¿Cómo honrar a Dios?

Qué significa honrar a Dios?"

Respuesta: Apocalipsis 4:10-11 describe una escena en el cielo: "los veinticuatro

ancianos se postran delante del que está sentado en el trono, y… echan sus coronas
delante del trono, diciendo: Señor, digno eres de recibir la gloria y la honra y el poder".
Las palabras traducidas como "gloria" y "honor" están estrechamente relacionadas y a
menudo se usan indistintamente en la Biblia. Pero hay una diferencia sutil entre ellas.
La palabra que más se traduce como "gloria" significa "algo que tiene un valor intrínseco
e inherente", mientras que la palabra traducida como "honor" significa "valor apreciado;
rendir o considerar glorioso".

La gloria es una cualidad inherente a aquel que está siendo glorificado. Se puede pensar
en la gloria como un espejo que refleja con precisión lo que está allí. Cuando reflejamos
exactamente el carácter de Dios, lo glorificamos. Glorificar a Dios es honrarlo por lo que
realmente Él es. Dios tiene la gloria porque Él es infinitamente valioso. Los seres
humanos tenemos gloria porque hemos sido creados a imagen de Aquel que es todo
glorioso (Génesis 1:27). Glorificamos a Dios cuando demostramos a través de la palabra o
la acción, su glorioso carácter o sus obras. Modelar el carácter de Jesús es una forma de
glorificar a Dios, porque estamos mostrando sus atributos. Cuando glorificamos a Dios, le
damos el honor a Él.

El honor se origina en nuestros corazones y se refiere al valor que personalmente le

damos a algo o a alguien. Los coleccionistas poseen determinados elementos en mayor
estima que aquellos que no coleccionan. Lo que otros subestiman puede ser altamente
valorado por alguien más y por lo tanto honrado. Honramos a otras personas en la
medida en que consideramos importante su posición y contribuciones. Se nos ordena
honrar a las personas por causa de su posición, no por su desempeño. Se nos ordena
honrar a nuestros padres y madres (Deuteronomio 5:16; Marcos 7:10), a los ancianos
(Levítico 19:32), y a aquellos que gobiernan sobre nosotros (1 Pedro 2:17).
Cuando honramos a Dios, estamos demostrando la alta estima que tenemos por Él.
Estamos reflejando su gloria en alabanza y adoración.

La Biblia muestra varias formas de honrar y glorificar a Dios. Le demostramos una alta
estima y reflejamos su carácter siendo sexualmente puros (1 Corintios 6:18-20), dando
de nuestros ingresos (Proverbios 3:9) y por vivir vidas dedicadas a Él (Romanos 14:8). No
es suficiente con simplemente honrarlo exteriormente. Dios desea el honor que sale de
nuestros corazones. El Señor dice, "Porque este pueblo se acerca a mí con su boca, y con
sus labios me honra, pero su corazón está lejos de mí" (Isaías 29:13). Cuando nos
deleitamos en el Señor (Salmo 37:4), lo buscamos en todo lo que hacemos (1 Crónicas
16:11; Isaías 55:6), y hacemos elecciones que reflejan el lugar que Él tiene en nuestros
corazones, le damos el más grande honor.
…yo honraré a los que me honran, y los que me
desprecian serán tenidos en poco. 2 SAMUEL
2:30
1. Honramos a Dios reconociendo que él es nuestro Padre y lo
honramos como tal.

Mateo 6:9 Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu
nombre. Malaquías 1: 6 Dice: El hijo honra al padre, y el siervo a su
señor. Si, pues, soy yo padre, ¿dónde está mi honra?

2. Honramos a Dios presentándonos delante de El por completo,

aunque nos cueste sacrificio hacerlo.

Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios,

que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable
a Dios, que es vuestro culto racional. Romanos 12:1

Esto tiene que ver con nuestra asistencia al lugar donde nos
congregamos. El ir a la congregación es darle honra a Dios.

