Вы находитесь на странице: 1из 4

WALTER BENJAMIN

EL AUTOR COMO PRODUCTOR

Walter Benjamin. El autor como produc- Uno de los planteamientos centrales


tor. Traducción y presentación de Bolívar de Benjamin en El autor como productor
Echeverría. México, Editorial Ítaca, 2004. (en el mismo título está sintetizada la te-
sis principal) es que el escritor tiene dos
opciones: ser un simple abastecedor in-

E l autor como productor es un texto


que Walter Benjamin leyó el 27 de abril
telectual, o transformar el medio de pro-
ducción, en este caso hace referencia con-
creta a un periódico, pero plantea su tesis
de 1934 en el Instituto para el Estudio desde la óptica del socialismo de la URSS,
del Fascismo, fundado en París por los en los años treinta, espacio y tiempo en
alemanes expulsados de su país por la que los medios de producción no perte-
persecución nazi. Escrito en lenguaje sen- necían al capital, sino al Estado, por lo
cillo y directo, el documento es de fácil que actualmente resulta totalmente su-
comprensión, no obstante la profundidad perada y anacrónica; no obstante, aun
del tema. Esta lectura es complementaria conserva su vigencia porque en el mun-
de su famoso ensayo La obra de arte en do occidental siguen existiendo los me-
la época de su reproductibilidad técnica. dios periodísticos subordinados al poder
Intenta en este nuevo ensayo dejar atrás económico y político, por lo que ubicán-
su postura anterior un tanto romántica y dose en la época en que lo plantea, el
fundar una nueva estética marxista. mundo occidental simplemente perma-
Walter Benjamin nació en Berlín el nece incólume a pesar de sus tesis. Dice
15 de julio de 1892 y murió (se habla de Benjamin: “En Europa occidental, el pe-
suicidio, pero también de asesinato por riódico no constituye todavía un instru-
agentes de Stalin) en Portbou, ciudad mento de producción eficaz en manos
española en la frontera con Francia, el del escritor. El periódico pertenece toda-
27 de septiembre de 1940. Fue filósofo vía al capital”.1 Otro tema neurálgico es la
y crítico literario marxista judeo-alemán, tendencia y la calidad de la obra literaria
colaborador cercano de la Escuela de y artística.
Frankfurt, y precursor, entre otros, del
materialismo histórico. 1 Walter Benjamin, El autor como productor, p. 32.

227
GRACIELA SÁNCHEZ GUEVARA

La conferencia dirigida a escritores, in- Empieza su discurso Benjamin auxilián-


telectuales y artistas exiliados en Francia, dose de Platón, quien tenía en un concep-
tiene su punto de interés en cuanto la to elevado el poder de la poesía, pero
vigencia del momento del pensamiento la consideraba dañina y superflua. En su
marxista. Seguramente en la actualidad República, Platón les prohíbe a los poetas
hay muy pocos escritores y artistas preo- permanecer en el proyecto de Estado;
cupados por una militancia ideológica Benjamin diserta sobre la autonomía del
referida a las relaciones sociales de pro- poeta (Bolívar Echeverría explica que la
ducción. El mundo ha cambiado. En palabra dichter no se refiere sólo al poe-
tiempos de Benjamin no existía la tele- ta, sino en general engloba al “creador
visión, ni menos el Internet, que hoy en literario”); así que podemos entender
día han desplazado a los periódicos de que considera en general como el escritor
su papel preponderante como medios más “avanzado” (el término puede refe-
informativos de influencia decisiva, pa- rirse al autor de izquierda, socialista,
pel que ha tomado la televisión. Y ésta comprometido) a aquel que reconoce la
es manejada por los grandes capitales alternativa entre su autonomía o adquirir
del mundo, principalmente de Estados un compromiso determinado por los in-
Unidos, que produce más de la mitad de tereses de clase. El autor burgués, dice
la programación circulante en el orbe. Benjamin, no reconoce esta alternativa,
Pero Benjamin dicta su conferencia en pero de cualquier forma trabaja para el
la época en que, no sólo él, sino muchos interés de una clase. El más avanzado, al
marxistas en el mundo veían con ojos op- ponerse al servicio del proletariado, pier-
timistas la buena marcha del socialismo de su autonomía, “como suele decirse, se
en la Unión Soviética, cuando se creía, vuelve un escritor de tendencia”. A partir
con cierta ingenuidad, en un paraíso para de esta consideración el autor plantea un
los trabajadores (intelectuales incluidos), primer binomio: tendencia y calidad.
que se convertirían en los auténticos Para él la calidad de una obra está ga-
dueños de los medios de producción. Si rantizada si la tendencia política es la
el obrero sería dueño de la fábrica en la correcta, porque incluye una tendencia
que trabajaba, el escritor de ciencia, de literaria también correcta. Explica luego
arte, el crítico, todos convergerían en un que debe reclamarse al poeta la tenden-
periódico: “El escenario de esta confusión cia correcta y debe esperarse que su de-
literaria es el periódico”, dijo, y según su sempeño sea de calidad. Acepta que es-
visión, dichos intelectuales serían ade- te binomio es insuficiente mientras no se
más de autores, productores. comprenda la relación entre tendencia y
Tiene toda la razón Bolívar Echeverría, calidad. Y afirma que bien podría decre-
traductor y prologuista de esta obra, tarse que “una obra que presente la ten-
cuando apunta: dencia correcta poseerá necesariamente
La lectura de su texto setenta años toda otra cualidad”. Pero no es un autorita-
después de que fuera escuchado en rio, se niega a decretar tal afirmación, pues
París resulta, sin duda, extraña. Sobre ésta debe ser demostrada, y se ocupa de
todo porque lleva al lector a sorprender ello. La tendencia de una obra, explica,
a la utopía en el momento en que ella
“sólo puede ser acertada cuando es tam-
cree estar realizándose.

