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Síntomas
para detectar
los trastornos
alimentarios
de tu mascota


 por Carlos Rodríguez

Sobre el Autor

Carlos Rodríguez
Veterinario licenciado por la Universidad
Complutense de Madrid, con más de 20 años de
experiencia en el sector.

Miembro destacado de varias de las

asociaciones protectoras de animales más
influyentes de nuestro país, cuenta con más de 6
libros publicados, en los que ayuda a miles de

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lectores a conocer más sobre el mundo de las
mascotas. Entre sus títulos destacan “El
encantador de gatos”, “Primer cachorro,
primeras preguntas”, y la colección “Animales de
Compañía”.

Presente en programas de televisión y radio

desde 1995, actualmente dirige y presenta
"Como el Perro y el Gato" en Onda Cero, un
espacio dedicado a mejorar y “celebrar” en lo
posible el entendimiento y la armonía entre
humanos y mascotas, con más de 10 de años en
Antena.

En Carlos confluyen su vocación por los

animales, con una personalidad inconformista e
irreverente que no dejará a nadie indiferente.

“Ser veterinario es entregar la vida por los

irracionales, por los que no tienen capacidad de
decisión, de defensa… es hacer todo lo posible
para que esos compañeros de viaje sean
respetados, cuidados, protegidos”

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 Son múltiples las
alteraciones que
puede presentar un
animal de compañía
en sus rutinas
alimentarias, por esta
razón es importante
que las conozcamos y
que sepamos como
evitarlas o como
actuar en caso de que
sucedan.

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SINTOMA 1
COME MENOS?

En general, podemos asegurar que los animales

de compañía normales y sanos raramente
ayunan por sí mismos, y si lo hacen suele ser
durante un tiempo muy corto (dos o tres
comidas) y por causas más que justificadas
(calor, mal estado de los alimentos, alguna
patología…).

Es cierto que existen animales (y personas) con

mejor o peor apetito, y ello provoca que algunos
propietarios sientan temor por la posibilidad de
que su mascota esté insuficientemente
alimentada; este temor no justifica de modo
alguno el ofrecimiento de un sinfín de alimentos
en un corto período de tiempo, ya que será el

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origen de alteraciones digestivas y de
variaciones de las costumbres alimentarias.

¿El peso de nuestra mascota

es el correcto?

El primer punto a tener en cuenta (ayudados

siempre por el profesional) es si el peso de
nuestra mascota es el correcto a pesar de su
"supuesta inapetencia":
✤ En la mayoría de los casos el peso es
normal e incluso mayor, ya que
nuestros amigos se las ingenian para
ingerir un número de calorías superior al
necesario mediante “robos” de comida
o "sobornos" a ciertos familiares.
✤ Algunos animales pueden ayunar un día
completo sin que ello suponga una
evidencia de problema o patología.
✤ Existen animales que llegan a consumir
un 40% menos de alimento que sus
hermanos de camada, manteniendo el

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 mismo peso y la misma conformación
corporal.
✤ Debemos ser prudentes con los
premios y con las golosinas: los
animales de poco peso, como las razas
toy, al ingerir entre 5 ó 6 "galletitas" al
día, no necesitarán ningún otro
alimento; sus necesidades diarias
estarían "más que cubiertas". Por
supuesto que este procedimiento
alimentario de los excesos de premios o
“golosinas” no es el más correcto y no
debe sustituir de ninguna forma al
alimento.
✤ También puede suceder que el peso de
nuestra mascota esté realmente por
debajo del peso normal, siendo
necesario un minucioso examen
veterinario para descartar patologías
digestivas, renales, dentales… que
suelen ser las principales responsables
de tan repentinos adelgazamientos. El
cuidado dental de rutina es esencial: el
sarro y las patologías periodontales
pueden producir dolor suficiente como
para inhibir la ingestión de alimentos.


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 Soluciones para corregir el peso

Una vez que descartemos la posibilidad de

problemas médicos que influyan en una u otra
forma en la ingesta de alimento, nos
pondremos manos a la obra siguiendo estas
sencillas pautas:

SOLUCION 1
Elección del alimento

Debemos proporcionar a nuestro amigo el

mejor alimento que nos permita nuestro bolsillo
(alimentos "premium"); esto se ve justificado por
la correcta formulación, por el equilibrio de los
nutrientes y por algo muy importante para evitar
el bajo consumo de alimento: estos productos
son mucho más apetecibles para los exquisitos
paladares de nuestros mejores amigos.

