ESTRATIGRAFÍA DEVÓNICA-CARBONÍFERA EN LA CUENCA MADRE DE DIOS, BOLIVIA:

POZOS PANDO X-1 Y MANURIPI X-1

Resumen

La nueva información de dos perforaciones en la cuenca de Madre de Dios en el norte de Bolivia,

sugiere que la cuenca de antepaís paleozoica (zona del Altiplano y Cordillera Oriental) llegaba
hasta esta zona. Los pozos Pando X-1 y Manuripi X-1 alcanzaron profundidades de 1968 y 1542
m respectivamente, con registro continuo, terminando el primero de ellos en basamento cristalino
y el segundo dentro del Devónico. Ambos pozos atraviesan los formaciones Bala (Terciario) y
Beu (Mesozoico), este último en disconformidad sobre el Paleozoico superior. En el estudio del
Paleozoico superior se ha utilizado la nomenclatura estratigráfica de la cuenca de Madre de Dios.
Las litologías del Devónico incluyen cuarzoarenitas, lutitas arcillosas y escasos conglomerados.
Las del Carbonífero superior incluyen biomicritas y calcarenitas fosilíferas, anhidrita, lutita, y
algunas intercalaciones de cuarzoarenitas, en orden de abundancia decreciente. Los resultados
bioestratigráficos, incluyendo palinomorfos, braquiópodos y foraminíferos, parecen indicar que la
secuencia siliciclástica empieza en el Emsiano tardío o antes, y continúa por lo menos hasta el
Bashkiriano.

Los ambientes deposicionales del Devónico incluyen plataforma siliciclástica somera distal
(muddy) y proximal (shoreface), prodelta y llanura mareal, así como presencia de cadilitos
(dropstones) y deslizamientos submarinos. Parte del Carbonífero inferior parece faltar por el
evento erosivo del Carbonífero medio. Las unidades del Carbonífero superior representan frente
deltaico y llanura deltaica, “lagoon,” llanura mareal y rampa carbonatada interna.

Aunque las unidades basales reflejan la influencia local del cratón del Guaporé como área fuente
y límite oriental de la cuenca, las unidades intermedias y superiores muestran una evolución
geológica similar a la de la secuencia del Altiplano, situado hacia el suroeste. Estas similitudes
incluyen: (1) diamictitas del Devónico tardío con cadilitos, (2) areniscas eólicas del Carbonífero,
y (3) carbonatos y evaporitas del Carbonífero superior y Pérmico. Los dos pozos sirven para
documentar la conexión intracratónica entre las cuencas del Amazonas, Perú y Bolivia. El
Pérmico posiblemente fue erosionado antes del Cretácico en el pozo Pando X-1.

Introducción

Los pozos Pando X-1 y Manuripi X-1 (Figura 1) fueron perforados en 1991 por Mobil Boliviana
de Petróleos Inc. (50%) y Occidental Boliviana Inc. (50%) entre los ríos Manuripi y Madre de Dios,
Departamento de Pando Bolivia Antes de este programa de perforación de pozos delgados, solo
había información muy limitada sobre rocas paleozoicas subterráneas disponibles en el norte de
Bolivia. Los afloramientos más cercanos se encuentran en el valle superior del río Beni
(inmediatamente al sur de Rurrenabaque, Figura 1), que incluye las Serranías y Encañadas de
Bala, Beu, Toregua y Susi (Díaz, 1959). Esta región proporciona gran parte de la nomenclatura
estratigráfica utilizada en este estudio.
La estratigrafía de la cuenca Madre de Dios en Perú sugiere que rocas clásticas y carbonato
Devónicas-Pérmicas similares que se encuentran en el Altiplano, Cordillera Oriental y áreas de
afloramiento subandino se extienden hacia el norte y noreste hacia el subsuelo por cierta
distancia (Figura 1). Se ha asumido que las conexiones marinas entre las áreas de afloramiento
andino, las cuencas del Amazonas y la sección del Devónico del norte de África se realizaron a
través de una vía marítima establecida a través del norte de Bolivia (de Melo, 1988; Isaacson y
Sablock, 1990), pero hasta ahora, ha habido poca evidencia directa de esto.