3. Honramos a Dios trayendo alabanza.

El que sacrifica alabanza me honrará;… Salmos 50:23

4. Honramos a Dios con lo que él nos ha dado. La ofrenda es

adoracion, es por eso que ofrendando honramos a Dios.

9 Honra a Jehová con tus bienes, Y con las primicias de todos tus
frutos; 10 Y serán llenos tus graneros con abundancia, Y tus lagares
rebosarán de mosto. Proverbios 3:9,10

Porque ¿quién soy yo, y quién es mi pueblo, para que pudiésemos

ofrecer voluntariamente cosas semejantes? Pues todo es tuyo,
y de lo recibido de tu mano te damos. 1 Crónicas 29:14

5. Honramos a Dios con el corazón, no solo de labios. Esto

quiere decir sin hipocresía, porque a lo que no se le pone el
corazón, es algo que no queremos hacer realmente.
13Dice, pues, el Señor: Porque este pueblo se acerca a mí con su
boca, y con sus labios me honra, pero su corazón está lejos de mí, y
su temor de mí no es más que un mandamiento de hombres que les
ha sido enseñado. Isaías 29:13

7Hipócritas,bien profetizó de vosotros Isaías, cuando dijo: 8 Este

pueblo de labios me honra; Mas su corazón está lejos de mí. Mateo
15:7

6. Honramos a Dios por medio de nuestro servicio.

…Si alguno me sirviere, mi Padre le honrará. Juan 12:26

7. Honramos a Dios viviendo una vida en santidad.

…si alguno se limpia de estas cosas, será instrumento para honra,

santificado, útil al Señor, y dispuesto para toda buena obra. 2 Timoteo
2:21

8. Honramos a Dios con el principio de la Sabiduría.

El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; Buen entendimiento

tienen todos los que practican sus mandamientos; Su loor permanece
para siempre. Salmos 111:10

El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; Los

insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza. Proverbios 1:7

El temor de Jehová es el principio de la sabiduría,

Y el conocimiento del Santísimo es la inteligencia. Proverbios 9:10

9. Honramos a Dios con nuestros hechos a favor del reino de

Dios, que son honras que serán honradas en su tiempo. Lea el
capítulo 6 de Ester.

10. Honramos a Dios cuando obedecemos lo que el pastor

nos está ministrando.
Obedeced a vuestros pastores, y sujetaos a ellos; porque
ellos velan por vuestras almas, como quienes han de dar
cuenta; para que lo hagan con alegría, y no quejándose,
porque esto no os es provechoso. Hebreos 13:17

David fue honrado al matar el gigante, su victoria fue porque

andaba en obediencia a lo que su padre le mando, y fue una
oportunidad para lo que todos sabemos que ocurrió. 16 Venía,
pues, aquel filisteo por la mañana y por la tarde, y así lo hizo
durante cuarenta días. 17 Y dijo Isaí a David su hijo: Toma ahora
para tus hermanos un efa de este grano tostado, y estos diez panes,
y llévalo pronto al campamento a tus hermanos. 18 Y estos diez
quesos de leche los llevarás al jefe de los mil; y mira si tus hermanos
están buenos, y toma prendas de ellos. 1 Samuel 17:16-18
Honrar a Jehová... ¿por qué y cómo?
“A los que me honran honraré, y los que me desprecian serán de poca
monta.” (1 SAMUEL 2:30.)

1. ¿A quiénes se otorgan los mundialmente famosos premios Nobel, y cómo ven muchas personas esas
recompensas?

CADA año cuatro instituciones escandinavas otorgan premios Nobel a personas que hayan
‘conferido el mayor beneficio a la humanidad durante el año anterior’. Los premios se
otorgan por logros alcanzados en seis diferentes campos. Muchas personas opinan que el
premio Nobel es el mayor honor que se pueda otorgar a un ser humano.

