Вы находитесь на странице: 1из 19

1)CTO DE CVENTA: Se da cuando una de las partes se compromete a transferir la propiedad de

una cosa y la otra a pagar su precio en dinero. Es bilateral, oneroso, conmutativo, consensual y
no formal. Los elementos esenciales son la cosa y el precio.

La cosa: pueden venderse todas las cosas que pueden ser objeto de los contratos. La cosa
cierta que ha dejado de existir el contrato es nulo; si dejó de existir parcialmente el comprador
puede demandar la parte existente con reducción del precio; también puede pactarse que el
comprador asuma el riesgo de que la cosa haya perecido o este dañada al momento de
celebrarse el contrato. Si se vende cosa futura, se considera en principio que está sujeta a
condición suspensiva de que esa cosa llegue a existir (igual puede nuevamente pactarse que el
comprador asuma el riesgo). Si es cosa ajena es válido siempre que se notifique que no es
propia y que se obligue a trasmitir o hacer trasmitir su dominio al comprador, teniendo que
hacerse cargo si no lo consiguiera.

El precio: se puede determinar entre las partes o lo puede determinar un árbitro de un tercero
designado o se hace en referencia a cosa cierta. En casos en los que las partes no se pongan de
acuerdo, el precio lo fija un juez por el procedimiento más breve que prevea la ley local.

El vendedor está obligado a transferir al comprador la propiedad de la cosa vendida, a cubrir


los gastos de entrega (excepto pacto en contrario), a entregar el inmueble apenas se escriture
(excepto pacto en contrario) y a entregar la cosa con sus accesorios, libre de toda relación de
poder y de oposición de terceros. El comprador está obligado a pagar el precio en lugar y
tiempo convenidos, a recibir la cosa y los documentos vinculados con el contrato y a pagar los
gastos de recibo.

 Pacto de retroventa: el vendedor se reserva el derecho de recuperar la cosa y el


comprador de entregarla en el precio convenido.

 Pacto de reventa: el comprador se reserva el derecho de devolver la cosa en el precio


convenido.

 Pacto de preferencia: el vendedor tiene prioridad por sobre los otros adquirentes si el
comprador decide enajenarla. Excepto que otro plazo resulte de la convención o de los
usos o circunstancias del plazo, se puede ejercer el derecho de preferencia en los diez
días desde que se notifica la voluntad de enajenación de la cosa.

Estos tres pactos pueden ser convenidos por un plazo que no exceda los cinco años para
inmuebles y los dos años para muebles, contando desde la celebración del contrato.

Boleto de compraventa de inmuebles: el derecho del comprador de buena fe tiene prioridad


sobre el de terceros que hayan trabado cautelares sobre el inmueble vendido si el boleto tiene
fecha cierta, pagó por lo menos el 25% del precio, el boleto tiene publicidad suficiente
(registral o posesoria) y el comprador contrató con el titular registral o con quien puede
subrogarse esa posición mediante un perfecto eslabonamiento con los adquirentes sucesivos.
El boleto es oponible al concurso preventivo y a la quiebra.

1
2) Permuta.

3)Cto. de Suministro: Es un contrato (que se incluye en el nuevo código) nominado,


bilateral, oneroso, conmutativo y no formal, por el cual una de las partes (suministrante) se
obliga a entregar bienes (materiales o inmateriales) o a prestar servicios en forma continuada,
mientras que la otra (suministrado) se obliga a pagar un precio por cada entrega o grupo de
ellas. Es un contrato netamente comercial.

Función económica: Se trata de un típico contrato de actividad, de duración en el tiempo, de


periodicidad y continuidad de prestaciones singulares, netamente identificado con la vida
empresaria. Mediante su utilización, el suministrante puede asegurarse la colocación
constante de una cantidad de productos, simplificando su comercialización, con la
consiguiente reducción de costos administrativos y el menor número de personal ocupado en
estas áreas. Por su lado, el suministrado obtiene el material necesario para la continuación de
la producción, de una manera segura y rápida, evitando tener que celebrar distintos y
sucesivos contratos de compraventa o de locación, según el caso, cada vez que lo requiera su
actividad, como así también de desplegar toda una actividad para procurárselos.

Elementos esenciales:

1. Sujetos/ Partes: Suministrante y suministrado. El suministrante (proveedor o


abastecedor), tiene como obligación entregar bienes o prestar servicios en forma
periódica o continuada, y el suministrado (abastecido), por su parte, tiene la obligación
correlativa de pagar un precio por cada entrega o prestación de servicios o grupo de
ellas. Tanto una Persona Jurídica como una persona física pueden revestir una y otra
calidad. El único requisito exigido por la norma es que el suministrante debe realizar su
actividad en relación de dependencia respecto del suministrado.
2. Objeto: Normalmente el contrato de suministro tiene por objeto cosas genéricas, pues
ellas son por su naturaleza susceptibles de ser suministradas en forma reiterada o
continuada, aplicándose en consecuencia el régimen de las obligaciones de género
(arts. 762 y 763). Desde esta última perspectiva pueden ser objeto de este contrato:
materias primás o insumos y productos elaborados o semielaborados en general,
materiales de construcción, etcétera, como asimismo combustibles gas, agua, energía
eléctrica, etcétera. Todo ello sin perjuicio de que también puedan ser objeto mediato
del contrato de suministro cosas que tengan una cierta especificidad, como ocurre,
verbigracia, con la provisión de impresos periódicos (la denominada suscripción a
diarios y revistas) cuyo contenido variará de número en número.
3. Causa: (fin inmediato) El suministrado busca una provisión periódica o continuada de
bienes o servicios, el cual presenta una serie de ventajas por sobre la provisión
separada o discontinuada, a saber:
 se evita un costo de selección cada vez que se necesita un bien o un servicio;
 se disminuye el costo de transacción propio de los contratos separados,
 se obtiene la fidelidad y confianza de quien provee, porque se genera una
relación de colaboración de larga duración.

2
Caracteres:

 Bilateral: las partes se obligan recíprocamente la una hacia la otra; el suministrante a


entregar bienes o prestar servicios en forma periódica o continuada, y el suministrado
a pagar por ello un precio.
 Consensual: quedan perfeccionados o concluidos con todos sus efectos desde que las
partes se ponen de acuerdo, aún antes de ser entregada la cosa, materia del contrato.
 Conmutativo: Las ventajas para ambos contratantes son ciertas desde su celebración;
no viéndose afectado este carácter por la circunstancia de que la entidad de la
prestación a cargo del suministrante pueda estar sujeta a variaciones según las
necesidades del suministrado (art. 1178).
 De larga duración o de tracto sucesivo: La finalidad típica del suministro es producir
efectos por un lapso más o menos prolongado, que puede o no estar determinado (art.
1183); sea que su prestación caracterizante deba ser ejecutada en forma periódica
(contrato de ejecución periódica o de tracto sucesivo) o en forma continuada (contrato
de ejecución continuada).
 Nominado: Tiene una denominación propia y regulada en la ley.
 Oneroso: cada parte ha de obtener alguna ventaja o compensación procedente o a
cargo de la otra
 No formal: La ley no impone una determinada solemnidad para su existencia,
quedando por concluido a través de cualquier medio idóneo para exteriorizar la
voluntad de las partes; sin perjuicio de las formalidades sugeridas para asegurar la
prueba de los contratos en general y las previstas en materia de contratos de
consumo.