Las ubicaciones de los pozos Pando X-1 y Manuripi X-1, las profundidades de perforación y las
fechas se muestran en la Tabla 1. La sección Paleozoica fue continuamente perforada en ambos
pozos con aproximadamente un 95% de recuperación del núcleo. Una división central se
encuentra actualmente en la Universidad de Idaho, y la otra división se encuentra en el Centro
Técnico de Petrolera, Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos, Santa Cruz, Bolivia.
ESTRATIGRAFÍA PALEOZOICA

La litoestratigrafía y bioestratigrafía de los pozos Pando X-1 y Manuripi X-1 se muestran en la

Figura 2. La nomenclatura estratigráfica se compila a partir de Díaz (1959), Sempere (1987),
Suárez Soruco (1989) y Oller (1992). Las descripciones litológicas, de grosor y de facies que se
proporcionan a continuación se aplican solo a los núcleos Pando X-1 y Manuripi X-1. La
información sobre la correlación del sótano, las unidades basales y la bioestratigrafía de las
formaciones de Tomachi y Toregua es incompleta.

Litoestratigrafía

Formación Tequeje

En el pozo Pando X-1, la Formación Tequeje (223 m de espesor) se encuentra en una cuarcita
granífera mionítica (determinación de espécimen manual por R. Reid, 1994) que se supone es
Precámbrica. Está dominado por una secuencia de arcilla lodosa laminada que comienza con
una piedra arenisca conglomerada gruesa. Los clastos del conglomerado están compuestos de

La litología del sótano. La Formación Tequeje es litoestratigráficamente equivalente a la

Formación Sicasica (Altiplano norte) y las formaciones Huamampampa y Los Monos (Cordilleras
Central y Oriental).

Isaacson y Díaz Martínez (1995, su figura 3) presentan una tabla de correlación estratigráfica
regional. Los probables braquiópodos leptostrophiidos, posiblemente similares a Leptostrophia
casteri Benedetto (1984), ocurren a unos 100 m de su base (Pando X-1). Díaz (1959) informó
sobre la guía estratigráfica regionalmente útil Tropidoleptus carinatus fósil de la formación en los
afloramientos de Rurrenabaque (este taxón no se ha encontrado en los núcleos).

El contacto con la Formación Tomachi es gradual. Se dibuja tentativamente en la parte superior

de la secuencia de lodo superior y al comienzo de una secuencia litológica más gruesa.

Formación Tomachi

La Formación Tomachi (510 m de espesor) es litológicamente equivalente a la Formación

Colpacucho (Altiplano septentrional) y la Formación Iquiri (Cordillera Oriental y Subandino Sur)
y se compone principalmente de arenisca fina y lutita. No se han identificado macrofósiles a partir
de los núcleos. Las formaciones equivalentes también han producido pocos fósiles en
afloramientos. El contacto con la Formación Toregua es distinto, desde el barro hasta la arenisca
gruesa.

Formación Toregua

La Formación Toregua (285–299 m de espesor) es equivalente a la Formación Cumaná (Altiplano

norte) y la Formación Itacua (Cordillera Central). La unidad tiene litologías que van desde
areniscas medianas con camas retorcidas hasta lodosas sin capas con clastos alóctonos.
Sugerimos que esta unidad es equivalente a las unidades de piedra de caída y diamictita al norte
y al sur. Caputo (1985), Caputo y Crowell (1985) y de Melo (1988) han revisado algunas de las
unidades de diamictita y piedra de caída del Alto Devónico de las cuencas de Parnaíba,
Amazonas y Solimöes de Brasil. Parece que la Isla del Sol y las diamictitas bolivianas
relacionadas se correlacionan con estas unidades (formaciones Cabeças, Curiri y Jaraqui,
respectivamente). El contacto con la Formación Yaurichambi es erosivo.

Formación Yaurichambi

La arenisca de grano fino a medio y la arenisca intercalada menor componen la Formación

Yaurichambi (47–89 m de espesor). En el Altiplano, la Formación Yaurichambi se superpone a
una superficie erosiva regional cortada en depósitos del Devónico y del Carbonífero Inferior
(Díaz, 1991). Esta superficie corta incluso depósitos más antiguos en el sur de Bolivia. Esta
unidad se correlaciona con la parte inferior de la Formación Cangapi y probablemente con el
Miembro Caiguamí de la Formación San Telmo en la zona sur andina del sur (Sempere, 1990).
Muestra probable desarrollo de dunas eólicas y es un marcador litoestratigráfico notable en toda
la región (Díaz et al., 1993). El contacto con la Formación Copacabana ocurre en la primera
aparición de lechos de carbonato.

