONANTE: Cualquier comunicación la recibo en la Carrera 13 A # 89-38


Edificio Nippon Oficina 714 Bogotá. Tel 3717336.

LA ACCIONADA: En la Calle 24 # 53 -28

Con respeto,
LUZ STELLA MOTANO OSPINA
C.C No. 41.797.358

Señores
Juzgado de Tutela de Bogotá
Bogotá D.C.
E. S. D.

REF.: Otorgo Autorización.

LUZ STELLA MOTANO OSPINA, mayor, persona identificada como aparece al pie
de mi firma, obrando en mi propio nombre, manifiesto que CONFIERO
AUTORIZACIÓN, A OSCAR JAVIER MARTINEZ SANTANA, mayor, identificado con
la C.C.1.015.435.053, para que radique y revise mi acción tutela, que tiene como
finalidad el amparo a los derechos fundamentales al mínimo vital y a la vida en
condiciones dignas, que considero amenazados por parte : CORTE SUPREMA DE
JUSTICIA –SALA LABORAL

Se suscribe atentamente,

LUZ STELLA MOTANO OSPINA


C.C No. 41.797.358

Acepto,

OSCAR JAVIER MARTINEZ SANTANA


C.C.1.015.435.053

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