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LECCIÓN DE RECONOCIMIENTO UNIDAD 2

MECANISMOS DE TRANSFERENCIA DE CALOR

CALOR Y TEMPERATURA

La temperatura es una magnitud física que se refiere a la sensación de frío o caliente al


tocar alguna sustancia. En cambio el calor es una transferencia de energía de una parte
a otra de un cuerpo, o entre diferentes cuerpos, producida por una diferencia de
temperatura. El calor es energía en tránsito; siempre fluye de una zona de mayor
temperatura a otra de menor temperatura, con lo que eleva la temperatura de la zona
más fría y reduce la de la zona más cálida, siempre que el volumen de los cuerpos se
mantenga constante.

Calor

El calor se define como la energía cinética total de todos los átomos o moléculas de
una sustancia.

Temperatura

La temperatura es una medida de la energía cinética promedio de los átomos y


moléculas individuales de una sustancia. Cuando dos cuerpos que tienen distintas
temperaturas se ponen en contacto entre sí, se produce una transferencia de calor
desde el cuerpo de mayor temperatura al de menor temperatura. La transferencia de
calor se puede realizar por tres mecanismos físicos: conducción, convección y
radiación, como se ve en la figura 1.

Figura 1. Esquema de los mecanismos de transferencia de calor

Fuente: (Anónimo)
CONDUCCIÓN DE CALOR

La conducción es el mecanismo de transferencia de calor en escala atómica a través de


la materia por actividad molecular, por el choque de unas moléculas con otras, donde
las partículas más energéticas le entregan energía a las menos energéticas,
produciéndose un flujo de calor desde las temperaturas más altas a las más bajas. Los
mejores conductores de calor son los metales. El aire es un mal conductor del calor. Los
objetos malos conductores como el aire o plásticos se llaman aislantes.

La conducción de calor sólo ocurre si hay diferencias de temperatura entre dos partes
del medio conductor y está dada por la ley de la conducción de calor de Fourier
(Ecuación 1).

𝑑𝑄 𝑑𝑇
𝐻= = −𝑘𝐴 𝑑𝑥 Ec. (1)
𝑑𝑡

Donde k en (W/mK) se llamada conductividad térmica del material, magnitud que


representa la capacidad con la cual la sustancia conduce calor y produce la consiguiente
variación de temperatura; y dT/dx es el gradiente de temperatura. El signo menos
indica que la conducción de calor es en la dirección decreciente de la temperatura. En
la tabla 1 se muestran los valores de conductividades térmicas para algunos materiales,
los altos valores de conductividad de los metales indican que son los mejores
conductores del calor.

Tabla 1. Algunos valores de conductividades térmicas


Metales, a 25°C Gases, a 20°C Otros materiales
Sustancia k(W/mK) Sustancia k(W/mK) Sustancia k(W/mK)
Aluminio 238 Aire 0.0234 Asbesto 0.08
Cobre 397 Helio 0.138 Concreto 0.8
Oro 314 Hidrógeno 0.172 Diamante 2300
Hierro 79.5 Nitrógeno 0.0234 Vidrio 0.84
Plomo 34.7 Oxígeno 0.0238 Hule 0.2
Plata 427 Madera 0.08 a 0.16
Latón 110 Corcho 0.42
Tejido
0.2
humano
Agua 0.56
Helio 2
Fuente: (Anónimo)

CONVECCIÓN

La convección es el mecanismo de transferencia de calor por movimiento de masa o


circulación dentro de la sustancia. Puede ser natural producida solo por las diferencias
de densidades de la materia; o forzada, cuando la materia es obligada a moverse de un
lugar a otro, por ejemplo el aire con un ventilador o el agua con una bomba. Sólo se
produce en líquidos y gases donde los átomos y moléculas son libres de moverse en el
medio.

