"In Time" o "El precio del mañana" (Análisis de la Película)

En definitiva, es interesante plantearte situaciones similares a medida que avanzas en el

desarrollo de esta película, asimismo inevitable preguntarte en ¿cuál es el valor del dinero?,

en un modelo económico en donde todo se paga con el tiempo decimos que pagamos con la

vida entonces vemos reflejados lo primero conceptos económicos enseñados en la

universidad.

Los protagonistas viven en un entrampado sistema que tiene al propio tiempo como un objeto

valuador, es decir tu moneda de cambio es el equivalente a tiempo de vida que posees, este

sistema (como en otros sistemas financieros conocidos) los entes prestamistas establecen una

tasa de interés equivalente al 30%, incrementándose sostenida e impredeciblemente, pasando

de 30% a 34% y hasta en 37% con la única finalidad de mantener un equilibro conveniente

para la estabilidad del mismo sistema, como bien se detalla en el minuto 12’:58” “Para ser

inmortal, muchos deben de morir” evitando la sobrepoblación y no por control de la

natalidad, sino por la sobrevivencia, para ello el propio sistema funciona como un regulador,

sin ofrecer garantías para sus usuarios, al tener un comportamiento tan inestable y de lo único

que estamos seguros es que la constante es la alza del costo de vida elevando inevitablemente

la tasa de mortalidad, entonces esto significa que es forzoso ganarse la vida un día a la vez.

Lo que nos permite atisbar con mucha precisión que el costo de oportunidad que tienen los

pobladores del gueto es su propia vida ante cualquier decisión, el incremento constante del

valor de las cosas te deja como alternativa entre poder vivir con ciertas comodidades o

renuncia al disfrute de un mañana, en conclusión, la propia vida es el costo de aquello que

adquirimos.
La película nos lleva a cuestionarnos aspectos éticos y morales al ver como se ha

deshumanizando a la sociedad, aceptando la muerte como consecuencia de un sistema que

favorece la opulencia de los más favorecidos, entregando lo más valioso que se posee, la

propia vida, siendo esta cuestionada como detalla la protagonista en el minuto 37:30” “Los

pobres mueren y los ricos no viven”, la vida pierde significancia, la mente de desgastada con

el paso de los años y hace difícil el disfrute del presente, mientras los pobres viven el día a

día. Asimismo, se ve reflejado el deseo de no envejecer, una sociedad que solo tiene 25 años

eternamente, un sueño para muchos hoy en día. A mi consideración este modelo económico

no podría ser mejorado, pone en riesgo nuestra propia existencia.

El costo de la inmortalidad que solo favorece a unos pocos, condición que vislumbra la caída

en el valor del tiempo, es decir atravesamos un proceso inflacionario, se recibe menos tiempo

debido a que las cuotas de trabajo se incrementan, los intereses de los prestamos están en

alza, los precios de los pasajes en los transportes, la renta, los alimentos, todo incrementa su

valor, creando mucha inseguridad, sin embargo, esta inseguridad también forma parte del

sistema.

La fuerte inyección del tiempo crea una desestabilización, afectando el propio

funcionamiento del sistema, los pobladores del gueto dejan sus puestos de trabajo para poblar

mejores zonas, dejan de producir, ahora puede cubrir sus necesidades, demandan más y ahora

la oferta de los bienes sufren cambios.

si pudiéramos comparar nuestro actual sistema financiero hallaríamos muchas similitudes,

describiendo un poco el contexto en el que se desarrolla la película veremos que los usuarios
deben cumplir con un requisito mínimo, tener 25 años, podríamos interpretar es similar a

tener la mayoría de edad, el trabajar para obtener minutos de cambio, tener una clase de

medida de cambio con un valor legal con el que podemos adquirir comodidad, artículos,

lujos, existe una oferta y una demanda.

Referencias

 Andrew Niccol; Marc Abraham; Amy Israel; Kristel Laiblin; Eric Newman

(productores) y Andrew Niccol (director) (2011) In Time (Cinta cinematográfica).

EU.: Regency Enterprises, New Regency Pictures, Strike Entertainment.