UNIDAD I: LA CRISIS DEL IMPERIO COLONIAL ESPAÑOL Y LA
ARGENTINA DE LA EMANCIPACIÓN A LA ORGANIZACIÓN
NACIONAL.
EL PENSAMIENTO ILUSTRADO COMO FUNDAMENTO DE LOS
CAMBIOS ESTRUCTURALES DE FINES DEL SIGLO XVIII. LAS
REFORMAS BORBÓNICAS, LA ORGANIZACIÓN POLÍTICA,
ADMINISTRATIVA Y ECONÓMICA VIRREINAL EN EL ESPACIO
AMERICANO. EL VIRREINATO DEL RÍO DE LA PLATA
Al comenzar el siglo XVIII y como consecuencia de la Guerra de
Sucesión, ascendió al trono español la dinastía de los Borbones.
Estos heredaron un imperio con un dilatado territorio con
problemas económicos y desordenes administrativos.
En la segunda mitad del siglo XVIII, la Corona española puso en
marcha reformas para superar la larga crisis que la aquejaba y para
reforzar su imperio transoceánico. El plan reformista se inscribió en
el nuevo clima de ideas que trajo consigo la Ilustración.
La Ilustración fue un movimiento cultural que abarcó
aproximadamente de 1680 a 1780 y que influenció al pensamiento
europeo. Afectó varias esferas de la actividad política, económica y
social. Se caracterizó por el uso de la razón tanto como elemento
de crítica a la moral y teología cristiana -entonces predominante-
como para la búsqueda de mejoras de las sociedades mediante
reformas políticas.
Los Borbones adoptaron el Despotismo Ilustrado para promover el
bienestar, el progreso técnico y económico, la educación y la
cultura. La Corona era responsable de llevar adelante esas metas y
ser promotora del progreso. La educación fue vista como
fundamento de la felicidad pública y se modificaron sus
concepciones educativas tradicionales basadas en la escolástica (la
filosofía cristiana medieval).
Varios reformistas ilustrados españoles acompañaron a los
Borbones en este proyecto para difundir saberes más prácticos y
racionales. Pero ninguno de ellos cuestionó los principios de la
religión católica. Lo que hubo fue una adaptación y selección de las
innovaciones intelectuales de la Ilustración a los dogmas católicos.
Por esta razón, se habla de “Ilustración católica” al conjunto de
novedades introducidas en el mundo hispánico durante el siglo
XVIII.
Durante la dinastía Borbónica se realizaron las siguientes reformas:
 Debido a que era un territorio muy extenso era necesario
reestructurar la administración. Se crearon nuevas Capitanías
Generales y Virreinatos, entre ellos el del Río de Plata (1776),
con Capital en Buenos Aires, reunió las gobernaciones del Río
de la Plata, Paraguay, Tucumán y el Alto Perú (actual Bolivia), y
dependió directamente del Virreinato del Perú. Todo el actual
territorio de la República Argentina y estuvo dividido en 2
gobernaciones: la Tucumán y la del Río de la Plata.
 En 1782 el Virreinato del Río de la Plata se subdividió en
varias Intendencias (Buenos Aires, Córdoba, Salta, Paraguay,
entre otras) y se estableció una jerarquía de ciudades: la
ciudad capital del virreinato, las ciudades cabeceras de las
gobernaciones intendencias, y las ciudades subordinadas.
 Se buscó centralizar el poder de la Corona, reforzar la figura
del monarca y asegurar un mayor control. Para eso se
trasladaron funcionarios directamente desde España: los
intendentes de las capitales de gobernación y los
subdelegados en las ciudades subalternas.
 Además se fortaleció la presencia militar de España en
América a través de plazas ubicadas estratégicamente, por
ejemplo en la Banda Oriental, Chile y Caracas.
 El comercio con las potencias extranjeras estaba prohibido por
el sistema de monopolio impuesto por España que sólo
permitió comerciar legalmente a unos pocos puertos
americanos con el puerto de Cádiz. Con el fin de incrementar
el comercio con las colonias, se dictó en 1778 el Reglamento
de Libre Comercio que abrió más puertos en España y en las
colonias, entre ellos, el puerto de Buenos Aires, permitiendo el
comercio directo. Esta flexibilización comercial quiso afianzar
al monopolio y reubicar a España como potencia oceánica.
Las principales instituciones de Hispanoamérica eran:
Virrey: representaba a la persona del rey, era la máxima dignidad y
jefe militar en su jurisdicción (Virreinato), presidía la Audiencia
Gobernadores: estaban al frente de cada gobernación y tenía
facultades militares y judiciales
Audiencias: eran los máximos tribunales constituídos por varios
oidores, además asesoraban al rey y al virrey y tenían algunas
funciones de gobierno
Cabildos: instituciones del gobierno y justicia local de la ciudad y
del ámbito rural circundante.
CRISIS DEL IMPERIO ESPAÑOL. ENFRENTAMIENTOS ENTRE
ESPAÑA Y PORTUGAL POR COLONIA DEL SACRAMENTO. LA
EXPANSIÓN INGLESA Y EL CONTRABANDO.
Portugal aspiró a establecerse en la margen oriental del Río de la
Plata y avanzar sus fronteras hasta al río Uruguay. El puerto de
Colonia de Sacramento a orillas del Río de la Plata en la banda
Oriental fue cedido a Portugal, y se convirtió en un foco de
contrabando portugués y británico hacia las posesiones españolas.
España la pudo reconquistar recién en 1777.
Entre 1796 y 1802, las guerras se generalizaron por toda Europa y
sus efectos se hicieron sentir en América. España y Francia
entraron en guerra contra Inglaterra, quien bloqueó puertos
españoles afectando el comercio con sus colonias. La Corona
española se vio obligada a autorizar comercio con otras potencias y
colonias extranjeras. Todo se agravó cuando en 1805 cuando
España perdió casi toda su flota al ser Vencida por Gran Bretaña en
la batalla de Trafalgar.