Siendo el pacto de preferencia accesorio al contrato de suministro, el mismo debe ser


otorgado para su existencia, validez o eficacia en la misma forma prevista para el contrato
principal.

Efectos: Obligaciones de las partes

Obligación del suministrante: La obligación principal es la de entregar bienes o prestar


servicios en forma periódica o continuada. Además de la obligación nuclear, existe un deber
colateral cuyo fundamento está en la colaboración debida y que consiste en una actividad que
tiene dos facetas:

 estar a disposición para la satisfacción de los requerimientos del suministrado


referentes a los pedidos de cumplimiento periódicos de la obligación principal
 una actividad positiva, de modo que los bienes o los servicios lleguen al suministrado
en las condiciones de calidad y puntualidad requeridas por éste.

Finalmente, cuando la obligación del suministrante tiene por objeto la transferencia de la


propiedad de cosas, éste tiene también un deber colateral de protección de las mismás hasta
la transmisión del riesgo sobre ellas y soporta asimismo las garantías por evicción y por vicios
ocultos.

Obligación del suministrado: Es la de pagar un precio por cada entrega o grupo de ellas. La
norma no precisa que el precio deba ser en dinero, sin embargo, no caben dudas acerca de
que también en este contrato tenga que reunirse este requisito. Asimismo, incumben al

3
suministrado deberes colaterales de colaboración, como ser el de recibir el bien objeto
mediato del contrato y, cuando son cosas dadas en uso, cuidar de ellas desde el momento de
la transmisión del riesgo. Tiene además una carga de información sobre defectos de la cosa
que es el presupuesto del ejercicio de la garantía por vicios ocultos correspondiente. Por
último, cabe señalar que el suministrado debe notificar al suministrante de toda variación de
sus necesidades (arts. 1178 y 1179) de modo que le permita a éste tomar las acciones
necesarias para una eficiente operación.

(Art. 1179) Las partes tienen el deber recíproco de dar aviso anticipadamente acerca de la
modificación en sus respectivas necesidades de recepción y posibilidades de entrega o
prestación de los bienes o servicios objeto mediato del suministro. En defecto de convención
el aviso debe ser dado con una anticipación que permita a la otra parte prever las acciones
necesarias para una eficiente operación.

Plazo: (Art. 1177) El contrato de suministro puede ser convenido por un plazo máximo de 20
años, si se trata de frutos o productos del suelo o del subsuelo, con proceso de elaboración o
sin él, y de 10 años en los demás casos. El plazo máximo se computa a partir de la primera
entrega ordinaria.

Precio: (Art. 1181) En principio las partes pueden pactar libremente tanto el importe como las
modalidades de pago del precio. En el caso de que no digan nada, el importe del mismo debe
ser determinado según las siguientes reglas:

a. el que resulte de los usos;


b. en su defecto, el precio de prestaciones similares que efectúe el suministrante;
c. a falta de esas pautas, el correspondiente al valor de plaza. En cuanto al plazo, en
defecto de convención, el precio debe cancelarse dentro de los diez días del mes
calendario siguiente a aquél en que ocurrió la entrega de los bienes o la prestación de
los servicios.

Cláusula de exclusividad y de preferencia: Art- 1182

(Art. 1182) El pacto de preferencia constituye un efecto accidental del contrato de suministro,
que puede estar convenido en beneficio de ambas partes o de una sola de ellas, cuyos efectos
son:

a. el derecho de prelación a favor del beneficiario del mismo;


b. la obligación del promitente de comunicarle su decisión de renovar el contrato en todo
o en parte, con relación al mismo o similar objeto, indicando las condiciones en las que
proyecta contratar con terceros, todo ello en la forma y condiciones pactadas en el
contrato. A falta de estipulación, se aplican la forma y condiciones de uso.

En defecto de convención y de uso, el promitente debe notificar al beneficiario las condiciones


del nuevo contrato con una antelación de 30 días a la terminación del que se pretende
renovar, mientras que el segundo debe hacer saber al primero si hará valer su derecho de
preferencia dentro de los 15 días de recibida la notificación. En caso de silencio del
beneficiario, su derecho de prelación caduca.

4
El artículo, establece dos requisitos que deben observarse para la celebración del pacto de
preferencia, uno referido al objeto y el otro al tiempo:

Objeto: En efecto, para que este pacto sea válido él debe referirse a la celebración de un
contrato sucesivo de suministro con el mismo o similar objeto de aquél al cual el pacto accede.

Tiempo: Para que sea válido, la duración de la obligación no debe exceder de tres años. Sin
embargo, si las partes estipulan un término mayor el pacto no es nulo, sino que el mismo
queda limitado temporalmente al máximo legal permitido. La cláusula de exclusividad es un
elemento accidental del contrato de suministro, y como tal debe estar expresamente
estipulada por las partes. Si nada dicen acerca de ella, no tendrá lugar.

Extinción:

Las causales pueden ser:

a. Con plazo determinado: por vencimiento del plazo contractual;


b. Con plazo indeterminado: por rescisión unilateral (con preaviso oportuno): (Art. 1183)
En los contratos con plazo indeterminado cualquiera puede ponerle fin, porque nadie
se obliga para siempre, con un preaviso de sesenta días según las condiciones pactadas
(de no existir pacto se aplican los usos) que tiene como finalidad permitirle al contrario
reacomodar su negocio o cerrarlo en forma ordenada. Si la duración del suministro no
ha sido establecida expresamente, cualquiera de las partes puede resolverlo
c. Por cumplimiento del objeto: se satisficieron todas las prestaciones o necesidades del
suministrado o se entregaron en forma íntegra las cosas a suministrar;
d. Por incumplimiento de una obligación esencial: (Art. 1184) En caso de incumplimiento
de las obligaciones de una de las partes en la prestación singular, la otra puede
resolver el contrato en forma unilateral si el incumplimiento es de tal importancia que
ponga razonablemente en duda la posibilidad de atender con exactitud los posteriores
vencimientos.

Nota: (Art. 1185) es importante saber que en el caso de que los incumplimientos de una parte
no tengan las características del artículo 1184, la otra parte sólo puede suspender sus
prestaciones hasta tanto se subsane el incumplimiento, si ha advertido al incumplidor
mediante un preaviso otorgado en los términos pactados o, en su defecto, con una
anticipación razonable atendiendo a las circunstancias. La suspensión debe ser acordada, o
bien al inicio del contrato, pactándosela expresamente, o bien tácitamente en cuanto el
suministrante suspende su prestación y el suministrado lo acepta. No resulta procedente que
el suministrado suspenda las prestaciones a su cargo cuando la otra parte cumplió, dado que
no puede dejar de pagar lo ya recibido.

(Art. 1186) Todo lo que no esté previsto específicamente en este contrato, se regirá por las
reglas de los contratos a que las prestaciones singulares correspondan, con las que sean
compatibles.