2. ¿A quién pasan por alto los que conceden los premios Nobel, y por qué es Él especialmente merecedor
de honra?

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Aunque no hay nada incorrecto en honrar a humanos que lo merecen, ¿piensan alguna
vez los que conceden tales honores en dar honra al mayor Benefactor de la humanidad?
Ese Benefactor es aquel que ha concedido innumerables beneficios a la humanidad desde
que él creó al primer hombre y la primera mujer hace unos 6.000 años. Puede que el que
por lo común la gente pase por alto honrarlo a Él nos recuerde las palabras de Elihú, amigo
de Job de la antigüedad, quien dijo: “No obstante, nadie ha dicho: ‘¿Dónde está Dios mi
Magnífico Hacedor, El que da melodías en la noche?’”. (Job 35:10.) Nuestro magnífico
Benefactor continúa haciendo ‘bien, dando lluvias desde el cielo y épocas fructíferas,
llenando por completo los corazones de alimento y de alegría’. (Hechos 14:16, 17; Mateo
5:45.) Jehová es en verdad el Dador de “toda dádiva buena y todo don perfecto”. (Santiago
1:17.)

Lo que significa honrar

3. ¿Cuáles son las principales palabras del hebreo y el griego que se traducen “honra”, y qué significan?

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La principal palabra hebrea para honra, ka·vóhdh, significa literalmente “pesadura”. Por lo
tanto, se considera como de peso, es decir, impresionante o importante, a la persona a
quien se honra. Es significativo que esta palabra hebrea, ka·vóhdh, también suele traducirse
“gloria” en las Escrituras, lo cual indica también cuán impresionante o importante se
considera a la persona a quien se honra. Otra palabra hebrea, yeqár, que se vierte “honra”
en las Escrituras, también se traduce “precioso” y “cosas preciosas”. De modo que en las
Escrituras Hebreas la palabra honra se relaciona con la gloria y lo precioso. La palabra
griega que se traduce “honra” en la Biblia es ti·mé, y también comunica el sentido de
estima, valor y preciosidad.
4, 5. a) ¿Qué quiere decir otorgar honra a alguien? b) ¿Qué relato en Ester 6:1-9 ilustra lo que está
implicado en otorgar honra?
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Así que uno honra a otra persona al mostrarle profundo respeto y estima. Como
ilustración, considere el relato bíblico respecto al fiel judío Mardoqueo. En cierta ocasión
Mardoqueo había puesto al descubierto un complot contra la vida del rey Asuero, de la
antigua Persia. Después, una noche en que el rey no podía dormir, se trajo a su atención lo
que Mardoqueo había hecho. Por eso él preguntó a sus servidores: “¿Qué honra y gran
cosa se ha hecho a Mardoqueo por esto?”. Contestaron: “Nada se ha hecho con él”. ¡Qué
sacudida para el rey! Mardoqueo le había salvado la vida, y sin embargo él no le había
mostrado su agradecimiento. (Ester 6:1-3.)
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Por eso, al tiempo oportuno Asuero preguntó a su primer ministro, Hamán, cuál sería la
mejor manera de honrar a alguien que había llegado a ser muy agradable al rey.
Inmediatamente Hamán razonó en su corazón: “¿A quién le deleitaría al rey rendir una
honra más que a mí?”. Por eso Hamán dijo que se debía vestir a aquella persona con
“ropaje real” y que se debía hacer que montara “un caballo sobre el cual el rey de veras
cabalga”. Concluyó: “Tienen que hacer que vaya montado sobre el caballo en la plaza
pública de la ciudad, y tienen que proclamar delante de él: ‘Así se le hace al hombre en
cuya honra el rey mismo se ha deleitado’”. (Ester 6:4-9.) El pueblo tendría en alta estima a
la persona que recibiera tal honra.