Comerciantes no autorizados introducían ilegalmente al territorio
americano productos adquiridos a mercaderes extranjeros:
ingleses, portugueses y holandeses. El pago se hacía con plata y oro
sacados de manera ilegal.
Desde fines del siglo XVIII, Gran Bretaña exhibió cada vez más
interés por las colonias hispanoamericanas y se elaboraron planes
secretos para invadirlas. La economía británica se encontraba en
pleno proceso de revolución industrial y expansión comercial de
sus productos. El principal objetivo de Gran Bretaña era asegurarse
bases militares estratégicas sobre las cuales garantizar su
expansión comercial.
LAS INVASIONES INGLESAS AL RÍO DE LA PLATA (1806 – 1807).
Causas:
 Necesidad de Gran Bretaña de obtener nuevos mercados
debido a la pérdida de sus colonias en América del Norte y del
cierre de los puertos europeos para su comercio durante la
guerra contra Francia y sus aliados.
 España se unió a Francia en su guerra contra Gran Bretaña
quien tenía el dominio de las aguas oceánicas del Atlántico.
 Los británicos creían que los puertos del Río de la Plata
estaban en estado de indefensión y que serían una fácil
conquista militar.
En la primera invasión, el comandan inglés Popham organizó una
expedición y obtuvo una rápida conquista del puerto de buenos
Aires en 1806. El virrey Sobremonte se retiró hacia Córdoba para
organizar la defensa y proteger las Cajas Reales, pero debió
entregar los caudales por pedido del Cabildo de Buenos Aires. El
nuevo gobernador de Buenos Aires, Beresford, garantizó al Cabildo,
magistrados, vecinos y habitantes sus derechos y privilegios, así
como la protección a la religión católica. Los ingleses lanzaron
además un decreto de libertad de comercio por lo que los
comerciantes vinculados al monopolio comercial expresaron su
oposición
Secretamente se organizaron milicias de voluntarios con el fin de
combatir a los invasores. Los encargados de organizarlas fueron el
capitán de navío Santiago de Liniers, francés al servicio de la
Corona de España, Juan Martín de Pueyrredón y Martín de Alzaga,
alcalde del Cabildo y comerciante español vinculado al monopolio.
Con la ayuda de Montevideo, lograron reconquistar Buenos Aires y
rendir a los ingleses.
Las autoridades fueron muy criticadas por la población,
especialmente el virrey Sobremonte. Debido a la presión de las
milicias recién creadas, se convocó a un cabildo abierto -a los
vecinos, altos funcionarios, prelados religiosos y jefes militares. Se
decidió delegar el mando político y militar a Santiago de Liniers.
Segunda Invasión. En 1807 los refuerzos ingleses de la anterior
expedición tomaron Montevideo y luego Buenos Aires. Liniers
organizó a las milicias urbanas sobre la base de un servicio y
entrenamiento militar. A ellas se sumó la intervención de Martin de
Alzaga. Finalmente los ingleses fueron derrotados nuevamente.
Consecuencias:
 Comenzó una crisis política del sistema español en el Río de la
Plata. El Virrey Sobremonte fue removido de su cargo por el
Cabildo de Buenos Aires y reemplazado por Liniers.
 La población local adquirió conciencia de su propia fuerza.
 Se fomentaron los propósitos políticos de emancipación.
 Quedó organizada en el Río de la Plata una fuerza militar en su
gran mayoría criolla
 Durante la ocupación inglesa, se suprimieron trabas
económicas y comerciales. Las autoridades españolas tuvieron
dificultades en reimplantarlas debido a los beneficios que se
habían generado gracias al libre comercio.
INVASIÓN NAPOLEÓNICA Y DERRUMBE DE LA MONARQUÍA
ESPAÑOLA. EL MOVIMIENTO JUNTISTA.
En 1806, el emperador de Francia Napoleón Bonaparte decretó un
bloqueo comercial continental contra Inglaterra. Portugal –aliado
de Inglaterra- no cumplió con el bloqueo por lo que Bonaparte
ocupó su territorio. El rey de España, Carlos IV, autorizó el paso de
tropas francesas y su establecimiento en el suelo español. España
pasó de país aliado a país ocupado por las fuerzas napoleónicas.
Napoleón Bonaparte logró conquistar Lisboa con el apoyo de
España, y el rey Juan VI de Portugal, con todo su séquito, huyó
hacia sus colonias para radicarse en Río de Janeiro. A comienzos de
1808, la corte portuguesa se instaló en Brasil, bajo la protección de
Inglaterra.
Motin de Aranjuez: En 1808 un levantamiento contra el rey en la
ciudad de Aranjuez lo obligó a abdicar en favor de su hijo Fernando
VII. Pero luego Carlos IV pidió auxilio a Napoleón Bonaparte.
Reunidos los tres en Bayona, Fernando VII devolvió la corona a
Carlos IV, quien a su vez cedió todos sus derechos a Napoleón. Éste
resolvió proclamar Rey de España y de las Indias a su hermano José
Bonaparte, quien tomó posesión efectiva del trono.
En toda España comenzaron levantamientos contra José Bonaparte
y se formaron juntas provinciales que juraron fidelidad a Fernando
VII como rey legítimo cautivo. Estas juntas asumieron atribuciones
y funciones de gobierno y tuvieron como propósito expulsar las
tropas francesas y restaurar al monarca Borbón.
Las juntas se crearon argumentando que, ante la ausencia del rey
legítimo, el poder había reaído en manos del pueblo. Este principio
es conocido como la “retroversión de la soberanía”.
Con el propósito de unificarlas, se constituyó como gobierno una
Junta Central que se instaló en Sevilla la que se proclamó única
autoridad soberana en defensa y representación de los derechos
de Fernando VII, tanto en España como en los dominios del rey en
América. Además, llamó a elegir representantes por cada
virreinato y capitanía general que debía sumarse a la Junta Central.
La formación de juntas tuvo su réplica en América, y en varias
capitales virreinales se propusieron la creación de Juntas de
gobierno: México, Caracas y Buenos Aires. En el Río de la Plata,
luego de la deposición del virrey Sobremonte, fue reemplazado por
la Audiencia y luego por Santiago de Liniers. Pero su origen francés
generó la desconfianza de comerciantes y funcionarios españoles.
