Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
Consejo Consultivo
Dra. Elizabeth Galindo Millán
Dra. Geraldine López Sánchez
Dra. Rocío del Carmen Lora
Comité Asesor
Lic. Carmen Celeste Ramírez Báez
Dra. Diana Adarmes Velasco
Dr. Edgar Pérez Pereira
Dra. Enoé Texier Reyes
Dra. Iraida González de Puppio
Dra. Magdalena Moreno Marimón
Lic. Milagros Pérez
Dr. Roberto Delgado Idrogo
Dra. Yanixa Vallenilla Reyes
El Ministerio Público agradece a los autores de los trabajos publicados su colaboración; sin
embargo, las opiniones y conclusiones expuestas no constituyen doctrina oficial de la Institución.
Contenido
Preliminar
Artículos
Imputación Objetiva:
Consideraciones acerca de su Ámbito de Aplicación
Dra. Migdalia Mercedes Vásquez Jiménez 85
La Autopsia Médico-Legal:
Su Justa Valoración en el Proceso Penal
Dra. Yanira Rangel Meneses 139
Documentos
Preliminar
Dilia Parra Guillén
Directora del Instituto de Estudios Superiores
Preliminar
Dilia Parra Guillén
Directora del Instituto de Estudios Superiores
cial mundial. Especial reconocimiento merecen aquellos vinculados con el
proceso globalizador que vive el mundo de hoy, imponiendo nuevos retos
al sistema punitivo tradicional, que busca interpretarlo a través de nuevos
paradigmas y de una nueva cultura jurídica construida desde la base del es-
tudio reflexivo y del debate fructífero de las ideas, parabresponder adecua-
damente a los retos del siglo XXI.
El análisis de los diferentes temas abordados en este número no agota su
tratamiento, pero permite su reflexión profunda y, algunos artículos, llegan a
constituir una luz en la solución de problemas que aún no han sido resueltos
dentro del sistema de justicia venezolano.
En esta oportunidad, contamos con la colaboración de especialistas des-
tacados en el mundo académico como: Juan Carlos Manríquez, catedrático
de la Academia Judicial de Chile; Fernando Díaz Colorado, docente de la
Pontificia Universidad Javeriana de Colombia; Xiomara Martínez, Directora
del Centro de Investigaciones Postdoctorales de la Universidad Central de
Venezuela -CIPOST-UCV. Asimismo nos dieron su aporte, profesionales del
derecho del Ministerio Público venezolano que han brindado su contribución
con la presentación de interesantes artículos, como es el caso de Yanira Rangel
y Migdalia Mercedes Vásquez Jiménez, Abogadas Adjuntas a la Dirección de
Revisión y Doctrina del Despacho del Fiscal General de la República; Ivonne
Dorta Afonso, Coordinadora de Asuntos Internacionales; Daniel Alvarado Vi-
cuña, Fiscal Auxiliar del Ministerio Público de la Circunscripción Judicial del
Estado Sucre, y Keymer Ávila y Patricia Parra, Asistentes del Despacho del
Fiscal General de la República.
En la sección Documentos, la Lic. Carmen Celeste Ramírez, Coordinado-
ra de la Biblioteca Central del Ministerio Público, nos brinda como recurso
histórico-jurídico una recopilación de las leyes de los Reinos de las Indias, re-
lacionada con la actuación de los Fiscales ante las Reales Audiencias y Chan-
cillerías Reales.
Criminalización en el Negocio Marítimo:
De la Responsabilidad del Naviero,
Operadores y Agentes de Naves:
Nuevas Tendencias del Derecho Penal
10
Criminalización en el Negocio Marítimo:
De la Responsabilidad del Naviero,
Operadores y Agentes de Naves:
Nuevas Tendencias del Derecho Penal
RESUMEN
Se abordan en el trabajo los conceptos sobre la expansión del Derecho Penal “Moderno”, y por tanto,
del Derecho Penal Económico “Moderno”, enfocando el análisis en la detección de un nuevo espacio que
principia a ocupar la Ley Penal, por medio de la “Criminalización” (Criminalisation) de ciertos aspectos
vinculados a la explotación comercial de las naves, tales como el régimen de las descargas maliciosas de
contaminantes en el mar, de los derrames o vertimientos por negligencia grave, incluso los provocados por
“accidentes”; ciertas cuestiones relativas a las cargas y al transporte, a las nuevas manifestaciones de la
piratería, entre otros casos de afectaciones a intereses “socio-económicos” que configuran “neo valores”
de la sociedad post industrial del mundo globalizado. Se atisba también a la política criminal de “Nuevo
Cuño”, sin dejar pasar el debate y la percepción que los actores de la actividad marítima manifiestan sobre
el proceso descrito, destacando los rasgos comunes de acción entre los principios rectores del Derecho Penal
Euro-Hispano-Latinoamericano de raíz continental y el Derecho Criminal Anglo-Sajón para enfrentar este
nuevo fenómeno. Por último, se analiza también la situación del Derecho Positivo Chileno vigente sobre las
cuestiones planteadas, algunas recepciones en la legislación interna de los preceptos del “Derecho Penal del
Riesgo” en otras áreas, como el mercado bancario y financiero, el tránsito público de rodados, etc., y cómo se
ha previsto el tratamiento en especial de los “Delitos de grave contaminación” en el Ante Proyecto de Nuevo
Código Penal Chileno encargado redactar al Foro Penal.1
11
Criminalización en el Negocio Marítimo. De la Responsabilidad del Naviero,
Operadores y Agentes de Naves. Nuevas Tendencias del Derecho Penal
12
Juan Carlos Manríquez R.
13
Criminalización en el Negocio Marítimo. De la Responsabilidad del Naviero,
Operadores y Agentes de Naves. Nuevas Tendencias del Derecho Penal
14
Juan Carlos Manríquez R.
algunos actores del mercado se sienten “más allá de toda duda” o bien “fuera de
toda posibilidad de ser tocados” por el sistema penal, auto-generando y justifican-
do la psicológica disposición a la impunidad y por ende objetivamente una grave
situación de desventaja para los competidores honrados que cumplen con la ley o
bien intentan no incurrir en situaciones injustas o ilícitas que pudieran resultar de
su acción, lo que no puede ser amparado por el sistema de justicia criminal.16
Entonces, en noticia de estas cuestiones, el desarrollo larvario del Derecho
Penal Económico, sobre todo en Latinoamérica, aunque con esperanzadoras
proyecciones17 dentro del cual hasta el día de hoy es muy discutible si es o no
factible incluir la “criminalidad ecológica”18 como una nueva necesidad de
protección penal, por considerarlo así la sociedad actual, o sea, porque el “me-
dio ambiente” o el “ecosistema” (y en particular “el ambiente marino”) son dig-
nos de la mayor respuesta posible a un Estado Social y Democrático de Derecho,
cuál es el uso de la norma penal para darle tutela bajo la amenaza de duras san-
ciones, no acalla la crítica de no saberse con exactitud “qué se está protegiendo”
sin caer eventualmente en un exceso de constructivismo imposible de aplicar, y
por último, la advertencia de no incurrir en el problema de entrar a definir “tipos
penales inasibles” o “bienes jurídicos absolutamente indeterminados” y no in-
cardinados en el mundo real en el cual han de obtener esa protección.19
Como quiera que sea, es posible constatar que en los países europeos el fe-
nómeno de aparición de leyes penales de la actividad económica coincidió con
la Primera Guerra, destinado precisamente a tomar el control de la economía
para dirigirla al esfuerzo bélico, aunque finalmente es con la depresión mundial
iniciada a fines de los años 20 que se instala como una constante característica
de los ordenamientos económicos contemporáneos, nutriéndose fuertemente
desde una perspectiva extra penal.20
Su desarrollo consensuado se mantuvo hasta fines de los 80, pero la aparición
del “Derecho Penal del Riesgo” y del actual “Derecho Penal del Enemigo”, como
hemos dado cuenta en notas anteriores, también ha repercutido innegablemente en
el estado actual del Derecho Penal Económico “Moderno”, uno de cuyos fenóme-
nos curiosamente coincidentes en el mundo anglo-sajón y el europeo-continental,
15
Criminalización en el Negocio Marítimo. De la Responsabilidad del Naviero,
Operadores y Agentes de Naves. Nuevas Tendencias del Derecho Penal
2. En primer lugar, la expansión del Derecho Penal de hoy y “de las futu-
ras generaciones”. En segundo lugar, la “modernización” del mismo.21
16
Juan Carlos Manríquez R.
17
Criminalización en el Negocio Marítimo. De la Responsabilidad del Naviero,
Operadores y Agentes de Naves. Nuevas Tendencias del Derecho Penal
18
Juan Carlos Manríquez R.
19
Criminalización en el Negocio Marítimo. De la Responsabilidad del Naviero,
Operadores y Agentes de Naves. Nuevas Tendencias del Derecho Penal
20
Juan Carlos Manríquez R.
21
Criminalización en el Negocio Marítimo. De la Responsabilidad del Naviero,
Operadores y Agentes de Naves. Nuevas Tendencias del Derecho Penal
22
Juan Carlos Manríquez R.
refirió a Guantánamo Bay como “the legal black hole” y como “a monstrouse
failure of justice”, expresa no tener dudas que Lord Steyn, acerca de la deten-
ción del Capitán Mangouras del Prestige, y de la tripulación del Tasman Spirit,
habría realizado respecto de estos casos igual comparación que la anterior, por
tratarse más que de delitos, de accidentes graves y propios de la navegación,
que también afectan a los marinos y a los hombres de mar, cuestión que sin
pretender desconocer la necesidad de enfrentar la realidad de mantener incó-
lume el ambiente marino, debe ser también tenida en cuenta por sus múltiples
efectos, si no se desea romper con la estructura tradicional del sistema de res-
ponsabilidad legal vigente en estas materias.
Luego del debate, en ambas convenciones anuales, los concurrentes con-
cordaron hacer presente sus observaciones a los organismos comunitarios per-
tinentes, a fin de evitar excesos del todo indeseables.
b) El ámbito empresarial
23
Criminalización en el Negocio Marítimo. De la Responsabilidad del Naviero,
Operadores y Agentes de Naves. Nuevas Tendencias del Derecho Penal
24
Juan Carlos Manríquez R.
25
Criminalización en el Negocio Marítimo. De la Responsabilidad del Naviero,
Operadores y Agentes de Naves. Nuevas Tendencias del Derecho Penal
contenido en la regla técnica extrapenal, con mayor razón, aquellas sobre “se-
guridad de procesos”, evitación de riesgos o impedición de superar los límites
permitidos y adecuados a la actividad, operación y características de la indus-
tria marítima, en general.
En tal sentido, concluimos modestamente que el esfuerzo del Ante Pro-
yecto de Código Penal Chileno elaborado por el Foro Penal, va por el camino
correcto.
NOTAS DE REFERENCIA
1 Ideas generales sobre este fenómeno se presentaron en la actividad del 04.08.05, Escuela de Derecho de la
Universidad de Valparaíso, Chile, en Honor del Profesor Dr. Juan Bustos Ramírez. También notas recientes y
referencias, en Manríquez, Juan Carlos “Caen los Dogmas en la Reforma Procesal Penal Chilena”. Revista
de Derecho de la Pontificia Universidad de Valparaíso, XXVI, 2005, Semestre I, pp. 407-419 (p. 413, con
Nota 20). En lo particular, el tema fue expuesto por el autor en el Seminario “Temas de actualidad en la
industria marítima y el comercio exterior”, organizado por la Asociación Chilena de Derecho Marítimo,
Viña del Mar, Chile, 18.10.2005. Con posterioridad, por invitación de la Comisión Organizadora del XVII
Congreso Latinoamericano de Derecho Penal y Criminología, realizado en Guayaquil, Ecuador, entre los
días 24 al 28 de Octubre de 2005, el autor expuso esta tesis en las Magistrales del día inaugural.
2 De antemano conviene esclarecer que en esta área hoy no sólo se incluye la Europa continental, especialmente
la Europa Central y España, sino que curiosamente también a Japón y Korea, países orientales que han
adoptado los principios del área de influjo europeo después de la II Guerra, por sobre todo, del Derecho
Penal alemán. Por ejemplo, Korea ha traducido el StB y los textos de los autores germanos más destacados,
en el idioma local, tales como Roxin, Jakobs, Tiedemann, Hassemer, Schunemann, y otros más modernos,
son consulta obligada en los cursos de pre grado de las Escuelas de Derecho, y también citas frecuentes en
las resoluciones judiciales.
3 Sobre el particular, con detalle y erudición Hernández, Héctor en Persona y Sociedad, XIX Nº 1/2005, pp.
101-124, UAH. También Abanto Vásquez, Manuel en “El Derecho Penal en una Economía de Mercado.
Influencia de la integración económica y la globalización”, Seminario Internacional, UNAB Viña del Mar,
2005, en prensa; él mismo en “Derecho Penal Económico. Consideraciones…” p.194 y ss; Tiedemann,
Klaus “Poder Económico y Delito”, p. 22; García Cavero, Percy, “Derecho Penal Económico Peruano”,
p. 126 y ss, Terradillos Basoco, Juan “Sistema Penal y Delitos contra el Orden Socio-Económico”.
Consideraciones introductorias”, AA.VV., Mendoza, Argentina 2003, p. 53 y ss; y una visión general en
Chile, Manríquez, Juan Carlos. “Situación actual de los delitos económicos: Orden público económico y
delito económico”, XIV Congreso Latinoamericano de Derecho Penal, UV, 2003, Libro de Ponencias, p.
425 y ss. Una visión criminológica en “Criminalidad Económica. Interrelación de factores que explican
su génesis y su persistencia”, diagrama Nº 18, en que asocia comúnmente a este ámbito de ilicitud con
“abuso de poder económico o político” en “Criminalidad Económica. El delito como negocio”, González
B., Marco Aurelio, EJ Conosur, Santiago, 1989.
26
Juan Carlos Manríquez R.
4 Vid. Fvr al respecto en sentido diferente al expresado por Sutherland, la expresión sociológica de Luhmann,
desde la perspectiva de la teoría social de sistemas, Das Recht der Geselleschaft, 2ª edición, 1997, pp. 582 y
ss; formulando la propuesta que la diferenciación moderna entre “Inclusión y exclusión es estructuralmente
más profunda que la diferenciación en clases sociales…”. También Young, La sociedad “excluyente”.
Exclusión social, delito y diferencia en la modernidad tardía, 2003 (…”La imputación de criminalidad
sobre el otro desviado es parte necesaria de la exclusión…”); Bergalli “El nuevo paradigma criminológico
de la exclusión”, estos citados por Cancio Meliá, Manuel en “La expulsión de ciudadanos extranjeros
sin residencia legal (Art. 89 Código Penal), p. 187, con Nota 21, en Homenaje al Profesor Dr. González
Rodríguez Mourullo, Thomson, Civitas, España 2005. En otra senda de la criminología norteamericana;
Oxley, Shaw y Mackay y la Escuela de Chicago, “Distribución geográfica de la delincuencia juvenil
masculina en Chicago 1900-1933”, y en Chile González Berendique, Marco Aurelio, “Criminología”, II,
p. 965 y ss, EJCh 1998.
5 Basta sólo ver lo que ha ocurrido en Chile últimamente con la discusión sobre la seguridad ciudadana
vinculada a los delitos bagatelarios como el “hurto-hormiga”, o hurto-falta, y todo el debate técnico
político-jurídico que ha dado lugar a las sucesivas modificaciones introducidas por las leyes adecuatorias
de la Reforma Procesal Penal, en los Arts. 7, 9, 50, 51 y 494 bis del Código Penal, mediante la ley Nº 19.950
de 05.06.2004 sobre la materia, y los efectos jurisprudenciales contradictorios posteriores, que llevaron a la
E. Corte Suprema a declarar como “ley penal en blanco” a la norma que tipificaba el hurto-falta frustrado
y tentado, ya que no establecía la pena aplicable a dicha infracción, toda vez que el Código Penal sólo
contempla la punición de los grados imperfectos de comisión para los “crímenes y simples delitos”. Ya a
poco andar la ley, en 2004, Carnevali Rodríguez, Raúl en “¿Es el Derecho Penal que viene? A propósito de
la ley 19.950 que modifica el delito de hurto”, Semana Jurídica 192, Lexis-Nexis, 12.07.2004, p. 14 y ss,
reclamaba que estas disposiciones “…alteran principios básicos que constituyen el basamento garantístico
del sistema punitivo, como lo es, por ejemplo, el principio de lesividad concreta…”. Sobre la urgente
necesidad de tratar las disfunciones criminológicas y dogmáticas que se advierten en Chile sobre los delitos
de hurto y robo, Vid. Fvr Künsemüller, Carlos “Delitos de hurto y robo: Una reforma inaplazable en el
Código Penal Chileno”. El penalista liberal, homenaje a Manuel de Rivacoba y Rivacoba, Hammurabi,
Buenos Aires 2004, p. 457 y ss
6 Tanto es así, que hoy se tiende a convenir en que la magnitud económica de la delincuencia no convencional
supera con mucho al todo de la delincuencia convencional contra la propiedad y el patrimonio. Vid fvr.