4) Cto. de locación: una parte se obliga a otorgar el uso y goce temporario de una cosa, a
cambio del pago de un precio en dinero. Se aplican en subsidio lo dispuesto con respecto al
consentimiento, precio y objeto del contrato de compraventa. Si es de locación de cosa
inmueble o mueble registrable deber ser hecho por escrito, con limitación en el tiempo del uso

5
y goce y tener precio determinado (sin precio no hay locación). Es consensual, bilateral,
oneroso y de duración y tracto sucesivo. En caso de muerte la locación se transmite activa y
pasivamente y se respeta el tiempo convenido, incluso si la cosa locada es enajenada.

Si la locación es con destino habitacional, no pueden pedirse más de un mes de pago


anticipado, depósito de garantía por cantidades mayores al importe de un mes de alquiler por
año de locación contratado o pago del valor de la llave.

Si la locación es con destino habitacional tiene un máximo de 20 años y si es con otros


destinos. 50. El plazo mínimo legal es de dos años excepto a los contratos de locación de
inmuebles destinados a sede de embajada, consulado u organismo internacional, muebles con
fines de turismo, guardado de cosas o exposición u oferta de cosas.

Obligaciones del locador: entregar la cosa y conservarla con aptitud para el uso convenido. Si
se interrumpe el uso o goce convenido debe pagar mejoras.

Obligaciones del locatario: pagar canon convenido y cargas y contribuciones, conservar y


mantener la cosa en buen estado, restituir la cosa al finalizar el contrato y, si se frustra el uso
o goce por razones de fuerza mayor o caso fortuito, puede pedir una reducción del canon o la
recisión del contrato.

Mejoras: el locatario puede realizar mejoras excepto que esté prohibido en el contrato. No
tiene derecho a reclamar el pago de mejoras útiles y de lujo o suntuarias, en cambio si puede
reclamar mejores necesarias.

Sublocación: excepto pacto en contrario, el locatario puede sublocar la cosa locada. Debe
comunicárselo al locador indicando fecha fehaciente, nombre y domicilio, debiendo responder
a los 10 días (silencio = conformidad).

Extinción: se puede extinguir por cumplimiento del plazo convenido o por resolución
anticipada.

Responsabilidad:
1. Incumplimiento de la obligación contractual o extracontractual
2. Mora
3. Factores de atribución de responsabilidad: pueden ser subjetivos (dolo/culpa) u
objetivos (teoría del riesgo/abuso del derecho/etc)
4. Daño
5. Relación de causalidad

Incumplimiento: en sentido estricto, se dice responsable a quien, por no haber cumplido, se le


reclama indemnización. Esta es la acepción que comúnmente se da al concepto, en cuanto
concierne al deber de reparar el daño jurídicamente atribuible causado por el incumplimiento

5) Cto. de leasing. Es un contrato de finalidad financiera que permite la transmisión del


uso y goce de una cosa, con la opción de compra sobre la misma; puede ser usado en función

6
de garantía mobiliaria o inmobiliaria. El leasing utilizado con finalidad de garantía lo vimos en
fideicomiso de garantía.

Objeto. Pueden ser objeto del contrato cosas muebles e inmuebles, marcas, patentes o
modelos industriales y software, de propiedad del dador o sobre los que el dador tenga la
facultad de dar en leasing

Modalidades en la elección del bien. El bien objeto del contrato puede:

a. Comprarse por el dador a persona indicada por el tomador;


b. Comprarse por el dador según especificaciones del tomador o según catálogos, folletos
o descripciones identificadas por éste;
c. Comprarse por el dador, quien sustituye al tomador, al efecto, en un contrato de
compraventa que éste haya celebrado;
d. Ser de propiedad del dador con anterioridad a su vinculación contractual con el
tomador;
e. Adquiere por el dador al tomador por el mismo contrato o habérselo adquirido con
anterioridad;
f. Estar a disposición jurídica del dador por título que le permita constituir leasing sobre
él. Forma e inscripción.

Responsabilidades, acciones y garantías en la adquisición del bien. En los casos de los incisos
a), b) y c) del artículo anterior, el dador cumple el contrato adquiriendo los bienes indicados
por el tomador. El tomador puede reclamar del vendedor, sin necesidad de cesión, todos los
derechos que emergen del contrato de compraventa. El dador puede liberarse
convencionalmente de las responsabilidades de entrega y de las garantías de evicción y vicios
redhibitorios.

En los casos del inciso d) del artículo anterior, así como en aquellos casos en que el dador es
fabricante, importador, vendedor o constructor del bien dado en leasing, el dador no puede
liberarse de la obligación de entrega y de la garantía de evicción y vicios redhibitorios.

En los casos del inciso e) del mismo artículo, el dador no responde por la obligación de entrega
ni por garantía de evicción y vicios redhibitorios, salvo pacto en contrario.

En los casos del inciso f) se aplicarán las reglas de los párrafos anteriores de este artículo,
según corresponda a la situación concreta.

Forma: Uso y goce del bien. El tomador puede usar y gozar del bien objeto del leasing
conforme a su destino, pero no puede venderlo, gravarlo ni disponer de él. Los gastos
ordinarios y extraordinarios de conservación y uso, incluyendo seguros, impuestos y tasas que
recaigan sobre los bienes y las sanciones ocasionadas por su uso, son a cargo del tomador,
salvo convención en contrario.

El tomador puede arrendar el bien objeto del leasing, salvo pacto en contrario. En ningún caso
el locatario o arrendatario puede pretender derechos sobre el bien que impidan o limiten en
modo alguno los derechos del dador.

Canon. El monto y la periodicidad de cada canon se determina convencionalmente.

7
Acción reivindicatoria. La venta o gravamen consentido por el tomador es inoponible al dador.
El dador tiene acción reivindicatoria sobre la cosa mueble que se encuentre en poder de
cualquier tercero, pudiendo hacer aplicación directa sin perjuicio de la responsabilidad del
tomador.

El leasing debe instrumentarse en escritura pública si tiene como objetos inmuebles, buques o
aeronaves. En los demás casos puede celebrarse por instrumento público o privado.

Normás supletorias: se le aplican subsidiariamente las reglas del contrato de locación, en


cuanto sean compatibles, mientras el tomador no ha pagado la totalidad del canon y ejercido
la opción, con pago de su precio. No son aplicables al leasing las disposiciones relativas a
plazos mínimos y máximos de la locación de cosas ni las excluidas convencionalmente.

Opción de compra. Ejercicio. La opción de compra puede ejercerse por el tomador una vez que
haya pagado tres cuartas (3/4) partes del canon total estipulado, o antes si así lo convinieran
las partes.

6) CTO. DE OBRA Y SERVICIO.

7)CTO. DE TRANSPORTE

8) CTO. DE CONSIGNACION:(Art. 1335) Es una especie del mandato sin representación para
la venta de cosas muebles. Como consecuencia, se señala que a este contrato se le aplican
supletoriamente las disposiciones referidas al contrato de mandato.