En 1808, Liniers dispuso efectuar la proclamación y jura de
Fernando VII. Pero en la ciudad de Montevideo, se formó una Junta
de gobierno que desconoció al virrey Liniers y se proclamó
subalterna de la Junta de Sevilla. De esta forma Montevideo quedó
separada de la autoridad de Buenos Aires.
Asonada de 1809: El Cabildo de Buenos Aires el 1 de enero de 1809
nombró una Junta suprema compuesta por españoles –pero con el
criollo Mariano Moreno como secretario- que comunicó a Liniers su
destitución. Éste sin embargo la rechazó al tener el apoyo de los
batallones de milicias criollas encabezadas por el criollo Cornelio
Saavedra.
Finalmente, la Junta de Sevilla envió al Baltasar de Cisneros como
nuevo virrey del Rio de la Plata, quien fue aceptado en Buenos
aires y Montevideo.
Al conocerse la creación de la Junta Central en toda América, se la
aceptó como autoridad suprema. Las primeras juntas americanas
se caracterizaron por una profunda fidelidad al monarca español y
no exhibieron intenciones de romper lazos con la metrópoli. Fue la
respuesta a una crisis peninsular (española) y al temor que
despertó la posibilidad de pasar a depender de Francia. Los
sectores criollos y las propias autoridades coloniales aprovecharon
la ocasión para negociar con la metrópoli un mayor margen de
autonomía en el manejo de sus asuntos locales, pero sin vocación
independentista.
Debido a la proximidad de las tropas francesas, en enero de 1810 la
Junta de Sevilla se trasladó a la ciudad de Cádiz donde se disolvió y
nombró en su reemplazó a un Consejo de Regencia, integrado por
5 miembros. Al conocerse estos acontecimientos, en América
comenzó un proceso de revoluciones en Caracas, Bogotá, Buenos
Aires y Santiago de Chile.
EL PROCESO REVOLUCIONARIO HISPANOAMERICANO. LA
REVOLUCIÓN DE MAYO DE 1810, INTENTOS DE ORGANIZACIÓN
NACIONAL, FORMAS DE GOBIERNO: JUNTAS, TRIUNVIRATOS Y
DIRECTORIOS.
El 18 de mayo de 1810 se conoció en Buenos Aires la noticia de la
disolución de la Junta de Sevilla. El 22 de mayo el Virrey convocó a
un cabildo abierto, presionado por los jefes de las milicias. Ese día
se debatió si el virrey podía seguir siendo la autoridad, ya que el rey
a quien representaba estaba preso y la Junta que lo había
nombrado había dejado de existir.
El obispo Benito LUÉ asumió la defensa de Cisneros como
representante del rey quien tenía derecho a gobernar sin importar
lo que sucediera en España. Juan José CASTELLI sostuvo la teoría de
la retroversión de la soberanía, por la cual, ausente el rey, el poder
volvía a manos de los pueblos. El pueblo de Buenos Aires tenía
derecho a elegir nuevas autoridades.
El fiscal de Audiencia, Manuel VILLOTA, sostuvo que Buenos Aires
no podía resolver por sí misma sin consultar a los demás pueblos
del Virreinato. Juan José PASO respondió que, dada la urgencia, la
capital virreinal podía decidir como si fuera una hermana mayor de
los demás pueblos.
a) Política y administrativa: exigió el Juramento de fidelidad
al Rey, reemplazó a miembros de la Audiencia y del Cabildo –
contrarios a la Junta-, dio a conocer a las autoridades del
Interior instrucciones, circulares y proclamas; convocó a las
provincias a enviar representantes.
b) Cultural: fundó el periódico “Gazeta de Buenos Ayres”
para comunicar su obra, dispuso la creación de una Biblioteca
Pública.
c) Económica: favoreció el comercio exterior disminuyendo
y eliminando derechos a la exportación; se anuló el monopolio
comercial ordenando la apertura de varios puertos.
d) Militar: se reorganizó el ejército en siete regimiento de
veteranos y creó el Regimiento de Caballería; se creó una
escuadrilla naval; se enviaron expediciones armadas a las
ciudades del interior.
e) Diplomática: se buscó el reconocimiento del nuevo
gobierno para prevenir ataque extranjero, el apoyo de
Inglaterra y la compra de armas, y se fomentó la rebelión en
Chile y en Perú.
La Junta pidió en una nota a los demás pueblos del Virreinato su
reconocimiento y el envío de diputados o representantes de las
ciudades para decidir los pasos a seguir. Los diputados llegados a la
capital reclamaron ser incorporados la Junta.
A fines de 1810 quedó conformada la llamada Junta Grande. Luego
el Cabildo decidió reemplazarla por un Poder Ejecutivo de tres
miembros: el Triunvirato. Éste adoptó una política de
centralización del poder en Buenos Aires, al disolver las juntas de
las ciudades del interior y nombrar gobernadores. A la vez ordenó
la retirar de ejércitos enviados al Alto Perú y la Banda Oriental.
Una Logia se creada en 1812 por José de San Martín y Carlos de
Alvear1 organizó en octubre de 1812 un movimiento militar que
reemplazó al Primer Triunvirato por el Segundo Triunvirato. Su
medida más trascendente fue convocar a un congreso de diputados
de las provincias, que adoptó el nombre de Asamblea General
Constituyente.

La votación dio como resultado el cese del virrey y la decisión
nombrar una Junta Provisional que debía convocar
representantes de todos los pueblos del Virreinato.
nombramiento de esta Junta fue encomendado al Cabildo
Buenos Aires.
El 23 de mayo el Cabildo designó a Cisneros como presidente de la
Junta. Pero el día 25 de mayo, un movimiento liderado por el
regimiento de Patricios elevó un petitorio con la lista de los
nombres que debían figurar en el nuevo gobierno. La Junta se
constituyó con Cornelio Saavedra como presidente; secretarios
fueron Mariano Moreno y Juan José Paso, y el resto de los vocales
Manuel Belgrano, Juan José Castelli, Miguel de Azcuénaga, Manuel
Alberdi, Domingo Matheau y Juan Larrea.