Tiedemann, AT p. 20 y ss, Dannecker, Janovisky, en Alemania; en el ámbito anglo-sajón Nelken, Strader, y
en España Terradillos Basoco, todos citados por Hernández, op. cit ut supra, p. 103, con Nota 8 y para otros
efectos, pero sobre igual constatación expansiva del poder dañoso de la delincuencia económica, Kuhlen,
Portilla Contreras, Silva Sánchez, y otros citados por Abanto en “El Derecho Penal en una Economía
de mercado…” op cit, p. 5-6, con Notas 15 y ss. En el ámbito del derecho penal-tributario chileno, y la
disposición psicológica frente al impuesto (sub cultura de la evasión-elusión), Manríquez, Juan Carlos en
“El fraude tributario. Uso malicioso de débito/crédito IVA. Análisis penal en el Derecho chileno”, UV,
Memoria, 1991, p. 21-31, con Notas 37 a 54. En la línea de reclamar garantías procesales efectivas para los
imputados por delito tributario, Ugalde Prieto, Rodrigo y Rodríguez Oro, Sergio, en “Delito tributario y
Reforma Procesal Penal” Lexis-Nexis, 2002.
7 Interesante mirar los gráficos, cuestionario y respuestas al “público” elaborados por las investigaciones de
Serrano Gómez en España y Strumpel en Alemania, entre 1968 y 1985, incluidos todos en Manríquez, “El
fraude tributario…”, op. cit.
8 Al respecto Schünemann, Achenbach, Martínez Buján, Corcoy Bidasolo, Abanto Vásquez, este último, El
Derecho Penal. Op.cit., p. 5, Nota 13, y Hernández, en op.cit., p. 103.
9 Sobre el punto, vid.fvr. Künsemüller, Carlos “¿Tiene un futuro el bueno, viejo y decente Derecho Penal
Liberal?”, Nuevas tendencias del Derecho, Facultad UCh, Lexis-Nexis, 2004.
10 Tiedemann, Klaus, Criminalidad Transnacional y Derecho Penal, 1980, sobre las dificultades de abordar la
actividad criminal de empresas transnacionales por los medios tradicionales del Derecho Penal, citado por
27
Criminalización en el Negocio Marítimo. De la Responsabilidad del Naviero,
Operadores y Agentes de Naves. Nuevas Tendencias del Derecho Penal
Hernández, op.cit., p. 115 con Nota 42, y más recientemente Schünemann, Bernd “Del derecho penal de la
clase baja al derecho penal de la clase alta.” Un cambio de paradigma como imperativo moral?, y también él
mismo en temas actuales y permanentes del Derecho Penal después del milenio, Tecnos, Madrid 2002, p. 49
11 Un punto obligado de referencia es atender a la pugna entre los seguidores de la Escuela de Frankfurt,
vinculada a los Profesores del Instituto de Estudios Criminales de dicha Universidad, como Hassemer
Luderssen, Nauke, Albrech Herzog y Prittwitz, que propugna un irrestricto apego a los principios del
Derecho Penal ilustrado, garantista y culpabilístico (Derecho Penal Nuclear); las posiciones intermedias del
“Derecho Penal de la intervención” a medio camino, de Hassemer, que propugnan una “Co-habitación” del
núcleo duro con las formas expansivas adecuadas a la “Neo-criminalidad”; las prevenciones de Roxin en
Problemas Actuales de Dogmática Penal, Ara 2004, traducción de Abanto, p. 20, 45 y 46; y todo ello versus
la arremetida del “Derecho Penal Moderno” o “Derecho Penal del Riesgo”, concepto introducido por el
sociólogo Ulrich Beck, en su texto “La sociedad del riesgo: hacia una nueva modernidad”, Frankfurt 1986;
y de ahí la difusión hecha en lengua hispana de Silva Sánchez, Jesús María “La expansión del Derecho
Penal. Aspectos de la política penal en las sociedades post-industriales”, Civitas, Madrid, 1999, 2001,
quien ha propugnado la categoría de “Derecho Penal de primera velocidad” para el Derecho Penal Clásico,
y de “Derecho Penal de segunda velocidad” para el Derecho Penal Moderno o Extendido, que supone
ampliarlo también a la delincuencia económica, con menos garantías procesales y mayor intervención
con tipos de peligro y adelantamiento de la punición a la tentativa, pero a cambio ofreciendo “casi nula
aplicación de la privación de libertad”. Estos postulados han sido objeto de muchas críticas, bien expuestas
y recogidas por Hernández y Abanto, en op.cit. ut supra.
Hoy el asunto está en el “Derecho Penal de tercera velocidad” o “Derecho Penal del Enemigo”, según
expresión acuñada por el Profesor alemán Günther Jakobs en “Derecho Penal del Enemigo”, traducción,
Civitas, Madrid 2003, en conjunto con Cancio Meliá, Manuel, quien se muestra contrario a dicho postulado,
por entender que ofende la igualdad ante la ley. Vid.fvr, al respecto “La expulsión de ciudadanos…”,
Cancio, cit. ut supra p. 206 y ss, p. 214, 215, Notas 131-135. En igual sentido crítico Mir Puig, Santiago
en “Límites del Normativismo en Derecho Penal”, Homenaje al Profesor Dr. Gonzalo Rodríguez, Madrid
2005, p. 676, Nota 32, ya que la distinción de Jakobs entre “persona” e “individuo”, señalizando como
“und-personen” (no persona) a quien no comunica el mensaje que la norma en sí conlleva, afecta la vigencia
de ésta, y por tanto, el funcionamiento del orden jurídico-social todo (y por eso ha de ser considerado “el
enemigo” o “el maligno”como sinónimo del Diablo, en buena comparación de Cancio) sobre el cual se
debe dejar caer con todo su peso la “tercera velocidad”, se relativiza en definitiva los derechos humanos.
En el Chile de hoy la “Guerra antidelincuencia común” y el paroxismo cuasi histérico infundido en la
población por “mayor seguridad ciudadana” son expresiones no develadas de la política de “guerra contra
la delincuencia y los delincuentes”, por sobre todo, los comunes, manifestando acciones imperceptibles
para la mayoría de intervención del Derecho Penal del Enemigo. Para una explicación particular sobre el
origen del Derecho Penal del Enemigo, justificada en “…la crisis del Estado asistencial... (que)…obedece
a razones económicas, a una reacomodación del mundo en que nos encontramos y en que aparecen
fenómenos nuevos como el terrorismo, la emigración masiva de los países pobres a los países ricos, y el
ascenso imparable del crimen organizado- lavado de dinero, narcotráfico, etc., -. Este es un mundo muy
complejo, con una nueva readecuación del poder y de los centros del poder mundial.” Vid.fvr Serrano
Piedecasas, José Ramón, “Derecho Penal del Enemigo. La expansión en la respuesta penal”, Semana
Jurídica Nº 256, p. 4 y ss, Lexis-Nexis, 03.09.2005.
12 En una explicación general sobre esta posición, Jakobs, en “La ciencia del Derecho Penal ante las
exigencias del presente”, UE Colombia, Nº 24, 2000, p. 9 y ss, traducción de Manso Porto, Teresa.
13 Al respecto, Abanto, Manuel “Derecho Penal Económico. Parte Especial. Lima, Idemsa. 1999, p. 22 y ss,
con Nota 2.
14 En este sentido Stratenwerth en Alemania; siguiéndolo, Corcoy Bidasolo. En Perú, García Cavero, y en un
sentido diferente para hacer distinciones entre “bien jurídico” y objeto de protección, Abanto, Vásquez,
todos citados en Abanto “Derecho Penal…” op.cit. p. 5, 7, 9, con Notas 11, 20, 31 y 32.
28
Juan Carlos Manríquez R.
29
Criminalización en el Negocio Marítimo. De la Responsabilidad del Naviero,
Operadores y Agentes de Naves. Nuevas Tendencias del Derecho Penal
sospechosas. Notas sobre la Ley Nº 19.913 que crea la Unidad de Análisis Financiero (UAF)”, publicado
en la Revista Escuela Derecho Universidad del Mar, año 2005, pp. 107 a la 125. También, el análisis
penal del tipo imprudente contenido en el Art. 19-4 de la misma Ley, que se lee en Manríquez, Juan Carlos,
“Omisión propia y posición de garantía por cualificación en el rol del sujeto activo. Lavado o blanqueo
culposo de bienes o activos de origen ilícito en la Ley Nº 19.913”, XVI Congreso Latinoamericano de
Derecho Penal y Criminología, Lima, Perú, publicado en el Libro de Ponencias, Universidad Nacional
Mayor de San Marcos, pp. 123 y ss, año 2004.
24 Al respecto, Roxin, Claus, Strafrecht AT2, p. 252, Nota 51; y él mismo ya en 1963 “Autoría y dominio del
hecho”, citado por Abanto en “Autoría y participación y la Teoría de los delitos de infracción del deber”,
Revista Penal Nº 14, p. 3 y ss, julio 2004. Jakobs en “La ciencia del Derecho Penal ante las exigencias
del presente”, traducción de Manso, UEC, 2000, p. 24 y ss, reclama como necesario para ordenar una
“sociedad de explotación” en que el sistema “economía” se impone en caso de dudas frente a todo lo
demás, que los “estándares de respeto, por ejemplo hacia los llamados bienes colectivos –de manera
distinta al desarrollo, pongamos por caso, de los estándares denominados “reglas de la técnica”- no
puede dejarse en manos del propio mercado… los estándares deben dictársele al mercado desde fuera, lo
cual no puede tener lugar a través de cláusulas generales… los estándares deben más bien determinarse
inelásticamente, bien como permisos individuales exactamente delimitados, o bien como valores-límites
precisos de validez general…”
25 Sobre el estado más o menos actual de la teoría de la imputación objetiva, desde la óptica de reflexionar en
base a “avances reales en seguridad jurídica y sobre el contexto sistemático de esta teoría, ya que no hay
una teoría de la imputación objetiva, si no más bien varias aproximaciones que usan esa terminología,
pero no siempre coinciden en lo material…”, Vid.fvr Cancio Meliá, Manuel “Aproximación a la teoría de
la imputación objetiva”, XVI Congreso Latinoamericano de Derecho Penal, Lima, Perú, 2004, Libro de
Ponencias y Apartado; y Clase Magistral en la Clausura del Seminario Internacional de Derecho Penal,
UNAB, Viña del Mar, Chile, Agosto 2005. Sobre la utilidad y límites de la imputación objetiva en el
Derecho Chileno, en el ámbito de las faenas riesgosas (generación y transportación de energías; transporte
marítimo; la construcción de edificios y la actividad médica), Vid.fvr. Manríquez, Juan Carlos, “Delito
Culposo: Utilidad y límites de la imputación objetiva”, XV Congreso Latinoamericano, VII Iberoamericano
de Derecho Penal, Córdoba, Argentina, Libro de Ponencias, T.1, p. 163 y ss, 2003.
26 Que es la opción del Foro Penal, encargado de la discusión y redacción del ante proyecto del Nuevo Código
Penal Chileno, al proponer castigar la alteración del genotipo, la clonación y la fecundación artificial no
consentida, en el Libro II, Título 7º. Delitos de peligro común, párrafo 3º, “de los delitos relativos a la
manipulación genética, Art. 154 APCPCh. Esta técnica posibilita el castigo anticipado de conductas cuya
materialización puede llevar a enormes paradojas, “…principiando por el establecimiento del status del
ser alterado genéticamente, clonado o creado para un fin distinto de la fecundación artificial…”. Vid.fvr,
Unidad 4, parte especial, delitos de peligro común A. Fundamentos.
27 En el APCCh del Foro Penal citado más arriba, algunas de estas cuestiones fueron francamente recogidas
en la tipicidad propuesta para los delitos contra el medio ambiente, teniendo muy en cuenta el cómo de la
regulación penal más que el si de la misma. En este sentido, fue acuerdo del Foro permanecer cercanos
a un “sistema de Derecho Penal heredero en cierta medida del espíritu de la ilustración liberal”, a pesar
de la evidente falta de una regulación adecuada. Por ello se acordó “excluir del ámbito de lo punible la
contaminación de bagatela, producto de la actividad diaria de todos y cada uno de los habitantes de la
República…”, dejándola para los casos de más grave contaminación o de peligro de contaminación. Vid.
fvr, Unidad 4, parte especial, Delitos de peligro común, citado en nota anterior, y la tipicidad propuesta en
los Arts. 130 y 131.
“Artículo 130.- El responsable o administrador de una fuente emisora que produzca una grave pérdida,
disminución, detrimento o menoscabo al medio ambiente o a uno o más de sus componentes, será castigado
con la pena de reclusión menor en su grado medio y multa de 2.000 a 3.000 Unidades Tributarias
Mensuales…”. Las penas personales y multas se elevan si el grave daño ambiental puso en serio peligro la
30
Juan Carlos Manríquez R.
vida o la salud de personas determinadas, y más aún si del peligro creado han resultado lesiones o muerte.
“Artículo 131.- El responsable o administrador de una fuente emisora que por imprudencia o incumplimiento
de las disposiciones legales o reglamentarias cause un grave daño ambiental en los términos del artículo
anterior, será castigado con la pena de reclusión menor en su grado mínimo y multa de 2.000 a 4.000
Unidades Tributarias Mensuales…”. Las penas también se aumentan si del riesgo creado se siguen lesiones
o muerte.
28 Después de los verdaderos desastres ecológicos ocurridos con el “Prestige” y también con el “Erika”,
la Unión Europea incentivó una Directiva del PE y del Consejo, para tratar la contaminación procedente
de buques, la que contiene el mandato de criminalizar los vertimientos y derrames ilegales maliciosos,
imprudentes y en algunos casos, accidentales, pero estragantes para el medio ambiente marino, mediante la
imposición de sanciones incluso penales.
En efecto, la D 05.03.2003; 2003/0037, 92, de Bruselas, y la Decisión Marco sobre responsabilidad penal
por la contaminación procedente de buques, el Dictamen del Comité Económico Social Europeo Arts.
29, 31, 34.2, b), y la aprobación del TUE, marcaron un antes y un después en estas materias, dando lugar
hasta hoy a un intenso debate académico, jurídico, industrial, operativo y de “sensibilidad” de los distintos
actores de la industria marítima mundial, sobre todo en el ámbito anglo-sajón (UK, USA) quienes ven
con un alto grado de preocupación la imposición de altísimas penas penales y de cuantiosas multas, luego
de encarcelamientos preventivos hasta hace poco impensados, en hechos considerados normalmente
“accidentes de mar” o “riesgos propios, tolerados o permitidos, necesarios en la actividad marítima”.
Vid.fvr, al respecto, Fairplay Magazine, diciembre 02.2004 y 04.04.2005, sobre el caso del Presidente de la
Sabine Maritime Transportation., quien por un derrame ilegal en el mar del Sur de China, en que participó el
BT Juneau (1974) en 1999, fue condenado, junto a otros cuatro empleados seniors de la empresa a 33 meses
en prisión y al pago de US$60.000., más US$2.000.000.- La base de la sentencia fue “…illegal dumping
of oil contaminated grain in to the South China Sea and obstruction of justice”.
Schunemann, en Alemania en “Acercamiento crítico sobre la ciencia penal en Alemania”, GA 1995,
201, y Marinucci/Dolcini en Italia, RD (UCN) 8 (2001), 231 (244) ambos citados por Hernández, en
Perspectivas…, op.cit. p. 107 con Notas 22 y 23, habían puesto el acento sobre reacciones detectadas en
sus países cuando la pena privativa de libertad y el problema de la cárcel, empezaron a estar más cerca de
la delincuencia no convencional, al escribir el primero: “Y no es quizás casual que se haya iniciado una
campaña de opinión –que de por sí merece consideración- en contra de la pena privativa de libertad, en el
momento en que se ha perfilado el riesgo de que las puertas de la cárcel podrían abrirse no sólo para las
clases más débiles, sino que inesperadamente, también para los exponentes del mundo de la economía y
de las finanzas” (el destacado es nuestro.
También sobre este particular, en Chile, Miguel Soto Piñeiro, ha comentado que a su juicio estas
manifestaciones de nuevos mandatos de criminalización constituirían ejemplos de ampliación o expansión
del Derecho Penal a “bolsones tradicionales de impunidad”, pero que no pueden desconocer la vigencia
ante todo de los presupuestos garantísticos de toda tipificación interna ajustada al Derecho Penal Clásico.
Me quedo con esta conclusión luego de oír su opinión en la Jornada del 04.08.2005, en Honor a Bustos ya
indicada, y en una conversación en la que le pedí autorización para citarlo, de hace pocos días.