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 “existen ciertos trucos que nos
ayudan a qué el animal preste
mayor interés por su alimento”

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El olor, el sabor, la textura y la temperatura de
un alimento son factores importantes para
estimular a los animales problemáticos.

Además de tener muy presentes los gustos de

nuestro mejor amigo, existen ciertos "trucos"
que nos ayudan a que el animal preste mayor
interés por su alimento:

★ Humedecer el alimento con agua

templada; el alimento seco será mas
“apetecible”.
★ Si calentamos el alimento se realza el
sabor y se hace más apetecible.
★ Existen en el mercado alimentos
específicamente diseñados para
animales “difíciles”, dejemos que el
profesional nos asesore sobre el más
conveniente.
★ Los alimentos húmedos suelen llamar
más la atención de este tipo de
animales, pero debemos tener en
cuenta que han de ser de calidad.

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 SOLUCION 2
Conocer la cantidad diaria

A menudo el propietario tiene una idea

preconcebida de la cantidad que debe comer su
mascota diariamente, sin tener en cuenta las
referencias del fabricante y, lo más importante
de la “individualidad” del animal.

Debemos apoyarnos en las tablas de referencia

que aparecen en los envases de alimento y en el
consejo del veterinario; el profesional observará
la evolución del peso y del estado corporal del
animal, en relación a sus "exclusivas"
características (edad, actividad, estado
sanitario,...); tras el consumo del alimento
durante un plazo "lógico" de tiempo (mínimo un
mes), podremos realizar cambios en la cantidad
de la dieta, siempre y cuando ello fuera
necesario.

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 SOLUCION 3
Limitar los premios y picoteos

Para esto debemos ser fuertes y olvidarnos de

"esa carita que nos pone..." Una tal Helen
Thomson decía sabiamente: “un perro bien
educado no tratará de compartir tu comida,
simplemente logrará que te sientas tan culpable
que no podrás disfrutarla…”.

Son muy listos... insistirán e insistirán... y si

cedemos debemos tener muy claro que
estamos perdiendo una importante batalla que
perjudicará la salud y la educación de nuestro
amigo.

Una buena alternativa cuando se acerca a pedir

es proponerle una orden (siéntate, túmbate,...) y
recompensarle con caricias o con su juguete
favorito; con esto el animal “se dará cuenta” de
que existe recompensa, pero no comida.

Tengamos muy presente que si somos estrictos,

en muy poco tiempo nuestra mascota comerá
perfectamente.

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 “un perro bien educado no
tratará de compartir tu comida,
simplemente logrará que te
sientas tan culpable que no
podrás disfrutarla…”

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SINTOMA 2
COME “RARO"...

Existen ciertas alteraciones alimentarias... no es

que coman mucho o poco... es que comen
cosas muy... ¿raras?.

1. COPROFAGIA
2. “PICA”
3. MASTICAR Y COMER VEGETALES

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1. COPROFAGIA
Es aquella conducta, relativamente frecuente en
perros, que implica la ingestión de heces.
Excepto en el caso de las hembras adultas, que
ingieren las heces de sus propios cachorros,
todas las demás muestras de coprofagia se
consideran anómalas. Hay perros que ingieren
cualquier tipo de heces que puedan encontrar,
pero otros seleccionan las propias, las de otros,
las de gatos o las de otros mamíferos (incluido
el hombre).

“En muchos casos es

suficiente con el
cambio a una dieta
más digestible o con
más fibra”

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 Causas:

✤ La causa exacta puede ser difícil de

determinar, pero suele ser debido en parte a
un problema orgánico y en parte a un
problema de conducta.
✤ El problema suele afectar principalmente a
cachorros (curiosidad) que superan "su vicio"
con la edad. Debemos no prestar atención a
estos jóvenes animales cuando ingieren las
heces pues “potenciaremos” su acción.
✤ Otra causa de coprofagia puede ser la
voracidad en animales sometidos a dietas de
adelgazamiento muy estrictas o en animales
mal alimentados.
✤ El ejercicio insuficiente favorece la ingestión
de las propias heces.
✤ Ciertas enfermedades gastrointestinales
(malabsorción, carencias enzimáticas...) que
impiden una digestión completa, dan lugar a
heces con mayor cantidad de ingredientes
no digeridos; estas heces podrían ser

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 “suficientemente apetitosas” para su
ingestión.
✤ Las heces de vacuno, caballo y gato suelen
ser “muy atractivas” para ciertos perros.

