Síntesis del Carismatismo 1

Por Joel Jiménez

Síntesis del Carismatismo

Adaptado del libro “Divergencias: del Pentecostalismo al Carismatismo” por Joel Jiménez

“Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina”: apóstol Pablo, año 66 A. D.

Este tiempo ha llegado, el carismatismo no es una denominación o institución determinada, tampoco es

una postura teológica debidamente estructurada, más bien es una corriente o tendencia en las iglesias
evangélica y católica que se inclina fuertemente por las emociones y experiencias místicas, mostrándose
en ocasiones como un pentecostalismo extremo o bien como una propuesta abierta de la nueva era.
Una gran cantidad de iglesias evangélicas han sido afectadas por esta moda en diferentes niveles de
proporción, muchas de ellas se iniciaron en forma sutil e imperceptible pero siempre con los mismos
resultados negativos en los que uno o varios principios bíblicos han sido alterados o terquiversados.

Aquí nos proponemos diferenciar los distintos grupos que integran el carismatismo, a la vez descubrir las
doctrinas y/o postulados de esta tendencia, haciendo las comparaciones respectivas con la enseñanza
bíblica.

Primero veamos los antecedentes históricos para determinar la génesis de este fenómeno carismático.

C. Contexto Histórico:

1. Movimiento Pietista.- Fue la reacción de la iglesia del siglo XVII ante la mundanalidad de la misma. El
nombre viene de “piedad” que su fundador Philip Jacobo Spener (1635-1705) hacia énfasis. El Pietismo
hizo hincapié en la experiencia, no en el conocimiento. Su aportación fue el dejar esa religiosidad fría y
sin sentido de muchos creyentes en Europa, para volverlos a Dios con ese fervor que hace a un lado la
carnalidad y mundanalidad. Lo negativo, como ocurre en todos los extremos, fue que llegó en ciertos
casos a un legalismo y puritanismo recalcitrantes.

2. Juan Wesley.- Es el antecedente ideológico, siendo el primer teólogo en la historia en proponer una
segunda obra de gracia posterior a la salvación, lo que él denominaba como “Entera Santificación” o
“Perfección Cristiana”. Juan Wesley no se refería a la experiencia de hablar en Lenguas, sino a la pureza
del corazón, sin embargo fue el que abrió la puerta, ya que él mismo fue afectado por el pietismo a
través de los moravos, por eso es considerado como el abuelo o tatarabuelo del pentecostalismo. Salvo
en raras excepciones el pentecostalismo sigue la tradición wesleyana y no la calvinista.

3. Movimiento de Santidad.- Fue un avivamiento espiritual dentro de las iglesias históricas de Estados
Unidos en el siglo XIX de donde surge el Pentecostalismo y la Iglesia del Nazareno. Se ha escrito
suficiente material sobre el tema.

D. Grupos que conforman el carismatismo.

1. Pentecostalismo Clásico – Histórico. Surgido en 1900 y conformado por creyentes de las iglesias
históricas que fueron impactados por el Movimiento de Santidad y que ya no pudieron permanecer en
sus iglesias originales. Las principales denominaciones fueron Las Asambleas de Dios, la Iglesia de Dios
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del Evangelio Completo y la Iglesia Cuadrangular. Se enfocaron a los pobres y marginados de la sociedad,
se hizo énfasis en la sanidad divina, en servicios motivacionales y gozosos. Introducen las primeras
variantes a la liturgia de la iglesia como el “palmear” y expresiones como “Amen”, “Aleluya”, “A su
nombre gloria”. Su principal bandera de identidad fueron las “Lenguas” como señal física inicial de ser
bautizado con el Espíritu Santo.

2. Neo-Pentecostalismo. Nuevos pentecostales surgidos en la década de los 50’s en Estados Unidos con
el propósito de reavivar a los pentecostales clásicos. Su origen es dentro de las iglesias evangélicas y su
enfoque fue a las clases altas de la sociedad. Introducen nuevos elementos a la liturgia del culto
cristiano, como la danza, el remolinear, los gritos de júbilo, los tumbados o caídos por el Espíritu,
liberaciones, vómito santo, parir almas en el altar, mapeo espiritual, maldiciones generacionales, etc.
etc. que se tradujo en la ausencia total de liturgia, en la pérdida total de la reverencia en la casa de Dios
y en la proliferación de profetas y neo-apóstoles.