29 Vid.fvr desde una perspectiva del Análisis Económico del Derecho Penal y de las sanciones penales en
USA, Keith N. Hylton, “The Theory of penalties and the Economics of Criminal Law”, Boston University
School of Law, Review of Law & Economics, 2005, y también al incluir el análisis de Philbrick “In the
heart of the sea: The tragedy of the Whaleship Essex”, New York, Penguin Group (USA) Inc. 2000, cuando
plantea su tesis y dice: This paper presents a model of penalties that reconciles the conflicting account
of optimal punishment by Becker who argued penalties shoot internalize social costs, and Posner, who
suggested that penalties shoot completely deter offenses… I use the model to generated a positive account
of the function and scoup of criminal law doctrines, such and intent, necessity, and rules governing the
distinction between torts and crimes. The model is also consistent with the history of criminal penalties set
out by Adam Smith”
31
Criminalización en el Negocio Marítimo. De la Responsabilidad del Naviero,
Operadores y Agentes de Naves. Nuevas Tendencias del Derecho Penal
30 El Art. 297 StB, contiene en el Derecho Alemán, la norma de Derecho interno que sanciona las actuaciones
dolosas o imprudentes del Capitán de una nave, que con ello causa daño a ésta, a los intereses del Armador,
o a terceros. Por su supuesta inutilidad o insuficiencia, ha generado críticas como las expuestas por el
Profesor de Göttingen, Ralf Krack, en Wistra 21, 15.03.2002 (colaboración de Abanto, en su visita a Viña
del Mar, agosto de 2005).
31 Un grupo de casos, exposiciones prácticas y argumentos de defensa y justificación de los operadores no
jurídicos, en USA y U.K, puede seguirse en Fairplay Magazine, (www.fairplay.co.uk) desde abril 2004
hasta octubre 2005
32 Hooper, David, Special Report, en Fairplay Magazine, 34, 06.10.2005.
33 Otras manifestaciones curiosas de posible “Criminalización” a la moderna en el Derecho Penal Chileno
vigente, sobre las cargas y el transporte de ellas, son el tratamiento en el ámbito Latinoamericano de las
figuras de apropiación indebida y hurto calificado del Capitán, de los Arts. 470-1; 470 Nº 2, 447 Nº 4 del
Código Penal Chileno, ya que si la carga no llega a puerto o no es entregada, se han visto casos en que
se han ejercido acciones penales conjuntamente con medidas cautelares (como el arraigo de la nave) y la
rendición de prueba anticipada del Capitán u oficial extranjero, lo que ciertamente ha determinado una
salida alternativa más rápida que el reclamo de carga, a través de un acuerdo reparatorio del Art. 241
del CPP, encerrando verdaderas “gold giddens actions” o “acciones encubiertas destinadas a conseguir
dinero”. También se sabe de casos similares en la costa Oeste Norteamericana, Ecuador y Perú.
FUENTES CONSULTADAS
a) Fuentes Bibliográficas
ABANTO, Manuel. Derecho Penal Económico. Parte Especial. Lima: Idemsa, 1999.
BERGALLI. El Nuevo Paradigma Criminológico de la Exclusión, estos citados por Cancio Meliá, Manuel en
La expulsión de ciudadanos extranjeros sin residencia legal (Art. 89 Código Penal), p. 187, con Nota 21, en
Homenaje al Profesor Dr. González Rodríguez Mourullo, Thomson, Civitas, España 2005.
JAKOBS Günther. Derecho Penal del Enemigo. Traducido por Civitas. Madrid: 2003.
________. La Ciencia del Derecho Penal ante las Exigencias del Presente. UE Colombia, Nº 24, 2000, en
traducción de Teresa Manso Porto. UEC, 2000.
KEITH N. Hylton. The Theory of Penalties and the Economics of Criminal Law. Boston University School of
Law. Review of Law & Economics. 2005.
KÜNSEMÜLLER, Carlos. ¿Tiene un Futuro el Bueno, Viejo y Decente Derecho Penal Liberal?. Nuevas
tendencias del Derecho, Facultad UCh, Lexis-Nexis, 2004.
32
Juan Carlos Manríquez R.
________. Delitos de Hurto y Robo: Una reforma inaplazable en el Código Penal Chileno. El penalista liberal,
homenaje a Manuel de Rivacoba y Rivacoba, Buenos Aires. Hammurabi. 2004.
MANRÍQUEZ, Juan Carlos. El Fraude Tributario. Uso malicioso de débito/crédito IVA. Análisis penal en el
Derecho chileno. UV, Memoria. 1991.
________. Omisión propia y posición de garantía por cualificación en el rol del sujeto activo. Lavado o
blanqueo culposo de bienes o activos de origen ilícito en la Ley Nº 19.913. XVI Congreso Latinoamericano de
Derecho Penal y Criminología, Lima, Perú, publicado en el Libro de Ponencias, Universidad Nacional Mayor
de San Marcos. 2004.
SCHÜNEMANN, Bernd. Del Derecho Penal de la Clase Baja al Derecho Penal de la Clase Alta. ¿Un cambio
de paradigma como imperativo moral?, y también él mismo en temas actuales y permanentes del Derecho
Penal después del milenio, Madrid. Tecnos. 2002.
SILVA SÁNCHEZ, Jesús María. La expansión del Derecho Penal. Aspectos de la política penal en las
sociedades post-industriales, Madrid: Civitas. 1999.
UGALDE PRIETO, Rodrigo y Rodríguez Oro, Sergio. Delito Tributario y Reforma Procesal Penal. Lexis-
Nexis. 2002.
ULRICH Beck. La Sociedad del Riesgo: Hacia una nueva modernidad, Frankfurt. 1986.
b) Fuentes Documentales
ABANTO VÁSQUEZ, Manuel. El Derecho Penal en una Economía de Mercado. Influencia de la integración
económica y la globalización. Seminario Internacional, UNAB. Viña del Mar. 2005.
CANCIO MELIÁ, Manuel. Aproximación a la Teoría de la Imputación Objetiva. XVI Congreso Latinoamericano
de Derecho Penal, Lima. 2004, Libro de Ponencias y Apartado.
CARNEVALI RODRÍGUEZ, Raúl. ¿Es el Derecho Penal que viene? Semana Jurídica 192. Lexis-Nexis.
2004.
MANRÍQUEZ, Juan Carlos. Caen los Dogmas en la Reforma Procesal Penal Chilena. En: Revista de Derecho
de la Pontificia Universidad de Valparaíso, XXVI. 2005, Semestre I.
________. Delitos de Blanqueo y Lavado de Activos, en el Marco de Operaciones Sospechosas. Notas sobre
la Ley Nº 19.913 que crea la Unidad de Análisis Financiero (UAF). En: Revista Escuela Derecho Universidad
del Mar. 2005.
PIEDECASAS, José Ramón. Derecho Penal del Enemigo. La expansión en la respuesta penal, Semana
Jurídica Nº 256, Lexis-Nexis. 2005.
ROXIN, Claus. Autoría y Dominio del Hecho. Citado por Abanto en Autoría y participación y la Teoría de los
delitos de infracción del deber, En: Revista Penal Nº 14, Jul./ 2004.
33
34
La Cooperación Internacional
en la Lucha Contra el Terrorismo
35
36
La Cooperación Internacional
en la Lucha Contra el Terrorismo
37
La Cooperación Internacional en la Lucha Contra el Terrorismo
38
Fernando Díaz Colorado
representado por los Estados Unidos y que es una de las razones que alimentan
el terrorismo, por considerarlo incapaz de permitir la autodeterminación y au-
tonomía de los pueblos en la tarea por imponer el modelo político y económico
neoliberal globalizado, que desconoce la diversidad y alteridad del complejo
mundo de lo humano.
Para Ralf Dahrendorf,6 cinco años después de los atentados a las torres ge-
melas en Nueva York, y al Pentágono en Washington, en los Estados Unidos, se
implementó la denominada “Ley Patriot”, que produjo un efecto general ero-
sionando los grandes pilares de la libertad como el Habeas Corpus, el derecho
a acudir a un tribunal independiente cuando el Estado priva a un individuo de
su libertad. Desde el principio, la cárcel en la bahía de Guantánamo se convirtió
en el símbolo de algo insólito: el encarcelamiento sin juicio de combatientes
ilegales a quienes se les priva de todos los derechos humanos. Esto ocasionó
que la libertad no fuera ya el derecho de las personas a definir sus propias vidas,
sino el derecho del Estado a restringir la libertad personal en nombre de una
seguridad que sólo el Estado puede definir, lo que genera una nueva forma de
autoritarismo de Estado. Es esto lo que ha permitido que países como Alema-
nia, consideren que el involucramiento en la lucha contra el terrorismo permite
el aumento de la amenaza de padecer actos terroristas. Incluso se ha planteado
un debate en relación a si el ataque terrorista a los Estados Unidos es realmen-
te un ataque a toda la humanidad. En términos generales la consideración de
estos planteamientos implica que desde el atentado terrorista, las libertades se
han visto menguadas y el lema de la lucha: “la defensa de la democracia” ha
recibido un daño muy grave y de tal magnitud, que ha sido mucho más fuerte el
golpe dado por los defensores de la democracia, que el impacto alcanzado por
los terroristas.
Es indispensable entonces, para lograr un entendimiento del terrorismo in-
dagar por sus raíces, antes de analizar e intentar comprender sus manifestacio-
nes y emprender una lucha con la colaboración internacional. Uno de los aspec-
tos del estudio actual del terrorismo, es que lo horroroso de sus consecuencias
ha impedido ahondar en las causas profundas de su surgimiento y su signi-
39
La Cooperación Internacional en la Lucha Contra el Terrorismo
40
Fernando Díaz Colorado
pero sí como un intento por comprender las razones del surgimiento de esta
abominable amenaza para la humanidad. En el texto “La guerra sin fin” La-
queur8 hace un pormenorizado estudio de los factores inherentes al terrorismo,
pero enfocado fundamentalmente en la concepción del fanatismo religioso y
nacionalista, que es el comportamiento que hace la diferencia frente a grupos
terroristas que tuvieron su origen en la época de la guerra fría en la lucha por
alcanzar el poder.
Desde otro punto de vista, el concepto de terrorismo no es necesariamente
una categoría reducida al campo de la lucha armada o de la ejecución de muer-
tes violentas y estallidos de aviones y bombas en ciudades del mundo, que
producen víctimas inocentes. Es necesario mirar en qué mundo nos encontra-
mos, qué conquistas hemos alcanzado en el campo del bienestar y la dignidad
humana. Es decir, en la tarea de alcanzar la civilización como aquel proyecto
dirigido, encaminado a que la humanidad alcance la mayor felicidad posible,
donde la igualdad esté dada por el reconocimiento de la diferencia y la autono-
mía. Las acciones terroristas para Mendoza,9 nacen de la consecuencia de un
mundo donde el mercado pretende dominar toda la cultura, la religión, la polí-
tica, la educación. Es decir, el imperio de la racionalidad del mercado. Tenemos
un nuevo fundamentalismo que se convierte en enemigo de la vida humana, el
fundamentalismo del mercado que ha dividido y polarizado al mundo entre los
que tienen y los que no tienen. Este fundamentalismo significa que nos guiamos
como sociedad por la vía de la maximización de la ganancia para beneficio de
mínimos sectores de la población mundial, sin considerar las consecuencias
que producen sus efectos intencionales y no intencionales. En su opinión es-
tamos ante la presencia de una de las formas de terrorismo más radicales en la
historia de la humanidad. La pedagogía del terrorismo para Mendoza,10 es una
pedagogía del castigo al culpable, pero en el caso de un mundo globalizado, su
objetivo es toda la humanidad, a todo aquel que atente contra sus principios.
Castigar para reparar, pero también castigar para prevenir, propagando de esta
manera el terror universal, como estrategia que usa como arma el miedo que
nos es imposible eliminar.
41
La Cooperación Internacional en la Lucha Contra el Terrorismo
42
Fernando Díaz Colorado
43
La Cooperación Internacional en la Lucha Contra el Terrorismo
del contenido material del cual los dialogantes deben partir. Todo
esto lo hizo fracasar el eurocentrismo de la modernidad ante las
culturas periféricas desde finales del siglo XV hasta el presente.”13
Para Isaac Enrique Pérez,14 economista mexicano, la globalización suele
presentarse como un proceso “novedoso, prometedor y salvador de los malefi-
cios de la humanidad”. Desde la perspectiva de la sociología del conocimiento,
el estudio de la globalización como ideología permite encarar el extremismo
del discurso globalista sintetizado en una sabiduría convencional cimentada y
fomentada por poderosas fuerzas e intereses, habiéndosele instalado entonces
como un paradigma montado sobre varias falacias, mitos o slogan, como que es
un fenómeno nuevo, homogéneo y homogeneizante que conduce a la democra-
cia, el progreso y el bienestar universal; que acarrea la desaparición progresiva
del Estado y que los actuales procesos de regionalización, tipo Tratado de Libre
Comercio de América del Norte (TLCAN), o son consecuencia de la globaliza-
ción, o inevitablemente conducen a ella.
Para Pérez,15 la globalización es un proceso de dominación y apropiación
del mundo. La dominación de estados y mercados, de sociedades y pueblos,
se ejerce en términos político-militares, financiero-tecnológicos y socio-cultu-
rales. La apropiación de los recursos naturales, la apropiación de las riquezas
y la apropiación del excedente producido se realizan desde la segunda mitad
del siglo XX de una manera especial, en que el desarrollo tecnológico y cien-
tífico más avanzado se combina con formas muy antiguas, incluso de origen
animal, de depredación, reparto y parasitismo, que hoy aparecen como fenó-
menos de privatización, desnacionalización, desregulación, con transferencias,
subsidios, exenciones, concesiones, y su revés, hecho de privaciones, margina-
ciones, exclusiones, depauperaciones que facilitan procesos macrosociales de
explotación de trabajadores y artesanos, hombres y mujeres, niños y niñas. La
globalización se entiende de una manera superficial, es decir, engañosa, si no
se le vincula a los procesos de dominación y de apropiación.
En opinión de James Petra,16 la globalización, como la hegemonía y el
concepto de centro-periferia no son adecuados. En primer lugar, es necesario
44
Fernando Díaz Colorado
comprender que lo que ejerce los Estados Unidos sobre el mundo no es hege-
monía, ya que entonces no tiene sentido el uso de la fuerza, por esta razón lo
que realmente ejerce es la dominación, que a su vez si puede ser explicada por
el uso que hace de la fuerza en los países del mundo donde hace presencia.
En cuanto a la globalización es bueno analizar, que si bien es cierto que las
barreras económicas se están flexibilizando y existen multinacionales, éstas no
tienen nacionalidad, el Estado está desapareciendo. El término globalización
no explica las relaciones de poderes entre los Estados, no explica por qué hay
multiplicación de la violencia, no explica la conquista y la resistencia. El ca-
pital no está flotando en todas partes, hay modelos de acumulación dirigidos a
capitalizar en los Estados Unidos. Hay transferencias en gran escala de dineros
lavados que van a Londres, Suiza e Israel. Por ende, estos capitales no son
autónomos, tienen una ubicación concreta y mantienen mecanismos de cola-
boración con las actividades del Estado imperial, que facilita la expansión de
las multinacionales. Por ello, las multinacionales no son autónomas. El Estado
no es autónomo. El Estado es esencial para el imperialismo, para la política de
expansión y conquista y la protección de los intereses de las multinacionales.
Se debe rechazar el concepto de globalización por el de uno más riguroso como
es el de imperialismo. Es por esto, que la política militarista sólo se puede en-
tender en el contexto del imperio económico.
Para Enrique Dussel, la lógica de la globalización en su fase actual parte
de la concepción del sistema-mundo, es decir, del sistema interregional (si por
región se entiende una alta cultura o sistema civilizatorio, por ejemplo: Chi-
na, India, Mesopotamia, etc.) en su fase actual, mundial, global o planetaria,
resultado de un proceso de cuatro estadios: a) en el primer estadio, el sistema
interregional estaba conformado por la estructura de las relaciones de la región
egipcio-mesopotámica, mientras la India, China y América aún no estaban di-
rectamente conectados; b) en el segundo estadio, el sistema interregional creció
comprendiendo desde el Mar Mediterráneo y el norte del África hasta el Medio
Oriente, la India y la China a través de las estepas euroasiáticas, hegemoni-
zando o teniendo por centro-conector el mundo persa o el helenístico; c) en el
45
La Cooperación Internacional en la Lucha Contra el Terrorismo
46
Fernando Díaz Colorado
de esos fines en nombre del mercado; si bien toda sociedad requiere de meca-
nismos “naturales” de poder basados en esta relación, en la realidad nos encon-
tramos con una sociedad desagregada, colapsada y asediada por la catástrofe
política de la ausencia de poder. El descrédito del Estado como conjunto de
instituciones que impulsan el orden de las sociedades se ha profundizado ante
la reconversión de la política en objeto comercial y ante la mercantilización y
privatización de la cosa pública por parte de los gobiernos y las cúpulas diri-
gentes de estas instituciones. El mercado como un poder real en la sociedad
ejerce su dominación de manera despótica, excluyente y represiva extendién-
dose de manera imperial sin cesar a todas las relaciones humanas, reprodu-
ciendo los estándares del miedo, la inseguridad, la competencia despiadada y
la violencia entre los individuos. Conjuntamente con el aparato gubernamen-
tal-guardián-policíaco-militar, buscan legitimarse y disfrazar sus intereses al
tratar de contener los bolsones de pobreza, a los enfermos, a los “bárbaros”, a
las étnias y a todos aquellos grupos sociales que rechazan las mercancías ca-
pitalistas. Sin embargo, esta contención es impulsada por el miedo inculcado
y del cual se alimenta todo poder, miedo que se instala como ley, como ley del
más fuerte y sin esencia jurídica. El neoliberalismo según Valenzuela Feijóo,18
es un desarrollo económico distinto al propuesto por los grandes economistas
clásicos; estos tenían una visión macro, dinámica y estructuralista, concebían
al mercado libre como uno de auténtica libre competencia, con movilidad de
capitales y tendencia a la igualación de las cuotas de ganancia, atacaban a los
grandes monopolios, su postura en general fue radical y revolucionaria; mien-
tras que los neoclásicos como Milton Friedman, Hayek, Lucas, etc., tienen una
visión micro, estática y no estructural, defienden los mercados oligopólicos y
los monopolios, y su postura es conservadora y reaccionaria. Pregonan también
que el progreso económico sólo se logra con la apertura de los mercados y con
la postura de los Estados a dejar libres a los individuos para que compitan, se
promete un aumento de la productividad y una generación de riqueza sin poner
trabas al mercado. En términos políticos, el neoliberalismo como doctrina se
basa en la democracia, en el respeto a la libertad privada de los ciudadanos; tie-
47
La Cooperación Internacional en la Lucha Contra el Terrorismo
48
Fernando Díaz Colorado
49
La Cooperación Internacional en la Lucha Contra el Terrorismo
50
Fernando Díaz Colorado
son los mismos que sufren carencias en las otras dimensiones de la ciudadanía.
