El mundo es la totalidad de lo que acaece, divisible en hechos. La unidad mínima de lo
que acaece es el hecho atómico, el cual solo es una combinación de cosas. Las cosas no pueden estar aisladas, pertenecen a los hechos atómicos. Por ello, si se piensa un objeto entonces se piensa sus posibilidades de estar en un hecho atómico. En consecuencia, hechos y objetos son los límites del mundo. El objeto es lo fijo, la configuración de los objetos es lo que varía. Entonces, la configuración de los objetos es lo que forma el hecho atómico. El conocimiento consiste en hacerse figuras de los hechos porque ellas son un modelo de la realidad. La figura está constituida por sus elementos a las cuales pertenecen los objetos. La relación coordinada entre los elementos de la figura y los objetos es la relación figurativa. La figura representa su objeto una posibilidad de la existencia de los hechos atómicos, lo que ella contiene es su sentido. En el acuerdo o desacuerdo con la realidad consiste la verdad o falsedad de la figura, para ello se tiene que compararla con la realidad, es decir, no se sabe a priori su valor.