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ANTECEDENTES
NUEVA PROPUESTA
REVISIÓN DEL ENCUADRE NORMATIVO BÁSICO
ALGUNOS MARCOS CONCEPTUALES
ACERCA DE LAS PRÁCTICAS PROFESIONALIZANTES
ACTA ACUERDO Y ANEXO ÚNICO
AVAL DEL INSPECTOR DE ÁREA
ANTECEDENTES
ESTRUCTURA Y PROPUESTA DEL ANEXO I DE LA RESOLUCIÓN 6249/03
ANTECEDENTES Y FUNDAMENTACIÓN
*Empleo.
*Empleabilidad.
*Inserción socio laboral.
*Rehabilitación profesional.
CONCEPTO DE MÓDULO
Definición.
Características del módulo.
MATERIALES Y HERRAMIENTAS
TÉCNICAS DE PRODUCCIÓN
GESTIÓN
PROVINCIA DE BUENOS
AIRES
LEY DE LEY DE
EDUCACIÓN DE LA EDUCACIÓN
PROVINCIA DE TÉCNICO
BUENOS AIRES DIRECCIÓN GENERAL DE PROFESIONAL
CULTURA Y EDUCACIÓN
SUBSECRETARÍA DE EDUCACIÓN
DIRECCIÓN DE EDUCACIÓN
ESPECIAL
DESARROLLO DESARROLLO DE
DE CAPACIDADES
CAPACIDADES ORIENTADAS A UNA
BÁSICAS FAMILIA DE
PROFESIONES
EN CENTROS
DE MÓD. 1 EX MÓD. 4 MÓD. 4
FORMACIÓN MÓD. 2 EX MÓD. 5 MÓD. 5
LABORAL Y MÓD. 3 EX MÓD. 6 MÓD. 6
UNIDADES
LABORALES
EN CENTROS DE
FORMACIÓN INTEGRAL
Revisión del encuadre normativo básico
La formación brindada por todos los niveles y modalidades del sistema educativo
abarca, entre un sinnúmero de cuestiones relevantes, la preparación para el trabajo.
Recuperar la cultura del trabajo permite conceptualizarlo en toda su complejidad como
espacio en el que el hombre se dignifica y se realiza como tal, en vinculación con otros.
Los nuevos modelos de relación con el conocimiento requieren de habilidades que
permitan a las personas – más allá del saber hacer tradicional – saber ser, saber conocer
y saber operar con el otro y con la realidad. En este contexto, una formación integral les
propone la construcción de estructuras operatorias flexibles y versátiles, que faciliten la
anticipación y la reflexión permanentes sobre las distintas maneras del pensar y del
hacer.
Asimismo, debe considerarse que homologar educación con escuela implica
desconocer la multiplicidad de espacios formativos que existen por fuera de los circuitos
educativos formales. La escuela como única legitimadora y máxima dueña de los
saberes socialmente significativos resulta inviable en el universo de conocimiento en
que está actualmente inmersa.
Parecería también obvio aseverar la existencia de circuitos de trabajo informales que
muchas veces se constituyen en oportunidades laborales – verdaderos puntos de partida
para emprendimientos productivos – que requieren de saberes y habilidades muy
particulares.
En contraposición a esto, el neoliberalismo se ha ocupado notoriamente de abonar un
estilo lineal de pensamiento, a partir del cual las personas logran insertarse
satisfactoriamente en determinados puestos de trabajo a partir de la adquisición de las
“competencias” necesarias para hacerlo. En este esquema es el mercado quien valora y
legitima los conocimientos, siempre que sean útiles a la organización productiva y
subordinados al “saber hacer”. La educación es desplazada en su rol de referente de los
saberes significativos y se impugnan los contenidos de enseñanza propios de la
formación cultural e intelectual que le compete. La escuela pasa a ser mera
“capacitadora” en “competencias” (se entiende por competencia el “saber hacer
operacional validado”; Tanguy, 2001).
Este discurso ofrece una arista doblemente peligrosa. Por un lado, el fracaso empresarial
y la desocupación no serían consecuencia estructural del sistema capitalista. La
responsabilidad de estos fenómenos se transfiere al ámbito de la educación al volverla
“incapaz” de dar “respuesta satisfactoria” a las demandas de tal sistema.
Por el otro, se vacía a la escuela de los contenidos disciplinares y de las rutinas que le
son propias para imbuirla de los “principios mercantilistas”. Se identifica a quienes la
transitan en términos de “producto” más o menos satisfactorio a las demandas del
sistema económico vigente.
Es necesario pensar alternativas que superen estas conceptualizaciones revisando el
sentido de la escuela, recuperando la centralidad de los saberes – no sólo los meramente
conceptuales – y fortaleciendo el tejido social. “Reconfigurar la escuela en torno a
saberes socialmente productivos supone a su vez interpelar al modelo de desarrollo,
dotando a los trabajadores de herramientas capaces de insertarlos e involucrarlos en el
diseño futuro de su propia sociedad” (Garcés, 2009). “Lo productivo” se concibe en
términos de producción material y simbólica, con amplio sentido social. Excede la
preparación para determinado puesto de trabajo y busca la comprensión conceptual de
los procesos de producción y distribución de los bienes simbólicos y materiales. Sitúa a
los sujetos en el centro de la escena.
La educación permanente a lo largo de la vida de las personas, organizada en distintos
circuitos estructurados entre sí, ofrece una alternativa a estos desafíos.
