Вы находитесь на странице: 1из 16

UNIVERSIDAD ANDINA DEL CUSCO

CARRERA PROFESIONAL DE ENFERMERÍA

MONOGRAFÍA DE VARICELA

Curso :

Estudiante : Haydee Rojas Fernández

Docente :

Cusco – Perú

2019
CONTENIDO

INTRODUCCIÓN ............................................................................................... 3
1 VARICELA ............................................................................................... 4
1.1 Historia..................................................................................................... 4

1.2 Naturaleza de la varicela ......................................................................... 4

1.3 Diagnóstico .............................................................................................. 6

1.3.1 Diagnóstico Diferencial ............................................................... 7

1.4 Proceso de Transmisión .......................................................................... 8

1.4.1 ¿Cuándo es contagiosa una persona? ....................................... 8

1.4.2 Contagio ...................................................................................... 9

1.5 Prevención ............................................................................................... 9

1.5.1 Inmunización activa: vacuna antivaricela .................................. 10

1.5.2 Inmunización pasiva: inmunoglobulina ...................................... 11

1.6 Tratamiento............................................................................................ 11

CONCLUSIONES............................................................................................. 15
BIBLIOGRAFÍA ................................................................................................ 16

2
INTRODUCCIÓN

La varicela es una infección causada por el virus de la varicela zoster. La mayoría


de los casos se da en niños menores de 15 años de edad, pero también puede
observarse en niños más grandes y adultos. Se disemina muy fácilmente de una
persona a otra.

El síntoma más típico de esta enfermedad es una molesta erupción en la piel


que causa picazón. Esta erupción, se transforma en ampollas con líquido que
luego forman costras. Generalmente, aparece en la cara, pecho, espalda y luego
se extiende al resto del cuerpo. Otros síntomas pueden incluir:

Fiebre, dolor de cabeza, cansancio, falta de apetito.

La enfermedad suele ser leve y dura de 5 a 10 días. Las cremas y lociones con
calamina y baños de avena pueden ayudar con la picazón. El acetaminofén
puede ayudar a tratar la fiebre. No tome aspirina. La combinación de este
medicamento con la varicela puede causar el síndrome de Reye.

Algunas veces, la varicela, causa problemas serios. Los adultos, bebés,


adolescentes, embarazadas y aquellos con sistemas inmunes debilitados suelen
padecer casos más graves. Quizás necesiten tomar medicamentos antivirales.

Generalmente, una vez que se adquiere varicela, el virus permanece en el


cuerpo aún después de haber sanado. Probablemente no tendrá varicela otra
vez, pero el virus puede causar culebrilla en los adultos. Una vacuna contra la
varicela puede ayudar a prevenir la mayoría de los casos o hacerlos menos
severos.

3
1 VARICELA
1.1 Historia
Existe evidencia de que la varicela ya era reconocida hace más de 2 000 años
en la antigua Babilonia. A comienzos del siglo XVI, Giovanni Filippo, médico
italiano, describió esta enfermedad y la distinguió de la fiebre reumática. En
1694, Richard Morton, médico inglés, creía que esta enfermedad era una forma
leve de la viruela, y la denominó varicela. En 1767, el médico inglés William
Heberden distinguió ambas enfermedades como diferentes, estableciendo los
criterios diagnósticos para diferenciarlas. Sin embargo, por un tiempo persistió
algún grado de confusión entre ambas enfermedades. En 1875, Johann Steiner
demostró que la varicela era una enfermedad infecciosa, al reproducirla
inoculando niños con fluido perteneciente a un paciente con la enfermedad. En
1892, János Bókay de Bóka (1858-1937), profesor húngaro, sugirió que el virus
que produce la varicela es el mismo que produce el herpes zóster, al observar
un grupo de personas que desarrollaban varicela al exponerse a pacientes con
herpes zóster. Esta hipótesis fue reforzándose en el siglo XX mediante la
observación de las células de la piel enferma, la comparación de la respuesta
inmunológica y el uso del microscopio electrónico para observar las partículas
virales presentes, demostrándose coincidencia para ambas enfermedades. En
definitiva, el uso de técnicas de enzimas de restricción y secuenciación de ADN
permitió reconocer el mismo agente viral como productor de ambas
enfermedades: varicela y herpes zóster.

