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Encuentro Internacional Minga para la Paz, el Buen Vivir y la Noviolencia

Minga de pensamiento: Mujeres, diversidad y mundos posibles


Mesa temática 6: Pedagogías para la paz, Buen Vivir y sustentabilidad
Ponencia: Cátedra Libre de la Interculturalidad en Territorios de Paz

Por: Luis Miguel Gallo Díaz1

Resumen

En Colombia se han reconocido constitucionalmente los grupos étnicos y sus


derechos ciudadanos, pero se carece de pedagogías que posibiliten el respeto,
intercambio y valoración cultural ante el proceso de postacuerdo. La Cátedra Libre de la
Interculturalidad en Territorios de Paz nace en el Departamento de Risaralda, con el
objetivo de generar una alternativa epistemológica y pedagógica para la construcción
de una nueva cultura orientada por el diálogo de saberes, para forjar identidad local,
regional y nacional.

La interculturalidad se concibe como un proceso de múltiples encuentros críticos,


constructivos y creativos de las distintas culturas a la luz de sus pluri – cosmovisiones
en los territorios, mediante acciones investigativas, educativas y de organización social
con participación activa de nativos, afro, rom y mestizos en lo urbano y lo rural, para la
resignificación y reconfiguración de las dimensiones de la vida sociocultural, política,
ambiental y económica en escenarios concretos de relacionamiento, tales como:
familia, estudio (formal y no formal), trabajo, vecindario y diversos contextos de la vida
pública.

Los territorios de paz son una gran variedad de flores que comparten la armonía
de sus colores y el cuidado cooperativo de su Buen Vivir, en donde aprender del otro en

1Trabajador Social, Monitor de Investigación del Centro de Investigaciones Socio Jurídicas, CISJ,
Facultad de Derecho, Universidad Libre Seccional Pereira. Contacto de Whatsapp: (57) 3017232270,
Dirección electrónica: lmgallo.trabajosocial@unilibrepereira.edu.co
términos de su propia cultura genera conciencia colectiva en términos étnicos y de
clases sociales, sin perder identidad y encontrando en la diversidad la potente
comunicación dialógica.

Se plantea la valoración profunda del otro y de la Pachamama en una nueva


relación de sentido orientada por caminos de trascendencia espiritual donde la vida
material e inmaterial se comprende desde una mirada integradora. Un proceso
incluyente para dar un giro en la mirada y volver a nuestras raíces: la interculturalidad
permite ampliar el conocimiento y tejer territorios de paz para la transformación de la
vida, adquiriendo una nueva identidad nacional.

Palabras claves: interculturalidad, territorios, vida social, pedagogías y paz.

Argumentación

Existe un gran temor originado por el maltrato y la violencia histórica que hemos
vivido por parte de imperios y potencias, esto limita la construcción de identidad
regional y nacional, lo cual nos debilita para una justa y sana interrelación. El temor
existente proviene de la invasión y la guerra de conquista, posteriormente se consolida
la hegemonía europea con la Colonia; luego la guerra de separación o “independencia”
tan solo dio cabida al liderazgo criollo de origen mestizo, la participación de los nativos
y de la población afro fue escasa, casi desapercibida; la Republica fue obra de los
criollos mestizos y europeos nacidos en América, la desconfianza se ha encarnado,
creando su espacio como un patrón de comportamiento en nuestras etnias, ciudadanía
y campesinado.

La constitución de 1991 caracteriza la sociedad colombiana como pluriétnica y


multicultural, lo cual estructuró los derechos culturales, dando un giro radical con
respecto a la carta de 1886, en la relación del Estado con la cultura, pues no solo la
reconoció como derecho humano, siguiendo la corriente internacional, sino que además
la declaró como fundamento de la nacionalidad “en sus diversas manifestaciones”,
acogió sus principios y luego los desarrolló a lo largo de todos sus articulados, a tal
punto que podríamos calificarla como una constitución explícitamente cultural.