228 FUENTES HUMANÍSTICAS 37 MIRADA CRÍTICA


MIRADA CRÍTICA

bién literariamente acertada. Es decir, que Explica luego que si antes afirmó que
la tendencia política correcta incluye una la tendencia política correcta implica la
tendencia literaria”.2 calidad de la obra, pues incluye su ten-
Es un debate estéril, reconoce el autor, dencia literaria, ahora puede precisar que
pero prefirió empezar por éste y no por esa tendencia literaria puede consistir
otro más antiguo, aunque menos estéril, en un progreso o en un retroceso de la
que es el que trata sobre la relación entre técnica literaria.
el contenido y la forma, segundo bino- Más adelante vuelve a la inquietud
mio, especialmente en la literatura de in- inicial: “el lugar del intelectual en la lucha
tención política. de clases sólo puede establecerse –o
Sobre este asegura que es un problema mejor: elegirse– con base en su ubicación
que se encuentra desacreditado con toda dentro del proceso de producción”.
razón, pues se usa como ejemplo esco- Refiere que para hablar de la trans-
lar, pero se pregunta: “¿qué decir del tra- formación de las formas e instrumentos
tamiento dialéctico de esa misma cues- de producción “en el sentido de una in-
tión?”. Nada se puede hacer con ella si telectualidad progresista”, Bertolt Brecht
no se analiza en el conjunto vivo de las elaboró el concepto de refuncionaliza-
relaciones sociales de producción. Dado ción. “Él fue el primero en plantear a
que se presta a malas interpretaciones, los intelectuales esta exigencia de gran
Benjamin propone al auditorio, en lugar alcance: no abastecer al aparato de pro-
de preguntar cuál es “la actitud de la ducción sin transformarlo al mismo tiem-
obra” (sic) frente a las relaciones sociales po, en la medida de lo posible, en el sen-
de producción, si dicha obra “¿está de tido del socialismo”.6
acuerdo con ellas, es reaccionaria, o tien- Benjamin, por su parte, inicia sus con-
de a su superación, es revolucionaria?”.3 sideraciones sobre la “nueva objetividad”
Antes de esta pregunta debe ir otra: “¿cuál así: “abastecer un aparato sin transfor-
es la actitud de una obra frente a las relacio- marlo en la medida de lo posible es un
nes de producción de la época?”.4 Estas procedimiento sumamente impugnable
preguntas apuntan hacia la técnica litera- incluso cuando los materiales con los
ria de la obra misma. que se abastece parecen ser de naturale-
Dice Benjamin: za revolucionaria”.7
Lamenta que en el decenio anterior
El concepto de técnica ofrece al mismo en Alemania el aparato burgués de pro-
tiempo el punto dialéctico inicial a partir ducción tuviera la capacidad de generar
del cual es posible superar la oposición cantidades enormes de productos revolu-
estéril entre forma y contenido. Este cionarios sin por eso tambalearse, ni po-
concepto de técnica contiene además
ner en peligro la propiedad de los medios
la indicación que permite determinar
de producción. Esto sucede, dice mientras
de manera correcta la relación entre
el aparato de producción siga siendo
tendencia y calidad.5
abastecido por “rutineros”, aunque estos
2 Ibid., p. 22.
3 Ibid., p. 24.
4 Loc. cit. 6 Ibid., p. 38.
5 Ibid., p. 25. 7 Ibid., pp. 38-39.