1.2 Naturaleza de la varicela


La varicela es una enfermedad febril exantemática muy contagiosa que
comienza con fiebre, seguida de exantema maculopapular pruriginoso,
rápidamente progresivo que evoluciona en 5-7 días a vesículas, pústulas y
costras. Las lesiones aparecen inicialmente en cabeza, cara y tronco superior y
se extienden centrifugamente hacia el resto del cuerpo, coexistiendo
simultáneamente lesiones en diferentes fases de maduración.

Tras la infección primaria, el virus queda acantonado en los ganglios raquídeos


de la médula espinal o de los pares creaneales, pudiendo reactivarse
posteriormente y dar lugar a lo que se conoce como herpes zóster. En niños
sanos la varicela es una enfermedad habitualmente leve y autolimitada. La

4
enfermedad es más grave en lactantes y en adultos, especialmente en personas
con inmunosupresión y enfermedades crónicas. Entre las complicaciones se
incluyen: neumonía, encefalitis, ataxia cerebelosa, síndrome de Reye y
sobreinfecciones bacterianas de las lesiones cutáneas.

En el 0,4%-2% de los fetos de mujeres infectadas por el Virus de la Varicela


Zóster, durante el primer y segundo trimestre de embarazo, desarrollan un
síndrome de varicela congénita, caracterizado por embriopatías como hipoplasia
de una extremidad, cicatrices cutáneas, encefalitis, microcefalia, anormalidades
oculares, retraso mental y bajo peso al nacer, con elevada letalidad. Los niños
nacidos de mujeres que desarrollan varicela durante los cinco días antes del
parto o dos días después del mismo tienen riesgo de padecer varicela neonatal,
que suele ser muy grave e incluso mortal.

La infección durante el segundo o tercer trimestre de embarazo puede dar lugar


al desarrollo de herpes zóster en el niño con lesiones cutáneas y, con menor
frecuencia, coriorretinitis. El agente causal es el Herpesvirus humano 3 (alfa),
también conocido como Virus de la VaricelaZoster (VVZ). El VVZ causa dos
enfermedades distintas: la varicela, producida por la infección primaria, tras la
cual los virus quedan acantonados en los ganglios sensitivos de las raíces
dorsales de la médula espinal, pudiendo dar lugar más adelante, cuando el virus
se reactiva, al herpes zóster.

El único reservorio del VVZ es el hombre. La varicela es una enfermedad


altamente trasmisible (tasa de ataque secundaria del 90%), transmitida por vía
aérea o por contacto directo con el líquido vesicular de las lesiones cutáneas (de
la varicela y del herpes zóster). Estas lesiones dejan de ser infecciosas cuando
se convierten en costras. El periodo de incubación es de 14 a 16 días (rango 10-
21 días), pero puede ser más prolongado en pacientes inmunocomprometidos o
que han recibido inmunoglobulina frente a la varicela-zoster.

La transmisión de la varicela comienza 1-2 días antes de la aparición del


exantema y dura hasta que todas las lesiones están en fase de costra, 5-6 días
después del inicio del exantema. Los pacientes inmunocomprometidos pueden
ser contagiosos más tiempo. La susceptibilidad es universal y la infección natural
se considera que confiere inmunidad de larga duración, aunque se han

5
observado casos de reinfección por el virus, más frecuentes en personas
inmunocomprometidas.