3.- Carismáticos. Es exactamente lo mismo que el neo-pentecostalismo, lo único que lo diferencia es su

origen, el movimiento carismático proviene de la Iglesia Católica Romana. Igualmente surge en la misma
década de los años 50’s en Estados Unidos. Combinan la adoración a María con las “Lenguas” y siguen
identificados con el Papa, en todo lo demás son muy similares a los evangélicos.

4. Movimiento de Fe. Principales líderes carismáticos hacen un nuevo énfasis en la fe, “fe en la fe”, por
lo que se identifican mayormente con el “evangelio de la prosperidad” en la década de los 70’s. Ponen
de moda las “mega iglesias” y una nueva concepción de la “sanidad divina”. Destacan los tele-
evangelistas sanadores de Estados Unidos, tales como Benny Hinn, Oral Roberts, Morris Cerullo, Paul
Yonggi Cho en Korea, etc. Han sido noticia en los medios de comunicación por casos de corrupción e
inmoralidad.

5. 3ª. Ola del Espíritu Santo. Es el carismatismo más extremo, surge en los 90’s. Incorporan en la liturgia
la “risa santa”, la “borrachera espiritual” y el “fenómeno de regresión”. Aquí la “unción” no se traduce
en ”lenguas” ni en danzas, sino en un ataque de risa, luego quedan borrachos como si hubieran tomado
alcohol, para posteriormente imitar sonidos de animales, así que rugen, aúllan, ladran, cacaraquean,
rebuznan, etc. dependiendo del animal que asuman, todo supuestamente por el Espíritu Santo. “Airport
Christian Fellowship” en Toronto, Canadá, es la iglesia que la catapultó a todo el mundo, por lo que se le
conoce como “La Bendición de Toronto”. Rodney Howard, autonombrado “Cantinero del Espíritu
Santo”, fue el evangelista africano que trajo a Estados Unidos estas propuestas insólitas.

E. Ideólogo y Propagador del Carismatismo.

Es de entenderse y suponer que las intenciones de esos hombres de Dios que iniciaron el
pentecostalismo fueron buenas y sinceras, que desde luego no fue suficiente para mantenerse dentro
de los parámetros bíblicos y correctos, ya que desde su génesis manifestaron algunas posturas e
inclinaciones heterodoxas al estar ávidos de experiencias místicas, esotéricas, profundas y de todo
aquello que les diera según ellos una mayor dosis de espiritualidad.
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Esta situación provocó y preparó el escenario para que el pentecostalismo fuera tomado por asalto
primero por S. W Kenyon, quien es el ideólogo, el inventor, el creador de este conjunto de ideas
extrañas que hoy por hoy son la esencia de lo que se creé en el Carismatismo, y posteriormente por
Keneth Hagin, el que realmente propagó estas “doctrinas”.

1.- Essek Willian Kenyon, el ideólogo. Nació el 24 de Abril de 1867, originalmente fue ministro
metodista, luego fue predicador pentecostés, para finalmente incursionar en el ámbito ocultista,
metafísico y esotérico, llegando incluso a predicar en estado de trance y levitación. Kenyon hizo un
sincretismo con todo lo que había experimentado, desde las religiones orientales, espiritistas, hasta las
cristianas, para hacer una enseñanza con terminología bíblica. Murió sin pena ni gloria, sin saber que
hoy sus “doctrinas” son un éxito, ya que en el momento que las expuso no fue el apropiado, la década
de los 30’s, en plena recesión económica de los Estados Unidos, pues a pesar de que esos creyentes
repetían “soy rico”, “soy rico”, no lograron serlo.

2.- Keneth Hagin, el propagador. Hagin plagió los escritos de Kenyon afirmando que esas “doctrinas”
Jesús mismo en persona se las había revelado. Nació el 20 de Agosto de 1917. Fue expulsado de la
Convención Bautista del Sur, luego fue pastor pentecostal de Asambleas de Dios, y cuando iniciaba el
neo-pentecostalismo tuvo la mesa puesta para propagar sus ideas. Prácticamente no existe una
comunidad carismática, o algún predicador de la Prosperidad que no haya sido influenciado por Hagin,
él ha sido quien ha ordenado al “ministerio” a hombres como Charles Capps y Benny Hinn. Hagin se
convirtió en el mayor promotor del carismatismo. En Tulsa Oklahoma fundó su Escuela Bíblica “Rhema”
de donde ha enviado al mundo más de 16,000 misioneros con este “nuevo evangelio”.