Los problemas centrales en este plano son la pobreza y la desigualdad, que no
permiten que los individuos se expresen como ciudadanos con plenos derechos
y de manera igualitaria en el ámbito público, y erosionan la inclusión social.
Los indicadores muestran que todos los países son más desiguales que el pro-
medio mundial. En 15 de los 18 países estudiados más del 25% de la población
vive bajo la línea de la pobreza y en 7 de ellos más de la mitad de la población
vive en esas condiciones; ello incluso aunque en 12 de los países la pobreza
disminuyó. El alza en los índices de desocupación durante la década de los 90,
es una de las más grandes carencias de América Latina. La protección social
de las trabajadoras disminuyó y aumentó el empleo informal. En general de
baja calidad y escasa utilidad social e insuficiente para generar una integración
social que garantice un mínimo de bienestar.
La crisis política se expresa en el divorcio entre los problemas que los
ciudadanos reclaman resolver y la capacidad política para enfrentarlos.25 Para
algunos, la democracia será inviable mientras no se resuelvan los problemas de
la pobreza y se logre un mínimo aceptable de igualdad. Sin embargo, el informe
sostiene que sólo con más y mejor democracia las sociedades latinoamericanas
podrán ser más igualitarias y desarrolladas, ya que sólo en las democracias los
que carecen de niveles mínimos de bienestar y sufren las injusticias de las des-
igualdades, pueden reclamar, movilizarse y elegir en defensa de sus derechos.
Como lo señala Pierre Rosanvallon en el mismo informe, la ciudadanía carac-
teriza una condición de inclusión en una ciudadanía de ciudadano. Pero esta
última no puede ser definida simplemente por el derecho al voto y la garantía de
ver protegido cierto número de libertades individuales. La ciudadanía se carac-
teriza también por la existencia de un mundo común. Tiene necesariamente en
otros términos una dimensión societal. La democracia es más que un conjunto
de instituciones y principios políticos. La democracia para alcanzar su plena
realización requiere de personas capaces de decidir y argumentar, pero una vez
sus condiciones materiales de existencia le proporcionen una vida digna, que le
posibiliten vivir de acuerdo con el proyecto que ésta establezca.
51
La Cooperación Internacional en la Lucha Contra el Terrorismo
52
Fernando Díaz Colorado
que los beneficia como el grupo de los 7 y que excluye a sus víctimas. La ética
deviene así como el último recurso de una humanidad en peligro de auto-ex-
tinción. Sólo la corresponsabilidad solidaria, desde el criterio de verdad, vida-
muerte puede ayudarnos a salir airosos de esta encrucijada.28
Ante este panorama es importante señalar las conclusiones a las que se ha
llegado en los diferentes foros internacionales sobre como enfrentar el terroris-
mo desde una estrategia global. En la Cumbre Internacional sobre Democracia,
Terrorismo y Seguridad, celebrada en el mes de marzo de 2005 en Madrid, la
cooperación internacional, recomendaba mucha democracia, educación y ayu-
da al desarrollo económico de los países más desfavorecidos como los mejores
instrumentos para derrotar el terrorismo. Con la asistencia de Hamid Karzai,
Presidente de Afganistán, Miguel Ángel Moratinos, Ministro de Asuntos Ex-
teriores de España, Kjell Magne Bondevik, Primer Ministro de Noruega, Ja-
vier Solana, alto representante de la política exterior europea, Enrique Iglesias,
Presidente del Banco Interamericano de Desarrollo y el financista Jorge Soros
Presidente de la Sociedad Abierta, las conclusiones del encuentro plantearon
las siguientes recomendaciones para una acción conjunta de cooperación inter-
nacional: 1. Realizar una concertación global contra el terrorismo. 2. Avanzar
en la construcción de una definición de terrorismo que facilite una acción más
eficaz. 3. Elaborar una agenda de lucha contra el terrorismo que combine la
eficacia con respecto de los valores democráticos. 4. Reforzar el sistema mul-
tilateral, a través de las resoluciones 1.373 y 1.377 del Consejo de Seguridad
de Naciones Unidas, que permiten que el Comité contra el Terrorismo, depen-
diente del Consejo sea un instrumento útil, para apoyar e incluso forzar la lucha
contra el terrorismo por parte de todos los estados miembros. Sin embargo, esto
no alcanza a satisfacer la creación de un entorno global favorable a esta lucha.
Para Von Hippel, investigadora del King’s College de Londres,29 lo ideal sería
un enfoque multidimensional coordinado que contenga una combinación de
medidas militares, policiales, legales, de servicios de inteligencia y de control
financiero, y una visión y voluntad claras de combatir la ideología y el entorno
favorable en el que nace el apoyo a las redes terroristas. Este tipo de respuestas
53
La Cooperación Internacional en la Lucha Contra el Terrorismo
54
Fernando Díaz Colorado
55
La Cooperación Internacional en la Lucha Contra el Terrorismo
NOTAS DE REFERENCIA
56
Fernando Díaz Colorado
FUENTES CONSULTADAS
a) Fuentes Bibliográficas
b) Fuentes Documentales
BELIKOW, J. Las Nuevas Amenazas. Conferencia en las XXV Jornadas Internacionales de Confrontación en
Seguridad. Bogotá: 2004.
DUSSEL, E. La verdad consensual o hermenéutica y la no-verdad de las víctimas. En: Conferencia Universidad
Autónoma de México. 1998.
VALENZUELA, J. F. Cinco dimensiones del modelo Neoliberal. En: Revista Política y Cultura. Universidad
Autónoma Metropolitana, Xochimilco, Nº 8. 1997.
YOCELEVZKY, R. Privatizaciones, ideología y modelo de desarrollo, En: Revista Iztapalapa Nº 38. 1996.
c) Fuentes Electrónicas
CHOMSKY, N. Terrorismo y respuesta justa. Artículo tomado de la Web. Traducción de Juan Mari Madarriaga
Znet. 18 de Enero de 2003
57
58
El Nuevo “Gulag” Internacional
59
60
El Nuevo “Gulag” Internacional
61
El Nuevo “Gulag” Internacional
también un hito importante sobre cómo, desde las mismas filas de los ideólogos
del liberalismo, se comienza a asumir abiertamente la necesidad de reconocer
el fracaso y –contradictoriamente- el rescate utópico (renovación de la ilusión
liberal de lograr la cuadratura del círculo) de la idea perdida de progreso del
mundo capitalista occidental a partir de seguir esperanzados en alcanzar una
soñada democracia sustentada en la existencia de instituciones básicas justas:
El predominio del enfoque de la agregación, con su reducción de la
democracia a un conjunto de procedimientos para el tratamiento del
pluralismo de los intereses grupales, es lo que empezó a cuestionar
la nueva ola de la teoría política normativa, inaugurada por John
Rawls en 1971, con la publicación de su libro Teoría de la Justicia.
[...] Desde su punto de vista, el futuro de la democracia liberal de-
pende de que logre recuperar su dimensión moral. Pese a no negar
“el hecho del pluralismo” (Rawls) y la necesidad de abrir un espa-
cio para los muy diversos conceptos del bien, los demócratas deli-
berativos afirman que sin embargo es posible alcanzar un consenso
más profundo que el de un mero acuerdo sobre los procedimientos,
un consenso que podría calificarse como “moral”.1
Desde esta perspectiva, el presupuesto inicial de esa crítica interna que in-
tenta revitalizar al liberalismo, frente a lo que consideran una profunda crisis de
legitimidad de las instituciones democráticas occidentales contemporáneas, co-
mienza postulando la imposibilidad de cualquier idea universal del bien (en un
claro rescate del presupuesto ontológico del individualismo). Ningún Estado
democrático, dice Rawls, puede atender a una idea del bien sin que se violente,
en el mismo acto ese collage de “bienecitos” que de alguna podamos ilustrar
con la ciudad de Nueva York.
En tal sentido, uno de los problemas políticos por excelencia para la concep-
ción liberal en las sociedades democráticas actuales lo constituye la necesidad
de reformular un criterio de estabilidad política, y de fundamentación -normati-
va- de lo político mismo como espacio de lo público, que en el marco de lo que
Rawls llama un pluralismo razonable, mantenga la unidad y los fundamentos
62
Xiomara Martinez Oliveros
de justicia de esa sociedad. ¿Cómo puede existir por tiempo prolongado una
sociedad justa y estable de ciudadanos libres e iguales profundamente dividi-
dos por doctrinas razonables de índoles religiosas, filosóficas y morales?, esta
es la pregunta clave que expone en su texto Qué es el liberalismo (1995:19).
¿Cuáles son, en esas condiciones de fragmentación, los términos justos de la
cooperación?
Lo primero que tenemos que destacar acá es la reintroducción del concepto
de justicia bajo el supuesto de lo razonable, como aquella condición moral
que nos permite tener un sentido de justicia así como una concepción del bien
(bien político) no derivable de lo racional, con el mismo estatus, pero de otra
naturaleza. Sin dudas, el concepto de justicia en Rawls expresa el propósito de
fundamentar moralmente, desde la tradición contractualista, un orden social
y político caracterizado fácticamente por las desigualdades y las diferencias.
Sin abandonar el liberalismo, vuelve a proponer, no obstante, la recuperación
de la dimensión moral como substrato de una nueva relación inseparable entre
los derechos liberales (como criterio de racionalidad) y la legitimidad demo-
crática.
El velo de la ignorancia funciona entonces escondiendo a las personas y
dejando sólo los cuerpos vacíos de todo valor que no sea el de la cultura del
mercado. En este constructivismo político se homogeiniza la humanidad he-
terogénea, desde un concepto de justicia que sólo alimenta la ilusión política
moderna de autonomía y universalidad, al mismo tiempo que se pretende con-
validar las pasiones y compasiones individuales de una sociedad que se cree
“bien-ordenada”. Por lo tanto (como ya hemos dicho en el texto de nuestra
autoría: Política para los nuevos tiempos (2001: 105), “en el marco de una
sociedad que es pensada por Rawls -y otros- sin los ideales políticos modernos,
pero que tampoco se piensa con un proyecto societal distinto al de la propia
modernidad burguesa del liberalismo político; frente a la paradoja de la plura-
lidad y la diferencia, pero más que eso, de la trágica realidad de las profundas
desigualdades inherentes a las lógicas de poder y privilegios sociales de un
mundo absolutamente mercantilizado, no estamos frente a alguna cosa distinta
63
El Nuevo “Gulag” Internacional
64
Xiomara Martinez Oliveros
los llamados derechos de crédito no puede tener jamás una solución política.
Es decididamente de una naturaleza no-política (queda confiado a un histori-
cismo economicista).
Obviamente, los subrayados, comillas y negrillas las pondremos en la pos-
tulación explicita de que la justicia no es un asunto que deba ser resuelto por la
política y, en consecuencia, no es de esto que se debe ocupar la democracia. Esta
es tal vez la razón por la cual muchos liberales han creído, y siguen creyendo,
que su versión de democracia puede funcionar perfectamente en ausencia de
una ciudadanía especialmente virtuosa, que los mecanismos institucionales y
procedimentales (tales como la separación de poderes, la estructura legislativa,
federalismo, etc.) sirven para frenar cualquier tendencia opresora y excluyente,
gracias a la correlación “espontánea” de fuerzas entre intereses individuales
privados. Sólo bastaría el acuerdo sobre principios políticos comunes, útiles
para mantener la unidad social.
Pero también, como señala Hill Kymlicka, en otra variante actual de recon-
figuración del liberalismo desde la perspectiva del multiculturalismo, es im-
prescindible contar con un sentimiento de identidad nacional compartida (cfr:
La Política vernácula, 2003:366).
Más concretamente, habla Kymlicka de una suerte de integración orgánica,
que conceptualiza como cultura societal:
Una cultura concentrada en un territorio, centrada en torno a una
lengua compartida y utilizada por una amplia gama de institucio-
nes sociales, tanto en la vida pública como en la privada (colegios,
medios de comunicación, derecho, economía, gobierno, etc.)...
implica una lengua e instituciones sociales comunes, más que
creencias religiosas comunes, hábitos de familia o estilos de vida
personales (:39-40).
Y que (es preciso subrayar esto) “ha sido el resultado de políticas estatales
deliberadas”. De estos dos elementos -los principios/procedimientos políticos
comunes y la pertenencia a una cultura societal- se deduciría la obligación mo-
ralmente vinculante, el asentimiento de la identidad y la conformidad social.
65
El Nuevo “Gulag” Internacional
66
Xiomara Martinez Oliveros
67
El Nuevo “Gulag” Internacional
68
Xiomara Martinez Oliveros
por la ley y el orden (es decir, la protección del cuerpo, de la propiedad privada
y del hogar) y el problema del orden se mezcla continuamente con la presencia
problemática de minorías y mayorías étnicas, raciales o religiosas identificadas
con lo “anormal”:
Esta involución de los procesos de democratización se manifiesta
en la limitación de los ámbitos políticos abiertos a la intervención
“normal”, en los sistemas representativos, de la “soberanía popu-
lar”; en la progresiva subordinación de las libertades y garantías
individuales a la “seguridad” del funcionamiento de los aparatos
de poder; en la pérdida de la centralidad del parlamento en el sis-
tema político; en el creciente carácter “político” de las decisiones
administrativas o estatalmente subalternas -por desplazamiento a
la administración de funciones fundamentales del Estado-; en la
transmutación en curso de los partidos políticos tradicionales en
sindicatos de intereses corporativos y en su escasa democracia in-
terna; en la intervención conformadora de los mass media en el
momento electoral de expresión de la soberanía, etc. Estas mani-
festaciones dibujan un autoritarismo creciente y sutil, que elude a
los procedimientos democráticos de toma de decisiones y vuelve
anómica la vida política.5
Aquí se radicaliza el hecho de que los derechos humanos cada vez más se
divorcian (aunque nunca ha preexistido la correspondencia, como decíamos al
principio) de los derechos políticos –derechos que sólo algunos que si parecen
ser considerados humanos-. El asunto es, precisamente, como la política de
seguridad (policial) desplaza aceleradamente y sin ningún recato, la política
de reconocimiento de los derechos humanos universales como fundamento y
sustancia ética del Estado.
Al igual que Auschwitz en su momento mostró el horror de seres exter-
minados, en el corazón mismo de la civilización occidental, por la mano de
la barbarie más atroz (un impacto mortal contra la idea de Razón moderna y
su progreso), expresión extrema de la indecencia, es decir, de la carencia total
69
El Nuevo “Gulag” Internacional
70
Xiomara Martinez Oliveros
71
El Nuevo “Gulag” Internacional
72
Xiomara Martinez Oliveros
73
El Nuevo “Gulag” Internacional
74
Xiomara Martinez Oliveros
75
El Nuevo “Gulag” Internacional
76
Xiomara Martinez Oliveros
NOTAS DE REFERENCIA
77
El Nuevo “Gulag” Internacional
78
Xiomara Martinez Oliveros
FUENTES CONSULTADAS
a) Fuentes Bibliográficas
AMADEO, Javier y Moréis, Sergio. Republicanismo y Marxismo. Traducción de: Atilio Borón, Filosofía
Política Contemporánea, Buenos Aires: CLACSO. 2003.
BORÓN, Atilio. Filosofía Política Contemporánea. Controversias sobre Civilización, Imperio y Ciudadanía.
Buenos Aires: CLACSO, 2002.
BRUNNER, José Joaquín. Globalización Cultural y Posmodernidad. Santiago: Fondo de Cultura Económica,
1999.
CAPELLA, Juan Ramón. Los Ciudadanos Siervos. Madrid: Editorial Trotta, 1993.
COHÉN, G.A. ¿Igualdad de qué? Sobre el bienestar, los bienes y las capacidades. Citado por: Martha C.
Nussbaum y Amartya Sen (compiladores), La calidad de vida, México, Fondo de Cultura Económica. 2000.
COHÉN, Jean L. y Arato, Andrew. Sociedad Civil y Teoría Política. México: Fondo de Cultura Económica,
2001.
CORTINA, Adela. Ética Aplicada y Democracia Radical, Madrid: Ed. Técnos, 1997.