1.3 Diagnóstico
El diagnóstico de la varicela generalmente no representa un desafío clínico. El
exantema característico y el antecedente epidemiológico de una exposición
reciente permiten el diagnóstico oportuno (3). Sin embargo, existen métodos de
laboratorio que permiten realizar el diagnóstico de certeza, los que podrían ser
especialmente útiles en pacientes con clínica atípica (como el caso de los
pacientes vacunados o inmunocomprometidos), para realización de estudios o
para determinar la vulnerabilidad en pacientes de riesgo en que no se conocen
antecedentes para realizar vacunación. Dentro de los exámenes útiles contamos
con:

- Reacción en cadena de la polimerasa (Polymerase chain reaction, PCR)

La PCR se considera actualmente el método más sensible y especifico. La PCR


en tiempo real proporciona de manera rápida y sensible la confirmación de VZV
a partir de muestras clínicas obtenidas de lesiones de la piel y fluidos corporales
seleccionados, tales como líquido cefaloraquideo y el lavado broncoalveolar. En
comparación con técnicas de cultivo convencionales permite la rápida
amplificación viral, disminuye los riesgos de contaminación, confiere sensibilidad
superior en aislar VZV y proporciona tiempo de respuesta más rápido

- Inmunofluoprescencia con anticuerpos directos:

Permite el diagnostico de la infección por VZV, con menor costo y mayor rapidez
que el cultivo viral. Se deben tomar muestras de lesiones tipo vesícula intacta.

- Cultivo viral

La detección del VZV en cultivos es un método de diagnóstico de certeza, sin


embargo es menos útil que otras pruebas debido al tiempo que es necesario
para confirmar el diagnóstico y su baja sensibilidad y rendimiento (60 a 75%
aproximadamente) en comparación con PCR.

- Serología

6
Se basa en la pesquisa de IgG contra VZV, que se correlaciona con historia de
varicela anterior. Se utiliza como método para pesquisar susceptibilidad de
infección en personal de salud en que no se tenga clara historia de enfermedad
y que estén expuestos a riesgo de infección. También se ha utilizado para
evaluar respuesta inmunológica posterior a la vacunación (14,15).

- Citología

Se puede observar el efecto citopático que tiene la infección por VZV a través
del test de Tzanck. Este, se ha utilizado para realizar el diagnostico de
infecciones por herpes simple y VZV. A pesar de que es un examen simple y de
bajo costo, requiere personal entrenado (operador dependiente) y ha
demostrado ser poco específico y sensible, no logrando distinguir VZV de otros
herpes virus.

1.3.1 Diagnóstico Diferencial


El diagnóstico diferencial, principalmente, debe hacerse con otras infecciones
virales. Son ejemplos, la infección diseminada por el virus del herpes simple en
enfermos con dermatitis atópica y las lesiones vesiculopapulosas diseminadas
que algunas veces acompañan a las infecciones por virus Coxsackie, Echovirus
o al sarampión atípico.

La diferencia radica en que las lesiones por estos virus son con mayor frecuencia
morbiliformes y de composición hemorrágica, en comparación con las lesiones
de la varicela que son típicamente vesiculosas o vesiculopustulosas.

En cuanto a otras especies, la que puede imitar lesiones parecidas a la varicela


son las rickettsia, organismos intracelulares obligadas que filogenéticamente
ocupan el espacio entre bacteria y virus, los cuales pueden generar cuadros
exantemáticos. Pero por lo general son fáciles de diferenciar al encontrar la
"mancha precursora" en el sitio de la picadura de artrópodos (huésped de
rickettsia), así como por la presencia de una cefalalgia más intensa. Las pruebas
serológicas también son útiles para diferenciar entre ricketsiosis pustulosa y
varicela.

Las lesiones vesiculosas unilaterales distribuidas en un dermatoma deben llevar


pronto al diagnóstico de herpes zoster, aunque se han descrito casos de zoster

7
sin exantema. Tanto las infecciones por virus del herpes simple como las
causadas por virus Coxsackie pueden producir lesiones vesiculosas en un
dermatoma.

En tales casos, los estudios de diagnóstico virológico y la tinción fluorescente


con anticuerpos monoclonales de muestras cutáneas por raspado resultan útiles
para lograr el diagnóstico correcto. En la fase prodrómica del herpes zoster, el
diagnóstico puede ser extraordinariamente difícil y se establece sólo cuando
aparecen las lesiones o mediante estudios serológicos retrospectivos.

