Вы находитесь на странице: 1из 3

JAVIER HERAUD, EL POETA LECTOR1

Por: Francisco Sarmiento Cerquin


Javier Heraud, admiraba a Antonio Machado y, al igual que el poeta de Campos de
Castilla quien devoraba casi desesperadamente libros, cada vez más y más libros, Javier
también fue un gran lector.
Con esta breve introducción abrimos las páginas para hablar de Javier Heraud el poeta
lector.
A Javier lo sabemos poseedor de una gran cultura, en el sentido del conocimiento de las
cosas y del mundo. Su padre en "Javier Heraud; Nueva años después", entrevista que
hiciera el reconocido periodista César HiIdebrant en: Caretas, Lima, Año XXII, N° 457, 22
de mayo de 1972, pág 43 habla de Javier y dice recordar a su hijo como "... un mozo de
un metro ochentaitantos de tamaño, de unos pies de 47 ó 48, con unas manos grandes.
Era bien plantado, buen mozo, valiente, coquetón (...) De niño era muy inquieto, no
estaba sentado un minuto en su sitio. Era nervioso, profundamente lector. Fíjese: yo he
sido taquígrafo de la Cámara más de 30 años y cuando venía de la Cámara a las dos, tres
de la mañana, tenía que quitar la luz general de la casa porque Javier estaba leyendo
hasta asa hora» Y al día siguiente, para que fuera al colegio, había que despertarlo. Yo
le llamaba 'traga libros', se los devoraba, Todo leía. Comenzó a leer mi colección de
'Amauta' cuando estaba en cuarto o quinto de primaria.
En la universidad se le recuerda como aquel joven siempre en busca de información.
Encontrar a Javier Heraud como el mejor poeta de su generación, no es sólo por su
gran sensibilidad, sino también porque conoció y leyó a grandes autores y grandes
obras. Según dicen tenía un libro en todos los lugares de su casa; en la mesa familiar,
en el baño...etc. Vivía a más revoluciones que la gente normal. Esto hizo de él un gran
hombre, como dice su coetáneo y hoy también fallecido Manuel Ibáñez Rosazza en su
artículo "Javier Heraud el lector" En: Pallay Revista del INC, Cajamarca, Año II N°2, agosto
de 1939, pág 41; compartió una brevísima amistad con Heraud y lo recuerda como ". . .
un notable estudiante y un lector constante Javier verdaderamente amaba sus libros.
Ellos fueron tallando también su cultura y su sensibilidad. Ellos le ayudaron a madurar a
una edad temprana. Y no sólo leyó libros del área poética sino también otro tipo de
volúmenes, por ejemplo pertenecientes a Historia, Economía, Filosofía, Política".
Su brillante ingreso a la Universidad Católica se debió a su lectura: Sorprendió al Dr. Raúl
Porras Barrenechea en al examen oral, quien al ver que, en el escrito había respondido
a la pregunta de ¿Qué libros había leído Ud.? Algo de ochenta títulos de libros. El Dr.
Porras Barrenechea fue en busca de la verdad. Le pareció algo exagerado al responder,
era un joven de 16 años y no podía ser verdad lo dicho por él. Lo comprobaría en la
prueba oral, Efectivamente, Javier es interrogado acerca del contenido de los libros y

1
Texto extraído de “Análisis literario e ideológico de la obra poética de Javier Heraud Pérez”, tesis
presentada para optar el título de Profesor de Educación Secundaria, especialidad de Lengua y
Literatura.
responde a cada una de las preguntas en forma correcta. El Dr. Raúl Porras Barrenechea
lo felicitó y manifestó su admiración por tan brillante examen.
Francisco Carrillo, profesor de Javier Haraud en el colegio Markham, en la revista N° 76
Harawi con el título de "Efectivamente era poeta” (citado per Cecilia Haraud (1989: 43)
en Vida y muerte de Javier Heraud (Recuerdos, testimonios y documentos) dice:
"Javier fue mi alumno en el Markham en 1957. Yo era su profesor de literatura y de
Historia de la Cultura del Perú. Lo recuerdo como excelente alumno en cosas de estudio
pero más generoso colaborador de sus compañeros. Yo exigía en el curso y solía llevar
como ejercicio una serie de citas de poetas o prosadores clásicos españoles. Debían
decir quién era el autor y dar tres razones que justificaran la autoría. Javier siempre
acertaba se ponía de pie, miraba a sus compañeros como pidiendo disculpas y respondía
(…) Lo recuerdo también haciendo deporte y preguntando sobre libros peruanos o
poetas españoles. Pedía libros prestados y los devolvía caballerosamente. Hacía breves
explicaciones de tal autor, muy personales y remataba sus comentarios diciendo ¿no le
parece?, Y no sé por qué me parecía extraño que leyera en inglés a los poetas ingleses o
norteamericanos".
Verdaderamente, en sus poemas hace alusión a poetas y autores ingleses como William
Shakespeare y T.S. Eliot. Igualmente, a John Keats, el poeta romántico del siglo XVIII.
Ahora, veremos algunos versos en donde se nota sus lecturas de poetas y otros autores.
Mi cuarto es el
de todos
es decir,
con su lamparín que
me permite reír
al lado de Vallejo
que me permite ver
la luz eterna de Neruda.
(Mi casa)
Partí hace ya
un año.
Todo podría negarlo
ahora
no sé si he nacido,
no sé si he leído
alguna vez un libro
habré tal vez hojeado
un verso de Salinas
que hoy quiero olvidar.
(El Poema)
Los días volaron
raudamente
estuve sentado
leyendo

te conozco Antonio,
con tu torpe aliño indumentario
y si verbo en tu boca como
un manantial helado.
Últimamente
he estado leyendo
hasta al alba
blancos poemas de sed y
castigo.
(Poema para Antonio Machado)

Tengo que dormir toda la


tarde,
levantarme a las siete,
comer mi pan con mantequilla,
leer a Keats y Machado
y continuar mi lectura
de Proust entre las horas

(No busco el tiempo


recobrado y lo pierdo
cada tarde entre tus libros) .

(Estación del desencanto)

Вам также может понравиться