Por qué merece honra Jehová

6. a) ¿Quién, más que toda otra persona, merece que le demos honra? b) ¿Por qué describen
apropiadamente a Jehová los términos “magnífico” o “gran”?

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A través de la historia se ha conferido honra a seres humanos, a menudo sin que la
merezcan. (Hechos 12:21-23.) Sin embargo, ¿quién, más que toda otra persona, merece
honra? Pues, ¡Jehová Dios, por supuesto! Merece que le demos honra porque ciertamente
es magnífico. Con frecuencia se aplican a él los términos “magnífico” o “gran”. Él es el
Magnífico, el Magnífico Hacedor, el Magnífico Creador, el Gran Rey, el Magnífico
Instructor, el Gran Amo. (Salmo 48:2; Eclesiastés 12:1; Isaías 30:20; 42:5; 54:5; Oseas 12:14.)
El que es magnífico o grande es majestuoso, dignificado, elevado, noble, ilustre e
inspirador de temor. Jehová es incomparable, no tiene igual, es ilimitado en grandeza. Él
mismo da testimonio de ese hecho, cuando dice: “¿A quién me asemejarán ustedes o me
harán igual o me compararán, para que nos parezcamos uno al otro?”. (Isaías 46:5.)
7. ¿Por lo menos de cuántas diferentes maneras se puede decir que Jehová Dios es singular, y por qué se
puede decir que es incomparable en cuanto a autoridad?

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Jehová Dios es singular de por lo menos siete diversas maneras, las cuales suministran
razones específicas para darle honra. En primer lugar, Jehová Dios merece la mayor honra
porque es incomparable en autoridad. El Señor Jehová es el Soberano Universal... es
supremo. Es nuestro Juez, Legislador y Rey. Toda persona en el cielo y en la Tierra es
responsable a Él; no obstante, él no tiene que rendir cuentas a nadie. Con razón se le
describe como “grande, poderoso e inspirador de temor”. (Deuteronomio 10:17; Isaías
33:22; Daniel 4:35.)

8. ¿Por qué podemos decir que Jehová es sin igual a) en cuanto a su posición? b) en cuanto a su
existencia eterna?

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Segundo, Jehová Dios es digno de la mayor honra porque no tiene igual en cuanto a
su posición. Es “el Alto y Excelso”, el Altísimo. ¡Se eleva hasta una posición
inconcebiblemente alta sobre todas sus criaturas terrestres! (Isaías 40:15; 57:15; Salmo
83:18.) Tercero, Jehová Dios debe ser honrado sobre toda otra persona porque es sin igual
en cuanto a su existencia eterna. Es el único que nunca tuvo principio, pues es desde la
eternidad hasta la eternidad. (Salmo 90:2; 1 Timoteo 1:17.)

9. ¿Cómo es Jehová incomparable a) respecto a su gloria? b) en cuanto a sus atributos fundamentales?

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Cuarto, Jehová Dios es merecedor de la mayor honra por la magnificencia de
su gloria personal. Es el “Padre de las luces celestes”. Su persona es tan resplandeciente
que ningún hombre puede verlo y seguir viviendo. De veras inspira temor reverente.
(Santiago 1:17; Éxodo 33:22; Salmo 24:10.) Quinto, debemos a Jehová Dios la mayor honra
por sus maravillosos atributos. Es omnipotente, infinito en poder; es omnisciente, infinito
en sabiduría; es absolutamente perfecto en justicia; y es la mismísima personificación del
amor. (Job 37:23; Proverbios 3:19; Daniel 4:37; 1 Juan 4:8.)

10. ¿Cómo es Jehová sin igual a) con relación a obras de creación y posesiones? b) en cuanto a su
nombre y fama?