Sin embargo, no se ha dado el paso definitivo para forjar una identidad nacional,
que sería el camino para la construcción social de la paz y enfrentar los fenómenos
globales sin perder el verdadero significado de existencia y de vida de cada ciudadano
y campesino; la ausencia de reconocimiento de esta interacción hace más vulnerable
nuestra sociedad en el horizonte del postacuerdo, comprendiendo que el conflicto
armado y la guerra han acentuado los procesos de exclusión y las distintas formas de
desplazamiento de los grupos étnicos y los mestizos. En tal sentido Vasco (2000)
menciona:

La interculturalidad vendría a ser algo distinto a la multiculturalidad, pues ésta


solamente describe las peculiaridades de cada cultura y corresponde a una simple
coexistencia entre ellas, pero sin que se plantee su relación en forma dinámica y
positiva. Si se acepta este sentido, la interculturalidad diferiría del criterio que se
adoptó en la Constitución colombiana de 1991, que sólo reconoce a Colombia como
una nación con diversidad étnica y cultural, pero que no plantea la interrelación activa
entre estos grupos étnicos y culturas.

Planteamiento del tema

La interculturalidad es un paso, una transición a la transculturalidad; la


interculturalidad es un encuentro de saberes, es un proceso de valoración y
reconocimiento de etnias, de comunidades nativas, afro, rom y mestizas, dispuestas a
intercambiar información de sus planes de vida, de su historia, para diseñar la nueva
vida, los territorios de paz. Los pre-textos de estos encuentros están en la vida misma
común a todos y a todo en el país que nos pertenece: la interculturalidad nos permite
ampliar el conocimiento y la transculturalidad genera la transformación de nuestra vida
y la adquisición de una nueva identidad en los territorios. En concordancia, Vasco
(2000) señaló que “la interculturalidad aparece como el camino que ha de conducir a la
tolerancia y ésta a la solución pacífica y concertada de los conflictos” (p. 2).
Por todo lo anterior, es necesario elevar la mirada del plano de lo axiológico al
pragmático, aplicado a una unidad de estudio y transformación, así tendremos: un
municipio; territorio jurídicamente reconocido y señalado por el proyecto como unidad
de análisis, de planeación e intervención, en este se pueden encontrar etnias nativas,
afro, rom y mestizos, ciudadanos y campesinos. En el mejor de los casos todos están
incluidos en los planes de desarrollo municipales, con sus planes de vida. En términos
democráticos, pensemos que dichos planes de vida han sido construidos mediante una
activa participación social y comunitaria (gente organizada y con sentido de
pertenencia); por tanto, el plan municipal deberá estar en concordancia y armonía con
el plan o esquema de ordenamiento territorial. Toda esta concatenación de hechos
obedece a una adecuada planeación municipal, democrática y jurídicamente en
consonancia con la ley. Este municipio, teórico, tiene una alta posibilidad de transitar
hacia el Buen Vivir.

La formulación y delimitación del tema se plantea como un supuesto el cual


genera la oportunidad de construir estrategias comunicacionales dialógicas de
investigación, educación y organización social; de esta manera: Construyendo espacios
epistemológicos, pedagógicos y organizativos que permitan la comunicación dialógica
interinstitucional, interétnica y comunitaria en nuestras regiones y territorios, se
posibilita el logro de niveles transectoriales materializados en planes y proyectos
integrales propios, generadores de identidad y autonomía para el Buen Vivir y un
desarrollo sustentable de mayor bienestar y beneficio a todos y a todo.

Esta afirmación, como un supuesto, nos puede conducir a un proceso continuado


de cátedras itinerantes (espacios para la comunicación dialógica) en distintas regiones
y territorios, con diferentes actores representantes de instituciones, etnias y
comunidades. Las acciones convenidas en materia de formación, investigación y
organización, constituyen la esencia de la cátedra, la cual le suministra insumos
científicos en términos de una nueva cultura para la formulación de políticas públicas
originadas en un común acuerdo (un Contrato Social) entre la población y sus
administradores públicos. Para la comunidad científica, del mundo popular y formal, se
producen descripciones y explicaciones etnográficas y etnológicas del fenómeno
emergente de la interculturalidad; también se crean diseños para las cualificaciones de
la educación, la comunicación y la organización social. Por tanto, Chiodi (1998) plantea:

La interculturalidad desarrolla la mutua comprensión entre las culturas y la valoración


de cada una de ellas en un plano equitativo. Así, se dice, se establecerán nuevas
formas de convivencia entre culturas diferentes. Correspondería a la educación
intercultural asumir el reto de contribuir a una relación igualitaria y de intercambio
entre los pueblos en contacto.