Un modelo de transferencia de calor H por convección, es la ley de enfriamiento de


Newton:

𝐻 = ℎ𝐴(𝑇𝐴 − 𝑇) Ec.(2)

Donde h se llama coeficiente de convección, en W/(m2K), A es la superficie que entrega


calor con una temperatura TA al fluido adyacente, que se encuentra a una temperatura
T, como se puede observar en la figura 2. La tabla 2 lista algunos valores aproximados
de coeficiente de convección h. (Anónimo)

Figura 2. Proceso de convección

Fuente: (Anónimo)

Tabla 2. Valores típicos de coeficiente de convección


Proceso h (W/m2K)
Convección libre
Gases 2 - 25
Líquidos 50 - 1000
Convección forzada
Gases 25 – 250
Líquidos 50 - 20000
Fuente: (Anónimo)

En algunos casos donde no se conoce el valor del coeficiente convectivo h, se puede


definir por medio del número de Nusselt, definido así:
̅𝐿

𝑁𝑢 = Ec.(3)
𝜆

λ en función de la conductividad térmica del material, ℎ̅ el coeficiente de convección


promedio en la superficie y L una longitud característica del modelo (por ejemplo el
diámetro de un cilindro o el lado de una placa). El número de Nusselt es una medida de
la relación entre las tasas de transferencia de calor por convección y por conducción en
un fluido. La radiación térmica es energía emitida por la materia que se encuentra a
una temperatura dada, se produce directamente desde la fuente hacia afuera en todas
las direcciones.
Sin embargo, la velocidad, intensidad y dirección de su flujo de energía se ven influidos
por la presencia de materia. En la misma superficie se satisface la denominada
condición de no deslizamiento en la que el fluido está en reposo respecto a la superficie
como consecuencia del predominio absoluto de las fuerzas viscosas sobre las de inercia.
Según nos separamos de la superficie, la influencia de las fuerzas de inercia va
aumentando, aunque en primera zona, denominada capa límite siguen predominando
las fuerzas viscosas y se dice que el flujo es laminar, ordenado en capas.

Más lejos de la superficie el flujo se hace desordenado o turbulento. El paso de régimen


laminar a turbulento se caracteriza mediante una magnitud adimensional denominada
número de Reynolds Re dado por:
𝜌𝜐𝐿 𝜐𝐿
𝑅𝑒 = = Ec.(4)
𝜇 𝜈

La densidad ρ, la longitud de la placa L, la viscosidad dinámica μ y la viscosidad


cinemática 𝜈 = 𝜇 ⁄𝜌. El número de Reynolds representa una cierta relación entre las
fuerzas de inercia y las fuerzas viscosas en el flujo. En la mayoría de los cálculos
analíticos el número de Reynolds crítico para la transición entre flujo laminar y
turbulento en una placa plana se toma como 5 × 105 , pero en realidad depende
fuertemente de la rugosidad de la superficie y de la intensidad de la turbulencia de la
corriente libre.

La convección puede ser natural o forzada. Se dice que la convección es natural cuando
las paredes en contacto con el sistema están en reposo el fluido se mueve
espontáneamente en el campo de fuerza gravitatorio como consecuencia de la
diferencia de densidades entre zonas calientes y frías, mientras que se dice que la
convección es forzada cuando algunas de las paredes en contacto con el fluido se
mueven favoreciendo la circulación de éste.

Convección forzada

En buena parte de los casos el número de Nusselt para la convección forzada puede
ajustarse por una expresión de la forma:

𝑁𝑢 = 𝑐𝑡𝑒𝑅𝑒 𝑚 𝑃𝑟 𝑛 Ec.(5)

Donde Re es el número de Reynolds y Pr es el número de Prandtl, dado por:


𝜈 𝐶𝑝𝜇
Pr = = Ec.(6)
𝛼 𝜆

Siendo 𝛼 la difusividad térmica del fluido, L la dimensión característica del sistema y


cte, n y m son parámetros función de la geometría y del rango de números de Reynolds.
Para los gases el número de Prandtl Pr apenas depende de la temperatura y en el caso
concreto del aire puede tomarse Pr =0,7. Dependiendo del tipo de flujo (laminar o
turbulento) y de la geometría de las superficies se utilizan distintas expresiones para el
número de Nusselt.