CRUZ, Manuel y Vattimo, Gianni (Edits.) Pensar el Sujeto. Madrid: Taurus, 1998.
DE SOUSA SANTOS, Boaventura. El Milenio Huérfano. Ensayos para una nueva cultura política, Madrid:
Ed. Trotta, 2005.
ESPÓSITO, Roberto. Filosofía Política o Pensamiento sobre la Política, Citado por: Martha Rivero
(compiladora): Pensar la Política, México: Instituto de Investigaciones Sociales, UNAM, 1990.
GARCÍA S., Lukes S. (Comp.) Ciudadanía: justicia social, Identidad y participación. Madrid: Siglo XXI
Editores, 1999.
79
El Nuevo “Gulag” Internacional
GIDDENS, Anthony. Política, Sociología y Teoría Social, Reflexiones sobre el Pensamiento Social Clásico y
Contemporáneo, Barcelona: Paidós, 1998.
GRÜNER, Eduardo. El Fin de las Pequeñas Históricas. De los estudios culturales al retorno (imposible ) de lo
trágico, Buenos Aires: Paidós, 2002.
HABERMAS, Jürgen. Más allá del Estado Nacional, Madrid: Editorial Trotta, 1997.
HARDT, Michael y Negri, Antonio. El trabajo de Dionisos, Madrid: Ed. Akal, 2003.
HOLMES, Stephen. Las reglas mordaza o la política de omisión. Citado por: J. EIster y R. SIagstad,
Constitucionalismo y democracia, México: Fondo de Cultura Económica, 1999.
JAMENSON, Fredric y Zizek, Slavh. Estudios Culturales. Reflexiones sobre el multiculturalismo. Buenos
Aires: Ed. Paidós, 1999.
________. La política vernácula. Nacionalismo, multiculturalismo y ciudadanía. Barcelona: Ed. Paidós Ibérica,
2003.
MARRAMAO, Giacomo. El Crepúsculo de los Soberanos: Estado, sujetos, derechos fundamentales. Citado
por: Manuel Cruz, Gianni Vattimo (Eds.), Pensar en el Siglo, Madrid: Taurus, 1999.
MARTÍNEZ, Xiomara. Política para los Nuevos Tiempos. Una reflexión ético-política sobre la democracia.
Caracas: CIPOST- Tropykos, 2002.
MATO, Daniel (Comp.) Estudios Iatinoamericanos sobre cultura y transformaciones socíales en tiempos de
globalización, Caracas: Ed. CLACSO, 2001.
MONEDERO, Juan Carlos. Presentación. Conciencia de frontera: La teoría crítica posmoderna de Boaventura
De Sousa Santos, Citado por Boaventura De Sousa Santos, El Milenio Huérfano. Ensayos para una nueva
cultura política, Madrid: Ed. Trotta, 2005.
NUSSBAUN, Martha. Los Límites del Patriotismo. Identidad, pertenencia y ciudadanía mundial. Barcelona:
Ed. Paidós, 1999.
PUTNAM, Ruth. Comentario a objetividad y significado social. Citado por: Martha Nussbaum y Amartya Sen,
La calidad de vida, México: Fondo de Cultura Económica, 2000.
80
Xiomara Martinez Oliveros
RANCIERE, Jacques. Política, identificación y subjetivación. En: Benjamín Arditi (editor), El reverso de la
diferencia. Identidad y política, Caracas: Nueva Sociedad, 2000.
RÓDEl,V., Frankenberg, G. y Dubiel, H. La Cuestión Democrática, Madrid: Huerga y Fierro Ed., 1997.
RUBIO CARRACEDO, José. Educación Moral, Postmodernidad y Democracia, Madrid: Ed. Trotta, 1996.
SENNETT, Richard. La Calle y la Oficina: dos fuentes de identidad. Citado por: GIDDENS A y W.Hutton
(eds.) En el límite. La vida en el capitalismo global, Tusquets editores.
VILLAVICENCIO, Susana. La (im)posible República, citado por: Afilio Borón, Filosofía política
contemporánea, Controversias sobre civilización, imperio y ciudadanía. Buenos Aires: CLACSO, 2002.
b) Fuentes Documentales
BOVERO, Michelángelo. Debate Filosófico y Realidad Política (Entrevista). En: Revista Internacional de
Filosofía Política, N° 22, Madrid. Dic. 2003.
CONTRERAS N., Miguel A. Impensando la ciudadanía moderna: alteridad y racismo en el sistema mundial.
Citado por: Cuadernos del CENDES, Caracas, Año 20, N° 54, tercera época. Sep.-Dic. 2005.
D’AMARIO, Daisy. Figuras de masas y multitudes. En: Revista RELEA, N° 19, Caracas, UCV-CIPOST.
Ene.-Jun. 2004.
HOPENNHAYN, Martín. Nuevas formas de ser ciudadano: ¿la diferencia hace la diferencia?. En: Revista
RELEA, N° 11, Caracas, UCV-CIPOST. 2000.
MANCILLA, HCF. El dilema de la identidad nacional y del desarrollo autóctono en una era de normas y metas
universalistas. En: Revista Estudios Políticos, N° 17, Medellín, Jul.-Dic. 2000.
MIRES, Femado. Hay una Vida Después de la Globalización. Ponencia Presentada al II Congreso Europeo de
Latinoamericanistas, Universidad de Halle-Wittenberg (Alemania), 4-8 Sep. 1998. (Mimeo).
81
El Nuevo “Gulag” Internacional
MOUFFE, Chantal. La Política y los Límites del Liberalismo. En: Revista La Política, N° 1, Barcelona, Paidós.
1996.
ORTIZ, Renato. Globalización, modernidad y cultura. En: Revista Metapolítica, N° 5, México. Ene.-Mar.
2001.
QUIJANO, Aníbal. El laberinto de América Latina: ¿hay otras salidas?. En: Revista RELEA, N° 19, Caracas,
UCV-CIPOST, Ene.-Jun. 2004.
QUIJANO, Aníbal. Un fantasma Recorre al Mundo. En: Revista Estudos AvanCados, Universidad de Sao
Paulo, N° 34, Vol. 12, Sep.-Dez. 1998.
TELLEZ, Magaldy. Desde la alteridad. Notas para pensar la educación de otro modo. En: Revista RELEA,
N° 5, Caracas, CIPOST. 1998.
VILLORIO, Luis. Sobre el principio de la injusticia: la exclusión. En: Revista Isegoría, N° 22. 2000.
WOLIN, Sheldon. Democracia, Diferencia y Reconocimiento. En: Revista La Política, N° 1, Barcelona, Paidós.
1996.
82
Imputación Objetiva:
Consideraciones acerca
de su Ámbito de Aplicación
83
84
Imputación Objetiva:
Consideraciones acerca
de su Ámbito de Aplicación
I. INTRODUCCIÓN
85
Imputación Objetiva: Consideraciones acerca de su Ámbito de Aplicación
86
Migdalia Mercedes Vásquez Jiménez
87
Imputación Objetiva: Consideraciones acerca de su Ámbito de Aplicación
Una tendencia doctrinal afirmó que ciertamente así era, consideraron que la
causalidad era la base para atribuir un resultado a una acción. Esa relación cau-
sal era determinada con base a la Teoría de la Equivalencia de las Condicio-
88
Migdalia Mercedes Vásquez Jiménez
89
Imputación Objetiva: Consideraciones acerca de su Ámbito de Aplicación
90
Migdalia Mercedes Vásquez Jiménez
91
Imputación Objetiva: Consideraciones acerca de su Ámbito de Aplicación
Sin duda, creemos que el resultado de una conducta tiene un valor al igual
que ella, ese resultado consiste en la lesión al Bien jurídico protegido o su
puesta en peligro, por eso sostenemos que debe extenderse el ámbito de apli-
cación de la Imputación Objetiva a delitos distintos a los de resultado material,
pero ello puede explicarse mejor respondiendo a si el resultado causado por el
acto ha lesionado el Bien Jurídico tutelado o si lo ha puesto en peligro, y si así
ha sucedido, esa conducta y su resultado se hacen imputables.8
El autor Bustos Ramírez, ha dicho que el tipo penal protege bienes jurí-
dicos, lo que “implica la concreción de determinada situación que encierra
un proceso de interacción entre sujetos”.9 Esto requiere de un juicio de valor.
Determinar la situación típica no significa un proceso de simple subsunción,
sino de valoración. Según él, la causalidad no da paso a ese juicio valorativo,
por eso ella no puede ser fundamento de la Teoría del Delito, de lo que se trata
es de establecer criterios de atribución de una situación típica que sí da cabida
a valoraciones.
En ese orden de ideas afirma que, lo importante en el injusto no es la acción
sino el Bien Jurídico que se protege. El resultado y la imputación constituyen
entonces un problema de antijuricidad y, de lo que se trata de resolver es si
¿el resultado que concreta una lesión o puesta en peligro del bien jurídico es
imputable objetivamente a una realización típica?. Desde su perspectiva, la
Imputación Objetiva gira alrededor del Principio de Lesividad, ella pretende
comprobarla, si esto es así, se aplica entonces a todos los delitos y no sólo a los
de resultado material.10
Por su parte, la doctrina alemana ha considerado que, la Imputación Objeti-
va es la esencia del Injusto.
Roxin ha desarrollado las ideas de Honig prescindiendo de la causalidad
como elemento referencial dentro de la discusión de la Imputación Objetiva.
Para este autor, se trata de buscar una estructura que tenga carácter normativo
y no ontológico del concepto de acción, y sostiene que el problema de la Impu-
tación Objetiva consiste en el establecimiento de criterios que permitan atribuir
un resultado a una persona.
92
Migdalia Mercedes Vásquez Jiménez
93
Imputación Objetiva: Consideraciones acerca de su Ámbito de Aplicación
tación Objetiva?, o si acaso ¿Es ella aplicable sólo a los delitos de resultado
material? dependerá entonces de cómo ella sea concebida.
Si se afirma que la Teoría de la Imputación Objetiva es un correctivo de la
Teoría Causal, es evidente que, como esta última sólo es aplicable a los delitos
de resultado material, entonces sólo a ellos sería aplicable su correctivo, pero
como se ha expuesto, algunos autores le han excluido ese carácter y de esa
manera se ha extendido su alcance a otros delitos.
Efectivamente, la Teoría de la Imputación Objetiva nace como un correc-
tivo, ¡y es que de algo tenía que partir!, pero ella se ha desarrollado buscando
una solución al problema del fundamento de la responsabilidad penal al que
ha sabido aportar distintas consideraciones, pero, sin duda, después de la Im-
putación Objetiva debe venir algo que, aunque ha dado con ésta sus primeros
pasos, no se ha concretado aún en la dogmática jurídico penal. La Imputación
Objetiva no es el final del cuento sino sólo parte de su evolución.
No podríamos afirmar que la Imputación Objetiva es un correctivo de la
causalidad y por tanto sólo aplicable a los delitos de resultado material, ella
nace o, mejor dicho, renace a partir de ella, pero luego cobra vida y aún se
desarrolla. Insistimos en que su aplicación puede extenderse a otros tipos de
delitos distintos a los de resultado material y ello se debe a que el resultado
debe entenderse no materialmente sino valorativamente y decir esto, es afirmar
que el resultado se encuentra en todos los delitos y que por tanto, la Imputación
Objetiva es aplicable a todos ellos. Dependerá entonces de la posición que se
adopte y decidir esto último estará determinado por lo que se crea o no es lo
más correcto o acertado.
Creemos que la finalidad del tipo es brindar protección a determinados Bie-
nes jurídicos que, por su relevancia para el Derecho Penal, abre paso a la apli-
cación del Ius Puniendi del Estado. Ahora bien, el problema de la asignación
de responsabilidad penal, no está supeditado a la determinación de un proceso
causal que, por simple operación lógica, permita saber cuál ha sido la causa
del efecto, más que eso, se trata de que un acto desvalioso ha ocasionado una
lesión al Bien Jurídico o lo ha puesto en peligro y, por lo tanto, es ese resultado
94
Migdalia Mercedes Vásquez Jiménez
V. Conclusiones
95
Imputación Objetiva: Consideraciones acerca de su Ámbito de Aplicación
96
Migdalia Mercedes Vásquez Jiménez
protegido por una norma penal, con su acción puede provocar un resultado que
puede o no evidenciarse en el mundo exterior (como algo que a su vez puede
estar separado temporalmente de la acción o no), ese resultado será: la lesión
que se ha causado o el peligro en el que se ha puesto al Bien jurídico protegido.
De esta manera puede explicarse más acertadamente por qué un delito de mera
actividad, por ejemplo, igualmente, se hace imputable: por la causación de un
resultado valorado.
Esto nos permite hacer críticas a la teoría que sostiene que la Imputación
Objetiva tiene un alcance limitado, restringido sólo a los delitos de resultado
material, siendo lo correcto que ella se extienda a todo tipo de delito en cuanto
que, la Imputación Objetiva, tiene por fin la atribución de ese resultado valo-
rado y éste está presente en delitos de cualquier especie.
Consideramos que uno de los errores en los que se ha incurrido con respecto
a la Imputación Objetiva, es el considerar que ella es un criterio de determi-
nación de la situación típica. Como se ha dicho, ella pretende determinar si el
actuar de un sujeto ha causado la afección a un Bien Jurídico protegido penal-
mente y estudiar la relación de esa afección con la conducta infractora de lo
dispuesto por la norma. Ella no pretende descubrir si una conducta es típica o
no, sino que se traslada al ámbito de lo antijurídico.
El establecer si una conducta afecta al Bien jurídico penalmente relevante,
requiere de una valoración que no se da en el proceso de adecuación típica sino
en la antijuricidad, por eso, quienes se han valido de criterios que determinan la
situación típica para hacer imputable un resultado, se han olvidado de la finali-
dad de la Imputación Objetiva y, en consecuencia, se han valido de argumentos
errados.
Ciertamente, para llegar al campo de la antijuricidad debe pasarse por lo
que es típico pero, la Imputación Objetiva no debe quedarse sólo hasta allí y,
menos, creer esto suficiente para atribuir responsabilidad penal.
Otro equívoco ha sido pretender desprenderse de la relación causal. No
sólo es ella un punto de la dogmática al que debe hacerse referencia como an-
tecedente, sino que es necesaria para relacionar la conducta infractora con la
97
Imputación Objetiva: Consideraciones acerca de su Ámbito de Aplicación
98
Migdalia Mercedes Vásquez Jiménez
NOTAS DE REFERENCIA
1 Puede afirmarse que Hegel fue quien estableció el principio fundamental sobre el cual se edificó la teoría
de la Imputación Objetiva, para él, sólo era imputable la conducta que pudiera ser reconocida como propia
y no derivada de un origen distinto. Alrededor de este aporte ha girado la Teoría de la Imputación Objetiva,
de allí su importancia como antecedente.
2 MODOLELL GONZÁLEZ, Juan Luis. Bases fundamentales de la teoría de la imputación objetiva.
Caracas: Livrosca, 2001. p. 18.
3 El estudio de la acción es importante, pero al incursionar en él debe comprenderse su parte objetiva y
subjetiva, por otro lado, el estudio del resultado es también necesario pero entendiéndolo como un resultado
valorado, lo que es más que un resultado material.
4 Ibídem. p. 200.
5 MIR PUIG, Santiago. Derecho Penal: Parte General. 5ta Ed. Corregrafic, S. L. Barcelona: 1998. p. 231.
6 Íbidem.
7 A pesar de que disentimos respecto a algunos de los argumentos utilizados por estos autores para sustentar
sus tesis, consideramos que sus posiciones ilustran cómo doctrinalmente el alcance de la teoría de la
Imputación Objetiva ha logrado ampliarse, por tal motivo han sido citados en este ensayo como una
respetable tendencia.
8 En este sentido disentimos de las tesis españolas.
9 BUSTOS RAMÍREZ, op. cit. p. 25.
10 A propósito de este punto, es preciso expresar que consideramos que Bustos acierta al asumir un concepto
de resultado valorado, pero yerra al querer prescindir de la causalidad, en tanto que es ella la que permite la
comprobación de esa lesividad a la que el mismo se refiere, en ese sentido disentimos.
11 Nos reservamos las críticas que oponemos a estos criterios postulados por el destacado autor Claus Roxin,
por no quedar ellas comprendidas en el propósito del presente ensayo.
12 Por tal razón disentimos de la opinión de Bustos quien parece acercarse a la solución para luego alejarse de
ella al querer prescindir del estudio de la relación causal.
FUENTES CONSULTADAS
a) Fuentes Bibliográficas
JAKOBS, Günther. La Imputación Objetiva en el Derecho Penal. Traducción de Cancio. Madrid: Civitas, 1996.
MIR PUIG, Santiago. Derecho Penal: Parte General. 5ta Ed. Barcelona: Corregrafic, S.L. 1998.
MODOLELL GONZÁLEZ, Juan Luis. Bases Fundamentales de la Teoría de la Imputación Objetiva. Caracas:
Livrosca, 2001.
MUÑOZ CONDE, Francisco y García Arán, Mercedes. Derecho Penal. Parte General. 2da Ed. Valencia: Tirant
lo Blanch, 1996
REYES ALVARADO, Yesid. Imputación Objetiva. 2da Ed. Revisada. Bogotá: Temis, 1996.