Objetivos

General: Establecer la Cátedra Libre de la Interculturalidad en Territorios de Paz


como estrategia comunicacional, investigativa, educativa y organizativa en los
municipios, para el logro de planes, proyectos y programas incluyentes que propicien un
Buen Vivir y el desarrollo sustentable en términos de una nueva cultura.

Específicos

1) Identificar líderes e instituciones que promuevan la conformación de


grupos focales integrados por representantes de etnias nativas y comunidades
afro, rom y/o mestizas, existentes en los municipios.
2) Capacitar los grupos focales con la metodología MARDIC, generando
capacidad instalada.
3) Aplicar la metodología MARDIC en la delimitación de los temas y capítulos
del proceso de la interculturalidad en la construcción social de la paz.
4) Promover el intercambio y el diálogo de saberes de los grupos focales con
la población y las instituciones.
5) Convocar la participación en eventos regionales para el intercambio de los
grupos municipales, nacionales e internacionales.
6) Construir un marco explicativo de una nueva cultura regional y nacional
relacionada con las potencialidades, problemas y necesidades de nuestra
sociedad, con relación al tramado de relacionales humanas y sociales en los
territorios de Colombia.
7) Elaborar políticas públicas, planes, programas y proyectos con las
comunidades e instituciones, producto del proceso educativo e investigativo de
los grupos focales.

Propuesta Metodológica

MARDIC: Es una metodología constructivista e integradora; nace como un


método activo y participativo en donde el ser individual se informa por múltiples fuentes
y produce conocimiento de manera grupal, es decir, requiere de la interrelación y la
comunicación dialógica en grupo. MARDIC se enriquece en encuentros con líderes
comunitarios de distintas culturas y profesionales de diversas disciplinas; así mismo,
provee mejores sistemas de investigación e intervención, acordes a las circunstancias
locales, regionales, nacionales e internacionales donde es utilizada.

MARDIC es un camino de encuentros con múltiples culturas. En la medida en


que los encuentros con las cosas y con todos los seres sean “calidosos”, así mismo el
conocimiento que se produce es de gran calidad porque la información que se
suministra tiene un filtro cualificador denominado LA CONFIANZA. Y al escuchar, más
que oír, se inunda de curiosidad, se avivan los sentidos y se revisten de sentimientos
para ofrecer datos, no solo de cantidad, más bien son: datos embellecidos de metáforas
y símbolos que permiten interactuar en un gran espacio creativo.

MARDIC concibe que la investigación, la educación y la organización social


(Comunidad Pedagógica y Epistemológica). Son partes de un todo, alguien los ha
separado con fines de profundización, pero se debe tener en cuenta que la
profundización también es a los lados, hacia arriba, del centro hacia afuera y de la
periferia al centro: se genera una relación entre todos y con todo. Plantea un camino
orientado por el diálogo de saberes que logra llegar a la esencia de la vida misma, para
transitar la observación, interpretación, explicación y comprensión de la realidad, hacia
la trascendencia espiritual, fundamentada en las pluri – cosmovisiones de los pueblos,
por la transformación social.

Diseño propio: Diego Ceballos Bohórquez, Metodólogo Colombiano

MARDIC realiza su primer paso organizativo y es el de constituir comunidad


pedagógica y epistemológica con gente representante, gente organizada, con sentido
de pertenencia y con voluntad para la construcción de la paz en sus municipios y
departamentos.
La construcción de la paz requiere de grupos en donde estén representantes de
las diversas comunidades, grupos étnicos, organizaciones sociales, académicos,
ciudadanos, campesinos, instituciones públicas y sector privado, produciendo
conocimiento propio desde sus escenarios y territorios de paz.

MARDIC llama la atención hacia una nueva relación de sentido entre los seres
humanos y la naturaleza, que supere la necesidad y el interés, a partir de una
perspectiva biocéntrica, procurando la trascendencia a través del holismo, construyendo
escenarios relacionales orientados por el Buen Vivir y el Desarrollo Integral del Ser.

A continuación se presentan las Fases Metodológicas de MARDIC:

FASE 1, Recuperación de la percepción individual y colectiva: de un asunto


puesto en común; es decir, qué piensa cada quien, del asunto o tema, cada participante
tiene un concepto, un punto de vista; el discurso inicial que se produce contiene:

 Definiciones, cosmovisiones, semejanzas, relaciones, anécdotas y relatos.