Así, para superficies planas en régimen laminar se utiliza una expresión de la forma:

𝑁𝑢 = 0,0664 𝑅𝑒 1⁄2 𝑃𝑟 1⁄3 Ec.(7)

Válida en el rango Pr<0,6 y Re<5 × 105 . Para una superficie plana en régimen
turbulento se utiliza la expresión:

𝑁𝑢 = 0,037𝑅𝑒 4⁄5 𝑃𝑟 1⁄3 Ec.(8)

Válida en el rango 0,6<Pr<60 y 5 × 105 <Re<107. A menudo la lámina es lo


suficientemente grande para que se tenga una combinación de flujo laminar y
turbulento. En este caso:

𝑁𝑢 = (0,037𝑅𝑒 4⁄5 − 871)𝑃𝑟 1⁄3 Ec.(9)

Válida en el rango 0,6<Pr<60 y 5 × 105 <Re<107. Una expresión utiliza para convección
forzada en el interior de una tubería cilíndrica es la siguiente:

𝑁𝑢 = 0,02𝑅𝑒 8,8 Ec.(10)

Convección libre o natural

En convección libre se observa experimentalmente que puede ajustarse el valor del


número de Nusselt mediante una expresión de la forma:

𝑁𝑢 = 𝑐𝑡𝑒(𝐺𝑟𝑃𝑟)𝑛 Ec.(11)

Donde cte y n se ajustarán experimentalmente y Gr es el número de Grashoff que se


define como:

𝑔𝛼𝜈 (𝑇𝑠−𝑇𝑓)𝐿3
𝐺𝑟 = Ec.(12)
𝜈2

Donde 𝛼𝜈 es el coeficiente de dilatación de volumen. El número de Grashoff desempeña


en convección libre un papel similar al que realiza en convección forzada el número de
Reynolds. En concreto, representa la relación entre las fuerzas de flotabilidad y las
fuerzas viscosas en la corriente natural y es la variable principal utilizada como criterio
de la transición de capa límite laminar turbulenta. Se denomina al producto de los
números de Gr y Pr que aparece en la ecuación 11, número de Rayleigh, definido en la
forma:

Ra = Gr Pr Ec.(13)
En un modelo más elaborado la intensidad de la transmisión de calor por convección
tiene una forma más compleja. Así, para régimen laminar en una superficie plana
vertical el número de Nusselt tiene la forma:

0,387𝑅𝑎1⁄4
𝑁𝑢 = 0,68 + 4⁄9 Ec.(14)
[1+(0,492⁄𝑃𝑟 )9⁄16 ]

Expresión válida para 0<Ra<109, mientras que cuando se tiene una combinación de
regímenes laminar y turbulento en la misma superficie plana vertical, se utiliza para el
número de Nusselt la expresión:

0,387𝑅𝑎1⁄6
𝑁𝑢 = 0,825 + 8⁄27 Ec.(15)
[1+(0,492⁄𝑃𝑟 )9⁄16 ]

Válida para 10-1<Ra<102. También se obtienen expresiones para el número de Nusselt


en convección libre en cilindros largos,
2
0,387𝑅𝑎1⁄6
𝑁𝑢 = {0,60 + 8⁄27 } Ec.(16)
[1+(0,559⁄𝑃𝑟 )9⁄16 ]

Expresión válida para 10-5<Ra<102, en la que ahora la longitud característica es el


diámetro del cilindro. Para una superficie esférica en función de la esfera, queda;

0,589𝑅𝑎1⁄4
𝑁𝑢 = 2 + 4⁄19 Ec.(17)
[1+(0,469⁄𝑃𝑟 )9⁄16 ]

Para el rango Ra<104 y Pr<0,5. (Martín Domingo, 2011)