Esta Primera Junta fue un gobierno autónomo que procuró erigirse
en autoridad suprema de todo el Virreinato, manteniendo el
vínculo con el monarca pero sin reconocimiento del Consejo de
Regencia peninsular
Obra de gobierno de la Primera Junta.
de ASAMBLEA DEL AÑO XIII BALANCE DE LA LABOR LEGISLATIVA.
a A fines de 1813 comenzó a sesionar la Asamblea General
El Constituyente. Estaba integrada por diputados nombrados por las
de ciudades. La Logia consiguió un significativo predominio e
influencia en los debate.
La Asamblea se proclamó soberana para decidir la organización
política de las Provincias unidas del Río de la Plata mediante una
Constitución. Además suprimió los títulos de nobleza, abolió las
formas de servidumbre de los indígenas (trabajos forzados
llamados mita y yanaconazgo) y decretó la libertad de vientres: los
hijos de los esclavos nacidos serían libres. También ordenó acuñar
moneda propia con un símbolo de las Provincias Unidas (el actual
Escudo nacional); aprobó una Marcha patriótica (el himno actual) y
el uso por los ejércitos de la bandera creada por Belgrano.
El sector de la Logia Lautaro liderado por Alvear decidió posponer
la declaración de la independencia y el debate sobre la Constitución
1
La Logia 1812 era una sociedad secreta cuyo objetivo era reunir a los
partidarios de la independencia. Sus creadores fueron San Martin y Alvear,
militares criollos que habían combatido en España contra la invasión
napoleónica. , que regresaron a América para luchar por la independencia
continental.
para concentrarse en organizar un gobierno centralista. La Sudamérica de la dominación española y de toda otra dominación
Asamblea creó un Poder Ejecutivo unipersonal: el Directorio. extranjera. Ni la Banda Oriental ni las provincias del litoral –
Corrientes, Entre Ríos y Santa Fe- en conflicto con el Directorio
FOCOS CONTRARREVOLUCIONARIOS Y EXPEDICIONES MILITARES. formaron parte del Congreso de Tucumán.

ALTO PERÚ: fue el principal foco de resistencia, desde el Virreinato

En 1817 el Congreso se trasladó a la ciudad de Buenos Aires para
del Perú partieron tropas realistas que se enfrentaron con las que
dictar una constitución. Para ello era necesario definir previamente
enviaba la Junta desde Buenos Aires. El dominio español quedó
cuál sería la forma de gobierno a adoptar. Hubo proyectos
asegurado en esa región luego de la batalla de Sipe-Sipe en 1815.
monárquicos pero que no fueron implementados, pese a la
propuesta inicial de Belgrano de coronar algún descendiente de los
PARAGUAY: el Cabido de Asunción reconoció al Consejo de
Incas y de las misiones diplomáticas enviadas a las cortes europeas.
Regencia español. Las tropas patriotas al mando de Manuel
Pero el punto más conflictivo en debate fue la distribución del
Belgrano fueron derrotadas y se retiraron. En 1811 las autoridades
poder a nivel territorial: una forma centralista (o de unidad) o
españolas fueron reemplazadas por un gobierno propio que se
federal (o confederal).
separó de Buenos Aires.
Las Constitución sancionada en 1819 no sólo se abstuvo de definir
LA BANDA ORIENTAL: Montevideo estaba en manos de los
la forma de gobierno, sino que tampoco se expidió respecto a la
españoles. Luego de un largo sitio de la ciudad y una rebelión de la
organización interna de las provincias. Adoptó el régimen
población rural de la Banda Oriental, liderada por José Artigas, se
representativo de base electoral y la división de poderes, pero tuvo
logró derrotarlos en 1814. El Segundo Triunvirato invitó a los
con un espíritu corporativo al crear un Senado en el que quedaban
orientales a que participaran en la Asamblea del año XIII. Artigas
representados los grupos más poderosos –clero, universidades,
reunió un Congreso en Tres Cruces, el cual nombró 6 diputados y
militares y el directorio- y una vocación centralizadora al dejar en
les dio instrucciones: debían proponer la independencia, el
manos del poder ejecutivo nacional la decisión final sobre el
establecimiento de una Confederación de provincias soberanas, el
nombramiento de los gobernadores de provincia. Finalmente
libre comercio y que la capital que no sea Buenos Aires. Estas
quedó sin vigencia tras la caída del Directorio en 1820.
instrucciones iban en contra de los planes de los grupos de Buenos
Aires. La Asamblea no aceptó la incorporación de los diputados
orientales por no haber sido elegidos según el reglamento.
LA CONSOLIDACIÓN DE LA REVOLUCIÓN Y SU PROYECCIÓN
AMERICANA. LA CAMPAÑA LIBERTADORA DEL GRAL. SAN
EL CONGRESO DE TUCUMÁN, DEBATES SOBRE LA FORMA DE
MARTÍN.
GOBIERNO, LA DECLARACIÓN DE LA INDEPENDENCIA Y
En 1815 al Guerra de la independencia alcanzó una dimensión
CONSTITUCIÓN DE 1819.
continental por las campañas dirigidas por José de San Martín
desde el Sur y Simón Bolívar desde el Norte. Las autoridades
En 1815 Napoleón Bonaparte abdicó como emperador de Francia
españoles mantuvieron el control en el Virreinato del Perú. Para
tras su derrota por la coalición formada por Gran Bretaña, Austria,
San Martín y Bolívar la independencia requería terminar con el
Prusia y Rusia. Inmediatamente las potencias se reunieron en un
poder español en el Perú.