F. Principales doctrinas del Carismatismo.

Determinar cuáles son las creencias del carismatismo es una tarea muy complicada porque no existe un
credo o dogma de sus doctrinas. Α esto hay que agregarle algunas circunstancias muy suigéneris, por
ejemplo, generalmente se guían por Rhemas, y no por la Palabra de Dios, siendo frecuente que se
contradigan entre ellos mismos o que una misma persona se desdiga o retracte de lo que
supuestamente Dios le había dicho con anterioridad.

1. Confesión Positiva. Es la creencia que con solo pronunciar las cosas con nuestra boca se hacen
realidad, por lo tanto la persona no debe decir cosas negativas sino solo positivas, de ahí el nombre de
Confesión Positiva. Este “principio” no es válido solo para los cristianos, cualquier persona, sin importar
su creencia o religión, puede controlar el universo y a Dios mismo, solo con sus palabras. En el
hinduismo se le conoce como “mantras”, en la metafísica como “decretaciones”, y es la “doctrina”
fundante del carismatismo.

2. Rhema. Según ellos es lo opuesto a “Logos”. Cuando el creyente recibe una “revelación” por medio
del estudio de la Biblia es “Logos”, pero cuando recibe una “revelación” no por el estudio de la Biblia
sino en forma sobrenatural, entonces es “Rhema”, así que la definición más exacta de Rhema seria
“palabra revelada en forma sobrenatural”. Con esta postura en juego ha servido para justificar las ideas
más disparatadas y extravagantes, y en algunos casos heréticas y blasfemas, como aquella de que “no
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existe una Trinidad, sino tres Trinidades con un total de nueve dioses” expuesto por Benny Hinn. Sin
embargo, como Dios se los ha “revelado” se espera que todos los demás lo creamos.

3. Deidad del Hombre. El hombre es Dios, o como dijera Cash Luna, “el creyente en Cristo es un Jehová
Jr.” siguiendo la insinuación satánica del Edén, “seréis como Dios”. Esta doctrina es necesaria para poder
crear las cosas a través de la palabra hablada, si el hombre es Dios entonces todo lo que diga se hace
realidad. La tentación de ser dioses siempre ha estado en el inconsciente de la humanidad y
actualmente es fuertemente predicado en la Nueva Era, y bueno, también en la iglesia cristiana.

4. Muerte espiritual de Cristo. Es la “doctrina” más aberrante del carismatismo, enseña que cuando
Jesús murió en la cruz tomó la naturaleza satánica, y al ir al infierno fue amancillado por el diablo, y
después de tres días de ser torturado, para la sorpresa del mismo diablo, Jesús tuvo un “nuevo
nacimiento” escapándosele de sus manos. Literalmente Jesús le pagó al diablo nuestra salvación. Para
que no parezca tan chocante y repulsiva, Kenyon y Hagen la llama la “doctrina de la identificación”.

5. Guerra Espiritual. Todo lo que nos pasa es en o por el ámbito espiritual, aun lo bueno, que en este
caso serían los ángeles que no han pecado, así por ejemplo, si en una iglesia no hay conversiones de
almas nuevas hay que “soltar el espíritu de salvación”. Por el lado del mal, los demonios son los
culpables y causantes de todas nuestras desgracias, habiendo un demonio para cada caso en particular,
demonio de la tristeza, demonio del cigarro, demonio del adulterio, etc. en los años 70’s tenían
clasificados unos 300 tipos de demonios, actualmente la lista llega a unos 3,000. ¿Solución? liberar o
exorcizar a los creyentes de sus demonios, pues según esto, todos los creyentes en Cristo tienen
demonios. Cada servicio es una buena oportunidad para hacer liberaciones pero ex profesamente se
usan los famosos “encuentros” con “la visión de la cruz”, las “maldiciones generacionales”, el “mapeo
espiritual”, etc. etc. El creyente queda dependiente de por vida de esa práctica de liberaciones, siendo
una de las tantas formas de chantajearlo o manipularlo. Debido a que todo el tiempo hay que estar
echando fuera demonios se hacen uso de varias estrategias, como las “panderistas”, el “vomito santo”,
el “ungimiento de objetos”, etc. Esto es el equivalente a las “limpias” en el Espiritismo.