Nos referimos a circuitos que acompañen la circulación de los saberes por distintos
espacios, respetando trayectorias personales y abriendo la mente a las nuevas formas de
conocer y de trabajar.
La educación se vuelve una demanda que acompaña al sujeto durante toda su vida,
adecuándose a las características propias de los distintos momentos que atraviesa.
En nuestro país, la Ley Nº 26.206 de Educación Nacional, propone para los alumnos
“…mejorar su formación profesional y/o adquirir una preparación que facilite su
inserción laboral.”
En ese sentido, el sistema educativo público a través de sus estructuras y de su política
curricular garantiza este derecho social en las diferentes etapas vitales. La Ley de
Educación establece la existencia de los Niveles de la enseñanza, con sus respectivos
diseños curriculares y de las Modalidades, con sus propuestas curriculares.
La Educación Especial aborda en su propuesta la formación para el trabajo y la
desarrolla desde el nivel de la escolaridad primaria. Avanza desde la Formación
Preprofesional para culminar con la Formación Profesional; ambas consolidan la
Formación Integral para adolescentes, jóvenes y adultos con discapacidad en el marco
de la regulación de la Resolución Ministerial 1269/11.
No obstante lo explicitado, existen otras instancias - formales y no formales -
comprometidas con esta formación y es tarea de los equipos de Educación Especial
articular con ellas acciones tendientes a enriquecer y diversificar las posibilidades y
trayectorias educativas de los alumnos.
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) se ha expresado puntualmente acerca
de la necesidad de desarrollar alternativas para la Formación para el Trabajo Decente.
Conceptualizó trabajo decente como “trabajo productivo en condiciones de libertad,
equidad, seguridad y dignidad, en el cual los derechos son protegidos y que cuenta con
remuneración adecuada y protección social”(OIT, año 1999).
Posteriormente, la OIT puntualiza que las características más relevantes del trabajo
decente son: trabajo productivo y seguro, con respeto a los derechos laborales, con
ingresos adecuados, con protección social, con diálogo social, libertad sindical,
negociación colectiva y participación.
Para la Educación Especial, la preocupación por la inserción socio laboral genuina de
sus egresados ha sido una constante a lo largo de su historia. La construcción de un
proyecto que promueva el ejercicio pleno de la ciudadanía y el desarrollo de saberes
socialmente productivos es un desafío permanente para los docentes que la conforman.
Entre las estrategias y prácticas formativas que forman parte de la propuesta curricular
de la Educación Especial se encuentran las Prácticas Profesionalizantes.
La Disposición N º 1/11 del COPRET da cumplimiento a las obligaciones que para este
organismo pauta la Res. N º 1743/10.
En tal sentido, expresa que:
*entre las acciones que le competen se encuentra la de llevar registro de las prácticas
profesionalizantes. A tal efecto, aprueba los modelos de “Registro Único de Prácticas
Profesionalizantes” (Anexo 1 de la Disposición) y “Planilla de Prácticas
Profesionalizantes” (Anexo 2 de la Disposición).
*constituye a los Consejos Consultivos Regionales y Mesas Distritales en los ámbitos
naturales de articulación entre las instituciones educativas y el nivel central del Consejo
Provincial de Educación y Trabajo (COPRET);
*delega en los CCR y MD (o en las Jefaturas Regionales y Distritales en caso de no
estar aún constituidas estas instancias) la responsabilidad de notificar al Ministerio de
Trabajo local sobre los proyectos de PP, los participantes en ellos y los seguros
necesarios; también delega en ellos la responsabilidad de remitir al COPRET las
Planillas de Prácticas Profesionalizantes.
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Por la IE Por la OE
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ANEXO ÚNICO
Nacionalidad:
DNI:
Domicilio:
Teléfono:
Consideraciones generales:
Las prácticas profesionalizantes proponen introducir a los alumnos en el conocimiento y
la práctica laboral concreta, con la expectativa de –
- promover la puesta en práctica de saberes profesionales u ocupacionales en procesos
socio productivos de bienes o de servicios afines con el futuro entorno laboral en
cuanto a sustento científico, tecnológico, técnico y socio cultural
- fortalecer los procesos educativos a través de articulaciones con el sector
productivo, estatal y privado y otras organizaciones, que generen retroalimentación,
obtención de información y mutuo reconocimiento de demandas y necesidades
- desarrollar estrategias que faciliten a los alumnos la transición escuela – mundo del
trabajo
- generar espacios de reflexión crítica de la práctica profesional u ocupacional
- promover el reconocimiento del trabajo como valor con finalidades solidarias,
estructurantes de la identidad y organizadoras de la vida en la sociedad
A fin de cumplir con estos objetivos y teniendo en cuenta la propuesta curricular de la
OE, los alumnos realizarán actividades y adquirirán conocimientos relativos a –
- los procesos de producción y el ejercicio profesional u ocupacional vigentes dentro de
una familia profesional
- la relevancia de una organización eficiente del tiempo, de los espacios y de las
actividades productivas
- la resolución de problemas referidos a situaciones laborales y sociales que demanden
el despliegue de saberes de distinto orden adquiridos en la formación previa
- la especificidad de un proceso determinado de producción de bienes o de servicios
según su finalidad y características
- la reflexión crítica sobre la futura práctica profesional u ocupacional y el impacto de
ésta sobre la realidad socio productiva
- la toma de conciencia acerca de la importancia del trabajo decente en el marco de los
derechos de los trabajadores y del respeto por las condiciones de higiene y seguridad en
que éste debe desarrollarse
Por la IE Por la OE
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