Congreso General Europeo en la ciudad de Viena en 1815. En él se
San Martín diseñó como estrategia enviar desde Chile una
acordó el equilibrio de poder que impidiese que una potencia
expedición por mar que desembarque en el Perú. Como
adquiriera predominio en el continente. Para ello se debía
gobernador de Cuyo organizó el Ejercito de los Andes para preparar
restaurar las dinastías depuestas en España, Francia y Portugal y la
la campaña libertadora de Chile, en manos españolas.
monarquía absoluta, además de rediseñar las fronteras y
compensar a países por pérdidas sufridas.
En 1817 se dio el cruce de la cordillera del Ejército de los Andes y
Para sostener el orden establecido se constituyó la Santa Alianza:
luego de la batalla de Chacabuco el 12 de febrero, los patriotas
un acuerdo entre Rusia, Austria y Prusia. Su finalizad era garantizar
tomaron Santiago de Chile. Se proclamó entonces la independencia
la restauración de las monarquías absolutas y actuar en común
de Chile.
acuerdo en Europa.
En 1820 partió una flota para Perú en la que se destacó el gran
despliegue de recursos financiado, en su mayor parte, por los
Fernando VII volvió al trono de España en 1814. Restauró el
chilenos, y que culminó con la declaración peruana en 1821.
absolutismo y anuló la Constitución que se había dictado en 1812.
Además dispuso restablecer su autoridad en América y envió
En 1822 se produjo en la ciudad de Guayaquil una entrevista entre
expediciones para reconquistas los territorios americanos donde
San Martín y Bolívar. El primero se hallaba en Perú luego de
existían procesos de independencia.
declarar la independencia y de haber sido nombrado Protector en
1821, y el segundo venia triunfante de la campaña del Norte. En
En 1815 el Directorio convocó a un Congreso a reunirse en San
esta entrevista debían coordinarse los futuros cursos de acción
Miguel de Tucumán para decidir sobre la independencia de las
para liberar definitivamente al Perú, que aún debía enfrentar
Provincias Unidas. Con la restauración monárquica las opciones del
tropas realistas.
gobierno eran: o se regresaba a una sumisión a la metrópoli en los
Se decidió el retiro de San Martín de Perú y la continuación de la
términos absolutistas planeados por Fernando VII o se salía de la
campaña libertadora a cargo de Bolívar. Éste, junto con Antonio
ambigüedad jurídica imperante y se declaraba la independencia
José Sucre, terminó de vencer el último baluarte de los ejércitos
El 9 de julio de 1816 un nuevo Congreso Constituyente en
realistas en 1824.
Tucumán declaró la independencia de las Provincias Unidas de
DISOLUCIÓN DEL PODER CENTRAL Y SURGIMIENTO DE LAS
AUTONOMÍAS PROVINCIALES, LOS PACTOS INTERPROVINCIALES.
A comienzos de 1820 los gobernadores de Santa Fe y de Entre Ríos:
Estanislao López y Francisco Ramírez respectivamente, derrotaron
en Cepeda a las tropas del Directorio. Pocos días después entraban
en Buenos Aires imponiendo condiciones: la Constitución fue
rechazada.
El Directorio se disolvió y el gobierno central quedó acéfalo, sin
ninguna autoridad. El país quedó sin gobierno nacional o
representativo de todas las provincias. Por eso se habla de un
período de ANARQUIA (“sin gobierno”) o POLIARQUIA (“varios
gobiernos “provinciales).
Las provincias, junto con sus gobernadores o “caudillos”, como
empezaban a ser llamados, se transformaron en gobiernos
autónomos, es decir que se convirtieron en entidades casi
independientes que formaron sucesivas alianzas con el fin de
hacerse más fuertes. Incluso Buenos Aires comenzó a funcionar
como provincia autónoma e intervino en algunos de los pactos y
tratados interprovinciales.
Los gobernadores de las provincias de este período eran, por lo
general, caudillos con ideas federales que imponían su voluntad
sobre las instituciones por la fuerza de las armas. El poder de los
caudillos se sustentaba en los sectores rurales, y esta base social les
permitía disponer de milicias en apoyo de sus políticas federales.
LOS PACTOS INTERPROVINCIALES
A pesar de la desaparición de las autoridades nacionales, ocurrida
en 1820, las provincias jamás olvidaron que pertenecían a una
misma Nación y que la separación era transitoria. Por esa razón
firmaron entre ellas varios pactos que luego, al sancionarse la
Constitución de 1853, van a ser mencionados en el Preámbulo de la
misma como “pactos preexistentes”. De la década de 1820 hay tres
pactos que son los más importantes: el del Pilar, el de Benegas y el
del Cuadrilátero.
PACTO DEL PILAR
Fue firmado entre las provincias de Buenos Aires, Santa Fe y Entre
Ríos. Este pacto se pronunció por el sistema federal y los firmantes
invitaron a las demás provincias a reunir un congreso para
organizar el país, declarando además la libre navegación de los ríos.
El tratado sentaba las bases para un régimen federal. Buenos Aires
perdía temporariamente el dominio político pero, de hecho,
conservaba sus privilegios económicos: mantenía el control de la
Aduana de Buenos aires.
TRATADO DE BENEGAS
Este tratado puso fin a la guerra entre Buenos Aires y Santa Fe, que
recibió como tributo 35.000 cabezas de ganado que el mismo Juan
Manuel de Rosas ayudó a reunir. Establecía además la reunión de
una asamblea en Córdoba, que era la provincia mediadora.
TRATADO DEL CUADRILÁTERO
Fue firmado entre las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Entre
Ríos y Corrientes, las que se comprometían a asegurar la paz,
amistad y unión permanente entre ellas. Se garantizaba además la
libre navegación de los ríos y el comercio interprovincial, a la vez
que se establecía que cualquiera de las partes signatarias podía
convocar un congreso general. En el orden político, el Tratado
significó el triunfo de Buenos Aires, ya que se retiraba apoyo al
Congreso reunido en Córdoba y no se hacía referencia al sistema
federal que propiciaban las demás provincias.
LOS PENSAMIENTOS UNITARIO Y FEDERAL
La lucha de partidos e intereses caracterizó el panorama nacional
por más de 20 años. Unitarios y federales fueron las divisas
enfrentadas en esa lucha.