6. Sanidad Divina. Es cierto que la Biblia enseña que Dios sana a los enfermos, pero la postura
carismática es que los creyentes en Cristo no deben enfermarse y si se enferman es que están en
pecado. Entonces para no enfermarse se les induce a que declaren y/o a que repitan constantemente
"estoy sano”, “estoy sano”, o “yo declaro que soy sano”. Muchos han muerto declarando que eran sanos
cuando evidentemente no lo estaban. En las investigaciones que se han hecho por periodistas y que
están debidamente documentadas, se ha demostrado que más del 90 % de los enfermos en las
campañas de estos tele evangelistas, no sanan, y que de esos poquitos que supuestamente sanan
tampoco se pueden demostrar clínicamente.

7. Prosperidad y Dominio. El asunto de la 2ª. Venida de Cristo entra aquí en juego. El carismatismo
niega el Rapto o Arrebatamiento, así como la Gran Tribulación; ellos esperan ser los que gobiernen el
mundo en el Milenio. Cuando hablan del “Reino” significa que esperan dominar el mundo, algo parecido
a los Testigos de Jehová, pero un poco más sofisticados, pues le han añadido la “Teología de la
Prosperidad”, o como también se le conoce, “el evangelio de la avaricia”. Se supone que todos los
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cristianos deben ser ricos y que la riqueza es símbolo o señal de bendición de Dios, quien no la tiene es
porque está en pecado y los que sí se han enriquecido son muchos de estos neo apóstoles e iluminados
que sacan dinero a los fieles con métodos no muy éticos que digamos. Se lucra con la fe y el dolor de los
creyentes, prometiéndoles que si “pactan” o “siembran” Dios los va a sanar, a dar más dinero, o que van
a obtener aquellas cosas que siempre han deseado. Todo esto es muy triste y vergonzoso.

8. Alabanza y Adoración. Aquí no es la adoración bíblica, sino la reducción de la adoración a la música, y

se emplea como la fórmula mágica de experimentar a Dios; se repiten los coros hasta el cansancio,
esperando que “descienda” el Espíritu Santo, y no solo se usa para adorar a Dios sino también para
hacer “guerra espiritual”. Los que dirigen la “alabanza” realmente no dirigen, son más bien animadores
al estilo de los shows de televisión, tratando de llevar a la gente al delirio, arrobamiento, misticismo y
paroxismo, que de lograrlo se dice que tienen “unción”. Se hace necesaria una música rítmica y bailable,
lo que se deduce que es “alabanza”, y pueden invertir hasta un 90 % del culto en brincar, danzar,
remolinear, despabilarse, produciendo una catarsis indescriptible. Si la música es lenta se cree que es
“adoración”, de esta manera el ritmo determina si es alabanza o es adoración. Los himnos son
considerados anacrónicos. Bajo esta perspectiva la “alabanza y adoración” carismática es un paganismo
flagrante del que Dios quiso librar a su pueblo en el libro de Levíticos. Tristemente el culto cristiano ha
perdido su razón de ser.

Conclusiones:

a). La mayoría de iglesias cristianas se han infectado por el virus del carismatismo, no todas en los
mismos niveles de proporción, algunas congregaciones no tumban gentes ni se vomitan, solo declaran;
otras solo danzan y desde luego las hay que le entran a todo, desde los gritos de júbilo hasta ladrar y
rebuznar.

b). Así como el hombre puede pecar sin ayuda de nadie, cualquier congregación que acepte las lenguas,
los dones del Espíritu, el mover del Espíritu, etc. como su principal caracterización doctrinal o
ideológica, aún sin conocer las diferentes vertientes del carismatismo, puede llegar a cometer los
mismos errores, ya sea por omisión o por intención. En la praxis de los dones del Espíritu, toda iglesia
de cohorte pentecostal tiene su tendón de Aquiles.

c). Muchos creyentes de estos nuevos movimientos religiosos no están conscientes de su lamentable
realidad, llegando a creer que ese es el verdadero evangelio, porque eso es lo que les han enseñado sus
líderes espirituales, a declarar, a romper maldiciones, a reclamar prosperidad, a danzar, etc. etc.