RADIACIÓN

Esta energía es producida por los cambios en las configuraciones electrónicas de los
átomos o moléculas constitutivas y transportadas por ondas electromagnéticas o
fotones, por lo que recibe el nombre de radiación electromagnética. A diferencia de la
conducción y la convección, o de otros tipos de onda, como el sonido, que necesitan un
medio material para propagarse, la radiación electromagnética es independiente de la
materia para su propagación, de hecho, la transferencia de energía por radiación es más
efectiva en el vacío.
Leyes de radiación

Ley de Stefan: Todos los objetos emiten energía radiante, cualquiera sea su temperatura,
por ejemplo el Sol, la Tierra, la atmósfera, los Polos, las personas, etc. La energía radiada
por el Sol a diario afecta nuestra existencia en diferentes formas. Esta influye en la
temperatura promedio de la tierra, las corrientes oceánicas, la agricultura, el
comportamiento de la lluvia, etc. La radiación que emite la superficie, se produce a partir
de la energía térmica de la materia limitada por la superficie.

La rapidez a la cual se libera energía se llama potencia de radiación H, su valor es


proporcional a la cuarta potencia de la temperatura absoluta. Esto se conoce como la
ley de Stefan, que se escribe como se ve en la ecuación 18.

𝐻 = 𝜀𝜎𝐴𝑇 4 Ec.(18)

Donde 𝜎 = 5.67 × 10−8 𝑊 ⁄𝑚2 𝐾 4 es la constante de Stefan-Boltzmann y 𝜀 es una


propiedad radiativa de la superficie llamada emisividad, sus valores varían en el rango
0 < 𝜀 < 1, es una medida de la eficiencia con que la superficie emite energía radiante,
depende del material. Un cuerpo emite energía radiante con una rapidez, pero al mismo
tiempo absorbe radiación; si esto no ocurriera, el cuerpo en algún momento irradiaría
toda su energía y su temperatura llegaría al cero absoluto.

La energía que un cuerpo absorbe proviene de sus alrededores, los cuales también
emiten energía radiante. Si un cuerpo se encuentra a temperatura T y el ambiente a una
temperatura T0, la energía neta ganada o perdida por segundo como resultado de la
radiación se puede expresar como se expresa en la ecuación 19.

𝐻𝑛𝑒𝑡𝑎 = 𝜀𝜎𝐴(𝑇 4 − 𝑇04 ) Ec.(19)

Cuando el cuerpo está en equilibrio con los alrededores, irradia y absorbe la misma
cantidad de energía, por lo tanto su temperatura permanece constante. Cuando el
cuerpo está más caliente que el ambiente, irradia más energía de la que absorbe, y por
lo tanto se enfría. Un absorbedor perfecto se llama cuerpo negro (no significa que sea
de color negro), que se define como un objeto ideal que absorbe toda la radiación que
llega a su superficie y su emisividad es igual a uno.

No se conoce ningún objeto así, aunque una superficie de negro de carbono puede llegar
a absorber aproximadamente un 97% de la radiación incidente, en teoría, un cuerpo
negro sería también un emisor perfecto de radiación, y emitiría a cualquier temperatura
la máxima cantidad de energía disponible. A una temperatura dada, emitiría una
cantidad definida de energía en cada longitud de onda. En contraste, un cuerpo cuya
emisividad sea igual a cero, no absorbe la energía incidente sobre él, sino que la refleja
toda, es un reflector perfecto.
Los cuerpos con emisividades entre 0 y 1 se llaman cuerpos grises, son los objetos
reales.

BIBLIOGRAFÍA

Anónimo. (s.f.). Capítulo 14. Obtenido de Mecanismos de transferencia de calor:


http://old.dgeo.udec.cl/~juaninzunza/docencia/fisica/cap14.pdf
Martín Domingo, A. (1 de Mayo de 2011). Apuntes de Transmisión del calor. Obtenido
de http://oa.upm.es/6935/1/amd-apuntes-transmision-calor.pdf

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