Formación Copacabana

Las litologías de la Formación Copacabana (142–296 m de grosor) en los orificios centrales

incluyen piedra caliza y dolomita (lutita, wackestone, packstone y rare grainstone), cuarzo,
anhidrita, lutita y limolita verde. Gran parte de este último es volcánico. Las litologías son
similares en muchos aspectos a las encontradas en la región del lago Titicaca (Isaacson et al.,
1993). Esta formación ocurre en todo el Altiplano. Es equivalente a la Formación Cangapi que se
encuentra en el área subandina del sur (Oller, 1992).

Unidades suprayacentes

Por encima de una disconformidad están las formaciones Beu y Eslabon (Cretáceo) y las
formaciones Bala y Quendeque (Terciario). En los núcleos, la Formación Beu comienza con
arenisca fluvial gruesa, que también muestra una sobreimpresión paleosólica laterítica.

Bioestratigrafía

La colocación preliminar de unidades en un marco de tiempo relativo ha sido proporcionada por

palinomorfos, braquiópodos, algas y foraminíferos calcáreos.
Bioestratigrafía devónica tardía

El mejor horizonte de correlación bioestratigráfica es el límite Devónico-Carbonífero, que ocurre

dentro de la Formación Toregua, aunque todavía no se ha determinado la ubicación
bioestratigráfica precisa del límite Tomachi-Toregua. Los criterios principales utilizados para la
determinación de los límites son la primera aparición constante o común en el fondo del pozo de
Retispora lepidophyta (espora) y Umbellasphaeridium saharicum (acritarch), así como la
desaparición en el fondo del pozo de Verrucosisporites nitidus (espora). Higgs (1975), Clayton et
al., Ha documentado una sucesión palynofloral devónica-carbonífera temprana notablemente
consistente tanto en las facies marinas como no marinas, así como en Europa occidental y
América del Norte (Viejo continente de arenisca roja y regiones adyacentes). (1977), Richardson
y McGregor (1986), y otros. Los estudios de estratos de afloramientos equivalentes han reportado
una sucesión de ensamblaje palinofloral similar en el límite famenio-tournaisiano en Bolivia (Lobo
Boneta, 1987; Vavrdová et al., 1991).

Los conjuntos de miosporas bolivianos en los datos de afloramientos del Altiplano muestran
similitudes cercanas con las cuencas subsaharianas (cuencas de Murzúq y Ghamades, Libia, y
la cuenca de Illizi, Argelia) descritas por Attar et al. (1980), Coquel y Moreau-Benoit (1986) y
Vavrdová (1991), entre otros. Las especies comunes a Bolivia y al norte de África se enumeran
en Vavrdová et al. (1991)

Sin embargo, la mejor correlación de los ensambles de miosporas bolivianos parece ser el
Bedford Shale del centro de Ohio (EE. UU.) Sobre la base de la composición de las formas
marinas y terrestres encontradas (Molyneux et al., 1984). Las formaciones de arenisca de
Bedford Shale y Berea de la edad de Famenio (Devoniano tardío) contienen al menos 20 taxones
comunes con nuestras muestras bolivianas, incluyendo el microplancton marino Maranhites
mosesii, Exochoderma irregular y Umbellasphaeridium saharicum. U. saharicum es un elemento
dominante en las asambleas de acritarch de Perú (Wood, 1984) y Argelia (Jardiné et al., 1972;
Attar et al., 1980), y rara vez ocurre en la Formación Ashkídah de Libia (Vavrdová, 1991) . El
taxón actualmente parece estar ausente en otras áreas (aunque Wood, 1984, da una ocurrencia
emsiana en Francia) y, como tal, puede definir una provincia biogeográfica distinta que
comprende el norte de África, América del Sur (Perú, Bolivia y Brasil), y el este de América del
Norte.