1.4 Proceso de Transmisión


La varicela es una enfermedad muy contagiosa causada por el virus de la
varicela-zóster. Este virus se transmite fácilmente de personas con varicela a
otras que nunca han tenido la enfermedad o que no se han vacunado. El virus
se propaga principalmente al tocar o inhalar las partículas del virus proveniente
de las ampollas de la varicela y, posiblemente, a través de diminutas gotitas que
llegan al aire cuando las personas infectadas respiran o hablan, por ejemplo.

El virus de la varicela-zóster también causa culebrilla. La varicela se puede


transmitir de personas con culebrilla a otras que nunca han tenido varicela o que
no se han vacunado contra la varicela. Esta transmisión puede suceder si una
persona toca o inhala el virus de las ampollas de la culebrilla. En estos casos, a
la persona expuesta le puede dar varicela, pero no culebrilla.

1.4.1 ¿Cuándo es contagiosa una persona?


Una persona con varicela puede transmitir la enfermedad desde 1 a 2 días antes
de que le brote el sarpullido hasta que todas las ampollas de la varicela hayan
formado costras (por lo general en 5 a 7 días).

Pueden pasar unas 2 semanas (de 10 a 21 días) después de la exposición a un


enfermo con varicela o culebrilla para que la persona expuesta presente varicela.

Si una persona vacunada contra la varicela contrae esta enfermedad, también


se la puede transmitir a otros.

La mayoría de las personas que contraen varicela una vez quedan inmunes de
por vida. Sin embargo, algunas personas pueden contraer varicela más de una
vez, aunque esto no es común.

8
1.4.2 Contagio
La varicela es contagiosa desde aproximadamente dos días antes de que
aparezca la erupción hasta que todas las ampollas desarrollen costra. Si su hijo
tiene varicela, es importante que no asista a la escuela hasta que las ampollas
estén secas, lo que generalmente ocurre en una semana. Si usted no está
seguro de si su hijo puede regresar a la escuela, consúltelo con su médico.

La varicela es muy contagiosa; la mayoría de los niños cuyos hermanos han


tenido varicela también la padecen (si todavía no tuvieron la enfermedad o no
recibieron la vacuna correspondiente) y presentan síntomas dos semanas
después de que su hermano los ha presentado. Para evitar que el virus se
propague, asegúrese que sus hijos se laven las manos frecuentemente, en
particular antes de comer y después de ir al baño. Si su hijo tiene varicela,
manténgalo lo más alejado posible de los hermanos que no estén vacunados.

Las personas que no hayan contraído varicela o recibido la vacuna


correspondiente también pueden contraerla de una persona que tenga culebrilla,
pero no pueden contraer culebrilla. Esto se debe a que la culebrilla solamente
puede desarrollarse a partir de una reactivación del virus varicela zóster en una
persona que haya tenido varicela previamente.

1.5 Prevención
La mejor forma de prevenir la varicela es vacunándose contra esta enfermedad.
Los niños, los adolescentes y los adultos deben recibir dos dosis de la vacuna
contra la varicela.

La vacuna contra la varicela es muy segura y eficaz para prevenir la enfermedad.


La mayoría de las personas que reciben la vacuna no contraerán varicela. Por lo
general, si una persona vacunada contrae varicela, esta es leve, con menos
puntos rojos o ampollas, y poco o nada de fiebre. La vacuna contra la varicela
previene casi todos los casos graves de la enfermedad.

Para obtener más información sobre la vacuna contra la varicela, lea la


sección Vacunación (en inglés).

9
En cuanto a las personas expuestas a la varicela, llame a un proveedor de
atención médica si la persona que estuvo expuesta:

 Nunca ha tenido varicela y no se ha vacunado contra esta enfermedad.

 Está embarazada.

 Tiene el sistema inmunitario debilitado debido a una enfermedad o a


medicamentos; por ejemplo:

o personas con VIH/sida o cáncer,

o pacientes que han recibido trasplantes, y

o personas que están recibiendo quimioterapia, medicamentos


inmunodepresores o que han usado esteroides por bastante
tiempo.