Requisitos:

a. La existencia de un mandato, es decir, que una parte se obligue a realizar uno o más
actos jurídicos en interés de la otra (art. 1319 CCyC). En consecuencia, el contrato de
consignación podrá ser conferido y aceptado expresa o tácitamente. Resulta aplicable
el art. 1319 CCyC, que establece que, si una persona sabe que alguien está haciendo
algo en su interés y, pudiendo hacerlo, no lo impide, se entiende que ha conferido
tácitamente mandato.
b. Que ese mandato sea otorgado sin representación, es decir, que el consignante no
haya otorgado poder para ser representado y que el consignatario actúe en nombre
propio, pero en interés del mandante.
c. Que el encargo del contrato sea una venta de cosas muebles.

Cuando se reúnan tales exigencias, habrá contrato de consignación, que se regirá por las
disposiciones de los arts. 964 y 1335 a 1344 CCyC; por las estipulaciones válidas acordadas
entre las partes; por las normás referidas al mandato, por remisión del presente artículo —que
incluyen las de la representación voluntaria en los actos jurídicos (arts. 362 y ss., y 1320
CCyC)—; y por los usos y prácticas del lugar de celebración del contrato.

Caracteres:

8
 Nominado
 Bilateral
 Consensual
 Oneroso

Finalidad Económica: Sirve de instrumento para la financiación de las mercaderías al menor o


al detalle. Este contrato es útil para el comerciante consignatario que carece de capacidad
financiera, ya que le permite negociar en su comercio la mercancía sin tener que haber pagado
por ella previamente; no tiene que asumir los riesgos financieros que implica una compra pues
el consignante es quien asume dichos riesgos. En el caso de que el consignatario logre vender
la mercadería en su comercio, deberá al consignante el precio acordado para la misma y podrá
hacer suyo el mayor valor logrado en la venta. Por otro lado, para el consignante significa un
ahorro en espacios al tener los productos en diferentes lugares.

Partes:

Consignante: Es dueño de la mercadería, y es quien se la entrega al comerciante. Luego de


vendida, debe pagar la comisión acordada.

Consignatario: Es quien se compromete a vender las cosas en un determinado tiempo. Sus


obligaciones son: la conservación de la mercadería, venderlas y pagar el precio de la comisión
o bien devolver la mercadería en caso de no venderla. (1338) El consignatario debe ajustarse a
las instrucciones recibidas, y es responsable del daño que se siga al consignante por los
negocios en los que se haya apartado de esas instrucciones. (1340) El consignatario está
habilitado a otorgar crédito, siempre y cuando esta modalidad no haya sido prohibida por el
consignante. El otorgamiento del crédito requiere de la diligencia del consignatario, quien va a
tener que considerar las circunstancias de tiempo, modo y lugar. En caso de que el
consignatario no cumpla con una prohibición impuesta por el consignante o no actúe
diligentemente, será responsable frente a aquel. (Art. 1341) Tiene prohibido comprar o vender
para sí mismo las mercaderías de la consignación.

Principio de Indivisibilidad: (Art. 1336) Una vez aceptada la consignación, se presume que lo
ha sido en el todo. El consignatario, por lo tanto, deberá ejecutarla en forma íntegra.

Plazo: (Art. 1339) El consignatario se presume autorizado a otorgar los plazos de pago que
sean de uso en el lugar. Si otorga plazos contra las instrucciones del consignante, o por
términos superiores a los de uso, está directamente obligado al pago del precio o de su saldo
en el momento en que hubiera correspondido.

Pago: (Art. 1342, 1343 y 1344) A falta de acuerdo sobre la retribución, la remuneración es la
que establecen las disposiciones legales o reglamentarias aplicables, o por el uso. A falta de
ambos, debe ser determinada por el juez.

Es importante saber que existe dos tipos de comisiones: ordinaria y extraordinaria. La ordinaria
(simple) es la referida a la ejecución de la consignación encomendada; en cambio la
extraordinaria es aquella comisión que se debe al consignatario solo si se pacta.

9
Por último, en el caso de que el consignatario devuelva las cosas dentro del plazo pactado, no
le debe al consignante el precio de las mismás.

CTO. DE DEPOSITO: Hay contrato de depósito cuando una parte (depositario) se obliga a
recibir de otra una cosa (mueble o inmueble) con la obligación de custodiarla y restituirla con
sus frutos. La función social y económica del contrato de depósito es la custodia de las cosas
depositadas. La guarda y la custodia de las cosas es una obligación principal del depositario. La
obligación de custodia es intransferible y debe cumplirla el depositario personalmente”.

CARACTERES:

 ONEROSO: El contrato de depósito se presume oneroso, según la previsión del


artículo 1357 (el depósito se presume oneroso. Si se pacta gratuidad, no se debe
remuneración, pero el depositante debe reembolsar al depositario los gastos razonables
en que incurra para la custodia y restitución). La gratuidad debe derivar de convención
expresa.
 NO FORMAL: No contiene exigencia formal alguna, con excepción del recibo que
deben otorgar las empresas de depósito según el artículo 1377, inc. A( dar recibo de las
cosas que le son entregadas para su custodia).
 BILATERAL: Existen obligaciones reciprocas entre las partes. El depositante paga el
precio para la guarda y custodia. Por otro lado, el depositario tiene la obligación de la
guarda y custodia de la cosa depositada.
 DE CONSUMO: El contrato de depósito es reputado un contrato de consumo desde la
óptica del proveedor del servicio (depositario). El artículo 2 de la ley de defensa del
consumidor (24.240), define al proveedor(depositario) como toda persona física o
jurídica de naturaleza pública o privada, que desarrolla de manera profesional u
ocasionalmente actividades tales como la comercialización de bienes y servicios,
destinados a consumidores o usuarios. La jurisprudencia lo califica como contrato de
consumo, ya que existe una relación de consumo entre las partes.
 CONSENSUAL: Se perfecciona con el consentimiento de las partes. El código de
Vélez lo clasificaba como real.
 DE TRACTO SUCESIVO O DE DURACION: Es decir su objeto se cumple a través
de la prolongación del tiempo y de su cumplimiento continuo.
 NOMINADO: Está regulado expresamente en el código.-

OBLIGACION DEL DEPOSITARIO: El depositario debe poner en la gurda de la cosa la


diligencia que usa para sus cosas o la que corresponde a su profesión. No puede usarlas cosas y
debe restituirla con sus frutos, cuando le sea requerido. Cuando la cosa depositada sufra algún
desmedro, se pierda o perezca por culpa del depositario, este responderá ante el depositante por
los daños y perjuicios sufridos por el incumplimiento de su obligación de custodia.

PLAZO DEL DEPÓSITO: Si se conviene un plazo, se presume que lo es a favor del


depositante. Pero si el depósito es gratuito, el depositario puede exigir del depositante, en todo
tiempo, que reciba la cosa depositada (artículo 1359). El contrato de depósito generalmente es
un contrato de duración, es usual en esta clase de contratos que no se estipule plazo. La norma
establece la presunción, que puede ser desvirtuada por pacto en contrario, que, si se convino un
plazo, este lo es a favor del depositante; esto significa que el depositante puede pedir la
restitución de la cosa en cualquier tiempo (se aplica al depósito oneroso).