Bioestratigrafía carbonífera tardía

Treinta y ocho géneros de microfósiles ocurren en la Formación Copacabana de los dos agujeros
centrales. Entre los foraminíferos, hay (además de las abundantes formas sésiles) 12 familias de
endotiridos vagabundos: Archaediscidae (Asteroarchaediscinae), Biseriamminidae,
Earlandiidae, Endothyridae, Eostaffellidae, Globoendothyridae, Lasiodiscidae primitivo (?),
Oswainudoe, Teyrotee, Pseudoeteidos, Paeteudo, y, Tuberitinidae. Las algas están dominadas
por Rhodophytes, Stacheiins y Ungdarellaceae. Hay algunos Palaeosiphonocladales, y
Asphaltina es el incertae sedis más común. La Zona 20, que es el Pensilvania temprano
(Morrowan en América del Norte) o el Bashkiriano temprano de Eurasia (Armstrong y Mamet,
1977; Mamet, 1984a, b; Gordon et al., 1985; Mamet y deBatz, 1989), está claramente indicado
por el presencia de Asteroarchaediscinae, la asociación de Biseriella, la primitiva Globivalvulina
(Globivalvulina del grupo G. moderata) y la asociación Eostaffella– Millerella. "Hemigordius" no
es el verdadero Hemigordius, que es Pérmico, sino el "Hemigordius" boultoni de Groves, que se
conoce desde principios del Pensilvania. Es un nuevo género.

La microfauna es de excepcional interés, ya que casi todos los taxones no son reportados desde
Sudamérica. Sin embargo, la mayoría de los foraminíferos y las algas son similares a los
documentados en el Grupo Morrow del medio continente de América del Norte y sus equivalentes
de edad en la Cordillera de América del Norte. A nivel genérico, las similitudes son notables.
SISTEMAS DEPOSICIONALES

Los depósitos de líquidos en los núcleos Pando X-1 y Manuripi X-1 están organizados en 16
litofacies según el tamaño de grano y el tipo y la escala de las estructuras sedimentarias. Las
litofacies no refrigerantes incluyen ocho litofacies de carbonato que se clasifican según la textura
y el tipo de granos del tamaño de arena. También hay una litofacies de anhidrita masiva.

Dos litofacies merecen una descripción adicional. El primero es una piedra de limo y limo
laminada con fragmentos de roca sedimentaria de gran tamaño (Figura 3A). Los fragmentos de
roca son gránulos bien redondeados a guijarros compuestos de limolitas y areniscas teñidas de
hierro. La segunda litofacies ocupa el mismo estratigráfico. posición en Pando X-1 y Manuripi X-
1. La unidad muestra deformación sinedimentaria en ambas ubicaciones, como resultado de lo
cual no se puede identificar la relación deposicional entre la piedra de limo-limo laminada y los
clastos de gran tamaño. Interpretamos esta unidad como un dropstone glacial basado en
relaciones estratigráficas.

La figura 3B muestra una litofacies que consiste en arcilla colada tenue laminada a bioturbada
de un color gris claro verdoso con fragmentos fósiles mezclados. Los depósitos son delgados,
de menos de 0.2 m, y son un componente común de la unidad de carbonato en ambos agujeros
centrales. Los análisis geoquímicos indican que un componente de tefra está presente en los
depósitos. Interpretamos estas unidades como depósitos de caída piroclásticos distales
reelaborados por organismos marinos. R. E. Denison (1992, comunicación escrita) informa que
una unidad a 979.2 m (Manuripi X-1) es una toba compuesta casi en su totalidad por minerales
de arcilla y que contiene clastos dispersos de biotita, feldespato, cuarzo, carbonato y minerales
opacos. Hay una sugerencia de texturas de fragmentos restantes en las arcillas.

Configuraciones depositacionales

Reconocemos cuatro sistemas deposicionales basados en asociaciones de litofacies: plataforma

indígena, trenza delta, río y plataforma de carbonato (Figura 4). Los depósitos son en su mayoría
ejemplos típicos de estos sistemas y se analizan aquí brevemente.