Los médicos recomiendan que los niños reciban la vacuna contra la varicela a
los 12 a 15 meses de vida y que reciban una vacuna de refuerzo a los 4 a 6 años
de edad. La vacuna tiene alrededor de un 70% a 85% de efectividad en la
prevención de una infección leve y, más de un 95% de efectividad en la
prevención de formas moderadas o graves de la infección. Por lo tanto, aunque
algunos niños que recibieron la vacuna contraerán varicela de todas maneras,
los síntomas suelen ser mucho más leves que los de los niños que no han sido
vacunados y contraen la enfermedad.

Los niños sanos que han padecido varicela no necesitan la vacuna,


generalmente cuentan con protección de por vida contra la enfermedad.

1.5.1 Inmunización activa: vacuna antivaricela


La vacuna frente al virus varicela-zóster es una vacuna de virus vivos atenuados
que se desarrolló en Japón en los años 70 del siglo XX, aunque no fue autorizada
hasta la siguiente década. Todas las vacunas comercializadas en la actualidad
proceden de la cepa Oka, llamada así porque fue aislada de las vesículas de un
niño de 3 años con ese apellido. Es una vacuna muy eficaz, especialmente frente
a las formas más graves de varicela. En aproximadamente un 5% de los

10
vacunados puede aparecer una leve erupción varicelosa, con muy pocas
lesiones, dos o tres semanas después de la vacunación.

La vacuna antivaricela fue introducida en el calendario vacunal de Estados


Unidos en 1995 para niños a partir de los 12 meses de edad. Posteriormente
otros países siguieron el ejemplo, como Canadá, Australia o Alemania. En otros
países, como España en 2005, se ha optado por vacunar entre los 10-14 años
de edad a los niños que no han pasado la varicela. La vacuna también es útil
para evitar o reducir la enfermedad en las personas susceptibles que han estado
expuestas al virus, si se administra en los 3 primeros días tras el contacto.5 La
vacuna no es aplicable para quienes la han padecido y pretenden evitar
segundas y sucesivas reapariciones (Herpes Zoster o Culebrilla). Se está
experimentando con otra vacuna que sería útil para estos casos.

1.5.2 Inmunización pasiva: inmunoglobulina


La inmunoglobulina antivaricela, administrada por vía intramuscular, se emplea
para prevenir la enfermedad en grupos de alto riesgo que han tenido contacto
con un enfermo de varicela y que no pueden recibir la vacuna, como
embarazadas, inmunodeprimidos o recién nacidos cuyas madres no han pasado
la varicela.

1.6 Tratamiento
Medidas generales

En niños sanos suele ser suficiente con una serie de medidas para aliviar los
síntomas. Para la fiebre se emplea el paracetamol, evitando siempre la aspirina
(ácido acetilsalicílico), cuyo empleo para la varicela se asocia al síndrome de
Reye. Con carácter general se desaconseja el uso de ibuprofeno en niños con
varicela por la posibilidad de una predisposición a infecciones oportunistas. En
un estudio de casos y controles se ha relacionado el uso de ibuprofeno en niños
con varicela con una probabilidad mayor de aparición de fascitis necrotizante;3
mientras que ciertos estudios prospectivos no han encontrado evidencias de tal
asociación.4 El prurito puede aliviarse mediante lociones antipruriginosas o con
antihistamínicos orales, talcos de coloides, o loción de calamina. Otras medidas
que ayudan a evitar lesiones por rascado e infecciones de la piel son cortar todas

11
las uñas y un baño diario con un jabón suave. (El baño debe ser corto para no
favorecer la aparición de más ampollas).

Es importante aislar al enfermo durante la fase contagiosa de aquellas personas


que no han pasado la enfermedad, en especial de las de mayor riesgo (adultos,
adolescentes, embarazadas o inmunodeprimidos). Aunque tradicionalmente en
muchos sitios se recomienda facilitar el contagio de los niños para evitar que la
contraigan cuando sean mayores, no hay que olvidar que la varicela, aunque
generalmente benigna, puede dar lugar a complicaciones graves.

