Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
PROYECTO
MANEJO DE ZOOCRIADEROS
OCTAVO CICLO
2019
INTRODUCCIÓN
Esta ave rapaz llamada Gavilán de las Galápagos (Buteo galapagoensis) está
clasificada como vulnerable desde antes de 1994 debido a que cuenta con una
escasa población en una zona única en el mundo, las islas Galápagos. Aun así,
de momento parece que la situación es estable, aunque la tendencia de estas
aves a mejorar o empeorar no es del todo conocida. Lo que está claro es que, si
la persecución que afecta a esta rapaz continúa como hasta ahora, sin duda su
futuro será el de estar en peligro de extinción.
TAXONOMÍA
Reino: ANIMALIA
Filo: CHORDATA
Clase: AVES
Orden: FALCONIFORMES
Familia: ACCIPITRIDAE
Nombre científico del Gavilán de las Galápagos: Buteo galapagoensis
Nombre común: Busardo De Galápagos, Gavilán De Galapagos, ratonero de
las Galápagos, cernícalo de las islas Galápagos.
CARACTERÍSTICAS
Como características de su familia están las de que tienen el pico ganchudo,
grande y fuerte, para desgarrar la carne de sus presas, y patas y garras fuertes.
También tienen una vista excelente, lo que les permite localizar presas
potenciales a gran distancia.
Con respecto a la llegada de estas aves a las islas, el estudio genético indica
que seguramente sus antepasados más cercanos colonizaron las islas hace
aproximadamente 300.000 años, siendo las aves que se conoce que más
recientemente llegaron a la isla los pinzones se calcula que llegaron hace 2 ó 3
millones de años (Bollmer et al., 2005).
ALIMENTACIÓN
Este halcón es un versátil y activo depredador que se alimenta de una amplia
variedad de aves marinas y aves de la isla, además de ratas, lagartos, iguanas,
invertebrados, serpientes, crías de tortugas y tortugas marinas, e incluso de
la iguana marina (Amblyrhynchus cristatus).
Estas aves son depredadores de una gran cantidad de especies, pero en cambio
para esta rapaz no hay depredadores naturales en las islas, ni parece mostrar
ningún miedo a las personas (Toscano G. , 2014).
REPRODUCCIÓN
Con respecto a la reproducción, son aves poliandríacas cooperativas; es decir,
las hembras se aparean normalmente con dos o tres machos (se han registrado
hasta ocho), ayudando todos los machos en el crecimiento de los polluelos
(Faaborg et al., 1995).
Durante el cortejo las parejas vuelan a gran altura, los machos actúan como si
fueran a cazar a la hembra y descienden en vuelos cruzados. Los apareamientos
se producen varias veces al día en ramas o en vuelo (ibidem).
Suelen poner dos huevos de color blanco verdoso. Es raro que pongan solo un
huevo. El periodo de incubación dura entre 37 y 38 días, y las crías abandonan
el nido a los 50-60 días.
Las zonas bajas de las islas están ocupadas por la población reproductivamente
activa de gavilanes; es decir, los adultos que pueden y tienen con quien copular.
Por supuesto, allí también habitan los recién nacidos, desde que rompen el
cascarón hasta que, al llegar a convertirse en gavilanes jóvenes, son expulsados.
La población que no cría y los jóvenes viven en zonas altas (Toscano, 2014).
Debido a que hay más machos que hembras, la competencia será muy dura para
los machos (en los adultos, el número de machos frente al de hembras es de
cinco a uno). Estudios, en conjunto entre John Faaborg (Universidad de Misuri-
Columbia), Jim Bednarz (Universidad de Arkansas), Patricia Parker (Universidad
de San Luis, Misuri) y la PUCE con sus estudiantes, han estado analizando la
biología reproductiva del gavilán de Galápagos durante algunas décadas. Se ha
concluido que para un macho es valioso formar parte de uno de esos grupos
reproductivos porque en unos diez años o más de participación en las cópulas
tiene la oportunidad de fecundar, de dejar sus genes en futuras generaciones.
Además, así, aunque tenga pocos descendientes directos, ayudará a que la
población quede estable en números óptimos.
Excepto por las poblaciones en las islas Fernandina e Isabela, que se encuentran
relativamente cerca una de la otra, cada isla tiene una propia población.
Aparentemente este gavilán no se traslada entre las islas y ya se notan
diferencias en la genética de las poblaciones entre sí, aunque aún no son lo
suficiente marcadas para ser consideradas subespecies (Mosquera Muñoz,
2012).
COMPORTAMIENTO
Son animales territoriales que cuando tienen crías, presentan una fuerte defensa
del territorio intentando echar a lo que perciban como amenaza para sus pollos
de su territorio (Toscano, 2014).
AMENAZAS
Otras especies introducidas como es el caso del gato callejero, compiten por el
mismo tipo de comida, de modo que también suponen una amenaza dichas
especies aunque no sean depredadores directos (Toscano G. , 2014).
Por la poca movilidad del gavilán entre islas, existe una alta endogamia,
registrándose una diversidad genética en Santa Fe de H= 0.04. Al tratarse de
una isla pequeña con densidad baja, la población del gavilán es altamente
susceptible a enfermedades, fijación de alelos deletéreos y eventos climáticos
extremos que podrían afectar la sobrevivencia (Toscano M. G., 2014).
GAVILANES Y CABRAS
Según (Toscano M. G., 2014) menciona que los resultados de su estudio no
muestran relación entre el tamaño poblacional y la presencia o ausencia de
cabras en la Isla Santa Fe. En la isla Santiago, Rivera et al., en 2013 sugieren
que la erradicación de cabras afectó negativamente la sobrevivencia de juveniles
y relacionan sus resultados a los cambios en la vegetación como consecuencia
de la erradicación de cabras. En Santa Fe no pudimos comparar la sobrevivencia
ya que no se tienen datos de captura-marca-recaptura para los años con
presencia de cabras, sin embargo el tamaño poblacional parece no estar
relacionado con la erradicación y los cambios en la vegetación no han sido tan
evidentes. Por el tipo y tamaño de isla, la vegetación de Santiago probablemente
ha tenido una recuperación más rápida, sobre todo en la parte baja desde 2005
ya que las cabras sobrevivieron solamente en la parte alta de la isla hasta ser
eliminadas por completo en 2006. En comparación con Santa Fe, una isla baja y
pequeña, donde después de 30 años de erradicación recién se empiezan a ver
cambios en la densidad de vegetación.
Bollmer, J.L., Whiteman, N.K., Cannon, M.C., Bednarz, J.C., de Vries, Tj.
y Parker, P.G. (2005) Population genetics of the Galápagos hawk (Buteo
galapagoensis): genetic monomorphism within isolated populations. The
Auk, 122(4), 1210-1224.
Bollmer, J.L., Kimball, R.T., Whiteman, N.K., Sarasola, J.H., y Parker, P.G.
(2006) Phylogeography of the Galápagos hawk (Buteo galapagoensis): A
recent arrival to the Galápagos Islands. Molecular Phylogenetics and
Evolution, 39(1), 237-247.
Faaborg, J., Parker, P.G., DeLay, L., de Vries, Tj., Bednarz, J.C., Maria
Paz, S., Naranjo, J., y Waite, T.A. (1995) Confirmation of cooperative
polyandry in the Galápagos hawk (Buteo galapagoensis). Behavioral
Ecology and Sociobiology, 36(2), 83-90.
Faaborg, J. (1984) Potential for restocking Galápagos hawks on islands
where they have been extirpated. Noticias de Galápagos, 39, 28-30.