10
LUGAR DE RESTITUCION: La cosa depositada debe ser restituida en el lugar en que debía
ser custodiada (artículo 1361). La restitución debe hacerse al depositante o a quien este indique.
El depositario tiene la obligación de restituir la cosa y se libera al entregarla a la persona
legitimada para recibirla; en caso de realizar la entrega a otro, deberá responder por los daños
ocasionados al depositante por su incumplimiento.

PERDIDA DE LA COSA (ARTÍCULO 1364): Si la cosa depositada perece sin culpa del
depositario, la pérdida debe ser soportada por el depositante. En el caso del depósito regular, en
el cual debe restituir la misma cosa que recibió más sus frutos, si se pierde por negligencia del
depositario, este deberá indemnizar los daños ocasionados por su culpa. Si la cosa se pierde sin
culpa del depositario, la perdida será soportada por el depositante, es decir, su dueño. Distinta es
la solución si el depósito es irregular, siendo la cosa depositada fungible, la cual siempre puede
ser reemplazada por otra dela misma especie.

CLASES DE DEPÓSITO:

 CONVENCIONAL: Está regulada por el código civil y comercial.


 LEGAL: Ej.: los alimentos del padre al hijo. Cuando realiza el depósito para ello.
 PROCESAL: Este se encuentra regulado por el código procesal.
MODALIDADES: El depósito puede ser voluntario o necesario.

VOLUNTARIO: Es voluntario cuando el depositante elige libremente al


depositario.
REGULAR: Es regular cuando el depositario solo adquiere la tenencia de la cosa,
no la puede usar. Son casos de depósito regular:
a) cuando la cosa depositada fuere inmueble o mueble no consumible
(excepcionalmente en este supuesto el depositante puede conceder al
depositario el uso de la cosa). Ejemplo: Juan le entrega a Pedro un auto en
depósito.
b) cuando fuere dinero o cosas consumibles entregadas en caja cerrada con llave o
sellada.
IRREGULAR: El depósito irregular transfiere la propiedad de la cosa depositada
al depositario. Para el depositante es irrelevante lo que el depositario haga con el
dinero o las cosas fungibles que le entrego, aun cuando no haya autorizado y aun
prohibido su uso. En tanto el depositario del depósito irregular tiene la propiedad de
las cosas depositadas, tiene también su uso. Lo que importa es que al término
señalado se le entregue al depositante una suma equivalente o una cantidad, especie
y calidad igual de cosas fungibles. Esta es la única obligación que impone la ley al
depositario irregular. Sí el depositante entrega la cosa en saco o en caja cerrada que
la contenga, sin entregar la llave, el depósito ya no es irregular, ya que dicho envase
cerrado con su contenido conforma una cosa cierta e individualizable, por lo que el
depósito es regular y se le aplica las normas correspondiente a esta modalidad. Son
casos de depósito irregular: cuando la cosa depositada fuere dinero, o cosas
consumibles entregadas al depositario en caja no cerrada con llave o sin cerrar, o si
el depositante concede al depositario el uso de ellas (aunque el depositante
prohibiera al depositario el uso dela cosa, este podrá usarla igual si la caja no
estuviera con llave o sin sellar).
NECESARIO O FORZOSO: Es aquel en el que el depositante no puede elegir la
persona del depositante por un acontecimiento que lo somete a una necesidad

11
imperiosa. Los efectos introducidos en los hoteles por los viajeros, también es
considerado un depósito necesario, ya que se reduce la libertad de elección.
La diferencia entre el depósito voluntario y el depósito necesario consiste en el menor grado de
libertad del depositante en elegir al depositario. La situación urgente de necesidad acota la
libertad del depositante al no poder elegir libremente al depositario (ej.: un incendio).

El depósito en los hoteles tiene lugar por la introducción en ellos de los efectos de los viajeros,
aunque no los entreguen expresamente al hotelero o sus dependientes y aunque aquellos tengan
las llaves de las habitaciones donde se hallen tales efectos. El viajero inevitablemente tiene que
dejar sus pertenencias en el mismo lugar donde se hospede, es por ello que se considera un
depósito necesario al no tener alternativa de elección. Este contrato se perfecciona en el
momento en el que el viajero introduce sus efectos personales en el hotel. El hotelero responde
al viajero por los daños y pérdidas sufridas en: los efectos introducidos en el hotel; en el
vehículo guardado en el establecimiento, garajes u otros lugares puestos a disposición del
viajero por el hotel.

La responsabilidad del hotelero es objetiva, nace con el daño causado a las pertenencias
introducidas por el viajero al hotel. El hotelero no responde si los daños o pérdidas son causados
por caso fortuito o fuerza mayor ajena a la actividad hotelera. Tampoco responde por las cosas
dejadas en los vehículos de los viajeros. La regla general es que el hotelero, como todo
depositario, se presume responsable de toda perdida o daño sufrido en las cosas de los viajeros,
a menos que demuestre que se ha originado en caso fortuito fuerza mayor ajena a la actividad
hotelera.

Cuando se trata de objetos de gran valor (ej.: joyas, sumas de dinero importantes, etc.)el viajero
debe hacer saber al posadero que los tiene en su poder y debe también guardarlos en caja de
seguridad que se encuentren a su disposición en el hotel y declarar el valor de los efectos
depositados; de no proceder así, el hotel no responde por su perdida. Con base en la autonomía
de la voluntad (artículo 1373, negativa a recibir). Esta norma otorga al posadero la opción de
negarse recibir los efectos quesean excesivamente valiosos con relación a la importancia del
establecimiento. Las cláusulas pactadas que excluyen o limitan la responsabilidad se tienen por
no escritas siempre. Esta limitación a la autonomía de la voluntad de las partes es de orden
público.

El artículo 1375 del código civil y comercial extiende el ámbito de aplicación del régimen de
depósito a todo establecimiento que preste sus servicios a título oneroso (ej.: restaurantes,
garajes, playas de estacionamiento, etc.). los establecimientos comprendidos en esta norma son
aquellos en los que el depósito necesario es anexo a la actividad principal de los mismos. Es
decir que el depósito de efectos personales de huéspedes, pacientes internados en hospitales u
sanatorios, usuarios de vehículo y personas que concurren a otros establecimientos similares no
constituye el negocio al que se dedican a título oneroso los establecimientos mencionados.