Se conoce con el nombre de unitario al partido que sostiene la
necesidad de un gobierno centralizado y sin autonomías
provinciales.
El federalismo es una doctrina política que busca que una entidad u
organización esté formada por distintos organismos que se asocian
delegando algunas libertades o poderes propios a otro organismo
superior, a quien pertenece la soberanía, y que conservan su
autonomía, ya que algunas competencias les pertenecen
exclusivamente.
Para muchos historiadores modernos, sin embargo, el
enfrentamiento real es el protagonizado por los intereses de las
provincias y los de la capital- puerto.
LA FELIZ EXPERIENCIA Y LAS REFORMAS RIVADAVIANAS EN BUENOS
AIRES (1820-1824)
Entre 1820 y 1824 fue un período de paz. Buenos Aires asumió las
relaciones internacionales. Portugal, Brasil EEUU e Inglaterra
reconocieron la independencia de las Provincias Unidas y
establecieron con ellas relaciones consulares que permitieron
desarrollar el comercio exterior.
Inspirado por Rivadavia, el gobierno de Buenos Aires adoptó
medidas para desarrollar la actividad económica: se crearon el
Banco de Descuento, la Bolsa de Comercio y se tomaron una serie
de medidas para atraer capitales y obtener préstamos; en 1824 la
casa Baring Brothers de Londres otorgó al gobierno argentino un
millón de libras esterlinas.
Se introdujeron animales de raza para cruzarlos con los ganados
criollos y semillas para mejorar los cultivos.
Se elaboró un plan de entrega de tierras a colonos según el sistema
de enfiteusis, para la explotación agrícola.
Se abolieron tanto los fueros (privilegios especiales) que gozaba el
clero como el diezmo que recibía la Iglesia; se anularon órdenes
religiosas y se reglamentaron las que quedaron. Entonces se
levantó un motín liderado por el padre Castañeda en contra de
Rivadavia acusándolo de enemigo de la religión, pero fue sofocado
en seguida.
También se amplió y modernizó la educación primaria y superior;
se fundaron escuelas, colegios superiores y se inauguró la
Universidad de Buenos Aires.
EL CONGRESO GRAL. CONSTITUYENTE DE 1824 Y SU LABOR.
PRESIDENCIA DE BERNARDINO RIVADAVIA. LA CONSTITUCIÓN DE
1826. LA GUERRA CON EL BRASIL Y EL FIN DE LA EXPERIENCIA
UNITARIA.
En 1824 se reunió un nuevo Congreso Constituyente para intentar
la organización nacional. A fines de 1824 llegaron a Buenos Aires
los diputados del interior, que habían sido elegidos de acuerdo con
la cantidad de población de cada provincia. De esta manera, la
representación porteña era la más numerosa, además de la que
tenía mayor claridad en cuanto a su objetivo político: la
conformación del país bajo el liderazgo de Buenos Aires. Además,
se dividieron las posiciones entre los unitarios, defensores de un
régimen centralizado, y los federales, propulsores de un régimen
que pretendía dotar de mayor autonomía a las provincias.
Fue sancionada la Ley Fundamental de 1825, que creaba un
principio de poder nacional al delegar las relaciones exteriores y los
asuntos de guerra en el gobierno de Buenos Aires, pero que
estipulaba claramente que la constitución que dictara el Congreso
podría ser aceptada o rechazada por las provincias. Mientras, las
provincias se regirían por sus propias instituciones para sus asuntos
internos.
Los problemas para el Congreso se plantearon en tres frentes:
1) En el exterior con el Brasil: la Banda Oriental sufrió una
ocupación brasileña y Brasil declaró la guerra después de que el
Congreso aceptara la incorporación de la provincia oriental a las
Provincias Unidas del Río de la Plata.
2) En el seno de la provincia de Buenos Aires: hubo dos facciones
enfrentadas conformadas por el Partido del Orden cercano a
Bernardino Rivadavia (de tendencia centralista) y otra liderada por
Manual Dorrego (federal).
3) Entre Buenos Aires y el resto del país, cuando se aumentó la
representación porteño en el Congreso.
PRESIDENCIA DE RIVADAVIA
En febrero de 1826 el Congreso dictó la Ley de Presidencia que
creó un ejecutivo permanente y Bernandino Rivadavia fue
nombrado presidente. Éste presentó el proyecto de Ley de
Capitalización que declaraba a Buenos Aires capital del poder
nacional, y la provincia de Buenos Aires debía dividirse. Su
promulgación terminó aislando al grupo unitario rivadaviano; a la
oposición federal se le unieron sectores económicos dominantes de
la campaña (zonas rurales) de Buenos Aires. Estos estaban
temerosos de perder las principales franjas de territorio para el
comercio ultramarino y la fuente de recursos fiscales más
importante, la Aduana, ahora en manos del gobierno nacional.
En 1826 se el Congreso sancionó una Constitución que adoptó la
forma representativa republicana, consolidada en unidad de
régimen. Desde Córdoba, Bustos lideró una férrea oposición a la
nueva constitución y a la persona del presidente. La guerra civil se
desató cuando Rivadavia envió al general Lamadrid a reclutar
tropas para la guerra contra el Brasil, y éste se enfrentó con
gobernadores y sus ejércitos provinciales. En 1827 varias provincias
rechazaron la constitución.
Poco después de la renuncia de Rivadavia, el Congreso se disolvió,
dando fin a una nueva tentativa de organización institucional.
GOBIERNO DE DORREGO
La provincia de Buenos Aires eligió como gobernador a Manuel
Dorrego, líder de los federales de Buenos Aires. Los asuntos más
urgentes de los que tuvo que hacerse fueron: la finalización de la
guerra con Brasil, la organización definitiva del país y la
recuperación de las finanzas públicas que estaban agotadas.
Ninguno de los problemas más críticos de la provincia obtuvieron
durante su gobierno una solución definitiva.