 Señalamiento de unas partes constitutivas y esenciales.
 Señalamiento de las partes más importantes.
 Señalamiento de potencialidades, oportunidades, problemas y dificultades.
 Señalamiento de posibilidades para el abordaje de los temas estudiados a
intervenir.

Este primer encuentro produce un testo (lo previo a un texto) de un discurso, un tanto
desordenado, aportado por todos.

FASE 2, Tematización: se ordena lo pensado, el grupo retoma lo expuesto en el


primer encuentro, se puede leer según las memorias recogidas en la primera fase; el
ordenamiento se hace con base a: concepciones y definiciones, relatos, señalamiento
de aspectos fundamentales, señalamientos de temas potenciales o problémicos,
señalamiento de causas y consecuencias de dichos temas, puntos comunes
encontrados por los diversos participantes, temas comunes a los escenarios y territorios
de paz y posibilidades de estudio e intervención de los hallazgos. Este encuentro es
altamente tematizado y constructivo, por tanto, produce un segundo texto (un testo
mejor elaborado).

FASE 3, Ampliación del pensamiento: los aspectos señalados nos dan nuevos
elementos y puntos de referencia para ir en la búsqueda de una mayor información con
las comunidades (fuentes primarias), en textos, libros, películas, prensa, etc. (fuentes
secundarias). Los grupos ven y escuchan, para luego confrontar; los monitores o
coordinadores de grupo traen nuevos elementos de fuentes primarias y secundarias,
para brindarlos como elementos de referencia y así lograr una suficiente ampliación de
pensamiento. En esta fase el grupo confronta su concepción ordenada con nueva
información de referencia.

FASE 4, Reinterpretación: se tiene como base para el análisis el texto del


segundo encuentro y lo confrontan con lo que escucharon y vieron para luego señalar lo
que queda de relevante en cada una de las partes del discurso inicial; a manera de
conclusión el grupo deduce aspectos de su planteamiento inicial, reafirmando,
resaltando o señalando elementos principales. ¿Qué queda?, ¿Qué es lo más
importante?, ¿Para qué sirve?, ¿Cuál es su aplicación?, ¿En dónde podemos incidir,
¿Qué se puede ampliar y además consultar? En fin, quedan elementos ordenados y
delimitados para una última fase o encuentro.

FASE 5, Planeación de un quehacer: es la intervención consciente, planeación


colectiva de un quehacer metodológico, técnico, organizativo, investigativo, educativo
y… así el proceso continúa.

MARDIC posibilita la superación de dos dicotomías históricas:

1) Teoría – Praxis, en tanto que la distancia entre ambas es la metodología y su


carácter activo propicia de forma permanente la interrelación dialéctica y dialógica,
construyendo consensos entre el saber popular y el conocimiento formal. MARDIC
permite acrisolar de manera concreta la ecología de saberes, reiventando el sentido de
la ciencia en una lógica horizontal.

2) Investigación – Intervención, conocemos para interpretar, comprender y


trascender, desde un horizonte de cambio, pero a su vez, diseñamos caminos para la
nueva vida, que son transitados con solidaridad intergeneracional, luchando con
determinación por escenarios de paz heterotópicos, donde los sueños de todas voces
encuentran en la diferencia el mejor escenario para construir lenguaje común.

Propuesta pedagógica

Colombia requiere de procesos integrales que permitan orientar la construcción


social de la paz a partir de pedagogías auténticas, fundamentadas en la educación
alternativa, para potenciar la organización comunitaria e institucional en el territorio
nacional. El proyecto plantea la articulación de las energías vivas de la sociedad civil,
en un ejercicio guiado por el diálogo de saberes formales y no formales, con el
propósito de incidir en la cotidianidad de los escenarios concretos de construcción de
paz y en el plano político – administrativo.

Objetivo general: desarrollar procesos de formación y construcción de diseños plurales


y democráticos orientados al diálogo, la concertación, la paz y el Buen Vivir, ante las
diferentes contradicciones de la vida familiar, grupal y sociocultural.

 UNIDAD TEMÁTICA 1, La verdad histórica, oculta y cotidiana: repensar la


verdad es un camino epistemológico de paz. Objetivo específico 1: motivar la
reflexión grupal y diseñar estrategias de construcción para la generación de
niveles de conciencia en torno a la verdad personal, grupal y social de todo y de
todos.
 UNIDAD TEMÁTICA 2, Las contradicciones de la realidad: el ritmo de la
realidad se manifiesta como fenómeno lógicamente y su esencia es un eterno
movimiento de contrarios. Objetivo específico 2: identificar las diferentes
contradicciones colectivamente, según sea su intensidad, en la relación
sociocultural y físico ambiental de la realidad.