Antivirales o antivíricos

Como tratamiento específico frente al virus de la varicela-zoster puede


emplearse el aciclovir, que dificulta la replicación del virus, acortando la
recuperación del paciente con escasos efectos secundarios. En niños sanos
menores de 14 años el aciclovir tiene un efecto muy limitado, por lo que no suele
utilizarse. En cambio, en los pacientes de más riesgo (adultos, adolescentes e
inmunodeprimidos) disminuye notablemente la intensidad de la varicela y el
riesgo de complicaciones siempre que se comience a utilizar pronto,
preferiblemente en las primeras 24 horas desde la aparición de la erupción.

El tratamiento con aciclovir tiene por indicación absoluta a la paciente


embarazada, a los inmunodeprimidos y otros con riesgo particular de desarrollar
complicaciones (ej. neumópatas crónicos por la posibilidad de padecer
una neumonía por el virus). Los pacientes adolescentes y adultos en general,
excluidos esos grupos, pueden obtener un beneficio más bien discreto.

La varicela es causada por un virus, por lo que el médico no recetará antibióticos.


Sin embargo, es posible que se requieran antibióticos si las heridas se infectan
con bacterias. Esto ocurre con bastante frecuencia entre los niños, ya que
generalmente se rascan o tocan la zona de las ampollas.

El médico puede recetar aciclovir, un medicamento antiviral, a las personas con


varicela que corren el riesgo de tener complicaciones. El fármaco,
cuyafunción es disminuir la gravedad de la infección, debe administrarse durante
las primeras 24 horas a partir de la aparición de la erupción. El aciclovir puede
tener ciertos efectos secundarios, por ello, sólo se recomienda

12
su administración cuando sea necesaria. Su médico puede indicarle si el
medicamento es adecuado para su hijo.

Cómo lidiar con las molestias de la varicela

Qué puede hacer para aliviar la comezón, la fiebre y otras molestias que produce
la varicela:

 Use compresas húmedas frías o prepare baños en agua fría o templada


cada tres o cuatro horas durante los primeros días. Los baños de avena,
disponibles en supermercados y farmacias, pueden ayudar a aliviar la
comezón. (Los baños no hacen que la erupción se propague).

 Seque el cuerpo suavemente sin frotar.

 Aplique loción de calamina en las áreas con comezón (pero no la aplique


en el rostro, especialmente cerca de los ojos).

 Prepare comidas frías, blandas y fáciles de digerir, ya que la varicela en


la zona de la boca puede dificultar comer y beber. Evite ofrecer a su
hijo alimentos que sean muy ácidos o salados, como el jugo de naranja o
los pretzels.

 Pregunte a su médico o al farmacéutico acerca de las cremas para aliviar


el dolor que se pueden aplicar en las heridas del área genital.

 Déle a su hijo con acetaminofeno regularmente para aliviar el dolor si tiene


ampollas en la boca.

 Pregúntele al médico sobre otros medicamentos de venta libre que alivien


la comezón.

Nunca use aspirina para bajar la fiebre o disminuir el dolor en niños con varicela,
ya que la aspirina ha estado asociada con una enfermedad grave conocida como
el síndrome de Reye, la cual puede producir insuficiencia hepática e incluso la
muerte.

En la mayor medida posible, evite que su hijo se rasque. Quizás, esto sea difícil
para su hijo; por eso, usted puede cubrir las manos de su hijo con guantes o
medias para evitar que se rasque mientras duerme. Además, puede cortarle las

13
uñas y mantenerlas limpias para disminuir los efectos por haberse rascado,
incluidas las ampollas abiertas y la infección.