99
Imputación Objetiva: Consideraciones acerca de su Ámbito de Aplicación
ROXIN, Claus. Derecho Penal: Parte General. Traducción y notas por Luzón Peña, Díaz y García Conlledo y
de Vicente Remensal. Madrid: Civitas, 1997
ZAFFARONI, Eugenio. Manual de Derecho Penal. Parte General. Buenos Aires: EDIAR, 1997
100
El Papel del Ministerio Público
en el Control del F inanciamiento
de las Organizaciones con F ines Políticos
y las Campañas Electorales
Keymer Ávila
Abogado Magna Cum Laude,
egresado de la Universidad Central de Venezuela (UCV).
Asistente del Fiscal General de la República
Patricia Parra
Licenciada en Ciencias Políticas y Administrativas,
mención Administración Pública, egresada de la UCV.
Asistente del Fiscal General de la República
101
102
El Papel del Ministerio Público
en el Control del F inanciamiento
de las Organizaciones con F ines Políticos
y las Campañas Electorales
Keymer Ávila
Patricia Parra
1. ROL DEL MINISTERIO PÚBLICO
103
El Papel del Ministerio Público en el Control del Financiamiento
de las Organizaciones con Fines Políticos y las Campañas Electorales
104
Keymer Ávila / Patricia Parra
105
El Papel del Ministerio Público en el Control del Financiamiento
de las Organizaciones con Fines Políticos y las Campañas Electorales
106
Keymer Ávila / Patricia Parra
107
El Papel del Ministerio Público en el Control del Financiamiento
de las Organizaciones con Fines Políticos y las Campañas Electorales
108
Keymer Ávila / Patricia Parra
109
El Papel del Ministerio Público en el Control del Financiamiento
de las Organizaciones con Fines Políticos y las Campañas Electorales
110
Keymer Ávila / Patricia Parra
111
El Papel del Ministerio Público en el Control del Financiamiento
de las Organizaciones con Fines Políticos y las Campañas Electorales
112
Keymer Ávila / Patricia Parra
Dirección de Salvaguarda
Es la encargada de la supervisión de los fiscales en materia de salvaguarda
del patrimonio público, bancos, seguros y mercado de capitales.15 Esta Dirección
investiga los llamados delitos de cuello blanco, o criminalidad de los poderosos.
Debe trabajar en coordinación con la Contraloría General de la República. Ac-
tualmente cuenta con 55 Fiscales en el territorio nacional, que conocerían de los
casos de desvío del patrimonio público para el financiamiento de las OFP y CE.
Dirección de Drogas
Su función es la coordinación de todas las acciones a emprenderse en materia
del ejercicio de la acción penal por los delitos previstos en la Ley Orgánica sobre
Sustancias Estupefacientes y Psicotrópicas.16 Esta dirección tiene bajo su cargo
38 fiscales en el territorio nacional especializados en el área, quienes serían los
que conocerían de los casos de legitimación de capitales provenientes del narco-
tráfico.
REFLEXIONES FINALES
113
El Papel del Ministerio Público en el Control del Financiamiento
de las Organizaciones con Fines Políticos y las Campañas Electorales
NOTAS DE REFERENCIA
114
Keymer Ávila / Patricia Parra
9 Con esto no pretendemos legitimar el discurso “hollywoodense” de la lucha contra el crimen organizado
transnacional, o de las “luchas” contra las drogas o el terrorismo. Mucho menos queremos sobredimensionar
estos gastados temas, cuando nuestras realidades sociopolíticas son distintas a las de los países creadores
de estas teorías. Para nosotros la legitimación de capitales no es más que el delito de “aprovechamiento
de cosas provenientes del delito”, es decir, que es un delito subsidiario de otro que sería el principal, que
no sólo está relacionado con el publicitado y “moralizante” tema de las drogas, el terrorismo o el crimen
organizado. Al respecto existe extensa bibliografía, por ejemplo: Elsie Rosales: Terrorismo y Globalización
del control penal: una mirada desde el derecho penal y la reforma legal. En: Revista del TSJ Nº 6, 2002.,
pp. 36-77; El blanqueo, reciclaje o legitimación de capitales: Enfoque jurídico penal. Anuario Nº 13-14.
ICPC, UCV. 1995-1996. pp. 91-117; Globalización del control penal: Una síntesis sobre Venezuela y la
política internacional antidrogas. En: Revista del TSJ. 2006 (en imprenta); Raúl Eugenio Zaffaroni: El
crimen organizado: una categoría frustrada. Facultad de Derecho, Universidad Nacional de Colombia.
1995; La legislación antidroga latinoamericana: sus componentes de derecho penal autoritario. Anuario
Nº 13-14, ICPC, UCV. 1995-1996., pp. 139-153.
10 Para toda esta sección: Keymer Avila: “Aproximación a la elaboración, seguimiento y evaluación de las
políticas en el Ministerio Público”: http://www.cejamericas.org/cejacommunity/?id=369&item2=3768.
11 Decimos mayor cantidad porque la Dirección de Contencioso Administrativo y la Dirección General de
Ambiente tienen también a su cargo despachos fiscales. Los primeros son fiscales en derechos y garantías
constitucionales, los segundos son fiscales ambientales. La Dirección General de Apoyo Jurídico, por su
parte, tiene bajo su dirección a los fiscales ante el TSJ.
12 Orden constitucional, en el sentido que la profesora Rosales le da en su obra: Terrorismo y Globalización…
pp. 49-50.
13 Cf. Art. 4 de la Resolución Nº 979, a través de la cual se dicta el Reglamento Interno que define las
competencias de las dependencias que integran el Despacho del Fiscal General de la República
(RICDDFGR).
14 VENEZUELA. Informe Anual del Ministerio Público. 2003. p. 2 (Presentación de la Dirección General de
Actuación Procesal) y Art. 15 del RICDDFGR.
15 Íbidem. Informe Anual del Ministerio Público. 2004, p. 2.
16 Informe Anual… 2003. pp. 2-3 (Presentación de la Dirección General de Actuación Procesal) y Art. 14 del
RICDDFGR.
FUENTES CONSULTADAS
a) Fuentes Bibliográficas
ZAFFARONI, Raúl Eugenio. El Crimen Organizado: Una categoría frustrada. Facultad de Derecho, Univer-
sidad Nacional de Colombia. 1995.
b) Fuentes Documentales
CORDERO, Luis Alberto. Sistemas Electorales y Financiamiento de Partidos Políticos. En: Conferencia El
Financiamiento de las Campañas Electorales, Memoria. Washington. Fundación Internacional para Sistemas
Electorales, Consejo Nacional Electoral, Comisión para la Reforma del Estado (COPRE) y Embajada de
Estados Unidos en Venezuela. 1998.
MORENO O, Luis. El Financiamiento Público y la Sociedad Civil. En: Conferencia El Financiamiento de las
Campañas Electorales, Memoria. Washington. Fundación Internacional para Sistemas Electorales, Consejo
115
El Papel del Ministerio Público en el Control del Financiamiento
de las Organizaciones con Fines Políticos y las Campañas Electorales
Nacional Electoral, Comisión para la Reforma del Estado (COPRE) y Embajada de Estados Unidos en
Venezuela. 1998
ROSALES, Elsie. Terrorismo y Globalización del Control Penal: una mirada desde el derecho penal y la
reforma legal. En: Revista del TSJ N° 6. 2002.
ROSALES, Elsie. El Blanqueo, Reciclaje o Legitimación de Capitales: Enfoque jurídico penal. Anuario N°
13-14. ICPC, UCV. 1995-1996.
ROSALES, Elsie. Globalización del control penal: Una síntesis sobre Venezuela y la política internacional
antidrogas. En: Revista del TSJ. 2006 (en imprenta).
_______. La legislación antidroga latinoamericana: Sus componentes de derecho penal autoritario. Anuario
N° 13-14, ICPC, UCV. 1995-1996.
REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA. Asamblea Nacional. Código Penal. En: Gaceta Oficial de
la República de Venezuela. N° 5.768 E. 13/Abr./2005.
_______. Estatuto Electoral del Poder Público. En: Gaceta Oficial de la República de Venezuela. Nº 36.884.
3/Feb./2000.
_______. Ley Contra la Corrupción. En: Gaceta Oficial de la República de Venezuela Nº 5.637, E.
7/Abr./2003.
_______. Ley General de Bancos y otras Instituciones Financieras. En: Gaceta Oficial de la República de
Venezuela Nº 5.555, E. 13/Nov./2001.
_______. Ley Orgánica contra la Delincuencia Organizada. En: Gaceta Oficial N° 5.789, E. 26/Oct./2005.
_______.Reglamento para El Control Del Financiamiento de las Organizaciones con Fines Políticos y del
Financiamiento de las Campañas Electorales. Resolución del Consejo Nacional Electoral N° 040413-509.
13/Abr./2004.
_______. Ley Orgánica del Poder Electoral. En: Gaceta Oficial de la República de Venezuela Nº 37.573.
19/Nov./2002.
_______. Consejo Nacional Electoral. Normas para el Financiamiento de la Campaña Electoral Presidencial
Diciembre 2006. Resolución del CNE N° 060807-712. 7/Ago./2006.
_______. Ministerio Público. Resolución Nº 979, a través de la cual se dicta el Reglamento Interno que define
las competencias de las dependencias que integran el Despacho del Fiscal General de la República.
REPÚBLICA DE VENEZUELA. Ley de Partidos Políticos, Reuniones Públicas y Manifestaciones. En: Gaceta
Oficial de la República de Venezuela. Nº 27.725. 30/Abr./1964.
116
Keymer Ávila / Patricia Parra
REPÚBLICA DE VENEZUELA. Ley Orgánica del Sufragio y Participación Política. En: Gaceta Oficial de la
República de Venezuela Nº 5.233, E. 28/May./1998.
c) Fuentes Electrónicas:
117
118
Un Análisis sobre la Gratuidad
del Depósito de Vehículos Automotores:
Naturaleza y Realidad
119
120
Un Análisis sobre la Gratuidad
del Depósito de Vehículos Automotores:
Naturaleza y Realidad
I. Introducción
Con la entrada en vigencia del Código Orgánico Procesal Penal, y por con-
siguiente de la Fase Preparatoria, se instauraron una serie de medidas asegu-
rativas dirigidas a la recolección de los elementos probatorios (objetos acti-
vos y pasivos) relacionados con la comisión de hechos punibles, a los fines de
garantizar que ese acervo probatorio pueda ser incorporado al proceso como
elemento de convicción para la demostración del delito que se investiga. En
este sentido, es necesario adentrarse en el estudio de los aseguramientos de
los vehículos automotores con fines probatorios en la comisión de los delitos
contemplados en la Ley sobre el Hurto y Robo de Vehículos Automotores; es-
pecíficamente lo relativo al ejercicio de esas medidas en cuanto y tanto tales
unidades automotoras son “depositadas” en depositarias judiciales o estaciona-
mientos, asumiendo los propietarios de dichos bienes la “obligación” de cance-
lar lo concerniente al pago de emolumentos por el tiempo que permanezca el
vehículo en esas instalaciones. En contraposición a la situación anteriormente
descrita, las sentencias emanadas por el Tribunal Supremo de Justicia, en Sala
121
Un Análisis Sobre la Gratuidad del Depósito de Vehículos Automotores: Naturaleza y Realidad
122
Daniel Alvarado Vicuña
SALA CONSTITUCIONAL:
SENTENCIA DEL 17 DE SEPTIEMBRE DE 2003.
…/…
“Las figuras cautelares del proceso civil como el embargo y el secuestro,
tienen una regulación en las leyes que establecen derechos y deberes para
quienes solicitan o son objeto de las medidas, así como para los depositarios./
Ahora bien, con motivo de la comisión de delitos, surgen una serie de medidas
asegurativas de los objetos activos y pasivos del delito, lo que incluye la incau-
tación de aquéllos (activos) que permitan probar la perpetración del mismo,
así como los que resulten efectos del delito./Los primeros los ocupa la policía
de investigación o el Ministerio Público y los guarda para utilizarlos en el
proceso; mientras que a los otros se aplican las normas sobre bienes recupera-
dos, contenidas en la Ley de Bienes Muebles Recuperados por las Autoridades
Policiales, si es que se trata de muebles, no siendo éstos aseguramientos idén-
ticos a las medidas de embargo y secuestro contendidas en el Código de Pro-
cedimiento Civil./Conforme el artículo 3 de la citada ley, el entonces Cuerpo
Técnico de Policía Judicial y por ende su sucesor el Cuerpo de Investigaciones
Científicas, Penales y Criminalísticas, debe tener locales destinados al depósi-
to de bienes, no señalando dicha ley, en su articulado, que dicho depósito sea
oneroso para el propietario de los bienes./(Omissis), y lo lógico es que el depó-
sito de esos bienes se haga en los lugares o locales destinados a depósito según
la ley, por lo que se trata de un depósito no oneroso./(Omissis), ellos pueden
ser depositados en los locales designados como depositarias judiciales, pero
éstas no podrán igualmente cobrar emolumento alguno o ejercer el derecho de
retención sobre los bienes depositados, por cuanto la persona que tiene dere-
cho sobre los mismos no dio origen a la medida de incautación, y por lo tanto
no queda obligada a pagar los gastos del depósito, tal como se desprende de
123
Un Análisis Sobre la Gratuidad del Depósito de Vehículos Automotores: Naturaleza y Realidad
la letra del artículo 16 de la Ley sobre el Depósito Judicial./ En todo caso, los
gastos que se generen a causa del depósito serán sufragados por el Estado,
quien queda obligado a pagarlos como consecuencia de no tener los locales o
lugares para tal fin o por resultar éstos insuficientes, y será sólo éste -el Esta-
do- a quien el depositario tendrá que exigirle el cumplimiento de la obligación
relativa al pago de almacenaje o depósito”.1
124
Daniel Alvarado Vicuña
que cancelar los gastos por concepto de retención de tal unidad automotora en
la depositaria judicial de que se trate, en virtud de que éste “NO DIO ORIGEN
A LA MEDIDA”, así en la sentencia; simplemente se trata de la recuperación
de su vehículo el cual fue objeto de sustracción a causa de la acción delictiva,
y como consecuencia de ello es obligación de las autoridades policiales res-
guardar tal bien a los fines de proceder a las Investigaciones de oficio que le
corresponden por mandato constitucional y legal al MINISTERIO PÚBLICO,
recayendo finalmente la obligación de depósito al Cuerpo de Investigaciones
Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC).
125
Un Análisis Sobre la Gratuidad del Depósito de Vehículos Automotores: Naturaleza y Realidad
126
Daniel Alvarado Vicuña
127
Un Análisis Sobre la Gratuidad del Depósito de Vehículos Automotores: Naturaleza y Realidad
128
Daniel Alvarado Vicuña
129
Un Análisis Sobre la Gratuidad del Depósito de Vehículos Automotores: Naturaleza y Realidad
130
Daniel Alvarado Vicuña
en los locales o lugares que para tal fin destine el Cuerpo Técnico de
Policía Judicial”12
Es necesario concordar entonces el supuesto de hecho de la norma antes
señalada, con el artículo 10 de la Ley sobre el Hurto y Robo de Vehículos Au-
tomotores, del 26 de julio de 2000, que dice:
“Los Vehículos Automotores objeto de robo o hurto recuperados por
cualquier autoridad de policía, deberán ser entregados por éstas de
inmediato al Cuerpo Técnico de Policía Judicial para su depósito,
previa notificación al Ministerio Público. / Los vehículos se entre-
garán al propietario por orden del Juez de Control o del Ministerio
Público, en cualquier estado del proceso, inclusive en la Fase de In-
vestigación, una vez comprobada su condición de propietario” 13
Vistas ambas normas, a pesar de la diferencia notable en las fechas de pro-
mulgación y publicación, puede evidenciarse que las mismas establecen el De-
pósito como forma de resguardo de los vehículos que han sido recuperados lue-
go de que tales unidades fueron objeto de Hurto y/o Robo; tal responsabilidad
corresponde al hoy Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Crimina-
lísticas. Por otro lado, ninguna de estas normas establece el carácter pecuniario
u oneroso de esta medida de aseguramiento, lo que se convierte en un común
denominador en ambos cuerpos de leyes, constituyendo ésta otra diferencia con
el Depósito Judicial.
131
Un Análisis Sobre la Gratuidad del Depósito de Vehículos Automotores: Naturaleza y Realidad
132
Daniel Alvarado Vicuña
133
Un Análisis Sobre la Gratuidad del Depósito de Vehículos Automotores: Naturaleza y Realidad
NOTAS DE REFERENCIA
134
Daniel Alvarado Vicuña
FUENTES CONSULTADAS
a) Fuentes Bibliográficas
_______. Tribunal Supremo de Justicia. Sala Constitucional. Expediente Nº 665, de fecha 28-04-2005.
_______. Asamblea Nacional. Código Orgánico Procesal Penal. En: Gaceta Oficial de la República Bolivariana
de Venezuela. Nº 5558. 14/Nov./2001.
_______. Asamblea Nacional. Ley sobre el Hurto y Robo de Vehículos Automotores. En: Gaceta Oficial de la
República Bolivariana de Venezuela. Nº 37000. 26/Jul./2000.