Tratamiento:

La coprofagia es un problema difícil de tratar;

tras un estudio general por el veterinario que
descarte o confirme el problema orgánico, se
aplicarán tratamientos médicos–dietéticos o de
comportamiento:

★ Impedir el acceso a las heces: paseo

con correa y vigilancia constante. Si vive
en jardín, éste debe ser limpiado con
regularidad.
★ En muchos casos es suficiente con el
cambio a una dieta más digestible o con
más fibra.

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2. “PICA"
Es deseo o interés anormal de ingerir sustancias
no alimenticias como piedras, tierra, objetos de
plástico , palos, telas…

Es probable su aparición durante el primer año

de vida, así como su desaparición espontánea
en la primera etapa de la edad adulta; este
problema, aparte de molesto, es peligroso; en
muchas ocasiones la ingestión de cuerpos
extraños puede requerir cirugía para su
extracción.

En caso de animales adultos o "senior", el

veterinario descartará carencias nutritivas,
desequilibrios electrolitos, alteraciones
gastrointestinales, alteraciones del sistema
nervioso central... como posibles causas de este
comportamiento anómalo.

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 “Es probable su aparición
durante el primer año de vida,
así como su desaparición
espontánea en la primera etapa
de la edad adulta”

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 Soluciones:

Entre las posibles soluciones:

★ mantener lejos sus “objetos favoritos”.

★ proporcionarle suficiente juego y
juguetes apropiados.
★ cambiar la dieta a un alimento más rico
en fibra.
★ corregir el estrés (si lo hubiera) y la
ansiedad que padecen ciertos animales
al separarse de sus dueños (ansiedad
por separación).
★ en ciertas ocasiones serán necesarios
tratamientos farmacológicos como en
casos de ingestión de arena y/o piedras.
★ como todo tratamiento, el mejor es el
preventivo: cuanto antes ataquemos el
problema, antes conseguiremos
cortarlo.

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3. MASTICAR Y COMER VEGETALES
La ingestión de plantas, vegetales... no debería
considerarse anormal, ya que el perro en
realidad es omnívoro y el gato presenta un
natural interés por cierto tipo de plantas.

Lo que sí debemos tener en cuenta es que la

ingestión abundante de hierbas o plantas puede
indicar que el animal no recibe suficiente fibra
en su dieta, lo que podemos comprobar
cambiando a una dieta completa con mayor
porcentaje en fibra. Cuando el perro está en
casa y mastica plantas puede ser debido a
búsqueda de juego; en este caso debemos
corregirlo dándole una alternativa como
juguetes interactivos específicos o dedicarle
más tiempo.

Debemos tener cuidado con ciertas plantas del

hogar... algunas son tóxicas.

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 “Lo que sí debemos tener en
cuenta es que la ingestión
abundante de hierbas o
plantas puede indicar que el
animal no recibe suficiente
fibra en su dieta”

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SINTOMA 3
COME MUCHO…

Salvo contadas excepciones (patologías

hormonales principalmente), un animal "tragón"
no nace, ¡¡se hace!! ; como casi todos los
defectos y malas costumbres de nuestros
animales de compañía, el ser un "tragaldabas" no
surge de forma espontánea, es el lógico
desenlace tras una serie de incorrectas
actuaciones del propietario.

Esta fijación hacia el alimento tiene como

consecuencia múltiples problemas: robos,
"animal basurero" (el animal se mete en la boca
todo lo que encuentra a su alcance), patologías
digestivas por ingestión de alimentos o

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productos en mal estado, y la inevitable
obesidad como consecuencia de una mayor
entrada de alimento de la necesaria para el
desarrollo de una vida normal.

ANIMALES "LADRONZUELOS"
El animal no roba porque le apetezca, sino
como resultado de una conducta aprendida;
puede no tener necesidad si su alimentación es
adecuada, pero si le hemos condicionado a que
fuera de las horas de comida le damos de todo,
intentará hacer lo mismo cuando le venga en
gana, siempre y cuando tenga productos a
mano.