Shelf Terrigeno

El sistema de plataforma terrígena incluye depósitos fangosos y arenosos. Los depósitos

fangosos están dominados por arcillas y lutitas, con limolitas intercaladas y areniscas de menos
de 0,12 m de espesor. Hay dos asociaciones diferentes que difieren en intensidad de bioturbación
y posición estratigráfica. Los depósitos bioturbados están presentes en los depósitos
estratificados en las formaciones de Tomachi y Toregua en ambos agujeros centrales (Figura 4).
Los depósitos bioturbados se reelaboran casi por completo, de modo que las estructuras
sedimentarias físicas se conservan solo en unidades de limolita relativamente gruesas. La
reelaboración biogénica completa indica la acumulación en una plataforma abierta donde los
organismos que viven en el fondo pudieron mantenerse al día con la sedimentación. Los lechos
de areniscas y areniscas delgadas representan episodios de sedimentación rápida de las
corrientes de turbidez distales que interrumpieron la reelaboración biogénica.

Los depósitos estratificados registran la situación opuesta, sedimentación relativamente rápida

en un entorno prodelta donde los organismos que viven en el fondo no pudieron reelaborar el
sedimento para destruir efectivamente las estructuras sedimentarias físicas.

El sistema de plataforma arenosa se superpone a los depósitos inferiores de la costa en la

Formación Tomachi (Pando X-1, Figura 4).

El arenisca de estante está organizado en unidades de adelgazamiento hacia arriba. La mayoría

de los lechos de arenisca carecen de estructura, lo que sugiere una reelaboración biogénica
completa. Los contactos entre la arenisca y la lutita son afilados y no erosivos. Algunos de estos
son estilolitas, por lo que la naturaleza de los contactos podrían ser el resultado de la
compactación en lugar de las relaciones deposicionales originales.

Delta de trenza

Los depósitos deltaicos dominan las formaciones de Tomachi y Toregua en ambos agujeros
centrales e incluyen depósitos delta delta y delta (Figura 4). Los ensamblajes frontales de Delta
incluyen una superficie costera gruesa hacia arriba y depósitos en la boca de distribución. Los
depósitos en la superficie de la costa se conservan como laminación ondulada y estratos
cruzados hummocky. Esta asociación registra la acumulación en la costa más baja. Los
depósitos de la boca de distribución son principalmente areniscas laminadas con laminaciones
tenues de material orgánico que se acumulan en las partes marginales o distales de la barra.

Los depósitos simples de Delta incluyen canales distribucionales y conjuntos interdistribuidores.

Los depósitos del canal de distribución son típicamente de grano grueso, lo que representa la
acumulación de un sistema de carga de lecho de grava (Figura 3C).

Los intervalos de arenisca en los depósitos del canal de distribución distal se bioturban,
registrando una influencia mixta marina y fluvial (Figura 3D). Los depósitos interdistribucionales
son una asociación compleja de separación de grietas, diques y depósitos planos de mareas. La
parte superior de la Formación Toregua en Pando X-1 está dominada por depósitos fluviales, lo
que indica la acumulación en una llanura delta superior.

Sistema fluvial

Los depósitos en la arenisca basal en Pando X-1 (Formación Tequeje) son areniscas y
conglomerados de relleno de canales que recubren el sótano gneisico (Figura 4). La parte basal
de la arenisca está dominada por conglomerados y areniscas de grano grueso que representan
el eje del sistema de canales. Este intervalo tiene un contacto agudo con areniscas y limolitas de
grano fino superpuestas que se acumulan en canales secundarios en un entorno de sobrebanco.

Plataforma carbonatada
Los depósitos de la plataforma de carbonato dominan las partes superiores de ambos núcleos e
incluyen litofacies terrígenas, de carbonato y anhidrita de las formaciones Yaurichambi y
Copacabana (Figura 4). El componente terrígena son los depósitos de dunas eólicas, corrientes
y estanques interdunas, y llanuras de marea. El componente de carbonato es plano de marea,
laguna submareal y plataforma abierta.

Los depósitos de anhidrita están asociados con depósitos de mareas planas y lagunas. Los
depósitos de la plataforma son más gruesos en Manuripi X-1, donde se ha eliminado menos
sección por erosión (Figura 4).