_______. Ministerio Público. Dirección de Consultoría Jurídica del Despacho del Fiscal General de la República.
Memorando Nº DCJ-9-330-2003, 25/02/2003.
_______. Ministerio Público. Informe Anual del Fiscal General de la República. Año 2003.
REPÚBLICA DE VENEZUELA. Congreso Nacional. Código Civil. En: Gaceta Oficial de la República de
Venezuela. Nº 2990. 26/Jul./1982.
_______. Congreso Nacional. Ley sobre Depósito Judicial. En: Gaceta Oficial de la República de Venezuela.
Nº 28213. 16/Dic./1966.
_______. Ley de Bienes Muebles Recuperados por Autoridades Policiales. En: Gaceta Oficial de la República
de Venezuela. Nº 1032. 18/Jul./1966.
135
136
La Autopsia Médico-Legal:
Su Justa Valoración en el Proceso Penal
137
138
La Autopsia Médico-Legal:
Su Justa Valoración en el Proceso Penal
I. Generalidades
La dinámica geopolítica ha permitido, en el curso de unos pocos años, que
lo que había sido, hasta mitad de este siglo, comunidades pasivas, aisladas en
su centro de poder económico - cultural, hayan despertado de manera abrupta
en una especie de pandemonium que ha trastocado los conceptos elementales
de urbe, sociedad y relaciones humanas. Las grandes metrópolis de los años
50 se han convertido en lugares inhabitables, invivibles e inseguros, donde el
empobrecimiento mundial, la pérdida de los valores fundamentales del hombre
y la desarticulación de las leyes que norman las relaciones de la sociedad civil,
ha dejado puerta franca a la violencia, la degradación moral, la pérdida de los
sentimientos y de las virtudes primordiales de la raza humana.
Las grandes capitales de América Latina y de Europa, conviven semanal-
mente con una detallada relación necrofílica, que permite que las estadísticas
vitales hayan cambiado las causas de muertes producidas por algún fenómeno
salud, enfermedad, por la muerte violenta a manos de un semejante. Heridas
por arma de fuego, heridas por arma blanca, accidentes de tránsito, envenena-
139
La Autopsia Médico-Legal. Su Justa Valoración en el Proceso Penal
140
Yanira Rangel Meneses
141
La Autopsia Médico-Legal. Su Justa Valoración en el Proceso Penal
II. Autopsia
Dentro de la práctica de la Medicina Forense, la autopsia representa el
examen más importante, por intermedio de ella se puede determinar la causa
de la muerte y su etiología médico-legal. La palabra autopsia significa el
estudio del cadáver que el examinador hace con su vista. (Auto = por sí mis-
ma, opsis = vista).1 Son sinónimos: necropsia (necros = muerte) y tanatopsia
(tanatos = muerte).
1. Concepto de Autopsia
La autopsia es el examen anatómico y patológico del cadáver para co-
nocer las causas de la muerte, así como las manifestaciones de la misma
naturaleza relacionadas con ella.2 Otros autores, han coincidido al definir
la autopsia como el examen del cadáver a fin de determinar la causa de la
muerte y los cambios patológicos ocurridos en las vísceras.
2. Tipos de Autopsia
Dentro de los procesos a cumplir, luego del fallecimiento de una per-
sona, se encuentra la realización o práctica de la autopsia ejecutada por un
profesional de la medicina, con la finalidad de esclarecer las causas que
provocaron la muerte. En los estudios de Medicina Legal se observa que
desde hace cierto tiempo (1997) se describen dos tipos de autopsia:
- Autopsia Clínica.
- Autopsia Médico-Legal.
En la primera, es decir, en la Autopsia Clínica, se pretende establecer
la reciprocidad entre los diagnósticos clínicos y las causas de la muerte.
Se busca la confirmación del diagnóstico dado, haciendo énfasis en el es-
tudio de los órganos cuyas lesiones posiblemente provocaron la muerte,
así como la relación o vinculación que haya podido tener el tratamiento
ordenado o prescrito. Por su parte, la Autopsia Médico-Legal aspira, a
142
Yanira Rangel Meneses
partir del tipo de muerte, determinar las causas que la provocaron, in-
dicar con la mayor precisión la hora en que se produjo e identificar el
cadáver, que, en muchos casos, a partir del momento de la muerte, puede
ser un desconocido.
143
La Autopsia Médico-Legal. Su Justa Valoración en el Proceso Penal
1. Concepto
Los estudiosos de la Medicina Legal, entre ellos Gisbert y Calabuig,
coinciden en expresar que la Autopsia Médico-Legal:
Es aquella en la cual se investigan y estudian las lesiones
o alteraciones anatomopatológicas, cuyo descubrimiento
o comprobación van a servir para ayudar al esclareci-
miento de la causa de la muerte en un caso jurídico.4
En un homicidio, el Protocolo de Autopsia, el Levantamiento del Ca-
dáver y el Certificado de Defunción, constituyen el cuerpo del delito. Para
Humberto Giugni, la Autopsia Médico-Legal “es una operación compleja
que debe permitir, ante todo, hacer “hablar” al cadáver, la reconstitu-
ción de los sucesos y de las circunstancias que han ocasionado el falleci-
miento”.5
144
Yanira Rangel Meneses
145
La Autopsia Médico-Legal. Su Justa Valoración en el Proceso Penal
146
Yanira Rangel Meneses
147
La Autopsia Médico-Legal. Su Justa Valoración en el Proceso Penal
148
Yanira Rangel Meneses
CONCLUSIONES
El Levantamiento del Cadáver y la Autopsia Médico-Legal, constituyen
dentro del ámbito del Derecho Penal, una pieza imprescindible, debido a que
en los casos de muertes violentas, representan el cuerpo del delito, es decir, el
delito mismo.
Dada su significativa importancia, los jueces, fiscales del Ministerio Pú-
blico, abogados, defensores públicos de presos y demás profesionales, rela-
cionados con la Justicia, tienen el compromiso de adquirir o profundizar sus
149
La Autopsia Médico-Legal. Su Justa Valoración en el Proceso Penal
NOTAS DE REFERENCIA
FUENTES CONSULTADAS
a) Fuentes Bibliográficas
ALCÁNTARA, Francisco. Recorrido del Juicio Criminal. 8ª Ed. Caracas: Ed. Libra, 1994.
ANGÚLO A., F.S. Cátedra de Enjuiciamiento Criminal. Caracas: Ed. La Torre, 1973.
ORFILA, M. Tratado de Medicina Legal. Tomo II. Madrid: Imprenta Alonzo, 1847.
SMYTH, Frank. Causas de Muerte. Mercedes de Lloret Grimalt. Barcelona: Editorial Plante, 1983.
VARGAS A., Eduardo. Medicina Legal. 2da Ed. San José de Costa Rica: Lehmann Ed., 1980.
150
Yanira Rangel Meneses
b) Fuentes Documentales
FARÍAS, Flor. Conocimiento del Levantamiento del Cadáver y la Autopsia Médico Legal para su justa
Valoración en el Proceso Penal. Fuente Testimonial. Caracas, Venezuela. 1997. Entrevistada por Yanira Rangel
M. Farías, Flor. Abogada. Juez de 1ª Instancia en lo Penal de Circunscripción Judicial del Área Metropolitana
de Caracas.
CAÑIZALES, Daisy. En: Criminalística General. Caracas. IUPOLC. Apuntes de clases. 1996.
DE DOMINICIS, Anttonieta. En: Medicina Legal. Caracas. IUPOLC. Apuntes de clases. 1996.
DE LOS RÍOS, José R. En: Sociedad como Factor Determinante en Labor del Criminalista. Caracas. Tesis.
1996.
GAMBOA, Belén. Conocimiento del Levantamiento del Cadáver y la Autopsia Médico Legal para su Justa
Valoración en el Proceso Penal. Fuente Testimonial. Caracas. 1997. Entrevistada por Yanira Rangel M. Gamboa,
Belén. Abogada. Juez 18º de 1ª Instancia en lo Penal de Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de
Caracas.
PÉREZ, Nancy. Conocimiento del Levantamiento del Cadáver y la Autopsia Médico Legal para su justa
Valoración en el Proceso Penal. Fuente Testimonial. Caracas, Venezuela. 1997. Entrevistada por Yanira
Rangel M. Pérez, Nancy. Abogada. Juez 35º de 1ª Instancia en lo Penal de Circunscripción Judicial del Área
Metropolitana de Caracas.
PIERRE T., Oscar. Jurisprudencia de la Corte Suprema de Justicia. Tomo VIII. Caracas: Empresas El Cojo,
1980.
REPÚBLICA DE VENEZUELA. Congreso Nacional. Código de Enjuiciamiento Criminal. 1971. Caracas: Ed.
La Torre.
YRAZÚ, José. Conocimiento del Levantamiento del Cadáver y la Autopsia Médico Legal para su Justa
Valoración en el Proceso Penal. Fuente Testimonial. Caracas-Venezuela. 1997. Entrevistado por Yanira
Rangel M. Yrazú, José. Abogado, Juez 37º de 1ª Instancia en lo Penal de Circunscripción Judicial del Área
Metropolitana de Caracas.
151
152
El Ministerio Público Venezolano
en el Ámbito I beroamericano
153
154
El Ministerio Público Venezolano
en el Ámbito I beroamericano
I. La Asociación Iberoamericana
de Ministerios Públicos - AIAMP
155
El Ministerio Público Venezolano en el Ámbito Iberoamericano
156
Yvonne Coromoto Dorta Afonso
157
El Ministerio Público Venezolano en el Ámbito Iberoamericano
propiciar una mayor asistencia jurídica mutua en materia penal, con la suscrip-
ción y ratificación de acuerdos sobre la materia.
En el año 1998 se efectuó en Brasil, el X Congreso Interamericano, en el
cual se desarrollaron temas relacionados con el narcotráfico, crimen organizado
y corrupción, así como la discusión sobre la posibilidad de incorporar en los
ordenamientos jurídicos de cada uno de sus miembros, figuras tales como los
testigos protegidos, entregas vigiladas, interceptaciones telefónicas, decomiso
o extinción de dominio sobre bienes producto del narcotráfico y disminución
de penas para los colaboradores de la justicia.
El principal logro del evento lo constituyó la creación del Instituto Intera-
mericano del Ministerio Público, dirigido a la formación, capacitación y actua-
lización científica de los miembros de la Asociación.
Durante el mes de noviembre del año 2000, se llevó a cabo en la República
de Guatemala, el XI Congreso Interamericano del Ministerio Público, cuya
celebración concluyó con la suscripción de la Declaración de Guatemala, en la
cual se destacan aspectos en relacionados con la protección de víctimas y testi-
gos, la eliminación del secreto bancario y la lucha contra el crimen organizado
transnacional.
Los días 21 y 22 de noviembre del año 2002, se realizó en la ciudad de
Cartagena de Indias, Colombia, la XII Asamblea General Ordinaria de la
Asociación Iberoamericana de Ministerios Públicos, cuyo objetivo fue la
búsqueda de alternativas para luchar contra la delincuencia organizada transna-
cional. Entre los logros de esta Asamblea se destacan la promoción del estudio
de fórmulas de cooperación internacional; la presentación del Proyecto Fiscalía
Virtual para Ibero América, como un mecanismo de cooperación entre los Mi-
nisterios Públicos de la región, y el compromiso asumido por cada Ministerio
Público de designar en su seno, Puntos de Contacto como intermediarios de la
cooperación internacional.
A partir de esta reunión la Asociación Interamericana del Ministerio Públi-
co cambia para llamarse Asociación Iberoamericana de Ministerios Públicos.
Asimismo, el Congreso Interamericano del Ministerio Público cambia su deno-
158
Yvonne Coromoto Dorta Afonso
159
El Ministerio Público Venezolano en el Ámbito Iberoamericano
160
Yvonne Coromoto Dorta Afonso
161
El Ministerio Público Venezolano en el Ámbito Iberoamericano
162
Yvonne Coromoto Dorta Afonso
163
El Ministerio Público Venezolano en el Ámbito Iberoamericano
Por iniciativa del Ministerio de Justicia español, a través del Centro de Es-
tudios Jurídicos, se convocó a todas las Unidades de Capacitación de los Minis-
terios Públicos de los países Iberoamericanos a participar entre los días 12 y 16
de noviembre de 2001, en el seminario titulado “Hacia una Red de Formación
del Ministerio Público Iberoamericano”.
A este evento asistieron los representantes de las unidades de capacitación
de los Ministerios Públicos de Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Cuba,
Ecuador, El Salvador, España, Guatemala, Honduras, Nicaragua, México, Pa-
namá, Paraguay, Perú, Puerto Rico, República Dominicana, Uruguay y Vene-
zuela.
Al año siguiente, el 20 de febrero de 2002, se efectuó la Asamblea consti-
tutiva de la Red de Capacitación de los Ministerios Públicos Iberoamericanos
-RECAMPI- y entró en vigor su Carta Fundacional.
De acuerdo a su Carta Fundacional, los directores y responsables de la ca-
pacitación de los Ministerios Públicos en el ámbito iberoamericano, se com-
prometieron a participar como una comunidad de enlace en el intercambio de
información sobre programas, metodologías y sistemas de capacitación en
materias de interés común para nuestras instituciones, pues la Red pretende
fomentar la cooperación entre los Ministerios Públicos de los países iberoame-
ricanos, para compartir y aprender de las diferentes experiencias.
Posteriormente, el 22 de abril de 2003, el ciudadano Fiscal General de la
República, Dr. Julián Isaías Rodríguez Díaz, de acuerdo a lo establecido en la
disposición decimotercera de la Carta Fundacional de la Red de Capacitación
de los Ministerios Públicos Iberoamericanos, solicitó a su Presidente el ingreso
del Ministerio Público venezolano a la RECAMPI.
La inclusión de nuestra Institución como miembro de pleno derecho en la
Red, se produjo en el marco de la II Asamblea General de la RECAMPI,
celebrada en Madrid, España, los días 9, 10 y 11 de diciembre de 2003, con el
164
Yvonne Coromoto Dorta Afonso
FUENTES CONSULTADAS
a) Fuentes Documentales
Asociación Interamericana del Ministerio Público. Estatutos 1957 y Reforma de 1980 y 1983.
Participación del Ministerio Público de Venezuela. En: Informe del Procurador de la Nación ante el Congreso
Nacional. Año 1963.
Congreso Interamericano de Ministerio Público. 1. Sao Paulo. Anais... Sao Paulo, Secretaría da Seguranca
Pública, 1956. 2 v. /v.2: Teses e Contribucoes.
_______. 2. La Habana, 1957. Participación del Ministerio Público de Venezuela. En: Informe del Procurador
de la Nación ante el Congreso Nacional. Año 1959.
_______. 3. México. Memoria. México. Procuraduría General de la República, 1964. 855 p. ilus. 22cm.
_______. 4. Brasilia. Posecao institucional del Ministerio Público e sus organizacao nos Estado Americanos.
Brasilia, Ministerio Da Justica, 1972.
165
El Ministerio Público Venezolano en el Ámbito Iberoamericano
_______. 7. Caracas, 1980. /Recopilación de documentos. En: Biblioteca Central “Rafael Arvelo Torrealba” del
Ministerio Público de Venezuela.
_______. 8. Mar de Plata, 1983. /Recopilación de documentos. En: Biblioteca Central “Rafael Arvelo Torrealba”
del Ministerio Público de Venezuela.
166
Documentos
167
168
Los F iscales de las Audiencias
y Chancillerías Reales
169
170
Los F iscales de las Audiencias
y Chancillerías Reales
Ley Primera: Que en las Audiencias de Lima y México haya dos Fiscales,
y que negocios han de despachar.
171
Los Fiscales de las Audiencias y Cancillerías Reales
Ley II: Que los Fiscales tengan el lugar y asiento, que por esta ley
se declara.
Ley III: Que los Fiscales asistan en las Audiencias las tres horas de
la mañana, y se puedan excusar de ir a los Acuerdos, y tra-
tándose negocios del Fisco, sean avisados y vayan a ellos.
Mandamos, Que los Fiscales asistan en las audiencias las tres horas de la ma-
ñana, aunque no se traten negocios fiscales, para que tengan lugar a ver los pleitos,
ordenar las peticiones, y otras cosas, que tocan a sus oficios, se pueden excusar las
tardes: y en caso que en los Acuerdos se traten, o determinen pleitos, o negocios
que toquen a nuestro Real Fisco, sean avisados, y se hallen presentes.
Ley IIII /IV/: Que los Fiscales se puedan hallar en los Acuerdos, y no se
les ponga impedimentos.
172
Carmen Celeste Ramírez Báez
Ley VI: Que los Fiscales no aboguen, sirvan por sus personas y vean
si se guarda lo ordenado.
173
Los Fiscales de las Audiencias y Cancillerías Reales
Porque los Fiscales puedan mejor servir sus oficios, y estén mejor informa-
dos de lo que deben hacer. Tenemos por conveniente y necesario, que los Pre-
sidentes y Oidores les muestren y participen nuestras cédulas, instrucciones,
provisiones, y las demás escrituras, que para las audiencias se hubieren dado y
dieren todas las veces que las pidieren.