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Sexto, Jehová Dios merece la mayor honra posible por sus grandes obras de
creación. Como Creador de todas las cosas en los cielos y en la Tierra, es a la vez el Gran
Dueño de todas las cosas. Leemos en Salmo 89:11: “El cielo es tuyo, la tierra también es
tuya”. Séptimo, Jehová nuestro Dios es más digno de honra que toda otra persona porque
es sin par, sin igual respecto a su nombre y fama. Sólo él lleva el nombre Jehová, que
significa “Él Causa Que Llegue a Ser”. (Véase Génesis 2:4, nota.)

Cómo honrar a Jehová

a) ¿De qué maneras podemos honrar a Jehová?
b) ¿Cómo mostramos que de veras honramos a Jehová mediante confiar en él?

En vista de todas las cualidades de Jehová, ¿cómo podemos darle honra? Como veremos,
podemos honrarlo al mostrarle temor y reverencia, obedecerle, tomarlo en cuenta en
todos nuestros caminos, hacer dádivas, imitarlo y hacerle peticiones. También podemos
honrarlo al cifrar fe en él y confiar en él sin importar lo que suceda. Se nos exhorta: “Confía
en Jehová con todo tu corazón”. De modo que honramos a Jehová Dios al aceptar lo que
él dice. Por ejemplo, él dice: “No tengas miedo, porque estoy contigo. No mires por todos
lados [en temor], porque soy tu Dios. Yo ciertamente te fortificaré. Yo cierta y
verdaderamente te ayudaré”. (Proverbios 3:5; Isaías 41:10.) El no confiar completamente en
él sería una deshonra para él.

12. ¿Qué papel desempeñan la obediencia y el temor en honrar a Jehová?

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Otra manera de honrar a Jehová, estrechamente relacionada con lo anterior, es por
obedecerle. Y para obedecer es vital que tengamos temor piadoso, sí, temor de desagradar
a Dios. Lo que Jehová dijo a Abrahán después que este obedientemente intentó sacrificar a
su hijo Isaac muestra la relación que hay entre el temer y el obedecer. “Ahora sé de veras
que eres temeroso de Dios”, dijo Jehová. (Génesis 22:12.) Al considerar lo que los hijos
deben a sus padres, el apóstol Pablo también mostró que tanto la obediencia como la
honra son necesarias. (Efesios 6:1-3.) Así que honramos a Jehová mediante obedecer sus
mandamientos, los cuales no son gravosos. No hay duda alguna de que el desobedecer a
Jehová Dios sería deshonrarlo. (1 Juan 5:3.)

13. El honrar a Dios hará que tengamos ¿qué actitud mental respecto a nuestras actividades y planes?

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Además, podemos dar la debida honra a Jehová Dios al prestar atención al consejo
de Proverbios 3:6: “En todos tus caminos tómalo en cuenta [sí, reconócelo], y él mismo
hará derechas tus sendas”. El discípulo Santiago nos da buen consejo respecto a esto. En
vez de confiar uno en sí mismo día tras día, apoyándose en sus propias aptitudes, debería
decir: “Si Jehová quiere, viviremos y también haremos esto o aquello”. (Santiago 4:15.)
Años atrás los Estudiantes Internacionales de la Biblia acostumbraban añadir a cualquier
declaración en cuanto al futuro la abreviatura D.V., que quiere decir Deo volente, que
significa “si Dios quiere”.

14. a) Si queremos honrar a Dios, ¿qué actitud debemos adoptar en cuanto a nuestros esfuerzos? b) ¿Qué
actitud se manifiesta con relación a la publicación de la literatura de la Sociedad Watch Tower?

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También honramos a Jehová Dios al manifestar una actitud humilde y dar gloria a Dios
por todo éxito que tengamos. Apropiadamente dijo el apóstol Pablo sobre su ministerio:
“Yo planté, Apolos regó, pero Dios siguió haciéndolo crecer; de modo que ni el que planta
es algo, ni el que riega, sino Dios que lo hace crecer”. (1 Corintios 3:6, 7.) Pablo estaba muy
interesado en dar la debida honra a Dios y no a sí mismo ni a ningún otro humano. Por
eso, hoy, en las publicaciones de la Sociedad Watch Tower no se indica quiénes son los
redactores de estas, y los redactores evitan dar a conocer a otros lo que han contribuido.
De este modo la atención se concentra en la información, la cual tiene el propósito de
honrar a Jehová, y no se concentra en ningún humano.

