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RESUMEN DEL HOMBRE MEDIOCRE

José Ingenieros, escritor italoargentino, escribió esta obra maestra la cual le dio la estatura de pensador universal
en el año de 1913, en Buenos Aires.

El nombre del libro es algo engañoso, ya que por los temas que trata podría tener otro nombre ya que describe
las características que distinguen al hombre idealista y al mediocre.

Habla del desarrollo de la personalidad en el hombre, desde un plano psicológico, describiendo las actitudes, que
lo ubican como hombre que por sus ideales puede superarse cuando estudia, piensa y actúa de manera positiva
o si no tiene ideales, no reflexiona, no se supera y carece de valores elevados, se convierte en un hombre
mediocre.

Además, menciona la existencia de un tercer tipo, el hombre normal que es intermedio entre los descritos
anteriormente, en el que sus actitudes la falta de toma de decisiones propias, carente de personalidad, “que se
deja llevar por lo que el destino mande” y cree ciegamente en las fuerzas del destino, que anulan su propia
voluntad.

A continuación, presento menciono las características principales que analiza en el comportamiento del hombre:

 Cuando tienes un ideal y luchas por él, eres capaz de templarte para grandes acciones, pero si lo dejas
apagar, quedarás inerte y serás una bazofia humana. Solo vives por esa partícula de ensueño que te
sobrepone a lo real.
 Los seres cuya imaginación se llena de ideales y cuyo sentimiento polariza su personalidad. Son idealistas.
 Los ideales, entre todas las creencias, representan el resultado más alto de la función de pensar, son un
punto y un momento entre los infinitos posibles que pueblan el espacio y tiempo. Son creencias e influyen
en nuestra conducta, en la medida que los creemos y son modificados por la imaginación, entre más
experiencia tiene la humanidad.
 Experiencia e imaginación siguen vías paralelas, aunque la experiencia va más retardada.
 La imaginación es madre de toda originalidad, deformando lo real hacia su perfección.
 Las ilusiones tienen tanto valor para dirigir la conducta, como las verdades más exactas, son
reconstrucciones imaginativas de la realidad que deviene.
 Carecer de ideales es esclavizarse a las contingencias de la vida práctica inmediata, renunciando a la
posibilidad de la perfección moral, mueren porque son creencias falsas, ilusiones mal forjadas que los
ignorantes persiguen dando manotadas en la sombra. La mediocridad es una incapacidad de tener ideales.
Siempre habrá idealistas y mediocres.
 Todo idealista, es cualitativo, posee un sentido que le permite distinguir entre lo malo que observa y lo
mejor que imagina.
 Los que carecen de ideales, son cuantitativos, pueden apreciar el más y el menos, pero nunca distinguen
lo mejor de lo peor.
 El hábito organiza la rutina y nada crea hacia el porvenir.
 Los prácticos solo aprovechan su esfuerzo, vegetando en la sombra.
 La excesiva prudencia de los mediocres siempre ha paralizado las iniciativas más fecundas.

Concluye el autor que “La democracia, es el menos malo de los malos gobiernos”

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