La mayoría de las infecciones de varicela no requieren tratamiento médico


especial. Pero algunas veces, surgen problemas. Llame al médico en caso de
que su hijo tenga lo siguiente:

 fiebre que dure más de cuatro días o ascienda a más de 102° F (38.8° C)

 tos severa o dificultad para respirar

 áreas de erupción que supuren pus (un líquido espeso e incoloro) o que
se tornen rojas, doloridas, hinchadas y calientes

 dolor de cabeza intenso

 mareos inusuales o dificultad para despertarse

 dificultad para poder ver luces brillantes

 dificultad para caminar

 confusión

 aspecto de enfermo o vómitos

 cuello rígido

Llame a su médico si cree que su hijo tiene varicela, si tiene preguntas o si está
preocupado por una posible complicación. El médico puede orientarlo en el
reconocimiento de complicaciones y en la selección de medicamentos que
alivien la comezón.

Cuando lleve a su hijo al médico, avise con anterioridad que es posible que su
hijo tenga varicela. Esto es importante para evitar que otros niños en el
consultorio estén expuestos al virus; para algunos de ellos, estar expuestos a la
varicela puede causar graves complicaciones.

14
CONCLUSIONES

- La varicela, aunque habitualmente es una enfermedad autolimitada, no


siempre es benigna y, en cualquier caso, supone un sufrimiento para el niño
y su familia.
- En el 5-7 % de casos de varicela en sujetos sanos se observan distintos tipos
de complicaciones (infecciones cutáneas y/o de tejidos blandos, infecciones
respiratorias, altas y bajas, sepsis, síndrome de Reye, etc.)
- La infección por VVZ en la embarazada se ha demostrado como un agente
embriofetolesivo reconocido y la varicela perinatal puede ser muy grave.
- El tratamiento de la varicela con antivirales (aciclovir, etc.) acorta la
enfermedad y es útil a condición de que se administre en las primeras 48 h,
por lo que tiene sus indicaciones precisas. Sin embargo, no previene las
complicaciones y supone un gasto significativo.
- La vacuna antivaricela se ha demostrado eficaz y segura con una escasa
reactogenicidad.
- Los individuos vacunados contra la varicela durante la infancia no tienen
mayor riesgo de padecer varicela ni herpes zóster con mayor frecuencia
durante la edad adulta respecto a los no vacunados.
- Las actuales vacunas contra la varicela no requieren medidas especiales
para su conservación y transporte.
- El padecer la varicela constituye un sufrimiento para el niño y la familia,
supone un coste de asistencia sanitaria y de medicamentos sintomáticos y/o
"específicos". Somete al paciente al riesgo de posibles complicaciones y de
transmitir la enfermedad a los adultos. Asimismo supone pérdida de
escolaridad en los niños y de horas de trabajo en los padres y familiares,
existiendo por lo tanto unos gastos directos e indirectos que deben ser
evaluados.
- Los estudios de rentabilidad respecto a la estimación estrictamente
económica de padecer la varicela o llevar a cabo su prevención mediante
vacuna, ha puesto claramente de manifiesto en España y en otros países
que la profilaxis universal de la varicela es rentable económicamente en la
población infantil española.

15
BIBLIOGRAFÍA

 Centro Nacional de Epidemiología. Informe sobre la situación de la


Varicela Perú 2012. Disponible en:
http://www.isciii.es/ISCIII/es/contenidos/fd-servicios-cientifico-tecnic... y
en http://revista.isciii.es/index.php/bes/article/view/900/1088

 Centro de Control de Enfermedades Infecciosas. CDC. Atlanta.


 Protocolo de vigilancia de varicela. Grupo de vigilancia y control de
enfermedades transmisibles (Eventos inmunoprevenibles). Instituto
Nacional de Salud. 2010.
 Canadian Immunization Guide. Varicella (chickenpox) vaccine.
https://www.canada.ca/en/public-health/services/publications/healthy-
liv...
 Centers for Disease Control and Prevention. Chickenpox (Varicella).
http://www.cdc.gov/chickenpox
 Centers for Disease Control and Prevention. Epidemiology and Prevention
of Vaccine Preventable Diseases (The Pink Book), 13th Edition: Chapter
22. Varicella.
http://www.cdc.gov/vaccines/pubs/pinkbook/varicella.html

16

Вам также может понравиться