Esta conducta sólo acarrea disgustos: vómitos,

diarreas, e incluso en casos más graves el
necesario paso por el quirófano para extraer un
cuerpo extraño. ¿Cómo evitarlo? Lo más lógico
sería no acostumbrar a nuestra mascota a
comer a deshoras, algo sencillo si lo hacemos
desde cachorro. Pero...si lo hicimos mal y
nuestro amigo presenta esta conducta, ¿qué
debemos hacer?; lo mejor será seguir estas
sencillas pautas:

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 Soluciones:

★ Evitar las tentaciones, no dejando al

alcance del animal alimentos, objetos, ni
basuras.
★ Ser estrictos con los horarios de
comida: el animal come su comida y a
las horas marcadas.
★ Los medios represivos (bozal, castigos…)
suelen ser contraproducentes y
solamente efectivos en el momento en
que se utilizan; cuando no exista el
castigo el animal seguirá presentando
su comportamiento inadecuado.
★ Mantener alejado al animal del comedor
y de la cocina en los momentos en los
que comemos y en los que preparamos
nuestras comidas.
★ Lo más adecuado es ponerse en manos
de un profesional especializado en
comportamiento para que nos marque,
tras una valoración del caso, las pautas a
seguir.

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PERROS "ABURRIDOS"
El sedentarismo de nuestras mascotas es, por
desgracia, un hecho bastante frecuente. Son
habituales los casos del perro que sale a la calle
con el tiempo justo de aliviar su organismo, los
gatos que no reciben interacción alguna con sus
propietarios o con juegos adecuados. Con ello
conseguimos un animal cada vez más
desinteresado por una serie de actividades
(paseo, juego, ejercicio...) y prácticamente
obsesionado por la alimentación.
Es algo totalmente admitido en el género
humano que el aburrimiento y el sedentarismo
suelen combatirse con frecuentes escapadas a
la nevera. En nuestros animales de compañía,
esta falta de motivación también provoca un
mayor interés por el alimento, que
desencadenará un lógico aumento de peso
debido al nuevo vicio aprendido: comer, comer,
comer, comer…

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 “en muchas ocasiones la
aceptación del premio, picoteo o
alimento es una respuesta
agradecida a una de las escasas
muestras de cariño del propietario”

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Este animal se convierte en un "especialista
pedigüeño", no sólo por el interés hacia la
comida, sino por el interés al único acto de
cariño que le muestra su propietario: ofrecerle
alimento. Es importante tener presente este
punto; nuestras mascotas no sólo aceptan lo
que les ofrecemos como una respuesta a su
apetito: en muchas ocasiones la aceptación del
premio, picoteo o alimento es una respuesta
agradecida a una de las escasas muestras de
cariño del propietario.

Soluciones:

¿Solución?... evidente: dedicar el tiempo

suficiente a los juegos, salidas y ejercicio de
nuestra mascota; con ello no tendremos que
suplir estos necesarios actos por excesos
nutricionales.

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“Nuestras mascotas no sólo
aceptan lo que les ofrecemos
como una respuesta a su
apetito: en muchas ocasiones
la aceptación del premio,
picoteo o alimento es una
respuesta” agradecida a una
de las escasas muestras de
cariño del propietario”

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ANIMALES "TRAGONES"
¿Puede un perro o un gato ser un tragón?... es
posible, pero como es lógico entender, el animal
comerá mucho si dispone de mucha comida
(por el momento no se conoce ningún animal
con la capacidad de ir a la compra y servirse la
cantidad que le apetezca).

Causas:

Los excesos alimentarios más frecuentes vienen

dados por los siguientes comportamientos del
propietario:

✤ Alimentar a libre disposición a aquellos

animales que comen con mucha
rapidez o que no controlan su límite.
✤ Complementar la dosis diaria de
alimento con sobras de nuestra comida
o con añadidos alimentarios de dudosa
eficacia y gran perjuicio.

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 ✤ Utilización de alimentos inadecuados
para la edad, estado o actividad de
nuestra mascota.

Soluciones:

Las soluciones a estos frecuentes errores son

sencillas:

★ Controlar la cantidad de alimento diario.

★ No complementar el alimento.
★ Utilizar un alimento adecuado para la
edad, estado y actividad de nuestra
mascota.

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