El 1° de diciembre de 1828, el jefe de las tropas que volvían de
Brasil, el unitario Juan Lavalle, organizó una rebelión contra el
gobernador Dorrego. El otro jefe unitario, José María Paz, se dirigió
al interior con fuerzas militares para organizar también allí una
rebelión que derrocara a los caudillos provinciales federales. En
Buenos Aires, Lavalle fue proclamado gobernador por una
asamblea que no tenía ningún carácter representativo, y en un acto
político que se caracterizó como brutal, capturó e hizo fusilar a
Dorrego.
LA ÉPOCA DE ROSAS, EL PRIMER GOBIERNO. EL PACTO FEDERAL
DE 1831 Y LA LIGA DEL INTERIOR. EL PROBLEMA DE LA
ORGANIZACIÓN CONSTITUCIONAL DEL PAÍS.
PRIMER GOBIERNO DE ROSAS
Milicias bajo el liderazgo de Juan Manuel de Rosas, rico hacendado
y comandante de las milicias, se levantaron contra el gobernador
Lavalle, a quien consideraban un usurpador del poder. Sitiado en la
ciudad y sin poder controlar la campaña que se hallaba dominada
por Rosas, Lavalle fue derrotado y se retiró de la provincia.
La Legislatura porteña eligió a Juan Manuel de Rosas como
gobernador de la provincia de Buenos Aires, con facultades
extraordinarias tales como para pacificar los ánimos, a la vez que lo
declaró “Restaurador de las Leyes”, que era lo mismo que decir
“restaurador del orden institucional”.
LAS GUERRAS CIVILES
Las provincias regresaron a su anterior situación de autonomía y se
dividieron en dos grandes bloques: la Liga Unitaria del Interior y la
Liga Federal de las provincias del Litoral. Ambos bloques se
enfrentaron en una guerra civil.
A mediados de 1830, las provincias de la Liga Unitaria del Interior,
otorgaba al general Paz el Supremo Poder Militar.
Los gobernadores federales de Buenos Aires, de Santa Fe y de Entre
Ríos, n 1831 firmaron el Pacto Federal, que era una alianza
político- militar a la cual las demás provincias podían incorporarse a
medida que adhiriesen a la forma de gobierno federal.
PACTO FEDERAL (1831)
Por este pacto las provincias formaron una alianza ofensivo-
defensiva tendiente a resistir cualquier invasión que pudiera
producirse en algún punto del territorio, a la vez que establecieron
la libertad de tránsito con buques y cargas, de los habitantes de las
provincias involucradas. Se incluyó una referencia a una futura
reunión de un congreso el cual debería optar el principio federal.
Apoyados por los ejércitos de Santa Fe y de Buenos Aires, Facundo
Quiroga recuperó parte de las provincias del interior y más tarde
intervinieron también los ejércitos de la Liga del Litoral, cayendo
Paz como prisionero de las milicias santafecinas.
La derrota de la Liga del Interior provocó la uniformidad política del
país, que quedó en manos de los federales, bajo el predominio de
los caudillos Rosas, López y Quiroga. Los tres aspiraban a alguna
forma de supremacía nacional. López y Quiroga –el litoral y el
interior- insistían en apresurar el congreso que el Pacto Federal
obligaba a convocar. Rosas se oponía a que se realizara. Su opinión
prevaleció y el congreso no fue convocado.
EL SEGUNDO GOBIERNO, LA CONSOLIDACIÓN DEL PODER Y LA
CONFEDERACIÓN ROSISTA. LA POLÍTICA ECONÓMICA, LA
ADUANA DE BUENOS AIRES Y LA EXPANSIÓN DE LA FRONTERA.
Rosas culminó su primer mandato como gobernador en 1832 y se
retiró a la campaña. Desde allí organizó una expedición hacia los
territorios ocupados por los aborígenes, a través de la cual
continuó incorporando tierras que enriquecieron a los hacendados
porteños. El mismo Rosas pertenecía a este grupo, ya que era
propietario de fincas rurales donde criaba ganado, y desde la
década de 1810, tenía también un saladero muy productivo.
Esta “Campaña al Desierto” le otorgó a Rosas aún más prestigio
entre los habitantes de la provincia y también le permitió contar
con tierras para repartir entre los grandes terratenientes, y pudo
de esa manera contar con su incondicional apoyo político.
En 1835 fue asesinado de Facundo Quiroga en Barranca Yaco,
Córdoba. Rosas calificó este hecho como un complot unitario, y lo
presentó como una razón más para postergar la organización del
país.
La Legislatura lo nombró por segunda vez Gobernador de Buenos
Aires y le otorgó la Suma del Poder Público.
Durante la hegemonía de Rosas en Buenos Aires se consagró en
una singular forma de unidad que se conoció con el nombre de
Federación: las provincias mantuvieron sus gobiernos locales y
Rosas era encargado de las relaciones exteriores. De este modo, el
poder de Rosas se hizo cada vez más fuerte tanto en Buenos Aires
como en el interior
Además se consolidó la economía que se desarrollaba en Buenos
Aires, lo que se tradujo en importaciones y exportaciones a gran
escala. El puerto de Buenos Aires era la mayor fuente de riqueza
del fisco y Rosas no vaciló en prohibir el paso de buques
extranjeros por los ríos Paraná y Uruguay, perjudicando al litoral y
al interior.
La única forma que tenían los productores del Litoral de exportar
era a través de Buenos Aires. La política porteña de cierre de los
ríos interiores, no permitía el comercio directo del Litoral con los
mercados exteriores.
El saladero y la aduana permitieron el acrecentamiento de la
riqueza en Buenos Aires. Estancieros y saladeros se enriquecieron
con la exportación de cueros y especialmente del tasajo (carne)
que se enviaba a EEUU y Brasil para nutrir a esclavos. El tráfico de
cueros y tasajo benefició también a comerciantes ingleses y
norteamericanos que, a su vez, importaban productos
manufacturados y harina.
No obstante, Rosas impulsó en 1835 una ley de Aduanas que elevó
los aranceles que pagaban los productos llegados del exterior y
prohibía la introducción de otros que se producían en el país. La ley
tuvo una respuesta satisfactoria desde el interior porque favorecía
a la industria local e impulsaba el proteccionismo.