FUENTES HUMANÍSTICAS 37 MIRADA CRÍTICA 229


GRACIELA SÁNCHEZ GUEVARA

sean “rutineros revolucionarios”. Define consumo”.10 Agrega que: “Su función es,
al “rutinero” como: en lo político formar capillas y no partidos;
en lo literario, crear modas y no escuelas;
el hombre que renuncia básicamente a en lo económico preparar servidores y
introducir en el aparato de producción no productores […] Evadió así la tarea
innovaciones dirigidas a volverlo ajeno más urgente del escritor contemporáneo:
a la clase dominante y favorable al so- comprender lo pobre que es y lo pobre
cialismo. Afirmó además, que una parte
que tiene que ser para poder comenzar
considerable de la literatura llamada
desde el principio”.
de izquierda no ha tenido otra función
social que la de extraer de la situación Benjamín vuelve al principio y rema-
política cada vez nuevos efectos para el cha que:
entretenimiento del público. Llegó así
al caso de la “nueva objetividad.8 La mejor tendencia es falsa si no inclu-
ye el ejemplo de la actitud con la cual
Para explicarlo ejemplifica con la foto- es posible seguirla […] La tendencia es
la condición necesaria pero nunca la
grafía, cuya técnica vale también para la
condición suficiente de la función orga-
literatura. Dice que la fuerza revoluciona- nizadora de la obra. Ésta exige además
ria del dadaísmo estaba en poner a prue- que el escritor tenga un comportamien-
ba la autenticidad del arte, bastaba una to capaz de orientar e instruir […] Un
serie de objetos enmarcados. “El más autor que no enseña nada a los escrito-
pequeño trozo auténtico de la vida co- res, no enseña a nadie.11
tidiana (el marco) dice más que la pintura”.
Y si en un libro están las huellas de sangre Así subraya su idea de literatura y de
de un asesino, esto dice más que lo es- tendencia correcta, planteando que con
crito. La fotografía en la portada de un base en el trastorno de la técnica se gana
libro lo puede convertir en un instrumento una conciencia y se alcanza la tendencia
político, señala: “Lo que debemos exigir correcta, preocupación medular de este
del fotógrafo es la posibilidad de dar a su pensador de principios del siglo pasado y
placa una leyenda capaz de sustraerla del que, a pesar de los más de setenta años
consumo de moda y de conferirle un va- de haber leído su ponencia, no pudo ver
lor revolucionario”.9 cristalizado su ideal, al contrario, el ca-
Acerca de la “nueva objetividad” como pitalismo voraz se alejó diametralmente
movimiento literario, ésta convirtió la lu- de poderse llevar a cabo, y quedó sólo
cha contra la miseria en un objeto de con- como una utopía más en la época en que
sumo, en objeto de distracción, diversión. ya murieron todas las utopías.
“Lo característico de esta literatura con- A pesar del tiempo, Walter Benjamin es
siste en convertir la lucha política, de una un autor que por su profundidad filosófica
exigencia a tomar decisiones, en un objeto debe ser leído
de satisfacción contemplativa; de un me-
dio de producción, en un artículo de Graciela Sánchez Guevara
Universidad Autónoma de la Ciudad de México

8 Ibid., pp. 39-40. 10 Ibid., p. 49.


9 Ibid., p. 42. 11 Loc. cit.

230 FUENTES HUMANÍSTICAS 37 MIRADA CRÍTICA

Вам также может понравиться