174
Carmen Celeste Ramírez Báez
Ley IX : Que pidiendo los Fiscales algunos testimonios, se los den los
escribanos, las Audiencias lo provean.
Nuestra voluntad es, que por ninguna vía, ni forma se impida a los Fiscales
el darnos cuenta de todo lo que pareciere necesario a nuestro Real Servicio y
causa pública. Y para que así se cumpla y ejecute, mandamos, que los Escriba-
nos de Cámara de las Audiencias, y todos los demás de sus distritos, den a los
fiscales todos los testimonios, que le pidieren, en pública forma, para que los
puedan enviar a nuestro Consejo, o a las partes, que tuvieren por convenientes.
Y ordenamos a las Audiencias, que les hagan dar los testimonios, que pidieren
en todas las causas y materias de nuestro Real servicio y hacienda, citando las
partes, si las hubiere, y estuvieren presentes, y no lo estando, sin citarlas.
Los Fiscales salgan a las causas, que se siguieren en Gobierno ante los Vi-
rreyes, o Presidentes, por los inconvenientes y daños, que por no lo hacer así,
resultan contra nuestra Real Hacienda, y los Virreyes y Presidentes los compe-
lan a lo susodicho, y los Fiscales pidan lo que convenga.
Ley XI: Que los Fiscales respondan a los negocios de que los Conta-
dores de Cuenta les mandaren dar traslado.
175
Los Fiscales de las Audiencias y Cancillerías Reales
Ley XII: Que los Fiscales defiendan los pleitos de Hacienda Real,
que pasaren ante Oficiales Reales, y puedan ser citados
para ello.
En todos los pleitos, que se ofrecieren de nuestra Real Hacienda ante Ofi-
ciales Reales, se muestre parte los Fiscales de las Audiencias, y la defiendan, y
hagan su oficio, sin poner dificultad, ni otro ningún impedimento: y asimismo
lo hagan en todos los dichos negocios en los casos que fueren citados por los
Oficiales Reales, con el cuidado y diligencia, que a nuestro Real Servicio, y
buen cobro de nuestra hacienda conviene.
Otro sí. Ordenen a sus solicitadores, que acudan a ellos con mucho cuidado,
y les noten las peticiones, y hagan las demás advertencias convenientes.
Ley XIII: Que los Fiscales se muestren partes en los pleitos de Ha-
cienda Real, que fueren en grado de apelación de Oficiales
Reales.
176
Carmen Celeste Ramírez Báez
Los Fiscales salgan a todos los pleitos y negocios tocantes a Hacienda Real,
que en grado de apelación de los autos y procedimientos de los Oficiales Reales
fueren a las Audiencias, hasta que sean fenecidos y ejecutoriados, y lo proveído
sea llevado a debida ejecución
Ley XIIII /XIV/: Que los Fiscales sigan los pleitos de condenaciones he-
chas por los Fieles Ejecutores, aplicadas a la Cámara, si
se apelare para las Audiencias.
177
Los Fiscales de las Audiencias y Cancillerías Reales
Ley XVI: Que el Fiscal salga a los pleitos que resultaren de cuentas
de Oficiales Reales.
Mandamos, que en todos los pleitos, que se ofrecieren ante contadores, que tomen
cuenta sobre Hacienda Real, en virtud de nuestras ordenes y comisiones a Oficiales
Reales, salgan los Fiscales de las Audiencias, y hagan las defensas convenientes.
En todas ocasiones que se hubiere de vender por los Oficiales Reales al-
guna cosa de nuestra Hacienda, donde hubiere Audiencia, se halle presente,
juntamente con ellos, el Fiscal, a la venta y remate. Y mandamos a los Oficiales
Reales, que no vendan ninguna sin esta calidad.
178
Carmen Celeste Ramírez Báez
las visitas de los navíos, que entraren en aquellos puertos, y salieren para estos
Reinos, o los de la Nueva España: denuncien lo que llevaren, o trabajaren, de-
más de la permisión: pidan se aplique a nuestra Hacienda, y que los culpados
sean castigados con rigor de derecho, y no consientan que los navíos vuelvan
sobrecargados, ni se entrometan en conocer de ninguno de los negocios, que de
ellas resultaren, ni en mas de lo referido.
Ley XX: Que los Fiscales envíen al Consejo copias y relaciones de los
acuerdos de Hacienda.
179
Los Fiscales de las Audiencias y Cancillerías Reales
Acuerdos generales, que hacen los virreyes, con asistencia de oidores, fiscales
y oficiales reales, para gastos, que parece necesario se hagan de nuestra Real
Hacienda, y tengan particular cuidado de enviarlas con toda claridad, para que
conste lo resuelto en ellos, y hagan una relación de todo los demás que se tratare
y determinare en los Acuerdos, donde pongan por su propia mano lo tratado y
determinado en cada día, o lo encarguen al Escribano, que allí asistiere, y en
cada año envíen una copia a nuestro Consejo, para que sepamos y entendamos lo
que se hace en aquellos Acuerdos, y qué utilidades resultan. Y mandamos a los
Virreyes y Presidentes, que la ejecución tengan continuo y especial cuidado.
Ley XXI: Que en cada un año se envié al Consejo relación de los plei-
tos sobre Hacienda, en que el Fiscal sea actor, y se determi-
nen con brevedad.
Ley XXII: Que el Fiscal prefiera en asiento a los Oficiales Reales en las
Almonedas.
180
Carmen Celeste Ramírez Báez
Ley XXIII: Que los Fiscales tomen la voz de las causas concernientes a
la ejecución de la Justicia.
Ley XXIIII: /XXIV/: Que los Fiscales tengan cuidado de que se ejecute lo
proveído sobre el tratar y contratar los Ministros.
Ley XXV: Que los Fiscales contradigan las prorrogaciones de los Co-
rregimientos.
181
Los Fiscales de las Audiencias y Cancillerías Reales
Ley XXVI: Que los Fiscales procuren saber si los que han comprado
oficios han llevado confirmación.
Conviene saber y entender si las personas que han comprado los oficios,
que se han beneficiado por nuestro mandado, han llevado y tienen de Nos con-
firmaciones dentro del término, que se les ha ordenado. Mandamos, que los Fis-
cales hagan diligencia en pedir a todas las personas, que hubieren comprado los
oficios, que manifiesten las confirmaciones, y no manifestando, pidan, que sea
apremiados a que los dejen, o lo que mas conviniere a nuestra Real Hacienda.
Ley XXVII: Que los Fiscales procuren que se acaben los pleitos de resi-
dencias y renunciaciones de oficios.
182
Carmen Celeste Ramírez Báez
Ley XXVIII: Que los Fiscales envíen testimonio de las residencias, que se
vieren en las Audiencias.
Mandamos a los Fiscales, que todos los años envíen al Consejo testimonios
de las residencias de los Gobernadores, Corregidores, Alcaldes Mayores, y to-
dos los demás Ministros de Justicia, que son a provisión de nuestros Virreyes, o
Presidentes, y se hubieren visto en las Audiencias, refiriendo la sentencia, que
con cada uno se hubiere pronunciado, y las penas y condenaciones impuestas,
y si ha cumplido con el tenor de la sentencia, para que anotado y prevenido
en las relaciones, puestas en las Secretarías del Consejo de servicios, partes y
calidades de los pretendientes, cuando se hicieren las proposiciones de oficios,
que nos proveemos, y en todo tiempo, conste de los méritos de cada uno, y se
proceda con el acierto y ajustamiento, que conviene.
183
Los Fiscales de las Audiencias y Cancillerías Reales
Ley XXX: Que los Fiscales sigan las causas de inmunidad, y otras, ante
jueces eclesiásticos, por sus personas, o las de sus agentes.
Los Fiscales de nuestras Reales Audiencias sigan las causas, que pasan ante los
Ordinarios, y otros jueces eclesiásticos, sobre inmunidades de las Iglesias, y otros
cualesquier negocios y pleitos, por sus mismas personas, o las de sus Solicitadores
fiscales, con que firmen las peticiones en las cosas y casos que les tocare, o las rubri-
quen.
Ley XXXII: Que los Fiscales pidan lo que convenga sobre donaciones de
Clérigos a sus hijos, y tratos y contratos.
A los Fiscales toca por la obligación de sus oficios pedir lo que convenga,
sobre las donaciones que los clérigos hicieren a sus hijos y que lo hubieren ad-
184
Carmen Celeste Ramírez Báez
Ley XXXIII: Que los Fiscales procuren se ejecute lo dispuesto contra ca-
sados en estos Reinos, que residieren en las Indias.
Mandamos, que los fiscales hagan instancia con mucho cuidado en que se
cumpla y ejecute lo que ésta mandado acerca de que los casados, que estuvie-
ren en las Indias sin sus mujeres, vengan a hacer vida con ellas, y sigan las
causas, que sobre esto se movieren, para que se fenezca con brevedad.
Ley XXXIIII /XXIV/: Que los Fiscales sean protectores de los Indios, y los
defiendan y aleguen por ellos.
185
Los Fiscales de las Audiencias y Cancillerías Reales
Ley XXXV: Que siendo el pleito de Indio con el Fisco, se provea perso-
na, que defienda al Indio.
En caso que el fiscal siga pleito contra algún Indio, y no hubiere Protector,
o los Procuradores estuvieren impedidos, porque concurren al pleito otros liti-
gantes, nombre la Audiencia a una persona, la que hallare mas a propósito para
su defensa.
Ley XXXVI: Que cuando para dar tierras se citaren los interesados, se
cite al Fiscal por los Indios.
Ley XXXVII: Que los Fiscales tengan por obligación particular el acudir
a la libertad de los Indios.
186
Carmen Celeste Ramírez Báez
Ley XXVIII: Que los Fiscales no acusen sin delator, si no fuere en hecho
notorio, y no afiancen de calumnia.
Mandamos, Que los Fiscales no acusen sin preceder delator; salvo en he-
cho notorio, o cuando fuere hecha pesquisa. Y declaramos, que saliendo por
187
Los Fiscales de las Audiencias y Cancillerías Reales
Ley XXXIX: Que los Fiscales pidan memoria de los testigos que se han
de ratificar, y los Escribanos se la den.
Ley XXXX /XL/: Que los pleitos Fiscales se vean en las Audiencias con
cuidado todos los días, y los Ministerios sean diligentes en
su despacho.
188
Carmen Celeste Ramírez Báez
Ley XXXXI /XLI/: Que cuando los Fiscales recusaren a los Jueces hagan
los depósitos, conforme a esta Ley.
Mandamos, que en todos los pleitos, que nuestros Fiscales recusaren a los
Presidentes, Oidores, o Alcaldes, juren y prueben las causas como las demás
partes, y hagan el depósito, conforme a las Leyes, de las penas de Cámara,
pero si el pleito fuere sobre Hacienda Real, es nuestra voluntad, que le puedan
hacer de cualquiera hacienda nuestra, que hubiere y estuviere en poder de los
Oficiales Reales, a los cuales ordenamos y mandamos, que den y paguen lo que
fuere necesario para los depósitos, cuando los Fiscales se lo ordenaren.
Ley XXXXII /XLII/: Que los Ministros y Fiscales escriban al Rey con dis-
tinción y particularidad, excusando generalidades.
189
Los Fiscales de las Audiencias y Cancillerías Reales
Ley XXXXIII /XLIII/: Que los Fiscales envíen cada año relación de los
casos graves, que se ofrecieren.
Los Fiscales nos envíen en cada un año relación de las cosas y casos graves,
que se ofrecieren en las Audiencias de sus distritos.
Ley XXXXIIII /XLIV/: Que antes de dar cuenta el Rey los Fiscales en
casos graves, y de gobierno, acudan a los Virreyes, Presi-
dentes, o Audiencias.
190
Carmen Celeste Ramírez Báez
Ley XXXXV /XLV/: Que los Fiscales no lleven asesoría de los pleitos que
sentenciaren en discordia.
191
Los Fiscales de las Audiencias y Cancillerías Reales
/Otras/:
Ley XXII: Que los Fiscales de las Audiencias Reales no sean asesores
del Santo Oficio, y puedan ser Consultores.
192
Carmen Celeste Ramírez Báez
timos, que puedan ser Consultores; pero no por esta causa, ni otra alguna dejen
de asistir con la Audiencia en todos los actos y concurrencias, que se ofrecieren
con el Tribunal de la Inquisición, o sus Comisarios y nuestros Virreyes, Presi-
dentes y Oidores lo hagan cumplir y ejecutar.
Ley XXVI: Que los Acuerdos tengan días señalados, y conviniendo ha-
cerse en otros, se llame al Fiscal.
Ley XXVIII: Que en el Acuerdo no esté persona, que no tenga voto sino
el Fiscal.
Ley XXIX: Que en vacante del Fiscal sirva el oficio el Oidor más mo-
derno de la Audiencia.
193
Los Fiscales de las Audiencias y Cancillerías Reales
Ley XXX:
Que el Oidor mas moderno, que hiciere oficio de Fiscal pre-
ceda a los Alcaldes del Crimen, y excuse al ir a su Sala.
D. Felipe IV en El Pardo a 12 de enero de 1650.
El Oidor, que por mas moderno no hiciere oficio de Fiscal de lo Civil en las
Audiencias de Lima y México, ha de preferir en todas las Juntas al Alcalde
del Crimen mas antiguo, y a los demás: y porque no concurran en la Sala del
Crimen, cuando se vea en ella algún negocio en discordia, o por otra causa o
accidente, se ha de excusar de ir a la Sala, y para estos casos nombre el Virrey
un Abogado, que en ella defienda a la parte de nuestro Real Fisco.
Ley XLV: Que los Virreyes, consulten en los Acuerdos las materias ar-
duas, y si las partes recurrieren a la Audiencia, sobresean.
194
Carmen Celeste Ramírez Báez
los Virreyes por mas arduas e importantes para resolver con mejor acierto, y
habiéndolas comunicado, resuelvan lo que tuvieren por mejor, y si las partes
interpusieren el recurso, que conforme a derecho les pertenece, para ante las
Audiencias, sobresean en la ejecución, si por las leyes de este libro no se excep-
tuaren algunos casos especiales, hasta que visto en ellas, se determine lo que
fuere justicia.
Ley XXVI: Que los Relatores y otros Ministro no lleven derechos a los
Fiscales.
195
Los Fiscales de las Audiencias y Cancillerías Reales
Ley XXVII: Que los Relatores no lleven derechos a las partes condena-
das costas por lo tocante a los Fiscales.
Ley XXVIII: Que los Relatores despachen los pleitos de los Indios con
brevedad y moderados derechos.
Débese ejecutar, que los pleitos de Indios lleguen a estado de verse por Re-
lator: y en caso que sea preciso, mandamos a los Relatores, que los despachen
brevemente, y le lleven los derechos moderados a la Ley 25, título 8, libro 5.
196
Carmen Celeste Ramírez Báez
Ley LIII:
Que los Escribanos no lleven derechos a los Fiscales de con-
denaciones aplicadas a la Cámara.
D Felipe II. Ord. 138 de Aud. de 1596.
FUENTES CONSULTADAS
a) Fuentes Documentales
Recopilación de Leyes de los Reynos de las Indias. Madrid: Ivlian de Paredes, 1681. Tomo Primero, Libro
18. Edic. facsimilar: Madrid: Ediciones Cultura Hispánica, 1973.
197
Los Fiscales de las Audiencias y Cancillerías Reales
198
Normas para la elaboración
de los trabajos para la
Revista del Ministerio Público
199
200
Normas para la Elaboración de los Trabajos
para la Revista del Ministerio Público
1.1. Temas
Los trabajos que serán publicados en la Revista del Ministerio Público,
deberán referirse a temas de actualidad, científicos-técnicos-jurídicos,
que constituyan un aporte inédito a la construcción de la cultura de paz y
el enriquecimiento de la cultura jurídica dentro de un espíritu didáctico y
democrático.
1.2. Requisitos
Los trabajos deberán incluir su título, temario y fuentes consultadas,
anexándose breve reseña curricular del autor, que incluya dirección postal,
institucional y/o electrónica.
1.4. Recepción
Los trabajos serán recibidos únicamente en el Instituto de Estudios Superiores,
ubicado en la Av. Urdaneta, Edif. Ministerio Público, piso 5, en versión impresa
y en diskette de alta densidad, en tamaño 3 1/2, para computadoras compatibles
201
IBM y formateados compatibles con Microsoft Word versión Office 2000 o
anteriores.
2. Normas metodológicas
202
Ejemplo:
(11) Foray. L’Economie de la connaissance, p. 59 y sig.
.
.
.
(42) Foray. Op. cit. p. 123
203
Cuadro 1 Ejemplos para referencias bibliográficas
a) Un sólo autor (1) ROSAS, Armando. Ideas Educativas de Simón Bolívar.
3ª. Ed. Caracas: Monte Ávila, 1996.
204
b) Fuentes documentales: Documentos no impresos custodiados en
archivos.
Deben estar reseñados:
● Archivo al cual pertenece
● Año de consulta
● Sección contentiva del documento
● Documento
● Lugar
● Institución donde se encuentra el archivo
Ejemplo:
(21) ARCHIVO DEL CONGRESO, (1936). Diario de Debates de
la Cámara del Senado, Sesión del 23 de abril de 1936. Caracas,
Congreso Nacional.
205