REACCIONES POLÍTICAS CONTRA ROSAS Y LA OPOSICIÓN
INTELECTUAL DE LA GENERACIÓN DEL 37. LA OPOSICIÓN
ARMADA. INTERVENCIONES EXTRANJERAS: OCUPACIÓN DE LAS
ISLAS MALVINAS, BLOQUEO FRANCÉS Y ANGLO - FRANCÉS.
El segundo gobierno de Rosas trajo aparejado el endurecimiento
del régimen con todo aquel que no fuese su aliado. Fue el
momento de la acción en Buenos Aires de “La Mazorca” o
“Sociedad Popular Restauradora”, que era una especie de policía al
servicio de la “pureza” federal. Fue también el momento en que se
hizo obligatorio el uso de la “divisa punzó”, un distintivo rojo,
símbolo del federalismo, a todos los empleados de la provincia,
civiles, eclesiásticos y militares (estos últimos debían llevar en la
cinta la inscripción “FEDERACIÓN O MUERTE”). Y sobre todo, fue el
momento de la persecución de toda oposición política.
Hacia fines de la década de 1830, la oposición a Rosas estaba
conformada por viejos unitarios y federales porteños antirrosistas.
A estos grupos se le sumó otro, integrado por jóvenes que se
identificaban a sí mismos como miembros de la “Joven Argentina”.
Eran escritores conocidos también como la Generación del 37 –ese
año fundaron una librería y salón literario-: Esteban Echeverría,
Juan María Gutiérrez, Juan Bautista Alberdi, entre otros. Luego
emigraron a Montevideo, el principal centro de acción de los
emigrados antirrosistas. Allí se procuró hallar la fórmula política
que permitiera la conciliación de todos los adversarios de Rosas, y
cuyo primer esquema esbozó Echeverría en 1846 en su obra El
Dogma socialista.
EL BLOQUEO FRANCÉS AL RÍO DE LA PLATA TUVO LUGAR ENTRE EL
28 DE MARZO DE 1838 Y EL 29 DE OCTUBRE DE 1840. Durante el
mismo, la escuadra francesa cerró efectivamente al comercio la
ciudad de Buenos Aires y los puertos fluviales de la Confederación
Argentina. La acción tuvo como justificación la negativa del
gobierno de Juan Manuel de Rosas a aceptar la exigencia de
exceptuar a los súbditos franceses de las obligaciones del servicio
militar, obtener satisfacciones por supuestas ofensas a ciudadanos
de esa nación, y asegurar el tratamiento de nación más favorecida
a Francia por parte de la Confederación Argentina.
La acción militar francesa promovió por todos los medios y logró
aglutinar la oposición a Rosas, impulsando numerosos movimientos
revolucionarios en el Uruguay y en las provincias argentinas, con el
objeto de poner fin al gobernador. Fracasado el intento, el tratado
Mackau-Arana puso fin al largo bloqueo.
BLOQUEO ANGLO FRANCÉS 1845-50. Rosas intervino en el
Uruguay, con el objetivo de derribar el partido de Rivera y su
alianza con los unitarios refugiados en Montevideo. Ante tal
situación, Gran Bretaña y Francia ofrecen su mediación quienes
ante la negativa de Rosas bloquearon el Puerto de Buenos Aires en
1845.
Frente al avance de la flota anglo francesa el general Lucio Mansilla
obstruyó el paso en la Vuelta de Obligado el 20 de noviembre de
1845. Sin obtener los resultados económicos esperados en Bs As, el
gobierno inglés decidió levantar el bloqueo firmándose el tratado
Arana- Southern a comienzo de marzo de 1849.
LA OCUPACION DE MALVINAS. En 1833 un navío inglés ocupó las
islas Malvinas, que estaban en la jurisdicción de la provincia de
Buenos Aires. Inglaterra rechazó la protesta que hizo la
representación argentina en Londres y continúo con la ocupación.
Buenos Aires reiteró periódicamente su reclamación pero carecía
de los medios materiales para hacer valer sus derechos. Rosas trató
de negociar la posesión de las islas pero la posesión de facto de los
ingleses resultó inquebrantable desde entonces.
PRONUNCIAMIENTO DE URQUIZA. FIN DEL RÉGIMEN ROSISTA.
En 1850, la provincia de Entre Ríos, el Brasil y Montevideo,
establecieron una alianza antirrosista, y a mediados de 1851, Entre
Ríos le retiró la delegación de las relaciones exteriores a Rosas.
El 1º de mayo de 1851 el gobernador de Entre Ríos, Justo José de
Urquiza concretó su Pronunciamiento contra Rosas. En el
documento redactado al efecto se decía que la situación física de
Juan Manuel de Rosas no le permitía por más tiempo continuar al
frente de los negocios públicos dirigiendo las relaciones exteriores
y los asuntos generales de paz y guerra de la Confederación.
En ese mismo documento Urquiza afirmó que el pueblo entrerriano
reasumía su soberanía delegada por el Pacto Federal en el
gobernador de Buenos Aires, y que, por lo tanto, a partir de ese
momento la provincia de Entre Ríos quedaba en actitud de
entenderse directamente con los demás gobiernos del mundo,
hasta tanto fuese definitivamente constituida la República.

Batalla de Casero (1852). Urquiza alistó su ejército formado por

entrerrianos, correntinos y aliados de la Banda Oriental y Brasil, y
avanzó hacia las alturas de Caseros. Rosas, por su parte, se alineó
con su ejército en el mismo punto. El 3 de febrero se inició el
combate que concluyó pocas horas después con la derrota de
Rosas. Pocos días después, el ex gobernador se embarcó hacia el
exilio en Inglaterra.

Los gobernadores provinciales otorgaron a Urquiza la

representación de las relaciones exteriores de la Confederación
Argentina. El principal problema que debían enfrentar era la
organización política del país.

LA CUESTIÓN TERRITORIAL Y LA SOBERANÍA: AMERCANISMO Y

PANAMERICANISMO