15. ¿Qué experiencia ilustra lo difícil que es para algunas personas comprender la modestia de los
testigos de Jehová?

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Esta norma de concentrar la atención en Jehová para honrarlo a él sorprende a algunos.
Hace unos años, mientras se instalaba un sistema de sonido para presentar un discurso
público en el Parque Central de la ciudad de Nueva York, los Testigos tocaban una de las
grabaciones de Melodías del Reino para probar el sistema. Una pareja bien vestida le
preguntó a uno de los Testigos qué música era la que se tocaba. Pensando que los que le
hablaban eran Testigos, él contestó: “Es Melodías del Reino número 4”. “Sí, pero ¿quién
compuso esa música?”, preguntaron. El Testigo contestó: “Ah, el compositor es anónimo”.
La pareja respondió: “La gente que compone esa clase de música no lo hace
anónimamente”. El Testigo contestó: “Pero los testigos de Jehová sí”. En realidad, ¡lo hacen
así para que toda la honra vaya a Jehová Dios!

16. ¿De qué diversas maneras podemos usar nuestra voz para traer honra a Jehová Dios?

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Otra manera de honrar a Jehová es mediante usar los labios para dar testimonio acerca
de él. Si de veras nos interesa honrar a Dios, entonces nos esmeraremos en esparcir las
buenas nuevas del Reino. Podemos hacer esto al ir de casa en casa y valernos de todo otro
método posible, sin pasar por alto ninguna oportunidad de testificar informalmente. (Juan
4:6-26; Hechos 5:42; 20:20.) Además, tenemos oportunidades para honrar a Dios con
nuestra voz en las reuniones de congregación, tanto al ofrecer comentarios como al cantar
con todo el corazón los cánticos del Reino. (Hebreos 2:12; 10:24, 25.) También podemos
honrar a Jehová Dios con los labios en nuestra conversación diaria. Con un poco de
esfuerzo podemos dirigir la conversación a asuntos espirituales que edifican, y eso
redundará en honra para Jehová Dios. (Salmo 145:2.)

17. a) ¿Qué tiene que ver la conducta apropiada con el que honremos a Jehová? b) ¿Qué efecto tiene la
conducta incorrecta en esto?

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Tal como es excelente honrar a Jehová Dios con los labios, también tenemos que
honrarlo por nuestra conducta. Jesús condenó a los que honraban a Dios con los labios,
pero tenían su corazón muy alejado de Él. (Marcos 7:6.) La conducta incorrecta de seguro
trae deshonra a Jehová Dios. Por ejemplo, en Romanos 2:23, 24 leemos: “Tú, que te glorías
en ley, ¿por tu transgresión de la Ley deshonras a Dios? Porque ‘el nombre de Dios es
blasfemado entre las naciones a causa de ustedes’”. En los últimos años se ha expulsado
de las congregaciones del pueblo de Jehová a muchos miles de personas. Probablemente,
hasta muchos más que participaron en conducta deshonrosa no fueron expulsados porque
manifestaron arrepentimiento genuino. Todas estas personas habían estado honrando a
Jehová con los labios, pero no lo hicieron por su conducta.

18. a) ¿En qué deben estar interesados algunos que han sido muy favorecidos, para que muestren la
debida honra a Jehová? b) ¿Cómo ilustra la situación de ciertos sacerdotes de los días de Malaquías lo
necesario que es considerar esto?