OBLIGACIONES DE LAS PARTES:

 DEL DEPOSITARIO (DEPÓSITO REGULAR): Debe guardar y conservar la cosa,


debe hacerlo con la misma diligencia que en las cosas propias. Si la cosa se deteriora o
se pierde debe responder por ello, salvo que se deba a fuerza mayor. A veces para
conservar la cosa es necesario hacer gastos, si se trata de gastos urgentes, el depositario
está obligado a realizarlas y luego pedir reembolso. Si se trata de gastos necesarios
(pero no urgentes), su obligación se limita a dar aviso de la necesidad al depositante, y
12
si este no le envía dinero para los gastos, el depositario queda libre de responsabilidad.
Debe guardar secreto sobre la cosa depositada, además cuando el depósito consiste en
una caja o bulto cerrado, el depositario debe abstenerse de abrirlo salvo que esté
autorizado por el depositante. No puede usar la cosa que está bajo su guarda, salvo que
tenga autorización. Si la usa sin autorización deberá responder, ejemplo: si fuere dinero
entregado en bulto o caja cerrada deberá pagar los intereses por el uso del dinero. Por
último, deberá restituir la misma cosa con sus frutos y accesorios.
 DEL DEPOSITARIO (DEPÓSITO IREGULAR): Debe restituir la cosa, esta es la
única obligación que tiene el depositario; es lógico ya que el depositante le es
indiferente el uso que el depositario le dé a la cosa mientras que una vez cumplida el
plazo le restituya la misma cantidad de igual calidad.
 DEL DEPOSITANTE: Debe reembolsar los gastos al depositario. Por otro lado, lo
debe indemnizar al depositario de los perjuicios que le ha ocasionado el depósito. Debe
pagar la remuneración arreglada y por último recibir la cosa.
DEPÓSITO BANCARIO: Este tiene lugar cuando el depositante transfiere la propiedad
(dinero) al banco depositario, quien tiene la obligación de restituirlo en la moneda dela misma
especie, al simple requerimiento del depositante o al vencimiento del término o del preaviso
convencionalmente previsto. Este tipo de depósito se distingue del depósito irregular que se
presume oneroso, y es el depositante quien debe la remuneración, en cambio en el depósito
bancario la remuneración la debe el depositario.

CONTRATO DE GARAJE

El contrato de garaje es aquel por el cual un sujeto deja en custodia un vehículo por un
período de tiempo determinado, pudiendo ser oneroso o gratuito. Si es gratuito, por lo general,
será accesorio de otro contrato oneroso como lo es el de shopping center, expendio de comidas
rápidas, hotelería, etc. No debe confundirse el contrato de garaje con el de la locación de un
espacio “guardacoches” –el que se regirá por las normas de la locación– ni con el
estacionamiento medido en la vía pública, que se regirá por las normas del derecho público. La
nota distintiva con la locación de un “espacio guardacoches” se encuentra dada por la
periodicidad del pago –suele ser mensual, en la locación–, por la posibilidad del dueño del
vehículo de ingresar y salir cuando quiera. Cabe aclarar que en materia de locaciones el art.
1199 del CCyCN ha excluido, en el inc. c), a los espacios para guarda de cosas muebles del
plazo mínimo legal que impone el art. 1198. En efecto, el legislador ha dejado librada a la
autonomía de la voluntad de las partes la determinación de la duración del contrato para la
guarda de cosas muebles. Sin embargo, debemos señalar que la principal diferencia radica en
que, en el contrato de garaje, prima la existencia de una actividad comercial, con la posibilidad
de pagos por hora, por estadía o por mes; pudiendo, además, el contrato de garaje funcionar
como un contrato accesorio al de hotelería, del expendio de comidas rápidas, etc. Señala en este
sentido Lorenzetti que el contrato de garaje es más complejo que los casos de locación de
espacio guardacoches, ya que el primero contempla el uso y goce del espacio para el vehículo,
su custodia y los servicios adicionales que pudiere haber (por ej., el lavado del automóvil). A su
vez, la distinción entre contratos de garaje onerosos y gratuitos tendrá, desde el punto de vista
normativo –como veremos más adelante–, una particular influencia a la hora de medir la
extensión de la responsabilidad del prestador del servicio de garaje. Es que, en efecto, el
contrato de garaje ha sido regulado a partir de considerarlo un supuesto de “depósito necesario”,
partiendo del caso en que el vehículo se introduce en un hotel y expandiendo dicha figura a los

13
demás supuestos del contrato de garaje (arts. 1370, inc. b], y 1375, CCyCN). De este modo,
veremos cómo juegan las normas de los arts. 1370 a 1375 del CCyCN a los fines de sistematizar
Krieger, Walter F., en Código Civil y Comercial de la Nación, Comentado, anotado y
concordado, Lidia M. R. Garrido Cordobera, Alejandro Borda y Pascual Alferillo (dirs.), Walter
F. Krieger (coord.), Buenos Aires, Astrea, 2017, t. 2, pág. 479. (2) Lorenzetti, Ricardo L.,
Tratado de los contratos, Santa Fe, Rubinzal-Culzoni, 2006, t. III, pág. 690. la responsabilidad
de los garajistas, sin olvidar que, en los supuestos en los que el prestador del servicio lo haga en
forma profesional con destino final para el usuario, deberá complementarse, además, con la
responsabilidad regulada en las normas de la Ley de Defensa del Consumidor(3). III Los
supuestos de responsabilidad Señala el art. 1370, inc. b), del CCyCN que el hotelero responde
por “el vehículo guardado en el establecimiento, en garajes u otros lugares adecuados puestos a
disposición del viajero por el hotelero”. Asimismo, el art. 1375 en su primer párrafo (del
segundo nos ocuparemos luego) señala: “Las disposiciones de esta sección se aplican a los
hospitales, sanatorios, casas de salud y deporte, restaurantes, garajes, lugares y playas de
estacionamiento y otros establecimientos similares que prestan sus servicios a título oneroso”.
Una interpretación literal de la norma citada con el texto de los arts. 1371 a 1374 del CCyCN
nos lleva a concluir que la remisión a la que hace referencia el art. 1375 del CCyCN no lo es
solo a los fines de la regulación de la custodia de los vehículos, sino que lo es de todos los
bienes introducidos por los usuarios a los establecimientos enumerados; considerándose en
dichos casos un “depósito necesario”(4). Ahora bien, esta conclusión implica, aunque sea
redundante, señalar que, en la cuestión atinente a la custodia de vehículos, se aplican también
las normas de los arts. 1372 a 1375 del CCyCN, y se incorporan, en consecuencia, nuevos
deberes de conductas de las partes, particularmente en los supuestos en los casos en los que los
contratos de garaje se celebran a título gratuito. Así, no caben dudas de que la responsabilidad
del prestador del servicio de garaje es, en primer término, una “obligación de resultado”,
debiendo responder por la integridad de los bienes dejados en custodia (sean automóviles,
motocicletas o bicicletas), siendo además esta responsabilidad agravada, puesto que no podrá
eximirse por el accionar de terceros(5). Por otro lado, el legislador ha generado una clara
división entre el contrato de garaje “gratuito” o como derivado de un “depósito necesario” para
un contrato principal, como puede ser el de hotelería o el de los demás supuestos enunciados en
el art. 1375, párr. 1º; y los casos en que los contratos de garaje se constituyen a título oneroso.
Esta distinción que venimos señalando surge en forma expresa del párr. 2º del art. 1375 que
señala: “La eximente prevista en la última frase del art. 1371 del CCyCN, no rige para los
garajes, lugares y playas de estacionamiento que prestan sus servicios a título oneroso”.
Parecería ser, entonces, que la diferencia principal entre la gratuidad y la onerosidad en el
contrato de garaje, estaría dada por la extensión en el deber de reparar; de modo que, si el
contrato es oneroso, el titular del garaje responde por los bienes que se encontraban dentro del
vehículo, mientras que, si es gratuito, está eximido de dicha responsabilidad.

