El spread corresponde al diferencial entre el precio de compra
(ask) y el mejor precio de venta (bid) de un activo financiero. Por tanto, es el precio al que puede comprar o vender un activo en el caso de una orden a mercado. El tipo comprador (precio máximo al que un vendedor está dispuesto a vender el activo) siempre es superior al tipo vendedor (precio máximo al que un comprador está dispuesto a comprar el activo).