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Los que están ocupados en diferentes ramas del servicio de tiempo completo —sea en
Betel, en servicio itinerante o misional, o como precursores— son muy favorecidos por sus
oportunidades de contribuir a la honra que se da a Jehová. Tienen la obligación de hacer
lo óptimo en todo trabajo que se les haya asignado, y ser ‘fieles en lo mínimo así como en
lo mucho’. (Lucas 16:10.) De algunas maneras su posición honorable fue ilustrada, aunque
no representada como tipo, por los sacerdotes y levitas del Israel antiguo. Sin embargo,
debido a la negligencia de algunos sacerdotes de los días de Malaquías, Jehová les dijo: “Si
yo soy un padre, ¿dónde está la honra a mí? Y si soy un magnífico amo, ¿dónde está el
temor a mí?”. (Malaquías 1:6.) Aquellos sacerdotes estaban despreciando el nombre de
Dios al ofrecer animales ciegos, cojos y enfermos como sacrificios. Si los que tienen
privilegios especiales de servicio hoy no se esfuerzan por hacer lo mejor que en realidad
puedan hacer, ellos en particular pueden ser merecedores de la censura que Jehová Dios
administró a aquellos sacerdotes. No estarían honrando a Dios.
19. a) Como se indica en Proverbios 3:9, ¿de qué otra manera honramos a Jehová? b) ¿Cuál es otra
manera vital de honrar a Jehová?
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Otra manera de honrar a Jehová Dios es mediante hacer contribuciones monetarias para
la obra mundial de predicar que él ha autorizado. “Honra a Jehová con tus cosas valiosas y
con las primicias de todos tus productos”, es la exhortación que se nos da. (Proverbios 3:9.)
El privilegio de hacer tales contribuciones es una oportunidad de honrar a Jehová Dios que
nadie debe pasar por alto. También podemos honrar a Jehová Dios en nuestras oraciones,
al alabarlo y darle gracias. (1 Crónicas 29:10-13.) De hecho, porque acudimos a él con
humildad y profundo respeto, el tan solo dirigirnos a Dios en oración le trae honra.

20. a) ¿A quiénes por lo general honra la gente del mundo, y cómo lo hace? b) ¿A qué otro mandato
debemos prestar atención para honrar más a Jehová?

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Hoy día muchos —particularmente los jóvenes— honran a personas a quienes admiran al
imitarlas... al hablar y actuar como ellas. Frecuentemente las personas a quienes imitan son
héroes del deporte o estrellas del mundo del entretenimiento. Por contraste, nosotros
como cristianos debemos honrar a Jehová Dios al esforzarnos por imitarlo. El apóstol Pablo
nos exhortó a hacer esto al escribir: “Háganse imitadores de Dios, como hijos amados, y
sigan andando en amor”. (Efesios 5:1, 2.) Sí, al esforzarnos por imitar a Jehová le damos
honra.

21. a) ¿Qué nos equipará para honrar y glorificar a Jehová? b) ¿Qué recompensas da Jehová a los que lo
honran?

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Ciertamente son muchas las maneras como podemos y debemos honrar y glorificar a
Dios. Nunca olvidemos que estaremos más capacitados para honrarlo si nos alimentamos
con regularidad de su Palabra y nos familiarizamos mejor con él. ¿Qué recompensas hay
para los que hacen esto? “A los que me honran —dice Jehová— honraré.” (1 Samuel 2:30.)
Con el tiempo Jehová honrará a sus adoradores al darles vida eterna con felicidad, sea en
el cielo como corregentes con su Hijo, Jesucristo, o en el Paraíso aquí en la Tierra.
¿Recuerda usted?

□ ¿A quiénes generalmente dan honra los humanos, y a quién por lo general no dan
honra?

□ ¿Qué significa honrar a alguien, y de qué maneras se puede hacer eso?

□ ¿Qué razones fundamentales hay para ver a Jehová Dios como merecedor de honra?

□ ¿De qué diversas maneras podemos honrar a Jehová?

□ ¿De qué maneras recompensa Jehová a los que lo honran?