d). Por otro lado hay pastores que no se atreven a tocar estos temas porque temen blasfemar u
oponerse al Espíritu Santo; otros porque simpatizan con estas modas; otros porque no tienen criterio o
formación teológica; otros porque se consideran de mente abierta y les atrae todo lo novedoso; otros
porque no les interesa la sana doctrina sino ser famosos y tener una mega iglesia, y desde luego mucho
dinero; otros porque están confundidos y no saben qué creer; otros porque simplemente quieren estar
a la moda y no ser considerados retrógrados; otros porque son emisarios de satanás para destruir la
iglesia, 2ª. Cor. 11:13-15.
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e). Nuestras librerías cristianas están saturadas de autores como Benny Hinn, Norman Vicent Peale,
Robert Schuller, Robert Tilton, Charles Capps, Kenneth Copeland, Oral Roberts, Joel Osteen, Guillermo
Maldonado, Cash Luna, etc. Se calcula que el 70 % del material de nuestra literatura cristiana es de
corte carismático. Es interesante notar que editoriales respetables como UNILIT, al mismo tiempo que
publican “Buenos Días Espíritu Santo” de Benny Hinnn también publiquen “Cristianismo en Crisis” de
Hank Hanegraaff. ¿Será esta una nueva ética cristiana? O es que ¿no importa lo que se venda con tal de
que se venda? El peligro está en que muchos creyentes, por falta de madurez, creen todo lo que leen,
pues ellos suponen que si es un libro cristiano debe ser bueno.

f). Las “doctrinas” carismáticas parecen bíblicas pero no lo son, no logran satisfacer todas las demandas
de la hermenéutica y la exégesis, de la Teología y la Revelación. Más bien son identificables con el “otro
evangelio diferente” que Pablo alude en Gálatas 1:6-9.

g). El carismatismo no es un avivamiento espiritual aunque trate de justificarse como la “lluvia tardía”,
por el contrario representa la apostasía que vendría en los últimos tiempos. 2ª. Tes. 2:1-12.

h). El carismatismo representa una profunda dosis de herejía en cada una de sus “doctrinas”, por lo que
suele ser peligroso, ambivalente y confuso, por un lado parece ser correcto y bíblico, pero por el otro ha
llevado a muchos al desencanto y a la misma muerte; a veces se presenta como atractivo y prometedor,
pero por el otro ha llevado a muchas iglesias y congregaciones a la extinción, como las que han entrado
al G!2 y sus derivados. En diversas ocasiones ha dado por resultado división, confusión, inestabilidad,
deserción de miembros e incluso apostasía de creyentes, como dice en 2ª. Ped. 2.

i). El carismatismo se adapta perfectamente a esta época de posmodernidad, representando así a la

“Nueva Era” dentro de la iglesia. Al ser quitado el freno de la razón que nos daba la modernidad, y que
inevitablemente causó sus propios estragos, ahora todo es posible, todo se vale, todo se cree. Entre más
hedonista sea la propuesta mayor aceptación tendrá. 2ª. Tim. 4:1-4.

j). El carismatismo ha triunfado porque la iglesia ha fallado en su cometido, ¿en qué ha fallado la
iglesia? John McArthur lo describe así: “La fría ortodoxia nunca podrá reemplazar una relación cálida y
vital con Dios. El líder no puede olvidarse de guiar; El conocimiento no puede reemplazar el amor
fraternal. Las emociones deben ser guiadas por la verdad. El esfuerzo humano jamás reemplazará la
Obra del Espíritu Santo. Todos los cristianos necesitan ser agresivos en el ministerio kerigmático; La
gente necesita participar en la adoración y los cristianos necesitan exigirse más a sí mismos con
respecto a sus compromisos.” (John McArthur en “Los Carismáticos” CBP.)

Joel Jiménez es mexicano, egresado de varios seminarios y universidades cristianas donde ha hecho estudios de
Teología, Psicología y Música, su enfoque ministerial es la docencia, la consejería, la pastoral y la música. Ha
fundado varias iglesias en su país natal y en este momento está fundado su segunda iglesia en Estados Unidos. Para
invitaciones y comentarios por favor escriba a: reflexiones@joeljimenez.org Tel. 513 – 255 – 8502 Cell.