EXIMENTES DE RESPONSABILIDAD

La responsabilidad del garajista es consecuencia de un deber de resultado y que solo


debería encontrar limitaciones respecto de los bienes dejados en el vehículo en la medida en que
la existencia de estos no haya podido ser prevista por el prestador del servicio. Asimismo,
compartiendo la postura de Pandiella, hemos referido a que la responsabilidad es agravada,
puesto que no permite el hecho de un tercero como eximente de responsabilidad. Esta
afirmación se sustenta en el texto del art. 1371 del CCyCN, que establece las eximentes de

14
responsabilidad en los supuestos de “depósito necesario” aplicables al garajista; sosteniendo la
norma que la única eximente de responsabilidad es la “causa ajena” a la actividad hotelera. Este
concepto de “causa ajena” comprende, entonces, además del “caso fortuito o fuerza mayor”, los
daños sufridos por culpa del depositante o de sus dependientes. Así, queda excluido el hecho del
tercero como causal de eximente de responsabilidad, modificándose lo que establecía el anterior
art. 2236 del cód. civil, que permitía la exclusión de la responsabilidad por robo cuando este se
hubiere producido con escalamiento o con el uso de armas. Esta modificación, entendemos, se
encuentra debidamente sustentada en los acontecimientos diarios y en las expectativas del
usuario que deja su auto en un garaje; la principal finalidad del contrato es justamente el
resguardo del vehículo. Asimismo, la posibilidad de un robo, aun con armas, es una posibilidad
que debe ser previsible por el garajista en los términos del art. 1728 del CCyCN y, por lo tanto,
integra la parte medular de los riesgos que este asume. Por otro lado, un argumento en contrario
que permita al garajista eximirse de la responsabilidad por robo –aun con armas o con
escalamiento como establecía el Código Civil– vacía de sentido el contrato de garaje, pues ¿cuál
sería la diferencia para el usuario entre dejar su auto en un garaje o en la calle? Cabe señalar,
además, que la carga de la “causa ajena” siempre estará a cargo del garajista, puesto que, por
imperio del art. 1734 del CCyCN, la carga de la prueba de las eximentes de responsabilidad
recae sobre quien las alega.

CLÁUSULAS DE EXIMICIÓN DE RESPONSABILIDAD.

DEBER DE INFORMACIÓN

El régimen de las obligaciones emergentes del contrato de garaje se encuentra


atravesado, además, por la Ley de Defensa del Consumidor 24.240.. Considerando, entonces, el
contenido de estas normas, las indicaciones que normalmente se observan en las playas de
estacionamiento y garajes que rezan que “el establecimiento no se hace responsable por los
daños a los vehículos” no solo resultan inoponibles al usuario en caso de daño, sino que además
exponen al establecimiento a la imposición de sanciones administrativas por infracción al deber
de información (art. 4º, LDC).

10) Ctos. bancarios


Los bancos son intermediarios entre oferta y demanda de dinero; aceptan dinero de los
clientes a cambio de servicios (caja de seguridad, cuenta corriente, etc.) y con ese dinero
hacen inversiones, presentándoselos a terceros y cobrándoles, por ello, intereses. El banco,
entonces, gana con la diferencia que saca entre los intereses que debe pagarle a los clientes
(tasa pasiva) que depositan su dinero (por ej: en caja de ahorro o en plazo fijo) y lo que le
cobra a los terceros por prestarles dinero (tasa activa).

EL BANCO HACE DOS TIPOS DE OPERACIONES.- -

Activas: al prestarle dinero a terceros, cobra intereses (tasa activa). -

Pasivas: al recibir dinero de los clientes, paga intereses (tasa pasiva)que depositan su dinero
(por ej: en caja de ahorro o en plazo fijo). Los depósitos de los clientes son muy importantes en

15
la actividad bancaria, pues permiten prestar servicios de cajeros, mantener el sistema de
tarjetas de crédito, otorgar préstamos, etc.

PARTES

Entidad financiera (banco u otros):

 Obligación de mantener a los depósitos a la vista del cliente, es decir, los clientes
deben poder retirar sus depósitos en cualquier momento.
 Emitir liquidación , resúmenes . Deber de información.

Cliente, consumidor, usuario

 Si tiene chequera, emitir cheques al dia y no sin fondos.


 Pagar los resúmenes , liquidaciones legítimás.

CARACTERES

 Bilateral: crea obligaciones recíprocas para todas las partes intervinientes.


 Oneroso: hay prestaciones recíprocas. La prestación de una de las partes tiene su
razón de ser en la contraprestación de la otra.
 De adhesión: son redactados prácticamente en todos los casos por las entidades
financieras, que incorporan a éstos Condiciones Generales idénticas para todos los
clientes que los suscriben y sobre las que tienen un margen de negociación escaso. Los
contratos bancarios suelen tener dos partes diferentes:
 Las Condiciones Generales a las que acabamos de aludir.
 Las Condiciones Particulares (datos concretos, normalmente de tipo financiero,
para la operación particular: comisiones aplicables, tipo de interés, etc.).
 De consumo: existe una relación de consumo en el cuadro del concepto del art 1092.
 Formal: se exige el requisito de instrumentalidad escrita, la ley exige una forma para
su validez, son nulos si la solemnidad no ha sido satisfecha.
 Típico (o nominado): está regulado especialmente por el Código.

Los contratos bancarios contemplados en el código son:

a. El depósito bancario (1390-1392)


b. Cta cte bancaria (1393-1407)
c. Prestamo y descuento bancario (1408-1409)
d. Apertura de crédito (1410-1412) s
e. Ervicio caja de seguridad (1413-1417)
f. Custodia de titulos (1418-1420)

Costumbre y finalidad económica.

LA CLASIFICACION DEL CONTRATO BANCARIO COMO CONTRATO DE CONSUMO. CONTRATO


CELEBRADO POR ADHESIÓN A CLÁUSULAS GRALES.PAQUETES DE SERVICIOS;CONTRATOS
CONEXOS Y ABUSIVIDAD.

16
El contrato bancario es, en general, celebrado por adhesión a cláusulas generales. Es en virtud
de la másividad de los vínculos que es necesario recurrir a una redacción unilateral, rígida y
dirigida a un público indeterminado. En la mayoría de los casos estas cláusulas generales están
elaboradas como una invitación a ofertar, la que, luego de llenada y firmada por el adherente
constituyéndose en oferta, es analizada por el banco y aceptada. Se aplica el régimen de
interpretación contra estipulatorem y de cláusulas vejatorias.

El sector de la banca ofrece una suficiente diversificación y competitividad que debería


neutralizar los abusos al incrementar las opciones con que cuenta el consumidor. Sin embargo,
la homogeneidad de los productos ofrecidos actúa como un elemento transversal de
aglutinación, lo que hace que todos ofrezcan similares condiciones con un elevado grado de
rigidez.

Este fenómeno está relacionado con otro que debemos mencionar.