 UNIDAD TEMÁTICA 3, Origen, existencia y naturaleza del conflicto: el


conflicto se puede definir como un fenómeno, resultante del proceso de
contradicciones que emerge en las dimensiones sociocultural y físico ambiental
de la realidad. Es por un tanto, una manifestación dinámica e inherente a la
naturaleza de las diversas formas de vida y a las construcciones sociales.
Objetivo específico 3: establecer el origen, la existencia y la naturaleza del
conflicto a través de su manifestación fenomenológica en los diferentes
escenarios y territorios urbanos y rurales.

 UNIDAD TEMÁTICA 4, Escenarios y territorios de paz: la paz es un estado de


ánimo, es un estado y un tiempo de reposo de las partes contrarias; es una
condición para el diálogo y la construcción política de escenarios y territorios que
permite el crecimiento sociocultural y físico ambiental. Objetivo específico 4:
reconocer los diferentes escenarios de diálogo y trabajo colectivo de la vida
urbana y rural de la familia y los grupos formales de la sociedad en sus
territorios.

 UNIDAD TEMÁTICA 5, Diseños estratégicos, innovadores y creativos para


la comunicación y la concertación: la comunicación debe ser dialógica, de allí
la necesidad de mediar para una concertación de las partes en la comprensión
de sus contradicciones. Objetivo específico 5: diseñar sistemas
comunicacionales y estrategias para la concertación de las partes o
protagonistas de las partes que intervienen en las contradicciones
socioculturales y físico ambientales de los diferentes territorios.
 UNIDAD TEMÁTICA 6, Educación alternativa para la formación del ser que
requiere una nueva cultura: las pedagogías de paz deben orientan un ejercicio
de formación democrática y plural, basada en el diálogo de saberes, que
posibilite la trascendencia política, ambiental, económica, social y cultural del ser.
Objetivo específico 6: desarrollar procesos de formación dialógica hacia la
construcción social de la paz, que articulen las diversas historias de vida y
experiencias de los actores sociales partícipes.

Diseño propio: Luis Miguel Gallo Díaz, Trabajador Social

Resultados

 Grupos comunitarios e institucionales capacitados en interculturalidad y en la


metodología MARDIC en cada municipio participante.
 Diagnósticos situacionales de paz con enfoque intercultural, utilizados por las
comunidades y las instituciones en términos de sus culturas para la
transformación del territorio.
 Diseños estratégicos, innovadores y creativos de intervención para la
comunicación y la concertación, con participación comunitaria e institucional.
 Construcción de protocolos locales y regionales de paz, con enfoque ambiental.
 Formulación de la política pública de paz, con enfoque intercultural (en proceso).
 Construcción del modelo pedagógico de paz con enfoque intercultural.
 Articulación dialógica de la vida rural y urbana de las comunidades en sus
municipios, desde una mirada de Eco – Regiones.
 Institucionalización del proceso cíclico que trasciende el modelo educativo
tradicional de la academia, mediante la investigación implicada.

Conclusiones

 El diálogo de saberes entre los diferentes grupos interétnicos en el proceso de


interacción y construcción colectiva ha generado la formulación de ideas y
estrategias que responden al abordaje de potencialidades y problemáticas de las
comunidades partícipes.
 La articulación intersectorial de la academia, el sector público y privado a nivel
local, regional y nacional ha promovido la creación de espacios de investigación
que propenden por el bien común, generando capacidad instalada con las
comunidades partícipes.
 Es necesario dar un giro en la mirada hacia el diseño e implementación de
estrategias y herramientas participativas para la construcción de una paz estable,
duradera y sustentable en el marco del proceso de negociación y postacuerdo a
nivel institucional y comunitario.
 La interculturalidad en el plano educativo, la organización social y la proyección
política en los territorios, ha conllevado a la resignificación de las relaciones
sociales con las comunidades de base y en las estructuras administrativas a la
luz de las dimensiones de la vida social.
 El salto cualitativo, en términos de Buen Vivir y Humanismo Ecológico, hacia una
cosmovisión integradora del ser social colombiano, representa la oportunidad
para construir lenguaje común a partir de la diferencia.
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