Los depósitos de carbonato característicamente tienen un alto contenido de barro autóctono. El

lodo está mezclado, en laminaciones y lechos discretos, o material de caída piroclástico. El alto
contenido de barro autóctono es responsable del desarrollo de una fauna de relativamente baja
diversidad en la plataforma abierta. Los depósitos de plataforma abierta contienen restos de
equinodermos, corales solitarios y briozoos, pero estos componentes no son abundantes. Los
depósitos de lagoon, en cambio, se caracterizan por gasterópodos.
El intervalo de plataforma se caracteriza por ciclos apilados de profundización hacia arriba. Los
ciclos en la base del intervalo de la plataforma comienzan con depósitos gruesos terrígenos
(mareas planas o campos de dunas eólicas) que cambian hacia arriba a depósitos de laguna de
carbonato (Figura 4). Ciclos hacia el

la parte superior del intervalo tiene depósitos terrígenos más delgados y se profundiza hacia
arriba en depósitos de estantería más abiertos. El núcleo Manuripi X-1 también muestra un
desarrollo kárstico cuyo momento y origen no están claros en este momento.

Historial de acumulacion

Los agujeros centrales Pando X-1 y Manuripi X-1 registran la acumulación en un entorno
predominantemente costero. Los patrones de sedimentación fueron influenciados por las
variaciones en la velocidad de sedimentación, el cambio relativo del nivel del mar y el cambio
climático. En contraste con las áreas de afloramiento andino, es evidente que la secuencia
devónica es considerablemente más delgada en su desarrollo, aunque las unidades carboníferas
son de grosor equivalente. Las unidades devónicas dominadas por el clástico reflejan la
acumulación en un entorno de agua fría, donde el hundimiento fue menos pronunciado que hacia
el sur y el oeste (Isaacson y Díaz Martínez, 1995, su figura 13).

Los depósitos basales en Pando X-1 registran un rápido hundimiento y ahogamiento de un

sistema fluvial. La programación posterior de la costa fue de naturaleza episódica, produciendo
depósitos apilados en la costa inferior en la parte media de la Formación Tomachi (Figura 4). El
sistema de arena de la plataforma se inclina hacia arriba desde los depósitos inferiores de la
costa, lo que representa ahogamiento final del sistema costero de Tomachi.

Depósitos de lodos laminados en la parte superior del desarrollo récord de Tomachi de un

sistema delta en el área. La degradación, tal vez combinada con una rápida caída del nivel del
mar, resultó en la erosión de la secuencia del frente del delta y la acumulación de depósitos de
canal de distribución de grano grueso en Pando X-1 (Formación Toregua). Las unidades de
arenisca equivalentes en Manuripi X-1 son depósitos de la llanura delta superior.

La sucesión delta se repite en la parte superior de la Formación Toregua tanto en Manuripi X-1
como en Pando X-1 (Figura 4). El intervalo caído en la parte de la sucesión de la prodelta es más
limoso que los depósitos de la prodelta en otros intervalos y contiene clastos del tamaño de
gránulos a guijarros que se asemejan a la arenisca del Bajo-Medio

Arenisca Devónica. Interpretamos esto como un intervalo de caída de piedra, que es bastante
paralelo a la influencia glacial de unidades equivalentes en la región del Lago Titicaca.

La arenisca eólica carbonífera de la Formación Yaurichambi (Figura 4) también coincide con la

acumulación de unidades equivalentes en el área del Lago Titicaca. Es la Formación
Copacabana, con su edad carbonífera tardía.

y contenido de anhidrita, que se aparta un poco de sus contrapartes del lago Titicaca. Los lechos
de carbonato de la unidad parecen agruparse dentro del Carbonífero tardío y el Pérmico
temprano, y los lechos de evaporita son menos comunes o la intemperie ha eliminado la anhidrita.
Sin embargo, el desarrollo del margen mixto de carbonatos terrígenos en Pando X-1 y Manuripi
X-1 registra un cambio de un clima frío (¿glacial?) En el Devónico tardío-Carbonífero temprano
a un clima cálido y tropical en el Carbonífero tardío. Historial de acumulación del carbonato la
plataforma posiblemente estuvo marcada por al menos un evento importante a nivel del mar
(intervalo kárstico, Figura 4).

Sugerimos que la región de Pando en Bolivia representaba una parte distal de la cuenca andina
activa durante el tiempo Devónico-Carbonífero tardío. Además, parece que el hundimiento, junto
con el cambio global del nivel del mar, desempeñó un papel importante en el desarrollo de las
unidades locales.