Para referimos a la actividad de la banca utilizamos deliberadamente el término producto, que


es de uso en el lenguaje económico porque refleja que no sólo se dan créditos, sino servicios:
turismo, seguros, tarjetas de crédito. De este modo la competencia no se sitúa en el crédito,
sino en los servicios, lo que explica en gran medida la rigidez de las cláusulas abusivas a pesar
de la competencia, lo cual hace necesario el control que suministra el Derecho del
Consumidor.

En la actividad bancaria es muy frecuente la presentación de contratos conexos con grados


muy diversos de relación. La apertura de cuentas corrientes de gestión, sobre las cuales se
emiten tarjetas de crédito, permite condicionar recíprocamente unas y otras, a pesar de que
son contratos diferentes y, en muchos casos, sujetos distintos; la alianza estratégica del banco
con otras entidades de servicios permite establecer segmentos de clientes comunes o grupos
de afinidad, a los cuales se les ofrecen seguros, turismo, viviendas y muchos otros productos
cuyo pago es controlado por el banco mediante el sistema del débito automático y el
otorgamiento de créditos. Estas técnicas generan una indudable cautividad del cliente que se
ve asfixiado entre las diversas murallas construidas por los contratos conexos. El cliente que
entra a un banco difícilmente salga sin celebrar algún contrato, sea de crédito, de turismo,
compra de vivienda, medicina prepaga, o cualquiera de los que integran el paquete ofrecido.

La banca se ha transformado en un vehículo de comercialización de productos financieros y de


servicios, lo que hace que incorpore la técnica del marketing. Es habitual el uso de listados de
clientes {mailing), el llamado telefónico (telemarketing), la venta domiciliaria, el comercio
electrónico; todos estos aspectos son regulados en el Derecho del Consumidor y no en el
Bancario. Esta descripción nos parece suficiente como para justificar el tratamiento separado
del crédito al consumidor y de la aplicación de la ley regulatoria 24,240 y la especial referida a
las tarjetas de crédito.

Nulidad de las cláusulas que contengan intereses abusivos

La cláusula que fija intereses abusivos puede ser descalificada conforme al artículo 3° de la ley
24.240 en tanto importa una desnaturalización de las obligaciones del consumidor. Al

17
examinar los intereses en el mutuo, hemos discriminado la obligación de intereses de los
riesgos que se encubren en la tasa, lo cual es de gran utilidad para interpretar el término
desnaturalización: incluir en la tasa de interés algo que no lo es, importa desnaturalizar.

LEY 24240 ARTÍCULO 3º — Interpretación. Las disposiciones de esta ley se integran con las
normás generales y especiales aplicables a las relaciones jurídicas antes definidas, en particular
las de defensa de la competencia y de lealtad comercial. En caso de duda, se estará siempre a
la interpretación más favorable para el consumidor.

Cláusulas abusivas:

1381-Las cláusulas de remisión a los usos y prácticas bancarias para la determinación de las
tasas de interés y de otros precios y condiciones contractuales se tienen por no escritas. 1388 -
Las cláusulas relativas a costos a cargo del consumidor que no están incluidas o que están
incluidas incorrectamente en el costo financiero total publicitado o incorporado al documento
contractual, se tienen por no escritas.

Información en contratos de crédito. Nulidad: Son nulos los contratos de crédito que no
contienen información relativa al tipo y partes del contrato, el importe total del
financiamiento, el costo financiero total y las condiciones de desembolso y reembolso.

Forma. El contrato debe instrumentarse por escrito y se le reconoce al cliente, a que se le


entregue un ejemplar del contrato que hubiere celebrado (1380), por ello debe permitirle al
consumidor:

a) obtener una copia


b) conservar la información que le sea entregada por el banco;
c) acceder a la información por un período de tiempo adecuado a la naturaleza
del contrato;
d) reproducir la información archivada.

Derecho de rescisión: El cliente tiene derecho, en cualquier momento, a rescindir un contrato


por tiempo indeterminado sin pagar penalidad ni gastos que de ello devengan.

11) CTO.DE FACTORING o (factoraje):

Art. 1421: Definición. “Hay contrato de factoraje cuando una de las partes, denominada factor,
se obliga a adquirir por un precio en dinero determinado o determinable los créditos
originados en el giro comercial de la otra, denominada factoreado, pudiendo otorgar anticipo
sobre tales créditos asumiendo o no los riesgos.”

Partes: Las partes en este contrato son el factoreado (entidad comercial), que es quien efectúa
una cesión global de créditos al factor. El factor (entidad financiera) es quien se obliga a
adquirir esa mása de créditos cedidos por un precio en dinero convenido entre las partes. Se
trata de un contrato en el que ambas partes suelen ser empresarios.

El factor será habitualmente una entidad financiera, se trata de la empresa que adquiere las
facturas de sus clientes. El factoreado es el empresario que vende bienes o proporciona
servicios a terceros y a plazos.

18
Objeto: El contrato puede comprender la cesión de la totalidad de los créditos generados por
el factoreado o un conjunto de ellos. Si se limitara a un único crédito no se trataría de un
factoraje, sino de una cesión de derechos. Es de la esencia del factoraje la globalidad de la
cesión ya que tiene que ver con la dispersión del riesgo asumido por el factoreado, la que le
posibilita adelantar fondos al factor. Puede referirse a créditos ya determinados, devengados,
exigibles o pendientes de vencimiento, presentes o futuros, determinables según alguna pauta
objetiva establecida en el contrato. La globalidad de la cesión determina la diferencia
sustantiva entre este contrato y el de cesión de derechos, que opera con relación a algún
negocio en particular.

Elementos: Capital, interés y tiempo.

Art. 1424: Contrato. Elementos que debe incluir. 1) la identificación de las partes —factor y
factoreado—, con los elementos necesarios para ello, según su naturaleza; 2) el detalle de los
derechos de crédito que se transmiten; 3) los datos necesarios para identificar los documentos
representativos de los derechos de crédito; 4) los importes y fechas de emisión y vencimiento
de los créditos transmitidos.

Art. 1425: Efecto del contrato. El documento contractual es título suficiente de transmisión de
los derechos cedidos.

Art. 1426: Garantía y aforos. Las partes en el contrato de factoraje pueden convenir diversas
garantías para reducir los riesgos de incobrabilidad asumidos por el factoreado en la
operación. De tal modo, la norma prevé, expresamente, tres tipos de mecanismos:

 garantías reales, que permiten asegurar cualquier crédito, puro y simple, a plazo,
condicional o eventual, el que debe individualizarse adecuadamente por medio de sus
sujetos, objeto y causa, quedando cumplido el requisito de la especialidad con la
expresión del monto máximo del gravamen
 garantías personales, las que por vía del contrato de fianza puede garantizar toda
obligación actual o futura, incluso la de otro fiador.
 aforo, que es el porcentaje deducido del valor nominal de cada crédito, que el factor
retiene cuando adelanta el pago al factoreado, con la finalidad de cubrir el riesgo de
incobrabilidad.

Art. 1428: Notificación al deudor cedido. La transmisión de los derechos del crédito cedido
debe ser notificada al deudor cedido por cualquier medio que evidencie razonablemente la
recepción por parte de éste.

12. CTOS.ASOCIATIVOS:

13. CTO. DE AGENCIA:

19

Вам также может понравиться